COLECCJON AJEDREZ
C贸mo jugar las a'-ertoras ihiertas Anatoli Karpov
Traducción: Manuel Suárez Sedeño Portada: Manuel Abia Quijano
© 1992, by Zugarto Ediciones, S. A. Pablo Aranda, 3- 28006 Madrid, España Tel. 411 42 64- FAX 562 26 77 I.S.B.N.: 84-88155-07-7 Depósito Legal: M-19044-1992 Impreso en España - Printed in Spain Gráficas Muriel, S. A. Buhígas, s/n - Getafe (Madrid)
Prólogo Ofrezco a los lectores el primero de una serie de cuatro libros en los que presentaré, separadamente, cómo jugar las aperturas abiertas, lassemiabiertas, las cerradas y lassemicerradas. Este primer libro es un ejemplo de la forma en que he decidido enfocar el trabajo, para facilitar su estudio y, sobre todo, realizarlo de una manera sistemática, con un programa que comporta los siguientes puntos: 1) El libro contiene un buen número de partidas, de los últimos años (en especial del intervalo 1984-1992), muy interesantes por su apertura. Por regla general, estas partidas pertenecen a conocidos grandes maestros, y en especial se estudian prácticamente todos los encuentros de los cinco match es por el campeonato mundial Karpov - Kasparov, y también las partidas en las que se desarrollaron ideas de apertura que empleé por primera vez. 2) Las partidas se han elegido atendiendo a principios teóricos, pero lo importante no es sólo el método de elección, sino la forma de exponer su contenido. En efecto, cada una de las partidas principales de/libro y de los libros sucesivos constituyen por sí solas una pequeña investigáción teórica, que contiene información variada, con muchas citas y otros ejemplos. La partida principal contiene, a menudo, partidas anteriores y posteriores, con laque se da una idea de las aperturas a lo largo des u desarrollo, indicando su perfeccionamiento y mejoras. Comentando una y otra línea de la partida, frecuentemente me desvío recordando otras partidas propias o de grandes maestros. Confío en que estas "retiradas organizadas" no confundan a los lectores ... 3) En la edición incluyo bastantes partidas jugadas por el autor, entre ellas los match es por el campeonato mundial. En mis encuentros con G. Kasparov hemos aprovechado todos los conocimientos teóricos del momento y con su cooperación han nacido muchas ideas nuevas, que han despertado una atención general. En este libro se recogen los hallazgos teóricos más valiosos en las aperturas que se han producido en mis confrontaciones con Kaspa7
rov.lncluyo, también, otraspartidasjugadas en los intervalos entre los combates por la corona mundial. Aunque la atención principal de/libro se centre en la fase de la apertura, todas las partidas principales (y también muchas de las accesorias) las ofrezco completas. Considero que es muy útil el estudio de toda la partida, porque permite observar la unión entre las tres distintas etapas del combate. A diferencia de las monografías y enciclopedias de aperturas, en este trabajo nos ocupamos sólo de las aperturas más jugadas e incluso , entre ellas, de las variantes más populares, que se encuentran, sobre todo, en los matches por el campeonato del mundo y encuentros de candidatos. La interpretación de todas las bifurcaciones posibles o cupa un lugar menor. Algunas palabras sobre la organización de los cua't¡;o tomos. Tradicionalmente, las aperturas de ajedrez se dividen en tres grupos: abiertas, semiabiertas y cerradas. Esta división era válida en el siglo pasado y a principios del presente, cuando se consideraba casi obligada la salida 1. e4. En caso de 1. ... , e5, surgía una de las variantes abiertas y, tras otras respuestas, las semiabiertas. Las aperturas restantes (cuyo porcentaje era pequeño) se valoraban como aperturas cerradas . Más tarde esta situación cambió, lapopularidad de las aperturas cerradas aumentó considerablemente y, según las estadísticas, ahora ya van por delante. De esta manera, surge la necesidad de dividir estas aperturas en dos grupos: el convencional de cerradas, ysemicerradas. Entre las cerradas (según la nueva concepción) se encuentran las salidas simétricas: 1. d4, d5, ó 1. c4, c5, etc ... , y para las semicerradas las asimétricas: 1. d4, 0J f6; 2. c4, e6, ó 2 . .. ., g6. Aunque esta terminología aún no se puede considerar como estable, pienso que en el futuro será reconocida. De una u otra manera, esta clasificación será la que se ofrecerá en la presente publicación. Para terminardebo darlas gracias al maestro yl/teratoEvgeni Gik por su ayuda en la recopilación del material para este libro. A.Karpov
8
Apertura espa単ola
Partida 1 G. Kasparov - A. Karpov Match por el campeonato mundial, 5ª partida Moscú, 1985
Ambos adversarios, tanto Kasparov como yo, somos grandes aficionados a la apertura española, que se encuentra en todos nuestros matches, excepto el de Sevilla, y yo siempre la he jugado con negras. En cada uno de los tres primeros matches esta apertura se empleó dos veces, ¡y en el último ocho veces! En el primer encuentro esta apertura surgió en el mismo final, partidas 44 y 46. Aunque ambas terminaron en tablas, no quedé conforme con lo sucedido, y para el siguiente encuentro la preparé mejor. Esta partida me resultó favorable... En los comentarios de la partida ofrezco los matices de las otras tres - ( 1,44), ( 1,46) y (2,5). Del resto de las partidas hablaremos más adelante. 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7.
e4, e5 <í) f3, <í) c6 ~ b5, a6 ~ a4, <í) f6 0-0, !l e7 b!, e1, b5 ~ b3, d6
8. 9. 1 O.
c3, 0-0 h3, ~ b7 d4, b!, e8.
Otras continuaciones populares son 1O.... , ~ d7, 1O.... , <í)a5, 1O. ..., ed y 1O.... , h6. Elijo la variante empleada muchos años antes por mi entrenador l. Zaitsev. Hoy se incluye en el repertorio de muchos grandes maestros. Las negras refuerzan el centro, sin perder tiempo, en la jugada profiláctica h7-h6. Desde luego, existe el peligro de que las blancas repitan 11
jugadas, 11. <íJ g5, bl f8; 12. <íJ f3, pero rara vez los grandes maestros finalizan la lucha de una manera tan directa. Por cierto, en diez ocasiones me tuve que sacrificar por esta variante forzada de tablas. Si necesito la victoria, entonces elijo otro sistema con las negras. 11 .
<íJbd2, ...
En la partida { 1,44) Kasparov jugó enseguida 11 . a4, y después de 11 .... , h6; 12. <íJbd2, ed; 13. cd, <íJb4; 14. ~ e2, ~ f8; 15. e5, ~ c6, obtuvo una seria ventaja. La última jugada de las negras es errónea; los comentaristas propusieron 15 .... , de; 16. <íJ xe5, <í) fd5!?. Sin embargo, pienso que el cambio de peones en el centro es precipitado. Es más precisa la continuación 12 .... , ~ f8. Esta posición surgió en la 9ª partida de este match, dos veces en el de revancha y cuatro veces en el match del año 1990.
gada 13. ~ c2. En la partida Hübner - Portisch (Bruselas, 1987), las blancas avanzaron enseguida el peón "d", antes de cambiar en el flanco de dama: 13. d5, <íJ e7; 14. c4, <íJ g6; 15. ~ c2, y consiguieron la típica iniciativa española ... 13. 14.
... , ab5 bl xa8, ~ xa8
Ahora a 15. <íJg5, tengo la respuesta 15 .... , bl e7, y después h7h6. En caso de 14 .... , bl xa8; 15. <íJ g5, el caballo negro se ve obli gado a retirarse a d8, y las blancas toman el centro.
11 .... , ~ f8 12. a4, ~ d7 Después de 12 . ... , h6, surge la posición recordada en los comentarios anteriores. Esta rara jugada de dama me dio la victoria en el presente encuentro, pero en adelante elegí la tradicional h7h6. 13. ab5, ... También es muy conocida la ju12
15.
d5, ...
Esta posición se encuentra por vez primera en la partida { 1,46), donde me retiré con 15 .... , <íJ d8, y después de 16. <íJ f1, h6; 17. <íJ3h2, <íJb 7; 18. ~ c2, <í)c5; 19. b4, <;'.}a6; 20. <íJg4, <íJh7; 21. <íJg3, c6;
22. de, ~ xc6; 23. ~ b3, 4'3 c7; 24. 'f!!f3, 4'3 e6; 25. h4, 'f!! d8; 26. ~ d 1, las blancas consiguieron una notable ventaja. El caballo negro dispone de cuatro posibilidades de retirada, y tres de ellas se encuentran en la práctica. En la partida Popovic - Smejkal (Zagreb, 1985), después de 15, ... , 4'3 e7; 16. c4, Zlb8; 17. bl e3, c6; 18. de, 4'3 xc6!; 19. cb, 4'3 d4; 20. ~ c4, 4'3 xb5; 21. b3, 'f!! a7; 22. ~ b2, h6; 23 . .l:i e1, ~ c6, las blancas conservaron una pequeña ventaja. Smejkal perdió esta partida y, por lo visto, por eso en la partida con Kasparov (Dubai, 1986), eligió 15 . ... , 4'3 b8. La partida continuó después así: 16. 4'3 f1, 4'3 a6; 17. ~ g5, ~ e7; 18. 4'3 g3, g6; 19. 'f!! d2, .í?&b7; 20. ~ a1, bl a8; 21. ~ c2, c6; 22. de, ~ xc6; 23. ~ d1, bl d8; 24. 'f!! e3, 'f!! b7; 25. ~ h6, 4'3 c7; 26. 4'3 f5. Las blancas tienen clara ventaja, y Smejkal de nuevo sufrió un fiasco. En lo que se refiere a la presente partida, asigné al caballo otro lugar ... 15.
... , 4'3 a5
Ganando tiempo en comparación con otras retiradas, en todo caso con 4'3 d8, en la partida ( 1,46). 16. 17.
~ a2, c6 b4, 4'3 b7
Ya en el primer match, analizando la partida 46, los grandes maestros consideraron aquí la maniobra 17 .... , 4'3 c4. En ese caso, después de 18. 4'3 xc4, be; 19. ~ g5 (19. ~ xc4, cd; 20. ed, ~ c8; 21. '!!!b3, 'f!!c7; 22. 4'3 d2, con una pequeña ventaja blanca), 19 .... , cd; 20. ~ xf6, de; 21. 4'3 xe5, ~ a7; 22. 4'3 g4, ~ xa2; 23. 4'3 h6+, illh8; 24. 'f!!h5, gf; 25. ~ xf7, ~ xh6; 26. 'f!! xe8+, il!g7; 27. 'f!!e7+, las blancas tienen ventaja, porque los alfiles enemigos están privados de perspectivas. Pero ahora parece que las negras casi están ahogadas por la falta de espacio vital. Pero esa impresión es engañosa. El mismo Nimzowitch dijo que las piezas que permanecen largo tiempo en reclusión, cuando ganan la libertad pueden adquirir una fuerza inmensa. Y en la presente partida mi alfil a8, agazapado en la esquina del tablero y emparedado hasta cier13
to tiempo púr su propio caballo b7 y peón c6, pronto verá libre su camino, desarrollará una violenta actividad, y precisamente gracias a él las negras alcanzarán la cumbre.
18.
..., g ea
Antes de retirar del caballo a d8 tiene sentido ocupar con la torre la columna más activa.
Jugado un poco al azar, era mejor 20. ~ b2 . La amenaza sobre el punto f7 (20 .... , de; 21. ~ xf7+), se rechaza con facilidad, y las negras toman la iniciativa.
20. 21. 22.
de6, ...
La entrega del centro permite a las negras conseguir enseguida buen juego. Se producían interesantes acontecimientos con 19. ~ e2 (otros caminos son 19. ~ b2, o 19. c5), 19. ..., <í)d8; 20. ~ b2, be; 21. <í) xc4, ~ a7!; 22 . .l:la1, cd; 23. ed, ~ xd5; 24. <í)xd6, ~ xd6 (24. ..., ~ xf3, 25. <í)xc8, ~ xa2; 26. gf, con juego confuso), 25. ~ xd5, ~ xa1+; 26. ~ xa1, .l:lc1+; 27. ~h2 (27. <í)e1, ~ xb4), 27 .... , .l:l xa1 (o 27 .... , e4+; 28. ~ e5), y las negras tienen suficiente compensación por la pequeña pérdida de material.
19. 14
..., ~ xe6
..., <í)d8 deS! beS, ... ~ b2,
Las negras también tenían mejores posibilidades después de 22. <í) xe5, ~ a6!; 23. ~ a 1, c4; 24. ~ c3, ~ a3; 25. g e3, ~ xb4; 26. <í)exc4, be; 27. ~ xf6, c3!; 28. g g3, <í)e6, o 22. ~ xe5, <í)d7; 23. ~ b2, c4. 23.
~ xeS ~ xeS, <í) d7
24.
~ b2, ~ b4!
22. 19.
e5, ...
e4, ...
En caso de la rutinaria 18. 'l)f 1, es posible 18 .... , c5, o 18 .... , cd; 19. ed, h6; 20 . '2)3h2, <í)d8; 21. <í) g4, <í)h7, intentando conseguir contrajuego mediante f7 -f5.
18.
20.
...,
Más precisa que 24 .... , ~ c2; 25. ~ a1, ~ a4; 26. <í) d4, <í)c5; 27. g e3, con juego agudo.
25.
0l b3?
1
...
27.
28. Después de 25. ~ b 1, la posición blanca aún era defendible. El intento de activarse les deja en una difícil posición. 25. 26.
..., 0l c5 ~ a1, ...
Un sacrificio de peón obligado. Después de 26. 0l xc5, ~ xb2!; 27. g e2, ~ a3; 28. 0ld3, ~ xe4; 29. ~ xf7+, 0lxf7; 30. ~ xe4, b4, las negras tienen clara ventaja. 26. 27.
..., ~ xe4 0l fd4, ...
Las negras ganaban de una manera brillante en caso de 27. 0lg5, ~ c2!; 28. ~ xc2, ~ xe1+; 29. ~ h2, ~ d6+; 30. g3, 0le4.
29. 30. 31. 32. 33. 34.
..., 0l db7 ~ e2, 0l d6 0l xc5, ~ xc5
40.
~ ea ~ g6 ~ b4! ~ e4 .!l e1, ~ a5 ~ b3, ~ a8 ~ b2, b4 .!l e3, ~ g6 .!l xe8, ~ xe8 ~ c1, 0l e4 ~ d5, 0lc5
41.
0l b3, 0l d3.
35. 36. 37. 38. 39.
~ g4, ~ d1, ~ f4, ~ c1,
Las negras abandonaron tras la última jugada. En una compleja posición el peón pasado asegura la victoria. Kasparov consideró que no tenía posibilidades de salvación, y abandonó la partida sin continuar.
15
Partida 2 G. Kasparov - A. Karpov Match por el campeonato mundial, 9ª partida Moscú, 1985
1.
e4, e5
2. 3. 4.
0l f3, 0lc6 ~ b5, a6 ~ a4, 0l f6
5.
0-0,
6. 7. 8. 9. 1 O. 11. 12.
~ e1, ~ b3,
13.
~ c2,
...
~ e7
b5 d6
c3, 0-0 h3, ~ b7 d4, bte8 0l bd2, ~ f8
a4, h6
Así, decidí no repetir (en la 5ª partida siguió 12 ...., ~ d7) y elegí la variante Breyer, que se encuentra con frecuencia en mi práctica tanto con blancas como con negras. Es curioso que poco antes del match, en una partida de entrenamiento con Timman (Hilversum, 1985), Kasparov jugara dos veces esta variante con negras. En ambos casos el gran maestro holandés en lugar de a2-a4, prefirió la jugada más tranquila a2-a3, con idea de b2-b4, ~c1-b2 y c3c4. Aunque Kasparov ganó una partida, y perdió en la otra, en 16
ambas obtuvo mejor juego en la apertura.
Otra posibilidad es 13. d5, pero la retirada del alfil parece más sólida. 13.
... , 0lb8
En dos partidas del match-revancha elegí el cambio en d4 y el ataque 0lc6-b4 y, como ya dije, cuatro veces en el último match.
Más adelante examinaremos ese material. 14. 15. 16.
~ d3, c6 ~ f1, ~ bd7 ~ g3, fl c7
En la partida Sax - Rivas (Roma, 1984), las negras jugaron enseguida 16 . ... , g6 , y después de 17. ~ d2, ~ h7!; 18. fl c1, h5; 19. fl d1, ~ g7; 20. ~ c2, ~ b6; 21. b3, ba; 22. ba, a5; 23. ~ d3, ~ a6; 24. ~ xa6, bi. xa6; 25. de, de, la posición se equilibró completamente. Posiblemente, es más enérgica 17. h4, h5 (de lo contrario es desagradable h4 h5), y debido a la debilidad de la casilla g5 es preferible jugar con blancas. 17. 18. 19.
~ d2,
g6
fl c1, ~ h7 b3, ...
forzando 19 .... , h5. El contrajuego en el centro es insuficiente: 19 .... , c5; 20. ab, c4; 21. b6! (21. ba, cd; 22. ab, 'ª xa1; 23. fl xa 1, fl xb 7, con buen juego por el peón), 21 .... , ~ xb6; 22. ~ c2, con ventaja. Otra cosa sería si las blancas jugaran 19. fl c2 (esta maniobra la realizan en la jugada siguiente), 19 .... , c5!; 20. ab, c4. 19. 20.
... , ~ g7 fl c2, ...
Previendo d6-d5, por ejemplo: 20 .... , d5; 21. ~ xe5, ~ xe5; 22. de, ~ xe4; 23. ~ xe4, de; 24. bl xe4, c5; 25. bl g4, fl xe5; 26. ~ xg6+!, fg; 27. fl xg6+, ~ g8; 28. bie1, y las negras están mal. 20. 21. 22. 23. 24.
~ f8 ~ e3, ~ e6
... ,
bi ad1, bl ac8 ~ f1, ~ f8 ~ d2, ...
El plan principal de las blancas está unido al avance del peón "b", y tras él va el "e", creando presión en el centro. Aquí ya era posible realizarlo: 24. b4, fl b8; 25. fl a2, ~ g7; 26. de, de; 27. c4. 24. 25. 26. 27.
Y aquí merecía atención 19. h4,
... , fl b8 fl b1, ~ as b4, ~ b7 axb5, ...
Es curioso que el primer cambio de la partida no se produzca hasta la jugada 27. 17
27. 28. 29. 30.
..., axb5 ,l;!,ed1, 'f!!J c7 ,l;!,c1, ~ g7 ,l;!,cd1, ...
Y ahora era posible 30. de, de; 31. c4. Las blancas aplazan de nuevo el avance del peón "e", y yo consigo consolidar la posición. 30. 31. 32. 33.
34. 35.
..., ,l;!, cd8 dxe5, dxe5 .t1 xd8, ,l;!,xd8 .l:l, xd8, ~ xd8
41. 42.
..., eS 'f!!J c2, cxb4
La jugada secreta. Consideré la posición aplazada como más agradable para las negras, pero Kasparov consiguió encontrar unas tablas de estudio. 43.
c4, bxc4
hxg6+, ...
~ xc4, ~ eS
Se conseguí a la igualdad más fácilmente mediante 35.... , ~c8; 36. 'f!!Ja1, ~e8; 37. 'f!!J a5, ~ e6. 36. 37.
diza en extremo. Era correcta enseguida 41. 'f!!Jc2, y después de 41 .... , ~a6; 42. ~ c4, ~xc4; 43. 'f!!Jxc4, las blancas mantenían la iniciativa.
A ventaja negra llevaba 43. 'f!!Jc4, gh; 44. ~ xd4, @e5. 43. 44.
..., fxg6 'f!!Jc4, h5
'f!!Ja2, ~ d6 ~ b3, ~ b5
Ahora a 37 ...., ~ c8, era desagradable 38. 'f!!Ja5. 38.
h4, ...
Veinte jugadas antes esta maniobra parecí a más peligrosa. Ahora las negras tienen suficiente contrajuego. 38. 39. 40. 41.
~ d4 ~ xd4, exd4
...,
h5, 'f!!J e7 'f!!Jd2, ...
Ahora después de 45. ~ xd4, 46. 0Jxe4, 9 xe4; 47. ~e6, 9 e1+; 48. ~ f1, 9 d2, las negras mantenían posibilidades algo me~xe4;
Las blancas pierden un tiempo importante, y la situación se agu18
jores. Sin embargo Kasparov preparó una sorpresa, y ya tuve que preocuparme de mi seguridad. 45.
eS!, ...
Descubriendo la diagonal b 1-h7, las blancas crean la desagradable amenaza 46. 0l xh5!, gh; 4 7. ~ g8+, ~ h6; 48. ~ c2. El sacrificio de caballo también es posible después de 45 .... , h4; 46. 0lh5!, gh; 47. ~ g8+, ~ h6; 48. ~ c2, con mate inevitable, o 46 .... , ~ xf3; 47. ~ g8+, ~ h6; 48. 0lxg7, ~ xg7 (48 .... , ~ g4; 49. f4, ~ xg7; 50. ~ xd8), 49. ~ xd8, con una gran superioridad de las blancas en el final. Es cierto, que comentando la partida Kasparov indicó cómo se salvaban las negras en ese caso: 46 .... , ~ xe5!; 47. 0lxe5, ~ xe5; 48. ~ g8+, ~ h6; 49. f4, ~ e1+; 50. ~ h2, gh! (50 .... , ~ xh5; 51. ~ d1+!, ~ xd1; 52. ~ xd8), 51. ~ g5+, ~ h7; 52. ~ xh5+, ~ g7, con tablas.
45. 46. 47.
..., ~ xf3 gxf3, ~ xe5 f4!, ~ xf4!
Después de 4 7.... , ~ g7; 48. f5!, el rey negro no sale bien parado. 48. 49.
~ g8+, ~ h6 ~ c2, ~ g7!
Perdí a 49 .... , ~ f6; 50. 0le4, o 49 . ... , d3; 50. ~ xd3, ~ f6; 51. 0le4, ~ a1 +;52. ~ g2, ~ c7 (52 .... , 0lc6; 53. ~ f8+), 53. 0lc3!, ~ a8+; 54. 0l d5, ~ c6; 55. ~ f8+, ~ h7; 56. ~ e4, y todo termina. 50. 51. 52. 53.
~ xd8, ~ xg3
fxg3, ~ es ~ f8+, ~ g5 ~ g2
La tempestad que se desató sobre el tablero se aplaca, y acordamos las tablas: 53 .... , ~ e2+; 54. ~ h3, ~ g4+ (54 .... , ~ xc2??; 55. ~ f4, mate), 55. ~ g2, ~ e2+, con jaque continuo.
19
Partida 3 G. Kasparov -A. Karpov Match-revancha por el campeonato mundial, 14ª partida Leningrado 1986
1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 10. 11. 12. 13.
e4, e5 <f) f3, <f)e6 ~ b5, a6 ~ a4, <f) f6 0-0, ~ e7 ~ e1, b5 ~ b3, d6 e3, 0-0 h3, ~ b7 d4, ~ e8 <f)bd2, ~ f8 a4, h6 ~ e2, exd4
Aunque no hay nada que reprochar a las negras en relación con la apertura en las dos españolas del match-revancha, psicológicamente la derrota me afectó mucho, y después del encuentro con Kasparov durante algún tiempo me pasé a otra jugada conocida, 13 . ... , 'ªb8. (Ver diagrama) Nos desviamos un momento para recordar dos partidas mí as sobre este tema:
20
Timman - Kárpov (Tilburg, 1986), 14. ab (a igualdad llevó 14. ~ d3, ~ c8; 15. <f) f1, ~ d7; 16. <f) g3, ~ c8; 17. ~ f1, ~ b7; 18. a5, ~ c8; 19. <f)h2, <f)e7; 20. f4, ef; 21. ~ xf4, <f) g6, Beliavsky - Gligoric, Sochi, 1986), 14 . ... , ab; 15. ~ d3, ~ e8; 16. <f) f1 (se encuentra 16. <f)b3, y 16. d5), 16 . ... , b4 (novedad, después de 16 .... , ed; 17. cd, <f)b4; 18. ~ b1, c5; 19. ~ f4, las blancas tienen ventaja), 17. <f) g3, be; 18. be, ed; 19. ed, <f) b4; 20 . ~ b1, e5; 21. ~ f4,
~ b5; 22. 'f!li' d2, bl, a5; 23 . .ll xa5, 'f!li' xa5; 24. d5, 'f!li' d8; 25. bt d 1, ~ d7. La posición está equilibrada. En la búsqueda de la iniciativa, como suele pasar, las blancas empeoraron su posición, pero finalmente la partida terminó en tablas. Hjartarson - Kárpov (Dubai, 1986): 16. ..., ~ d7 (otra novedad, en lugar de 16 .... , ed, y 16 . ... , b4), 17. ~ g3, 'f!li' c8!; 18. ~ e3 (es mejor 18. ~ d2, 'f!li'b 7; 19. b4!, bta8; 20. 'f!li'b3, bl, xa1; 21. bl, xa1, bl, a8; 22. bl,xa8, 'f!li' xa8; 23. 'f!li'b 1, 'f!li' e8; 24. 'f!li' a2!, con iniciativa blanca, Geller - Gligoric, Sochi, 1986), 18 . ... , 'f!li'b7; 19. de (después de 19. d5, el juego está igualado), 19. ..., ~ xe5; 20. bl, a7, 'f!li' c8; 21. ~ xe5, de; 22. 'f!li' f3, bl, e6!; 23. ~ c2, c5. Las posibilidades negras son mejores, y las blancas lograron salvarse con dificultades ... después de 50 jugadas.
14.
cxd4, ...
También se encuentra 14. ~ xd4, pero es dudoso que con esa configuración en el centro las blancas puedan contar con ventaja. 14. 15.
~ b4 ~ b1, c5
...,
primeras ahora casi no se encuentran, la captura en a4 se dio en la segunda partida del match de 1990. Más adelante hablaremos de ella. La jugada 15 .... , c5, pasó una cuidadosa prueba no solo en este match, sino también en el quinto. 16.
d5, ...
Casi se considera obligada. Después de 16. b3, cd; 17. <Zj¡ xd4, ba; 18 . .l:h a4, a5; 19. ~ b2, g6; 20. ~ c3, bl, c8; 21. ~ xb4, ab; 22. b:l, xb4, ~ a8; 23. b:ta4, ~ g7; 24. ~ d3, 'f!li'b6; 25. ~ a6, bl, cd8, las negras tomaron la iniciativa en la partida Tseshkovsky - Balashov (Minsk, 1982). 16.
..., <Zj¡ d7
(Ver diagrama) Las negras tienen a su disposición otras posibilidades: 15. ..., 'f!li' d7, 15.... , g6, 15 .... , ba. Las dos
El gran maestro l. Dorfman, uno de los entrenadores de Kasparov durante el match-revancha, emplea con regularidad 16 .... , g6. 21
Pero en un encuentro con Aseiev (Lvov, 1984). después de 17. ~ f1, ~ g7; 18. l:la3, ba; 19. bl, xa4, a5; 20. bl, a3, ~ a6; 21. ~ g3, ~ b5; 22. ~ f4, 'l'Jh7; 23. ~ d2, tuvo que contener la peligrosa actividad de las blancas. 17.
bl,a3, ...
En el match Nueva York - Lyon, 1990, se probó 17 .... , f5, (ver partidas 6 y 7). 18.
Ahora después de la respuesta 18.... , ab, las blancas izan el caballo en d4, pero en la partida 16-ªsiguió directamente 18. ~d4. Parece que no hay diferencia, pero como veremos, el rumbo del juego se separa ostensiblemente. Hay que decir que el cambio en b5 se empleó por vez primera en esta partida. 18. 19.
Una maniobra típica de esta apertura. La jugada 17. ~ f 1, permite a las negras socavar el centro con ventaja: 17 . ... , f5!; 18. e5 (18. ef, ~f6!, con excelentes perspectivas). 18 . ... , ~ xd5; 19. ~ xf5, ~ xf3!; 20. ~ xf3, <í"> xe5; 21. 'l! d1, c4; 22. bl, e3, ~ f6; 23. ~ g3, d5. La agrupación de peones en el centro es una fuerza amenazadora, y las negras pronto consiguieron la victoria (Dvoiris - Kruppa, semifinal del 54º campeonato de la URSS, 1986). 17. 22
... , c4
axb5, ...
..., axb5 <í">d4, bl, xa3
Es interesante 19 . ... , ~ b6. Después de 20. ~f 1, bl,xa3; 21. ba, ~ d3; 22. ~ xd3, ~ xd4; 23. ~c2, ~ xd1; 24. bl,xd1, ~ c5, las negras tienen la iniciativa, sin embargo es más fuerte 20. <í">f5 (también es posible 20. ~ 2f3, ~ c5; 21. ~e3, y el peón e4 es intocable: 21 ...., ~xe4; 22. bl,xa8, ~ xa8; 23. ~d2!). 20 . ... , g6; 21. <í">f1, ~ h7; 22. ~ d2!, bl,xa3; 23. ba, ~ d3; 24. .a xd3, cd3; 25. 'l'J xh6, ~ xd5; 26. ~ f4 (es más precisa 26. 'l! xd3!), con cierta ventaja blanca (Efimov - Foigelson, URSS, 1988). Analizando la partida, ambos adversarios acordaron que después de 20. ~ f5, el cambio inmediato en a3 es peligroso para las negras, mientras que a la jugada siguiente ya es posible, por ejemplo: 20 .... , g6;
21. <Z)f 1, ~ xa3; 22. ba, <í) xd5; 23. ed, ~ xe1; 24. 9 xe1, gf; 25. '1!e8, <Z) f6; 26. 9 b8, <í) d7; 27. 9 e8, <í)f6, con tablas. 20. 21.
bxa3, <í) d3 ~ xd3, cxd3
.l
Si aquí 22. <í)xb5, entonces después de 22 .... , ~ a6, 22 .... , 'f!b6, o 22 .... , 'f!a5; 23. <í)d4, <í)c5, las negras tienen por el peón suficiente compensación. Es posible que la posición del diagrama deba considerarse como punto de partida para futuros acontecimientos. 22.
~ b2,
...
En el encuentro Arnason - Shvidler (Beer Seva, 1987) siguió 22. ~ e3, y después de 22 . ... , 'f! f6; 23. ~ b2, <í)c5; 24. ~ a1, 'f! d8; 25. 'f! c1, ~ c8; 26. 'f! b1 !, 'f! a8; 27. <í) f5, ~ a5; 28. 'f! b4, 'f! xb4; 29. ab, g6; 30. <í) xd6, las blan-
cas obtuvieron una ventaja decisiva. Es interesante la segunda partida del match de candidatos Sax Short (Saint John, 1988): 22 . ... , <í) e5! (en lugar de 22 .... , 'f! f6, pero también merece atención 22 .... , <í)c5), 23. <í) xb5, 'f! a5; 24. <í) d4, 'f! c3; 25. <í)2b3, ~ a6; 26. ~ d2, 'f!! b2; 27. ~ b4, g6; 28. f4. Una decisión bastante arriesgada, es mejor 28. 'f!d2, ofreciendo el cambio inmediato de damas, aunque después de 28 .... , <í)c4; 29. 9 xb2, <í) xb2; 30. <í) d2, las negras mantenían suficiente compensación por el peón. 28 . ... , <í)c4; 29. ~ xd3, ~ xe4; 30 . 'f! f3, ll e8; 31. ~ h2, ~ g7; 32. <í) c6, 'f!! e2; 33. <í) bd4, 9 xf3; 34. ll xf3, ~ e4; 35. <í) b3, ~ e2; 36. <í) cd4, ~ e4; 37. <í) c6, ~ e2; 38. ~ g3?. En un fuerte Zeitnot Sax elude la repetición de jugadas y cometo un error fatal. 38. ... , <í) e3; 39. h4, ~ xg2+; 40. ~ h3, ~ c8+; 41. f5, ~ xf5+; 42. b!. xf5, gf; 43. ~ xd6, ~ b2; 44. <í)e7+, ~ h7; 45. <í) c5, ~ f6. Las blancas abandonaron. Dos intentos para mejorar el juego de las blancas en la jugada 23: Hübner - Short (Beltfor, 1988). 23. ~ b3, ~ a6; 24. <í) 4f3, 9 c7; 25. ~ b2, b4; 26. ab, <í) xf3+; 27. <í) xf3, 'f! c4; 28. 'f! xc4, ~ xc4; 29. ~ c3, g6, con plena compensación por el peón; la partida terminó en tablas. lvanchuk - Kruppa (Frunze, 1988, en esta partida se empleó por vez primera la jugada 22 .... , <í)e5), 23
23. <D4f3!, <D c4. Es mala 23 . ..., <Dxf3+; 24. btxf3!, pero merece atención 23 .... , f5; 24. <Dxe5 (24. ef, ~ xd5; 25. <Dxe5, ~ xe5, y las negras están mejor), 24 .... , b'lxe5; 25. ~b2, lJe7, con juego complejo (pero no 25 .... , b'l e8?; 26. ~ b3, fe; 27. <Dxe4, d2; 28. ~ d3!, con la amenaza 29. <Df6+), 24. b'l xd3, ~ d7 (en opinión de lvanchuk, es más sólida 24 .... , g6) 25. <D xc4!, be; 26. b'l e3, f5; 27. <Dd2, b'lc8; 28. ~ b2, ~ b5; 29. ~ a1!, con una posición ganada para las blancas. ~
22.
...,
<Df5!, ...
No se conseguí a cercar directamente al peón aislado: 23. lJe3, <De5; 24. f4, <Dc4; o 23. <D2f3, <Dc5; 24. <Db3, <Z'tlxb3; 25. ~ xb3, 24
23.
..., 0J e5
~ a5
Los comentaristas consideraron esta jugada como la mejor, pero también merece atención 22 ...., <Dc5, previniendo el desarrollo del ataque blanco mediante 23. <Df5, o 23. ~ g4. Después de 23. <Dxb5, las negras pueden elegir entre 23 . ... , ~ a6, con iniciativa por el peón o una variante forzada que casi garantiza las tablas: 23 .... , 'i!b6; 24. a4, ~ xd5; 25. ed, b'lxe 1+; 26. ~ xe1, <Dxa4; 27. ~ xg7, ~ xb5 (27 .... , ~ xg7; 28. 'i!a1+), 28. ~ xf8, Vi1rxf8; 29. 'i!e3, 'i! xd5; 30. ~ xh6+, ~g8. Por lo visto, las blancas deben jugar 23. b'le3, con la amenaza 24. <D4b3. 23.
d2; 26. lJe2, ~ a4!; 27. e xa4, ba; 28. 0Jxd2, ~ xd5; o 23. 0!2b3, ~ a4; 24. m xd3, ~ xd5 . En todas las variantes las negras consiguen ventaja. Aprovechando la lejanía de la dama enemiga, las blancas intentan organizar un ataque sobre el rey , ahora amenazan 24. ~ xg7, ~ xg7 ; 25. 'i!g4.
Al hacer esta jugada de caballo, no valoré el siguiente cambio en e5. Por lo visto, era más sólida ;23 .... , g6. Kasparov considera como principal 24. <Z'tlb3, y ofrece esta serie de jugadas óptimas para las blancas: 24 . ..., ~ a4; 25. ~ xd3, 0Je5 (25 .... , gf; 26. ~g3+ , ~ h7; 27. ~ f3), 26. ~ xe5 (26. ~ g3, ~xd5!), 26 . ..., b'l xe5; 27. f4, b'le8; 28. 0Jg3, con juego confuso. Muchos comentaristas recomendaron 24. b'le3, y no es posible 24. ... , gf; 25. lJg3+, ~h7; 26. ~h5, sin embargo ahora 24 .... , 0Je5, ya
es muy prometedora. De esta manera, se puede considerar que los acontecimientos de la apertura fueron completamente aceptables para las negras. Además, tampoco el salto del caballo a e5 es un grave error. 24.
~ xe5!,
...
Parece más natural el desarrollo de la iniciativa en el flanco de rey mediante 24. f4. La continuación tranquila 24 .... , 0lg6, después de 25. 'ªf1, 0le7; 26. 0le3, o 26. 0lb3, ~ b6+; 27. ~ d4, ~ a6; 2S. 0l xh6+, gh; 29. f5, llevan a un juego difícil para las negras. Pero después de la activa 24 .... , 0lc4!, se producía una lucha muy tensa, por ejemplo: 25. 0l xc4, be; 26. ~ xg7, ~ eS!; 27. ~ xfS, ~ xf5; 2S. ~ xh6, 'ª xe4; 29. 'ª xe4, ~ xe4; 30. ~ g4+, ~ g6; 31. f5 (31. ~ eS+?, ~ h7; 32. ~ fS, ~ C5+; 33. ~h1, ~ d4, con ventaja blanca) 31 .... , ~ e1+; 32. ~ h2, ~ e5+, con plena igualdad, o 26 .... , ~ xd5!; 27. ~ g4, ~ xe1; 2S. ~ h2, ~ e2!; 20. ~ g3, bt e6!, y las negras pasan al contraataque. 24.
... , dxe5
Después de 24 .... , 'ª xe5; 25. 0l f3, l:leS; 26. ~ xd3,. las negras no tienen compensación por el peón. 25.
~ xd3, g6; 27. 0le3 ~ xb5, ~ b4!), 27 ...., ~ a6; ~ a1, ~ b6.
26.
26.
~ xd3,
(27. 2S.
...
Por fin cae el peón d3, pero el peón a3 tampoco va a ningún lado. 26.
..., bl a8
27.
'ª c1, g6
Aún era pronto para tomar en a3: 27 .... , 'ª xa3; 2S. d6, g6; 29. d7!, 'ªas (29 .... , ~ dS; 30. ~ xb5, ~ a6; 31. ~ xe5, 'ª xb3; 32. ~ eS, blbS; 33. 'ªes, etc ... ), 30. 0le3, 'ªdS; 31. 0lg4, ~ g7; 32. 0lc5, h5; 33. 0le3, ~ fS; 34. 0l xb7, ~ xb7; 35. 0ld5!, con una considerable ventaja blanca. 28.
0l e3,
~ xa3
Después de 2S. ..., 'ª xa3; 29. 0l g4, las negras tienen serios problemas con la defensa del peón: 29 .... , ~ d6 (29 .... , ~ g7; 30. d6!), 30. ~ xb5, ~ a6; 31. ~ eS!, 'ª xb3; 32. btc6!; 29 .... , 'ªa2; 30. ~ b1, ~ a7; 31. ~ c7, h5; 32. 'ª xb7, ~ xb7; 33. 0lf6+, ganando.
Se podía resistir más después de 29 .... , h5; 30. ~ c3, f6.
0lb3, ~ b6
También era posible 25 .... , ~ xa3;
30. 31.
0l g4, ~ f8 bt c1, ...
25
Desde luego, no 31. ~ xe5?, ~ g7!; 32. ~ d7, .lha1+; 33. ~ xa1, f!J c7, y las negras ganan. 31.
..., f!J d6
Sólo esta jugada, hecha en el Zeitnot, es el error decisivo. Tampoco valía 31 .... , ~ g7; 32. d6, ~ xe4; 33. blc8+, ~ h7; 34. f!J d 1, y el peón "d" es incontenible, sin embargo, de acuerdo con Kasparov, resistí a bastante 31. ... , f6; 32. 'f!J f3, bla6 (32 .... , ~ g7; 33. blc6!; o 32 .... , ~ g7; 33. ~ c5),
26
y no es sencillo perforar la posición negra. 32. 33. 34. 35. 36. 37. 38.
39.
~ c5, bl c4 b!, xc4, bxc4 ~ xb7, cxd3 ~ xd6, ~ xd6 ~ f1, ~ g7
f3, f5 ~ f2, d2 ~ e2, ~ b4 ~ d3, ~ c3.
40. Las negras abandonaron, ya que pierden el peón "d" y el final no tiene visos de salvación.
Partida 4 G. Kasparov- A. Karpov Match-revancha por el campeonato mundial, 16ª partida Leningrado, 1986
1. 2. 3. 4.
5. 6. 7.
8. 9.
1 o. 11. 12. 13. 14. 15. 16. 17. 18.
e4, e5 0l f3, 0l c6 ~ b5, a6 ~ a4, 0l f6 0-0, ~ e7 'ªe1, b5 ~ b3, d6 c3, 0-0
h3,
~ b7
d4, 'ªes 0lbd2, ~ f8 a4, h6 ~ c2, exd4 cxd4, 0lb4 ~ b1, c5 d5, 0ld7 'ªa3, c4 0ld4, ...
(Ver diagrama) La jugada del caballo a d4 se encuentra por primera vez en la partida Sokolov - Psajis (Salgogrado, 1985), después de 18 .... , 0le5; 19. ab, ~ b6; 20. 0l2f3, 0lbd3, las blancas sacrificaron la calidad. 21. ~ e3, 0l xe1; 22 . 0l xe1,
~ c7; ~ d7,
23. 0lef3, ab; 24. 0l xb5, pero no consiguieron suficiente compensación. Para este encuentro preparé la sorpresa 18 . ... , ~ f6!? y, de esta manera, una investigación más detallada de la variante 18 .... , 0le5; 19. ab, ~ b6, se aplazó para el futuro . (Ver diagrama) Antes de seguir con la partida principal examinaremos una serie
27
de buenas partidas, que eluden la posición del diagrama. 011 - i{ruppa (Uzhgorod, 1987). 20. 0J f5, 0J bd3; 21. ~ xd3, 0J xd3; 22. b!, e3, ab; 23. 0J xh6+!?, gf; 24. bl g3+, ~ g7; 25. b!, axd3, cd; 26. 0Jb3, con juego agudo. Una idea más inesperada se empleó en la partida Sax - Short en un torneo interzonal (Subotica, 1987), donde siguió la inconcebible 20. 0J xc4!?. ¡Como piedra caí da del cielo! Las blancas entregan el caballo, abriendo la senda para el ataque al rey enemigo. 20 . ... , 0J xc4; 21. b!, g3, ~ c8; 22. ~ xh6, ab. No valía 22 .... , 0J xd5; 23. ed, b), xe1+; 24. 1!\lxe1, ~ xd4; 25. b!, xg7+, pero resistía más 22 . ... , ~ d7; 23. 0J f3, bla1; 24. 0J g5?. En opinión de Hazai, entrenador de Sax, después de la mejor 24. b3!, 0J e5; 25. 1!\ld2, 1!\la5; 26. ~ e3, 0J g6; 27. ~ d4, la compensación por la pieza sería suficiente. En otra situación un año después
28
Sokolov eligió la jugada tranquila b2-b3 (ver la siguiente partida de los comentarios). 24, ... , Zl xb1 ?. Ahora se equivoca Short, entregando la torre por el alfil b 1, la igualdad material se restablece, y el ataque de Sax no afio ja. Merecí a atención la recomendación de E. Geller 24 .... , g6!; 25. ~ xf8, ~ xf8; 26. b3, 0J e5 (o 26 .... , 0Ja3), 27. 1!\ld2, 0J a6. Por lo visto, también rechazaba el ataque 24 .... , 0Je5; 25. 1!\lh5, g6; 26. 1!\lh4, 0Jbd3!. 25. ~ xb1, gh; 26. 0Je6+, l!í'h8; 27. 0J xf8, b!, xf8. No valía 27 .... , 1!\ld8; 28. 1!\lc 1, 1!\l f6, por 29. 0J g6+!, pero era correcta 27 .... , ~ d4, con el objetivo de cerrar el paso de la dama negra por la diagonal e 1-h6, y desde luego el caballo f8 no va a ningún lado. Ahora a 28. 1!\lc 1, seguiría 29 .... , 1!\ld2, y en caso de 28. b3, 28 .... , 0Jd2. Es cierto que en la segunda variante después de 29. 1!\lc1, b!, xf8 (29 .... , 0Ja2; 30. 1!\lc7, bl,xf8; 31. 9 xd6, ganando), 30. b), e2, hay que dar cierta preferencia a las blancas. 28. 1!\lc1!, l!í'h7; 29. 1!\l c3, 0Je5; 30. &xb4, ~ d7; 31. 1!\ld2, 0Jc4 (amenazaba 32. 1!í'h2, y f2-f4), 32. &d1, b4 (32 .... , 0Jxb2; 33. & a1!), 33. b3, 0J e5; 34. l!í'h2. Las blancas se proponen avanzar el peón "f", y en caso de captura activar la segunda torre. Pero el sacrificio de peón permití a a las negras oponer una dura resistencia. 34 . ... , &xf2; 35. b!, f 1, 1!\lb2; 36. 1!\l h5, f6; 37. Zl f4!, 1!\ld2??. Un
terrible error en el Zeitnot. Después de 37 .... , ~ e8; 38. f! f5+, ~ g6; 39. 'i!e6, 'i! c1; 40. g xf6, g xf6; 41. f! xf6, 'i!c7, sería muy difícil romper la fortaleza negra. 38. ~ xh6+!. Todo termina con un mate directo. Las negras abandonaron. Sokolov - Portisch (Bruselas, 1988). 20. 0i xc4, 0i xc4; 21. l:l g3, ~ c8; 22. b3!, 0i e5; 23. ~ e3 (pero no 23. ~ xh6, 0ibd3!, con ventaja negra), 23 .... , 0i g6. Después de 23 .... , ab; 24. 0i f5, y 25. 0i xh6+, el ataque blanco es irresistible, también es mala 23 . ... , 'i!c7; 24. ~ xh6!. 24. f4, 'i! d8. No hay tiempo para 24 .... , ab: 25. f5, 0ie5; 26. 0ie6, y 27. 0i xg7. 25. f5, 0i e5; 26. ~ d2, a5; 27. ~ xh6, ~ h4. Resistía más 27 .... , ~ h7; 28. ~ f4, ~ e7; 29. bH1, ~ f6; 30. ~h1, ~ d7; 31. ~ e2, .llh8, aunque también aquí después de 32. 0i c6, a las negras se les presenta una difícil defensa. 28. ~ h2, ~ d7; 29. ~ g5, 'i! h5; 30. g f1, g6; 31. 0i c6!, ~ xc6. Tampoco aliviaba la posición 31 . ... , g ab8, ni 31 .... , ~ g7. 32. de, g ab8; 33. fg, fg; 34. c7, .ll bc8; 35. b6, 'i! h7; 36. g xf8+, .ll xf8; 37. ~ xd6, 0i bc6; 38. ~ f6, .ll xf6; 39. 'i! xf6, ~ d7; 40. b7. Las negras abandonaron. Antes de regresar a la partida principal queda decir que en lugar de 18 .... , 0ie5; 19. ab, ~ b6 (o 18. ... , 'i!f6), es peligrosa enseguida 18 . ... , 'i! b6, por ejemplo: 19.
0i f5, 0i e5 (es más precisa 19 .... , g6; 20. g g3, llllrh7), 20. g g3, ~ h7 (Ftacnik aconseja 20 .... , g6; 21. 0i f3, 0ied3; 22. ~ e3, 'i!c7; 23. ~ xh6, 0i xe1; 24. ~ xe1), 21. 0i f3, ~ c8; 22. 0i xg7!, ~ xg7; 23. ~ d2, 0i bd3; 24. ~ xd3, 0i xd3; 25. g xg7+!, ~ xg7; 26. ~ xh6+, ~ g8; 27. ~ e3, ~ c7; 28. ~ d4, f6; 29. ~ xf6, con gran superioridad (Sax - Nikolic, Lugano, 1987). 18. 19.
..., 'i! f6 0! 2f3, 0i c5
El salto de la dama a f6 ya se podía justificar aquí, continuando 19 .... , 0id3; 20, ~ xd3 (es insuficiente 20. g xd3, cd; 21. 'i! xd3, 0ic5; 22. 'i!c2, g6), 20 .... , b4! (una importante jugada intermedia) 21. ~ c2 (21. bl a 1, cd; 22. ~ xd3, 0ic5; 23. 'i! b1, ~ xd5; o 23. 'i!c4, a5; 24. 0ib5, g ac8, con ventaja negra), 21 .... , ba; 22. b3 (22. b4, g ac8), 22 .... , 0ic5, con buen jue-
29
go para las negras. A propósito, en esta variante se ve por qué la dama está mejor en f6 que en b6 (tras 18 .... , e b6): en el segundo caso 19 .... , ~ d3, ya no sería peligrosa por la intermedia 20. a5.
20. 21.
axb5, axb5 ~ xb5, ...
No valía 21. ~ xa8, Zh a8; 22. 23. ~ c3, ~ bd3; 24.
~ xb5, ~ a 1; ~ f1, ~ b3.
21. 22.
24. ..., ~ xa3 ~ xa3, ...
En caso de 22. ba, la dama negra penetraba en a 1.
22.
...,
~ a6
Aún es pronto para 22 .... , ~ bd3; por 23. ~ xd3, ~ xd3; 24. ~ e3!. Por ejemplo: 24 .... , ~ xb2; 25. ~ xb2, e xb2; 26. ~ xc4, o 24 .... , ~ a6; 25. e a4, ~ a8; 26. ~ d2, e xb2 (26 .... , ~ xb2; 27. e c2!, ~ d3; 28. ~ xc4, e a 1+; 29. ~ e 1; o 28 .... , ~ xc4; 29. e xc4, ~ a1+; 30. ~ e1), 27. ~ xc4, e b1+; 28. ~ e1!, <í)c5!; 29. e c6, ~ c8; 30. e b6, e xb6; 31. ~ xb6, ~ b8; 32. ~ a5, y las negras no tienen compensa ción por el peón. Por eso defendí primero el peón c4.
