6 minute read

La Voz del Guardián

Next Article
Editorial

Editorial

la voz del guardián

Por: Carlos Lozano O´Reilly.

“El amor, la amistad y el respeto no unen a la gente tanto como el odio común a algo”

Antón Chéjov

REFLEXIONES POSITIVAS ACERCA DE LA PANDEMIA

Vivimos un momento histórico sin precedentes que se caracteriza por una pandemia que ha devastado la economía y ha dejado una estela de defunciones, muchas de ellas inesperadas o anticipadas; familias en duelo, divorcios cada vez más frecuentes, desempleo, aumento de las enfermedades mentales, así como un considerable 43% de incremento en suicidios que se presentan en jóvenes de 15 a 29 años, según informa el diario digital Infobae. La sociedad mexicana se ha vuelto impermeable cada vez que necesita procesar las emociones negativas: las evita, las niega y, finalmente, intenta anestesiarlas con la ingesta de alcohol y el consumo de drogas; y, por si fuera poco, atraviesa un ajuste de cuentas entre los partidos políticos, que perjudica la salud mental de la población, sin considerar el grave riesgo que representan los enfrentamientos sociales y la violencia. México se encuentra polarizado: la mitad de la población está sumamente enfadada por las incongruencias, las mentiras, la manipulación y el desdén de los gobernantes; mientras que la otra mitad no lo comprende de ese modo y sólo ve una forma de reivindicarse ante un sistema político que en el pasado los ignoró y se enriqueció con el erario. Mi padre me enseñó que la riqueza se construye con trabajo duro y que el empresario siempre buscará la manera de obtener utilidades, pero también sabe, que en la construcción de esa riqueza se arriesga a perderlo todo. No obstante, el esfuerzo tiene su recompensa: nos hace crecer como individuos, impulsa nuestra creatividad, desarrolla nuestra habilidad de planeación, y nos fomenta el orden y la disciplina; todo eso nos convierte en mejores personas. Cuando un sistema de gobierno te regala el sustento, lo que en realidad sucede es que te está despojando de la oportunidad que tienes de esforzarte y crecer. Lo regalado se agradece en un principio, pero con el tiempo se convierte en una exigencia permanente, acompañada, muchas veces, de una violencia desmedida. El pensamiento mágico y la confianza ciega son producto de la ignorancia en la que se encuentra inmersa la población, que le otorga a los seres divinos y a sus gobernantes —a veces reunidos en uno mismo— la responsabilidad del sustento. Finalmente, los ignorantes son manipulados y su enojo contenido termina siendo una válvula de escape; pero la pregunta es: ¿hacia dónde o contra quién dirigirán ese escape? Todas las situaciones negativas tienen brotes positivos, como la cercanía de algunos jóvenes con sus familias. El ocio, por ejemplo, ha logrado que las personas desarrollen un pasatiempo y generen dinámicas de unión familiar. Sin duda alguna, son tiempos de introspección y meditación para muchos de nosotros.

Curiosamente, la filosofía china antigua y la tradicional mesoamericana coinciden en un sistema cartesiano donde relacionan los diferentes puntos cardinales, y en el cual incluyen un elemento básico como el agua, el fuego, el aire o la tierra, así como un color, un sabor, una emoción positiva y negativa, y una hermosa filosofía que es la base de la acupuntura, el feng shui y el kung-fu, entre otras disciplinas, y que está relacionada con las situaciones que vivimos los humanos día con día. Los tiempos que vivimos son críticos y, según la filosofía china, están asociados con el punto cardinal Oeste, que a su vez se relaciona con la pérdida de la vida, la salud y la economía. Es en ese punto cardinal donde el sol se pierde por algunas horas para dar paso a la oscuridad y el frio. Su color representativo es el negro, ese negro que asociamos con la oscuridad, en la cual acechan los peligros y la pérdida de la voluntad y los deseos; pero también es el punto cardinal de la sabiduría y el aprendizaje que surgen tras la reflexión de nuestros problemas y fracasos. Aprender de ellos significa mejorar nuestra conciencia: un regalo que vamos a recibir los mexicanos en los próximos años, y, sin duda alguna, éste es el mejor regalo que una sociedad podría recibir. Desde 1995, el matrimonio formado por Bill y Melinda Gates presiden la fundación que lleva su nombre, considerada por la revista Forbes como la institución privada de caridad más grande del mundo, la cual financia, sobre todo, proyectos de investigación y desarrollo relacionados con la salud. Ambos se han rodeado de los principales especialistas en medicina y economía a nivel mundial. En 2015, a través de un video publicado en YouTube, Bill Gates pronosticó el brote de la pandemia de 2020; y en una entrevista reciente concedida al diario británico Financial Times, Bill Gates reveló que se avecina una pandemia diez veces más devastadora que la pandemia actual, la cual podría aparecer en un lapso de veinte años, sin considerar que nos acercamos a un desastre de dimensiones climáticas irreversibles.

