Legislación LETONIA 1. Descripción del suministro de electricidad Letonia alcanzó su independencia en 1991 durante el hundimiento de la antigua Unión Soviética. El gobierno recién formado inició inmediatamente un paquete completo de reformas incluyendo precio y liberalización del comercio, privatización a escala reducida, y estabilización macroeconómica. Muchas de estas iniciativas fueron ejecutadas con éxito y en la parte posterior de la década, Letonia experimentó un desarrollo económico fuerte, un desempleo de un solo dígito, y una estabilidad gubernamental cada vez mayor (el rating crediticio fue aumentado en 2000 para el grado de “inversión” por agencias como Standard & Poors, y Fitch IBCA, Moody´s). Con los esfuerzos de Letonia en la privatización y la reforma económica le invitaron a la cumbre de la UE en Helsinki en 2000 donde comenzaran negociaciones de adhesión. El suministro de energía del Latvian se basa en una mezcla en la balanza de fuentes de energía, y las fuentes de energía renovable en 2002 representaron el 34 por ciento del reparto de la energía primaria. En términos de energía renovable para la producción de la electricidad a partir de energía renovable, Letonia tiene el porcentaje más alto del uso entre los diez nuevos miembros de la UE. La compañía eléctrica propiedad del gobierno, Latvenergo, posee el 97 por ciento de la capacidad de generación en Letonia. La fuente primaria de generación eléctrica es la fuente hidroeléctrica del río del Daugava, que han experimentado recientemente la modernización y el reacondicionamiento. La generación y la calefacción urbana adicionales es proporcionada por dos centrales térmicas grandes y varias instalaciones de propiedad privada más pequeñas. El transporte de la electricidad dentro de Letonia es manejado por siete redes regionales de la transmisión, todas propiedad de Latvenergo. En 1998 empresas de Letonia, Lituania, Estonia, y otros países circundantes organizaron el llamado “Baltic Ring Electricity Cooperation (BALTREL)” con el objetivo de interconectar los mercados individuales con un intercambio regional, mejorando los sistemas de producción y de transmisión en la región. 2. Política energética, barreras e incentivos La meta indicativa establecida en el marco de la Directiva 2001/77/CE para Letonia en 2010 es el 49,3 por ciento de electricidad de la energía renovable comparada al 42,4 por ciento existente en 1997.
El programa de la energía nacional del 1997 y revisto en los sucesivos años define las actividades para el fornecimiento confiable de recursos energéticos en el país hasta el año 2020. El programa establece que el suministro de energía tiene que cumplir en calidad y cantidad con los requisitos de los consumidores, con el coste más bajo posible y con el menor impacto en el ambiente. El aumento del uso de la producción energética local fuentes de energía renovable (“FER”) es cuestión clave en el programa. El objetivo principal de la política energética en el sector de la electricidad es promover el desarrollo del sector de acuerdo con el desarrollo equilibrado y sostenible de la economía nacional. La promoción del uso de los recursos energéticos renovables y locales así como la coordinación de la protección del medio ambiente y de la producción energética, los costes del transporte y del consumo, están entre las herramientas para alcanzar los objetivos en el sector de la electricidad. La política energética en el sector de la electricidad fija el objetivo de fomentar la promoción del uso de los recursos energéticos renovables y nacionales, que corresponde a aproximadamente 6 por ciento de electricidad renovable (con exclusión de las grandes centrales hidroeléctricas) en el equilibrio del consumo de electricidad total. La liberalización completa del mercado de la electricidad de Letonia ocurrió en 2007. 3. Viento Letonia tiene un potencial muy bueno para el desarrollo de energía eólica. La capacidad instalada total de energía eólica en Letonia en marzo de 2007 era cerca de 27 MW. Este número representa un aumento del ocho por ciento en los números de finales de 2005. Hay gran potencial para el desarrollo, y varios proyectos se planean y toman forma. Según los datos del programa de la energía renovable, el potencial técnico para la producción energética eólica se ha estimado alrededor de 1.277 GWh sin embargo el potencial práctico se estima en 1.000 GWh/el año y representa cerca de 2.000 MW de potencial económico/técnico eólico. Los sitios convenientes para las centrales de energía eólica son la costa oeste y la zona oriental del golfo de Riga (próximo a la ciudad de “Ainazi”). Un Atlas Eólico ancho del país está disponible, donde están identificadas varias áreas con velocidades de viento con medias anuales sobre los 6 m/s en alturas de 30 m. El Instituto de Energética Física parece ser la institución principal relacionada con el tema de la energía eólica. El precio de venta mínimo de la renovables ronda los 96,4 €/MWh. El precio actual de venta con el régimen obligatorio de compra de fuentes eólicas con potencia de 50 MW, es 106,80 €/MWh. Este precio es válido para los primeros 10 años de operaciones. Después del 10 º año el precio de se reduce en un 40% (64,08 €/MWh para 50MW). 4. Fiscalidad