23.
~ e3, ~ b8!?
Esto se incluye en el plan de presión en el flanco de dama. Sin embargo ya era posible 25. ..., 30
~ bd3. Kasparov ofrece la variante 24. ~ xd3, cd; 25. b4, ~ xe4; 26. b5, ~ b7; 27. ~ xd3, ~ c3; 28. ~ b2, ~ xd1; 29. ~ xf6, ~ xf2; 30. ~ xf2, gf; 31. ~ c4, con ventaja blanca. Sin embargo después de 27 .... , e a 1 (en lugar de 27 .... , ~ c3), las negras tienen compensación por el peón, y además no está claro si las blancas consiguen conservarlo.
e5!?, ...
Ahora a cualquier jugada tranquila, 24. ~ h2, 24. ~ e 1, 24. ~ c3, seguí a 24 .... , ~ bd3!, por eso en respuesta a las acciones activas de las negras en el flanco de dama las blancas pasan a la preparación del ataque al rey. Pero tras esto la dama negra y su pasivo alfil f8 reciben un vasto campo de operaciones.
24. 25.
..., dxe5 ~ xe5, ...
Otra posición crítica. Ha llegado el momento de enviar un caballo a d3, pero por desgracia no elijo el adecuado. Era correcta 25. ... , <D cd3!, y las negras pueden mirar con esperanza al futuro. Esta maniobra de caballo se empleó inmediatamente después de nuestro encuentro, y se encuentra en la práctica por primera vez en la partida Nunn - Psajis (Hastings, 1987-88). Después de 26. <D g4 (también tras 26. ~ xd3, <D xd3; 27 . .l:l xd3, cd; 28 . <Dd7, ~ d6; 29. <D xb8, ~ xb8 ; 30. ~ a4 , se puede contar con las tablas), 26 . ..., ~ h4; 27. ,l:J, g3, ~ h8; 28. ~ d2, ~ d6; 29. ,l:J, f3, <D xb2; 30. ~ e2, ~ e7; 31. ~ xe7, se acordaron las tablas. La jugada 26 .... , ~ h4 , tiene una alternativa, 26 . ... , ~ d4 (es peligrosa 26 .... , ~ b6; 27. ,l:J,g3, g6; 28. ~ e3), 27. <D c2, <D xc2; 28. ~ xc2 .
en dos partidas entre Dvoiris y Timoshenko (URSS, 1988). En la semifinal del campeonato nacional en Varnaul, Timoshenko res pondió 28 . ... , ~ c5 y después de 29. ~ f3!, <D xc 1 (29 ...., llf8; 30. .Qe4!), 30. <D xh6+!, ~ h8 (30 ...., gh; 31. ~ g3+, ~ f8; 32. ~ xb8+, ~ g7; 33. ,l:J,g3+, ~ f6; 34. ~ d8+, ~ e5; 35. ,1¿ e3+, ganando), 31. <D f5, ~ xe3; 32. fe, l h b2; 33. <D e7!, ~ xe3+; 34. ~ xe3, b!, xc2; 35. ~ e5, reconoció su derrota. En la otra partida Timoshenko eligió la continuación más fuerte 28 . ..., ~ d6!. Veamos cómo siguió. 29. b3 . O 29. g e2, <D xc1 ; 30 . ~ xc1 , ~ xd5; 31. <D xh6+, ~ f8!; 32. g e 1, con juego confuso (es mala 32. g d2, ~ f4!; 33. b!, xd5 , ~ xc1).
29 . ... , ~ a1; 30. be, ~ xc4; 31. ~ xd3, ~ xd3; 32. g e1, ~ g6!; 33. ~ d2!, g b 1; 34. ~ e2, ,l:J, xe1+; 35. ~ xe1, ~ xe1 +; 36. ~ xe1, ~ e4; 37. <D e3, ~ c5. Tablas. Aquí se puede poner punto al debate sobre la apertura españo la en el match-revancha. Las variantes expuestas demuestran que el nuevo plan de las negras es digno de despertar expectativas. Pero en adelante los vertigi nosos acontecimientos de la partida pasaron fugazmente. 25. 26.
Esta posición surgió dos veces
... , <Dbd3? <D g4?, ...
Devolviendo el favor al adversa rio. La jugada 26. ~ c2!, llevaba a 31
funestas consecuencias para mí. Defendiendo el peón f2, la dama llegaba a una diagonal peligrosa, y como resultado el caballo d3 quedaba clavado. Ahora no valdría ni 26 .... , 0Jb3; 27. 0J d7, ni 26. ... , g d8; 27. 0Jaxc4, g xd5; 28. b4, ni 26 ...., g b4; 27. 0J c6, g b7; 28. ~ e8, g6; 29. ~ e3, g xb2; 30. ~ d4, con clara ventaja blanca, aunque, desde luego, el juego aún no ha terminado. Tras de la imprecisión cometida por las blancas, de nuevo surge en el tablero una igualdad dinámica. 26. 27.
... , 9 b6 g g3, g6
La continuación más sólida, aunque era posible 27 .... , ~ h8, o bien 27 ... 0J e4. 28. 29. 30. 31.
32
~ xh6, 9 xb2 9 f3, 0J d7 ~ xf8, l1!1? xf8 l1!1?h2, bl. b3!
La jugada de torre fue muy criticada, pero es más fuerte que 31 . ... , 9 xa3, 31 .... , 9 c1, o 31 .... , ~ g7.
32.
~ xd3,
cxd3??
Un error terrible, que voy a intentar explicar. Ante todo, reconozco que consideré que la ventaja estaba ya del lado de las negras . En efecto, el flanco de dama blanco está indefenso, y me parecía que el ataque al rey no era efectivo. Empecé el análisis de la posición con la jugada 32 ...., cd. Después de estudiarla un buen rato la consideré insuficiente. Pasé a otra continuación, y ¡ay!, en todos los casos advertí que las negras no tenían ventaja. Convencido de este triste hecho, miré al reloj y observé que la aguja se acercaba a la zona peligrosa. Y maquinalmente hice la jugada en la que más había pensado ... Desde luego, vi la sencilla variante 32 .... , ~ xd3; 33. 9 f4, 9 xa3; 34. 0Jh6, f/1 e7; 35. g xg6, 9 e5; 36. 9 xe5 (en este caso la combinación de la partida no valdría: 36. g g8+, ~ e7; 37. d6+, ~ xd6; 38. 0if5+, ~ f6; 39. 9 xe5, l1!1? xe5; 40. 0J xd6, 'f! xd6), 36 .... , 0J xe5; 37. bl. xa6, g xd5; 38. g a8+, ~ e7; 39. 0J f5+, ~ e6; 40. 0J e3. La ventaja simbólica que reciben las blancas en el final es imposible de realizar. Aún es más fuerte 32 .... , g xa3. Kasparov ofrece esta larga variante: 33. 9 f4, bl. xd3; 34. 9 d6+, ~ g7; 35. 9 xd7, g xg3; 36.
fg, ~ b7!; 37. h4!, ~ a8!!; 38. ~ d8, ~ d4; 39. ~ xa8, ~ xg4; 40. ~ a1+, ~ f8!; 41. d6, ~ e8; 42. ~ a4+, ~ d8; 43. ~ a5+, ~ e8; 44. ~ b5+, ~ d7; 45. ~ e5+, ~ e6, con tablas. 33.
~ f4, ~ xa3?
Sólo esta captura en un fuerte Zeitnot acaba finalmente con la partida. Más tarde se vio que mantenía posibilidades de salvación 33. ..., d2!. De una u otra manera, la jugada 32 .... , cd, de esta partida la considero el error más dramático del match-revancha. 34. 35. 36.
0J h6, ~ e7 ,Q:, xg6, ~ e5 .G. g8+, ~ e7
d6+, ~ e6 Zl e8+, ~ d5 l':b e5+, 0J xe5 40. d7, .Q,b8 41. 0J xf7. Las negras abandonaron. 37. 38. 39.
33
Partida 5 l. Hjartarson - A. Karpov Match de candidatos, cuartos de final Seattle, 1989 En el match con Hjartarson decidí jugar con negras la apertura española. En el primer encuentro mí adversario rehusó la lucha: eligió la variante del cambio, y 15 jugadas después acordamos las tablas. No obstante, la tercera y quinta partidas fueron muy atractivas y constituyeron cierta aportación a la teoría. En calidad de partida principal me centro en la del final del match, y la rápida victoria en la tercera partida la ofrezco en los comentarios. También ofrezco una de las partídas de match con Kasparov, en la que él empleó una importante novedad teórica. 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 10. 11. 34
e4, e5 ~ f3, ~ c6 ~ b5, a6 ~ a4, ~ f6
0-0, {!g, e7 g e1, b5 ~ b3, d6 c3, 0-0 h3, bi eS d4, ~ b7 a4, ...
En la tercera partida el gran maestro islandés eligió la varíante más discreta 11. ~ bd2, ~ f8; 12. a3, h6; 13. ~ c2, ~ b8; 14. b4, ~ bd7; 15. ~ b2. Hasta ahora yo había jugado aquí, regularmente, 15.... , g6 (ver, por ejemplo, la partida 8). Por lo visto Hjartarson se había preparado para esa respuesta, pero le esperaba una sorpresa ... 15. ... , a5!. Es peor 15 .... , c5; aquí tenemos un ejemplo interesante sobre ese tema: 16. be, ed; 17. cd4, de; 18. g c1! (antes se jugaba 18. .i21.b1, o 18. d5), 18 .... , g c8; 19. ~ b1, ~ h5; 20. e5, ~ f4; 21. ~ e4!, cd; 22. bt xc8, ~ xc8; 23. ~ xd4, ~ c6; 24. ~ d2, ~ g6; 25. e6!, ~ b6; 26. ~ xg7!, ~ c4; 27. ~ xh6, b!. xe6; 28. ~ xf8, ~ xf8; 29. ~ g5+, bt g6; 30. ~ f4, ~ e6; 31. ~ f6+. Las negras abandonaron (Nunn - Grünfeld, Groníngen, 1986). 16. ~ d3, c6; 17. ~ b3. Ahora las negras reciben un juego excelente, es mejor 17. ~ b1, ~ b8; 18. ba, g xa5; 19. c4, be; 20 . .z)xc4 (Rodríguez - Rubínettí, Toluca, 1982).
17 . ... , ab; 18. eb (mantenía el equilibrio 18. ab, ~ b6; 19. ~ a5, ~ c7), 18 . ... , ed; 19. ~ fxd4, e5!; 20. be, de; 21. ~ xb5, ~ xe4; 22. f! e2 (resistía más 22. f! f3, ahora la iniciativa de las negras se acrecienta con cada jugada), 22 .... , ~ df6; 23. ~ e3, ~ g5!. El comienzo de un ataque decisivo.
.l
Ya antes nos encontramos en esta posición (Hjartarson - Karpov, XXVI Olimpiada, 1986), entonces continué con la modesta 13 . ... , .!lb8, y después de 14. ab, ab; 15. ~ d3, ~ e8; 16. ~ f1, ~ d7; 17. ~ g3, f! e8; 18. ~ e3, f! b7; 19. de, ~ xe5; 20. bl, a7, ~ e8; 21. ~ xe5, de, resolví todos los problemas de apertura. Sin embargo las blancas podían jugar más fuerte, por ejemplo 18. ~ d2, o 19. d5. 13. 14. 15.
..., ed4 ed4, ~ b4 ~ b1, ...
Hasta ahora los comentarios son innecesarios, en el tablero tenemos una de las posiciones populares de la española. 15. 24. ~ b5, bt xe1+; 25. b!. xe1, f! e7; 26. ~ f1, ~ e6!; 27. bl, e3, ~ d6; 28. h4, ~ e6; 29. ~ d1 (un error, que cuesta la partida; era correcta 29. ~ b5, ~ f4; 30 . .!lh3, aunque después de la respuesta 30 .... , ~ e4, la ventaja negra es incuestionable) 29 . ... , ~ g4!; 30. Zí. xe6, ~ h2+!; 31. ~ h1, f! xe6; 32. f3, f! e1!. Las blancas abandonaron (33. ~ c4, ~ f4!). Regresemos a la meta de los cuartos de final de candidatos ... 11. 12. 13.
..., h6 ~ bd2, ~ f8 ~ e2, ...
..., ba4
Una jugada bastante rara, la continuación patrón es c7-c5, que se encuentra en mis matches con Kasparov. Tras 15 .... , c5; 16. d5, ~ d7; 17. bt a3, las negras o bien juegan c5-c4 (ver partidas 3 y 4), o bien socavan el centro mediante f7-f5 (ver partidas 6 y 7). 16. 17.
Zha4, a5 J¿ a3, bl. a6
(Ver diagrama) En esto consiste la idea de las negras, otras continuaciones son claramente peores. 35
e5, 'í) e4; 21. ~ 1d2, y después de una lucha tensa acordamos las tablas. En la quinta partida del mencionado match con Timman mi adversario continuó 19. ~ h4, pero después de 19 . ... , c5; 20. de (20. d5, ~ fxd5), 20 . ... , de; 21. 'í) f5, ~ ca (también es buena 21 .... , g6!?; 22 . .Qg3, ~ h8; 23. e5, 'l) fd5; 24. ~ e3, 'í) f4), 22. e5, ~ fd5; 23 . .ll g3, 'í) f4; 24. ~ f3, ~ xf5; 25. ~ xf5, ~ e6; 26. ~ b1, 'í) d4, las negras consiguieron buen juego. La jugada profiláctica .Qa8-a6 se empleó por primera vez en la partida Balashov - Karpov (50º Campeonato de la URSS, Moscú, 1983). El caballo d2 aún está atado al peón, y en caso de e4-e5 la torre negra enseguida entra en juego, cubriendo las debilidades e6 y g6. 18.
~ h2,
...
No vale la jugada 18. ~ h4?, que eligió contra mí Timman en la primera partida del match de candidatos (Kuala Lumpur, 1990), él no valoró la respuesta 18. ... , 'í) xe4!. Después de 19. ~ xe4, ~ xe4;20. ~ xe4,d5;21 . .Q ae3, b!, ae6; 22. ~ g6, ~ h4!; 23. bl xe6, .ll xe6; 24. bl xe6, fe; 25. ~ e3, ~ f6; 26. ~ g4, ~ d6; 27. h4, ~ c6, las blancas se quedaron sin peón. Otra posibilidad es 18. bt ae3; precisamente así continuó Balashov: 18 . ... , a4; 19. ~ f1, d5; 20. 36
18.
g6
Las negras sufrieron una derrota aleccionadora en la partida Sax Banas (Hungría, 1984): 18. ... , ~ a8; 19. bt ae3, ~ a7; 20. e5, ~ fd5; 21 . .ll g3, de; 22. de, b!, ae6; 23. 'í) e4, ~ h8; 25. ~ f3, ~ b6; 25. ~ fg5!, hg; 26. ~ xg5, g6; 27. ~ h5+!!. Las negras abandonaron debido a 27 .... , gh; 28. ~ xf7, mate. 19.
~ g4,
...
No es peligrosa para las negras 19. e5, que se encuentra en la partida Horvath - Razuvaiev (Sochi, 1987): 19 . ... , de; 20. de, ~ h7; 21. ~ c4, ~ d5; 22. ~ xd5, ~ xd5; 23. b!, c3, ~ f6; 24. ~ d2, 'í)d7; 25. ~ e4. Tablas. Un mes después, en el torneo internacional de Linares, lvanchuk empleó contra mí la novedad 19. f4. Tras un agudo combate diez jugadas después se llegó al ago-
tamiento de las fuerzas: 19 . ..., d5; 20. e5, 0ie4; 21. 0i g4, c5; 22. 0i xe4, de; 23. de, ~ xc5+; 24. ~ e3, ~ f8; 25. 0i f6+, JJ, xf6; 26. ~ xd8, bi xd8; 27. ef, 0i d3; 28. b!. d1, ~ xa3; 29. ba, ~ d5. Tablas. Kasparov preparó una novedad más pérfida para el match por el campeonato mundial en Nueva York - Lyon. Kasparov - Karpov (5,2). 19. f3!. Una jugada muy venenosa.
19 . ... , ~ d7?!. Mi primera reacción resultó imprecisa. A juego confuso llevaba 19 .... , ~ g7 (también es posible la patrón 19 . ... , c5), 20. 0ic4, ~ a8; 21. d5, g d8. 20. 0i c4, ~ b5; 21. g c3, ~ c8; 22. ~ e3, c6. La debilidad del peón d6 pronto decide la suerte de la partida; era más sólida 22 . ... , ~ b8, preparando d6-d5. 23. ~ c1, ~ h7; 22. 0i g4!, 0i g8. Ahora las blancas realizan una combinación ganadora, pero
tampoco el cambio en g4 aliviaba la posición.
25. ~ xh6!, ~ xh6; 26. 0i xh6, 0i xh6; 27. 0i xd6, ~ b6; 28. 0i xe8, ~ xd4+; 29. ~ h1, ~ d8; 30. bl d1, ~ xe8; 31. ~ g5, bi a7; 32 . .Q:.d8, ~ e6; 33. f4, ~ a6; 34. f5, ~ e7; 35. ~ d2, ~ e5; 36. ~ f2, ~ e7; 37. ~ d4, 0i g8; 38. e5, 0i d5; 39. fg+, fg; 40 . .Q:. xc6, ~ xd8; 41. ~ xa7+, 0ide7; 42. g xa6, ~ d1+; 43. ~ g1, ~ d2; 44. ~ f1. Las negras abandonaron. De esta manera, esta partida no resultó tan feliz para las negras como la que comentamos como principal. Es posible que la "revancha" llegue en un próximo torneo ... 19. 20.
..., 0i xg4 ~ xg4, ...
A un juego de doble filo llevaba 20. hg, ~ g7; 21. 0if3, ~ c8; 22. g5, h5.
37
20.
..., c5
También se encuentra 20 .... , pero la ruptura en el centro en esta situación es más enérgica .
~ g7,
21.
dc5, ...
Una vez llegué a observar cómo un ajedrecista famoso jugó aquí d4-d5, sin ver la captura en d5 ... 21. 22.
..., dc5 e5!?, ...
22.
..., '9' d4!
Se propuso 22 .... , h5, pero en tonces todas las casillas negras del flanco de rey serían débiles. Después de 23. '9'g3, el asalto 23. ..., '9'd4, ya no tiene sentido, y en caso de 23 .... , h4, el peón "h" se aleja peligrosamente de los "suyos". Continuando '9'd8-d4, desde luego, era imprescindible calcular todas las posibles consecuencias del tiroteo táctico. 23. 24.
25.
'9' g3, bt ae6 g ae3, c4 ~ f5, <D d3
La torre no puede irse de e6 debido a la temática e5-e6. Era posible 25 . ... , ~ g7, o 25 . ... , ~ c5, entregando la calidad con cierta compensación por ella. Pero yo no pensaba entregar la calidad, sino la dama ... 26.
Es difícil decir si Hjartarson contaba con romper la marcha de nuestro match, pero en todo caso este es el único intento para luchar por la iniciativa. Si las blancas permiten ~ f8-g7, entonces el avance e4-e5 ya no se produce. La posición negra parece peligrosa, pero conseguí encontrar un camino casi forzado para simplificar la posición. 38
~ xd3, ...
Desde luego, calculé la variante 26. ~ xe6, b,í xe6; 27. 0lb3, '9'b6; 28. bt xd3, cd; 29. '9' xd3, a4!; 30. <Dd4, ~ c5!. 26. 27.
..., cd3 b,í xd3, ...
(Ver diagrama) 27.
..., bt xe5!
El sacrificio posicional de dama concluye con nuestra lucha.
30.
... , bl c5!
Esta maniobra reorganiza la interacción de las piezas negras, y la dama blanca no puede activarse. Mientras tanto se amenaza 31 .... , ~ f5, y ya las blancas tropiezan con dificultades.
.l
31.
A propósito, la dama no tiene una retirada satisfactoria: a 27 .... , ~ c5, sigue 28. 1Jb3, y a 27 . ... , ~ b6, es muy fuerte 28. 1Jc4, y la compensación por el peón no es suficiente. 28. 29.
Jl xd4, bt xe1 + ~ h2, bt xc1
En una posición abierta la presencia de la pareja de alfiles da pie a las negras para considerar su posición favorable. Si las blancas consiguen cambiar su torre por una de las torres enemigas, la fuerza de los alfiles disminuiría, pero ese cambio es imposible. 30.
'Z) f3, ...
El caballo cubre todas las debilidades, y las negras deben proceder con atención; por ejemplo, en caso de 30 ...., ~ xf3; 31. ~ xf3, bl. c5, su fortaleza no es tan estable como en la partida.
bl. d7, ~ xf3
Ahora este cambio es conveniente. Después de 31 .... , ~ c6; 32. bl. d2, las piezas negras podían perder la coordinación (amenaza 1Jd4). 32.
'i! xf3, bt f5
Aquí las blancas ofrecieron las tablas, que acepté de buen grado, porque el match de candidatos terminaba con mi victoria. En otra situación hubiera propuesto a mi adversario que hiciera su jugada, y sólo entonces tomaría la decisión. Aquí era correcta 32. !'f d1 (el peón f2 no se conserva) 32 .... , bl. xf2; 34. bl. d2, cambiando la torre activa negra. Como se hizo evidente después de la partida, Hjartarson se disponía a jugar 32. ~ d3, bl. xf2; 34. bld8, b!. xd8; 35. ~ xd8, dejando a las negras la otra torre. En ese caso después de 35 .... , bl. xb2; 36. ~ xa5, ~ d6+; 37. ~ g1, ~ g3, las negras aún podían contar con la victoria. Si bien es cierto que continuando 38. ~ d8+, y 39. ~ d3, las blancas liquidaban el peligro. 39
Partida 6 G. Kasparov -A. Karpov Match por el campeonato mundial, 4ª partida Nueva York, 1990 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 10. 11. 12. 13. 14. 15.
e4, e5 0l f3, 0lc6 ~ b5, a6 ~ a4, 0l f6 0-0, ~ e7 ll, e1, b5 ~ b3, d6 c3, 0-0 h3, ~ b7 d4, ll, e8 0lbd2, ~ f8 a4, h6 ~ c2, ed4 cd4, ~ b4 ~ b1, c5 18.
La jugada 15 .... , ba, que se halla en el segundo encuentro, se vio en la Partida 5. 16. 17.
d5, 0ld7 ll, a3, f5!?
(Ver diagrama) Este contragolpe, en el centro, hace ya algunos años que lo conocemos, sin embargo, parece que sólamente se ha probado en serio en este match por el campeonato mundial. 40
ef5, ...
En la 20ª partida Kasparov prefirió 18. ll,ae3 (ver Partida 7). 18.
..., 0l f6
En caso de 18 .... , ~ xd5; 19. 0le4, 0lf6, todo se limita a una transposición de jugadas, sin embargo en la 22ª partida decidí no esperar a la sorpresa de mi adversario, y yo mismo empleé la novedad 19 .... , ~ f7!?. Por supuesto ofrezco también esta importante partida.
Kasparov - Karpov (5,22). 18 . ... , 19. <D e4, ~ f7; 20. ab. Desde luego, pierde 20. <D xd6, bhe1+; 21. <D xe1, <Db6; 22. ~ f4, <Dc4, pero están pendientes de prueba 20. ~ d2, y 20. 'ªae3. 20 . ... , d5!; 21. <D c3, b!, xe1+; 22. <D xe1. ~ xd5;
~ xb5, 'ªxa2; 28. ~ xc4+, y las negras están mal. 25. 'ª xa6, <D c5!; 26. 'ª xa8, ~ xa8; 27. ~ b1, d3; 28. ~ e3, ~ a5; 29. b3!, <D xb3; 30. <D xd3!, cd; 31. ~ xd3, <D eS; 32. ~ f1, ~ c7. Después de 32 .... , ~ b4!?, las negras podían luchar por la iniciativa. Ahora se llega a tablas. 33. ~ g4, ~ h7; 34. ~ c4, ~ xc4 (es mala 34 .... , ~ eS?; 35. ~ xh6!, ~ xh6; 36. ~ h4+, ~ h5; 37. g4), 35. ~ xc4, ~ e5; 36. ~ f7, ~ d6; 37. g3, ~ e7; 38. ~ g6+, ~ h8; 39. ~ d4, ~ e5; 40. ~ xc5, ~ xc5; 41. ~ e8+, ~ h7; 42. ~ g6+, ~ h8; 43. ~ e8+. Tablas.
19.
22 . ... , d4; 23. <D a2. Otras posibilidades: 23. <De4!?, ab; 24. f6, 'ª xa3 (también es posible 24 .... ,. g6, pero no 24. ..., <D xf6; 25. <Dxf6+, gf; 26. ~ g4+, ~ h8; 27. ~ f5, ~ g8; 28. ~ xh6!), 25. ba, <D d5; 26. fg, ~ xg7, o bien 23. ~ e4, 'ªa7 (o 23 .... , de; 24. ~ xa8, ~ xa8; 25. ~ xd7, ~ xe4), 24. <D e2, <D f6; 25. ~ f3, d3, con suficiente compensación por el peón. 23 . ... , <D xa2. Después de 23 .... , a5; 24. <D xb4, ab; 25. b!, xa8, ~ xa8; 26. b3, las blancas tienen una mínima ventaja. 24. ~ xa2, c4!. Se sobreentiende que no vale 24. ..., ~ xa2; 25. 'ª xa2, ab; 26. ~ b3+, c4; 27.
<D e4, ...
En la partida Vasiukov - Razuvaiev (Moscú, 1987), donde parece que se empleó por vez primera el contraataque f7-f5, después de 19. <D h2, bl xe1+; 20. ~ xe1, m e7; 21. 'fj f1, bl e8!, las negras recibieron buen juego. 19.
...,
~ xd5
(Ver diagrama) Esta jugada la preparé especialmente para el match, después de 19.... , <Dbxd5; 20. ab, ab; 21. ~ b3, o 20. <D xf6+, ~ xf6; 21. b!, xe8+, bl xe8; 22. ab, ab; 23. '!J a7, las blancas tienen una seria iniciativa. No es tan peligrosa 20. <D h2, <D xe4; 21. ~ xe4, 'ª xe4!; 22. b!, xe4, <D xc3; 23. 'ª xc3, 41
J.
J.
28. ab, 1!xb1; 29. be, ~ xc5; 30. f6, gf; 31. m xf6+, ~ g8?. Aquí daba tablas 31 .... , ~ h7!, la desafortunada retirada del rey lleva a la derrota: 32. ~ e6+, ~ g7; 33. ~ h2, ~ c1; 34. ~ d7+, ~ f6; 35. ~ c6+, ~ e7; 36. ~ c7+, ~ f6; 37. ~ b4. Las negras abandonaron. 21. 22.
~ xb2 ~ xb4, ~ f7!
...,
~ xe4; 24. g g3, ~ h8, con juego agudo, (De Firmian - A. lvanov, Las Vegas, 1989); o 20. 'lj¡h4, 'Zj¡ c7; 21. 'Zj¡ xf6+, 1! xf6; 22. <Zj¡ g6, g xe1+; 23. 1! xe1, ~ eS; 24. -ª e3, -ª xe3; 25. ~ xe3, ba; 26. ~ a2+, ~ d5; 27. ~ xd5+, 'Zj¡ xd5; 28. ~ e4, 'Zj¡ e7, con iguales posibilidades, (De Firmian - A. lvanov, San Mateo, 1989).
20.
'Zj¡ xf6+, ...
A juego complejo llevaba 20. -ª ae3, ~ xe4; 21. ~ xe4, d5; 22. ~ b 1, -ª xe3; 23. -ª xe3, d4. 20. 21.
.-.. , 1!xf6 ...
~ d2,
Merecía atención 21. ~ ae3; la partida Rantanen - Ojan en (Suomi, 1990), se desarrolló de la siguiente manera: 21. ab, ab; 22. ~ d2, ~ xa3; 23. ba, ~ xf3; 24. ~ xf3, -ª xe1 +; 25. ~ xe1, ~ b2; 26. 1!e4, d5; 27. ~ e6+, ~ h8; 42
Esta maniobra la tenían prevista las negras cuando tomaron con el alfil el peón d5. No es tan buena 22 .... , ~ xf3; 23. ~ xf3, ~ xb4; 24. -ª e6, ~ xa4; 25. ~ c2, 1!d4; 26 . .lld3, ~ h4; 27 . .llde3, con una peligrosa iniciativa de las blancas. 23.
-ª e6!, ...
El único medio de luchar por la iniciativa: después de 23. ab, ~ xb4; 24. -ª xe8, -ª xe8; 25. -ª xa6, ~ xb5; 26. -ª a7, las posibilidades son iguales.
23.
... , m xb4
No valí a la pena aceptar el sacrificio de la calidad: 23 .... , ~ xe6; 24. fe, cb; 25. g b3, m f6; 26. g e3, ba; 27. 'ftd5, !?4 e7; 28. m d3, g6; 29. 0lh4. 24.
Zl b3!, ...
No pasaba 24. g ae3, por 24 .... , ba!; 25. ~ a2, c4. 24. 25.
..., m xa4 ~ c2, g ad8
pero el asalto no debí a empezar con éste; era bastante más fuerte enseguida 27 .... , d5!. Veamos estas variantes: 28. bl. xe8, Zl xe8; 29. g xe8, !?4 xe8; 30. 9 xd5+, ~ f7; 31. m b7, 9 c3; 32. :?4 e4, 9 f6; 33. g4, 9 e7; 34. 9 c6, 9 e8!; 35. 'ftb7, ~ e7!; o 28. 9 e2, 9 c4; 29. Z:!. xe8, '!' xe2; 30. Zl xf8+, ~ xf8; 31. g xe2, d4; o 28. 0le5, d4; 29. g b3, :?4 xe6; 30. fe, d3; 31. g xb4, de; 32. 9 xc2, cb; en todos los casos las posibilidades negras son mejores. 28.
Era arriesgada 25 .... , g xe6; fe, ~ xe6; 27. g e3 (después 27. 0lg5?, las blancas perdían: ... , hg; 28. 'fth5, 9 h4!), 27 .... , 9 28. 9 d3, J:ie8; 29. 9 g6!. 26. 27.
g be3, g3, aS
26. de 27. a2;
~ b4
0lh4, ...
Ahora, en opinión de Azmaiparashvili, segundo de Kasparov, si quisieran los adversarios, la partida pedí a terminar en tablas por repetición de jugadas: 28. ~ g2, a4; 29. 9 e2, '!'c4; 30. ~ d3, 9 d5; 31. ~ e4! (pero no 31. ~ xb5?!, :?4xe6; 32. fe, g e7), 31 .... , 9 c4; 32. ~ d3. 28. 29. 30.
..., d5 9 e2, 9 c4! !?4d3, 'ft c 1 +
31.
~ g2,
... ;
Era más débil 31. ~ h2; es necesario mantener el control sobre el peón f2.
31. 32. Las negras tienen una avalancha de peones en el flanco de dama,
..., c4 ~ c2,
...
Jugada única, tras 32. g xe8, cd; 33. g xf8+, g xf8; 34. 9 xd3, 9 c4, las negras tienen clara ventaja. 43
32.
... ,
~ xe6
Las blancas tienen una determinada presión por las casillas blancas, pero mientras tanto tengo dos peones de más. Me parece que aquí valí a la pena avanzar enseguida el peón "d": 32, ... , d4; 33. bl, xe8, d3; 34. bl xf8+, ii'xf8; 35. ~ xd3, cd; 36. bl, xd3, e c6+, y la posición blanca no es envidiable. 33. 34.
35. 36.
bl, xe6, .ld xe6 e xe6+, i?h8 <Zj¡ g6+, ii' h7 e e2?, ...
Perdía 36. <{'l¡ xf8+?, .ld xf8; 37. e g6+, ~ g8; 38. f6, e g5!; 39. fg, e xg6; 40. gf e +, ~ xf8; 41. ~ xg6, a4; o 36. 'lj¡e7??, ~ xe7; 37. e g6+, ii'g8; 38. e e6+, ~ h8!; 39. e xe7, e g5. Sin embargo, las blancas se salvaban mediante 36. e b6, g c8; 37. e e6, .ldd8; 38. e b6, con tablas. Por lo tanto la captura de la calidad no se justifica. (Ver diagrama) 36.
...,
e 9 s?
Con los apuros de tiempo dejo escapar la victoria: 36 .... , d4!; 37. f6 (37. ~ e4, d3; 38. e f3, d2), 37 . ... , d3; 38. e e4, e g5; 39. <{'l¡ xf8+,
44
J.J.
J.
J.
ii'g8; 40. 'lj¡d7, .ld xd7; 41. e e8+, ii'h7; 42. e xd7, de; 43. f7, e f6, y todo finaliza. 37. 38. 39.
f6, e xf6 <{'l¡ xf8+, ~ g8 <Zj¡ g6,
e tn
Y aquí la última posibilidad de victoria consistí a en 39 .... , d4!?. Después de 40. ~ f5, e c6+; 41. ~ e4, e d6! (pero no 41 .... , bl,e8; 42. ~ xc6!, bl, xe2; 43. ~ d5+, ii'h7; 44. <{'l¡ f8+, con tablas), es difícil que las blancas se salven, si bien es cierto que en caso de 40. e e4!, d3; 41. ~ d 1!, d2; 42. ~ g4, aún se mantenían. 40. 41.
Tablas.
<{'l¡ e7+, ii'f8 <Zj¡ g6+.
Partida 7 G. Kasparov - A. Karpov Amsterdam, 1991 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 10. 11. 12. 13. 14. 15. 16. 17. 18.
e4, e5 0l f3, 0l c6 ~ b5, a6 ~ a4, 0l f6 0-0, ~ e7 -ª e1, b5 ~ b3, d6 c3, 0-0 h3, ~ b7 d4, -ª e8 0lbd2, ~ f8 a4, h6 ~ c2, exd4 cxd4, 0lb4 ~ b1, c5 d5, 0l d7 -ª a3, f5 -ª ae3
Las consecuencias de la jugada 18. ef las examinamos con detalle en la partida precedente. 18.
..., 0l f6
Surge un juego complejo después de 18 . ... , f4. En la partida De Firmian - A. lvanov (Chicago, 1988), siguió 19. bl a3, ~ f6; 20. 0l b3, 0l b6; 21. 0la5, -ª ab8; 22. ab, ab; 23. 0l xb7, .lj, xb7; 24. ~ d2, 0l c4; 25. ~ c3, 0le5; 26. ~ e2, ~ f7; 27. 0l xe5 (es mejor
27 . .lj,a5!, 0l xf3+; 28. ~ xf3, g5; 29. ~ xb4, cb; 30. e5, .lh e5; 31. .lj,xe5, de; 32 . .lj,a6, con cierta ventaja blanca), 27 . ... , de; 28. ~ a5, c4; 29. 'f! d2, ~ e7, y las negras recibieron buen juego. La jugada f5-f4 también se probó en mi match de candidatos con Timman (Kuala Lumpur, 1990). El. gran maestro holandés retiró la torre a e2 y después de 19. ~ 3e2, 0l e5; 20. 0l f1, 0l xf3+; 21. gf, ~ h4; 22. 0l h2, -ª e5; 23. ~ d2, ~ xh3!; 24. ~ xf4, ba; 25. ~ g4, ~ xg4; 26. 0l xg4, b!. ee8 (es más precisa 26 .... , .lle7!; 27. f4, b!. ae8), 27. f4, a5; 28. f3, ~ a6, surgió un medio juego muy interesante, en el que las negras están a gusto con su posición. 19.
0l h2, ...
Esta retirada del caballo le trajo el éxito a Kasparov en el match por el campeonato mundial. Antes de detenernos en la me jora del juego que preparé para el encuentro de Amsterdam, recordemos la partida del match. Kasparov - Karpov (5,20), 19 . ... , ~ h8 (una jugada poco afortunada) 20. b3, ba; 21. ba, c4; 22. 45
~ b2, fe; 23. 0l xe4, 0l fxd5; 24 . .l'l g3, bl. e6; 25. 0l g4, ~ e8?. Permite a las blancas conseguir un ataque imparable; era necesario 25 .... , 0ld3!; 26. ~ xd3, cd; 27. bl xd3, ~ a5, con juego confuso.
20.
exf5, bl xe3
Esto es más preciso que 20 .... , <í)bxd5; 21 . .l'le6, 0l f4; 22. 0l g4. 21. 26. <í) xh6!, c3 (tampoco ayuda 26 .... , bl xh6; 27. 0l xd6, etc ... ), 27. 0l f5, cb; 28. ~ g4, ~ c8; 29. ~ h4+, blh6; 30. 0l xh6, gh; 31. ~ h2, ~ e5; 32. 0l g5!, ~ f6; 33. .l'le8, ~ f5; 34 . ~ xh6+, ~ xh6; 35. <í) f7+, ~ h7; 36. ~ f5+, ~ g6; 37. ~ xg6+, ~ g7; 38. bl xa8, ~ e7; 39. bl, b8, a5; 40. ~ e4+, ~ xf7; 41. ~ xd5+. Las negras abandonaron. Para el encuentro con Kasparov, varios meses después del match, preparé una novedad, y las cosas fueron mucho mejor para las negras. 19.
... , ~ d7!?
(Ver diagrama) 46
fxe3, ...
Después de 21 . .l'lxe3, 0lbxd5; 22. bl g3, ble8, las negras no tienen nada que temer. 21. 22. 23. 24.
... , ~ xd5 0l g4, ~ e7! e4, ~ f7 0l f3, ...
No da nada 24. e5, de; 25. 0l xe5, ~ d4+; 26. ~ h1, bl, d8. 24. 25. 26.
... , bl d8 ~ e2, ~ c4! ~ e3, ...
(Ver diagrama) Es interesante la jugada 26. ~ f2, ahora 26 .... , ~ d3; 27. 0lxh6+, gh;
28.
..., 'ª e8!
No vale la pena atragantarse con 28 .... , ~ xb2, después de 29. g5!, las blancas tienen suficiente compensación por el peón. 29.
b3, ...
No es buena 29. ~ xb4, por 29 .... , cb; 30. ~ d2, b3, y no pasa 31. e5?, debido a 31 .... , ~ a7+. 29. 30.
28. ~ xh6, o 27. ~ g3, da a las blancas un fuerte ataque, pero la previa 26 .... , 0>xg4; 27. hg, y ahora 27 .... , ~ d3; 28. ~ d2, ~ xb1; 29. 'ª xb1, 0ld3,11eva a juego igualado. Kasparov ofrece esta larga variante: 30. ~ g3, c4; 31. g5, ~ a7+; 32. ~ h2, hg; 33. ~ xg5, .llf8; 34. ab, ab; 35. 'ª a1, ~ xa1; 36. ~ xe7, ~ c1 !; 37. ~ xd6!, ~ h6+; 38. ~ xh6, gh; 39. ~ xf8, ~ xf8; 40. 0ld4, b4; 41. b3, 0lc5; 42. be, b3; 43. 0> xb3, 0> xb3; 44. ~ g3, con tablas cercanas. 26. 27. 28.
..., 0> xg4 hxg4, ~ f6 ~ d2, ...
Un momento crítico, después de 28. e5, de; 29. ~ xc5, 0lc6; 30. g5, hg; 31. ~ xg5, ~ xg5; 32. 0>xg5, ~ d4+, surgía una posición con posibilidades mutuas. Ahora las negras empiezan a dictar las condiciones.
..., If6f7
'f! f2,
~ e7!
Surgí a una posición con posibilidades mutuas tras 30 .... , ~ xb3; 31. ab, ab; 32. g5, o 30 .... , ba; 31. ba, ~ xa4; 32. g5. 31. 32. 33.
axb5, axb5 ~ f 1, 'ªb8 ~ d3, ...
De nuevo era desfavorable tomar el caballo b4: 33. ~ xb4, cb; 34. ~ c2, ~ c7, con ventaja negra. 33.
..., 0> xd3
A 33 .... , ~ d7, era desagradable 34. g5. 34. 35. 36. 37.
~ xd3, c4 bxc4, bxc4 ~ a3, .llb3 ~ a8+,
'f! e8
No era tan buena la retirada del rey a h7: 38. g5!, hg; 39. ~ f2, con idea de 40. 'ªh 1+.
47
38. 39.
~ xe8+, ~ xe8
g5, ...
Por fin las blancas realizan la jugada programada de peón, pero sin damas pierde su fuerza. La iniciativa ha pasado completamente a las negras, que además tienen la ventaja de la pareja de alfiles. A propósito, el intento de atacar el peón "d" mediante 39. ~ f4, se paraba con facilidad: 39. ... , c3!; 40. ~ xd6, c2; 41. ~ f4, b!.b1. 39. 40.
... , hxg5 ~ xg5, ~ b2
Llevaba a tablas 40 .... , .llxf3; 41. ~ xf6.
pués de la correcta 41. e5!, las blancas conseguían tablas. Aquí tenemos las variantes principales indicadas por él: 41 .... , de; 42. <í)xe5, c3; 43. f6!, gf; 44. ~ xf6, c2; 45. <í) d3, ~ f6; 46. ,~he8+, ~ f7; 47 . .!leS; o 41 .... , d5; 42. e6 (42. f6?, ~ g6!; 43. fg, d4!), 42 .... , c3 (tampoco es mejor 42 .... , b!. d3), 43. f6!, gf; 44. ~ xf6, c2; 45. ~ xb2, b!. xb2; 46. <í) d4, ~ a4; 47. e7, ~ f7; 48. g4!, ~ e8; 49. <Z)f5, b!. b6; 50. ~ f2, ~ d7; 51. b!. c1, ~ xf5; 52. gf, b!. c6; 53. ~ e3; o 44. ... , ~ a3; 45. <í) d4, ~ c5; 46. ~ f2!, ~h7; 47. ~ e2!, b!.b2+; 48. ~ d3, c2; 49. <í) xc2! (49. b!.c 1?/ ~ g6+; 50 . ~ C3r b!.b 1; 51. b!. xc2, ~ b4 1 mateL 49. ... , ~ g6+; 50. ~ c3, b!. xc2+; 51. ~ b3,. ~ f5; 52. e7 con tablas. 1
41.
... , ~ a3
42.
e5, c3!
Pero no 42 .... , de; 43. b!.d8 ~ f8; 44. <í) xe5, c3; 45. <í) g6+r 'f/l¡ff7; 46. <í)e5+, con repetición de jugadas. 1
43.
exd6?, ...
Resistí a más 43. <í)d4, b!.b2; 46. edr ~ xd6.
41.
b!. d1, ...
Ahora la posición de las blancas resulta crítica, aunque en adelante dejé escapar una victoria segura. Kasparov, analizando con detalle este final, indicó que des48
43. 44. 45. 46. 47. 48.
c2 .ll d5, bl.b1 + 'f/l¡f f2, bt d1 b!. a5, c1 ~ ~ xc1, ~ xc1
bl. a6, ...
Perdí a tanto 48. b!. a 1, ~ e3+,
como 48. ~ aS, debido a 48 .... , ~ f8! (48 .... , ~ f7?; 49. 'Í'Je5+, con tablas), 49. 'Í'Je5, g xd6; 50. 'Í'J g6+, ~ f7; 51. ~ a7+, ~ f6. 48. 49.
... , ~ d5 f6, ...
A 49. g4, es muy fuerte 49 .... ,
diata del peón "d": 51 .... , b!.xd6. Después el combate podía seguir así: 52. '!Jc7 (52. 'Í'llxg5, Zl xf6+; 53. 'Í'J f3, ~ c6, o bien 52. b!. g7+, ~ f8; 53. 'Í'll xg5, b!. xf6+), 52 ...., ~ f4; 53. 'Í'll xg5, g d2+; 54. ~ e1, ~ xc7; 55. ~ xd2, ~ f4+. En todas las variantes las negras tienen una posición ganada.
~ f4!
49.
52. 53.
... , g6
54. Vale la pena conservar el peón, a 49 .... , gf, seguí a 50. d7!.
50.
g4, g5
También era posible acercar el rey al centro: 50 .... , ~ f7; 51. g5!, ~ f4 (51 .... , ~ xg5; 52. 'Í'llxg5+, b!. xg5; 53 . .lla7+, ~ xf6; 54. d7), 52. Zl a7+, ~ f8. 51.
Zl a7, ~ f4
f7+, ~ xf7 d7, ~ f8 'Í'J g1, b!. d2+?!
Una continuación dudosa. Y aquí en caso de 54 .... , ~ e6; 55. 'Í'llh3, '!J d2+ (o 55 .... , ~ d2), 56. ~ e1 (56. ~ f3?, ~ d5, mate), 56 .... , b!. xd7; 57. 'Í'llxf4, gf; 58. Zl a4, /l f7, las negras conseguían una ventaja decisiva. 55.
~ e1,
b!. d5?
De nuevo una imprecisión. Ganaba 55 .... , ~ e6!; 56. 'Í'llh3, b!.xd7; 57. 'Í'llxf4, gf (57 .... , b!.xa7; 58. 'Í'l xe6+, y 59. 'Í'J xg5), 58. lla4, ~ f7.
56.
'Í'll h3,
~ d2+?
Desde luego, en vez de esto debí jugar 56 .... , ~ e3! (para a 57. /la5, tener la respuesta 57 .... , ~ d2+), 57. ~ b7 (57. b!.a3, es mala por 57 . ..., ~ b6, seguido de 58 .... , ~ d8), 57 .... , ~ e6; 58. '!Jb5, ~ e7. 57.
Era más fuerte la captura inme-
~ e2, ~ g7?
Se llegaba a un final "torre con 49
alfil contra torre" despu茅s de 57 . ... , ~ c1; 58. '!J,c7, ~ e6; 59. '!J, xc1, ~ xg4+; 60. ~ f2, .i?i, xh3; 61. blc5, .!'lxd7; 62. btxg5. S贸lo ahora las blancas por fin alcanzan la libertad ...
50
58. 59. 60. 61 .
Tablas.
.!'la2!, ~ c1 .!'l c2, .i?i, a3 0J xg5!, ~ g8 .!'l c7, ~ g6.
Part ida 8 J. limman - A. Karp ov Bugojno, 1986 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9.
e4, eS ~ f3, ~ c6 ~ b5, a6 ~ a4, ~ f6 0-0, ~ e7
Zl e1, b5 ~ b3, d6 c3, 0-0 h3, ~ b7
La variante clásica de Chigorin 9. ... , ~ a5; 1O. ~ c2, c5; 11. d4, fl.c7, 11 .... , cd; 12. cd, fl. c7, o 11 .... , ~ c6, en la actualidad está pasada de moda, y de los principales grandes maestros sólo la usa sistemáticamente Romanishin. La estadística de los últimos años es poco atractiva para las negras.
1 O.
d4, ,1¿e8
11. 12.
~ bd2, ~ f8
a3, ...
(Ver diagrama) En los comentarios a las partidas precedentes analicé con detalle la aguda variante con 12. a4. El avance contenido del peón "a" también se encuentra con frecuencia. Las blancas preservan el
punto b4 del ataque del caballo negro y después se disponen a desarrollar la iniciativa en el flanco de dama. Otra posibilidad es eludir el agudo debate, jugar enseguida 12. ~ c2. Esa posición después de 11. ~ g5, ,1¿ f8; 12. ~ f3, .ll e8; 13. ~ bd2, ~ f8; 14. ~ c2, surgió en la partida Sokolov - Karpov (Bugojno, 1986). Después de 14 . ... , ~ b8; 15. a4, empleé una novedad poco afortunada, 15. ... , eS, las blancas cerraron el flanco de dama, 16. d5, ~ bd7; 17. b4, c4; 18. ~ f1, y después realizaron un enérgico ataque en el flanco de rey: 18 . ... , ~ h5; 19. ~ 3h2, g6; 20. ~ e3, 51
{/¿ e1; 21. ~ d2, g f8; 22. {/¿ h6, 0J g7; 23. 0J g3, ~ h8; 24. 0J g4, 0l f6; 25. 0J xf6, ~ xf6; 26. g f1, ~ d7; 27. f4, a5; 28. f5, ab; 29. cb, ba; 30. g f3, ~ g8; 31. ~ f2, ~ h4; 32. {/¿ xg7, ~ xg3; 33. bl xg3, ~ xg7; 34. f6+, ~ h8; 35. g ga3, 'l(\l b5; 36. ~ e3, bl g8; 37. h4, g5; 38. hg, g g6; 39. ~ f2, h6; 40 . g h1, ~ h7; 41. ~ d1, bí. ag8; 42. ~ h3, g h8; 43. ~ h5. Las negras abandonaron. El encuentro transcurrió con bastante brillantez y fue designado como el mejor en el tomo 41 del lnformator, no obstante, pienso que la partida le hizo un flaco servicio al joven gran maestro: al llegar a la superfina! del match de candidatos, que disputamos poco después, por desgracia, sobrevaloró sus fuerzas ... , con motivo de esta partida con Sokolov advertí que en lugar de 15 .... , c5, era correcta 15 .... , 0lbd7, aplazando la ruptura en el centro para el futuro. Algunas rondas después se celebró el encuentro Ljubojevic - Portisch, que terminó rápidamente en tablas: 15. ... , 0J bd7; 16. ~ d3, d5!? (también es buena la tradicional 16. ... , c6), 17. ab, de; 18. 0J xe4, 0J xe4; 19. ~ xe4, ~ xe4; 20. g xe4, ab; 21. ~ g5, f6; 22. ~ h4, .bl. xa1; 23. ~ xa1, ~ d6; 24. ~ a2+, ~ h8; 25. de, 0J xe5. Tablas. Después de 12. ~ c2, 0lb8 (también se juega con frecuencia 12. ... , g6), además de la aguda 13. a4, también se encuentra la tran52
quila 13. b3. Aquí traigo un e jemplo de mi práctica, que demuestra que en ese caso las negras no tienen nada que temer. Ljubojevic - Karpov (Tilburg, 1986): 13. ... , 0l bd7; 14. ~ b2, g6; 15. a4, bí.b8 (una novedad, a menudo sigue 15 .... , c5, 15 . ... , ~ g7, y 15 .... , c6), 16. ~ d3, c6; 17. ~ c2, 0lh5; 18. 0lh2 (después de 18. c4, ed; 19. 0J xd4, b4, las negras toman la iniciativa, pero es mejor 18. ~ f1, 0Jf4; 19. g3, 0le6; 20. h4), 18 . ... , 0J f4; 19. ~ f1, 0J e6; 20. 0l g4, ~ g7; 21. de. No da nada 21. 0lf3, h5; 22. 0Je3, ed; 23. cd (23. 0J xd4, 0Jec5, con mejor juego para las negras), 23 .... , c5; 24 . d5 (24. de, ~ xe4!), 24 . ... , 0J d4; 25. 0Jxd4, cd; 26. <0l d 1, bí. c8, y las negras tienen ventaja. 21 . ... , de; 22. <0l f3, h5; 23. <0l e3, ~ c7; 24 . .bl. ad1, bl.bd8; 25. h4. Tablas (25 .... , <0l dc5; 26. g3, l;;!, xd1; 27. g xd1, bí. d8, con plena igualdad). 12. 13.