En su libro “Cómo evitar un desastre climático: Las soluciones que ya tenemos y los avances que aún necesitamos”, Bill Gates menciona que si en los próximos 30 años no disminuimos a cero el volumen de emisiones de dióxido de carbono, nuestro planeta podría colapsar, ocasionando que se derritan las capas de hielo que se solidificaron durante la última glaciación, liberando antiguos virus que infectarán a la humanidad. El cambio climático ha comenzado a mostrar sus efectos colaterales, desencadenando hambrunas, sequías, inundaciones e incendios, los cuales se harán cada vez más severos e intolerables con el paso del tiempo. Es necesario que los gobiernos, en conjunto, diseñen estrategias que apoyen la investigación, la ciencia y la tecnología para el desarrollo de las denominadas energías limpias, como la solar y la eólica, y limitar el uso de la energía nuclear.

General Motors fabricará únicamente autos eléctricos que saldrán al mercado en el 2035; Renault, Fiat y Chrysler se han fusionado para fabricar vehículos híbridos y eléctricos que se apeguen a las nuevas normas medioambientales europeas; Noruega vende más vehículos híbridos y eléctricos que de gasolina; Europa destina el 35 % de su producto interno bruto para cumplir con el plan de recuperación y combatir el cambio climático; el estado de California, en los Estados Unidos, prohibirá la venta de vehículos de gasolina para el año 2035; la tecnológica Huawei, la compañía china con el mayor número de ventas de celulares, ha anunciado que fabricará vehículos eléctricos; y Tesla, por su parte, lleva la delantera con la venta de su vehículo eléctrico Model 3.

¿QUÉ SE ESTÁ HACIENDO EN MÉXICO PARA COMBATIR EL CAMBIO CLIMÁTICO?

Tristemente lo contrario, el gobierno ha complicado el desarrollo tecnológico con la eliminación de los fideicomisos destinados a la ciencia, ignora la creación de energías limpias y, en su lugar, antepone la construcción de una refinería para la producción de gasolina con escasa vida útil.

Al construir más termoeléctricas que generan contaminantes por la quema de combustóleo, se está sacrificando el futuro de todos nosotros y nuestros descendientes. Con todo eso, lo único que estamos logrando es colocar a México en una vergonzosa posición frente al evidente calentamiento global que debe resarcirse. Lo más seguro es que tarde o temprano el mundo nos lo va a reclamar. En plena pandemia, más o menos por el mes de junio de 2020, me hacía la siguiente pregunta: “¿Por qué alcanzamos niveles máximos de contaminación sí todos los comercios se encuentran cerrados y hay pocos vehículos circulando?”. La respuesta es sencilla, la Central Termoeléctrica en Tula, Hidalgo, de la Comisión Federal de Electricidad, quema combustóleo para producir energía eléctrica y es la responsable de inundar de gases contaminantes a la Ciudad de México y zonas aledañas. Eso me hace pensar que la verificación vehicular es una farsa, incluido su programa “Hoy no circula”. Ahora entiendo por qué la contaminación sólo disminuye cuando empiezan las lluvias estacionales. Distinguidos compañeros del sector funerario, reflexionemos lo sucedido y apliquémonos en cuidar y servir a nuestras familias que tanto nos necesitan; retomemos, cuanto antes, el tema de las ceremonias y homenajes luctuosos que tanto reconfortan a quienes se despiden de un familiar, y, por el bien de todos, no permitamos que nuestra actividad se deshumanice. ¡Hasta la próxima mis queridos guardianes!. GM

This article is from: