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MÁSFEMINICIDIO, DE UNA VÍCTIMA

Por: Ramón Ramírez

Existen algunas teorías acerca del feminicidio como parte final de las relaciones violentas; La indefensión de género, los esquemas de vida y todas las elaboraciones acerca de la violencia de género se analizan bajo una lupa cautelosa y sobre todo respetuosa de los contextos culturales, educativos y de socialización.

Es entonces que surge el cuestionamiento que aturde a las personas que investigan acerca de género: ¿Por qué una mujer permanece en una relación violenta, que en muchas ocasiones llega al feminicidio? Algunos estudiosos, mencionan la dependencia emocional como forma de respuesta de supervivencia en un contexto violento, aunado a este comportamiento la pasividad como intento de cese a los eventos de violencia. Por otra parte, se muestran las posturas que sostienen que algunas mujeres receptoras de violencia conservan la esperanza de que sus agresores cambien y se aferran a estas relaciones; otras mujeres argumentan que persisten en relaciones violentas por un compromiso emocional y religioso, incluso a pesar de haber sufrido eventos de violencia extrema.

Las causas del feminicidio son multifactoriales, por lo tanto, existen diversas posturas explicativas, cada una con un poco de verdad en ese entramado de relaciones, conceptos, expresiones y vivencias. Asimismo, en los contextos de relaciones de abuso y violencia, se considera la disfuncionalidad que genera ser receptora de violencia sistemáticamente hasta llegar al feminicidio. Es importante mencionar que cada víctima de feminicidio deja una estela de víctimas colaterales, entramados legales y una serie de emociones y vivencias de angustia y dolor.

Los Da Os Colaterales

Entonces, ¿qué pasa con las otras víctimas del feminicidio?, esas que se quedan sobreviviendo al dolor de la vulnerabilidad e incertidumbre.?

“ Para vivir un duelo así, es necesario sobrepasar el enojo y el dolor, expresarlos, vivenciarlos, hacer una tormenta de emociones para luego dejar que la calma llegue al corazón. No, no será un duelo normativo, será un proceso distinto, y será necesario el apoyo colectivo, la validación del dolor lo íntimo que fue robado y expuesto como parte de la cosificación del cuerpo de la mujer ”

Madres, padres, hermanos, hijos, abuelas, todas las familias que viven duelo por feminicidio, todos aquellos que se quedaron esperando una llamada, una llegada, un regreso con vida. Para todos ellos existe la esperanza del perdón, ese que alivia al brindarlo sin saber a quién, sin saber por qué, solo saber que se da para atenuar la carga emocional y poder acallar las preguntas que redundan en la mente y en el corazón.

Viviendo El Duelo

Algo importante es, qué hacer con la culpa, es una de Para vivir un duelo así, es necesario sobrepasar el enojo y el dolor, expresarlos, vivenciarlos, hacer una tormenta de emociones para luego dejar que la calma llegue al corazón. No, no será un duelo normativo, será un proceso distinto, será necesario el apoyo colectivo, la validación del dolor recuperando lo íntimo que fue robado y expuesto como parte de la cosificación del cuerpo de la mujer.

El duelo será crónico en muchos casos, se adoptará como parte de la estructura psíquica, se irá trabajando el trauma, se irá trabajando la herida, se buscarán formas de volver a la funcionalidad, algunas más adaptativas que otras. Lo más importante es no perder la humanidad, no dejar que el dolor envuelva al corazón en una coraza de “protección” que generará aislamiento y por lo tanto una tristeza aguda.

Paciencia, es algo que se escuchará mucho y no se entenderá inicialmente pues existe un aturdimiento, un evento caótico; pero poco a poco se concebirá la paciencia como aliada en el duelo por feminicidio, pues al parecer en este tipo de procesos el tiempo se va con cautela, va más lento, puntualiza todo el sentir. Al final, siempre será precisa la voluntad para sostener la realidad de esta pérdida tan significativa, pero sobre todo la dignidad humana de quien trascendió y de quienes se quedan como forma de resistencia ante el feminicidio.

Bien lo dicen los autores de tanatología, el dolor no se irá, aprenderás a vivir con él, a atenuarlo, funcionalizarlo y sobretodo lograr la aceptación de un hecho ineludible y totalitario. Nadie elige como trascender ni en qué momento, solo queda aceptar que cada hecho nos muestra la composición de nuestra realidad socioemocional; nos muestra que no podemos dejar de hablar de género en una sociedad donde ser mujer sigue siendo un peligro.

Ante cada hecho de la vida, siempre habrá una respuesta, procura que sea una respuesta cálida y amorosa, sobre todo si es hacía alguien que está viviendo una pérdida por un hecho violento..GM

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