Viernes 11 de Septiembre, 2015
Carlos RamĂrez
Politizado el reporte de la CIDH; OEA, Departamento de Colonias
Carlos Ramírez
i se atiende a sus funciones específicas, la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos de la OEA tiene la tarea exclusiva de vigilar, analizar e informar si sus estados miembros respetan las garantías individuales. En ninguna parte de sus documentos dice que puede realizar “investigaciones” ministeriales sobre las causas de una represión. En su página web oficial (www.oas.org/es/cidh), la Comisión procesa las peticiones a través de su Secretaría Ejecutiva, hoy a cargo del activista Emilio Álvarez Icaza. La clave del estudio y las investigaciones radica en un tema central y estricto: sólo la violación de los derechos humanos. El Grupo Especial de la CIDH tenía también su mandato preciso: determinar si se había cumplido la investigación gubernamental; el error de México fue someter sus procedimientos penales a un examen internacional. La conclusión del reporte del grupo especial… no es concluyente, aunque su redacción fue realizada a contentillo de los padres de los 43 normalistas secuestrados y asesinados por órdenes del alcalde del PRD en Iguala. El debate sobre el reporte de la CIDH tiene tres aristas filosas: 1.- En las reglas de la CIDH existe el principio jurídico del “agotamiento de los recursos internos”. El 27 de enero de este 2015, la PGR presentó su dictamen final y el móvil establecido fue el de la “confusión”: el grupo criminal Guerreros Unidos consideró que en los autobuses de los normalistas iban militantes de sus adversarios, Los Rojos. La PGR no profundizó esta línea para evitar la criminalización de las víctimas. La indagación de la CIDH permite ahora abrir otra línea: entre los estudiantes sí iban normalistas al servicio de Los Rojos. Por tanto, urge reabrir esta indagatoria del narco en la Normal de Ayotzinapa.
S
2
Carlos Ramírez
2.- El reporte de la CIDH rebasó sus facultades. El hecho de que los normalistas hayan sido o no incinerados en el basurero de Cocula no estaba en sus facultades y nada tuvo que ver con las razones del levantón de normalistas; la función de los investigadores, fue determinar si el procedimiento de investigación pericial de la PGR, cumplía o no con los estandartes de defensa de los derechos humanos. El debate del basurero es un distractor del tema central: por qué se llevaron a los estudiantes y la responsabilidad del PRD vía el alcalde, su esposa y el gobernador de Guerrero. 3.- La exigencia de la CIDH para que se abrieran los cuarteles a fin de revisar si en ellos estaban detenidos los estudiantes, fue desproporcionada porque la Comisión no puede hacer las funciones de ministerio público. Si acaso, debió de fundamentar
su petición de que las autoridades procesales competentes agotaran esa vía. De todos modos, está probado que el ejército nada tuvo que ver con el hecho del secuestro. La CIDH debió de haber neutralizado el contenido antisistémico de la queja de los padres de los normalistas, pero en lugar de ello la multiplicó por la intervención de Emilio Álvarez Icaza en su función de secretario ejecutivo de la Comisión y activista. Queda al final otro detalle: la OEA es departamento de colonias de EE.UU. y la CIDH es un instrumento de Washington para acosar a Cuba, Venezuela y Ecuador. El reporte de la CIDH se localiza en la fase de presiones militaristas de EE.UU sobre México, ahora con el juego de Álvarez Icaza.
http://noticiastransicion.mx carlosramirezh@hotmail.com @carlosramirezh
3