... , h6 ~ c2,
0J b8
También merece atención 13 .... , d5!?. 14.
b4, ...
La combinación de jugadas a2-a3 y b2-b3 es dudoso que pueda representar un peligro para las negras. Aquí traigo un ejemplo que lo demuestra: Sax - Short (Saint John, 1983).
14. b3, 0!bd7; 15. d5. A 15. a4 Sax propone 15 .... , g5!; las negras también tienen una posición sólida tras 15. ~ b2, g6; 16. a4, ~ g7; 17. ~ d3 (17. d5, c6; 18. c4, ~ c7), 17 .... , c6; 18. ~ c2, ~ c7 (es mejor 18 .... , ~ c8), 19. b4 (es más fuerte 19. c4, ed; 20. cb, ab; 21. ab, J:l xa1; 22. ~ xa1; lvanchuk), 19 .... , d5!, con posibilidades iguales (Anand - lvanchuk, Novi Sad, 1990). Ahora, tras el cierre del centro, surge una posición conocida de la variante Smyslov, en la que las blancas han perdido un tiempo con a2-a3. 15 . ..., e6; 16. e4, ~ e7; 17. a4, ~ ee8; 18. ~ a2, ba; 19. ba, a5; 20. ~ a3, ~ a6; 21. 0l h2, g6; 22. 'Zj¡hf1, ed; 23. ed, h5. De nuevo las posibilidades son iguales. 14. 15.
..., 0! bd7 ~ b2, g6
Después de 15.... , 0!b6; 16. de, de; 17. c4, las blancas están mejor, pero a veces las negras pasan sin el fianchetto, continuando 15 . ... , e5; 16. be, ed; 17. ed4, de. Aquí jugaban 18. ~ b 1, y 18. d5. La novedad 18. ~ e 1, en la partida Nunn - Greenfeld (Groningen, 1988), después de 18 . ... , J:l e8; 19. ~ b1, 0!h5; 20. e5, 0! f4; 21. 0!e4, ed; 22. J:l xe8, @xe8; 23. @xd4, llevó a una mínima ventaja blanca. En la partida con Shvidler (Salónica, 1988) Nunn intentó mejorar el juego, 21. ~ e2, pero después de 21 . ... , g6; 22. 'lj¡ e4, ed; 23. ~ d2,
bl xe1; 24. bl xe1, 0! e6,1a iniciativa pasó al negro. 16.
e4, ...
En la partida Psajis - Razuvaiev (Moscú, 1986), las blancas emplearon la novedad 16. ~ b 1!. El objeto de la jugada es sobredefender el peón e4 y liberar al caballo d2 para reorganizarlo por la ruta 0!d2-b3-a5. Después de 16 . ... , ~ g7; 17. 0! b3, e6; 18. 0!a5, @e7; 19. ~ b3!, ~ ad8; 20. f! a2, · d5; 21 . ed, 0! xd5; 22. de, 0! xe5; 23. 0! xe5, ~ xe5; 24. e4, las blancas consiguieron una seria ventaja. Es más precisa 17 . ... , ~ e8 (17 .... , ~ b8; 18. 0!a5, ~ aS; 19. d5, 0lb6; 20. ~ b3, ~ d7; 21. ~ a2, ~ f8; 22. c4, be; 23. ~ xc4, 0! xc4; 24. ~ xc4, y las posibilidades blancas son mejores, Benjamín - Gligoric, Saint John, 1988), 18. 0! a5, ~ a8; 19. d5, 'Zj¡b6; 20. a4, ~ d7; 21. ab, ab; 22. ~ d3, 0!h5!; 23. e4, be; 24. 53
<l:} xc4, 'l'j f4; 25. 'l'j xb6, cb; 26. g, c1, con plena igualdad (PsajisPortisch, Sarajevo, 1986). Lamaniobra 'l'jh5 es afortunada en respuesta a 22. ~ d3, pero en caso de 22. ~ c1, no es tan buena: 22. ... , 'l'j h5; 23. ~ e3, 'l'j f4; 24. bl. a3, ~ h8; 25. ~ d1, g5 (de lo contrario 26. g, xf4, ef; 27. 'l'jd4), 26. ~ xf4, gf; 27. 'l'j h4, bl. g8; 28. 'l'j f5 y las negras no están bien (Short - Hjartarson, Tilburg, 1988). Es correcta 22 .... , c6!; 23. de, ~ xc6; 24. ~ e3, 'l'ja4. Merece atención para las blancas jugar enseguida 18. a4: 18 .... , 'l'j b6; 19. de, de; 20. 'l'je5!, ~ c6. Esta posición surgió en la partida Popovic - Gligoric (Yugoslavia, 1987). Aquí en lugar de 21. bl. d 1, a ventaja blanca, en opi nión de Gligoric, llevaba 21. 0J xa6!, 0J xa4; 22. g, xa4, ba; 23. e4!. En la partida Popovic - Gligoric (Belgrado, 1987), las blancas jugaron la novedad 16. bl.b 1 y después de 16 .... , g, g7; 17. a4, bl. b8?!; 18. e4!, be; 19. de, 0J xe5; 20. 0J xe5, de; 21. 0J xe4, también consiguieron ventaja. Era mejor para las negras prepararse contra c3-c4 mediante 16. ... , g c8: 17. c4, ed; 18. cb, ab; 19. 0J xd4, c6, igualando el juego también en caso de 17. de, 0J xe5; 18. 0J xe5, de; 19. c4, c5. La jugada 17. ~ a1, después de 17 .... , ~ g7; 18. d5 (18. a4, d5!, no vale la pena cambiar en e5), 18 .... , 0lb6!; 19. a4, e6; 20. a5, 0J e4!; 54
21. 0l xc4, be; 22. de, ~ xe6, llevó a ventaja negra (Short Greenfeld, Salónica, 1988). 16. 17. 18. 19.
..., exd4 cxb5, axb5 'l'j xd4, c6 a4, ...
Se empleó una mejora en una partida entre dos ajedrecistas húngaras: Madi -Veroci (Hungría, 1987): 19. ~ d3!, ~ g7; 20. bl. e1, ~ b6; 21. ~ b3, 'l'je5; 22. ~ f1, g ad8; 23. 0l 4f3, 'l'j xf3+ (era mejor reforzar el centro mediante 23 .... , 'l'jfd7), 24. ~ xf3, bl. e6 (24 .... , 0J xe4; 25. ~ xg7, <í) xd2; 26. e f6, ~ h7; 27. ~ xf7), 25 . 'l'j b3, bl. de8; 26. ~ d4, ~ a6; 27. 'í! c3, c5 (las negras no soportan la presión por la columna "e", pero también perdía 27 .... , bl. xe4; 28. ~ xf6, bl. xe1; 29. bl. xe1, bl. xe1; 30. ~ xg7), 30. be, ~ xe4; 31. f! b4, ~ a8; 32. cd, ~ f8; 33. ~ e5, 0J d5 (sólo podía resistir median-
te 33 .... , <í)d7) 34. ~ d4, ~ xg2? (segundo error seguido en los apuros de tiempo), 35. b\. xe6, ~ xf1; 36. ll xe8, y algunas jugadas después las negras abandonaron. 19. 20.
... , bxa4 ~ xa4, ~ b6
Esta jugada la utilizó por primera vez Kasparov en la primera partida del match con Timman (Hilversum, 1985), antes preferí a 20 .... , !leS. Después de 21. b5, cb; 22. ~ xb5, d5!; 23. Zl xa8, ~ xa8; 24. ~ a4, <í) cS; 25. ~ c2, bl, b8, las negras tomaron la iniciativa y ganaron la partida. En la tercera partida del match, Timman jugó de otra manera: 21. <í)c2. También repitió esa jugada en nuestro encuentro. 21.
<í) c2, 'f!J c7
Merece atención 21 .... , ~ a6, con intención de a 22. ~ b3, responder 22 .... , ~ d3, después de 23. bl, xa8, bl,xa8; 24. 'f!J f3, ~ xc2; 25. ~ xc2, 'f!J xb4; 26. ~ c3, 'f!Jc5; 27. <í)b3, 'f!J c4!, las negras están bien. 22.
~ b3,
bt xa1
En la tercera partida del mencionado match Timman - Kasparov, las negras eligieron 22 .... , ~ a6, y 23. bl. c1, ~ g7; 24. <í)e3, ~ b5, llevó a igualdad. Si bien es cierto que tras un juego con errores (en el
que las blancas también estuvieron al borde de la derrota) Timman alcanzó el éxito. 23.
~ xa1,
...
Después de 23. 'f!J xa1, ~ g7; 24. <í)c4, lleva a juego igualado 24 .... , d5, pero es interesante probar 24 .... , c5; 25. ~ a5 (25. be, <í) xc5, y las negras tienen ventaja, pero es mejor 25. e5, con juego igualado), 25 .... , 'f!J xa5; 26. ba, <í) xe4; 27. ~ xg7, ~ xg7; 28. f3, d5; 29. fe, de; 30. ~ xc4, bl. xe4, y la iniciativa está del lado negro. 28. 24.
... , ~ g7 <í) e3, ...
También se mantenía la igualdad tras 24. <í)c4, <í) xe4; 25. bl xe4 (25. f3, ~ xa 1; 26. 'f!J xa 1, d5!), 25 .... , Zhe4; 26. 'f!J xd6, 'f!J xd6 (no es posible 26 .... , 'fiJeS; 27. <í)b6!, con la amenaza 28. 'f!J xg6), 27. <í) xd6, ~ xa 1; 28. <í) xe4. 24.
... , eS
Conduce a una situación distendida. Era grande la tentación de capturar el peón, 24 .... , <í) xe4. En efecto, después de 25. <í)xe4, 'ª xe4; 26. ~ xf7+, ~ xf7; 27. 'f!Jf3+, <í) f6; 28. ~ xf6, bl xe3!; 29. m xe3, ~ xf6; 30. m xh6, c5, las negras tienen ventaja. Sin embargo 25. <í)g4!, permití a a las blancas obtener un peligroso ataque, por ejemplo: 25 .... , <í)ef6 (25 .... , d5; 26. ~ xg7, ~ xg7; 27. 55
~ xe4, de; 28. r!d4+, ~e5; 29. f4) , 26. ~xe8, ~ xe8; 27. ~ xg7 (pero no 27. r!f3?, d5; 28. ~xg7, ~ xg7;
29. f! e3, h5; 30. r!xe8, hg; 31. hg, 0lf6; 32. r!e2, f! f4 , con ventaja negra), 27 .... , ~ xg7; 28. ~ e4, h5; 29. ~ xf7!, ~xf7; 30. ~ g5+, ~e7; 31. r!f3!, ~ef6 ; 32. 0lxf6, ~xf6; 33. r!e3+, ganando.
56
~ xc5
25 .
bxc5,
26.
~ xf6, ~ xf6.
Tablas. Después de 27. ~d5, ~ xd5; 28. ~ xd5, la posición está completamente equilibrada.
Partida 9 G. Kasparov- A. Karpov Match por el campeonato mundiaL 12ª partida Nueva York, 1990
1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9.
e4, e5 0l f3, 0l c6 ~ b5, a6 ~ a4, 0l f6 0-0, ~ e7 .l::t e1, b5 ~ b3, d6 c3, 0-0 h3, 0l d7
Ocho veces he desarrollado la apertura española en mis anteriores matches con Kasparov. En la mitad del encuentro la discusión giró alrededor de la jugada 9 .... , ~ b7 (ver Partidas 5-7), y entre medias surgió 9.... , 0ld7. En los comentarios a esta partida se concentra todo el material relativo a la jugada del caballo. 10. 11.
d4, ~ f6 a4, ~ b7
(Ver diagrama) Esta serie de jugadas, 9 .... , 0ld7, 1O.... , ~ f6, 11 .... , ~ b 7, las preparé especialmente para el match. Antes había jugado 11 .... , .l::tb8,
por ejemplo: 12. ab, ab; 13. 0l e7; 14. d5. De una forma entretenida terminó la partida Sax - Karpov (Skelleftea, 1989): 14. 0lg5, h6; 15. ~ xf7+, bi xf7; 16. 0le6, 'í! e8; 17. 0l xc7, 'í! d8; 18. 0l e6. Tablas. 14 . ... , 0l c5!; 15. ~ c2, c6; 16. b4, 0l a6; 17. de, 0l xc6; 18. <í) a3, 0l c7, y las oportunidades son iguales (Nunn - Karpov, Rotterdam, 1989). ~ e3,
12.
0l a3, ...
57
En el match Kasparov buscó diferentes caminos para conseguir la iniciativa en este sistema; recordémoslos: Kasparov - Karpov (5,6). 12. ab, ab; 13. il xa8, ~ xa8; 14. d5. En la partida Hjartarson - Short (Tilburg, 1988), las blancas jugaron 14. 'i!li' d3?, y después de 14 .... , ed!; 15. ~ xb5 ( 15. cd, ~ xd4!; 16. ~ xd4, ~ c5; 17. 'i!li' xb5, ,Q¡, xd4, ganando), 15 .... , ~ c5; 16. ,Q¡,d5, z::l, b8, la ventaja pasó al lado negro. Tampoco es peligroso para ellas 14. ~ a3, b4; 15. ~ c4, be; 16. be, ~ a5; 17. ~ xa5, ~ xa5 (Tahl- Karpov, Skelleftea, 1989). 14 . ... , ~ a5; 15. ~ c2, ~ c4!.
Antes se había probado 15. bt b8, y 15 .... , ~ e7. El traslado del caballo a una posición más activa (¡preparación casera!) resuelve enseguida los problemas de las negras. 16. b3. Después de 16. ~ bd2, las blancas también tienen que calcu58
lar el cambio de caballos. 16 . ... , ~ cb6; 17. ~ a3, ,Q¡, a6!; 18. ~ h2, c6; 19. de, ~ xc6; 20. ~ d2, ~ e7. La iniciativa ya pertenece a las negras. Si bien es cierto que más tarde jugué sin precisión y tuve que conformarme con las tablas en el final. Dado que la balanza de la apertura se inclinó al lado negro, Kasparov cambió de plan en la octava partida. Kasparov - Karpov (5,8) . 12. ~ e3, ~ a5; 13. ,Q¡, c2, ~ c4; 14. ~ c1, d5!.
En una posición conocida, donde las negras habían jugado antes 14 .... , c6, 14 .... , ed o 14 .... , ~cb6, de nuevo empleo una novedad. 15. de, ~ dxe5. Es más lógica 15. ..., de4!; 16. ef ( 16. ,Q¡, xe4, ,Q¡, xe4; 17. bt xe4, ~ dxe5, y ya las negras están mejor), 16 .... , ef; 17. fg, z::l, e8, recibiendo suficiente compensación por el peón a causa del ataque en el flanco de rey. Si bien es cierto que es mejor
para las blancas 17. b3, ~ 4e5, y ahora 18. fg, Jle8; 19. ~ bd2. De una forma u otra, en la siguiente ocasión en la que se encontró con 9 .... , ~ d7, es decir, en la partida comentada, Kasparov rehusó la jugada 12. ~ e3, y eligió la continuación 12. ~ a3. 16. ~ xe5, ~ xe5; 17. ab, ab. Aquí 17 .... , de ya es peor: 18. ~ xd8, bl, fxd8; 19. ba, ~ d3; 20. ~ xd3, ed; 21. a7!, y después ~ e3, con ventaja. 18. ~ xa8, ~ xa8; 19. f4, ~ g6; 20. e5, ~ h4; 21. bi f1, ~ e7; 22. ~ d2, ~ c5+. Era imprescindible jugar enseguida 22 .... , d4!?, ahora después de 23. 11!1l' h2, d4; 24. ~ e2, las blancas ya están mejor. En adelante el juego transcurrió muy tenso, y después de algunas inexactitudes de Kasparov las negras consiguieron un final ganado, pero finalmente todo terminó en paz. 12.
exd4
Y de nuevo empleo una novedad (recomendada por De Firmian). En la partida De Firmian - Benjamín (USA, 1988), siguió 12 .... , ~ b8, y 13. ~ g5!, ed; 14. ~ xf6, ~ xf6; 15. cd, llevó a clara ventaja blanca. 13.
cxd4,
J. J. .!
li. = a5; 18. ~ b 1, ~ c5!, las negras tienen excelentes posibilidades. Es más exacta 14. Qi, f4, ~ a5; 15. ~ c2, b4; 16. ~ b1, c5; 17. ~ bd2, con juego confuso. Cuando surgió esta posición sobre el tablero en la siguiente ocasión, decidí sorprender a mi adversario con una novedad consecutiva, jugando ~ d7-b6. Pero como dice el refrán, quien bien tiene y mal escoge, del mal que le venga no se enoje; yo mismo caí en una preparación casera. Kasparov - Karpov (5, 18). 13 . ... , ~ b6?!; 14. ~ f4, ba; 15. ~ a4, ~ xa4 (es más sólida enseguida 15 .... , a5), 16. 9 xa4, a5; 17. ~ d2!, .::i e8; 18. d5, ~ b4; 19. ~ xb4, ab; 20. ~ xb4, ~ b8.
~ a5
(Ver diagrama) (Ver diagrama) Aquí también recomendó 13 .... , ~ e8, y en caso de 14. ~ d2, bl,e 7; 15. ~ c2, ~ e8; 16. b3, ba; 17. ba,
Esta posición la analizamos en los preparativos a la partida. Consideramos que las negras tienen suficiente compensación por el 59
jugadas) las negras tuvieron que aceptar la derrota. 14. 1S. 16. 17.
Ql. a2, b4 0l e4, 0l xe4 ~ xe4, bi eS ~ b3, ...
Previniendo d6-d5, que era posible a 17. ~ c2. 17. 18.
peón: después de la lógica 21. ~ d2, seguía 21 .... , c6, la posición se abre, y la presencia de la pareja de alfiles asegura buenas oportunidades. 21. ~ e4!. Una jugada inesperada, que resulta decisiva para la suerte de la partida. Las blancas devuelven el peón, pero después de 21 .... , ~ xb2; 22. lla2, Ql. xa3; 23. ~ xa3, mi peón c7 está atrapado en la séptima fila, y no se ve cómo desarrollarse. Tampoco es mejor 22 .... , Ql. f6; 23. 0lb5, ~ d7; 24. 'IJ, a7, y las negras no salen bien: 24 .... , ~ xd5?; 25. ed, bl. xb5; 26. 'IJ, xe8+, ~ xe8; 27. ~ xb5!, ganando. Por otra parte, la jugada hecha en la partida tampoco es mejor. 21 . ... , ~ e8?!; 22. 0l d4, ~ a6; 23. ~ e3, eS (después de 23 .... , ~ b7; 24. 0lac2, ~ b6; 25. b3, y las blancas tienen un sano peón de más), 24. de, ~ xd4; 2S. ~ xd4, ~ xe6; 26. b4!, y a pesar de una dura resistencia (alrededor de 30 60
... , 'IJ, xe4 ~ xf7+, ~ h8
No valí a 18 .... , ~ f8, por 19. ~ e3, ~ e7; 20. ~ d5, ~ xdS; 21. ~ xd5, ~ e8; 22. a5!, y también es muy fuerte la jugada 19. ~ g8!. 19.
~ e3,
...
No era posible tomar el peón, 19. 20. 0lxe1, 'IJ,b8; y las negras ya toman la iniciativa.
~ xb4, bl. xe 1+; 21. ~ d2, ~ e 7,
19. 20.
... , bl. e7 ~ dS, e6
A juego confuso llevaba 20 .... , 21. ~ xd5, a5; 22. 'IJ,ac1, 0lb6; 23. ~ b5, ~ g8; 24. 'IJ, c6, 0ld5; 25. bl, a6, bl,xa6; 26. ~ xa6, g5, y después h7-h5. ~ xd5;
21. 22. 23. 24. 25. 26. 27.
,¡l e6, 0l f8 ~ g4, aS l:i ae 1, 0l g6 ~ hS, bl, e8 ~ g4, bl, b8 ~ e2, bl, e7 ~ f5, 0le7
28.
9 d3?, ...
34.
'ÍJl g5,
~ d5!
Tras 34 .... , Zlde8; 35. 'ÍJlf7+, ~ g8; 36. 'ÍJlh6+, ~ f8; 37. ~ d6, gh, las negras conseguían un final mejor, pero 36. 'ÍJl g5+, llevaba a tablas. 35.
No 35. 37. 39.
es peligroso para las negras 'ÍJlf7+, g xf7; 36. ~ xf7, ~ xf7; ~ c7, 'ÍJl xa4; 38. ~ xd8, ~ xd8; 'ªcd1, ~ f6; 40. 'iJ. d7, ~ g6. 35. 36. 37.
Después de esta imprecisión conseguí igualar el juego. Las blancas conservaban una pequeña ventaja continuando 28. 9 h5!, g6; 29. 9 h6, ~ c8 (no es mejor 29. ... , 9 f8; 30. 9 xf8+, Zhf8; 31. ~ f4, con una presión desagradablé sobre el peón d6), 30. ~ g5, 'ÍJl g8; 31. ~ h4, ~ xg4; 32. hg. 28.
... , 'ÍJl d5
29. 30.
~ d2, ~ e6,
31. 32. 33.
eS
'ÍJl b6 dxc5, dxc5 9 xd8+, ~ xd8 ~ f4, 'tJ. e7
~ xd5, ...
... , ~ xd5 'tJ. xe7, ~ xe7 'iJ. e1
Tablas. Por lo visto, la posición final es favorable a las negras, por ejemplo: 37 .... , ~ f8! (37 .... , 'ÍJl c8; 38. 'ªe6, con la amenaza 'ªc6), 38 . 'ª e8, ~ g8; 39. 'ªb8 (39. 'ÍJl e6, ~ f7), 39 .... , 'ÍJl d7; 40. 'ªc8, 'ÍJlb6, 41. 'iJ.b8, y ahora las negras eligen entre la repetición de jugadas, 41 .... , 'ÍJld7, y la atractiva variante 41 ... , 'ÍJlxa4; 42. 'ÍJl e6, ~ f7; 43. 'ÍJl xf8, 'ÍJlxb2. Sin embargo en los apuros de tiempo decidí no arriesgarme y acepté la propuesta de tablas.
61
Partida 10 E. Geller - M. Tahl Sochi, 1986 La variante abierta de la apertura española fue una de las más populares en los matches por la corona en Baguio y Merano, y en el segundo de ellos se puede decir que jugó un papel decisivo. Sin embargo en mis encuentros con Kasparov esta variante aún no ha aparecido. En los últimos diez años es raro huésped en mi práctica, sólo dos partidas con Yusupov en el año 1983, pero no obstante sigo con atención todo lo que sucede. Además, en casi todas las partidas que se ofrecen a continuación en uno u otro grado se desarrollan ideas que nacieron en mis matches con Korchnoi. A propósito, a pesar del fracaso de Merano, Korchnoi siguió fiel a su sistema preferido y la siguió empleando con frecuencia. Pero el más ardiente defensor de la variante abierta es el gran maestro Yusupov, y muchas de sus partidas han constituido una valiosa aportación a la teoría. Comentando esta variante de la apertura española, en especial no me refiero a las partidas más recientes (en su tiempo analicé muchas de ellas), y el material 62
nuevo más importante se intercala en los comentarios.
1. 2. 3.
4. 5. 6. 7.
8. 9.
e4, e5 <í) f3, <í) c6 ~ b5, ~ a4,
a6 <í) f6 0-0, 0i xe4 d4, b5
~ b3, d5 dxe5, ~ e6 0ibd2, ...
También se juega con frecuencia 9. c3, de la que hablaremos en la Partida 13. En lo que respecta a la vieja continuación 9. ~ e2, en la actualidad está pasada de moda.
Recuerdo que hace treinta años se introdujo en la teoría una larga variante forzada, 9. t! e2, tlb e7; 10. bi d1, 0l e5; 11. ~ xd5, ~ xd5; 12. 0l e3, Q¡, e4; 13. bi xd8+, bi xd8; 14. t! e3, b4; 15. b3, ~ e6; 16. 0l e4, ],j, d1 +; 17. 0l e1, 0l d4; 18. ~ b2, 0l xe2; 19. t! e2, ],j, xa1; 20. ~ xa1, 0l xa1; 21. 0l xe5, ~ xe5; 22. 0l d3, Q¡, b6; 23 . 0l xb4, 0-0; 24. 0l e6, f6; 25. h4, fe; 26. t! xe5, bi f6. Aquí a las continuaciones conocidas 27. g4, y 27. 0ld4, añadiremos otra ... Timman - Yusupov (Montpellier, 1985): 27. 0l d8, ~ f7 (27 .... , Q¡, c8; 28. t! d5+, ~ f8; 29. 0lc6!), 28. 0l xf7, ~ xf7 (28 .... , bi xf7; 29. t! xa1, bi xf2; 30. ~ h2, a5; 31. t! e5), 29. t! xa1, bi xf2; 30. ~ h2, a5; 31. t! e5, h6; 32. a4 (32. a3!), 32 .... , g6; 33. t! d5+, i?g7; 34. t! e5+, i? f7; 35. h5, bi f5!, con igualdad. De esta manera, la valoración del juego forzado de la apertura al final, las negras no corren peligro, no ha cambiado con el transcurso de los años. La jugada 9. a4, es la predilecta de Ljubojevic, pero no disfruta de especiales ventajas, por ejemplo: 9 .... , b4; 1 O. a5, 0l e5; 11. Q¡, g5, t!' d7; 12. 0lbd2, h6; 13. ~ h4, Q¡, e7; 14. ~ xe7, t! xe7 (o 14 .... , 0l xe7; 15. 0id4, 0-0; 16. c3, be; 17. be, bi ab8; 18. ~ c2, tlb g4; 19. t! e 1, bi b2; 20. t! e3, Q¡, f5!, y las negras tienen todo en orden, Ljubojevic - Yusupov, Linares, 1991 ), 15. e3, be; 16. be,
0l xb3!; 17. 0l xb3, 0-0; 18. .tí e1, bi aba; 19. 0i fd4, 0l a7!; 20. 0l e2? (debió cambiar en e6), 20 .... , e5; 21. 0l f4, bi fd8; 22. t! e2, 0l e6, y las negras tienen ventaja (Ljubojevic - Hjartarson, Amsterdam, 1991 ). Vale la pena recordar 9. ~ e3, ~ e7; 10. e3, 0-0; 11. 0l bd2 (la novena y décima jugada de las blancas se hicieron en otro orden). Esta posición es bien conocida por la teoría, y se dan las continuaciones 11 .... , 0l xd2, 11 . ... , t!' d7 y 11 .... , ~ g4. En la partida Yim - Kengen (IX Olimpiada por correspondencia, 19821985), se encuentra 11 .... , 0l e5; 12. ~ e2, t! d7. Después de 13. b4, 0l a4; 14. Q¡, xa4, ba; 15. t! xa4, 0l xe5; 16. ~ xd7, 0l xd7; 17. 0lb3, e5; 18. 0l xe5, 0l xe5; 19. be, .fj, fe8; 20. 0l d4, tlb xe5; 21. bi fb1, Q¡, xd4; 22. ~ xd4, lj, ab8; 23 . .tíb3, lj, b5!, las oportunidades de ambos bandos son iguales. Pasó una seria prueba una aguda variante en el match de cuartos de final de candidatos Dolmatov - Yusupov (Wijk aan Zee, 1991), donde se probaron tres veces las jugadas 9. ~ e3, Q¡, e7; 1 O. e3, t! d7; 11. 0lbd2, bt d8. Aquí antes se jugaba 12. 0l xe4 ( 12 .... , de; 13. t! xd7, ~ xd7; 14. 0lg5, 0l xe5; 15. tib d4, ~ xg5; 16. ~ xe5, 0-0; 17. ~ xc7, bi eS; 18. ~ b6, }j, fe8, con igualdad, Timman Korchnoi, Reykjavik, 1987), o 12. h3, 0l xd2; 13. t! xd2, 0la5; 14. ~ g5, e5; 15. bi fe1, 0l e6; 16.
63
bt ad 1, con una m1 mm a ventaja blanca, (Short - Ljubojevic, Linares, 1989). Dolmatov preparó para el match la jugada 12. bl e 1. En la primera partida después de 12 . ... , 0-0; 13. ~ e2, ~ f5; 14. 0J xe4, ~ xe4; 15. ~ xe4, de; 16. ~ xd7, bl. xd7; 17. e6!, fe; 18. 0J d2, 0J e5; 19. 0J xe4, 0J d3; 20. J:l e2, las blancas consiguieron ventaja. En la tercera partida Yusupov contestó 13. ... , 0J xd2; 14. ~ xd2, ~ f5, pero como resultado de 15. bt ad1, bt fe8; 16. h3, h6; 17. ~ f4, ~ f8; 18. ~ g3!, las negras tampoco resolvieron los problemas de la apertura. Por fin en la quinta partida después de 16 . ... , ~ e6 (en lugar de 16 .... , h6), 17. ~ g5, ~ xe2; 18. 9 xe2, ~ g6!; 19. 9 xg6, hg; 20. ~ f4, ~ e5, Yusupov consiguió igualar el juego. 9. 1 O.
... , 0J e5 e3, d4
La continuación más popular, en la Partida 12, que se estudia la vieja 10 .... , ~ e7. (Ver diagrama) 11.
~ xe6,
...
Antes de seguir adelante vale la pena detenerse en la fantástica jugada 11. 0J g5!?. Esta maniobra fue ideada por mi segundo l. Zaitsev en la preparación para el match de Merano. El caballo se 64
.·.~
¡la··
pone voluntariamente bajo el ataque de la dama; ¡esto no se le ocurre a cualquiera! No obstante, Korchnoi decidió no capturar el caballo. Veamos esta partida con más detalle. 11 . ... , de; 12. 0J xe6, fe; 13. be, 9 d3; 14. 0J f3. En caso de 14. ~ c2, 9 xc3; 15. 9 h5+, g6; 16. ~ xg6+, hg; 17. 9 xh8, 9 xa1, las blancas no tendrían compensación por el material entregado, pero merecí a atención 14. 9 g4. 14 . ... , 9 xd1; 15. ~ xd1, ~ e7; 16. ~ e3, 0J d3; 17. ~ b3, ~ f7; 18. bt ad1, 0J dxe5; 19. 0J xe5, 20. ~ f4, 0J e4. Era mala 20 .... , ~ d6; 21. ~ xe5, ~ xe5; 22. b!. fe1, ~ xc3; 23. bl xe6, ~ f8; 24. bl d7!, etc ... Aquí cambié en c4, 21. ~ xe4, be, y las posibilidades se igualaron. Tahl recomendó 21. bt d7, c5; 22. bt e 1, b!. ad8; 23. btb 7, b!. d3; 24. ~ g5, bl. e8; 25. bt e4, bt xc3; 26. h3, y las blancas mantienen peligrosas amenazas. Sin embargo en
lugar de 23 .... , Zl d3, es más fuerte 23 .... , l:ld5!, y las negras pueden mirar sin miedo al futuro. Pero quizás se preguntan si se puede tomar el caballo. Un año después de Baguio se jugó la partida Timman- Smyslov (RFA, 1979), en la que siguió 11. ... , ~ xg5; 12. e t3, 0-0-0. Después de 12 .... , ~ d7; 13 . .ílxf7+, '1!1 e7; 14. 0Jb3 (también es fuerte 14. ~ d5, 0J xe5; 15. ~ e2, d3; 16. ~ e1, c6; 17. f4, ~ h6; 18 . .ílf3!, con gran ventaja, Wolf - Flear, Londres, 1990), 14 .... , e xe5; 15. 0J xc5, ~ xc5; 16. l:l e1+, '1!1 d8; 17. cd, ~ d6; 18. ~ g5+, '1!1 c8; 19. Zl ac 1!, o 12 .... , '1!1d7; 13 . .íld5!, .ílxd5; 14. ~ xd5+, .íld6; 15. cd, 0Jxd4; 16. 0J c4!, 0Je2+; 17. '1flh1, ~ f5; 18. 0Jxd6, ~ d3; 19. e xf7+, '1!1 c6; 20 . .íle3, l:laf8; 21. ~ e7!, ~ d5; 22. l:lad1, 0J d3; 23. e6, las blancas tienen un fuerte ataque (Brondum - Brinck-Ciaussen, Dinamarca, 1979). 13. ~ xe6+, fe; 14. ~ xc6, ~ xe5; 15. b4, ~ d5; 16. ~ xd5, ed; 17. be, de; 18. 0J b3, d4; 19 . .íl a3, ~ e7; 20 . .ílb4, .íl f6; 21. a4, ~ d7; 22. ab, ab; 23. l:l a6, c6; 24. Zl d1, '1!1 e6; 25. Zl xc6+, '1!1 d5; 26. bt xf6!, '1!1 c4!, y a pesar de que las blancas tienen dos piezas de más las oportunidades se pueden considerar iguales. Así, la aceptación del caballo aguantó la prueba. Sin embargo más tarde A. Lilientahl introdujo una corrección sustancial: 23. bt fd1!, ~ e6; 24. l:l ac1, ~ f7;
25. '1fl f1, bthe8; 26. bt d3, bt e4; 27. g3. Los peones centrales de las negras están estancados, y su posición es muy difícil. Pienso que la "teoría" del sacrificio del caballo aún no se ha agotado ... A propósito, hace tiempo que se sabe que no da nada a las blancas 11. cd, 0J xd4; 12. 0J xd4, e xd4; 13 . .íl xe6, 0J xe6; 14. e t3, g d8; 15. a4, ~ b4!; 16. ab, ab; 17. ~ c6+, e d7; 18. ~ xd7, Zl xd7, con igualdad (una vieja variante de V. Nenarokov). Regresemos por fin a la jugada 11. ~ xe6, que casi no se encuentra en las partidas de los últimos años. 11. 12.
..., 0J xe6 cxd4, ...
También se encuentra 12. a4 y 12. 0Jb3, pero las blancas no consiguen nada. 12.
..., 0J cxd4
(Ver diagrama) Una de las posiciones que rechaza la actual teoría de la variante abierta. Aquí después de 13. 0J xd4, ~ xd4; 14. ~ f3, bt d8; T5. a4, se llega a una posición de la famosa partida Capablanca Lasker (San Petersburgo, 1914). En el match de Merano empleé aquí dos novedades peligrosas: 13. 0J e4 ( 14ª y 16ª partidas) y 13. a4 ( 18ª partida). En adelante 65
.!
el salto del caballo a e4 se difundió bastante. Precisamente sobre él gira el material principal. Pero veamos cómo se desarrollan los acontecimientos en caso de a2-a4. 13. a4, ~ e7. También consideramos otros saltos del alfil, a c5 y b4. La jugada 13. ..., bí:b8, se encuentra en la partida Nunn Timman (Amsterdam, 1985), después de 14. ab, ab; 15. 'i}e4, ~ e7; 16. 'i}d6+, cd; 17. 'i} xd4, 'i} xd4; 18. ~ xd4, de; 19. ~ xe5, 0-0; 20. ~ f4, bl:b7; 21. ~ e4, g d7; 22. ~ c6, los adversarios acordaron tablas. A mí me parece más lógica 13 .... , !14 e7. 14. 'i} xd4. Merece atención 14. ab, si bien es cierto que en la partida Sax - Yusupov (Sofía, 1984), después de 14 .... , 'i} xb5; (14 .... , ab; 15. g xa8, ~ xa8; 16. 'i} xd4, 'i}xd4; 17. ~ g4, 'i}e6; 18. f4, las blancas están mejor), 15. ~ c2, O-O; 16. 'i}b3, c5; 17. !14e3, ~ b6; 18. b.t a4, g fb8; 19. 'i}a5, 66
bl. c8; 20. ~ e4, 'i}bd4; 21. 'i}xd4, cb; 22. /J4 xd4, las posibilidades se igualan. En la partida Hübner Yusupov (Tilburg, 1987), las blancas jugaron de otra forma, 15. 'i} e4, pero esto tampoco les dio nada. Después de 15 .... , 0-0; 16. ~ e3, c5; 17. b!, a4, ~ b8; 18. ~ a 1, 'i}bd4; 19. ~ xd4, cd; 20. 'i}xd4, 'i} xd4; 21. b!, xd4, ~ xe5; 22 . .llfd1, b.t fd8; 23. b3, .lh d4; 24. ~ xd4, ~ xd4, los adversarios acordaron tablas. 14 .... , ~ xd4. La captura correcta. En la 18ª partida del match de Merano, Korchnoi tomó en d4 con caballo: 14. ..., 'i} xd4; 15. 'i}e4, (también es posible 15. ab, ab; 16. b'!, xa8, ~ xa8; 17. ~ g4, 'i}e6; 18. f4), 15 .... , 'l}e6; 16. ~ e3, 0-0; 17. f4, ~ xd1; 18. Zl fxd1, bí: fb8; 19. bí: d7. Las blancas tienen una sensible ventaja, que d<lJcidió enseguida. Esta victoria fue la sexta en la cuenta y cerró el match de Merano. Más tarde se jugaron algunas partidas, en las que las negras se enrocaban enseguida, 15 .... , 0-0. Después de 16. ab, 'i}xb5; 17. ~ e3, ~ eS; 18. ~ c2, ~ e6; 19. f4, f6; 20. ef, !14xf6; 21. f5, ~ e5; 22. /J4c5, aún tienen ciertos problemas (lvanchuk - Yusupov, Linares, 1989): 19 .... , bt ad8; 20. bí:a4, bí: d7; 21. bí: fa1, ~ d5; 22. h3, f6; 23. ef, ~ xf6; 24. 'i} xf6+, bí: xf6; 25. bí: xa6, bí:xa6; 26. bí: xa6, 'i}d4. Pero ya en el torneo de Hastings Chandler empleó contra Yusupov una mejora sustancial: 18. ~ d5!?, bí: d8? (la reacción correcta, en
opm1on de Yusupov, era 18 .... , 'f! f5!; 19. 0lg3, 'f! g6, y sólo después blad8 con posibilidades recíprocas), 19. 'f!c6, 'f! f5 (ahora este ataque de la dama no es tan afortunado, es mejor 19 .... , 0ld4; 20. ~ xd4, bl, xd4; 21. f4, a5), 20. f4. Las negras tienen una posición difícil, y en esta ocasión Yusupov no consiguió mantenerse. 15. ab, 'f! xe5; 16. ba, 0-0; 17. 0l f3, 'f!b5; 18. 'f!a4, 'f! xa4; 19. bt xa4, 0lc5. Con iguales oportunidades. Esto se demostró en la partida Psajis - Dolmatov, jugada en el 49 2 campeonato de la URSS (1981) poco después del match de Merano. Las blancas emplearon una novedad ocho años después (!) en la partida Ehlvest Marin (Tallin, 1989): 17. 'f!a4! (inmediatamente) 17 .... , bl, fb8; 18. a7, blb7; 19. 0lf3, 'f!d5; 20. ~ e3, ~ c5; 21. bl, ad 1, 'f!b3; 22. 'f! xb3, bl, xb3; 23. ~ xc5, 0lxc5; 24. 0ld4, con ventaja. 13.
0le4, ~ e7
Las negras hacen esta jugada casi automáticamente, pero no está todo claro en caso de 13 .... , 'f!d5; 14. 0l xd4, 0lxd4. La posición después de 15. 0lc3, 'f!d7; 16. ~ e3, ~ c5, surgió dos veces en el 49 2 campeonato de la URSS. (Ver diagrama) Romanishin - Yusupov: 17. 'f! h5 (17. 'f!d2, bl, d8; 18. bl, ad1, 0-0),
17 . ... , 'f! e6; 18. bt ad1, bt d8; 19. b!, d2, 0-0; 20. bl, fd1, g6; 21. '!' h4, ~ e7; 22. 'f! e4, 0l f5. Beliavsky - Dorfman: 17. 0l e4, ~ a7; 18. bl, c1, 0-0; 19. 0l c5, ~ xc5; 20. bl, xc5, bl, fd8; 21. ~ xd4, 'f! xd4; 22. 'f! xd4, Zbd4; 23. bl, xc7, bl, d2; 24. bl, fc1, bl e8; 25. bl, 7c2, bl, xc2; 26. Jd. xc2, f6. En los dos casos las negras resolvieron brillantemente los problemas de la apertura. Tal vez, en lugar de 15. 0lc3, sea más precisa 15. ~ e1, por ejemplo: 15 .... , ~ b4 (15 .... , ~ e7; 16. 0lf6+!), 16. 0lc3, 'f! d8 (después de 16 .... , 'f!d7; 17. ~ e3, ~ c5, las blancas en comparación con la posición del diagrama tienen un tiempo de más, si bien es cierto que no es sustancial), 17. ~ g5!, 'f! xg5; 18. 'f! xd4, ~ xc3; 19. 'f! xc3, 0-0; 20. Jd.ac 1 (Malchikov Odaev, URSS, 1983). La debilidad de los peones negros en el flanco de dama se advierte con claridad. 67
14.
~ e31 ~ f5
En la 14ª partida de Merano, donde esta posición se dio por vez primera, Korchnoi tomó errónea mente 14 .... , ~ xf3+. Después siguió: 15. ~ xf31 0-0; 16. b:l fd11 ~ e8; 17. ~ f6+l1 ~ xf6 (17 . ... , gf; 18. ef, ~ d6; 19. b:l d4 , ~ h8; 20. b:lh4, l:lg8; 21 . l:lxh7+, ~ xh7; 22. ~ h5 , mate), 18. ef ~ c8; 19. gf b:l d8; 20. h4!, con clara ventaja blanca. La retirada del caballo a f5 se dio en la 16ª partida. 1
15. 16.
1
... , ~ xe3 fxe3, ...
Aunque parezca extraño, los peones doblados y aislados "e" también tienen sus ventajas: to-
68
17.
.!
...,
~ c8
.!
~ c21 0-0 b:l ad11 ...
En la 16ª partida de Merano jugué 16. ~ eg51 ~ xg5; 17. ~ xg51 g6 (por lo v isto, se obtiene más fácil la igualdad tras 17 .... , ~ xg5; 18. ~ xf5, ~ e6; 19. ~ e4, c5; 20. f4, f5), 18. ~ xe61 fe (18 . ... , ~ xe3?; 19. ~ c6), 19. b:l ae 1 (quizás sea mejor 19. ~ c5!?), 19. "'1 ~ d5; 20. b31 b:l ac8; 21. ~ c5, b:l fd8; 22. h3 1 ~ c6; 23. b41 b:l d7; 24. b:l d1, b:l cd8, y en esta ocasión las negras superaron las dificultades de la apertura. Poco promete 16. ~ f6+, ~ xf6; 17. ~ xf5 1 ~ e7; 18. b:lad1, ~ c8; 19. ~ d2, b:l d8 (Van der Wiel Korchnoi, Sarajevo, 1984). 16. 17.
man bajo control las casillas d4, d6 y f6, y además se abre para las maniobras la columna "f".
Esta posición se encuentra con frecuencia en los últimos años. Esta partida nos acerca a ella. En la siguiente hablaremos con más detalle. 18.
h3, ...
Esta jugada la empleé por prime ra vez en una partida con Yusupov (Linares, 1983). Después de 18. l:i d3, el juego se igualó rápidamente en la partida Hübner Hort (Wijk aan Zee, 1986): 18 .... , c5; 19. ~ d6, ~ b8; 20. b:l fd1, b:l a7; 21. b:l d5, ~ a8; 22. a4, b:l d8. Reiteradamente se encuen tra 18. ~ d4, más adelante veremos ejemplos. 18.
..., bt d8
19. 20.
<íJ h2, b!. xd1 ~ xd1, ...
Es razonable dejar la torre en la columna "f", para concentrar todas las fuerzas para la creación de una fuerza de choque en el flanco de rey. 20.
... , <íJ c5
26. 27. 28.
29.
~ xf7, ~ xf7 ~ xf7, h5
<í) f2, b!. d5 b!. f5, g6?
Después de 29 .... , b!. d2!, es dudoso que las negras se arriesgaran a perder. La debilidad del punto f6 se nota al instante.
La jugada 20 .... , ~ e8, se examina en la siguiente partida. Las negras solo necesitan un tiempo, <íJg5, y se hará perceptible la debilidad del peón "e". También es interesante ahora 20 .... , <íJ g5 y, si 21. • d5, ~ e8; 22. <íJ g4, ~ d8; 23. ~ b7, bl.b8. 21. 22.
• f3, ~ es <íJ g3, b!. d8
Era más elástica 22 .... ,. bl.b8 y 23 . ... , bl.b6, o 22 .... , a5 y 23 .... , b!.a6, para incluir la torre en la defensa del flanco de rey. El segundo camino se encuentra en la partida que examinaremos a continuación. 23. 24. 25.
<íJg4, <íJe6 <í) f5, ~ h8 <íJ xe7, ...
30.
En esta jugada intermedia consiste todo. Se gana un tiempo para dejar defendido el peón y sólo después la torre va a f6. 30.
Las blancas deciden pasar al final con peón de más, pero era más fuerte 25. h4 (25. ... , .l:id7; 26. ~ c6), o 25. • g3, aumentando las amenazas en el flanco de rey. 25.
... , ~ xe7
e4!, ...
... , b!. c5
A 30 .... , b!. d2, también es muy desagradable 31. bl. f6. 31. 32. 33.
b!. f6, ~ xe5 g xg6, <íJc5 g c6, ... 69
Ganaba de una forma más sencilla 33. b:t g3. 33. 34.
35. 36. 37.
~ xe4 ~ xe4, b:t xe4 ~ f2, bl. e5
... ,
Il xc7, b4 b3, ...
Ahora era más precisa 37. b:tb7, aunque el final de torres también está ganado tras este orden de jugadas. 37. 38.
..., ~ g8 b:tb7, b:t a5
En caso de 38 . ... , a5, las blancas llevan el rey a h4 y colocan el peón en g3, lo que decide el resultado del combate. 39.
Il xb4, Il xa2+
40.
~ g3, ~ g7
Aquí se aplazó la partida, y tras
70
la reanudación las blancas ganaron con facilidad. 41. 42. 43. 44. 45. 46. 47. 48. 49. 50. 51. 52. 53. 54. 55. 56. 57.
b:t a4, b:t b2 b4, ~ f7 b:t xa6, h4+ ~ xh4, b:t xg2 Ilb6, b:t d2 ~ g4, b:t d4+ ~ g5, b:t d5+ ~ f4, b:t d3 h4, bl. d4+ ~ g5, b:t d5+ ~ h6, b:t d4 h5, ll d5 b5, llc5 b:tb8, ll d5 b6, .llb5 b7, Ilb6+ ~ h7
Las negras abandonaron. La derrota convenció a Tahl de que valí a la pena incluir en su armamento la variante ... con blancas.
Partida 11 M. Tahl - V. Korchnoi Reykjavik, 1987 1. 2. 3. 4. 5.
S. 7. a. 9. 1 O. 11. 12. 13. 14. 15. 1S. 17.
e4, e5 0l f3, 0l cS ~ b5, aS ~ a4, 0l fS 0-0, 0l xe4 d4, b5 ~ b3, d5 dxe5, ~ es 0lbd2, 0l c5 c3, d4 ~ xeS, 0l xeS cxd4, 0l cxd4 0l e4, ~ e7 ~ e3, 0l f5 ~ c2, 0-0 'ªad1, 0l xe3 fxe3, ~ ca
Antes se consideraba desfavorable la maniobra 17. ..., ~ ea, por 1a. 0ld4. En la partida Van der Wiel - Korchnoi (Wijk aan Zee, 1987), después de 18. ..., 'ª d8; 19. 0l xeS, 'ª xd1; 20. 'ª xd1, fe, las blancas capturaron el peón, abandonado sin vigilancia, pero las negras consiguieron suficiente contrajuego. 21. ~ xc7, ~ h5; 22. 'ª f1, 'ª xf1+; 23. ~ xf1, ~ f5+; 24. 0l f2, ~ b1 +; 25. ~ e2, ~ xb2+; 2S. ~ f3, ~ f8; 27. 0l e4, ~ xa2; 28. 0l g5. Las blancas están a punto
de atrapar al rey enemigo, pero su adversario encuentra un procedimiento elegante para forzar las tablas. 28. ..., ~ d5+ ; 29. ~ g3, ~ h8!. La dama blanca está atada al peón e5, y ya amenaza h7-h6. Por eso está obligado a repetir jugadas, 30. 0l f7+, ~ g8; 31. 0lg5, ~ h8 . Tablas. Aún es necesario probar qué pasa si las blancas juegan 18. h3, 19. 0lh2, etc ... igual que con la dama negra en c8. En este caso después del cambio de un par de torres la segunda torre negra se queda en f8. Aquí se mantiene en f7, pero se encuentra algo entorpecida. 18.
h3, ...