El régimen tributario prevé para las empresas un impuesto sobre los beneficios y un impuesto sobre los bienes inmuebles. En materia de fiscalidad indirecta, se introdujo en 1995 un sistema de IVA inspirado en los principios más relevantes de la legislación comunitaria. El Impuesto sobre Sociedades (Uznemumu ienakuma nodoklis) grava las rentas obtenidas en el desarrollo de una actividad económica, tanto en Letonia como en el extranjero, por las sociedades mercantiles, por las entidades religiosas y por las instituciones públicas. Los tipos societarios más usuales son la Sociedad Anónima (akciju sabiedribas) y la Sociedad Limitada (sabiedribas ar ierobezotu atbildibu). Las sociedades civiles, por su parte, son transparentes a efectos tributarios, y sus rentas son atribuidas a sus socios. Se consideran residentes en Letonia a las sociedades constituidas y registradas en el país. El punto de partida para determinar la base imponible del impuesto es el resultado contable de la sociedad. En general, la totalidad del beneficio es gravable, aunque se prevén ciertos ajustes, al existir rentas exentas de tributación, gastos no deducibles y amortizaciones. En cuanto a las exenciones, la principal es la aplicable a los dividendos procedentes de sociedades residentes. Resultan deducibles los gastos directamente relacionados con la obtención de los ingresos sujetos a gravamen. Sin embargo, la Ley establece expresamente que no son deducibles: •
los gastos no directamente relacionados con la actividad económica de la empresa.
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los gastos relacionados con atenciones al personal de la empresa, si no están directamente relacionados con la actividad empresarial.
También existe una restricción a la deducción de gastos por intereses, que opera como ratio de subcapitalización. El límite es igual al importe de los fondos propios de la sociedad al inicio del período impositivo, multiplicado por el último tipo de interés a corto plazo para entidades de crédito. En el caso de que se supere este límite, el exceso es deducible en los ejercicios posteriores. Esta restricción no resulta aplicable a los intereses abonados a instituciones de crédito letonas o a sucursales letonas de bancos de países extranjeros con los que Letonia haya suscrito un tratado para evitar la doble imposición internacional. Las ganancias de capital son tratadas como un beneficio más, aunque las derivadas de la enajenación de valores negociables resultan exentas de tributación. Las bases imponibles negativas obtenidas por la sociedad son compensables con los beneficios de los 5 ejercicios posteriores, salvo en el caso en que la empresa cambie de socio, puesto que en ese caso se aplican límites a esta compensación. Si la sociedad se fusiona, las bases negativas de la sociedad absorbida pueden ser compensadas por la sociedad absorbente. En caso de escisión, las sociedades resultantes
pueden compensar sus bases, pero sólo si están controladas por las mismas personas que controlaban la sociedad escindida. Las pérdidas de capital derivadas de la enajenación de valores son compensables solamente con las ganancias procedentes de la venta de activos del mismo tipo, en el mismo ejercicio o en los cinco posteriores. Las pérdidas de capital de cualquier otra clase son deducibles del beneficio ordinario de la sociedad. En cuanto al tipo de gravamen, es actualmente de 15%. Los pagos realizados a sociedades residentes en Letonia no están, por lo general, sujetos a retención. Sin embargo, si el perceptor está exento de tributación o disfruta de los beneficios fiscales otorgados para inversores extranjeros o para las sociedades establecidas en las zonas económicas especiales o en los puertos libres, se aplican retenciones de entre el 2% y el 15%, en función de la naturaleza de los pagos. Incentivos fiscales Zonas Económicas y puertos libres Letonia ha establecido dos zonas económicas especiales, en el puerto de Liepaja y sus cercanías, y en Rezekne. Existen dos puertos libres: Reiga y Ventspils. Los inversores que deseen establecerse en estas zonas deben crear una sociedad especial al efecto. Las ventajas fiscales otorgadas son las siguientes: •
La cuota del Impuesto sobre Sociedades se reduce en un 80%.
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Son deducibles de la base imponible los importes invertidos en infraestructuras localizadas en estas zonas y pertenecientes al Estado y a las entidades locales.
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El Impuesto sobre Bienes Inmuebles se reduce en un 80%. Adicionalmente, las entidades locales pueden otorgar una reducción del 20%, con lo que resultaría una exención total.
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Las retenciones aplicables a los pagos realizados en favor de sujetos no residentes se reducen en un 80%, excepto para pagos a residentes en paraísos fiscales.
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En cuanto al IVA, se aplica el tipo de gravamen del 0% a ciertas operaciones.
Regiones especiales Las sociedades que operan en ciertas regiones pueden beneficiarse de amortizaciones aceleradas, y pueden compensar sus bases imponibles negativas durante los 10 años siguientes a su obtención.
Las empresas residentes pueden asimismo deducir el 40% de los importes de las inversiones que cumplan los siguientes criterios: •
Que superen el importe de 10 millones de lats (15.435.485 euros).
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Que se trate de una inversión en activos fijos, como edificaciones, tecnología y equipamiento utilizado para el desarrollo de la actividad empresarial.
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La inversión debe ser completada en un plazo máximo de 3 años.
Régimen de grupos de sociedades Las sociedades de un mismo grupo pueden compensar entre sí las pérdidas que obtengan. Se entiende por grupo de sociedades el formado por una sociedad dominante, residente en Letonia o en un Estado con el que Letonia haya suscrito convenio para evitar la doble imposición internacional, y sus filiales, que deben ser residentes y participadas en al menos un 90% por la sociedad dominante, por otra de las filiales de aquélla o por una combinación de ambas. Distribución de beneficios La distribución de dividendos por entidades residentes no está sujeta a retención ni a tributación posterior en sede del socio, excepto en los casos en que la sociedad que los distribuye se beneficie de los incentivos fiscales previstos para las zonas económicas especiales y los puertos libres. En ese caso, el perceptor deberá tributar por esas rentas y podrá posteriormente aplicarse una deducción para evitar la doble imposición. Los dividendos procedentes del exterior no se incluyen en la base imponible, a condición de que la sociedad participada no resida en un paraíso fiscal y el perceptor participe en ella en al menos un 25%. En el caso de que dichos requisitos no se cumplan, se prevé un sistema de deducción por doble imposición internacional, según el cual es posible deducir la retención que haya aplicado el país extranjero en el momento de distribución de las rentas, con el límite del impuesto que hubiera debido pagarse en Letonia por esos mismos ingresos, calculado antes de aplicar la deducción. Si la sociedad participada reside en un país con el que Letonia haya suscrito un tratado para evitar la doble imposición, que prevea un sistema más beneficioso que el previsto por la norma interna, es aplicable el tratado.
