Cuidado con las dietas milagro para perder peso Estos regímenesmilagro con el fin de perder peso pueden incluir un mayor riesgo del que somos conscientes. Sin embargo, ¿qué es aquello que poseen en común todos los llamados regímenes milagrosos? Carmen Cuadrado es docente de Nutrición por la Universidad Complutense de Madrid y es una de las autoras del reporte ¿Dietas y productos mágicos? , escrito por la Fundación Española de la Nutrición (FEN) y por el Instituto de Nutrición y Trastornos Alimentarios de la Comunidad de Madrid (Inuticam) en 2009. En este informe, concerniente a los regímenes milagrosos, es posible encontrar las siguientes claves: Las dietas milagrosas para eliminar peso proporcionan menor cantidad de energía de la que necesitamos. Todas las dietas de esta clase tienen un contenido energético muy bajo y, en bastantes casos, se atribuye a la intención de evitar un grupo de macronutrientes concretamente. Nos encontramos hablando del caso de las monodietas. Las monodietas están basadas en el consumo de un solo tipo de alimento, como puede ser, exclusivamente alcachofas, exclusivamente pomelos, unica y exclusivamente gazpachos... Esas dietas suministran muy poca energía a nuestro organismo. Las dietas milagrosas no sólamente no modifican los hábitos alimentarios, sino que los empeoran. Ordinariamente, las dietas milagrosas raramente modifican los nada buenos hábitos alimentarios, sino que, por el contrario, los perjudican. Por ejemplo, y a objeto de tener una idea, existen dietas las cuales desaconsejan comer frutas y verduras. Por otra parte, Clotilde Vázquez, que es la jefa del Departamento de Endocrinología y Nutrición del Hospital Ramón y Cajal, dice que el vocablo "milagro" asociado a los regímenes para eliminar peso ya debería ponernos en guardia. Según esta experta, esta clase de dietas son descompensadas y producen lo que se conoce como efecto rebote. Se llama de este modo porque, después de haber eliminado peso, conseguiremos aumentar de peso más del que teníamos en el momento de comenzar con el régimen. Esto se explica por el hecho de que si nuestro cuerpo pierde gran cantidad de kilos bastante rápidamente, se auto protegerá acopiando mayor cantidad de grasa. Hay que añadir que la eliminación de grasa es y debe resultar suave. Si eliminemos peso en un muy corto lapso de tiempo, estaremos perdiendo, además, otros clases de tejidos, como el tejido muscular o también el calcio de los huesos. No se debería perder más de un
kilogramo a la semana, sino que es mejor perder cinco ó seis kilos cada dos meses, que sería lo normal, según dice la doctora Clotilde Vázquez. Como mínimo la mitad de los regímenes milagro no son sanos. Como se desprende de un informe escrito por la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA) y el Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO), que fue efectuado después de entrevistar a seis mil personas los cuales iban a la farmacia intentando obtener una solución con el fin de bajar peso, un cuarenta y dos por ciento de los regímenes utilizados para adelgazar están fundamentadas sobre unos criterios muy poco saludables. Los resultados de este estudio revelan que casi el 15% de los encuestados admitió haber usado un régimen proteico a base de batidos, barritas así como sobres. Otro 12%, sin embargo, se decidió por suprimir ingestas como el desayuno además de la cena. Fuente: www.20minutos.es
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