Después de 1a. 'ª d3, c5; 19. 0l dS, ~ c7; 20. Zi fd1, 'ª fd8; 21. g d5, ~ f8; 22. b3, las posibilidades de ambos bandos son iguales (Short - Beliavsky, Barcelona, 1989). Como ya indiqué, la modesta jugada del peón "h" se encuentra por primera vez en la partida Karpov - Yusupov (Linares, 1983). Antes se jugaba 18. 0l d4, 0l xd4; 19. ed, ~ eS. De manera 71
imprevista terminó la partida Tseshkovsky - Yusupov (Erevan, 1982): 20. 0J g3, f6; 21. 'iJ fS, fe; 22. ~ b3!, y las negras abandonaron, porque pierden pieza. Tres años después Yusupov indicó el camino correcto: 20 . ... , c6; 21. 'iJ fS, ~ fe8; 22. ~ d3, ~ f8; 23. ~ h3, g6; 24. 0J h6+, ~ xh6; 2S. ~ xh6, eS, con igualdad (Short- Yusupov, Montpellier, 1985). Tampoco es peligroso para las negras 22. 0J xe7+, ~ xe7; 23. ~ f3, ~ d7; 24. ~ c3, ~ xa2; 2S. J:l xc6, ~ ad8; 26. J:l c8, ~ dS (Smirin - Mijalchishin, Klaipeda, 1988). En lugar de 20. 0J g3, tampoco dan nada otras continuaciones: 20. 'ª d3, f6; 21. ~ xc7, fe; 22. ~ xeS, bt xf1+; 23. ~ xf1 (Chandler- Yusupov, Minsk, 1982); 20. f! xc7, ~ ac8!; 21. ~ aS, 'ª c2; 22. ~ f2, ~ fc8 (Hübner- Ljubojevic, Tilburg, 1982), y las negras no tienen ninguna dificultad. En el último ejemplo es interesante la jugada 22 . ... , ~ g4!?, y después 23. ~ e1, ~ b4!; 24. 0J c3, 'ª xf2; 2S. ~ xf2, f6; 26. ef, ~ xf6+; 27. ~ g1, ~ e6; 28. ~ f1, ~ d6; 29. f! f3, f! xf3; 30. gf, con rápidas tablas (De Firmian - Hellers, Biel, 1989). 18. 19.
... , bl. d8 0Jh2, ...
En la partida fuente yo jugué así más tarde: 19. bl. c 1 ( 19. ~ xd8+, ~ xd8; 20. bl. d1, f!e8; 21. 0J d4, 72
0Jxd4; 22. ed, c6, el juego está igualado) 19 .... , c5 (es peor 19 .... , ~ b7; 20. ~ c6!), 20. f! f2, f! b7; 21. 0Jh2!, ~ xe4 (21 .... , bl, f8; 22. f! f3!, y 0J g4), 22. ~ Xf7+, ~ h8; 23. f! xe6, ~ g5; 24. ~ h 1. Las blancas mantienen la iniciativa, pero Yusupov finalmente consiguió llegar a tablas. La maniobra del caballo a h2 parece más consecuente. 19. 20.
... , ~ xd1 f! xd 1, f! e8
La jugada 20 .... , 0J c5, se examina en la siguiente partida. 21. 22.
f! hS, 'iJ cS 0J g3, aS!
Una importante mejora, las negras encuentran el camino más corto para llevar la torre al flanco de rey. Recuerden que en la partida precedente (la dama blanca estaba en f3), recomendé este procedi-
miento de defensa, prometiendo la igualdad. Es cierto que en esta partida las negras fueron demasiado sutiles, y Tahllleva a cabo una conclusión sorprendente. 23 .
24.
~ f5, ~ g4,
g aG g g6
El caballo está muy bien, pero la torre negra cubre todas las casillas vulnerables alrededor de su rey ...
Las negras se apresuran en aclarar la situación, por lo visto rechazan 29 . ..., b4, por la apropiación de las blancas de la columna
30.
~ xa5, ~ xe5
31. 32.
1ill' xb5, g e6 ~ b8, ...
Las blancas crean una peligrosa amenaza, ~ g4 y si llega el caso 0igh6+. 32.
25 .
Una jugada de espera. Las piezas blancas son muy activas, pero no se ve claro cómo reforzar la posición.
25. 26.
~ d8 ~ f2, ...
. .. ,
Hay que tocar retirada. El peón blanco "e" se transforma en una debilidad, aunque aún es invulnerable (26 . ... , ~ xe5; 27. ~ h6+). 26. 27 .
..., h5
b3, ...
... , 1!1l' c6 e4, ~ e8
A 27 ...., ~ xe4, seguiría 28. ~ d 1, 29. ~ g4, ~ b7, se ha rechazado el caballo y las blancas tienen compensación por el peón. Korchnoi intenta conseguir ventaja con todo confort.
Era más precisa 32 .... , g e8, pero las negras intentan resolver de una manera radical todos los problemas defensivos , tomando bajo control la casilla g4.
33.
~ d8,
g6?
En esta partida Korchnoi ha demostrado de nuevo sus inagotables ideas en la variante abierta, sin embargo al final se cansa. Tahl emplea una elegante combi nación con ganancia de la dama. Después de 33 ...., g eS, el encuentro terminaría en tablas. 34.
0i h6+,
~ g7
~ d6;
(Ver diagrama) 35.
0i fg4!, ...
Finalmente Tahl se desborda ... 28. 29.
~ d1, ~ e7 ~ d2, ~ f8
35.
hxg4 73
41.
~ f4+!, ...
Ser铆a err贸neo 41. ~ e3+, bl.f2, g3; 43. ~ g2, !!tg5.
43.
... , ~ h4 ~ f2+, g3 bl.f4+, ~ g5
44. 45.
bl.h4, ...
41. 42.
~h4;
42.
~ xg3+, ~ h6
La combinaci贸n se puede considerar terminada, el resto es sencillo. 36,. 37. 38. 39.
bl. xf7+, ~ xh6 !!t xf8+, ~ g5 h4+!, ~ xh4 !!th6+, ...
Las blancas dejan ir la posibilidad de terminar la partida de una manera m谩s brillante: 39. bl.h7+, ~ g5; 40. !!th6+, ~f6; 41. !!th4+, !!tg5; 42. bl. f7 +. Una limpia trayectoria de estudio de la dama blanca ...
74
39.
... , !!th5
40.
g3+, ~ xg3
45. 46.
47. 48. 49.
50. 51. 52.
53.
... , bl. xe4 bl.xh5+, ~ xh5 !!txc7, ~ es !!tb7, bl.e5 a4, ~ f4 !!tf3+, ~ g5 b4, bl.e1+ ~ f2, bl.b 1 b5, bl.b2+
54.
~ e1, ~ f5
55.
!!tc3, bl.b4 b6, ~ d5 !!teS+
56. 57.
Las negras abandonaron.
Partida 12 R. Hübner - V. Korchnoi Tilburg, 1986
1. 2. 3. 4. 5.
6. 7. 8. 9. 1 O. 11. 12.
e4, e5 0l f3, 0l c6 ~ b5, a6 ~ a4, 0l f6 0-0, 0l xe4 d4, b5 ~ b3, d5 dxe5, ~ e6 0lbd2, 0l c5 c3, ~ e7 ~ c2, ~ g4
b!. e1, ...
A esta posición se puede llegar por varios caminos, por ejemplo otro orden de jugadas: 9. c3 (con el objetivo de eludir el cambio del alfil de casillas blancas) 9 ...., 0lc5;
10. ~ c2, ~ g4; 11. ~ e1, ~ e7; 12. 0lbd2. La variante tiene una gran historia y está bien desarrollada por la teoría. 12.
...,
~ d7
La continuación 12 .... , d4, que antes merecí a la aprobación de la teoría, ha desaparecido por completo de la práctica. Otras posibilidades, 12 .... , 0-0, 12 .... , ~ h5 y la jugada de la partida a menudo llegan a la misma posición. Aquí tenemos ejemplos de los últimos años: 12 .... , ~h5; 13. 0l f1, 0-0; 14. 0l g3, ~ g6; 15. 0lf5, ~ d7; 16. g4, b!. fd8; 17. 01 3d4, 0l xd4; 18. cd, 0le6; 19. ~ e3, c5, con suficiente contrajuego para las negras (Thipsay - Agzamov, Frunze, 1986). En la partida Kupreichik - Kaidanov (Kuibyshev, 1986), sucedió lo siguiente: 12 .... , 0-0; 13. 0l f1, ~ h5; 14. 0l g3, ~ g6; 15. 0l f5, ~ d7; 16. g4 (aquí tenemos la posición conocida en la partida precedente) 16.... , b!. ad8; 17. h4!, 0le4; 18. 0l xe7+, 0l xe7; 19. 0lh2, 0l c5; 20. ~ e3, 0l e6; 21. ~ b3, c5; 22. h5, ~ e4; 23.
75
h6!, con iniciativa por el lado blanco. Otros ejemplos importantes: 12 . ... , 0-0; 13. h3, ~ h5; 14. 0l b3, 0l e4; 15. ~ xe4, de; 16. ~ xd8, g axd8; 17. g xe4, g d1+; 18. ~ h2, f6, con compensación por el peón (Mijalchishin - Kaidanov, Kuibyshev, 1986). 12 .... , ~ h5; 13. 0l f1, ~ d7; 14. 0l g3, ~ g6; 15. 0ld4, 0l xd4; 16. ed, 0l e6; 17. ~ e3, e5; 18. 0l f5, 0-0; 19. de, ~ xe5; 20. ~ xe5, 0l xe5; 21. g e1, ~ xf5; 22. ~ xf5, 0l e6; 23. g e3, g6; 24. ~ g4, g ae8; 25. g h3, con ventaja blanca (Short - Garcí a, Dubai, 1986). 12 .... , ~ h5; 13. 0l f1, 0-0; 14. 0l g3, ~ g6; 15. ~ e3, ~ d7; 16. b4, 0la4; 17. ~ xa4, ba; 18. a3, g fd8; 19. ~ g5, g e8; 20. ~ xe7, g xe7; 21. g a2, ~ e4; 22. 0l xe4, de; 23 . ~ xd7, g xd7; 24. e6!, y las posibilidades blancas son algo mejores (Geller . Agzamov, 52º Campeonato de la URSS, 1985). Y aquí tenemos dos partidas recientes sobre este tema. (lvanchuk - Tukmakov, Nueva York, 1988). 12 .... , 0-0; 13. 0l f1, ~ h5; 14. ~ e3. (Ver diagrama) Se aplaza la maniobra 0lf1-g3, y las blancas crean la amenaza 15. ~ xh7+, ~ xh7; 16. 0lg5+, ~ xg5; 17. ~ h5+, y 18. ~ xc5. Sin embargo la transposición de jugadas, en opinión de lvanchuk, permitía 76
a las negras resolver los problemas de aperturas mediante 14 . ... , ~ e6!; 15. 0l g3, ~ xf3; 16. ~ xf3, 0l xe5; 17. ~ h5, g6! (pero no 17 .... , 0lg6; 18.f4), y en caso de 18. ~ xe5, ~ f6, de forma inesperada son ellas las que alcanzan la cumbre. No obstante, después de la correcta 17. ~ xh7+, ~ xh7; 18. ~ h5+, ~ g8; 19. ~ xe5, ~ d6, el juego está igualado. Tukmakov deja ir una buena posibilidad ... 14 .... , ~ g6; 15. 0l g3, g eS; 16. h4!, ~ xe2; 17. ~ xe2, 0l d7; 18. ~ f4, 0l f8 (18 .... , ~ xh4; 19. 0l f5, ~ e7; 20. e6!), 19. h5, 0le6; 20. ~ e3, 0l a5; 21. g ad1, 0l e4; 22. ~ e1, e5; 23. ~ f5, g a7. lvanchuk recomienda el plan con ~ d7 y g ad8, por ejemplo: 23 .... , ~ d7; 24. g e4, biad8; 25. g g4, ~ h8! y no es posible 26. ~ xf7, por 26 .... , bí: f8. 24. 0l e4, 0l b6; 25. 0l eg5, ~ xg5; 26. ~ xg5, ~ eS; 27. ~ e3, h6; 28. 0l h4!, g e7; 29.
~ g4, <í) g5; 30. <í) f5, ,¡::¡, xe5; ~ f4, y las blancas ganaron.
31.
Wang - Yusupov (Novi Sad, 1990). 12 . ... , 0-0; 13. <í) f1, g e8!?. Novedad, las negras no pierden tiempo en la retirada del alfil, y enseguida presionan sobre el centro. 14. <í) e3, <í) xe5; 15. ~ xh7+, ~ xh7; 16. ~ c2+, ~ g8; 17. <í) xe5, ~ e6; 18. <í) c6, ~ d6; 19. <í) xe7, ,¡::¡, xe7. Las negras igualaron el juego, y enseguida tomaron la iniciativa. 13.
h3, ...
Recuerdo que la jugada 13. <í) b3, ya la elegí en la 28ª partida del match de Baguio, y después de 13 . ... , <í)e6; 14. h3, ~ h5; 15. ~ f5, <í) cd8; 16. ~ e3, a5; 17. ~ c5, a4; 18. ~ xe7, ~ xe7; 19. <í) bd2, c6; 20. b4, <í) g5, surgió en el tablero un juego recíproco. En la jugada número 17 las blancas podían tomar la casilla c5 con otra pieza. Aquí tenemos un ejemplo interesante: Ehlvest - Hjartarson (Belfort, 1988). 17. <í) c5!?, ~ c6!; 18. <í) d3, ~ xf3; 19. ~ xf3, g6; 20. ~ g4, h5; 21. ~ xe6, <í) xe6; 22. ,l:',l, ad1, ll d8; 23. ,l:',l, d2, O-O; 24. bl, ed1, <í) g5?. Un grave error, Ehlvest recomienda 24 .... , ~ d7, seguido de 25 .... , c6. 25. ~ xg5, ~ xg5; 26. bl, e2, bl, fe8; 27. ~ g3, ~ h6; 28. ,¡::¡, de1, ~ h7; 29. e6!, f6; 30. ~ f3, ~ g7.
31. <í) e5!, fe; 32. ~ f7+, ~ h8; 33. bl, xe5, .G, g8; 34. e7, g de8; 35. ll e6, ~ d7; 36. g xg6, ll xg6; 37. ~ xg6, ~ g7; 38. ~ f7, d4; 39. cd, ~ xd4; 40. .G, e6, ~ g7; 41. g3!. Las negras abandonaron, ya que no hay una defensa satisfactoria contra la amenaza ,¡::¡, e6-e4-h4-h5+. Resulta muy valiosa la partida Nunn - T ahl (Naestved, 1985). A 15. ... , ~ g6 (en lugar de 15 .... , <í)cd8), siguió 16. <í) fd4, 0-0; 17. ~ g4!, <í) cxd4; 18. cd, a5; 19. f4, h5; 20. ~ xh5, ~ xh5; 21. ~ xh5, a4; 22. <í) c5, <í) xc5; 23. de, ~ xc5+; 24. ~ e3, ~ xe3+; 25. g xe3, f5; 26. e6, ~ e7; 27. g ae1, .G,ad8; 28. g4!, d4; 29. g5!, g6; 30. ~ xg6+, y después de diez jugadas las blancas alcanzaron la cumbre. El encuentro Hübner - Korchnoi (Tilburg, 1987) terminó de una forma divertida: 13. ']') f1, ,¡::¡, da; 14. <í)e3, ~ h5; 15. <í) f5, 0-0; 16. <í) xe7+, <í) xe7; 17. b4, 77
'f) a4?; 18. ~ xh7+!, ~ xh7; 19. e6!. Las negras abandonaron. Desde luego, esto no es una refutación de la variante abierta, y el mismo Korchnoi demostró cómo hay que jugar en la partida con Sokolov en el mismo torneo de Tilburg: 17 . ... , <í) e4!; 18. ~ xe4, de; 19. e xd7, Zl xd7; 20. <í) g5, ~ g6; 21. e6, b!. d3; 22. ef+, ~ xf7; 23. CZ) xe4, <í) d5. Las negras tienen buenas posibilidades, y en el final lograron el éxito. A propósito, un par de semanas después y tras el fracaso con Hübner a pesar de todo Korchnoi llevó el caballo a a4. Si bien es cierto que en lugar de 17. b4, se jugó 17. ~ e3: 17 .... , 'f)a4!; 18. e d3, <í) g6!; 19. e6 (es mejor 19. ~ c1, ahora las negras toman la iniciativa), 19. ... , fe; 20. <í)e5, CZ) xb2; 21. CZ) xd7, <í) xd3; 22. CZ) xf8, CZ) xe 1; 23. ~ xg6, ~ xg6; 24. CZ) xg6, <í)c2; 25. <í)e7+, ~ f8; etc ... (Mar janovic - Korchnoi, Belgrado, 1987). 13. 14. 15.
..., ~ h5 CZ) f1, Zl d8 <í)g3, ...
No es peligroso para las negras 15. ~ e3, <í)e6; 16. g4, ~ g6; 17. ~ f5, 0-0; 18. CZ) g3, <í) a5; 19. h4, <í)c4; 20. ~ c1, h6; 21. b3, <í)b6; 22. ~ e3, c5; 23. h5, ~ h7; 24. e c2, ~ xf5; 25. gf, d4! (Gavrikov - Jaritonov, Sverdlovsk, 1984). 15. 78
...,
~ g6
16.
<í)d4, 0-0
Hasta ahora se encontraba 16. ... , <í) xd4; 17. cd, <í) e6; 18. CZ) f5, c5; 19. ~ e3, 0-0 (a juego confuso lleva 19 .... , e a7; 20. bl. c 1, ~ xf5; 21. ~ xf5, cd; 22. ~ d2, e b6, De Firmian - Agzamov, Vrsac, 1985, si bien es cierto que mediante 23. b4, las blancas podían ganar la iniciativa), 20. b!, c1, b!, c8; 21. de, ~ xc5; 22. ~ xc5, bl. xc5; 23. <í) d6, e cG; 24. ~ b3, d4; 25. e d2, d3; 26. f4, <í)d4; 27. b!, xc5, e xc5; 28. ~ h2, <í) xb3 (también 28 .... , CZ) e2; 29. b!, xe2, es favorable a las blancas), 29. ab, f6; 30. f5, y las blancas obtienen la ventaja (Korolev - Biro, torneo por correspondencia, URSS, 1986). 17.
~ f5,
...
Quizás sea mejor 17. CZ)gf5. 17.
..., <í)e6
18.
~ g4,
...
Se propone avanzar el peón "f", pero no consigue nada de esta idea. 18.
19. 20 . 21. 22. 23.
cxd4, c5 0l f5, f! a7 0l xe7+, f! xe7 ~ e3, cxd4 ~ xd4, g c8
f! d2, bic2 f! e3, ~ b4 ~ xe6, fxe6 f3, ...
No era este el destino soñado para el peón "f", era mejor 27. a3, 9 c4; 28. b3, 'f!c7; 29. g e2.
27. 28.
29.
g c1, ...
Resistí a más 30. ~c3, g 8xc3; 31 . be, f! xa3; 32. f!b6, ~ f5; 33. g4, f!e7; 34. f!e3, 9 h4; 35. g e2, f!g3+, y aún no está todo claro.
..., 0lcxd4
La iniciativa ya ha pasado al negro, y Korchnoi sabe realizar la ventaja en estas situaciones. 24. 25. 26. 27.
30.
..., g fc8 ~ ad1, h6 a3, f! e7
30 . 31. 32. 33 . 34. 35.
..., ~ h4 g xc2, g xc2 g f1, ~ f5 g f2, g c4 f4, ~ h5 ~h2, ...
El error decisivo, era más tenaz 35. g d2. 35. 36.
37. 38. 39. 40. 41. 42.
..., 'f!d1 g d2, 'f!b1 ~ c3 , b\.e4 ~ f2, ~ e1
g e2, ~ h1+ ~ g3, ~ xh3
gxh3, 9 g6+ 'f! f5
~ h4,
Las negras abandonaron, el mate es inevitable: 43. 'f!g3, g5+; 44. fg, Zl xh3+; 45. ~xh3, ~ xg5++.
79
Partida 13 P. Popovic- J. Timman Sarajevo, 1984 1. 2. 3.
6. 7. 8.
e4, e5 0l f3, 0l c6 ~ b5, a6 ~ a4, 0l f6 0-0, 0l xe4 d4, b5 ~ b3, d5 dxe5, ~ e6
9.
c3,
4. 5.
1 o.
1
~ c5
1
0lbd2, ...
También se encuentra con frecuencia 1O. • d3, pero la jugada de caballo es más lógica. 1 o. 11.
...,
kovsky- Chejov (Rostov, 1984), después de 16. ...1 bt ae8; 17. ~ d41 • h4+; 18. ~ g1, 0l xf3+; 19. gf . g5+; 20. 0lg3, ~ h3; 21. a4!, g6; 22. ab, ab; 23. ~ f2!, las blancas tomaron la iniciativa. También es buena 17. ~ c5, 0l xf3; 18. gfl bl, f7; 19. 0lg3!1 ~ g4; 20. ~ g1 • xf3; 21. • xf3, ~ xf3; 22. bl, f1!, con ventaja blanca (lvanchuk- Yusupovl Linares, 1990). 12.
0lb3, ...
0-0
~ c2, ~ f5
En la partida Marovic - Yusupov (Tunis, 1985), las negras emplearon un conocido cambio de operaciones: 11. ...1 0l xf2; 12. bl, xf2, f6; 13. ef, ~ xf2+; 14. ~ xf2~ • xf6; 15. 0l f1 0l e5. Aquí las blancas se retiraron 16. ~ g 1, y después de 16. ..., 0l xf3+; 17. gf, • xf3; 18. • xf3, J:l xf3, las negras restablecieron la igualdad material y gradualmente tomaron la iniciativa. Era correcta 16. ~ e3!, dejando con frialdad al rey blanco bajo la clavada. En la partida Tsesh1
80
La posición crítica de la variante con el desarrollo del alfil por c5. Las negras pueden elegir ahora
entre 12 .... , ~ g4, la continuación más popular en los años 70, y 12. ... , ~ g6, una jugada ampliamente difundida en la siguiente década. En la partida Marovic - Murey (XXVI Olimpiada, 1984), siguió de forma inesperada (¡en el espíritu de los años 40!): 12. ... , .í?l, xf2+; 13. ll xf2, 0J xf2; 14. ~ xf2, .í?l, xe2; 15. ~ xe2, f6, sin embargo después de 16. e6, ~ d6; 17. ~ e3, ~ xe6; 18. 0J bd4, 0J xd4; 19. 0J xd4, las blancas consiguieron ventaja. 12.
... ,
~ g6
Después de 12 .... , ~ g4, en mis primeros años, yo cambiaba automáticamente en c5. Recuerdo que conseguí la victoria de esa manera contra Beliavsky y Smyslov (leningrado, 1977). Sin embargo Korchnoi en el match de Baguio consiguió dos veces buen juego, y entonces me pasé a 13. h3. Ya que 13 .... , ~ xf3; 14. gf, pierde pieza, las negras se ven obligadas a retirarse, 13. . .. , .í?l,h5, y después de 14. g4, ~ g6; 15 . .í?l, xe4, de; 16. 0J xe5, ef; 17. ~ f4, las blancas tienen clara ventaja. Aquí tenemos algunas jugadas de la 14ª partida Karpov - Korchnoi (Baguio, 1978): 17 .... , ~ xd 1 (un cambio forzado, es mala 17 . ... , ~ e7; 18. ~ d5, 0J a5; 19. b4, 0Jc4; 20. ~ xf3, 0J xe5; 21. ~ xe5, ~ xe5; 22. 0J d7!), 18. b!, axd 1, 0J d8; 19. ll d7, 0J e6; 20. 0J xe6, fe; 21. ~ e3, ll ae8; 22. bl, fd1,
~ e4; 23. ~ e5, b!. fe8; 24 . .ll 7d4, ~ d5; 25. b3, a5; 26. ~ h2, b!, a8; 27. ~ g3, y las blancas realizaron
su ventaja posicional. Parece que en la décadas siguientes las negras no han encontrado una réplica suficiente en esta variante . 13.
0J fd4, ...
Se encuentra con frecuencia 13. a4, por ejemplo: 13. ... , ~ b6; 14. 0Jbd4, 0J xd4; 15. 0J xd4 (Van der Wiel - Korchnoi, Wijk aan Zee, 1983), 15 .... , ~ d7 (es peor 15.... , c5; 16. 0J c6, 0J xc3; 17. 0J xd8, 0J xd 1; 18. ~ xg6, b!. axd8; 19. ~ f5!, con una iniciativa peligrosa), 16. ~ e3, 0J e5; 17. a5, {il, a7; 18. f4, ~ xe2; 19. 0J xe2, f6; 20. ef, b!, xf6; 21. ~ h1, e6, con igualdad. No son peligrosas para las negras las continuaciones 13. e6 y 13. ~ e2. En la partida Short - Timman (Tilburg, 1988), las blancas hicieron la novedad 13. {il, f4, y como resultado de un juego agudo, 13. ... , ~ b6; 14. a4, ~ d7; 15. ab, ab; 16. b!, xa8, b!, xa8; 17. 0J fd4, b4; 18. ~ d3, be; 19. ~ b5, 0J xf2!; 20. b!, xf2 (20. ~ xc6?, ~ xc6!), 20. . .. , 0J xd4!; 21. ~ xd7, 0J xb3; 22. be (22. ~ xb3, bl, a1+, ganando), 22 .... , b!, a1; 23. ~ xa1, 0J xa1; 24. ~ e6, ~ e4; 25. e4, 0J e2, el bando enemigo consiguió cierta ventaja. 13. 14.
... , ~ xd4 exd4, ... 81
Las negras tienen un juego satisfactorio en caso de 14. <Dxd4, ~ d7; 15. f4, <Dxd4; 16. cd, f6, pero después de 15. <D xc6, ~ xc6; 16. ~ e3, ~ feS; 17. f3?, <D xc3; 1S. ~ d2, ~ xc2; 19. ~ xc2, bl xe5; 20. ~ ae1, <D e2+; 21. ~ xe2, ~ xc2; 22. ~ xc2, bt xe3, obtuvieron clara ventaja (Speelman - Timman, Londres, 1989). 14. 15.
... , a5 ~ e3,
a4
En la remota partida Karpov Savon (Moscú, 1971), después de 15 .... , <Db4?; 16. ~ b1, a4; 17. <D d2, a3; 1S. ~ c1!, las blancas consiguieron una gran ventaja. 16.
16. 17. 1S.
... , a3 <D xe4, axb2 llb1, ~ xe4
<D d2, ...
En la sexta partida del match con Korchnoi (Merano, 1981), retiré el caballo a e 1, y después de 16. <D c1, a3; 17. b3, f6; 1S. ef, ~ xf6; 19. <D e2, <Db4 (es más precisa enseguida 19 .... , ~ e7!?; 20. ~ c1, <Db4; 21. ~ b1, ~ ae8, con una sólida posición para las negras, Speelman - Timman, Londres, 1989), 20. ~ b1, ~ e7; 21. ~ e1, bl. feS; 22. <D f4, ~ f7, las negras igualaron el juego (aunque continuando aquí 23. <Dd3!, <D xd3; 24. ~ xd3, yo conseguía mejores posibilidades). En lugar de 17. b3, en adelante se encuentra 17. ba (17. ~ b1, es inofensiva para las negras), 17 .... , ~ xa3; 1S. ~ b3, 82
<D c3; 19. ~ d2, b4. Aquí tenemos un ejemplo sobre este tema. Nunn - Marin (Helsinki, 1988), 20. <D d3, ~ xd3; 21. ~ xd3, ~ aS!. Una mejora importante; en la partida Short - Yusupov (Belfort, 1988), después de 21 .... , <Da5; 22. ~ c2, ~ h4; 23. ~ c1, ~ xa2; 24. th a2, <D xa2; 25. ~ g5, ~ h5; 26. ~ e7, ~ b8; 27. ~ a6, <D c4; 28. ~ xa2, <D d2; 29. ~ xh7+, las blancas consiguieron una posición ganada. 22. ~ d2. Aquí los adversarios acordaron tab las, aunque después de 22 .... , <Dxa2, parece que las negras toman la iniciativa (23. ll fe1, <Da5; 24. bl ab1, <D c4, etc ... ).
Comentando el encuentro con Savon, yo propuse esta variante valorando la posición después de 18 .... , de; 19. f:h b2, <De7; 20. llxb5, bl, xa2; 21. ~ b 1, ~ a8; 22. llc 1, como favorable a las blancas. Sin embargo en una partida celebrada después, lvanov - Yusupov (4 7º campeonato nacional, 1979, primera liga), donde las negras tomaron con alfil en e4, 1S . ... , ~ xe4; 19. ~ xb2, ~ d7; 20. ~ xe4, de; 21. bt xb5, <D xd4; 22. ~ c5, bt fdS, llevó a igualdad. Diez años después de nuevo encontramos la captura con alfil, y en esta ocasión el cuadro es más favorable al blanco. En la partida comentada realizaron con habili-
dad su ventaja posicional. Parece que desde entonces no se ha empleado esta variante entre grandes maestros. Esta es la última palabra de la teoría y por eso he elegido esta partida para el libro. Los ejemplos más recientes se incluyen en los comentarios. 19. 20.
b!, xb2, ~ d7 ~ d3, ...
~ d2, g fb8; 23. 'ª fb1, ~ g4; 24. a3, b!, b6; 25. h3, ~ eS; 26. g c2, b3!; 27. g xb3, :Q. xb3; 28. ~ xb3, cxd4, las negras ganaron la calidad, y finalmente la partida (Hübner - Korchnoi, Lucerna, 1982). Pero no es obligado entregar material, con un juego exacto la presión de las blancas es muy apreciable. La siguiente partida, en especial, es una demostración ...
20.
... , ~ xd3
No valía 20 . ... , b4, por 21. ~ b5, llfb8; 22. g xb4, g xa2; 23. ~ xc6. 21. 22.
~ xd3, g fb8 ll fb1, ...
A igualdad llevaba 22. bt xb5, :Q. xb5; 23. ~ xb5, <íJ¡ xe5; 24. ~ b7, ~ c6; 25. ~ xc6, <íJ¡xc6; 26. llc 1, g a6. Esta jugada (en lugar de 20. ~ xe4), la utilizó por primera vez Hübner contra Korchnoi en 1982. Siguió el cambio de alfiles, 20 .... , ~ xd3; 21. ~ xd3, pero con una estructura de peones más favorable para las blancas. En la primera partida después de 21 .... , g fb8;22. b!, fb1,b4; 23.a3,ba; 24. b!, xb8+, b!, xb8; 25 . .l:l xb8+, <íJ¡ xb8; 26. ~ xa3, ~ c6; 27. ~ e7, ~ d7; 28. ~ a3, se acordaron las tablas (Hübner - Korchnoi, Chicago, 1982), pero en la segunda después de 21. ... , b4; 22.
22. 23.
... , b4 :Q. c1, ...
En la partida Karpov - Yusupov (Moscú, 1983), se intercalaron las jugadas 23. h3, h6, y sólo ahora siguió 24. g c 1. Regresaremos a esta partida un poco más abajo. Terminó rápidamente el encuentro Popovic - Yusupov (Sarajevo, 1984): 23. h3, llb6!; 24. ~ c2, 'ªab8; 25. g c1, g 8b7; 26. ~ c5. Tablas. 23. 24.
... , llb6 ~ b1, h6 83
2S.
h3, bi a7
w
1 f> -.!
Después de 2S . ... , ll ab8, surgiría la posición del mencionado encuentro Karpov - Yusupov. Pienso que la partida merece ser ofrecida hasta el final. 26. bi eS, 0ld8; 27. ll ee2, 0l e6 (a 27 .... , 0le6, seguiría 28. f4, con un asalto de peones, por eso las negras regresan con el caballo a su sitio), 28. !l' e1, Zl 8b7; 29. bi eS, 0le7; 30. ~ h2, 0l fS (las negras entregan el peón "e" para reavivar el juego; era mejor 30 . ... , .llb5, o 30. ..., c6, con una posición con posibilidades mutuas), 31. bl be2, .ll g6; 32. bl xe7, .ll xe7; 33 . .ll xe7, !l'bS; 34. g4!, 0l h4; 3S. Zi e8+, ~ h7; 36. fll' d1, !l' a6; 37. bi e2 (el obje tivo de las blancas es rea lizar la maniobra ~ e3 - f4-g3, y en caso de 37 .... , !l'a3; 38. !l'e2, b3; 39. ab, !l' xb3, reforzar la posición mediante 40. bic7), 37. ..., fS (parece que las negras tienen 84
buen juego por el peón, pero solo es una ilusión), 38. ~ g3!, fg; 39. ~ xh4, gh; 40. f4 (es peligroso 40. ~ xh3, ~ e6+; 41. ~ h2, ~ f5 , con la amenaza 42 .... , !l'e4, ahora llega la torre en socorro del rey), 40 . ... , !l' e6; 41. !l'hS! (sin permitir 41 . ... , h5), 41 . ... , !l' e7+; 42. ~ xh3, ~ f7; 43. bi h2! (previniendo 43 . ... , bi g3+; 44. ~ h4, blh3+), 43 . ... , !l' d7+; 44. fS. Las negras abandonaron. Es curioso que en el campeonato nacional, donde se celebró este encuentro, recibí junto con Yusupov el premio a la mejor partida precisamente por el encuentro entre ambos. ¡El jurado entendió que cada obra de arte ajedrecística pertenecí a a ambos autores! 26.
bi eS!, 0l aS!?
Las negras sacrifican peón para activar su caballo. 27. 28. 29.
ll xb4, 0le4 bl b3, .ll ab7 11i11 h2, e6 (Ver diagrama)
Casi da la impresión de que las negras no corren ningún peligro, desde luego la torre enemiga c5 está apartada del juego. Sin embargo las blancas tienen a su disposición un agudo truco que la devuelve a la vida. 30.
Zl aS!!, ...
35. 36. 37.
~ g4, ~ h7 ~ a3, ~ g8 ~ c5, 0J d2
Mantenía posibilidades .de salvación 37 .... , 0Jxe5, si bien es cierto que después de 38. ~ f5, ~ b8; 39. g3, y 40. '/Ja7, el peón "a" avanza casi sin oposición. En el Zeitnot las negras cometen un error decisivo. 38. 39.
Ahora las blancas sencillamente se quedan con el peón pasado de más "a". 30. 31.
..., ~ c8 bl. a4, ~ b8
También resulta triste 31. '!J xb3; 32. ab, ~ b8; 33. ~ a2. 32. 33. 34.
'!J xb6, l:l xb6 ~ f5, ~ b7 ~ c1, bl. b5
'!J a7, ~ b8 ~ f4, ...
Concluía la lucha 39. ~ d7. 39. 40.
..., f6 ~ g4,
...
Después de 40. ~ xd2, l:lxc5, el juego se dilataba. 40. 41. 42. 43. Las negras
..., bl. b7 '!J xb7, ~ xb7 exf6, 0J e4 ~ xg7+.
abandonaron.
85
Partida 14 K. Georgiev - V. Tseshkovsky Minsk, 1985 Sin duda ya habrá advertido el lector que muchas de las partidas del presente libro datan de la segunda mitad de los años 80. Precisamente entonces pensé en esta edición y empecé a reunir el material para ella. Y aunque el libro aparece ahora (entrados ya los años 90), lo mejor arranca de antes, y decidí conservarlo. Lo mismo se puede decir del ataque Marshall (a menudo se le llama contraataque), al cual dedico cuatro encuentros cercanos. Las partidas más recientes se introducen en los comentarios a las cuatro elegidas. El ataque Marshall se puede comparar con la variante del dragón en la defensa siciliana. Tanto uno como otra han sido refinadas por la teoría hace ya muchos años, y se han encontrado nuevas y originales ideas para las negras, aunque la estadística de victorias y derrotas favorece a las blancas. En esta variante de la apertura española las negras sacrifican un peón en la octava jugada, pero consiguen una iniciativa que no siempre lo compensa. Un jugador experimentado, jugando con blancas, si lo desea puede devol86
ver el peón voluntariamente, manteniendo una mínima ventaja. Por eso un ajedrecista "sólido" prefiere las negras como una construcción más sólida. Pero para el amante de las sensaciones fuertes este razonamiento no entra en sus cálculos. En lo que a mí respecta, advierto que en toda la práctica desarrollada con la apertura española nunca me he "arriesgado" con negras a jugar 8 .... , d7-d5, aunque por el contrario sí se encuentran casos en los que han elegido contra mí esa jugada ... 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9.
1 O. 11.
e4, e5 <í) f3, <í)c6 ~ b5, a6 ~ a4, <í) f6 0-0, t/g, e7 ,l::l, e1, b5 ~ b3, 0-0 c3, d5 ed, <í) xd5 <í) xe5, <í) xe5 ,l::l, xe5, c6
(Ver diagrama) Las extrañas continuaciones 9. ... , e4 (en lugar de la captura en
!. w
.é. "i'
g
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,
it it , ~, ~' d5) y 11 .... , '0Jf6 (en lugar de 11. ... , c6), casi no se encuentran en los torneos serios. Hace tiempo que se estableció que las negras no consiguen suficiente compensación por el peón sacrificado. Pero merece atención la jugada 11. ..., ~ b 7, que ha sido poco investigada. 12.
d4, ...
El movimiento de peón más practicado, 12. d3, se examinará en la Partida 16. En los últimos años se pasó de moda el cambio en d5, pero aquí, gracias a los esfuerzos de R. Hübner, se ha empezado a jugar de nuevo. Hübner - Nunn (Skelleftea, 1989), 12. ~ xd5, cd; 13. d4, ~ d6; 14. 'ªe3, e h4; 15. h3, f5. Tampoco es mala 15 .... , g5; 16. e f3, ~ e6; 17. e f6, bt feS; 18. '0!a3, e h5; 19. ~ d2, /}g, e7; 20. e f3, e g6; 21. g ae1, g4; 22. e g3, gh; 23. gh,
~ d6; 24. e xg6+, hg; 25. '0!c2, ~ g7; 26. '0Jb4, ~ xb4; 27. cb, bth8,
con rápidas tablas (Hübner Nunn, Haifa, 1989). El intento 16 . b3, después de 16.... , f5; 17. e t3, /}g, b7; 18. bt e6?, tras la respuesta 18 .... , 2::\ aeS!, llevó a ventaja negra (Anand - Nunn, Wijk aan Zee, 1990). Es mala 19. lhd6, g e1+; 20. ~ h2, Z'h c1; 21. e e3, e f4+; 22. e xf4, gf; 23. bt e6, ~ f7; 24 . .lle5, ~ f6, y después 'ª f7-e7, y la variante 19. llxe8, bt xe8; 20. ~ f1, g4!; 21. e xf5, gh; 22. e xh3, e xh3; 23. gh, ~ c8; 24. ~ e3, /}g, xh3+; 25. ~ e2, ~ g4+; 26. ~ d3, /}g, f5+; 27 . ~ e2, bt c8!, llevó a un difícil final para las blancas. 16. e t3. De una manera entretenida transcurrió la partida De Firmian - l. Sokolov (Biel, 1989): 16. '0! d2, f4; 17. bt e1, ~ xh3; 18. e t3, /}g,xg2; 1o. e xg2, e h5; 20. <í)f3, Z'H 6; 21. '0J g5, bt f5; 22. '0J e6, e h6; 23. /}g, d2, g e8; 24. e xg7+, e xg7; 25. '0J xg7, bt xe 1+; 26. 'ª xe 1, ~ xg7; 27. g e6, llf6; 28. g xf6. Tablas. 16 . ... , /}g, b7; 17. '0! d2, g5?. Era correcta 17 .... , f4; 18. bt e6, Jlad8. Ahora es favorable a las negras tanto 18. g e6, bt ad8; 19. e e2, f4; 20. '0J f3, e h5; 21. '0!h2, e n; 22. e e1, /}g, c8; 23. g e2, /}g,f5, como 18. <í) f 1, f6; 19. e e2, ~ f7; 20. /}g, d2, f4; 21. bt d3, llae8. Sin embargo Hübner no mueve ni la torre ni el caballo (¡continuan en sus sitios!), sino que retira enseguida la dama a e2. 18. e e2!, f4. En esta situación
'ª
87
era mejor avanzar el peón "g". 19. 0J f3, ~ h5. Después de 19 .... , ~ h6; 20. g e6, g f6, el juego seguí a adelante, pero Nunn cae en una astuta trampa colocada por su adversario.
.!
.!
20. 0J xg5!. Un golpe inesperado. Como tomar en g5 no es posible por 21. bt g3, hay que jugar sin dos peones. 20 . ... , ~ g6; 21. bi eS, ~ xg5; 22. bi xd6, bi ae8; 23. bl, e6, ~ f7; 24. bl, e5, bl, xe5; 25. de, ~ e6; 26 . .Q1, d2, ~ xe5; 27. ~ d3, ~ g7; 28. bt e1+, ~ d7; 29. f3, g fG; 30. ~ d4, f!ff f7; 31. a4, ba; 32. ~ xa4+, rfll c7; 33. 'f!ff b4, ~ d8; 34. ~ xf4. Las negras abandonaron. Vale la pena detener la atención en la divertida maniobra 12. ~ f1, con el objetivo de aproximar la dama lo más cerca de su rey. Es cierto que este plan parece algo artificial. Después de 12. ..., ~ d6; 13. b'i e1, 'f!ff h4; 14. g3, 'f!ff h5; 15. d4, ~ g4, antes se
88
jugaba 16. ~ e3, bi ae8; 17. 0J d2, bt e6; 18. c4, 0J xe3; 19. bi xe3, b'i h6; 20. ~ g2, c5, con buen juego para las negras. En la partida Kapengut - Malaniuk (URSS, 1985), las blancas emplearon una novedad, desarrollando enseguida el caballo, 16. 0J d2. Después siguió: 16. ..., bi ae8; 17. f3, ~ h3 (la devolución del peón en esta situación está en manos de las blancas; la posición se distiende, y les queda la ventaja de la pareja de alfiles) 18. 'f!ff f2, f5; 19. b!, xe8, bl, xe8; 20. c4, 0J f4!; 21. c5+ (es difícil valorar la posición que surge después de 21. gf, 'f!ff g6+; 22. 'f!ff g3, b'i e1+; 23. rfll f2, ~ e8; 24. 0Je4, b'i f1+; 25. ~ e2, fe; 26. cb+, ~ f8; 27. f!ff xh3, ef+; 28. ~ d3, ~ e2+; 29. ~ c3), 21 . ... , ~ f8; 22. cd? (la jugada perdedora, aquí ya era imprescindible 22. gf!; 22 .... , 'f!ffg6+; 23. ~ g3, g e1+; 24. ~ f2, ~ e8; 25. 0J e4, b'i f1+; 26. ~ e2, fe; 27. ~ xh3, ef+; 28. rfild3, ~ e2+; 29. ~ c8, ~ e1+; 30. ~ d2, b4+; 31. ~ c4, ~ e2+; 32. ~ xb4, ~ xd2+; 33. ~ a3, .Q1, xc5+; 34. de, ~ a5+; 35. ~ a4, ~ xc5+; 36. b4, ~ c3+; 37 . .Q1,b3, b!. xa1; 38. ~ c8+, ~ e7; 39. fi c7+, ~ e8, con jaque continuo), 22 . ... , b!. e2; 23. d7, ~ e7; 24. ~ c2, bi xf2; 25. ~ xf2, 0J e6; 26. 0J b3, ~ g4!, y diez jugadas después las blancas abandonaron. Aún quiero recordar otra partida importante, en la que se hizo la jugada de Fischer 12. g3. Braga - Geller (Amsterdam,
1986), 12 . ... , ~ f6. El peón "d" se retrasa en su sitio y las negras organizan una presión sobre el punto d4. 13. bi e1, eS; 14. d4, ~ b7. Otra novedad, después de 14 .... , cd; 15. cd, ~ b7; 16. ~ c3, ~ xc3; 17. be, las blancas están un poco mejor; ahora la casilla c3 está ocupada, y las blancas se retrasan en el desarrollo. 15. de, bi eS; 16. ~ d2, ~ xe3!; 17. be, ~ xe3; 18. e6. Geller ofreció una variante que demuestra que después de 18. bib 1, ~ d7, la ventaja está del lado negro. 18 . ... , ~ xe6; 19. b!. xe8+, ~ xe8; 20. bi b1, bi d8; 21. ~ e2. En caso de 21. ~ h5 (21. bib2, a5!), existe por ejemplo esta bella variante: 21 .... , g6; 22. ~ g5, ~ e 1+; 23. ~ f1, ~ e4; 24. ~ xd8+, ~ g7; 25. f3, ~ xf3; 26. ~ e3, ~ h1+; 27. ~ f2, ~ e 1, mate. 21 . ... , ~ xd2; 22. ~ xd2, ~ e4; 23. ~ xf7+, ~ xf7; 24. ~ b3+, ~ d5. Las negras tiene ventaja en el final, que realizaron con facilidad. 12. 13.
...,
~ d6
ll e1, ...
En los últimos tiempos se encuentra a menudo otra retirada de la torre, a e2, la recopilación del material sobre este tema se ofrece en los comentarios a la Partida 17.
.!!..!
Las continuaciones conocidas 15. y 15. ~ d3, en esta posición no son peligrosas para las negras, y en los últimos tiempos no se encuentran. La posición clásica surge después de 15. ~ e 3, ~ g4; 16. ~ d3. Ahora el cambio 16 .... , ~ xe3, propuesto ya en el año 1963 por Geller, es insuficiente para igualar: 17. bi xe3, c5; 18. ~ f1, ~ h6; 19. ~ d2, bi ad8; 20. ~ f3, ~ xf3; 21. bi xf3, cd; 22. cd, ~ d2; 23 . .ll d3!, y las posibilidades blancas son mejores (Fischer Donner, Santa Mónica, 1966). Para la jugada principal, 16 .... , b!, ae8 (o 16 .... , f5; 17. f4, bi ae8), ver la Partida 15. En la partida Sax - Ehlvest (Skelleftea, 1989), las negras decidieron pasar sin el traslado de la torre a e8. Así se desarrolló esa interesante partida: 16. ..., f5; 17. f4, ~ h8; 18. ~ xd5, ed; 19. ~ d2, g5; 20. ~ f1 ~ h5; 21. a4, ba; 22. fg, f4; 23. ~ xf4, bi xf4; 24. gf, ZH8. ~ xd5
1
13. 14.
..., ~ h4 g3, ~ h3
89
J.
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.::::=-::::
~ji
ji ji j, g¡~~ 25. b!. e5, ~ xe5; 26. de, h6; 27. ~ xa6, hg; 28. ~ d6, ll xf4; 29. ll f1, ~ f5; 30. ~ xd5, ~ h3; 31. b!. xf4, gf; 32. ~ f3. La tempestad amaina, las blancas se quedaron con ventaja de material y poco a poco liquidaron todo el peligro. 32 . ... , ~ g5+; 33. lll9h1, ~ h4; 34. ~ a8+, lll9 g7; 35. ~ b7+, lll9 h8; 36. ~ b8+, lll9h7; 37. ~ C7+, \ll9 h6; 38. ~ C6+, ~ h7; 39. 0i f3, ~ g4; 40. ~ e4+, ~ g7; 41. 0i g1, ~ f5; 42. ~ xf5, ~ xf5; 43. 0i e2, ~ e4+; 44. ~ g1, lll9g6; 45. e6, lll9 f6; 46. 0i xf4, lll9 e5; 47. e7, ~ c6; 48. 0ie2, lll9 d6; 49. 0id4, ~ d7; 50. 0i f5+. Las negras abandonaron. 15.
b!. e4!?, ... (Ver diagrama)
Precisamente gracias a esta original jugada me atrajo la presente partida. Sin embargo la victoria conseguida por las blancas no 90
está del todo unida con la apertura. 15.
... , g5!
Perdía 15 .... , ~ f5?, por 16. Zlh4, y en caso de 15 .... , 0if6; 16. b!.h4, ~ f5; 17. ~ f4!, o 15 .... , ~ d7; 16. c4!, be; 17. ~ xc4, llae8; 18. 0id2, 0if6; 19. Zlh4!, las blancas tenían clara ventaja. Sin embargo es buena para las negras 15. ..., ~ d7; 16. 0i d2, f5 (Anand - l. Sokolov, Wijk aan Zee, 1991 ). Después siguió 17. ll e 1, f4; 18. 0i e4? (era más precisa 18. ~ h5! y sólo después 0ie4), 18 . ... , ~ h3; 19. ~ e2? (a tablas llevaba 19. 0ig5, ~ f5; 20. 0i e4, ~ h3; 21. 0ig5), 19 . ... , ~ g4!; 20. ~ f1, ~ h5; 21. ~ d1, ~ xd1; 22. b!. xd1, fg; 23. hg. También 23. 0ixg3, ~ xg3; 24. hg, llxf2; 25. lll9 xf2, b!, f8+; 26. lll9g2, b!. xf 1; 22. b.í xf1, 0i f6, era favorable a las negras (1. Sokolov). Ahora la lucha tiene una bonita conclusión.