Tributación de no residentes Las empresas no residentes que disponen de un establecimiento permanente en Letonia están sujetas al Impuesto sobre Sociedades por las rentas que sean atribuibles a dicho establecimiento, ya hayan sido obtenidas en Letonia o en el extranjero. En el caso de que no se disponga de establecimiento permanente, el no residente tributa sólo por ciertas rentas abonadas por un residente en Letonia. Los dividendos distribuidos por una empresa residente en Letonia a un residente en el extranjero están sujetos a una retención del 10% de su importe bruto. Los intereses abonados a personas o entidades extranjeras vinculadas con el pagador letón abonan un withholding tax del 10%. En el caso de que el pago corresponda a royalties la retención varía entre el 5% y el 15%. Estas retenciones pueden reducirse en el caso de que país de residencia del perceptor haya suscrito convenio con Letonia. España no ha suscrito un tratado de este tipo, con lo que los tipos impositivos aplicables son en todo caso los descritos anteriormente. En el caso de pagos realizados a residentes en territorios calificados por la Administración letona como paraísos fiscales, el pagador debe retener e ingresar un importe igual al 25% del importe pagado. La Administración exime de la obligación de retener si el pagador prueba que la operación no se realizó con un propósito empresarial, y no con la finalidad de reducir la factura fiscal en Letonia. Impuesto sobre Bienes Inmuebles Se trata de un tributo local que grava la propiedad de bienes inmuebles situados en Letonia, con independencia del país de residencia del propietario. Se prevén exenciones para los terrenos sobre los que la ley prohíbe el ejercicio de actividades económicas, los bienes declarados monumento cultural, los centros recreativos y estadios deportivos y las plantaciones forestales. Los edificios cuya construcción o rehabilitación haya sido finalizada antes de enero de 2001 están exentos durante el año posterior a su puesta en uso. El tipo de gravamen aplicable es el 1,5% y se aplica sobre el valor catastral del bien. Las autoridades locales pueden otorgar deducciones de hasta el 90% de la cuota. Es importante señalar también que el impuesto pagado es deducible de la cuota del Impuesto sobre Sociedades, siempre que el bien sea utilizado en la actividad empresarial.
Impuesto Indirectos Con carácter general, las transacciones comerciales están sujetas al IVA, salvo ciertas importaciones en condiciones particulares. El tipo de gravamen general es el 21%, aunque existe un tipo reducido del 10% aplicable a determinadas operaciones. COMERCIO DE EMISIONES Letonia, en cuanto signataria del Protocolo de Kioto puede beneficiar del mecanismo de implementación Conjunta pues figura en el Anexo B (las Partes incluidas en el anexo I se enumeran en el anexo B del Protocolo de Kioto), regulado en el artículo 6 del Protocolo de Kioto, permite que un país del Anexo I de la Convención (países desarrollados y países en vías de transición a una economía de mercado) pueda invertir en proyectos encaminados a reducir las emisiones antropogénicas de gases de efecto invernadero en otro país del anexo I. Este tipo de proyectos permitirá una reducción de las emisiones debidas a las fuentes o al aumento de la absorción por los sumideros. El país inversor obtendrá unidades de reducción (URE) de emisiones que son descontadas de las unidades de emisión asignadas al país receptor. De ese modo el país que financia el proyecto obtiene unidades de reducción a un precio inferior al que le habría costado en su país de origen y el país receptor se beneficia de las inversiones realizadas en el mismo. Igualmente en cuanto parte de la Unión Europea, Letonia participa en régimen Europeo de Comercio de Emisiones (“EU Emissions Trading Scheme”). El EU ETS es el principal pilar de la política sobre el clima de la Unión Europea. El esquema comenzó en enero de 2005 con una primera fase de 2005 a 2007 y una segunda fase que se extenderá de 2008 a 2012 (este esquema está definido en la Directiva Europea 2003/87/EC).