'dd3; 28. {/g, xf4, ~ f7; 29. ~ g2, g5; 30. {/g, e5, {/g, xe4; 31. fe, y diez jugadas después las negras abandonaron. 16.
23 . ... , 'ª xf2!; 24. ® xf2, 'ª f8+; 25. ~ g2, bl. xf 1; 26. l:l xf 1, ~ e2+; 27. <d f2, 'ª xg3!, y las blancas capitularon enseguida. Hay que advertir que el gran maestro yugoslavo Sokolov ha aportado muchas ideas al ataque Marshall, y en este mismo torneo jugó otra partida valiosa para la teoría. Nunn - l. Sokolov (Wijk aan Zee, 1991). 15 . ... , ~ d7; 16. <dd2, ~ b 7!? (novedad), 17. bl, e 1. A una pequeña ventaja blanc¡;¡ llevaba 17. 'ª xd5, cd; 18. ble 1, 'ªae8; 19. 'df1, f5; 20. 'ªf4. 17 . ... , c5!; 18. <de4, c4!; 19. ~ c2, {/g, e7; 20. <d g5, {/g, xg5; 21. ~ xg5, bl ae8; 22. f3, h6; 23. 'ª d2, f5; 24. 'ª e5, f4; 25. ~ e2, <db4?. Era imprescindible 25 .... , fxg3; 26. hxg3 y sólo ahora 26. ... , <db4!; 27. brxe8, 'ª xe8; 28. ~ e4, 'dd3, con juego confuso. Ahora las blancas consiguen ventaja. 26. 'ª xe8+, bl xe8; 27. {/g, e4,
~ f1,
...
Desde luego el peón g5 es intocable por 16 .... , ~ f5!. Y el traslado de la dama a otra casilla, 16. ~ f3, lleva a iniciativa negra: 16 .... , ~ f5; (16 .... , f5; 17. bl, e5!), 17. {/g,c2, {/g, xe4; 18. {/g, xe4, ~ e6; 19. {/g, xg5 (19. {/g, f5, ~ e1+; 20. ~ g2, ~ xc1; 21. <da3, ~ d2!; 22. l:ld1, <de3+), 19 .... , f5!; 20. {/g,d3, h6; 21. ~ h4, 'ªa7!; 22. <dd2, 'ªg7; 23. ~ f1, f4. 16.
...,
~ h6
Una novedad, pero es dudoso que sea afortunada. En el ataque Marshalllas negras a menudo eluden el cambio de damas, pero en esta ocasión les daba buen juego. 17. f3, ~ h8; 18. 'd d2, {ig, h3; 19. ~ e1, <d f4; 20. 'd f1. Después de 20. gf, gf; 21. ~ h1, l:lg8; 22. 'ªe2, ~ g7; 23. ~ f2, {/g,e7; se amenazaría la desagradable ~ h4.
20 . ... , ~ g7; 21. ~ f2, 'dd3; 22. <d xc1; 23. 'ª xc1, f5; 24. 'ª e6. ~ d2,
(Ver diagrama) La situación se distiende, y la iniciativa pasa gradualmente al lado blanco. 24.
..., 'ªad8 91
32. 33. 34. 35. 36. 37. 38. 39. 40.
... , ~ f5 ~ d5, .!:l. c8 bl. xc8, fg+ hg, ~ xc8 0l e4, ~ e7 g4, a5 ~ es, b4 ~ e3, ~ d87
0l c5, ~ f67
En el Zeitnot las negras cometen algunos errores seguidos, precipitando el desenlace.
25. 26. 27. 28. 29. 30. 31. 32.
bl. ce1, c5 ~ f2, cd4 ~ xd4, ~ xd4+
48.
~ e4, ~ c7
cd4, ~ g7 bl. c1, bl. fe8 ~ f2, f4 bl. xe8, bl. xe8 0l d2!, ...
49. 50. 51. 52. 53. 54. 55. 56.
0l e3+, ~ b5 0l d5, ~ d6 0l c3+, ~ a5
A ventaja negra llevaba 32 . .fl c6?, ahora el caballo se dirige al centro, y los asuntos negros van a peor. ~ b4,
92
~ d7!, ~ xd7
41. 42. 43. 44. 45. 46 . 47.
Es mala 24 .... , ~ f4; 25. gf, gf+; 26. 0lg3, fg; 27 . .!:l.h6, gh+; 28. ~ xh2, ~ g2; 29. bl. g1, f4; 30. bl.h3!.
0l xd7+, ~ es 0l c5+, ~ d5 0l e4!, h6 0l g3, ~ c4 <Ă) f5, b3 a3, a4
~ d5, ~ f8 ~ c6, ~ g7 0l b5!, ~ aS ~ c5, ~ f8+
0l d6
Las negras abandonaron.
Partida 15 E. Prandstetter - P. Blatny Checoslovaquia, 1986 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 1 O. 11. 12. 13. 14. 15. 16. 17.
e4, e5 9 f3, 9 c6 ~ b5, a6 ~ a4, 9 f6 0-0, !Jl. e7 .tl. e1, b5 !Jl.b3, 0-0 c3, d5 exd5, 9 xd5 9 xe5, 9 xe5 b\, xe5, c6 d4, !Jl. d6 b\, e 1, ~ h4 g3, ~ h3 !Jl. e3, !Jl. g4 ~ d3, b\, ae8 <Zj¡ d2, b\, e6
A otra variante distinta lleva la inmediata 17 ...., f5. Juzgando por la práctica, esta maniobra de peón también da a las negras suficiente contrajuego. Vamos a verlo. Dolmatov - Vladimirov (Copa de Europa de clubs, 1989). 18. f4, ~ h8; 19. !Jl. xd5, cd; 20. ~ f1 ~ h5; 21. a4. Resultó entretenida la conclusión de la partida A. Sokolov - Nunn (Rotterdam, 1989): 21. ~ g2 1 g5; 22. ~ xd5, b\, d8; 23. ~ c6, gf; 24. !Jl. xf4, !Jl. xf4; 25. gf, ~ e2; 26. ~ h1, b\, de8; 27 . .l:lg1, ~ h4; 28. ~ g2, b\, g8; 29. ~ c6, b\, gf8; 30. ~ g2, b\,g8; 31. ~ c6. Tablas . 21. ...1 ba. "La Enciclopedia de aperturas" examina como principal 21 .... , g5; 22. ab, ab; 23. b\, a6, gf; 24. !Jl. xf4, !Jl.xf4; 25. bl xe8 bl, xe8; 26. ~ xf4, .l:le1+; 27. 'lj¡ f1, ~ e8; 28. ilb6, !Jl.h3; 29. b\,b8 , .l:lxf1 +; 30. ~ xf1, con ventaja blanca (Ramírez - Velázquez, Niza, 1974). También es buena para ellas 23. fg, b\, xe3; 24. b\, xe3, f4; 25. gf, !Jl. xf4; 26. b\, g31 ~ xg5; 27. ~ h 11 ~ d6; 28. ~ g2 1 !Jl. xg3; 29. ~ xg31 h5; 30. bl, f1, Zl xf1+; 31. 'lj¡ xf1 1 ~ c1; 32. ~ g1, ~ xb2; 33. h31 !Jl.d 1; 34 . 0i e31 y el caballo 1
1
93
blanco es claramente superior al alfil enemigo (Timman - Nunn, Bruselas, 1988). Después de la captura en a4 la torre se aleja de la primera fila, y esto cambia la situación. 22. ~ xa4, g5; 23. ~ aa1. Antes de capturar en g5 es preciso volver con la torre a la primera horizontal. Esto es lo que puede suceder en caso de 23. fg: 23 . ... , ~ xe3!; 24. ~ xe3, f4; 25. gf, ~ xf4; 26. 'ªg3, ~ eS! (aquí también se aprovecha el retraso de la torre en a4, no tiene sentido tomar enseguida la dama: 26 .... , ~ e3+; 27 . .l:!, xe3, Z:l xf1+; 28. <í) xf1), 27. Z:l xg4, ~ e3+; 28. ~ g2, 'ª xf 1; 29. <í)xf 1, ~ c1!; 30. ~ a5, ~ e2+; 31. ~ g3, ~ xf1, y las negras ganan (Uimanis -Van der Hayden, torneo por correspondencia, 1986). 23 .... , ~ e6. En la partida Schlosser - Nunn (Krefeld, 1986) después de 23 . ... , a5; 24. fg, f4; 25. ~ xf4, los adversarios enseguida acordaron tablas. 24. fg, 'ª feS; 25. ~ f2, f4. Las negras sacrifican un tercer peón, para caer sobre el rey enemigo. El agudo juego posterior finalmente lleva a un resultado pacífico. 26. gf, h6; 27. <í) f1, hg; 2S. <í) g3, ~ h3; 29. fg, ~ fS; 30. ~ g2, ~ h4; 31. ~ f2, ~ xe1+; 32. ~ xe1, ~ f3; 33. ~ f1, ~ e4; 34. ~ xe4, de; 35. ~ g2, llf3; 36. g6, ~ gS; 37. <í) f1, ~ f6; 3S. <í) d2, ~ d3; 39. <í) f1, ~ f3; 40. <í) d2, Z:l d3; 41. <í) f1, ~ f5; 42. <í) e3, ~ f3; 43. ~ g5, bt d1+; 44. 94
<í) xd1, ~ xd1+; 45. ~ g2, ~ f3+. Tablas. 18.
a4, f5
El avance tradicional del peón "f". Pero a menudo las negras no permiten la reagrupación de la dama blanca ~ d3-f1, retrasando enseguida la dama a h5. Veamos dos ejemplos valiosos. lvanchuk - l. Sokolov (Biel, 1989), 1S . ... , ~ h5; 19. ab, ab; 20. <í) f1, ~ f5; 21. ~ d2, b'H eS; 22. ~ xd5, cd; 23. ~ f4, bt xe1; 24. ~ xe1, ~ xe1; 25. ~ xe1, ~ e4; 26. <í) d2, ~ xf4!; 27. <í) xe4, de; 2S. gf, ~ g4+; 29. ~ f1. Tablas. Chandler - Nunn (Hastings, 198788), 20 . ... , bi feS (es mala 20 .... , f5?; 21. ~ f4!, ~ xe1; 22. ~ xe1, ~ xf4; 23. gf, ~ f3; 24. <í)g3, ~ g4; 25: ~ e3, ~ e4; 26. f3), 21. ~ d 1, ~ xd 1; 22. ~ xd 1, ~ f5; 23. ~ d2, ~ xe1; 24. ~ xe1, h5; 25. h4, c5; 26. b3, cd; 27. ~ xd4, ~ e4; 2S. ~ d3, ~ c5; 29. ~ aS+, ~ h7; 30. ~ eS, <í) xc3!; 31. ~ g2, ~ g6; 32. ~ xe4, ~ xe4+; 33. ~ xe4, <í) xe4; 34. f3, <í) d6; 35. ~ f2, <í)b7; 36. <í) d2, ~ f5. Tablas. 19. 20. 21.
~ f1, ~ h5
f4, bxa4 ~ xa4, ...
Esta es una muestra de lo lejos que se ha llegado en la investigación del ataque Marshall: se pueden efectuar más de veinte jugadas, y aún no se ha dicho la última
palabra ... En lugar de esta jugada las blancas a menudo no se apresuran en tomar en a4, y juegan 21. ~ xd5, cd; 22. ~ g2. Aquí te nemos una ilustración. Tseshkovsky - Agapov (Kiev, 1984): 22 . ... , bHe8; 23. ~ xd5, ~ h8; 24. ~ f2, ~ e2. Aquí se encuentra 25. ~ g2, o 25. bí. xa4, ~ xf4!; 26. gf, ~ c4; 27. bí. xc4 (27. ~ xc4, ~ g4+; 28. ~ h1, bí. xe1+, con igualdad), 27 .... , bí. xe 1+; 28. ~ xe1, bí. xe1+; 29. 0l f1, bí. xf1+!; 30. ~ xf1, ~ d1+, con tablas. 25. 0J c4. El traslado del caballo a e5 parece atractivo, pero la debilidad del punto f3 tiene mayor significado. 25 . ... , ~ c7 (también es buena 25 .... , ~ xf4; 26. bí. xe2, Zl xe2; 27. gf, ¡l, xf2; 28. ~ xf2, ~ xh2+; 29. ~ f1, a3!), 26. 0J e5, ~ xe5; 27. bí. xe2 (la lucha termina de una manera brillante después de 27. de, ~ f3; 28. ~ c4, ~ xh2+!), 27 . ... , ~ xe2; 28. de, ~ xb2; 29. bí. xa4, ~ xc3; 30. ¡l, c4, ~ a1+; 31. ~ g2, h6; 32. ~ d3, ~ a2; 33. bí. c7, llb6; 34. bí. c2, bí. b2; 35. bí. xb2, ~ xb2; 36. ~ xa6, ~ c2, y las negras ganaron pronto. En lugar de 22 . ... , bí. fe8, Mazukievich propone 22. ... , bí. e4!; 23. ¡l, xa4 (23. 0Jxe4, fe, y g7-g5), 23. ..., g5; 24. bí. xa6, gf; 25. 0J xe4, fe; 26. bí. xd6, fe; 27. bí. xe3, ~ h3; 28. g4, ~ h4; 29. ~ xh3, ~ f2+; 30. ~ h1, bí. a8; 31. b!. d8+, bí. xd8; 32. g5, bí. a8; 33. ~ e6+, ~ g7, con tablas. 21 .
... , ¡!,b8
Una jugada de Lilientahl; los caminos teóricos, 21 .... , bí. fe8; 22. ~ f2, ~ h8; 23. ~ xd5, cd; 24. c4!, o 21 .... , g5; 22. bí. xa6, ~ h8; 23. bí.xc6!, 0Jxe3; 24. ~ f2, dan una gran ventaja al blanco. 22.
~ xd5,
cxd5
Aquí las blancas hicieron la novedad 23. bí.xa6. Pero antes de seguir adelante, vamos a detenernos en la continuación bien conocida 23. ~ g2, ~ e8; 24. ~ xd5, ~ h8; 25. ~ f2. Algunos manuales examinan aquí 25 . ... , g5; 26. bí. xa6, bl xb2; 27. ¡l, a2, gf; 28. gf, bl xa2; 29. ~ xa2, ~ xf4; 30. 0J f 1, bl e4, con buen juego para las negras. La "Enciclopedia de aperturas" propone 27. bl. a8, que se refuta mediante 27 . ... , ~ b8!, las negras eluden el cambio de torres, librándose de la clavada por la sexta fila y conservando todas las amenazas. Sin embargo las 95
blancas tienen una continuación más lógica: 27. ~ a8!, b!, b8; 28. ~ c6!.
Ahora 28 .... ,gf, lleva de manera forzada a una posición con alfiles de distinto color, pero con dos peones de más para las blancas: 29. ~ xe8+, ilbxe8; 30. gf, {/g, e7; 31. b!, xe6, {/g, h4+; 32. ~ g2, ll xe6; 33. d5, g xe1; 34. de, {/g, xd2; 35. {/g, xd2. No es mejor 28. ... , ~ h5; 29. h3!, ~ xh3; 30. ~ g2, gf; 31. ~ xh3, g xh3; 32. gf, Zl g8; 33. ~ e2, ll ge3; 34. ~ f2, li g6; 35. llh1, y las blancas ganaron (Popolitov Trushakov, URSS, torneo por correspondencia, 1980-1981 ). Así, parece que la posición del último diagrama después de 23. ~ g2 es favorable a las blancas!? Pero esto no es así. Sencillamente las monografías de aperturas no toman en consideración injustamente la posibilidad 25. ... , li xb2 (en lugar de 25 .... , g5). Después los acontecimientos pueden desarrollarse así: 26. li a2, Zl xa2; 27. ~ xa2, g5; 28. d5!. En la partida Chiburdanidze Tseshkovsky (Tashkent, 1980), después de 28. ~ c4, gf; 29. ~ xd6, fe+; 30. ll xe3, ~ h5; 31. ~ xe6, ~ xh2+; 32. ~ f1, ~ h1+, los adversarios acordaron las tablas. 28. 29. 30.
... , ll xe3! bt xe3, ~ c5 ~ f1, ... (Ver diagrama)
96
.!
Hasta hace poco tiempo esta posición se consideraba favorable a las blancas : 30 .... , ~ e4; 31. ~ d2, gf; 32. gf, ~ xf4+; 33. ~ g2, ~ xe3; 34. ~ xe3, ~ xe3; 35. ~ xe3, etc ... Sin embargo no vale la pena perder tiempo con la jugada ~ e4, dando al enemigo tiempo para reagruparse, y se debe jugar 30. ... , ~ h3! (propuesta por G. Fridstein), que coloca ante las blancas serios problemas. Por lo visto, lo mejor para ellas es 31. ~ xa6, ~ xf1; 32. ~ f6+, forzando el jaque continuo. Así, la idea de Lilientahl 21 .... , /;lb8, después de la respuesta 22. g xd5, cd; 23. ~ g2, lleva a un juego equilibrado, que bajo un punto de vista teórico es agradable a las negras. Pero el intento de mejorar el juego con la ayuda de la captura del peón a6 también resultó infructuoso. 23.
ll xa6, llbe8
Ahora tomar en b2 es bastante peligroso: 23 .... , -ªxb2; 24. ~ g2, ~ e8; 25. ~ xd5, ~ h8; 26. 0lc4!.
24.
~ f2,
...
Son mejores las posibilidades negras en caso de 24. ~ g2, g xe3; 25. g xe3, ~ xe3; 26. ~ xd5+, ~ f7; 27. ~ xf7+, ~ xf7; 28. ~ xd6, -ª e1+; 29. 0l f1, ~ h3; 30. ~ f2, g xf1+; 31. ~ e3. Sin embargo ofrece una valiosa mejora la partida Short - Pinter (Rotterdam, 1988): 24. ~ b5!. Ahora los cambios 24 .... , -ª xe3; 25. ~ xe3, g xe3; 26. -ª xd6, son favorables a las blancas. Por eso las negras retiraron la dama, 24. ..., ~ f7, pero Short no cayó en la trampa (25. ~ xd5, -ª xe3; 26. ~ xf7+, ~ xf7; 27. g xe3, -ª xe3; 28. ~ xd6, g e1+; 29. 0l f1, ~ h3), y por el contrario, avanzó el peón del extremo, 25. h3, y enseguida alcanzó su objetivo. 25 . ... , ~ h5? (era imprescindible tomar en h3), 26. ~ xd5, ~ xf4; 27. g xe6, ~ xe6; 28. 0l f1, ~ xg3; 29. 0l xg3, f4; 30. ~ xh5, ~ g6; 31. ~ h2. Las negras abandonaron.
24. 25. 26. 27.
..., g5 -ª xd6!, g xd6 fxg5, g de6 h4?, ... (Ver diagrama)
Permite a las negras pasar al asalto decisivo. Era correcta 27.
~ f4, ~ h3; 28. ~ f2, ~ e4; 29. 0lxe4, fe; 30 . ~ g1, ~ f8; 31. g4, ~ xg4; 32. ~ e5, ~ f7; 33. ~ g3, con tablas probables.
27. 28.
..., f4! gxf4, ...
No valía 28. ~ xf4, ~ f8; 29. ~ c7, y las negras alcanzan la cima. ~ e8,
28. 29. 30. 31 . 32. 33. 34. 35. 36. 37. 38. 39.
..., ~ h3! 0l f1, ~ xf1 ~ xf1, ~ g4 ~ d2, -ª xe1+ ~ xe1, ~ h3+ ~ g1, ~ e6 ~ f1, ~ e4 ~ d2, ~ f3+ ~ f2, g e4!
g6, h5 c4, bt xf4 ~ e1, ~ h3+
Las blancas abandonaron. 97
Partida 16 M. Andrijevic- M. Pavl ovic Yugoslavia, 1988 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9.
1 O.
e4, e5 0i f3, <í) e6 ~ b5, a6 ~ a4, <í) f6 0-0, r4 e7 bl. e 1, b5 ~ b3, 0-0 e3, d5 exd5, <í) xd5 <í) xe5, <í) xe5
11. 12.
d3, ...
~ xe5,e6
El modesto avance del peón "d" (las blancas refuerzan el punto e4, y si llega el caso ceden la casilla d4 a la torre), es poco probable que sea mejor que la estándar d2-d4. Sin embargo, esta antigua jugada compite frecuentemente con el avance de dos casillas del peón. 12. 13.
..., ~ d6 /;l e1, ...
(Ver diagrama) 13.
... , ~ h4
Se considera principal la continuación 13 . ..., ~ f5; 14. ~ xd5, ed; 15. 0i d2 ( 15. ~ f3, no da nada 98
a las blancas: 15...., ble8; 16. ~ d2, ~ d7; 17. h3, ~ c7; 18. <í)a3, ~ d6; 19. g3, ~ xh3, Zaitsev Ador jan, Polanica Zdro j, 1970), 15 . ... , ~ xd3; 16. <í) f1, ~ g6; 17. ~ d4, ~ e8; 18. ~ e3, b4; 19. ~ ad1, be; 20. be, ~ b8; 21. ~ xd5, ~ xd5; 22. bl. xd5 , ~ xc3, con buen juego para las negras. A un juego agudo lleva 14. ~ f3, ~ e8; 15. ,l:h e8+, ~ xe8; 16~ <í) d2 (en caso de 16. ~ d2, <í) f4; 17. ~ c2, ~ d8, las negras ya están mejor, Wittaker - Harding, torneo por correspondencia, 1977), 16 . ... , ~ e1+; 17. <í) f1, ~ g6; 18. h3, ~ e8; 19 . .ll d1, .llh2+; 20.
~ xh2, 'i'! xf1; 21. ~ d2, 'i'! xd3; 22. 'i'! xd3, ~ xd3; 23. a4, f6, etc ... (Dolmatov - Jalifman, Moscú, 1990). Es interesante enseguida 14. 0l d2, después de 14 . ... , 0l f4!; 15. 0l e4 ( 15. d4, 0l xg2!), 15 . ... , 0l xd3; 16. ~ g5 , ~ d7; 17. 0l xd6, ~ xd6; 18. ~ c2, el juego se iguala. Aquí tenemos un ejemplo reciente, Georgiev- Nunn (Dubai, 1986): 17. b!, e3, ~ xe4; 18. b!, xe4, b!, ae8; 19. ~ g4, ~ xg4; 20 . bi xg4, ~ e5; 21. b!, b1, h5; 22. g h4, 0l xb2; 23. ~ e3, 0l d3; 24. b!, d 1, <Db2; 25. bt b 1, 0l d3. Tablas. En las partidas de los últimos años las negras, por regla general, rehusan 13 . ..., ~ f5, tratan de aprovechar el juego medroso del adversario y luchan seriamente por la iniciativa ... En la partida Popovic - Velimirovic (Bar, 1985), siguió 13 .... , bl a7!?. Después de 14. 0ld2, 0l f4; 15. 0le4, 0lxd3; 16. ~ g5!, ~ e7 (16 .... , 'i'!d7; 17. b!, e3), 17. ~ xe7, bl xe7; 18. bi e3 (18. <Df6+, 11il? h8!), 18 .... , .lld7; 19. 'i'!h5!, las blancas consiguieron un ataque victorioso.
14.
No resulta afortunada la retirada de la dama a d7, aquí tenemos una bonita ilustración sobre ese tema. Smagin - Nunn (Dortmund, 1991 ): 15 . ... , ~ d7; 16. 0l d2!? (bastante más fuerte que la rectilínea 16. 'i'!f3), 16 . ... , ~ b7; 17. b!, e1, c5; 18. 0le4, ~ e7; 19. ~ g5!, bt ad8; 20. t!;, xe7, 'i'! xe7; 21. 'i'! h5, g6; 22. ~ g5, f6; 23. 'i'! h4, t!;, a8; 24 . .Q, e2!, 11il? h8; 25. bl ae1, 0l b6; 26. ~ h6, ~ b7; 27. f3!, c4; 28. 0l g5!. Las negras abandonaron. 16.
0l d2, ...
No da nada 16. g h4, ~ b7; 17. ~ c2, 'i'!e6; 18. c4, 0lb4; 19. c5, 0l xc2; 20. 'i'! xc2, f5!, o 16. t!;, c2, 'i'!g6; 17. 'i'! f1, f5; 18. bl e1, f4, y las negras t ienen clara ventaja. 16.
..., 'i'! g6
g3, 'i'! h3
Esta posición también surge en la práctica tras otro orden de jugadas, por ejemplo: 12. g3, ~ d6; 13 . .lle1, 'i'! d7; 14. d3, 'i'!h3. 15.
b!, e4, 'i'! f5
No valía 16.... , 0l f6; 17. bt e1, 18. 0le4!. La posición del
~ xd3;
99
diagrama es la tabla original para la variante con 12. d3. Las blancas pueden elegir entre 17. ~ f 1 y 17. g e 1, con el objetivo de instalar el caballo en e4. Timman - Hübner (Tilburg, 1985), 17. ~ f1. Esta jugada se empleó por primera vez en esta partida. 17 .... , f5. Es peor 17 .... , Q¡, f5; 18. Q¡, xd5, cd; 19. g d4 (aquí es útil la liberación de la casilla d4), 19 .... , ~ c5 ( 19 .... , ~ e6; 20. ~ e3, Q¡, c5; 21. 0ixd5, ~ ad8; 22. 0i f4!), 20. l:hd5, Q¡, g4; 21. ~ d2, ~ c6; 22. ~ g5, ~ h3; 23. ~ e3, ~ xe3; 24. ~ xe3, h6; 25. ~ h5, g6; 26. ~ e5, y las blancas tienen clara ventaja. En opinión de Hübner, es mejor 17 .... , ~ f6; 18. g e1, ~ g4; 19. f3, ~ f5; 20. d4, c5; 21. de, ~ xc5+; 22. ~ e3, g ad8; 23. ~ e2. Pero también aquí las posibilidades blancas son mejores. Merece atención 17 .... , h5!?; 18. a4, ~ g4; 19. ~ e 1, ~ f6; 20. ~ e3, g ae8; 21. ab, ab; 22. d4, h4, con un juego agudo (Kuzmin - Shulman, URSS, 1986). Examinemos ahora algunas jugadas de la partida Timman - Hübner. 18. g d4. De nuevo las blancas se aprovechan de que la casilla d4 no está ocupada, pero esta no es la única jugada, después de 18. g e1, f4; 19. c4, fg; 20. fg, Q¡, g4, las negras tienen ventaja. 18 .... , f4 (a 18 .... , ~ b7, o 18 .... , ~ e6, sigue 19. c4), 19. ~ xd5, cd; 20. ~ xd5+, ~ e6; 21. ~ xa8, b!, xa8; 22. ~ f3, g f8; 23. 100
~ e4, ~ f5; 24. ~ d5+, ~ h8; 25. a4, b4? (Hübner ofrece la variante 25 .... , ~ xd3; 26. ab, Q¡,e4; 27. ~ d4, fg; 28. ~ xg3, ~ xg3; 29. fg, ab; 30. ~ f4, h5; 31. ~ d6, que lleva a igualdad). 26. cb, fg; 27. hg, ~ xb4; 28. ~ d2, ~ xd2; 29. ~ xd2, ~ xd3; 30. g a3, y se llegó a un final en el que por el peón las negras no tienen compensación. Si bien es cierto que gracias a algunas imprecisiones de su adversario Hübner consiguió las tablas. Ahora regresemos a la partida principal, que ilustra la segunda posibilidad.
17.
~ e1,
f5
Una novedad en el ataque Marshall, no del todo afortunada, empleó Malaniuk contra Smagin (Kiev, 1986): 17 .... , ~ c7. Después de 18. ~ f3!, Q¡, g4; 19. ~ h4, ~ h5; 20. f3, ~ h3; 21. ~ e2, g ad8 (es más precisa 21. ... , ~ h8, con el objetivo de avanzar el peón "f", si bien es cierto que en ese caso la actividad negra tampoco compensa la falta del peón). 22. d4, f5; 23. f4, las negras no encontraron nada mejor que cambiar damas, 23. ... , ~ xe2; 24. ~ xe2, g fe8. Aquí siguió 25. g xe8+, g xe8; 26. ~ f2, ~ g4; 27. ~ e3!, y el resto, como se suele decir, solo es cuestión de técnica. No se justificó la jugada 17 .... , ~ b7: 18. ~ f3!, g fe8; 19.
Zhe8+, !heS; 20. <í'.)h4, ~ f6; 21. ~ d2, b4; 22. ~ f3, ~ xf3; 23. <í'.) xf3, y las posibilidades blancas son mejores (Hjartarson - Hebden, Londres, 1986). 18.
c4, ...
Después de 18. <í'.) e4, fe; 19. de, 20. ~ d4, ~ hS; 21. ed, eS!, la ventaja está del lado negro, pero es posible 18. <í'.)f3, con la amenaza 19. <{}eS. ~ g4;
18. 19. 20. 21. 22.
..., f4 <í'.) e4, fxg3 fxg3, ~ g4 ~ c2, bxc4 dxc4, ...
Merecía atención 22. ~ xc4, ahora las negras ya toman la iniciativa, suficiente para igualar. 22.
(Moscú, 1986), las negras no se arriesgaron entregando la pieza y jugaron 22 .... , ~ b4. La partida terminó de la siguiente manera: 23. ~ d2, <í'.) f4; 24. ~ xf4, ~ xe1; 25. bt xe1, ~ f5; 26. ~ g2, bt fe8 (es más tenaz 26. ..., !lae8), 27. ~ c2, bt e6; 28. g4!, ~ xg4; 29. bt f1, ~ e2 (29 .... , ~ h3; 30. ~ xg6, g xg6+; 31. <{}g3, ~ xf1; 32. ~ xg6, ~ xc4; 33. ~ b1), 30. <í'.) g5!, ~ xf1; 31. ~ xg6, ~ xg2; 32. ~ f7+, ~ f8; 33. ~ xe6, ~ e7; 34. ~ xg2, h6; 35. ~ g4, hg; 36. ~ xg5+, ~ d6; 37. b4. Las negras abandonaron. 23. 24.
cxd5, ~ f3! dxc6+, ...
Más fuerte que 24 . ~ f4, ~ xf4; 25. ~ xc6, ~ hS; 26. d6+, ~ h8; 27. d7, ~ h3! (27 .... , bt xe4; 28. ~ c8!), 28. ~ c2, ~ xd7; 29. gf, bt xe4!.
..., bt ae8 24. 25.
~ h8 ~ d5, ...
...,
Terminó enseguida la partida lvanov - Agapov (Kiev, 1984): 2S. ~ d2?, !l xe4; 26. !l xe4, ~ xe4; 27. l! c3, ~ fS. Las blancas sobrepasaron el tiempo, pero podían haber abandonado tranquilamente. 25. 26.
En la partida Smagin - Hebden
..., ~ xg3! hxg3, g xe4?
Las negras ponen demasiado ahínco en los sacrificios. Llevaba a tablas 26 .... , ~ xe4; 27. bt xe4, bt xe4; 28. ~ xe4, ~ xg3+; 29. 101
~ g2, ~ e1+; 30. ~ h2, ~ h4+; ~ g1, ~ e1+; 32. ~ h2, ~ h4+; ~ h3, blf2+; 34. ~ xf2, ~ xf2+;
31. 33. 35. ~ g2, ~ h4+ ·y tablas. Así pues, este hubiera sido el resultado más conforme con el combate. 27. 28. 29. 30.
~ f4, .!lfxf4 ~ f2, ~ h5 ~ h2, ~ xd5
gxf4, ...
La pasión se apacigua, y las blancas se quedan con calidad de ventaja. Después de algunas pequeñas aventuras realizan la ventaja de material. 30. 31. 32. 33. 34. 35. 36.
..., ~ xc6 bl xe4, ~ xe4 ~ d2, h5 blc1, ~ g6+ ~ f2, ~ e4 ~ d8+, ~ h7
bl g1, ...
Por fin el rey blanco está fuera de peligro. 36. 37.
~ f7 ~ g5, ...
102
~ eS,
h4
~ d1 + ~ f2, ~ d2+ ~ g1, h3?
ble3,
Las negras debieron tomar el peón a2, y no se ve nada forzado. 47. 48. 49. 50. 51. 52. 53. 54. 55. 56. 57.
~ e4+, ~ h6
bld3, ~ C1+ ~ h2, ~ c5 ~ e3, ~ c6 bt d2, Q¡, f5 ~ es, ~ es b4, ~ h7 a4, ~ g6 b5, ~ c1 ~ e3, ~ h5 ~ xh3, ...
Se comprende el deseo de las blancas de eliminar el peón pasado del enemigo, sin embargo de nuevo dejan ir una posibilidad para acelerar el desenlace: 57. ba, Q/.f3; 58. ~ xh3, etc ... 57. 58.
... , axb5 a5!, ...
...,
Ganaba enseguida 37. ~ e3 y 38. ~ d4. Esta imprecisión le cuesta a las blancas treinta jugadas más ... 37. 38. 39. 40. 41. 42.
43. 44. 45. 46.
~ a7+ ~ e2, ~ f7 b3, ~ f5
...,
bl g3, ~ g4+ ~ d2, ~ a7 ~ e1, ~ d7
Desde luego, no 58. ab, ~ f1+ y 59 .... , ~ xb5, y no se puede perforar la posición negra. 58. 59. 60. 61. 62. 63. 64. 65.
..., b4 ~ h2, b3 ~ d4, ~ g6 bl g2, ~ c7 a6, ~ c2 ~ g3, ~ e7
a7, b2 bl xc2!,
~ e1
+
Tampoco salvaba 65 .... , b1 ~ ; 66. ~ d3+. 66.
67.
~ f2, b1 ~ aS ~ , ~ e6
68. 69. 70.
~ h2+, ~ g6 ~ xf5 ~ f3+.
f5+,
Las negras abandonaron.
103
Partida 17 A. Beliavsky- V. Malaniuk Minsk, 1987 1. 2.
e4, e5 0l f3, 0lc6
3.
~ b5, ~ a4,
4. 5.
6. 7. 8. 9.
1 O. 11. 12. 13.
a6 0lf6
0-0, ~ e7 bte1, b5 ~ b3, 0-0 c3, d5 exd5, 0lxd5 0l xe5, 0lxe5 J:'í.xe5, c6 d4, ~ d6 bte2, ...
nuales de aperturas se le colocaba a esta jugada dos signos de interrogación... El objetivo de la maniobra de la torre es comprensible: las blancas economizan tiempo para el traslado de la dama a f 1 (no en dos veces ~ d1-d3-f1, sino en una ~ d1-f1); además después de g2-g3 y f2-f3 la torre se incluye en la defensa de su rey. En los comentarios a esta partida examinaremos las variantes más actuales, analizando la jugada ~ e2.
13.
La retirada de la torre a e2 compite en los últimos años con la tradicional .!le5-e 1, y sin embargo algunos años atrás en los ma104
...,
~ h4
Algunas veces se encuentra 13 . ... , ~ g4, y después 14. f3, ~ h5; 15. ~ xd5 (15. 0ld2, 0lf4; 16. -ªf2, 0ld3; 17. 'ªe2, 0lf4. Tablas, AdyLittlewood, Londres, 1983), 15 . ... , cd; 16. 0ld2, ~ c7 ( 16.... , 'f!h4; 17. 0lf1, -ªae8; 18. ~ e3, y la iniciativa negra se agota), 17. 0lf1, ~ feS; 18. ~ e3, ~ c4; 19. a4. Esta posición surgió en la partida Van der Sterren - Pain (Bruselas, 1984). Después de 19. ... , ~ g6, las negras mantienen cierta compensación por el peón, pero las blancas también están a
gusto, a su flanco de rey no le amenaza nada. En la partida Kamsky - lvanchuk (Linares, 1991 ), después de 16. 'D d2, f5 (en lugar de 16 ...., ~ c7), 17. ~ b3, ~ f7; 18. 'D f1, f4; 19. ~ d2, ~ d7; 20. bl, ae1 (es mejor 20. a4), 20 . ... , a5!; 21. a3, a4; 22. ~ d 1, ~ g6, las negras tomaron la iniciativa y finalmente alcanzaron la cima. Las blancas emplearon una interesante novedad en la partida Kindermann - Nunn (Dortmund, 1991): 15. ~ f1!?, ~ g6; 16. ~ f2, 'í! f6 (un lugar desafortunado para la dama, estaría mejor en c7 o d7), 17. g3, ~ d3; 18. z:!, e1, 'í! g6; 19. 'D d2, f5; 20. f4!, l&h8; 21. 'D f3, ~ e4; 22. 'De5, ~ xe5; 23. de. La superioridad blanca es indudable. Merece atención la retirada del alfil a f5: 14. f3, ~ f5; 15. ~ xd5, cd; 16. 'D d2, ~ d3; 17. g f2, 'í! c7; 18. g3, g ae8; 19. 'D f1, ~ g6; 20. 'D e3, 'í! d7; 21. 'D xd5, ~ xg3; 22. 'D f6+, gf; 23. hg, g d8; 24. ~ h6, ,lJ, fe8; 25. l& g2, g e6; 26. 'í! d2, con ventaja blanca (Georgiev - Nikolic, Wijk aan Zee, 1988). Era correcta 23 .... , 'í!h3, y ahora es posible este juego: 24. g h2, ~ xg3+; 25. bl, g2, ~ h3; 26. bl,h2, con tablas. El ataque de la dama en h4 es el método patrón del ataque Marshall. Una idea nueva y sorprendente emplearon las negras en la siguiente partida . 011 - Tseshkovsky (Sverdlovsk,
1987), 13 . ..., ~ c7!; 14. 'D d2. La profiláctica g2-g3 es imposible por ~ c8-g4, con lo que las negras mantienen la posibilidad de ataque con la dama en h4. Aquí surge el aspecto negativo de la situación de la torre en e2. Después de la jugada de la partida el caballo negro llega a f4, además con ganancia de tiempo, otro defecto de la torre en e2. En lugar de 'Db 1-d2 necesitan probarse en la práctica las jugadas 14. f3, 14. ~ c2 y 14. ~ f1 . 14. ... , 'D f4; 15. bl, e3. Por lo visto, valía la pena regresar con la torre a la primera línea. 15 . ... , c5!; 16. 'D f3, ~ b7; 17. de, 'í! f6!. El rey blanco cada vez se encuentra más incómodo. 18. ~ d7, bl, ac8; 19. f!J e7. Pierde de manera forzada, la dama debía elegir otra ruta, a f4 . 19 . ... , ~ c6!; 20. ~ c2, f5; 21. ~ b3+, 't& h8; 22. bl. e6 (agonía, pero no es mejor 22. ~ f7, bl. fd8; 23. ~ d2, 'D xg2; 24. \& xg2, f4), 22 . ... , 'D xe6; 23. ~ xe6, ~ xe6; 24 . ~ xe6, bl. ce8; 25. ~ d7, g ed8. Las blancas abandonaron. Tal vez deba contemplarse esta partida como una refutación de la jugada 13. g e2?!. Habrá que es perar la respuesta de las blancas. De una u otra manera, la maniobra ~ d6-c7 se podría considerar como una valiosa preparación casera, si el mismo Tseshkovsky no hubiera reconocido que se le ocurrió sobre el tablero ... 14.
g3,
~ h5
105
Respecto a la jugada 14. ..., ~ h3, recordaremos la partida Sokolov - Jalifman (Sochi, 1982): 15. ~ d2 (a juego confuso lleva 15. ~ f1, ~ h5; 16. f3, ~ h3; 17. ~ f2, f5; 18. ~ d2, g ae8; 19. .fh e8, g xe8; 20. ~ f1), 15 .... , ~ f5; 16. ~ e2, ~ xe2; 17. ~ xe2, f5; 18. f4, ~ g4; 19. ~ f1, ~ xf4; 20. Zl f2, ~ d6 (es mejor 20 .... , ~ xc1; 21 . bt xc1, f4), 21. e4, be; 22. ~ xe4, f4; 23. ~ xe6, ~ e6; 24. ~ xf4, ~ xf4; 25 . .ti xf4, y la ventaja está del lado blanco. En lugar de 18. f4 es dudoso que sea mejor 18. c4. Con una derrota terminó la partida Ljubojevic Nunn (Szirak, 1987): 18 .... , ~ g4!; 19. g e6, ~ f4!?; 20. g xd6?, bl, ae8; 21. eb, g e2!; 22. ~ e4+, ~ h8; 23. ~ xe2 (amenazaba 23 . ... , ~ h3+, y a 23. ~ f7, decidía 23 . ... , g e1+; 24. ~ f1, g xf1+), 23 .... , ~ xe2+; 24. ~ g2, f4!; 25. be, fg; 26. hg, ~ f4+ . Las blancas abandonaron. En la partida Hübner - Timman (Tilburg, 1987), las blancas jugaron con más precisión: 20. f3, y después de 20 .... , ~ h3+; 21. ~ g2, ~ f4+; 22. ~ g1, ~ h3+; 23. ~ g2, <í) f4+, los adversarios acordaron tablas debido a la triple repetición. El intento 22. ~ h1, era peligroso: 22 .... , ~ h3; 23. gf, ~ xf4; 24. g e2, g ae8!. Queda decir que merece atención para las negras 19 .... , f4!?, con el objetivo de descubrir el juego en el flanco de rey. El cambio del alfil de casillas blan106
cas no por el alfil (16. ~ c2), sino por el caballo, es dudoso que sea afortunado: 16. ~ xd5 (merece atención 16. ~ f 1!? , pero de jan pocas perspectivas 16. f3, 16. ~ e4 y 16. a4), 16 .... , ed; 17. f3, g ae8; 18. ~ f1, h5; 19. ~ e3, h4; 20. ~ f2, ~ d7; 21. gh, ll xe2; 22. ~ xe2, l:!. e8; 23. ~ d3, bt e6; 24. ~ g3, g g6; 25. ~ f2.
w
.l
•: -1 ,.a.
.l
Parece que las blancas, ganando dos peones, han construido una sólida fortaleza. Sin embargo, se desmorona rápidamente: 25 .... , b4!; 26. a4, ba; 27. b3, ~ e7; 28. e4, de; 29. be, g b6; 30. bl a2, ~ f5; 31. ~ xf5, ~ xf5; 32. e5, g b2+; 33. g xb2, ab; 34. ~ d2, a5; 35. e6, ~ b4. Las blancas abandonaron. 15.
~ d2,
...
No da nada 15. bl, e4, ~ g6; 16. ~ c2, f5 (o 16 .... , ~ f5; 17. g e2,
~ ae8; 18. ~ e3, ~ xc2; 19. ~ xc2, ~ xc2; 20. ~ xc2, ~ xe3); 17. ~ e2, ~ h5; 18. ~ d2, f4, con juego com-
plejo (Eimes- Romanenko, URSS, torneo por correspondencia, 1981 ). 15.
... , ~ h3
Es favorable a las blancas 15 . ... , 16. ~ e1, ~ g6; 17. ~ f3, 18. ~ h4, ~ h5; 19. f3 (Sax - Pinter, Hungría, 1981 ). A un juego igualado llevó 15 . ... , ~ g4; 16. f3, ~ xf3; 17. ~ xf3, ~ xf3; 18. ~ f 1, ~ g4; 19. ~ d2, Zl fe8 (Balashov - Tseshkovsky, Vilnius, 1981 ). Pero es más fuerte 18. ~ f2, ~ e4; 19. ~ f3 (no es tan claro 19. ~ c2, ~ e6; 20. f! d3, g6), 19. ... , bl, ae8; 20. ~ d2, ~ f6; 21. ~ e 1. Las posibilidades blancas son mejores (Sax - Nikolic, Plovdiv, 1983). Es evidente que a las blancas les interesa, incluso al precio de un peón, simplificar la situación en el tablero, manteniendo la ventaja de la pareja de alfiles. ~ f5; ~ g4;
16.
g 8xf4; 24. d7 (24. ~ d2, ~ e8!; 25. ~ xf3, ~ e3+; 26. ~ h1, f! f2; 27. ~ h4, ~ xh4!), 24 . ... , ~ xd7; 25. ~ d2, ~ h3!; 26. ~ xf3, ~ xf3; 27. f! d2, ~ f8; 28. ~ e3, f! f5; 29. 9 e2, c5; 30. ~ c2, f! d5, y las negras ganaron (llevaba más rápidamente al objetivo 30 .... , ~ f6!; 31. de, f! d4+; 32. ~ h1, ~ g4!).
Si las blancas se deciden a regresar con la torre a la primera fila, entonces es mejor hacerlo después de la previa 16. ll e4, ~ g6; 17. ~ e1. Pero es mala 17. f! e1, f5!; 18. ~ e2 ( 18. g e6, Zl ae8!; 19. ~ xe8, Zl xe8; 20. 9 d 1, f4!), 18 . ... , f4; 19. ~ e4, ~ h5; 20. f3, fg; 21. ~ xd6, b!. xf3; 22. ~ e4, gh+; 23. ~ xh2, ~ f1+. Las blancas abandonaron (Mokry - Franzen, Superk, 1984) . 16.
... ,
~ c7
f3, ...
En la partida Psajis - Geller (Sochi, 1982), después de 16. Zl e 17, ~ ae8!, la presión de las negras aumentó a ojos vistas. 17. f3, f5!; 18. c4, ~ e3! (sin reparar en sacrificios), 19. c5+, ~ h8; 20. ~ xe3, ~ xe3; 21. cd, f4!; 22. ~ e4 (23. ~ f2, ~ g4!; 24. gf, bl, fe8), 22 . ... , bl. xf3; 23. ~ xf4,
Aquí la retirada también es buena, otras jugadas son menos 107
afortunadas. Algunos ejemplos: 16 .... , f5; 17. c4 (o 17. a4, i,dae8; 18. ab, ab; 19 . .lla6), 17 .... , be; 18. '7J xe4, §g c7; 19. '7J e5, con ventaja blanca (Rodríguez - Malaniuk, Erevan, 1984). 16 .... , .ll ad8; 17. '7J e4 (o 17. ~ e1, y después ~ f2, '7J e4 y Qg, d2), 17 .... , ~ xf3; 18. '7J g5, ~ h5; 19. '7J xh3, ~ xh3; 20. ~ f1, ~ g4; 21. ~ d2, bl. fe8; 22. bl, ae1, bl. xe2; 23. ~ xe2, ~ xe2; 24. bl. xe2, h6; 25. ~ g2, ~ f8; 26. ~ f3, y aquí las posibilidades blancas son sensiblemente mejores (Aseiev - Taborov, Kostroma, 1985). La jugada 16 .... , ~ e 7, se empleó por vez primera en la partida Kuporosov- Malaniuk (URSS, 1985). Así continuó: 17. a4, b4; 18. e4, '7J f6; 19. bt e 1 (es peor 19. ~ e 1, bl. ae8; 20. ~ f2, bt xe2; 21. ~ xe2, bl. e8; 22. ~ f2, f! f5, con iniciativa negra). 19 .... , bt ad8; 20. '7J e4, '7J xe4; 21 . .ll xe4, §g f5; 22. bl. e1, ~ h3 (no valía 22 .... , i,d fe8; 23. ~ e3, ~ h3; 24. §g f2, h5; 25. bt xe8+, bt xe8; 26. ~ d2, h4; 27 . .lle1, pero es posible 22 .... , ~ b6; 23. ~ e3, ~ xd4; 24. ~ xd4, c5; 25. ~ xc5, .llxd1; 26. ~ xd1, bt d8; 27 . .í& xb4), 23. bt e2, bl, fe8; 24. ~ g5, f6; 25. ~ e3, h5 (a tablas llevaba 25. ... , Qg,xg3!; 26. hg, .llxe3; 27. bl, xe3, ~ xg3+; 28. ~ f1, f! h3+). 26. e5+, ~ f8; 27. ~ c4, ~ xg3 (27 .... , h4; 28. ~ f1 !), 28. hg (pero ahora 28. ~ f1, ~ xh2+; 20. bt xh2, ~ xf1+; 30. ~ xf1, i,d xe3; 31. ~ f2!, bt ee8; 32 . .llxh5, ~ eS; 33. 108
bth8+, ~ e7; 34. i,d e1 +, ~ d7; 35. bt exe8, btxe8; 36. bt xe8, ~ xe8; 37. a5, dejaba a las blancas mejores posibilidades). 28 .... , bt xe3; 29 . .ll xe3, ~ xg3+; 30. ~ f1, ~ h3+; 31. ~ g1, ~ g3+; 32. ~ f1, f! h3+. Tablas. Las blancas continuaron más fuerte en la partida Short - Nunn (Bruselas, 1986), 19. '7J e4! (en lugar de 19. Z'l, e1) 19 .... , ~ 96 (Nunn indicó que 19 .... , 0! xe4; 20. ~he4, y 19 .... , f! xf3; 20. 0ig5, era favorable a las blancas), 20. '7J f2, ~ f5; 21. ~ e2, bt fe8; 22. ~ xf5, f! xf5; 23. bt xe8+, .ll xe8; 24. ~ g2. Las negras no tienen compensación por el peón. Además, el salto del caballo a e4 es totalmente posible enseguida. 17.
'7J e4!, ...
El inmediato traslado del caballo al centro resulta desagradable para las negras: un especialista del ataque Marshall como Malaniuk sólo pudo continuar diez jugadas más. 17.
..., .ll ae8
Una posición semejante surgió en la partida antes mencionada Garcí a - Pinter, con la presencia de las torres en la columna "e" (allí se cambiaron) favorable a las blancas. Las negras resolvieron tomar el peón f3 en la partida Ehlvest - Nikolic (Zagrev, 1987), sin embargo, después de 17. ...,
9 xf3; 18. 0l g5, 9 h5; 19. 0l xh3, 9 xh3; 20. Q1, d2, ll ae8; 21. 9 f1!, 9 d7; 22. b!, ae1, b!, xe2; 23. 9 xe2, las blancas tienen una evidente ventaja (dos alfiles, más la presión por la columna "e"), que realizaron en el final. La partida duró más que la comentada, pero con el mismo resultado ... 18.
9 d3, ll e6
día en el acto 21 .... , gh+; 22. ~ h1, b!, xe8; 23. Q1, f4. 22. ~ g2, gh; 23. Q1, d2, ~ h8!; 24. 0l g5?. Esta jugada cede la iniciativa a las negras, era imprescindible 24. Q1, xd5. 24 . ... , ~ f4!; 25. 0le4, b!, e6; 26. ~ h1, Q1, xd2??. En el Zeitnot las negras se olvidan de la proyectada 26 ...., 0le3!, que ganaba en el acto: 27. bl, f1 (27. 9 e2, b!, xe4), 27 . ... , 9 h3; 28. ~ xe3, bt g6; 29. 9 e2, ~ xe3, y no hay defensa contra el mate. 27. ~ xd5, cd; 28. 0l xd2, 9 g5; 29. f4!, 9 h4; 30. 9 f5, b!, e8; 31. bl f1, h6, y las negras abandonaron. 19.
~ d2,
ll g6
Las blancas terminan felizmente el desarrollo, y su adversario realiza un intento desesperado para provocar complicaciones en el flanco de rey. 20. A esta maniobra de torre hay que considerarla poco afortunada. La discusión teórica continuó algunos meses después (Vrsac, 1987), en el encuentro Ehlvest Geller. En este corto encuentro sucedieron muchas aventuras. 18. ... , f5!?; 19. 0l g5 (no es posible 19. 0lf2, b!, xe2; 20. 9 xe2, b!, e8). 19 . ... , f4; 20. 0l xh3, fg; 21. b!, xe8! (no valía 21. ~ g2, gh; 22. ~ d2, 9 g6+), 21 . ... , b!, xe8. Per-
g4!, ...
Pero no 20. b!, ae 1, f5; 21. 0l f2, Q1,xg3!. 20.
...,
~ xg4
Era más tenaz 20 .... , 9 h4. 21. 22. 23. 24.
fxg4, b!, xg4+ 0l g3, f5 ll g2, 9 h3
b'U1, ...
Todas las fuerzas acuden al auxi109
lio, y las negras no tienen compensación por la pieza entregada.
24. 25. 26.
110
..., .l:l f6 .llf3!, h5 fill e2, b!. fg6
27.
ál c2.
Las negras abandonaron. Sí, tanto las blancas como las negras tienen mucho en qué trabajar en el ataque Marshall ...
Partida 18 A. Karpov - B. Spassky Bugojno, 1986 1. 2. 3.
e4, e5 0J f3, 0J c6 ~ b5, g6
Si hablamos de continuaciones raras, entonces el interés en los últimos años gira alrededor de la defensa Bird, 3 .... , 0J d4 (que ilustraremos en la siguiente partida), pero casi no se encuentra el gambito Janisch, 3.... , f5, el sistema berlinés, 3.... , 0J f6; 4. 0-0, 0Jxe4, y tampoco la continuación 3 .... , ~ c5. Queda recordar la variante, pasada de moda, del cambio 3.... , a6; 4. ~ xc6, de. Como me parece que en la esencia de las aperturas abiertas hace tiempo que no se producen, no voy a detenerme en revisar las partidas jugadas con esas variantes. 4.
c3, ...
Rara vez se juega 4. d4. La creación de un sólido centro de peones es la principal característica de las partidas jugadas con esta variante. En la partida Balashov Smyslov (Moscú, 1987), después de 4 . ... , ed; 5. ~ g5, ~ e7; 6. ~ xe7, ~ xe7 (la teoría recomienda 6.... , 0Jgxe7; 7. 0J xd4, d5; 8.
0J c3, de; 9. 0J xe4, 0-0, con igualdad, pero también es del todo posible la captura con la dama en e7), 7. 0-0, 0J f6; 8. ~ xc6, de; 9. ~ xd4, c5; 10. ~ e3, ~ g4; 11. 0Jc3, ~ xf3; 12. ~ xf3, 0-0-0; 13. ~ ad 1, ~ d4; 14. 0J d5, 0J xd5; 15. ed, ~ xd1; 16. ~ xd1, ~ ea, las negras se quedaron fuera de peligro. 4. 5.
... , a6 ~ a4,
...
No ofrece nada a las blancas 5. En la partida Chandler Spassky (Viena, 1986), las blancas tomaron en c6, 5. ~ xc6, de; 6. 0-0, ~ g7; 7. d4, ed; 8. ed, 0J e7; 9. 0J c3, ~ g4; 1 O. ~ e3, 0-0; 11. h3, ~ xf3; 12. ~ xf3, f5 (parece ser que tras la captura del peón d4 las blancas tampoco cuentan con nada: 12 .... , ~ xd4; 13. ~ xd4, ~ xd4; 14. ~ ad1, ~ e5; 15. bt d7, ~ ad8; 16. ~ d3, ~ xd7; 17. ~ xd7, con posibilidades iguales), 13. ~ g5, 'l!!tí' d7; 14. ~ xe7, ~ xe7; 15. e5, ~ ad8; 16. bi ad1, e5!; 17. 0J d5, ~ f7; 18. de, ~ xe5; 19. ~ fe1, ~ de8 (pero no 19 .... , .ll feS, por 20. ~ b3!). Tablas. ~ c4.
111
5. 6. 7.
... , d6 d4, ,kg, d7 0-0, ...
Entre los principales grandes maestros sólo Smyslov y Spassky juegan a menudo el sistema con el fianchetto del alfil. En el torneo de candidatos (Montpellier, 1985) el gran maestro Sokolov continuó con ambos 7. ~ g5. En la partida Sokolov - Spassky después de 7 . ... , f6; 8. ~ e3, 0l h6; 9. 0-0, ~ g7; 1 o. h3, 0> f7; 11. 0> bd2, 0-0; 12. Jl e1, 'f! e7; 13. b4, ~ h8; 14. ~ c2, 0> cd8; 15. 0> f 1, 0> e6; 16. 'f! d2, 0> fg5; 17. 0> 3h2, f5; 18. ef, gf; 19. f 3, f4; 20. ~ f2, 0> xh3+!; 21. gh, 0l g5; 22. ~ h1, 9 xh3, las negras desarrollaron un peligroso ataque. También le fue bien a las negras en la partida Beliavsky- Smyslov de este mismo torneo: 12. ~ c2 (en vez de 12. bl, e1), 12 . ... , f! e7; 13. Jl e1, ~ h8; 14. 9 b1, 0> cd8; 112
15. b4, 0> e6; 16. a4, ~ h6; 17. a5, ~ xe3; 18 . .l:b e3, 0> fg5; 19. 0> xg5, fg; 20. de, de; 21. f! b2, 9 f4, con iniciativa negra, que finalmente les trajo el éxito. En la partida Sokolov - Smyslov después de 9. h3, ~ g7; 1 O. 0> bd2, 9 e7, las blancas jugaron enseguida 11. b4. En lugar de la sólida 11 .... , 0> f7, siguió la respuesta 11 . ... , ed, y todo acabó de forma inesperada con una derrota: 12. cd, 0-0; 13. 0-0, f5; 14. ~ g5, '@ e8; 15. ~ b3+, ~ h8; 16. ~ e1, 9 c8; 17. e5, de; 18. de, ~ e6; 19. ~ xe6, '@ xe6; 20. 0l b3, 0> f7; 21. 0>c5, f! c4; 22. bt c1, '@ xb4; 23 . ~ d2, '@ a3; 24. bt e3, '@ xa2; 25. Jl c2. Las negras abandonaron. Se empleó una novedad poco afortunada en la partida Popovic - Kovacevic (Yugoslavia, 1986): 9. h4 (en lugar de 9. 0-0 y 9. h3), 9 . ... , 0> g4; 10. h5, 0> xe3; 11. fe, ~ h6!; 12. hg, hg; 13. d5, 9 e7; 14. 0> bd2, ~ f7; 15. ~ f2, ~ g7; 16. ~ xd7, ~ xd7; 17. ~ b3, f5!, con ventaja negra. De una manera o de otra, decidí no perder tiempo con este ataque del alfil, y dos jugadas después lo desarrollé directamente por e3. 7. 8.
... , ~ g7
g e1, ...
También se encuentra la jugada 8. d5. Aquí traigo dos partidas sobre este tema, jugadas por el gran maestro S. Smagin.
T olnai - Smagin (Voronez, 1987), 8 . ... , <0i ce7; 9. c4, b5!; 10. cb, ab; 11. ~ c2, <0i f6; 12. ~ g5, h6!; 13. ~ xf6, ~ xf6; 14. S' e2, S' b8; 15. ~ d3, 0-0; 16. <0i c3, b4; 17. <0ib5.
17 . ... , <0i xd5!; 18. ed, e4; 19. S' xe4, ~ xb5; 20. ~ xb5, S' xb5; 21. bi ac1, ~ xa2; 22. ~ xc7, g e8; 23. S' f4, g5!; 24. S' c1 (24. S' xf6, S' xf1+!), 24 . ... , ~ xb2; 25. S' c4, S' xc4; 26. ~ xc4, bib8, y las negras ganaron. Con mayor precisión jugó en este mismo torneo Rozentalis contra Smagin: 9. ~ xd7+, S' xd7; 1 O. c4, h6; 11. <0i c3, f5; 12. <0i e1, <0i f6; 13. f3, 0-0. Ha surgido una posición en el espíritu de la "india de rey", pero la ausencia del alfil de casillas blancas es favorable a las blancas. 14. <0i d3, e5; 15. S' e2, g5; 16. ~ d2, '0i h5; 17. g3, <0i f6; 18. a3, ~ f7; 19. b4, b6; 20 . .!:l. ab1, Zl af8; 21. be,
be; 22. <0i f2, <0i e8; 23 . Zl b6, '1! e8; 24. bi fb1 !, fe; 25. <0i cxe4, y en esta ocasión las blancas alcanzaron la cima. En lugar de 12. <0i e 1 también es buena para las blancas 12. ef, <0i xf5 (12 .... , gf; 13. <0ih4, <0i f6; 14. f4, e4; 15. ~ e3, 0-0; 16. h3, c5; 17. de, be; 18. S'e2, con ventaja blanca, Fischer - Filip, Cura¡;:ao, 1962), 13. <0i e4, 9 f6; 14. <0i xf6+, ~ xf6; 15. <0i d2, 0-0; 16. <0i e4, con mejor juego para las blancas (Short - Spassky, Londres, 1986). Merece atención el cambio inmediato en el centro. Resulta interesante la siguiente partida, Geller Salov (Moscú, 1987), 8. de, <0i xe5; 9. <0i xe5, de; 1 O. f4, <0i e7.
Esta posición es conocida desde la famosa partida Fine - Alekhine (torneo A VRO, 1938). El cambio 11. fe, ~ xa4; 12. S' xa4+, S' d7; 13. S' xd7+, ~ xd7; 14. ~ f4, ~ e6; 113
15. <í) d2, le ofreció a las blancas una rápida victoria. La continuación correcta se encontró... 40 años después: 11 .... , <í)c6; 12. ~ f4, 'f!Je7; 13. 'Z) d2, 0-0-0, con juego bastante complejo (Taborov - Bronstein, URSS, 1978). 11. f5, gf; 12. ef, 'Z) d5. Una aguda réplica, ideada por el gran maestro Westerinen, pero aquí va a ser refutada. 13. 'f!J xd5. En la partida Bronstein- Westerinen (Yurmala, 1978), después de 13. .í:l1,b3, <í) f6; 14. ~ g5, 'f!J e7; 15. <í) d2, 0-0-0; 16. 'f!J e2, b!,hg8, las negras recibieron suficiente contrajuego por la columna "g". 13 . ... , .í:l1, xa4; 14. 'f!J xb7, ~ b5; 15. f6!, .í:l1, xf6 (tampoco ayuda 15 .... , ~ xf1; 16. fg, b!, g8; 17. 'f!J c6+, 'r!le7; 18 . .í:l1, g5+).
16 . ... , bi, b8. También en caso de 16 .... , ~ xc4; 17. 'f!J c6+, o 16.... , .í:l1, d7; 17. b!, xf6, se pierde pieza. 17. 'f!J f3, 'I!J d4+; 18. ~ e3, 'f!J xc4; 19. <í) a3, 'f!J e6; 20. <í) xb5, bi, xb5; 21. 'f!J xf6, 'f!J xf6; 22. b!, x f 6, y algunas jugadas después las negras abandonaron.
8.
..., <í) ge7
No es menos popular el desarrollo del caballo por f6; aquí tene mos un ejemplo, en donde en lugar de 8. Zl e1 se jugó 8. ~ e3. González - Gavrilakis (Dubai, 1986): 8 . ... , <í) f6; 9. de, de; 10. <í) bd2, 'f!J e7; 11. b4, b6; 12. h3, 0-0; 13. ~ b3, <í) h5; 14. a4, a5; 15. b5, <í) d8; 16. <í)c4, ~ e6; 17. ~ c1, <í) b7; 18. 0i e3, <í) c5; 19. <í) d5, ~ xd5;20. ~ xd5, b!, ad8,y
las negras pasaron la prueba. A pesar de todo la posición del caballo en e7 parece bastante más flexible. 9.
16. c4!. ¡Una jugada de problema! Desde luego, no enseguida 16. b!, xf6, por 16 .... , 'f!J d1+; 17. r!Jf2, 'f!J e2+; 18. r!Jg3, b!, g8+, y el rey blanco recibe mate. 114
~ e3,
...
Por mi parte no me apresuro a cambiar en e5. En la partida Short - Spragett (Montpellier, 1985), después de 9. de, 0i xe5; 10. 0i xe5, ~ xe5; 11. .í:l1,b3, <í)c6; 12. <í)d2, ~ g7; 13. <í) f3, 'f!J e7; 14 . .í:l1, g5, f6; 15 . .í:l1,e3, <í) e5; 16. 0id4, 0-0-0; 17. f4, las blancas tomaron la iniciativa. A los amantes de jugar contra la defensa india de rey con blancas puedo recomendarles aquí 9. d5, <í)b8; 10. c4, etc ...
9. 1 O.
... , 0-0 ~ bd2, ~ eS
El plan de las negras está unido al avance f7 -f5, pero no pasa enseguida: 1O.... , f5; 11. Qg,b3+, ~ h8; 12. de, de; 13. ~ c5!, b6; 14. ~ a3, y la ventaja posicional de las blancas es indudable. Merece atención 1O.... , b6, tomando el control sobre la casilla clave c5. La última jugada de la dama plantea una trampa, amenaza 11 .... , ~ xd4!, sin embargo la dama se sitúa en una columna atacada por la torre, lo que más tarde jugará un papel importante.
11.
~ b3,
Previniendo 14. ... , f5, en ese caso después de 15. 'ªh6, las negras tendrían serios problemas con el peón "e". 14. 15.
~ g4 ~ g5!, ...
... ,
De nuevo impide 15 .... , f5: 16. ~e6. En caso de 15. ~ d 1, las negras llevaban el alfil a e6.
...
A 11. d5, las negras preparan no 11 .... , ~ d4; 12. cd, ~ xa4; 13. ~ c1!, ~ c8; 14. de, de; 15. ~ c4, f6; 16. b3, Qg, d7; 17. ~ e3, con clara ventaja blanca, sino 11 .... , ~ d8! y después de f7-f5 el caballo se coloca con comodidad en
f7.
15.
11.
... , b6
A 11 .... , ~ h8, sigue la conocida 12. de, de; 13. Qg, c5. 12.
dxe5, dxe5
Después de 12. ... , ~ xe5; 13. ~ c2, las blancas ocupan una gran extensión. 13. 14.
~ c4, ~ h8 ~ c1!, ...
... , h6
El intento de expulsar el caballo no conduce a nada bueno. Por eso un año después Smagin no perdió tiempo con h7-h6, y empleó la novedad 15 .... , .!l d8. Sin embargo las negras tampoco consiguieron resolver los problemas de la apertura: 16. h3, ~ c8; 17. a4, f5; 18. f4!, fe; 19. ~ xe5, ~ xe5; 20. fe, ~ d5; 21. ~ d2, ~ xe5; 22. bt xe4, ~ d6; 23. ~ e1, h6; 24. ~ e6, Qg, xe6; 25. bt xe6, ~ C5+; 26. Wh1, 115
0l f4; 27. ~ xf4, lh f4; 28. bl, xg6, b'l, df8; 29. ~ e2, b'l, f2; 30 . ~ d3, ~ f5; 31. ~ g3, y sólo con dificultades consiguieron las negras las tablas (Boudy - Smagin, Skop je, 1987). 16.
h3,
~ d7
Tiene que volver a su sitio, después de 16 .... , ~ h5; 17. 0l xf7+!, bl xf7 (17 .... , ~ xf7; 18. 0l xb6), 18. g4, la posición se abre a favor de las blancas. 17. 18.
0l f3, ~ h7 a4, f5!?
La amenaza posicional 19. a5 obliga a las negras a proceder con actividad. Pero era mejor 18 .... , a5, y la concesión de la casilla b5 no es tan peligrosa: 19. 0la3, 0la7!. Probablemente , Spassky no esperaba la súbita ruptura que ahora se produce en el centro del tablero. 19.
exf5, gxf5
No vale 19 .... , 0l xf5; 20. ~ f4!, e4; 21. ~ c2, y a 19 .... , bl xf5, con la amenaza 20 .... , bl xf3, yo respondería 21. 0lfd2 (21. 0lh4, bl,h5), con mejor juego. (Ver diagrama) 20.
0l fxe5!, 0l xe5
No cambiaba el asunto 20. 116
~ xe5; 21. 0l xe5, 0lxe5; 22. ~ xh6, 0l7g6 (22 .... , 0ld3; 23. ~ g5; 22 .... , 0lf3+; 23. gf, ~ g6+; 24. '!lg5!), 23. ~ xf8 .
21. 22.
0l xe5,
~ xe5
~ xh6,
...
Se ha sacrificado una pieza por dos peones, pero las negras no están para cálculos aritméticos, su posición hace aguas por todas partes. 22.
...,
~ d6
Perdía en el acto 22 . ... , ~ g7; 23. 24. ~ g5+, y las negras perecen por la posición de la dama en eS; si estuviera en d8, tendrían la respuesta 24 .... , 0lg6. Resistí a más 22 . ... , ~ f6, aunque después de 23. ~ xf8, '!l xf8; 24. ~ f4, y blad1, las blancas desarrollaban una terrible iniciativa. ~ xg7, ~ xg7;
23.
~ g5!,
...
El cambio en f8 llevaba a un juego no del todo claro.
23.
...,
~ g6
A 23 ...., ]¿J7, decidía 24 . ~ h4, (24. ~ h5, J:H 6!), 24 . ... , ~ g6 (24 .... , ~ g8; 25. ~ h5 , con una mortal clavada), 25 . g4, fg; 26. hg, ~ xg4; 27. ~ xg4+, ~ xh6 ; 28. bi e6+, ~ h7; 29 . ~ c2+, con mate. 24. 25. 26.
bt xe7+, ~ xe7 ~ xe7+, ~ xh6 ~ xd7, ...
La refriega táctica terminó con clara ventaja blanca. Teniendo en cuenta que el rey negro está privado de la cobertura de peones y puede caer en una red de mate, ahora debió cambiar damas, 26. ..., ~ d6 (26 .... , ~ g7; 27. ~ C6+), 27. ~ xc6, cd. No obstante, en esta situación el alfil con dos peones de más es más fuerte que la torre. 26. 27.
..., f4 ~ xc7,
bt ae8
28.
bí d1, ll f6
A 27 . ..., f3, sigue 28. g4, con la amenaza bí d 1-d5-h5. 29.
~ h2,
...
Una jugada silenciosa, que acentúa la indefensión de las negras. 29.
... , a5
También era desesperado 29 ...., f3; 30. g4, bt e2; 31. ~ g3, bl xb2; 32. -ª d8, ~ g7; 33. @' e5, o 29 ...., ~ e2; 30. g d8, bt xf2; 31. -ªh8+. 30 . 31. 32. 33 . 34.
b\, d4, b\, ef8 bt d7, b\, c6 ~ e5, ~ f6
@d5, bt c5 ~ e4 .
Las negras abandonaron. A 34 .... , @f5(g6) , sigue 35. @e7, y a 34 .... , bt f5, gana de una forma bonita 35. ~ c2, @e5; 36. bth7+!, ~ g5 (36 .... , ~ xh7; 37. @xe5), 37. h4+!, ~ f6 (37 .... , ~ g4; 38. @f3, mate), 38. @' c6+, @e6; 39. bth6+.
117
Partida 19 O. Romanishin - Y. Balashov Erevan, 1986 1. 2. 3.
e4, e5 <í) f3, <í)c6 ~ b5, <í) d4
En la teoría ajedrecística se han producido no pocas metamorfosis sorprendentes. Este o aquél sistema desaparecen del horizonte durante muchos años, y de pronto, despiertan una atención inusitada. Uno de los ejemplos más recientes de esa metamorfosis es la antigua variante Bird, que ahora ha conseguido una sensible popularidad en los torneos de grandes maestros. En los comentarios a esta partida, como es habitual, examino el material más importante de los últimos tiempos. 4.
<í) xd4, ...
Las retiradas del alfil a a4 o c4 son menos importantes, aunque permiten eludir la aguda variante. Así se desarrolló la partida Romanishin - Malaniuk (Tbilisi, 1986): 4. ~ c4, ~ c5; 5. <í) xd4, ~ xd4; 6. c3, ~ b6; 7. d4, 'f! e7; 8. 0-0, <í) f6; 9. a4, a6; 1 O. ~ e3, <í) xe4 (después de 1O.... , d6; 11. de, de; 12. ~ xb6, la estructura de 118
peones negra pierde elasticidad), 11. b!, e1, 0-0; 12. ~ d5 (12. de?, <í) xf2!; 13. 'f!e2, ~ xe3; 14. f! xe3, <í) g4, con problemas para las blancas), 12. ... , <í) f6; 13. de, <í) xd5; 14. 'f! xd5, ~ xe3; 15. il xe3, g b8; 16. <í) d2, b5!, y las negras no tienen dificultades. En la partida Georgiev - Tseshkovsky (Dubai, 1986), se encuentra 4. ~ a4, ~ c5, y aquí las blancas emplearon la novedad 5. b4 (en lugar de la habitual 5. 0-0), y después de 5 . ... , ~ b6; 6. 0-0, <í) xf3+; 7. 'f! xf3, 'f! f6; 8. 'f! g3, <í) e7; 9. ~ b2, <í)g6; 10. c4, <í) f4; 11. b!, e1, c6; 12. d4, obtuvieron ventaja. Sin embargo las negras podían capturar el peón, 5.... , ~ xb4, y después de 6. <í) xd4, ed; 7. 0-0, las blancas tienen en perspectiva una iniciativa que sólo compensa el peón. La novedad 4 . ... , b5, se empleó en la partida Georgiev Héctor (Haifa, 1989), y después de 5. ~ b3, <í)xb3; 6. ab, <í)f6; 7. OO, d6; 8. d4, ~ b7; 9. b!, e1, a6; 10. <í)c3, ~ e 7; 11. de, de; 12. 'f! xd8+, bí: xd8; 13. <í)xe5, las blancas tienen ventaja en el final. 4.
... , exd4
Así, las negras han conseguido que el alfil b5 se quede inactivo enseguida, y su peón d4 dificulta el desarrollo del flanco de dama blanco. Por su parte las negras han ganado tiempo y se disponen a crear un centro de peones dinámico. Cada bando tiene sus pros y sus contras. 5.
0-0, ...
En la partida Sokolov - Tukmakov (leningrado, 1987}, las blancas retiraron enseguida el alfil, 5. ~ c4. Ahora la jugada 5.... , ~ c5 (fundamental en caso de 5. 0-0}, es imposible, y después de 5 . ... , ~ f6; 6. 0-0, ~ xe4; 7. ~ xf7+, ~ xf7; 8. ~ h5+, g6; 9. e d5+, ~ g7; 10. e xe4, e t6; 11. d3, ~ c5, las blancas consiguieron una pequeña ventaja, que no pudieron realizar. 5.
Aquí esta jugada está más difundida que 5 .... , c6, si bien es cierto que en algunas variantes todo se reduce a una transposición de jugadas. 6.
~ c4,
...
Otra posibilidad es 6. d3, c6, y ahora 7. ~ a4, o 7. ~ c4. En la partida Kindermann - Tatai (Budapest, 1987}, después de 7. ~ a4, ~ e7, las blancas se las ingeniaron para jugar ya aquí una novedad, 8. f4! (en lugar de 8. e h5, 8. ~ b3, u 8. c3}.
..., ~ c5
Tres jugadas más, 8 . ... , d5; 9. f5, f6; 1 o. ~ h5+, ~ f8; 11. ~ h1! (preparando c2-c3}, y laposición negra resultó crítica. Contra el autor de la novedad, en el encuentro Kindermann - Lorenz (Berlín Oeste, 1987}, las negras reaccionaron de otra forma, 9 . ... , g6, y algunas jugadas después, 1 O. f6, ~ g8; 11. ed, b5; 119
12. ~ e 1+, ~ f8; 13. b4!, ~ b6 ; 14. ~ b3 , cd; 1S. ~ xdS!, ~ fS (15 ...., ~ xd5; 16. ~ h6+), 16. ~ xa8, las negras tuvieron que rendirse. Es una decisión mejor 9 . ... , de, pero en la partida Spassky - Barua (Nueva York, 1987), las negras también tuvieron bastantes problemas: 1 O. de, O-O; 1 1. ~ b3, ~ d6; 12. ~ hS!, d3; 13. cd, ~ eS; 14. ZH 3!. Era más precisa enseguida 12.... , ~ e5, y después de 13. ~ d2, las blancas sólo están algo mejor. En la posición del diagrama en los últimos años se ha probado algunas veces 8 ...., fS. En la partida Blatny - Malaniuk (Varsovia , 1989), después de 9. ~ hS+, g6; 1 o. ~ h6, ~ g8!; 11. ~ g7, ~ f6; 12. ~ xf6, <í) xf6; 13. eS, ~ g4; 14. ~ b3, d6; 1S. ed, 11!1?d7; 16. ~ d2, <í)e3, las posibilidades de ambos bandos son iguales. Se jugó más fuerte en la partida Kamsky - lvanchuk (Tilburg, 1990): 9. ~ b3!, dS; 1 O. ed, ~ xdS; 11. g e1 +, ~ f8; 12. 'i!\thS!. Las blancas obtuvieron una gran ventaja y ganaron. Con mayor frecuencia el alfil se retira a c4: 7. ~ c4, dS; 8. ed, cd; 9. ~ bS+, ~ d7; 10. ~ xd7+, ~ xd7; 11. ~ d2, ~ e7; 12. ~ b3, ~ b6; 13. ~ gS, y después 13 .... , 0-0; 14. ~ xe7, ~ xe7; 1S. Jd.e1 , ~ f6 ; 16. ~ hS, g ac8 (ChandlerWolff, RFA, 1985), o 13 . ... , f6; 14. ~ d2, aS; 1S. a4, 0-0; 16. ~ e1, ~ g6; 17. h3, g fc8 (LancTseshkovsky, Trnava, 1986), en ambos casos el juego se iguala. 120
En los torneos de los últimos años se encuentra con frec uencia 9. ~ b3, ~e7 .
.! .!
Aquí tenemos algunos de los ejemplos más caracte rí sticos, que demuestran que los peones doblados negros no son sólo una debilidad, sino también un punto fuerte: permiten una seria restricción de la posición enemiga. Dvoiris - Balashov (53º campeonato de la URSS, 1986): 1 O. c4, 0-0 ( 1O.... , dc3; 11. ~ xc3, O-O; 12. g e1, h6; 13. ~ f4 , ~ e6; 14. d4, ~ b4; 15. g e3, g c8; 16. g c1, ~f5; 17. g d3, 'ªe8; 18. h3, con mejor juego para las blancas, Nikolenko - Gorelov, Moscú, 1986). 11. cd, ~ xd5; 12. ~ d2, ~ e3; 13. fe, de; 14. ~ hS, ed+; 1S. 9 xcS, de ~ ; 16. g axc1, ~ e6; 17. ~ xe6 , fe; 18. g xf8+, 9 xf8; 19. ~ e3, 9 f6 , con igualdad. Dvoiri s- Kupreichik (Volgogrado, 1985): 10. Jd.e1, 0-0; 11. 9 hS
(tampoco es mejor 11 . 0ld2, a5; 12. a4, ~ b4, Anand- Tseshkovsky, Calcuta, 1986), 11 .... , ~ e6; 12. 0ld2, a5; 13. a4, ~ b4; 14. g e2, ~ d7; 15. 0l f3, ~ g4; 16. ~ g5, ~ xf3; 17. gf, g a6, y las negras tienen ventaja. Markland - Davis (torneo por correspondencia, 1985): 1 O. ~ h5, 0-0; 11. 0l d2, a5; 12. a3, a4; 13. ~ a2, g aG; 14. 0l f3, g g6 , con juego recíproco. Beliavsky - Tseshkovsky (53º campeonato de la URSS, 1986): 10. ~ g5, f6; 11. ~ f4 (11 . ~ h4, 0-0; 12. 0ld2, ~ h8; 13. g e1, a5, con posibilidades iguales), 11 .... , 0-0 (11 .... , ~ e6; 12 . .l:ie1, {{g, f7; 13. c3, 0-0; 14. cd, .ílxd4; 15. 0lc3, 0l g6, con una lucha compleja, Thipsay - Kupreichik, Frunze , 1985), 12. 0l d2, ~ h8; 13. g e1, a5; 14. a4, .ílb4; 15. h3, g5; 16. ~ h2, .lla6, con buenas posibilidades para las negras. Antes de seguir adelante, reco rdemos la jugada 6. 9 h5. En la partida Kuzmin - Malaniuk (Moscú, 1986), siguió 6 .... , ~ e7 (6 .... , ~ b6; 7. ~ e5+), 7. d3, 0l f6 (7 .... , c6; 8. ~ g5, con ventaja), 8. 9 h4, c6; 9 . .ílc4 (merece una prueba 9. ~ a4), 9 .... , d5; 1 O. ed ( 1O. ~ b3, de; 11. ~ g5, con posibilidades poco claras), 1 O.... , 0> xd5; 11. ~ g5, f6; 12. ~ d2, .íl e6, con juego igualado. Es curiosa la jugada 6. 9 f3!? , ideada por Hjartarson. En una partida contra Malaniuk (Moscú, 1987), después de 6 . ... , 0le7; 7. d3, c6; 8. ~ c4, d5; 9. ~ b3,
0-0; 10. ed, cd; 11. ~ g5, f6; 12. ~ f4, a5? (a una lucha tensa llevaba 12 .... , ~ e6; 13. h3), 13. a4, ~ e6; 14. 0l a3, g5; 15. ~ d2, 9 d7; 16. 0l b5 , consiguió una sensible ventaja. 6. 7.
... , d6 c3, ...
La moda cambia, y es difícil dar preferencia a uno de los peones, "e" o "d". En la partida Gelfand Kupreichik (Sverdlovsk, 1988), después de 7. d3, 0l f6; 8. ~ g5, h6; 9. ~ h4, g5?!; 1 o. ~ g3, ~ g4; 11. h3, ~ e5; 12. ~ b3, ~ e6; 13. ~ h5, .íl xb3; 14. ab, las blancas consiguieron ventaja. Tampoco es me jor para las negras 10 .... , ~ g4; 11. f3, ~ e6; 12. ~ d2, 9 d7 (Ghinda - Kotro nias, A tenas, 1986), 13. ~ xe6 (en opinión del vencedor era más fuerte 13. ~ b3!, ~ b6; 14. ~ f2, c5; 15. c3, d5; 16. ed, ~ xd5; 17. .l:ie1+), 13 . ... ,fe; 14. f4, h5; 15. fg, ~ g4; 16. ~ f3, 0-0-0; 17. ~ b3, ~ e3; 18. ~ xc5, de; 19. ~ e5!, y las blancas ganaron. El error se debe buscar antes. Parece arriesgado 9 .... , g5, des pués de 9 . ... , ~ e6; 1O. ~ d2, las blancas sólo tienen posibilidades un poco mejores. Con la jugada c2-c3 las blancas crean la amenaza 8. cd, ~ xd4; 9. ~ a4+, y en caso de 9 .... , c6 (9 . ... , ~ d7), 10. ~ xf7+, el alfil d4 cae atacado, y la retirada 9. ... , ~ f8, desde luego, no puede agradar a las negras. 121
7.
... , "l'J f6
13. 11ll g3, e gs; 14. f3!, o 1o.... , 11. lJ, xf2, 11lllxf7; 12. d4, lJ,e8; 13. "l'J c3, 11lllg8; 14. ~ g5), 11. ~ b3 ( 11. ~ d5, "l'J xd5), 11 .... , "l'J xe4; 12. "l'Jc3. La novedad 1 O. ~ e2!7, se empleó en la partida Geller - Barua (Coimbatore, 1987): 1 O.... , eS; 11. d3, "l'J g4 (Geller recomienda J 1.... , h5!?, y las negras tienen una sólida defensa), 12. ~ xg4, ~ xg4; 13. "l'J c3, a6; 14. 'f! b3, b5; 15. ~ e3, ~ e6; 16. e c2, g c8; 17. e d2, ~ xc3; 18. be, y la ventaja blanca es indudable. ~ xf2+;
Las negras tienen aquí pocos caminos. Ehlvest - Kupreichik (Kuibyshev, 1986): 7.... , e t6; 8. "l'J a3, ~ xa3; 9. e a4+, ~ d7; 10. e xa3, "l'J e7; 11. 'f! b3 (las blancas también tienen ventaja después de 11. ~ e2, 0-0; 12. d3, lJ, fe8; 13. cd, e xd4; 14. ~ e3, Jalifman - Kupreichik, Minsk, 1986), 11 .... , 0-0; 12. r! xb7, ~ c6; 13. e xc7, lJ, fcB; 14. e a5, ~ xe4; 15. d3, 2l c5; 16. e a6, ~ c6 (Ehlvest y Truus ofrecen esta bella variante: 16 .... , ~ xg2; 17. 11lllxg2, "l'J f5; 18. e b7, lJ,e8; 19. 11lllh1, "l'Jh4; 20. ~ e3!!, "l'Jf3; 21. e d7, .ll d8; 22. e h3, con una posición ganada) 17. cd, lJ, h5; 18. d5!, con clara ventaja blanca. Es interesante 7. ..., "l'J e 7, empleado por primera vez en la partida Ehlvest - Lalic (Saint John, 1988): 8. cd, ~ xd4; 9. e a4+, "l'J c6; 10. ~ b5, ~ f6!7; 11. ~ xc6+, be; 12. e xc6+, ~ d7; 13. e c2, 0-0; 14. d3, d5, con juego complejo. Para terminar, Geller recomienda 7.... , c6; 8. d3, "l'Je7; 9. "l'J d2, 0-0; 1O. ~ b3, d5, con una posición bastante sólida para las negras. 8. 9. 1 O.
cxd4, ~ xd4 e a4+, 11lllf8 "l'J c3, ...
Las blancas reciben oportunidades algo mejores en caso de 1O. ~ xf7, c5 (es mala 1O.... , ~ e5; 11. ~ b3, ~ xh2+; 12. 11lllxh2, "l'J g4+; 122
1 O.
..., c6
Manteniendo el alfil en el centro, las negras intentan frenar el peón "d". Sin embargo el alfil pronto se ve obligado a retirarse, y el centro de peones blanco empieza a avanzar. Por eso merecí a atención 1O. ... , ~ xc3; 11. de, "l'J xe4; 12. ~ xf7, "l'J xc3; 13. e b3, con juego complejo.
11. 12. 13.
~ e2, ~ b6 d3, ~ e6 ~ f3, 0ig4
A 13...., ~ g4, sigue 14. 0ie2, ganando tiempo. 14. 15.
~ xg4, ~ xg4
0i e2, ~ c5 d4, ...
Por fin se realiza el avance programado. La desgracia de las negras consiste en que no tienen un plan útil, y el rey no está en una posición decente. A su vez las blancas pueden reforzar la presión en el f lanco de rey.
No se contiene la presión en el flanco de rey mediante 24 ...., f5: 25. a4, ~ d8; 26. 0i f4, ~ f7; 27. b4, h6; 28. b5, g5; 29. 0!xe6, b!, xe6; 30. f4. 25. 26. 27. 28. 29. 30. 31. 32.
~ b4 ~ d1, ~ b6
~ f4 , ~ xf4
0i xf4, ~ g5 b!, c3, ~ f7 b!, g3, ~ h6 b!, e1, b!, e7? ~ c1!, ...
..., a5
...,
b3, f6
A 19 ...., d5, es muy desagradable 20. a4, l!lg8; 21. ~ a3, ~ a5; 22. e5, t rasladando el alfil a d6. 20. 21 . 22.
exf6, gxf6 a4, ~ c7
Los "rayos X" por la diagonal e 1h6 y la presión por la columna "g" permiten a las blancas cerrar la lucha con una solución de problema. Precipitaba la crisis 31. ..., ilhg8. 32.
17. 18. 19.
~ d2, d5 e5, l!l g8
h3, ~ e6
Si 15 . ..., ~ h5, entonces 16. g4, ~ g6; 17. 0i e2, y la iniciativa blanca en el flanco de rey resulta amenazadora. 16. 17.
23. 24.
~ d2, ~ b5 ~ e3, b!, e8 /l e 1, ~ h5
Pierde pieza, pero a 32 . ..., ilh8; decide 33. 0! e6, ~ xc1; 34. ~ g7, mate, y también llega tarde 32 . ..., ilg8: 33. ilxg8, l!lxg8; 34. 0i xd5!. 33. 34.
0! xe6, ~ xc1 il g7+.
Las negras abandonaron.
123
Defensa rosa
Partida 20 A. Karpov- G. Kasparov Match por el campeonato mundial, 41ª partida Moscú, 1985
Siete veces jugué la defensa rusa con Kasparov en nuestros matches por la corona ajedrecística, y creo que constituyeron una sensible aportación al desarrollo de la teoría. En seis de ellos, que se jugaron en los tres primeros matches, se encuentra 3. 0l xe5. Tres encuentros se incluyen en el texto principal del libro, y los otros tres en los comentarios a ellos. En Sevilla no se dio esta apertura, y en nuestro quinto match se probó la jugada 3. d4. Esta partida se examinará con detalle más adelante. 1.
2. 3.
e4, e5 0l f3, 0l f6 0l xe5, ...
Esta captura se incluye en la teoría como sistema C42. El otro sistema de la defensa rusa, C43, está relacionado con la jugada 3. d4.
3. 4.
..., d6 0l f3, ...
Rara vez se encuentra la retirada 4. 0lc4 con idea de llevar el caballo a e3. El sacrificio de pieza por dos peones, 4. 0l xf7, se puede recomendar a los amantes de la aventura; los grandes maestros no regalan un caballo ... 4.
..., 0l xe4
5.
d4, ...
En el viejo sistema 5. ~ e2, ~ e7; 6. d3, 0l f6; 7. ~ g5, ~ xe2+; 8. ~ xe2, ~ e7; 9. 0lc3, en nuestros días solo lo emplea B. Spassky. Después de la respuesta de Petrosian 9 .... , c6!, las negras rompen la simetría, y la pérdida de tiempo pierde significado. Desde luego, en esta variante las blancas casi no se arriesgan a perder, pero tampoco inquieta nada a las negras. Las partidas, por regla general, terminan en tablas. Desde el punto de vista teórico este resultado es conveniente para las negras.
5. 6.
... , d5 ~ d3, ~ e7
127
7.
0-0, 'l) c6
El momento principal. El sistema de defensa con 6.... , 'l)c6 y 7.... , t'4e7 (o estas dos jugadas en otro orden, como en esta partida), fue desarrollado por el maestro ruso K. Janisch en el siglo pasado. Parece más agresiva 6.... , 'l)c6; 7. 0-0, t'4 g4, con una inmediata presión sobre el centro. Sin embargo tampoco esta idea es nueva. Ya en el "Handbuch" de 1922, reeditado por K. Schlechter, se da esta continuación: 6 .... , ~ g4; 7. 0-0, 'l)c6; 8. ~ e 1, f5; 9. c4!, ~ d6; 1O. cd, t'4 xf3; 11. 1!\txf3, 'l)xd4; 12. 1!\te3, 1!\tf6; 13. ~ xe4, fe; 14. 1!\txe4+, ~ f7; 15. t'4 g5!, @' xg5; 16. 1!\txd4, con ventaja blanca (Capablanca - Marshall, match, 1909). Allí en lugar de la desafortunada jugada 8 .... , f5, se recomienda 8 . ... , ~ e7! y después 9. t'4xe4, de; 1 O. ~ xe4, t'4 xf3!; 11. @' xf3, 'l) xd4; 12. @' d3, 'l)e6, con juego igualado. 128
La teoría de las pasadas décadas, desde luego que no se ha quedado quieta, pero sólo en nuestros dí as se ha descubierto con toda claridad cuál importante es cada tiempo en este sistema de apertura. Se puede decir que la jugada del alfil negro de casillas negras a e7 o del de casillas blancas a g4, determinan los dos principales cauces en esta variante de la defensa rusa. Del ataque del alfil en g4 ya hablaremos más adelante. En los últimos años junto con el plan de presión sobre el centro enemigo se ha desarrollado la variante simétrica (de la que hablaremos también más tarde), en la que la casilla c6 no la ocupa el caballo, sino un peón, y el alfil se saca por d6: 6.... , t'4 d6; 7. 0-0, 0-0; 8. c4, c6. La posición de las negras es algo pasiva, pero suficientemente sólida. Como voy a apoyarme en mis seis partidas de match con Kasparov, ofrezco el principio de cada una de ellas. (1, 28): 6.... , 'l)c6; 7. 0-0, ~ g4; 8. .l:le1, t'4e7; 9. c4, 'l) f6; 10. cd; (2, 15): 6 .... , 'l)c6; 7. 0-0, t'4g4; 8. c4, 'l)f6; (1, 30): 6.... , t'4e7; 7. 0-0, 'l)c6; 8. ~ e1, t'4g4; 9. c4, 'l)f6; 10. 'l)c3; (1, 41): 6.... , t'4 e7; 7. 0-0, 'l)c6; 8. c4, 'l)b4; (1, 48): 6.... , 'l)c6; 7. 0-0, t'4e7; 8. c4, 'l)f6; 9. 'l)c3, 0-0. Dos partidas del primer match (una la recordaremos un poco después), donde Kasparov jugó con blancas, demostraron que la
variante es inofensiva para las negras, y en la tercera yo elegí el otro color. Sin embargo preparé una pequeña sorpresa ... 8.
c4, ...
Las blancas atacan inmediatamente el centro. En dos encuentros precedentes, jugados con esta apertura, antes del avance del peón "e" siguió 'ª f 1-e 1, y las blancas no consiguieron nada. Estas son las partidas. Kasparov - Karpov ( 1,28) 6. ... , ~ c6; 7. 0-0, ~ g4; 8. 'ª e1, :4 e7; 9. c4, ~ f6; 1 O. cd, :4 xf3. Introducida en la práctica por V. Smyslov en el match de cand idatos con R. Hübner (Velden, 1983). Antes se prefería 10 .... , ~ xd5. 11. ~ xf3, ~ xd5; 12. ~ h3 (tampoco produce dolor de cabeza a las negras otras jugadas de dama, 12. ~ g3 y 12. ~ xd5), 12. ... , ~ xd4; 13. ~ c3, ~ d7; 14. ~ xd7+, 11!11 xd7; 15. ~ e3, ~ e6;
16. 'ª ad1, ~ d6; 17. ~ f5, 11!11e7; 18. ~ b5, 'ª hd8; 19. ~ xd6, cd; 20. h3, b6; 21 . g4, h6; 22. ~ d4, 'ª ac8; 23. :4 c3, g6; 24. ~ c2, h5; 25. f3. Tablas. Kasparov - Karpov (1 ,30) 6 .... , ~ e7; 7. 0-0, ~ c6; 8 . .Q e1, ~ g4. En el año 1982 jugué tres partidas con L. Portisch, en las que el gran maestro húngaro eligió 8 .... , ~ f5 . Después de 9. c4, en todos los casos obtuve sensible ventaja, y por su causa cayó en desuso el ataque del alfil en f5. 9. c4. En la sexta partida del match de la final de candidatos con Korchnoi (Moscú, 197 4), jugué más comedido, 9. c3, f5; 1O. ~ b3. Después de 1O.... , 0-0; 11 . ~ bd2, ~ h8; 12. h3, ~ h5; 13. ~ xb7, las negras perdieron rápidamente, aunque la culpa no fue de la apertura. Esta variante en los últimos tiempos se encuentra con frecuencia en los torneos de grandes maestros, a pesar de que el juego, por regla general, resulta favorable a las blancas. Un caso curioso le pasó una vez a una de nuestras estrellas ajedrecísticas, V. lvanchuk ... En la partida lvanchuk- Anand (Reggio Emilia, 1988-89), las negras en lugar del enroque corto respondieron 1 O.... , ~ d6, y después los acontecimientos se desarrollaron de una forma inhabitual: 11. ~ fd2?!, 0-0-0; 12. f3, ~ h4; 13. ª f1, ~ h3 (las continuaciones 13. ... , ~ xf2+; 14. 'ª xf2, ~ xf2; 15. ~ xf2, ~ xh2; 16. ~ f 1 y 13 . ... , :4h5; 14. fe, fe; 15. :4xe4, de; 16. 129
<Dxe4, S' g6; 17. <Dc5, son desfavorables a las negras), 14. ~ c2 (a 14. gh, S' g6+; 15. ~ h 1, decide 15 .... , <D f2+; ·16. 2'J, xf2, ~ xf2; 17. l!'d1, ~ he8), 14 . ... , S' g6; 15. <D b3, IJ, hfS; 16. <D a3, ~ deS.
~ f4, <D bS; 1S. S' xd7+, <D xd7; 19. ~ f2, ~ f6; 20. g3, bl. fS; 21.
a4, 2'J, f7; 22. a5, h6; 23. <D c5, etc ... Mi 30ª partida con Kasparov terminó así: 9 . ... , <D f6; 1 O. <Dc3 (en lugar de 1O. cd, 28ª partida), 1 O. ... , de; 11. ~ xc4, 0-0; 12. ~ e3, ~ xf3; 13. ~ xf3, <D xd4; 14. ~ xd4, S' xd4; 15. 2J, xe7, S' xc4; 16. S' xb7, c6; 17. ~ b3, S' xb3; 1S. ab, ~ abS; 19. ~ a3, ~ feS; 20. 2J, xe8+, ~ xe8. Tablas. Regresemos por fin a la 41 ª partida.
S.
En una lucha atípica las blancas superaron a su adversario y aquí podían obtener ventaja decisiva: 17. ~ f4!, ~ g5; 18. ~ xg5, <D xg5; 19. gh, <De6+; 20. ~ h1, <Df4; 21. ,¡::¡,ae 1. Pero de forma inesperada movieron el rey, 17. ~ h1?, <Df2+; 18. bl. xf2, ~ xg2+, y las blancas abandonaron (a 19. bl.xg2, o 19. ~ g 1, sigue 19.... , Zl e1+). En lugar de 1O.... , S'd6 y 1O.... , 0-0, las negras tienen la jugada 1 O. ... , S' d7, sin embargo en la reciente partida Ehlvest - Yusupov (Rotterdam, 1989), las blancas dictaron sus condiciones: 11. <D fd2, 0-0-0; 12. f3, <D xd2; 13. <D xd2, ~ h5; 14. S'a4, 2J, heS; 15. <D b3, a6; 16. ~ d2, ~ g6; 17. 130
... , <D b4
En la 48ª partida, última del primer match mi "soplo" (ver la siguiente jugada del alfil blanco) fue aprovechado por Kasparov, en aquella ocasión él llevaba las blancas. Como la maniobra del caballo de c6 a b4 no se justificó en la 41 ª partida, decidí jugar "a la antigua" con el otro caballo.
Kasparov - Karpov ( 1,48) 8 . ... , 9. ~ c3, 0-0; 1 O. h3. Elimina para siempre el contrajuego ligado con la jugada ~ c8-g4. Aunque la jugada h2-h3 es bastante ingeniosa, se podía pasar sin ella ... Kudrin - Wolff (Campeonato USA, 1985): 1 O. cd, ~ xd5; 11. ~ e1, ~ e6; 12. a3, ~ f6; 13. ~ e4, ~ de7? (a e7 debe ir el otro caballo, 13 .... , ~ ce7!, y por lo visto se iguala el juego), 14. ~ g5!, ~ xg5; 15. ~ xg5, ~ f5 (y aquí es correcta 15 .... , h6), 16. d5, ~ xe4; 17. ~ xe4, ~ b8; 18. ~ h5, h6; 19. Zi ae1, ~ xd5; 20. ~ xf7, ~ f6; 21. ~ xh6+, ~ h7; 22. 'f! h3. Tablas. 1 O. . .. , de. Después de 1O.... , ~ b4; 11. ~ e2, c5; 12. a3, ~ c6; 13. de, de; 14. ~ e3, las blancas tienen cierta ventaja (Velimirovic Schüssler, Smederevska Palanka, 1979). 11. ~ xc4, ~ a5; 12. ~ d3, ~ e6; 13. ~ e1, ~ c6. Más tarde se encontró la interesante posibilidad 13 .... , c5!?. Después de 14. ~ e3, ~ c8; 15. 'f! e2, cd; 16. ~ xd4, ~ c4; 17. Zi ad 1, las blancas están mejor, pero en caso de 14 .... , c4; 15. ~ c2, ~ d5, las negras consiguen la igualdad (Fedorowicz - Kogan, USA, 1985). Por lo visto, las blancas tienen mayores posibilidades tras 14. ~ g5, h6; 15. ~ h4. Ahora en caso de 15 .... , c4; 16. ~ xf6, ~ xf6; 17. ~ e4, ellas ejercen una posición de dominio en el centro del tablero. 14. a3, a6; 15. ~ f4, 'f! d7. Un ~ f6;
grave error. Era correcta 15 .... , ~ d5, por ejemplo: 16. ~ g3, ~ f6; 17. ~ c2, ~ ce7; 18. ~ e4, ~ f5; 19. ~ xf6+, ~ xf6; 20. ~ b3, c6; 21. ~ e5, ~ fd5; 22. 'f! f3, ~ e6; 23. ~ ad1, ~ f5; 24. ~ xd5. Tablas
(Gufeld - Schüssler, La Habana, 1985). 16. ~ e5!, ~ xe5; 17. de, ~ d5; 18. ~ xd5, ~ xd5; 19. 'f! c2, g6; 20. ~ ad1, c6. Lleva de manera forzada a una posición difícil para las negras, había que conformarse con un final peor: 20 .... , 'f!c6; 21. 'f! xc6, ~ xc6; 22. ~ c4. 21. ~ h6, ~ fd8; 22. e6!, fe; 23. ~ xg6, ~ f8; 24. ~ xf8, ~ xf8; 25. ~ e4, ~ f7; 26. Zi e3, JJ. g7; 27 . .tl, dd3, JJ. f8; 28. JJ.g3, ~ h8; 29. 'f! c3, JJ. f7; 30. ~ de3. La posición de las negras es desesperada, y aunque la partida continuó casi cuarenta jugadas más, en un profundo final Kasparov consiguió la victoria. 9.
~ e2!,
...
131
Propiamente, sólo esta jugada con el objetivo de eludir el cambio del alfil de casillas blancas, supuso una novedad en el presente match. Hasta entonces se encontraba 9. cd (ver Partida 23). 9.
..., dxc4
La interesante posibilidad 9 .... , 1O. 0ic3, 0-0 (o 9.... , 0-0; 1O. 0ic3, ~ e6). la veremos más adelante. ~ e6;
1 O. 11.
~ xc4, 0-0 0i c3, ...
Después de 11. 0ie5, 0id6!; 12. ~ b3, 0i f5; 13. a3, 0id5; 14. 0ic3, ~ e6; 15. g e1, c6; 16. ~ c2, 0ic7, el juego se equilibra (Sindik - Zysk, Baden-Baden, 1985). 11. 12.
~ f5 ~ e3, Zl e8
...,
a3, 0i d3
Una jugada pseudoactiva, era más prometedora 15 .... , 0lc6.
~ b3, ~ f6
m
132
13. 14. 15.
..., 0i d6
Después de 12 .... , ~ g4; 13. h3, ~ h5; 14. g4!, ~ g6; 15. 0ie5, y después f2-f4 las blancas están claramente mejor, pero merece atención 12 . ... , ~ h8!. En la partida Mnatsakanyan - Díaz (Varna, 1985) después de 13. 0ie5, f6; 14. 0i f3, ~ g4; 15. h3, ~ h5; 16. ~ e6, ~ xf3; 17. gf, mea; 18. ~ f4, f5; 19. ~ h2, 9 6; 20. ~ b3, ~ g5, las negras consiguieron una seria iniciativa en el flanco de rey. 13.
Más tarde se jugó la partida Sokolov- Agzamov (52º campeonato de la URSS, 1985). las blancas jugaron más fuerte, 13. 0i e5!, y tras 13 . ... , 0i c6 (es más precisa 13 .... , c5; 14. ~ f4, c4; 15. 0i xc4, 0l xc4; 16. ~ xc4, ~ xd4), 14. ~ f4, 0l f5; 15. 0i xc6, be; 16. d5, c5; 17. 0l a4, ~ a6; 18. g e1, ~ e7 (y aquí es mejor 18 .... , c4; 19. ~ c2, 0ld6L 19. Zl c1, ~ d6; 20. ~ g3, recibieron una gran ventaja.
h3, ...
16. 17.
g b1, c5 dxc5, 0i e4
No pasaba 17 .... , 0i xb2; 18. Zl xb2, ~ xc3; 19. cd!, ~ xb2; 20. ~ Xf7+!, ~ xf7; 21. m d5+, COn un ataque irresis.tible.
18.
~ c2!,
0i xb2
A 18 ...., 0ig3, es muy fuerte 19. fg, g xe3; 20. ~ d2, ~ d4; 21. 0i xd4, ~ xd4; 22. ~ h2, ~ g6; 23. 0id5!. 19. 20. 21. 22. 23.
~ xc5, ~ xc2
..., ~ d1 g e7, Zi xe7 ~ xe7, bi d3 0i g5, ~ b2 ~ b4, ...
..., h6 0ie4, f5 0i c5, bi d5 bi e1, f47
En el Zeitnot las negras hacen una jugada perdedora, era imprescindible 30 .... , ~ f7, o 30 .... , ~ c2. 31.
a5, g xb4
g xa7, ...
Amenazaba 27 ...., ~ c2, recuperando el peón a3. Ahora a 27 .... , ~ c2, ya sigue 28. g e1!. 27. 28. 29. 30.
32.
~ xd8, g axd8 g xb2, ~ xc3 g xb7, 0i xc5
Como resultado de un cambio masivo las blancas han ganado peón, pero, probablemente, era mejor otro procedimiento: 23 . ll c1, ll d1+ (23 .... , ~ e4; 24. g xa7), 24 . g xd1, ~ xd1; 25. g xa7. 23 . 24. 25. 26 . 27.
No valía 31 . ... , ~ e5; 32. a5, ~ d6; 33. a6, ~ xc5; 34. ~ xc5, g xc5; 35. Zi e8+, ~ f7; 36. a7.
a4!, Zi d4
Q
8
.A
.
g
.t. ~
i 00 Ji §
Esta posición puede considerarse histórica. Avanzando el peón "a" una casilla, las blancas alcanzaban la cima: 33. a6!, ~ b3 (33 .... , ~ a4; 34. a7, ~ c6; 35. Zi e6, ~ d5; 36. g d6; 33 .... , g b8; 34. g xd1, ~ a3; 35. 0ib7!), 34 . 0ixb3, g a4 (34 ...., bi xb3; 35. g e8+, y 36. a7), 35. 0ic5, Zla5; 36. bl e4!, ~ f7; 37. Jda4!, g xa4; 38. 0i xa4, ~ d4; 39. 0ic3!, y las negras pierden el alfil. Recuerdo que en este momento yo ya había ganado cinco partidas, y ganando la sexta, también lo hacía en el match con el resultado de 6:1. El encuentro hubiera terminado, y se hubiera producido un giro en la historia del ajedrez ... 33.
Zi xd17, ~ d4 133
34. 35.
0J e6, :?4 a7 bt d7, ...
También es dudoso que ganara 35. 0J xg7, btb2; 36. 0J f5, ~ xf2+; 37. ilf1. 35. 36. 37. 38.
... , btb1 + ilh2, ~ xf2 0J xf4, bt a1 0J e6, bt xa5
Las negras se complican la vida. Como indicó Y. Dorfman, llevaba a las tablas de una forma más sencilla 38 .... , g5!; 39. bt g7+, ~ h8; 40. bt g6, ilh7; 41. 0J f8+, ilh8; 42. a6 (42. btxh6+, ilg7; 43. bt g6+, ~ xf8; 44. bt f6+, ~ g7; 45. bt xf2, bt xa5), 42 .... , :?4 g1+!; 43. ~ g3, bta3+; 44. ilg4, lla4+!. 39. 40. 41.
ll xg7+, ilh8 ll f7, ~ e3 ~ g3, ...
Aquí se aplazó la partida, y tras el análisis casero se hizo evidente que era imposible realizar el peón. Intenté conseguirlo durante treinta jugadas más, pero sin éxito. 41. 42. 43. 44. 45. 46.
... , ~ d2 bi d7, :?4 c3 ilf3, ~ g8 0J f4, g f5 ~ e4, bi f7! ll d8+, ...
Se mantenían algunas posibilidades de victoria en el final de piezas menores: 46. bi xf7, ~ xf7; 47. 134
~ f5. No obstante, los segundos de mi adversario Y. Dorfman y E. Vladimirov publicaron más tarde un interesante análisis, describiendo un método de defensa para las negras en este final.
46. 47. 48. 49. 50. 51.
52. 53. 54. 55. 56. 57. 58. 59. 60. 61. 62. 63. 64. 65.
... , ~ h7 bi d3, ll e7+ il f3, :?4 b2 bib3, :?4 c1 0J d5, bt e5 0J f6+, ilg6 0J e4, ZH5+ ~ e2, bi e5 .tl.b4, bt e7 .tl.c4, bi eS g3, :?4 b2 ilf3, bt e6 bi c5, ~ d4 bi d5, ~ e5 bib5, :?4 c7 bic5, :?4b6 bt c8, ~ d4 ll g8+, :?4g7 h4, bt a6 ~ f4, ...
Después de 65. h5+, ~ xh5; 66. bt xg7, .tl.a3+; 67. ~ f4, .tl.f3+, aparece por parte de las negras una torre "rabiosa". 65. 66. 67. 68. 69. 70. 71.
Tablas.
... , bt a5 lle8, .l:H 5+ ile3, bt e5 bl g8, ble7 ~ f4, bt f7+ ~ g4, h5+ ~ h3.
Partida 21 J. limman -J. Hjartarson Rotterdam, 1989 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8.
e4, e5 <í) f3, 0l f6 0l xe5, d6 0l f3, 0l xe4 d4, d5 ~ d3, 0l c6 0-0, ~ e7 c4, ...
Se puede suponer que la 41 ª partida de mi primer match con Kasparov le quitaría a las negras por mucho tiempo las· ganas de realizar aquí el salto del caballo a b4, sin embargo en adelante en lugar de la jugada 1O. ..., de, hecha por Kasparov, se propuso el ataque ~ e8-e6, y la variante recibió un impetuoso desarrollo en esa dirección.
8.
..., <í1b4
9.
~ e2,
0-0
Otro orden de jugadas es 9 .... , 1O. 0lc3, 0-0.
~ e6;
1 O.
0lc3, ...
Es interesante la siguiente partida, en la que las negras jugaron enseguida a2-a3. Sznapik - Tischbierek (Varsovia,
1990): 1 O. a3, 0l c6; 11. cxd5, 12 . <í1 c3, 0l xc3; 13. bxc3, ~ f5; 14. c4, 'f! e4; 15. ~ a2, ~ f6; 16. ll d2, bl, ad8; 17. ~ b2, <í1 e7; 18 . .ll e1, ! H 4; 19. g3, 'f! d6; 20. ~ f1, ~ g4; 21. h3, ~ xf3; 22. 'f! xf3, c5; 23. d5, ~ xb2; 24. bt xb2, b6; 25. llbe2, 0l c8; 26. bl. e5, 'f! d7; 27. ~ d3, <í1 d6; 28. f! h5, g6; 29. ~ h4, bl, de8; 30. bl, e7, f! d8; 31. ~ xe8, ~ xe8; 32. f! xd8, ~ xd8; 33. bl, e7, b5; 34. cxb5, c4; 35. ~ f1, 0l xb5; 36. a4, <í1 d6?. El juego transcurrí a con cierta iniciativa de las blancas, pero aquí después de 30. 0la3!, 31. bl, e3, 0lc2; 32. bl,c3, 0ld4!; 33. ~ xc4, bl, xd5!, debí a terminar en tablas. Ahora las negras reciben un final perdido. 37. bl, xa7, bl, c8; 38. bl, a6!, c3; 39. ~ d3, 0lc4; 40 . .llc6, bl, xc6; 41. dxc6, 0lb6; 42. c7, ~ f8; 43. a5, 0l c8; 44. ~ f1!. Las negras abandonaron. En la mitad de la partida examinada la dama llegó de la casilla d5 a d6 en tres jugadas, pero pudo jugar inmediatamente 'f!d5-d6 ... Hjartarson- Yusupov (Barcelona, 1989): 14 . ... , f! d6; 15. d5, 0le5; 16. 0ld4, ~ d7; 17. Zlb1, ~ xd5;
135
b6; 18. ~ b5, ,¡g xb5; 19 . .ll xb5. Tablas. 1 O.
... ,
~ e6
Generalmente el alfil llega a f5 en dos saltos, pero en la partida Ljubojevic- Yusupov (Barcelona, 1989), las negras lo llevaron enseguida a f5, demostrando un camino claro para las tablas: 1 O. ... , ,¡g f5; 11. a3, ~ xe3; 12. be, ~ e6; 13 . .ll e1, de; 14. ~ xe4, ~ d6; 15. ,¡gg5, ~ d7; 16. ~ h4, ~ a5; 17. ,¡g a2, ~ g4; 18. ~ e2, .ll ae8; 19. h3, ~ e6; 20. e4, ~ e7; 21. ~ xe7, ~ xe7; 22. ~ f3. Tablas. Algunos meses después (Barcelona, 1989), los mismos adversarios continuaron la discusión teórica, y todo se repitió hasta la jugada 13. .lle 1. Aquí posiblemente Yusupov temió una preparación casera, y jugó de otra forma, en lugar del cambio en c4, jugó 13 . ... , ~ f6. Y de nuevo todo terminó pacíficamente: 14. ~ f4, .ll e8; 15. 9 a4, a6; 16. ~ b3, ~ a5; 17. ~ b4, e5; 18. de, ~ e6; 19. ~ b3, ~ a5. Tablas. 11.
~ e3,
...
La jugada 11. cd, la veremos más tarde.
11. . . .. ,
~ f5
(Ver diagrama) En una partida con Ljubojevic 136
.!.!.!
ji ® § :,.',
~
(Bugojno, 1986), decidí probar la variante con negras y aquí jugué 11. ... , ~ f6. Después de 12. ~ xe4, de; 13. ~ e 1, e6; 14. 9 b3, ~ e7; 15. a3, ~ a6; 16. ~ e2, Zl fd8; 17 . .llfd1, .llae8; 18. 9 a4, e5; 19 . .ll e1, ed; 20. ~ xd4, las blancas consiguieron una ventaja sensible, y tuve que hacer grandes esfuerzos para conseguir las tablas. La jugada 11 .... , f5, se consagra al siguiente encuentro, pero en la segunda partida del match de candidatos Ehlvest - Yusupov (Saint John, 1988), las negras tomaron enseguida en c3. Después de 11 . ... , ~ xe3; 12. be, ~ e6; 13. ed, ~ xd5; 14. 9 e2, ,¡g f6 (merece atención 14 . ... , f5), 15. ~ d2, 2J. e8; 16 . .ll ae1, ~ e6; 17. ~ d3, g6; 18. ~ f4, ~ g7; 19. ~ e4, ~ d5; 20. ~ e5, Zl xe1; 21. .ll xe1, .ll b8, las blancas recibieron ventaja posicional, que en opinión de Ehlvest, podían reforzar mediante 22. ~ g3!, preparan-
do 23. h4. Después de 22. ~ d2, 24. ~ eS, las negras recibieron buen juego. ~ aS; 23. ~ e2, bl, e8; ~ xeS; 2S. de, ~ e7!,
12.
~ b3,
...
En la partida lvanov - Arkhipov (Moscú, 1985), después de 12. a3, ~ xe3; 13. be, ~ e2; 14. bl, a2, ~ xa3; 1S. bl, xa3, ~ xa3; 16. eS, ~ b2; 17. ~ b3, ~ xe3; 18. ~ xe3, e6; 19. bl, a1, bl, eS; 20. ~ a3, ~ e7; 21. ~ d2, bS; 22. bl, a6, el juego se complicó a favor de las blancas. Sin embargo, continuando 16 . ... , bS; 17. ~ b3, ~ xe5; 18. de, e6; 19. ~ d4, ~ d7; 20. ~ f4, a5; 21. ~ d6, ~ eS, las negras recibían iguales oportunidades. La jugada 12. bl, e 1, la empleó Short en un encuentro con Timman (Hilversum, 1989). El tiroteo táctico después de 12 . ... , ~ xe3; 13. be, ~ xa2; 14. bl, e2, ~ xe2; 15. ~ xe2, ~ xe3; 16. ~ xe3, e6; 17. bl, b1, a5; 1S. ~ xb7, a4; 19. ~ eS, ~ d6; 20. ~ xe6, ~ eS; 21. bl,b6, llevó a cierta ventaja blanca. Si bien es cierto que después de imprecisiones mutuas todo terminó en tablas. En una partida con Hübner (Sarajevo, 1990), Timman preparó una mejora, aplazando el cambio en c3 algunas jugadas: 12 . ... , de; 13. ~ xe4, e6; 14. ~ eS, ~ xe3; 1S. be, ~ d5; 16. ~ f3. Las blancas sólo tienen una pequeña ventaja. Hay que prestar atención a que el gran maestro holandés juega a
gusto la defensa rusa con cualquier color. En especial, en la partida comentada Timman alcanzó una bonita victoria con blancas. Regresemos a este encuentro, advirtiendo que desde la casilla b3 la dama otea el centro y el peón b7. Ahora la variante 12 .... , ~ xc3; 13. be, ~ c2, ya no es tan buena para las negras: 14. bl, ac1, ~ xe3; 15. fe, ~ g5; 16. ~ xg5, ~ xg5; 17. g f4, ~ e4; 18. g3. 12.
..., dxe4
A 12 . ... , e6, las blancas juegan 13. e5, ~ xe3; 14. be, ~ e2; 1S. g ae1, ~ xe3; 16. fe, con mejores posibilidades. Aquí la jugada de espera 13. ~ ae1, pasa la iniciativa a las negras: 13 . ... , de; 14. ~ xe4, bS!; 1S. ~ xf7+?! (15. ~ e2, lleva a una pérdida de peón: 15 .... , ~ e6; 16. ~ d1, ~ xc3; 17. ~ xc3, ~ xa2; 18. b3, a5, y a5-a4), 1S . ... , bl, xf7; 16. ~ e5, ~ dS; 17. ~ xe4, ~ xe4; 18. ~ xe6, ~ eS!; 19. bl, ee1, ~ d6; 20. ~ xf7, ~ xf7; 21. g e6, bl, adS. Con la igualdad material el ovillo de píezas negras es muy sólido, y enseguida alcanzaron la cima (Jalífman - Arkhipov, Moscú, 1985). 13.
~ xe4,
a5
Después de 13.... , ~ xc3; 14. be, 15. ~ ad 1, ~ xe3; 16. fe, las blancas ejercen una fuerte presión sobre el punto f7.
~ c2;
14.
a3, ... 137
... ,
0l d2!?. Después de 15.
~ xd2, ~ c2; 16. ~ xf7+, bl, xf7; 17. ~ e6, ~ f5; 18. ~ b3 (18. ~ e5, ~ d6), 18. . .. , ~ c2; 19. ~ e6, la partida terminó en ta-
En la partida Tseshkovsky - Arkhipov (Moscú, 1985), siguió aquí 14 . ... , 0l xc3; 15. be, a4; 16. ~ b2, 0l c2; 17. bl, a2, 0l xe3; 18. fe, ~ d6. Ahora era correcta 19. 0le5!, ~ e6; 20. ~ xe6, fe, con mejores posibilidades para las blancas. Sin embargo, después de dos imprecisiones seguidas, 19. ~ xb7?, bl b8; 20. ~ d5? (también en caso de 20. ~ a6, ~ d7, las negras tienen suficiente actividad), 20 . ... , ~ d3!, las blancas se quedaron en una posición perdida: 21. ~ c6, ~ xf1; 22. ~ xf1, bl, b 1 +, etc ... En la partida examinada Timman hizo una jugada nueva, tomando en respuesta a 14.... , 0lxc3, el otro caballo, 15. ab. Sin embargo antes de seguir adelante, hay que advertir que media jugada antes se empleó una importante novedad en la partida Efimenko - Vzdvizhkov (torneo por correspondencia, 1989). En la posición del diagrama siguió 14. 138
blas, ni uno ni otro lado pudo rehusar la repetición de jugadas . La valoración de la jugada 14 . ... , 0ld2, sin duda depende de la va riante 15. 0l xd2, ~ c2; 16. ab, ~ xb3; 17. 0l xb3, ab; 18. 0ld5. La relación material de fuerzas está equilibrada, pero yo preferiría jugar con tres piezas menores contra la dama. Si la posición de las blancas no es de su gusto, entonces en lugar de la jugada de dama debe preferir 12. a3, o 12. z:l.c 1. 14. 15.
... , 0l xc3 axb4, ...
15.
. .. , b5 bxa5!,
16.
No es tan clara 16. ~ xf7 +, bl, xf7; 17. be, a4, y la continuación 16.
be, be; 17. '!! xc4, ~ e6; 18. ~ b5, ab; 19. 'ª xa8, ~ xa8; 20. cb, ~ d5, en líneas generales es favorable a las negras. 16. 17. 18.
..., bxc4 ~ xc3, ~ d3
'ª fe1, ...
En resumen las blancas junto a la ventaja de material tienen un peligroso peón pasado "a". Hjartarson opone una resistencia desesperada. 18. 19. 20.
..., -ª b8 ~ d2, c5 dxc5, ~ f6
Resulta insuficiente 20 .... , ~ xc5; 21. ~ e5!, -ªb5; 22. ~ e3 (22. ~ g3?, -ª xb2; 23. ~ c3?, ~ xf2+!), 22 .... , -ª e8; 23. ~ xe8+!, ~ xe8; 24. ~ xc5, ~ a8; 25. ~ d4, con la amenaza ~ c3. 21. 22.
<Zj¡ e5, ~ d5 ~ f4!, ...
Era precipitada 22. b4?, cb; 23. ~ xd3, ~ xd3; 24. <Zj¡ xd3, ~ xa1; 25. -ª xa 1, llbd8, y las negras ganan. 22.
..., -ª fe8 (Ver diagrama)
No valí a 22. ..., -ªb3; 23. ~ d2, -ª fb8; 24. a6, -ª xb2; 25. a7!. O 22. ... , ~ xc5; 23. <Zj¡ xd3, pe~o se man-
tenían mayores posibilidades prácticas tras 22 .... , g5, abriendo una ventanilla para el rey. Sin embargo, parece que aquí las negras tampoco están tan mal. 23.
b4!!, ...
¡Brillante réplica! Tres peones pasados es demasiado ... 23. 24. 25. 26. 27.
..., cxb3 ~ xd3, ~ xd3
<Zj¡ xd3, ~ xa1 bl xa 1, b2 <Zj¡ xb2!, ...
Pero no 27 . bi,b 1, -ªb3; 28. <Zj¡ xb2, 'ª xb2. 27. 28. 29.
..., -ª xb2 h3, -ª c2 a6, g5
Tampoco ayudaba 29 .... , -ª xc5; 30. a7, -ªa8 (30 .... , -ª cc8; 31. -ªb1, 'ªa8; 32. -ªb8, etc ... ), 31. bi,b1, 139
g cc8; 32. g bS, g5; 33. ~ d6 (aún es pronto para 33. z:l xc8, g xc8; 34. ~ b8, g c1+; 35. ~ h2 , lla1), 33 . ... , ~ g7; 34. ~h2. ~ d6,
30. 31. 32. 33.
!laG, ~ f7 c6, ~ e6
34.
~ b8.
g aS
a7, f5
Las negras abandonaron. (Ver diagrama) La posición final es bastante picante. Después de 34 .... , ~ d5; 35. c7, decide el traslado de la
140
torre blanca a la octava fila, y a 34 .... , h5, sigue 35. c7+, ~ d7; 36. llg6, ~ eS; 37 . .!h g5.
Partida 22 A. Karpov- Y. Seirawan Bruselas, 1986 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 1 O.
e4, e5 <í) f3, 0J f6 0J xe5, d6 0J f3, 0J xe4 d4, d5 ~ d3, {! e7 0-0, 0J e6 e4, 0Jb4 ~ e2, 0-0 <í) e3, ...
~ e4, ~ d7; 16. de? (era correc~ b2), 16 . ... , ~ f5 ; 17. ~ d4, ~ e6; 18. ~ b2, {! f6; 19. ~ d2, ~ xb2; 20. ~ xb2, 0J e2,
ta 16.
las negras consiguieron ventaja, que transformaron en un punto. 11.
..., f 5!?
En la Copa del mundo en Rotterdam se empleó una novedad en la partida Nunn - Yusupov, 1 O. 0J e5?!. El salto del caballo no le produjo ningún problema a las negras, 1 O. ... , e5; 11. ~ e3, ~ f5; 12. a3, 0J e6; 13. 0J xe6, be; 14. ed, ed, 15. de, ~ xe5; 16. ~ xe5, <í) xe5; 17. 0J d2, d4, y diez jugadas después se acordaron las tablas.
10. 11.
~ e6 ~ e3, ...
... ,
En este mismo torneo de Bruselas, Ljubojevic, contra Seirawan, jugó algo más burdo: 11. ed. Después de 11 . ... , 0J xe3; 12. be, 0J xd5; 13. ~ e2 (a juego igualado llevaba 13. ~ d2, 0Jb6), 13. ... , e5; 14. e4, 0Jb4; 15.
Una idea curiosa: gracias al enérgico avance del peón "f", las negras consiguen un activo contrajuego en el flanco de rey. En la partida Sokolov - Smyslov (Moscú, 1987), se encuentra otra continuación nueva, 11. ... , 0J f6 . Pero es dudoso que se deba recomendar esta retirada del caba141
llo. Después siguió 12. a3, <D e6; 13. b3, <D e4. El cambio en c3 con el peón blanco en b2 es desfavorable para el negro, porque refuerza el centro enemigo, pero ahora, cuando el peón "b" ha avanzado una casilla, y la captura b2xc3 es imposible, el caballo negro regresa a e4, para tomar en c3. No obstante las mismas blancas toman el caballo, y la pérdida de tiempo del negro no ha sido en vano. 14. <D xe4, de; 15. d5, ef; 16. ~ xf3, ~ d7; 17. de, ~ xe6; 18. ~ xe6, be; 19. ~ f3, ~ d3; 20. bi ab1, ~ g6; 21. a4, aS; 22. ~ f4, ~ d6; 23. ~ xd6, ~ xd6; 24. bibd1, ~ b4; 25. bi d7, bi ab8; 26. il xe7, ~ xb3; 27. ~ xe6. Aunque Smyslov se salva en el final, es dudoso que valga la pena repetir este experimento de apertura. En caso de 12. ed, <D xd5; 13. <D xe4, fe; 14. <D xd2, <D xe3; 15. fe, ~ g5, las negras tienen todo en orden. Pero las blancas pueden jugar más fuerte, 13. <D xdS, ~ xdS; 14. ~ f4, e6, consiguiendo una pequeña ventaja posicional. No obstante en la partida Dvoiris - Sorokin (Cheliabinsk, 1990), aumentó rápidamente. 15. ~ eS, ~ b6 (aquí la dama no está bien, merecí a atención otra maniobra: ~ d8-e8-g6), 16. ~ e2, biad8; 17. b3, ~ aS; 18. ~ e4, <D d6; 19. <D d2, <D f7; 20. ~ f4, ~ f6; 21. il ae1, ~ xd4; 22. ~ xfS, ~ e3; 23. ~ e2, <D d6; 24. ~ xd6, bi xd6; 2S. <De4, ~ xe1; 26. <D xd6, ~ b4; 27. <D e4. Las 142
tensas escaramuzas del medio juego llevaron a una posición difícil para las negras. 12.
a3, <D xe3
Pero no 12 .... , <Dc6?!; 13. <D xd5, con una fuerte iniciativa blanca. 13. 14.
bxe3, <D e6 ~ a4, ...
A 14. bib 1, las negras responden 14.... , bib8!, y después 15. cd, ~ xd5; 16. c4, ~ e4!, con juego confuso ( 17. bib5, a6). El cambio 14. ed, ~ xdS, se halla en la partida Hübner - Yusupov (Rotterdam, 1988), 1S. e4. Permite a las negras llevar a cabo una simplificación favorable. Un año después Beliavsky contra Yusupov (Barcelona, 1989,) jugó más discreto 15. ~ c2, y tampoco consiguió nada: 15.... , ~ h8; 16. ilfd1, ~ d7; 17. ~ f4, ~ d6; 18. <De5. Ahora las negras toman la iniciativa, Beliavsky debió cambiar en d6. 18.... , ~ xe5; 19. de, ~ e6; 20. c4, ~ e4; 21. ~ c3, <De7; 22. bid4, biae8!, etc ... 1S .... , ~ xf3; 16. ~ xf3, f4; 17. ~ dS+, ~ h8; 18. ~ e1, <D xd4!; 19. bi ab1, ~ eS; 20. il xb7, f3!; 21. ~ xf3, <D xf3+. Tablas. 14. 1S.
... , f4 ~ d2,
...
Más tarde se estableció que era mejor regresar con el alfil a casa: 15. ~ e1!, ~ h8; 16. bib1, bi b8;
17. ll e 1. Ahora no es posible 17. ... , de; 18. ~ xc4, ~ g4, como sucede en mi partida con Seirawan, por 19. d5!, ganando. 17 . ... , a6; 18. ~ d3, de; 19. ~ xh7, y las blancas tiene una gran ventaja (Kayumov- Serper, URSS, 1987). 15. 16.
17. 18. 19.
... , ~ h8 b!, ab1, llb8 b!, fe1, dxc4 ~ xc4, ~ g4 ~ e2, ...
las negras, y vale la pena observar la partida en el que sucedió. Rohde - Seirawan (campeonato USA, 1986). En la posición del diagrama las negras respondie ron 19 . ... , a6!. Ahora se ve que la torre blanca no puede ir a la casilla b5, lo que es importante. 20. h3, ~ h5; 21. 0J g5?. Al tropezar con lo inesperado, las blancas pierden el rumbo, después de 21. llbd1, conservaban la iniciativa. 21 . ... , ~ xe2!; 22. 0J e6, f! d5; 23. b!, xe2, f3!. Sacrificando la calidad, las negras crean peligrosas amenazas. 24. ll ee 1, fg!; 25. 0J xf8, .ll xf8; 26. f! d 1, f! f5!. La posición de las blancas es desesperada. 19.
... , ~ d6
Recuerdo, otra vez, que aquí es correcta 19 .... , a6. 20.
h3,
~ h5
No es mej_or 20 .... , ~ f5?!. Un momento importante. Adelantando acontecimientos, advierto que aquí después de 19 .... , ~ d6; 20. h3, ~ h5, la torre blanca realizó una maniobra inhabitual: 21. llb5!, ~ e8; 22. f! c2, a6; 23. llf5!. Efectuado el cambio de torres, las casillas blancas del campo enemigo se debilitaron sensiblemente, y finalmente conseguí aprovechar esta circunstancia. Al poco tiempo Seirawan encontró un medio para reforzar el juego de
21.
-ª b5!, ~ es
A 21 .... , ~ g6, es muy desagradable 22. c4. 22.
f! c2, a6
Llega tarde ... También era favorable a las blancas 22 .... , ~ g6; 23. ~ d3, ~ xd3; 24. f! xd3, con las amenazas b!,h5 y 0J g5. 23.
.ll f5!, -ª xf5 143
24. 25. 26.
9 xf5, ~ g6 9 g4, 9 f6 ~ c4, .l:!. fS
tencia, y el juego continua 40 jugadas más, ¡una partida entera! 37. 3S .
El cambio de damas 26 .... , ~ f5; 27. 9 g5, 9 xg5; 28. ~ xg5, no aliviaba la posición. 27. 2S.
39. 40. 41. 42.
a4, ~ c2 9 h5, h6
A 28 .... , ~ xa4, decidía 29. ~ g5, h6; 30. ~ f7+, ~ h7; 31. -ª e6!. 29.
-ª eS!, ~ f5
.l
~ b3, b5 ~ f1, 9 fS ~ c2, ~ gS ~ b3+, ~ hS h4, ~ b7
c4, 9 gS
•_
1"...
De nuevo el peón a4 es intocable por 30. ~ g5!. 30. 31.
A 31 .... , 32. 33.
~ d5!, ~ d7
g xfS+, 9 xfS ~ xf8,
sigue 32. ~ e5.
~ h4, ~ es
9 e2, ...
Sin torres al enemigo le resulta difícil defender las casillas blancas. Pero no hay que apresurarse. Después de 33. ~ g6+, ~ xg6; 34. 9 xg6, ~ e7, las blancas dejaban ir parte de su ventaja.
33. 34. 35. 36.
..., ~ dS 9 e4, 9 e7
9 d3, ...
Esta jugada no se refleja en el resultado, pero por ella perdí una tarde entera, invertida en la reanudación ... Después de 43. ~ c2!, con la amenaza ~ c3, d4-d5 y 9 xh6, mate, todo terminaba con una rápida derrota.
~ g6+, ~ xg6
43. 44.
~ e2,
9 xg6, eS
45.
c5, ...
La posición de las negras es desesperada. Sin embargo consi guen organizar una tenaz resis144
43.
9 h7 g5
Era mejor cambiar las damas. 45.
..., ~ c7
46. 47. 48.
axb5, axb5 h5, ~ a5 ~ c1, ...
Y aquí era correcta 48. f! xh7+, con un final ganado con facilidad. Ahora, para la victoria necesito crear un pequeño estudio. 48. 49.
61. 62. 63. 64.
~ e5, <0J b4+ ~ d2, <0J d5 ~ es, <0J c7 ~ f7, <0J e8
La última posibilidad consistí a en 64 .... , <0Ja6. Ahora sigue el estudio prometido ...
..., f!' e7+ ~ d1, ...
Después de 49. ~ f3, g4+!, ya son las negras las que pueden contar con la victoria: 50. ~ xg4, f! g5+; 51. ~ f3, f! xh5+; 52. g4, f!' h1+. 49. 50. 51. 52. 53.
..., f!' e1+ ~ c2, f! xf2+ ~ b1, f! g3 f! xg3, fxg3 ~ c2, ...
Por fin se cambiaron las damas; es cierto que las negras sólo se quedan con un peón de menos, pero el final de piezas menores no tiene perspectivas para ellas. 53. 54. 55. 56. 57. 58.
..., ~ g7 d5, <0J xc5 ~ b2+, ~ f8
dxc6, <0J a6 ~ a3+, ~ e8 ~ e6!, ...
Un procedimiento elegante para cortar al rey del peón. 58. 59. 60.
~ b4 ~ b2, ~ f8 ~ d7+, ~ d8
...,
65. 66.
~ xe8!, ~ xe8 ~ f6!, ...
Otro alfil blanco corta al rey del peón. Después de 66. ~ c7, ~ c5!, las negras aún se mantenían. 66. 67. 68. 69. 70. 71. 72. 73. 74. 75. Las negras
..., g4 ~ c3, ~ d6 ~ g7, ~ f4 ~ b4, ~ d8 ~ xb5, ~ c7 ~ c5, ~ e3+ ~ d5, ~ f4 ~ f8, ~ b6 ~ d6, ~ g5 ~ xg3.
abandonaron 145
Partida 23 A. Beliavsky - V. Smyslov Reggio Emilia, 1986-87 1.
2. 3. 4. 5. 6. 7. 8.
e4, e5 0l f3, 0l f6 9 xe5, d6 0i f3, 0l xe4 d4, d5 ~ d3, 9 c6 0-0, {/g, e7 c4, 0l b4
V. Smyslov siempre desarrolla con ingenio la defensa rusa. He aquí un ejemplo en el que el excampeón mundial consiguió rápidamente tablas jugando la tranquila {/g,c8-e6. Short - Smyslov (Hastings, 198990), 8 . ... , {/g, e6; 9. bl. e 1, 0i f6; 1 O. c5, 0-0; 11. 0ic3, {/g, g4; 12. ~ e3.
A primera vista parece que las blancas han conseguido una ventaja estable avanzando el peón "e", pero Smyslov preparó una bonita operación, que aclara rápidamente la situación en el tablero. 12 . ... , ~ xc5!; 13. de, d4; 14. {/g, xd4, 0i xd4; 15. {/g, xh7+, 0l xh7; 16. m xd4, ~ xf3; 17. ~ xd8, Zl fxd8; 18. gf, 9 g5; 19. bl. e7, bl. ac8; 20. li e3, bl. d2; 21. 0le4. Tablas. 9.
cxd5, ...
Esta captura, permitiendo el cambio de los alfiles de casillas blancas, era conocida antes de la 41 ª partida del match con Kasparov. 9. 1 o.
..., 0l xd3 m xd3, ~ xd5
(Ver diagrama) La posición es conocida por lo menos desde los años veinte, aunque no se puede decir con detalle desde cuando. A nosotros, desde luego, nos interesa el material más reciente. 146
11 .
.ll e1,
~ f5
Antes de seguir con la jugada de Beliavsky, recordemos que aquí las blancas jugaban exclusivamente 12. <Jc3, <J xc3; 13. e xc3; Aquí tenemos dos ejemplos importantes sobre ese tema: Hübner- Smyslov (Velden, 1983) 13 . ... , ~ e6. Hace tiempo que se refutó 13 .... , c6, además de una manera muy efectiva.
14. ~ h6!!, g g8 ( 14 ...., gh; 15 . .lle5, ~ d7; 16 . .llae1, ~ e6; 17. d5!, cd; 18. l:h e6, fe; 19. ~ xh8+, ~ f8; 20. e f6, etc ... ; o también: 14 .... , ~ e4; 15. ~ xg7, 'ªg8; 16. 'ª xe4!, ~ xe4; 17. 'ªe1, ~ xe1+; 18. e xe1, g xg7; 19. e e5), 15 . .lle5, e d7; 16. 'ª ae1, ~ e6; 17. <J g5!, 0-0-0; 18. <J xf7!, y las blancas ganaron ((Browne - Bisguier, campeonato USA, 1974). 14. e xc7, ~ d6; 15. ~ c2, 0-0; 16. ~ d2, ~ f5!; 17. ~ b3, e xb3; 18. ab, f6; 19. ~ c3, ~ f7 . El peón de más de las blancas no es perceptible, sobre todo porque las negras tienen dos alfiles activos . Van der Wiel - Short (Biel, 1985), 13 . ... , ~ e6; 14 . .ll e5. Tampoco es peligroso para las negras. 14. ... , ~ c6; 15. ~ e1 (tras 15. ~ xc6, be, cierta debilidad en la cadena de peones negros se compensa con la ventaja de la pareja de alfiles), 15 . ... , 0-0-0; 16. ~ g5, ~ xg5; 17. 'ª xg5, ~ d5; 18. <J e5, ~ b6; 19. 'ª xg7, 'ªhg8; 20. bl g3, ~ xb2 (no era mejor tomar el peón d4), 21. 'ªd1, lJ. xg3; 22. hg, ~ xa2?. Después de 22 . ..., .lle8, las negras no deben perder. Al capturar el peón a2, prácticamente excluyen del juego al alfil, y pronto las amenazas blancas son muy peligrosas. En principio, aquí se podía poner punto final, pero el epílogo de la partida es tan atractivo, que vale la pena seguir hasta el f inal. 23 . ~ a5, ~ b8; 24. <J d3, ~ b3; 147
25. g c1, b6; 26. ~ e5, .t\ c8; 27. 'lj¡ f4, ~ b2; 28. g c6, ~ b7; 29. ~ h2, ~ xf2; 30 . 'lj¡ d3, ~ d2; 31. ~ e4, ~ b8 (resistía más la inmediata 31 .... , g d8}, 32. 'lj¡e5, g d8; 33. czj¡ d7+!, ~ c8.
34 . .ll d6!!. Un final de problema: 34 .... , .ll xd7; 35. !l'a8, mate; o 34. ... , cd; 35. ~ c6, mate. Las blancas ganaron esta partida de una forma muy bonita, pero no por el desarrollo de la apertura ... Después de este libre relato ya es hora de volver a la partida principal ... 12.
'lj¡ e5!?, ... (Ver diagrama)
Este salto de caballo también es conocido por la teoría hace tiempo, si bien es cierto que la "Enciclopedia de aperturas" sólo le dedica algunas líneas ... A 12 .... , f6, ofrece la recomendación de 148
Keres 13. !l'f3, "con una posición algo mejor para las blancas", (pero entre paréntesis se indica que en caso de 12 .... , ~ h4 7; 13. g3, 'lj¡ xg3, la jugada 14. ~ f3!, decide la partida, Zuidema - Barendregt, Amsterdam, 1966). Sin embargo hay que detenerse con mayor atención en el avance f7f6. Resulta que después de 12 .... , f6; 13. ~ f3, las negras responden 13 ...., g6!, y tras la retirada del caballo a e5 no tienen especiales problemas. Y en la variante 14. g4, fe; 15. gf, gf, las blancas están mal ( 16. ~ xf5, .llg8+; 17. ~ f1, !l'c4+). ¿Qué hacer a 12. ..., f67 En la partida Makropoulos- Toth (Budva, 1981), siguió 13. ~ c3, 'lj¡ xc3; 14. ~ xf5, ~ b5; 15. !l'h5+, g6; 16. ~ h3, fe; 17. b!, xe5, !l' xd4; 18. ~ e6, ~ d1+; 19. g e1, !l' d7; 20 . .Q¡, g5, y las posibilidades se igualaron. Se empleó una novedad en el encuentro De Firmian - Plaskett
(Copenhague, 1985): 15. ~ g4!?. Después de 15 .... , 0l xd4; 16. 0i d3, las negras fueron tras la calidad, 16 .... , 0lc2?, y cayeron bajo un ataque de mate: 17. 0l b4!, 0l xb4; 18. ~ xb4, eS; 19. m 9 4, ~ f7; 20. ~ h6!, gh; 21. bl. ad1, h5; 22. m e2, ~ f5; 23. m xe7+, ~ g6; 24. bl. d7, h4; 25. h3, bl. ag8; 26. bl. e4, ~ h5; 27. m f7+, .ll g6; 28. Zl d5. Las negras abandonaron. Comentando la partida en el lnformator, De Firmian propuso 16. ..., ~ f7; 17. bl. xe7+, ~ xe7; 18. m xg7+, con juego confuso. ¡Pero resulta que está muy claro! La partida entre los jóvenes maestros Ulibin - Serper (Sochi, 1986), continuó sólo siete jugadas: 18 . ... , m n; 19. m g4, bl. ad8; 20. b3, ~ g6; 21. m xg6, hg; 22. ~ a3+, i?f7; 23. 0l e 1, bi h5; 24. ~ b2, 0l e6; 25. 0l f3, bl. hd5. Las blancas abandonaron. Así, el sacrificio 17. bl. xe7, es incorrecto, y toda la variante es inofensiva para las negras. Se puede dar la opinión de que a 12. 0le5, la reacción negra 12...., f6, es suficiente para igualar. Con esto contaba Beliavsky, al enviar el caballo a e5, y de ahí el recelo de Smyslov, desviándose a f7f6!?. Aún no he conseguido una respuesta a esa pregunta. 12.
... , g6
Hay que advertir que aquí no hay mucho donde elegir. En opinión de Ar jipov, es insuficiente 12 .... ,
0-0-0, por 13. m f3, g6; 14. g4, ~ h4; 15. 0lc3 (es favorable a las negras 15. 0i d3, 0ixf2; 16. m xd5, 0lh3+; 17. ~ g2, bl. xd5; 18. gf, ~ xe1; 19. 0l xe1, bl. e8), 15 .... , 0l xc3; 16. be, ~ e6; 17. m xd5, .8 xd5; 18. g5, con ventaja blanca. Y después de 12. ... , 0id6; 13. 0lc3!, m as; 14. ~ e3, las negras caen bajo una fuerte presión. Juzgando por el rápido empate que se produce en la partida, se saca la conclusión de que la novedad de Smyslov g7-g6 es afortunada. Sin embargo, antes de obtener las tablas, las negras tuvieron que superar no pocas barreras, por lo que la jugada del peón vecino es más prometedora. 13.
mt3, ...
Un momento importante. No valí a 13. g4, por el golpe 13 .... , 0ixf2!. ¿Y por qué no 13. 0lc3?. A primera vista, la inclusión de las jugadas 0i f3-e5 y g7-g6, en comparación con la partida antes examinada, es favorable a las blancas. En efecto, después de 13. 0lc3, 0l xc3; 14. m xc3, es mala 14 .... , ~ e6, por 15. ~ h6!, 0-0-0; 16. 0l xf7!, ~ xf7; 17. bl.xe7, con un peón de más y mejor posición. También pierde 14 .... , c6, por 15. 0lc4!, con la amenaza 16. 0le3 y 17. d5. Sin embargo es correcta 14 .... , 0-0-0, con mejor juego para las negras, porque no vale 15. 0i xg6, por 15. ... , hg; 16. bi xe7, m d6!, con ataque sobre la torre y el peón h2. 149
Parece que después de la maniobra de dama elegida por Beliavsky, la iniciativa de las blancas es muy peligrosa. Pero Smyslov toma el peón con sangre fría ... 13. 14.
...,
~ xd4
~ c3, ~ xe5
Las negras continúan comiéndose todo lo que cae en sus manos. El material se recupera enseguida, pero tras ello se queda limpio ... 15.
~ f4,
...
En caso de 15. ~ xe4, las negras lograban escaparse, 15 .... , 0-0. 15. 16.
..., ~ as b4, ...
al jugar ~ d3-f3. Si ahora 16 .... , ~ xb4 (16 .... , ~ b6), entonces decide enseguida 17. ~ d5!. Este salto de caballo sigue a la retirada de la dama a a6. Merece atención las variantes que surgen. 16.... , ~ a6; 17. ~ d5!, ~ dS!; 1S. g4! (es favorable a las negras 1S. btxe4+, ~ xe4; 19. ~ xe4+, ~ e6; 20. ~ d4, 0-0; 21. ~ h6, f6; 22. ~ xfS, ~ xfS; 23. ~ d2, ~ g7; 24. l:i,e 1, ~ d7). Ahora las negras tienen tres posibilidades, sin embargo todas dejan pocas perspectivas: 1S. ..., c6. Cerrando a la dama propia la casilla e6, lo que aprovecha inmediatamente el blanco. 19. l:i, xe4+, ~ xe4; 20. ~ xe4+, ~ d7 (20 .... , ~ fS; 21. ~ h6+, ~ gS; 22. ~ eS, mate), 21. 'ªd1, ganando; 1S .... , ~ e6; 19. ~ xe4, 0-0; 20. ~ h6, 'ª es (20. ..., ~ xd5; 21. ~ xd5, ganando calidad), 21. ~ e5;
1S.... , 0-0; 19. gf, gf (19 .... , ~ f6; 20. ~ h6), 20. ~ h1, con una ataque irresistible. A pesar de todo las negras encuentran una defensa única, pero suficiente. 16. 17.
Después de 16. ~ xe4, de nuevo había tiempo para 16 .... , 0-0; 17. ~ g3, ~ e6. Sin duda, Beliavsky ya contó con el avance del peón "b" 150
...,
~ a3!
~ d5,
...
¡Ay!, en este caso este ataque lleva al cambio de damas, pero 17. ~ xe4, ~ xf3, llevaba a ventaja negra en el final, y desde luego no hay que contar con 1S. ~ f6+, ~ fS; 19. ~ h6, mate ...
17. 18. 19.
... , ~ xf3 gxf3, .Qg, dS! fxe4, ...
20. 21. 22.
23. Las blancas pueden estar orgullosas, porque en el transcurso de cinco jugadas llevaron el ataque sin piezas ... 19.
... , ~ e6
0J xc7+, รกtb xc7 รกtb xc7, f6 ~ es ~ ac1, ~ f7.
a3,
Tablas. Un corto encuentro, ยกpero no se puede hablar de tablas de grandes maestros!
151
Partida 24 G. Kasparov- A. Karpov Moscú, 1985 1. 2. 3. 4. 5.
e4, e5 ~ f3, ~ f6 ~ xe5, d6 ~ f3, ~ xe4
d4, ...
A menudo se da otro orden de jugadas , 5. c4. La principal réplica la propuso S. Makarichev, 5 . ... , ~ c6!. Ahora a 6. d4, es buena 6 . ... , d5, por ejemplo: 7. ~ c3, .Q¡, b4; 8. S' c2, S' e7; 9 . .Q¡, e3, .Q¡, g4; 1 O. S' e 1, ~ xc3; 11. be, .Q¡, a3; 12. S' d2, ~ b4!, con ventaja decisiva de las negras (Kupreichik - Mijalchishin, Kuibyshev, 1986). En caso de 6. ~ c3, se iguala fácilmente el juego, 6 . ... , ~ xc3; 7. de, ~ f5; 8. ~ d4, ~ xd4; 9. S' xd4, S' e7+; 1 O. .Q¡, e2, S' e4 (Chiburdanidze - Agzamov, Frunze, 1986). También después de 6 . .Q¡,e2, .Q¡,e7; 7. 0-0, 0-0; 8. d4, ~ f6!, las piezas negras actúan coordinadas en el centro. 5. 6. 7.
... , d5 ~ d3, ~ c6
0-0, .Q¡, g4
(Ver diagrama) 152
Otro plan actual en la defensa rusa: el alfil de casillas blancas va enseguida a g4, mientras que el de casillas negras aún permanece en su sitio. Parece que la diferencia no es apreciable, pero a veces el juego toma otro carácter del todo distinto. Economizando tiempo con la jugada .Q¡,e7, las negras crean una seria presión sobre el peón d4, pero su rey permanece en el centro y puede sufrir un ataque del enemigo. Por lo tanto esta variante tiene sus más y sus menos para las negras. 8.
c4, ~ f6
Retirando el caballo a f6 y esperando la respuesta ez'il b 1-c3, las negras, como veremos, cambian en f3 y conquistan el peón central d4. ¿Pero no es posible cambiar en f3 y después tomar en d4 sin la retirada previa del caballo a f67 La elegante partida que sigue, nos demuestra lo que puede pasar en ese caso. Psajis - Martinovsky (Filadelfia, 1989): 8. ..., ~ xf3; 9. @xf3, ez'il xd4; 1 O. @e3, ez'il f5; 11. @e2, ez'il d4; 12. @e3, ez'il f5; 13. @h3. Razonablemente, a las blancas no les conviene la repetición de jugadas. 13. ..., @d7; 14. cd, ez'il ed6; 15. ez'il c3, 0-0-0; 16. ~ f4, ez'il e7; 17. @h5, ez'il g6; 18. ~ g3, ~ b8;
19. a4,
~ e7;
20. a5,
~ f6;
21. ez'il a4, ez'il b5; 22. )jJc1, @xd5.
23. ~ xb5!, @xh5; 24. ~ xc7+, ~ ca (24 .... , ~ aS; 25. ez'il b6+, ab; 26. ab, mate), 25. ~ e5, mate! Como la reputación de la jugada 8 .... , ez'il f6, en los últimos tiempos
es dudosa, en la cuarta partida del match de candidatos Beliavsky - Yusupov (Saint John, 1988), las negras eligieron un orden de jugadas menos frecuente, 8 . ... , !14 e 7. Ahora después de 9. ez'il c3, !14 xf3 (pierde 9.... , ez'il xd4; 10. .llxe4, de; 11. @xd4), 1O. gf (también es buena 1O. @xf3, ez'il xd4; 11. @g4), 1O. ..., ez'il f6; 11. cd, ez'il xd5; 12. ~ e4, surgió una posición de la antigua partida Schiffers - Kulomzin, jugada ya en el año 1901. Las blancas tienen cierta ventaja: 12 .... , ez'il xc3; 13. be, 0-0; 14. f4, etc ... Pero 80 años después proceden de otra manera ... 9. cd, @xd5; 1 O. ez'il c3, ez'il xc3; 11. be, 0-0; 12. ll e1, !14 xf3; 13. ~ xf3, @xf3; 14. gf, ~ d6; 15 . .ll e3.
Las blancas tienen la ventaja de la pareja de alfiles, lo que inclina la posición a su favor. En esta partida Yusupov continuó 15. ..., 153
~ ad8, y algunos meses después, con Timman (Belfort, 1988), 15 . ... , 0J e7. En ambos encuentros las negras consiguieron las tablas en un profundo final, aunque con ciertas dificultades. En adelante, cuando eligió la defensa rusa, Yusupov no regresó a esta variante.
9.
0J c3, ...
Las negras ejercen presión sobre el peón d4, y dado el rápido desarrollo de las piezas Kasparov decide entregarlo enseguida, una idea, que aunque no es nueva, es bastante peligrosa para las negras. En efecto, después de 9. ~ e1+, ~ e7, por transposición de jugadas se produciría la posición de la partida Kasparov - Karpov ( 1, 28). Recuerdo que 1O. cd, ~ xf3; 11. 'i! xf3, 'i! xd5; 12. 'i! h3, 0J xd4; 13. 0J c3, 'i! d7; 14. 'i! xd7+, ~ xd7, llevó a unas rápidas tablas. En esta partida, tras 46 minutos de reflexión Kasparov elige otro camino, entendiendo, con razón, que no vale la pena perder tiempo con el jaque, reservándolo mejor para el futuro. Hay que decir que rara vez se encuentra el cambio inmediato en d5, 9. cd, ~ xf3; 1 O. 'i! xf3, 'i! xd5. Ahora 11. ~ e1+, t!4 e7, de nuevo lleva a la partida ( 1, 28), y otro jaque 11. 'i! e2+, se empleó por vez primera en el encuentro Timman - Yusupov (Tilburg, 1986), tampoco es peligrosa: 11. ..., 154
~ e7; 12. ~ b5, 'i! d6!, y las oportunidades están igualadas.
9.
..., t!4 xf3
Otras continuaciones pueden llevar a serias complicaciones: 9 .... , t!4 e7; 10. cd, 0J xd5; 11. ~ e4; 9 .... , 0Jxd4; 1o. e e1 + (¡aquí es útil el jaque!), 1O.... , ~ e 7 ( 1O.... , 0J e6; 11. 0Je5), 11. 0J xd4, de; 12. 0Jf5, cd; 13. 0J xg7 +, ~ f8; 14. t!4h6, ~ g8; 15. f3, con una fuerte iniciativa blanca. 1 O. 11.
f! xf3, <0l xd4 ...
~ e1+,
Después de este jaque el juego va por los mismos cauces, ¡tan sólo en una jugada! Son interesantes las continuaciones 11. 'i!e3+ y 11. 'i!h3, que examinaremos más adelante. 11.
..., t!4 e 7
12.
~ d1!,
...
En la partida Lobron - Karpov (Hannover, 1983), se dio 12. ~ g3, de; 13. ~ xc4 (perdería 13. ~ xg7, por 13 .... , ~ f3+; 14. ~ h1, b!, g8; 15. ~ xf6, ~ xe1). 13 . ..., 0-0; 14. ~ g5, ~ d6 (14 . ... , ~ c2; 15. lhe7!), 15. ~ h4, h6!; 16. ~ xf6, ~ xf6; 17 . ~ xf6, gf; 18. b!, e4, c5; 19. b!, h4, ~ g7; 20. ~ e4, ~ e7; 21 . ~ g3, f5; 22. bl. h3, ~ d6; 23. f4, b5; 24. ~ d3, c4; 25. ~ xf5, g fe8 . Por fin se recupera el peón, pero la ventaja posicional de las negras es grande, y obtuvieron con facilidad la victoria. La maniobra de la dama a d1 es, sin duda, una mejora, como se verá enseguida, aunque no muy peligrosa para las negras. 12.
...,
~ e6!
De esta manera se consigue simplificar la posición. Tras 12 . ... , de; 13. ~ xc4, 0-0 (13 .... , c5; 14. ~ a4+), 14. bl. xe7, ~ xe7; 15. ~ xd4, las negras están al borde de la derrota, y las blancas también tienen ventaja después de 12 .... , 0-0; 13. cd, o 12 .... , c6; 13. ~ e3, ~ e6; 14. cd, ~ xd5; 15. ~ xd5, ~ xd5; 16. ~ c2. 13. 14. 15.
cxd5, ~ xd5 c6 cxb5
~ b5+, ~ xd5,
(Ver diagrama)
La posición se ha aclarado. Las blancas tienen un potente caballo en el centro, y las negras, aunque doblado, un peón de más. Una cosa compensa la otra, y se produce un rápido empate. 16.
~ b3,
...
Parecí a atractiva 16. ~ f4, previendo el enroque negro: 16 .... , 0-0 (16 .... , ~ d6; 17. ~ xd6, ~ xd6; 18. ~ f6+, ~ e7; 19. ~ d5+, ~ f8; 20. ~ f3, y el rey negro se empantana en el centro; a 16 .... , b!, c8, es desagradable 17. ~ e5!), 17. ~ xe7+, ~ xe7; 18. ~ d6. Sin embargo, continuando valientemente 16 .... , ~ xf4; 17. b!,xe7+, Vi? f8; 18. b!,e5, ~ d6!, las negras eludían todos los problemas, por ejemplo: 19. b!, f5, g d8; 20 . b!, xf4, ~ xd5, etc ... 16.
..., 0-0
No hay tiempo para defender el 155
peón: 16.... , a6; 13. ~ e3, 0-0; 14. llad 1, con toda presión.
17.
4.J xe7+, ...
19. 20.
~ b3, ~ e3,
.ll fd8 bt ac8
También llevaba a la igualdad 20 . ... , b5.
A 17. ~ xb5, es buena 17 .... , ~ c5.
17. 18.
~ xe7 ~ xb5, a6
...,
Más precisa que enseguida 18 . ..., bt fd8; 19. ~ e3, ~ d7; 20. ~ xd7, btxd2; 21. 'ªad1.
156
21. 22.
'ª ac1, h6 h3, 4.J d4
Tablas. Después de 23. ~ xd4, 'ª xc1; 24. 'ªxc 1, bt xd4, se agotan los recursos de ambos bandos.
Partida 25 G. Kasparov- A. Karpov Londres, 1986 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 1 O. 11.
e4, e5 0l f3, 0l f6 0l xe5, d6 0l f3, 0l xe4 d4, d5 ~ d3, 0lc6 0-0, ~ g4 c4, 0l f6 0lc3, ~ xf3 'l! xf3, 0l xd4 'l!e3+, ...
tanto para mí no fue una sorpresa del todo inesperada. 11. 12.
... , 0le6 cxd5, 0l xd5
En caso de 12 .... , ~ c5, es posible 13. 'l! f3, 0ld4; 14. bl, e1+, ~ f8; 15. 'l! f4, 0l xd5; 16. 0l xd5, 'l!xd5; 17. 'l! xc7, 0le6; 18. 'l! g3, .!ld8; 19. g d 1, h5; 20. h4, con ventaja blanca. 13. 14. 15.
0l xd5, 'l! xd5 ~ e4, 'l! b5 a4, ...
A 15. 'l!f3?, las negras responden 15.... , 0ld4. 15.
... , 'l! a6
(Ver diagrama)
Hasta ahora se ha repetido la 15ª partida de nuestro match precedente. Aquí Kasparov empleó una preparación casera. Pero el jaque de la dama en e3 se había propuesto un año antes, por lo
Las blancas tienen la ventaja de la pareja de alfiles e iniciativa por el peón. Para no perder el peón b 7, las negras se han visto obligadas a hacer una jugada única, y la dama ha caí do en el borde del tablero. En la partida lvanchuk - Serper (Sochi, 1986), que se puede con157
16.
... ,
~ e7
Esta partida fue investigada por muchos teóricos (Diugy, Makarichev, Nunn, Timman), pero pienso que no se puede pasar sin la computadora para un análisis exhaustivo ... Es interesante la variante que surge después de 16 . ... , ~ c5; 17. ~ f3, c6; 18. ~ d7!?.
siderar la fuente de esta idea, el intento 15 . ... , ~ c5, después de 16. ~ xb7, b't b8; 17. b4!, ~ b6 (17 .... , ~ xe3; 18. ~ c6+, 'f/9 e7; 18. ~ xe3), 18. ~ xb6, cb, llevó a un final peor para las negras: 19. ~ C6+, 'f/9 d8; 20. b't d1 +, 'f/9 c7; 21. b5, ~ d8; 22. ~ xd8, 0l xd8; 23. ~ d5, 0l e6; 24. ~ xe6, fe; 25. ~ f4. Por lo visto, no se puede considerar una novedad, en nuestro encuentro, el jaque en e3, sino la retirada de la dama a e3. 16.
b't d1, ...
La inmediata 16. b4, no da nada: 16 .... , ~ xb4; 17. ~ b1, ~ c5; 18. ~ f3, c6; 19. ~ xb7, 0-0. En caso de 16. ~ f3, 0ld4!; 17. ~ e3, Kasparov no aconseja a las negras ganar la calidad, 17 .... , 0le2+; 18. 'f/9h1, 0lg3+; 19. hg, ~ xf1 +; 20. 'f/9h2, con juego confuso, y recomienda 17 .... , 0-0-0!, con un peón de más y buenas posibilidades. 158
No es posible aceptar el sacrificio de la torre: 18 . ... , 'f/9 xd7?; 19. ~ xf7+, ~ e7; 20. ~ f5, c5 (no es mejor 20 .... , ~ e2; 21. ~ e3, o 20 .... , ~ c4; 21. ~ g5, ~ he8; 22. ~ d1+, 'f/9c7; 23. ~ xe7), 21. ~ g5, ~ d6; 22. ~ xe6+, ~ xe6; 23. b't d1+. Es imprescindible para las negras terminar el desarrollo con sangre fría: 18 . ... , 0-0; 19. ~ d3 (19. b4, ~ d4), 19 . ... , ~ b6 (pero no 19 .... , ~ a5; 20. ~ d2!, ~ b6; 21. b4, ~ d4; 20. a5, o 19.... , b5; 20. b4, ~ xb4; 21. ~ e4).
20. a5, ~ b4; 21. ~ d2, ~ h4 (es mala 21 .... , ~ xb2; 22. ~ c3, ~ b3; 23. ~ h5, g6; 24. ~ xg6), 22. g3, ~ f6 (22 .... , ~ h3; 23. ~ f5), 23. ~ xf6, gf, y tienen todo en orden. Así, no da nada 24. Zi xb7, 'ª fd8; 25. 'ª b3, 0l d4; 26. 'ª c3, ~ b4, etc ...
Además del avance del peón "b" se ha empleado más tarde 17. ~ f3.
Esta jugada se probó por primera vez en la partida Timman - Yusupov (Hilversum, 1986). Continuó seis jugadas más ... 17 . ... , 'ª d8; 18. ~ d3 (merece atención 18. Zi xd8, 0l xd8; 19. ~ f4).
17.
b4, ...
18. ..., ~ a5. Es mala para las negras tanto 18 .... , 0ld4; 19. ~ g4!, ~ f6; 20. ~ e3, 0le6; 21. ~ e4!, como 18 .... , ~ b6; 19. ~ e3, ~ xb2; 20. 'ª ab 1, ~ a3 (es imprescindible jugar 20 . ... , ~ c3), 21. ~ xb7, 0-0; 22. ~ e4, g6; 23. ~ xa7. 19. ~ d2
Las blancas sacrifican otro peón, pero tomar éste ya es peligroso: 17 . ... , ~ xb4; 18. ~ f3, c6 (18. ... , 0lc5; 19. 'ªd4), 19. b!, d7, 0-0; 20. ~ h3, g6 (20 .... , h6; 21. ~ xh6), 21. ~ xg6!, hg; 22. ~ b2, 0lg7; 23. ~ h6, con mate inevitable. Otro camino, 18. ~ b2, 0-0; 19. ~ h3, g6 (19 .... , f5; 20. ~ xf5, 0l g5; 21. ~ b3+, 11ilf h8; 22. 'ªd7, etc ... ), 20. Zi d3!, h5 (20 .... , 0lg5; 21. ~ h6, f6; 22. ~ d5+, ~ h8; 23. ~ xg5!), 21. ~ xh5!, gh; 22. bl. g3+, con mate.
(aquí 19. ~ xb7, pierde de manera inesperada debido a 19 .... , 'ª xd3!). 19 . ... , ~ b4; 20. ~ e3, 0-0. En caso de 20 .... , c6, las blancas aún conservaban la iniciativa: 21. ~ e4, g6; 22. ~ c4, 'ª xd 1; 23. Zixd1, ~ f5!; 24. ~ xf5, gf; 25. ~ xa7, 11ilf e7; 26. ~ b6. Ahora el juego se iguala al instante. 21. ~ xb7, 0l c5; 22. ~ xc5, ~ xc5; 23. ~ b5. Tablas. Así, la jugada 17 .... , ild8, no es mala, pero en la partida Howell lvanchuk (Groningen, 1986-87), las negras eligieron una continuación más venenosa; 17 . ... , .l':t b8!; 18. b4. Después de 18. ~ h3, el juego podía dirigirse a la partida comentada. 18. ..., 0-0; 19. 'ª d7?. Era imprescindible 19. ~ b2; después de la errónea invasión de la torre en d7 la aparición en d8 gana fuerza. 159
19 .... , g bd8!; 20. ~ xb7. Resulta que el alfil e7 es intocable. lvanchuk ofrece esta variante: 20. 'I:J xe7?, 'f!d6!; 21. ~ a3, 'f! xe7; 22. b5, ~ c5; 23. ~ xh7+, ~ xh7; 24. 'f! f5+ (24. 'f!h5+, ~ g8; 25. ~ xc5, 'f! f6!), 24 ...., g6; 25. ~ xc5, ~ e2!, y las negras alcanzan la cima. 20 .... , ~ c4; 21. 'I:J xd8. Y ahora a 21. 'I:J xe7, decide la efectiva 21. ... , 'f! d4!, o 21 .... , 'f!c3!. 21 .... , 'I:J xd8; 22. ~ e3, 'f! xb4; 23. ~ e4, ~ c5; 24. ~ xc5, 'f! xc5; 25. h4, 'f! d4; 26. -ª e1, 'f! xa4; 27. h5, ~ g5; 28. 'f! f5, ~ xe4; 29. 'I:J xe4, 'f! d1; 30. ~ h2, g6; 31. hg, hg; 32. 'f! g5, 'I:J d5; 33. 'f! f6, 'f! h5+; 34. ilh4, 'f! xh4+!. Las blancas abandonaron. 17. 18.
... , 0-0 ~ h3, ...
A 18. b5, las negras disponen de la fuerte jugada intermedia 18 .... , ilad8!, tomando la iniciativa, y la misma respuesta sigue a 18. 'f! f3. 18.
'f! xa4), 20 .... , 'f! b6; o 19. 'f! c3, 20. ~ xg5 (20. ~ b2, ~ f6!), 20 .... , ~ xg5; 21. ~ xc7, il ad8, y las blancas sólo tienen una ventaja simbólica. La maniobra del caballo a g5 en la segunda var iante es la única defensa negra. En la partida Aseiev - lvanchuk (lrkutsk, 1986), las negras intentaron jugar más agudo, 19. 'f! c3 , c5?!, y después de 20. ~ b2 , ~ d4; 21. ~ d3, 'f! b6; 22. a5 , 'f! c7; 23. be, ~ xc5; 24. ~ f1, ilfd8; 25. b!. a4, cayeron bajo una clavada mortal: 25 .... , ilac8; 26 . 'I:J axd4, etc ... ~ g5!;
19.
Por fin la dama recupera la libertad, y el suplicio de las negras finaliza. No valí a 19 .... , ~ f4; 20. 'f!e3!, 'f!e2 (20 .... , ~ g5; 21. ~ h1), 21. 'f!d4, f6; 22. ~ f3!. Como vimos antes, tampoco es posible tomar el peón: 19. ..., ~ xb4, por 20. 'iJ d3!, con la mortal amenaza 21. 'f! xh7+, ~ xh7; 22. ilh3+. 20.
~ b2,
...
Otras continuaciones tampoco traen el éxito: 19. b5, 'I:J ad8!; 20. 'I:J e1 (20. ~ h6, ilxd1+; 21. 'I:J xd1, 160
~ c4!
..., g6
Es mala 18.... , h6; 19. 'f! f5, g6; 20. 'f!e5, o 20. ~ f3, con las amenazas ~ xb7 y ~ xh6. 19.
...,
il d7, ...
Las blancas podían recuperar el peón, 20. ~ xb7, pero después de 20 .... , 'I:J ad8 no tienen nada. Desde luego, al llevar la dama a c4, era necesario calcular 20. ~ d5, pero las negras disponen de un tiempo importante, 20 . ..., 'f!c2, asegurándose, como míni-
mo, la igualdad: 21. ~ e5 (2 1. bl, ab 1, bl, ad8), 21 . ..., bl, ad8; 22. bl, ac1, (22. bl, d3, ~ g5; 23. 'ªad1, c6; 24. 9 xe6, bl, xd5!; o 22. bl, dc 1, ~ d2!; 23. ~ xe6, fe; 24. @xe6+, bl, f7), 22 .... , bl, xd5! y se gana material. 20.
~ d5,
Ahora debido a la amenaza @xc3 y <í)e2+, los papeles están cambiados. El ataque blanco se apaga, y después de numerosos cambios las negras reciben un mejor final. No obstante, el resultado de tablas es inevitable.
...
Ahora las blancas ya deben jugar con precisión. En caso de 21. ~ xb7, @xb4; 22. ~ a3, ~ xa4; 23. bl, xe7, bl, xe7; 24. @c3, c5!; 25. ~ b2, <í)d4; 26. bl, xa4, 'l)e2+; 27. ~ f 1, <í) xc3; 28. ~ xc3, l:txb 7, se quedarían en la estacada. 21. 22.
... , <í) f4!
... , bl, ae8!
Aunque también es una jugada única, congela completamente el ardiente ataque blanco. Como es habitual, el peón b4 era intocable: 20. ... , @xb4 (20. ..., 9 xe4; 21. @c3, f6; 22·. bl, xe7, o 21 .... , <í) d4; 22. bl,e1!, @f4; 23. bl, xd4, ~ f6; 24. bl, xe7, @xe7; 25. .lle4!, con una posición ganada), 21. ~ xg6, 'l)g5 (21. ... , fg; 22. 9 xe6+, Jlf7; 23. ~ f6!, bl, e8; 24. bl, e1), 22. ~ xh7+, <í) xh7; 23. ~ a3!, @h4; 24. ~ xe7, @xh3; 25. gh, bl, fc8; 26. bl,a3). 21.
22.
...
Si 22. ~ a3, entonces 22 .... , @d4, y a 22. ~ e5, es buena 22 .... , ~ f6!; 23. ~ xf6, 'l)f4.
~ xb4,
25.
~ xc7,
'l) xh3+ gxh3, ~ xb4
b6
Tal vez fuera más precisa 25 .... , bl,e5, llevando la torre a f5 y presionando sobre f2.
26. 27.
... , ~ xb4 ~ c3,
23. 24.
bl, xa7, ~ g7 bl, d7, bl, d8
A 27 .... , bl e5, las blancas se defendían mediante 28. bl, a2!, JjJ5; 29. bl,b2, ~ c5; 30. 'ªc2! (con la amenaza a4-a5), 30 .... , bl,c8; 31. ~ e6!.
161
28. 29. 30. 31. 32. 33. 34. 35.
162
1Jxd8, 1Jxd8 JJ d1, Zld6 1Jd3, h5 ~ f1, 1Jd7 ~ g2, ~ c5 ~ f1, h4 ~ c4, IJ,e7 1Jf3, ~ d6
36. 37. 38. 39. 40. 41. Tablas.
~ g2, ~ b3,
1Jc7 f5
1Jd3, ~ c5 'ª c3, ~ f6 'ªc4, g5 'ªc2, ~ e5
Partida 26 V. Kupreichik -A. Yusupov URSS, 1987 1. 2. 3. 4. 5. 6.
e4, e5 'i) f3, 0l f6 0l xe5, d6 0l f3, 0l xe4 d4, d5 ~ d3, 0lc6
7. 8.
0-0, ~ g4 c4, 0l f6
9.
0l c3, ...
De nuevo regresamos a esta aguda y atractiva variante, relacionada con un sacrificio de peón. Esta partida, jugada en el 54º campeonato nacional, hasta ahora es la más importante en el desarrollo de esta variante. 9. 1 O.
... , ~ xf3 ~ xf3, 0l xd4
Para no confundir al lector, antes de pasar a la novedad de Kupreichik, recordemos la información conocida hasta esta partida. Después de 11. bte1+, !Jl.e7; 12. 'f! d 1, entramos en la partida Kasparov- Karpov (2, 15), que terminó en tablas, y después de 12. 'f!g3, de; 13. ~ xc4, 0-0; 14. ~ g5, ~ d6, a la partida Labran - Karpov (Hannover, 1983), donde las negras tampoco tuvieron dificulta-
des. Es dudoso que sea afortunada 12. f! g3, directamente, a la que sigue 11 .... , 0le6, y las negras pueden ganar tiempo gracias a la jugada ~ f8-d6. La sorpresa 11. ~ e3+, que me preparó Kasparov en la partida (3, 6) del match-revancha, después de 11 . ... , 0l e6; 12. cd, 0l xd5; 13. 0l xd5, ~ xd5; 14. ~ e4, ~ b5; 15. a4, ~ a6; 16. bt d1, !'4 e7; 17. b4!?, 0-0; 18. 'f!h3, g6, las negras rechazaron el ataque y "exigieron" las tablas con una posición de fuerza. Un intento de mejorar la variante para las blancas se hizo en la partida Timman - Yusupov (Hilversum, 1986). En lugar del ataque b2-b4 las blancas jugaron 17. 'f! f3, pero después de 17. ... , bt d8, la partida también terminó en paz. Sin embargo las negras no se limitaron a esto, y en la partida Howell - lvanchuk (Groningen, 1986-87), encontraron un medio para luchar por la iniciativa, jugando 17 .... , ~ b8. Defendido el peón, las blancas se ven obligadas a pensar en cómo van a recuperar el material. Tras el salto 18. b4, las negras tomaron la iniciativa y alcanzaron el éxito. 163
Así, se puede decir que 11. e e3+, no es peligrosa para las negras, lo mismo que 11. bl, e1+. Un medio más decidido para demostrar que el sacrificio de peón tiene fundamento es el propues to por Kupreichik, además contra uno de los mejores especialistas de la defensa rusa. 11.
~ h3!,
...
compensación más que suficiente por el peón. Después de 11 .... , t!l,e 7; 12. ~ g5, de; 13. t!l, xc4, por transposición de jugadas se llega a una posición de la partida examinada, y en caso de 12. bl, e 1, de; 13. ~ xc4, 0-0 ( 13.... , ~ c2!?), 14. t!l,g5, h6; 15. t!l, xh6, gh; 16. e xh6, surgiría un juego agudo, en el que es difícil dar preferencia a alguno de los bandos. Sin embargo, es más fuerte 12. cd, ~ xd5; 13. b!, e 1, ~ e6; 14. ~ g6!, ~ df4; 15. ~ xf4, ~ xf4; 16. ~ xf7+, ~ xf7; 17. e f5+. Las blancas recuperan el peón y mantienen la iniciativa en el centro. 12.
t!l, xc4, ...
También es interesante 12. bl, e1+, ~ e6; 13. t!l,g6. 12.
Advierto que esta respuesta fue recomendada por l. Zaitsev y por mí. Las negras han economizado tiempo con la jugada ~ f8-e 7, y las blancas lo hacen con el jaque bl, f1-e1+!. 11.
..., dxc4
Es dudoso que sea bueno para las negras 11 .... , c6; 12. bl, e 1+, t!l, e 7; 13. t!l, g5, ~ e6; 14. t!l,xf6, t!l, xf6; 15. cd, cd; 16. tfl, f5, o 13 .... , de; 14. t!l, xf6, gf; 15. t!l, xc4, con 164
..., t!l, e7
No se consigue cambiar damas con toda comodidad: 12 . ... , e d7; 13. bl, e1+, ~ e7 (13 .... , ~ d8; 14. e xd7+, ~xd7; 15.~ d1, c5; 16. ~ xf7, recuperando el peón y conservando la ventaja de la pareja de alfiles), 14. e xd7+, ~ xd7; (14 .... , ~ xd7; 15. bl, d1), 15. ~ d5, ~ e6; 16. bl, xe6!, y las blancas alcanzan la cima. 13. 14. 15.
t!l, g5, 0-0 b!, ad1, c5 bl, fe1, ...
(Ver diagrama)
@' g6+, <D g7, no se consigue asaltar la fortaleza negra.
19. 20.
... , ~ f6 bt g3, ...
Era más fuerte 20. bth3!, ~ g7; 21. f4, ~ xf4; 22. <D d5, ~ g5; 23. <D e7+, ~ xe7; 24. bt xe7, con peligrosas amenazas, por ejemplo: 24 .... , <D f6; 25. ~ xc5, <D g4; 26. btg3, .llac8; 27. ~ xf7+, ~ h8; 28. bth3+, <Dh6; 29. bt xh6+, ~ xh6; 30. ~ xd4+, @' g7; 31. @'h4+, @'h7; 32. @' xh7+, ~ xh7; 33. ~ e6+, ganando. Ahora sería peligroso para las negras 15 .... , bt e8; 16. ~ b5, ( 16. ~ d3, @' c8; 17. @' h4, h6; 18. ~ xh6, <D f5, con juego confuso), 16.... , <Dxb5; 17. bt xd8, ~ xd8; 18. .llxe8+, <D xe8; 19. ~ xd8, .llxd8; 20. ~ f 1. Junto a la igualdad material las blancas tienen ventaja por la maniobrabilidad de la dama.
15. 16.
... , h6 ~ xh6!?,
20.
Ahora las negras podían jugar con mayor precisión, 20 .... , ~ f5!. Después de 21. <D e4, @' g7; 22 . .llg4 (22. bt xg5, <Dxg5; 23. <D xg5, <Dd6!), 22 .... , <Dh6!; 23. bt g3, <D f5, si quisieran los adversarios, la partida podría terminar en tablas por repetición de jugadas.
... 21.
El sacrificio de alfil está justificado, pero por lo visto, debió continuar 16. bt xe7!, y después de 16 .... , hg (16 .... , @' xe7; 17. <D d5, etc ... ), 17 . .ll xb7, las posibilidades blancas son mejores.
16. 17. 18. 19.
... , .ll ae8
... , gxh6 @' xh6, <D h7 bt d3, ~ g5 @' h5, ...
En caso de 19. bt g3, <D f5; 20.
<D e4, ~ ha
(Ver diagrama) Yusupov considera que éste es el error decisivo, y que era correcta 21 .... , ~ g7!. La partida es muy tensa, y en una aguda lucha cometer errores es inevitable. 22.
h4, ,1: 1, xe4
No es mejor 22 .... , ~ h6(g6); 23. ,1: 1, xg5, o 22 .... , ~ xh4; 23. <D xf6, bt xe 1+ 24. ~ h2 . 165
No salvaba 24 .... , ~ d6; 25 . ./d,xd4!, cd; 26. ~ d3. Las piezas negras son muchas, pero ¡ay!, todas desconectadas ... 25. 26. 27. 28. 29. 30. 31. 32.
33. 23. 24.
166
./d, xe4, ~ f4 ./d, g4, ~ h6
~ xc5, 0i c6 ~ h5, ~ d6 ~ xf7, ~ d1+
~ h2, ~ d6+
f4, ~ c7 ~ b3, ~ d6 ~ e8, ~ xf4+ g3, ~ xg3+ ~ h3.
Las negras superaron el tiempo, pero no había salvación: mate.
Partida 27 A. Sokolov - L. 011 Odessa, 1989 1.
e4, e5
2.
~ f3, ~ f6 ~ xe5, d6 ~ f3, ~ xe4
3. 4. 5. 6.
7.
d4, d5 ~ d3, ~ d6
0-0, 0-0
Esta variante denominada simétrica, es conocida hace largo tiempo, tanto como desde que la apertura recibiera su nombre. Sin embargo en los últimos años ha cobrado, de nuevo, mucha popularidad, incluso a nivel de grandes maestros. Las negras rehusan las acciones activas, pero algo peligrosa, relacionadas con el ataque al centro, ~ b8-c6, y se esfuerzan en reforzarse sólidamente mediante e7 -c6. 8.
c4, c6
(Ver diagrama) Aquí las blancas tienen a su disposición cuatro posibilidades, 9. -ª e 1, 9. ~ c2, 9. ~ c3 y 9. ed. Últimamente los dos primeros no han prÓvocado problemas a las negras, así que nos detendremos en los otros dos.
9.
~ c3,
...
El desarrollo del caballo por c3 se consideraba, hasta esta partida, bastante peligroso para las negras, pero en este encuentro 011 consiguió emplear una valiosa novedad teórica y alcanzó con facilidad las tablas. Debemos de decir que gracias a esto, esta partida consiguió en el lnformator el premio a la mejor novedad. 9. 1 O.
..., ~ xc3 bxc3, dxc4
La posición después de 1O. ... 167
.Q1, g4; 11. cd, se examinará con detalle en la siguiente partida. Desde luego, si las blancas quieren eludir el cambio de peones en c4, entonces en lugar de 9. 0lc3, deben proceder primero al cambio en el centro, 9 .cd, cd, y sólo ahora 1O. 0lc3. 11. 12.
~ xc4, ~ g4 ~ d3, ...
hg; 20. ~ xg5, las posibilidades blancas son mejores. También les favorece 16.... , .Q1, xg4; 17. 0lxf7!, llxf7; 18. ~ xf7+, ~xf7; 19. hg, 0l xg4; 20. ~ f5+. 17. 18.
Perdería 18. gf, be; 19.
12. 13. 14. 15.
... , 0l d7 0lg5, 0l f6 h3, ~ h5 f4. h6
~ d2,
~ g6; 20. fg, ~ xg7; 21. ~ h6+, ~ g8;
A 12. ~ b 1, es buena 12 . ... , b5!, por ejemplo: 13 . .Q1, d3, 0ld7; 14. ~ e1, 0l b6; 15 . .Q1, c2, il e8!, con igualdad (Short- Makarichev, Rotterdam, 1988).
fxg5, b5 .Q1,b3, ...
22. 18.
~ g5,
.Q1, e7, etc ...
... , 0l xg4
Este sacrificio de caballo se encuentra por vez primera en la partida Short - Hübner (Tilburg, 1988), si bien es cierto que las jugadas b7-b5 y .Q1,c4-b3 se hicieron más tarde. 19.
hxg4, ~ d7!
A 19 .... , .Q1,xg4, sigue 20. g6, .Q1,e6; 21. ~ xf7!, con fuertes amenazas. 20.
gxh5, ...
En la partida Nunn - Salov (Bruselas, 1988), 20. ~ f5, .Q1, xg4; 21. ~ xd7, .Q1, xd7; 22. ~ xf7, ~ xf7; 23. g6, .Q1,e8, no dio nada a las blancas. 20. 21. 16.
g4, hxg5
En caso de 16 .... , b5; 17. ~ b3, c5!; 18 . .Q1, d5!?, .Q1, g6; 19. ~ xg6, 168
... , ~ g4+ ~ f2, llae8
En caso de 21. ~h1, esta jugada llevaría a la victoria negra. Ahora amenaza 22 .... , ~ e2+; 23. ~ xe2, ~ g3, mate.
22. 23.
b!. g1, ~ h4+ ~ g2, ...
el éxito, pero jugaron 29. ... , Zi c8?, suponiendo que también ganaban con facilidad ...
-1
Ahora ambas partidas se separan. Hübner jugó aquí 23 . ... , c5? y después de 24. b!. h 1, ... abandonó. Efectivamente, en caso de 24 .... , ~ g4+; 25. ~ f1 (25. ~ f2?, ~ g3+), 25 .... , c4; 26. ~ d1, b!.e1+; 27. ~ xe1, ~ g2; 28.l!J e2!, ~ xh1+; 29. ~ d2, el ataque negro se consume, y se quedan en la estacada. Parece peligrosa 23 . ... , b!. e4, pero aquí, continuando 24. ~ f3!, las blancas liquidan todo el peligro, por ejemplo: 24 . ... , ~ h2 (24 .... , b!. fe8?; 25. ~ xf7+), 25. ~ d2!.
No es tan claro 25. b!. h1, Zi g4+; 26. ~ f1, Zi g3?; 27. ~ xc6, ~ h3+; 28. ~ f2, ~ f5+; 29. ~ e 1. Esta posición surgió en la partida Psajis - Mijalchishin (Kiaipeda, 1988). Después de 29 . ... , ~ g1!; 30. ~ d1, ~ d3+; 31. ~ d2, ~ e3, las negras alcanzaban
Pero aquí siguió el golpe de efecto 30. ~ e6!, y las negras tuvieron que abandonar enseguida. 25 . ... , b!. g4+ (25 .... , ~ xg 1; 26. b!. xg1 ), 26. ~ xg4, ~ xg4+; 27. ~ xh2, ~ h4+ (27 .... , ~ xh5+; 28. ~ g3), 28. ~ g2, ~ e4+ (28 .... , Zi e8; 29. ~ d 1), 29. ~ f2, ~ f5+ (29 .... , b!. e8; 30. b!. g2!), 30. ~ e2, b!. e8+; 31. ~ d 1. Los jaques se han agotado, y las blancas tienen una ventaja de material decisiva. Así, parece que se puede sacar una conclusión: el sacrificio de caballo es incorrecto. 011 también consiguió el premio por refutar esta opinión: demuestra que las negras sin pieza consiguen tablas con facilidad. 23.
...,
~ h2+!
Una mejora sustancial, que pone 169
bajo duda las perspectivas de las blancas en toda la variante con 12. ~ d3. 24.
~ f3,
...
Jugada única, pierde en el acto 25. ~ d1?, .lle1+. Lo mismo sucede en caso de 25. g6?, g e1+; 26. ~ xe1, ~ xg1+ ; 27. 'ee2, g e8+. Ahora las negras fuerzan las tablas, y las blancas están del todo conformes.
170
... , .lle1+! 'e xe1, ~ xg1+ ~ e2, ~ xc1
g xc1!, ...
~ f1, ~ f4!
En esto consiste todo, se amenaza J¿e8-e1+, y después de 25. ~ xf4, ~ xf4+; 26. ~ g2, l;:\;e3, aún surge la pregunta de si las blancas pueden rechazarla. 25.
25. 26. 27. 28.
Después de 28. ~ d3, ~ xg5 , las negras sencillamente se quedan con peón de más.
29.
... , ~ xc1 g6, g e8+
30. 31 .
~ d3, ~ b1 + ~ d2, ...
28.
Desde luego, no 31. ~ c2?, ~ xa2, y el punto f7 está defendido. 31. 32. 33. Tablas.
... , ~ e1+ ~ d3, ~ b1+ ~ d2.
Partida 28 Dvoirys - E. Rozentalis Lvov,1990 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9.
1 O.
e4, e5 0l f3, 0l f6 0l xe5, d6 0l f3, 0l xe4 d4, d5 ~ d3, ~ d6
0-0, 0-0 c4, c6 cxd5, cxd5 0l c3, ...
El orden de jugadas más corriente: las blancas crean un centro estable, y su enemigo debe jugar con atención. 1 O. 11. 12.
..., 0l xc3 bxc3, ~ g4 bl.b1, ...
h4, b;l,c7; 17. h5, con clara ventaja blanca (Dvoirys - Yakovich, Kiev, 1986).
(Ver diagrama) 12.
... , b6
A menudo se juega también 12 . ... , 0ld7. Examinemos los ejemplos más interesantes de los últimos tiempos. 13. h3. Desde luego, no 13. b;l, xb7, 0lb6, con la amenaza 14 .... , ~ cs.
13 . ... , ~ h5. Es peor 13 .... , ~ xf3; 14. ~ xf3, 0lb6; 15. g3, b;l, c8; 16. 171
Ahora se puede tomar el peón. A 14. llxb7, 0lb6; 15. ~ d2, es mala 15. . .. , ~ eS, por 16. ~ xh7+, ~ xh7; 17. 0J g5+, ~ g6; 18. g4, ~ xg4; 19. hg, ~ xb7; 20. ll e1, con la amenaza 21. ~ c2+. Es insuficiente 15. ... , ~ g6; 16. ~ xg6, hg; 17. ~ e2, y a las negras les resulta difícil aprovechar el "aislamiento" de la torre b7. Sin embargo jugando previamente 15. . .. , h6; 16. 'ª e1, y sólo ahora 16 . ... , ~ eS, las negras consiguen un juego igualado, por ejemplo: 17. ~ a6, ~ e6; 18. 0J e5, ~ xb7; 19. ~ xb7, ~ xd1; 20. ~ xa8, ~ xe5; 21. de, ~ a4; 22. ~ b7, ~ b5!; 23. 'ª b 1, ~ e4, con rápidas tablas (Serper - Akopian, Tbilisi, 1989). En la partida Sokolov - Rozentalis (Minsk, 1986), después de 14. 'ª xb7, 0Jb6, las blancas prefirieron enseguida 15. ~ a6, y 15 . ... , ~ eS; 16. ~ e2, ~ e6; 17. ~ b5, ~ xe3; 18. ~ b2, ~ e2; 19. 'ª e 1, ~ e4!; 20. 'ª e1, ~ g6; 21. ~ e2, 0J e4; 22. ~ xe4, de; 23. g4, ~ xg4; 24. hg, ~ xg4+; 25. ~ f1, ~ h3+, llevó a jaque continuo. 14. 'ªb5!. La continuación más fuerte en la posición del diagrama, trasladando la torre a la quinta fila puede provocar al enemigo bastantes dolores de cabeza. Examinemos una partida importante para la teoría, Beliavsky Petursson (Reykjawik, 1988). 14 . ... , 0J b6; 15. e4!, ~ xf3. Es peligroso 15 .... , de; 16. ~ xh7 +, 172
~ xh7;
17. ll xh5+, y a 15 .... , 0J xc4, sigue 16. 'ª xd5, ~ h2+; 17. <í) xh2!, ~ xd5; 18. ~ xc4, ~ xc4 ; 19. ~ xh5, y las negras se quedan en la estacada. Es interesante que esta posición se diera por primera vez en la partida Mahia Pla (Mar del Plata, 1988), y después se repitió en la partida Dvoirys - Vladimirov (Barnaul, 1988). 16. ~ xf3, de; 17. ~ e2!. Las negras tienen un peón de más, pero todas las piezas enemigas se lanzan hacia su rey.
17 . ... , a6. Esta ingenua jugada provoca un final espectacular. 1S. ~ g5!, ab. Era mala 18 .... , f6; por 19. ~ h5, h6; 20. ~ xh6, ab; 21. ~ g6, y a la retirada de la dama decide 19. ~ f6. Pero, razonablemente, sin dama las negras tampoco tienen mucho que hacer. 19. ~ xd8, ll fxdS; 20. ~ h5, g6; 21. ~ xb5, ~ e7; 22. a4, 'ª xd4; 23. ~ e5, 'ª d7; 24. g3!, y pronto las blancas alcanzaron el éxito.
De una manera parecida se desarrolló la partida Kudrin - Machado (Salónica, 1988): 17 . ... , ll, b8; 18. a4, a6; 19. ~ gS, 1!ie7 (19 .... , f6; 20 . 1!i h5, h6; 21 . .í?l, xh6) , 20. .í?l, xh7+, ~ xh7; 21. 1!ihS+, ~ g8; 22. ~ f6!, .í?l, h2+ (22 ...., .í?l,e7; 23. .í?l, xg7!, ~ xg7; 24. 1l!ig4+, ~ f6; 25. ll, f5+, ~ e6; 26. ll, c5+, f5; 27. 1lfi e2+), 23. ~ h1, 1!i d6; 24. .í?l, xg7, ~ xg7; 2S. ll, gS+, ~ f6; 26 . ll, e1!, ~ e6; 27. ll, xe6+, fe; 28. ll, g6+, ~ e7; 29. bl g7+. Las negras abandonaron. Beliavsky recomienda enseguida 17 .... , 1!!i c7; 18. a4, a6; 19. ~ h5, g6; 20. ~ h6, bt fe8; 21. 1!if6, ~ f8; 22. ~ xf8, ll,xf8; 23. blc5, 1!id8; 24. 1!ixd8, ll,axd8; 25. ll, b 1, bl d6; 26. a5 , ~ d7; 27 . .lh c4, b6; 28. ab, ~ xb6, con un final igualado. En la partida Timman - Anand (Tilburg, 1991 ), las negras retiraron la dama a una casilla vecina, 17 . ... , 1!id7. Después siguió: 18. a4, .í?l, e7; 19. ll, eS, .í?l, d6; 20. bl bS, ~ e7; 21. bi eS, .í?l, d6. Las blancas rehuyen la repetición de jugadas, y después de 22. aS, ~ eS; 23. ~ fS, 1!i d8; 24. a6, ~ e7; 2S. ab, bl b8; 26. ~ gS, f6; 27 . .í?l, e6+, l i17h8; 28 . ~ f4, ~ xf4; 29. 1!ixf4, ll, xb7; 30 . dS, ~ g6; 31. 1!i xe4, recibieron un final algo mejor gracias al peón pasado "d". Si bien es cierto que no consiguieron aprovecharlo, y en un profundo final las mismas blancas tuvieron que buscar la salvación.
13.
bl bS, ...
Amenaza 14. ll,xd5,
~ xh2+;
15.
~ xh2. ~ e7
13 .
. .. ,
14.
h3, ...
"Atrae" al alfil negro g4 a la quinta fila, para realizar con toda comodidad el avance c3-c4. ¿Y qué sucede, si las blancas avanzan enseguida el peón "e"? Short - Timman (Hilversum, 1989) 14. e4.
.' !>"' § .·..'g 14 . ... , de!. Es peor 14 .... , 1!id6; 15. ll,e1!, .í?l,xf3; 16. 1!ixf3, 1!ixh2+; 17. ~ f 1, ~ c6; 18. ll,xd5.
(Ver diagrama) Esta posición surgió en la partida Short - Salov (Amsterdam, 1989). En respuesta a 18. ..., bl ae8, Short ofrece la siguiente bella variante: 19. bí: xe8, ~ h1+; ( 19 .... , bí: xe8; 20. bí:h5), 20. lli17e2, 173
Z:h e8+; 21. ~ e3, l:J,e7; 22. bl d7!, g xd7; 23. ~ xc6, ~ h5+; 24. f3, o 21 .... , ~ a 1; 22. ~ f5, l:J,e6 (22 .... , g6; 23. ~ d7; o 22 .... , 1Jxd4+; 23. l:J,xd4, ~ xd4; 24. ~ xh7+, ~ f8; 25. ~ h8+ y ~ xe8+), 23. ~ xh7+, ~ f8; 24. ~ h8+, ~ e7; 25. ~ xg7, y las blancas alcanzan el éxito. Sin embargo se equivocó, 19. ~ e3?, y ya Salov pudo conseguir ventaja con la jugada 19 .... , f5!, con diversas amenazas, 20. ... , 1Jb4, 20 .... , 1Je7, o 20 .... , f4. Pero las negras a su vez cometieron un grueso error, jugando otro peón, 19 . ... , g6?. Después de 20. a3!, las blancas recuperaron la iniciativa y pronto alcanzaron la cima: 20 . ... , ~ h1 + (20 .... , f5; 21. ~ h3, ~ xh3; 22. gh, f4; 23. ~ d2, bi d8; 24. ~ c3), 21. ~ e2, ~ h4; 22. g4, f5; 23. l:!. d7, f4; 24. bih1, ~ f6; 25. ~ d5+, l:!. e6; 26. g5, 1J xd4+; 27. ~ d1. Las negras abandonaron. Regresemos a la partida Short Timman. 15. ~ e4, 1Jc6!; 16. 174
l:J, g5. A 16. ~ xc6, decide 16 ...., ~ d6!, con la amenaza ~ xf3. 16 . ..., ~ xf3; 17. ~ xf3, ~ d 6 ; 18. l:J, g3. Tampoco es mejor 18. g3, 1Jxd4 ; 19. ~ e3, l:J,ae8; 20. ~ a3, 1Je2+; 21. ~ g2, ~ d4, o 18. l:J,h5, g6; 19. ~ a3, 1Jxd4; 20. ~ h3, 1Je2+; 21 . ~ h1, ~ d4 (Timman). 18 . ..., 1J xd4; 19. ~ g4, g6; 2 0. ~ xa8, l:!. xa8?. Las negras dejan escapar una gran superioridad, que mantenían después de la previa 20 .... , f5, y ahora 21. ~ d1 (21. ~ a3, ~ e5; 22. ~ d1, 1Je2+), 21 . ... , Z:h a8; 22. l:J,e 1, b5; 23. ~ b2, .l:J,d8, y las blancas están indefensas. 21. bi d1, .l:J, d8; 22. ~ f1, ~ d5 ; 23. bi e3, f5?. Y en este momento el avance del peón "f" ya lleva a la derrota, era imprescindible 23 .... , c3; 24. bl xc3, ~ b5+. 24. ~ h4, f4. Ahora, después de 24 .... , c3; 25 . .l:!, xd4, ~ xd4; 26. .l:J,e8+, las blancas ganan. 25 . .l:J, e7, h5; 26. ~ f6. Las negras abandonaron. Ahora regresemos a la partida principal. 14.
... , a6
Antes de retirar el alfil, las negras quieren expulsar la torre de la quinta fila. A 14 .... , ~ h5, sigue 15. c4, y después de la pasiva 14 . ... , ~ e6; 15. 1Jg5, h6; 16. ~ h5, ~ d6; 17. g3, 1Jd7; 18. ~ f4, 1!c6; 19. 1J xe6, 1J f6; 20. ~ e2; las blancas disponen de una sensible ventaja posicional (Dvoirys - Rozentalis, Barnaul, 1984).
x•....
"3'
J. J.
Ahora tras la retirada de la torre a b 1 o b3 las negras retiran el alfil, 15 .... , ~ h5, y las posibilidades están igualadas. 15. g xd5!?, ... Una posibilidad interesante, por la calidad las blancas reciben peón y una fuerte iniciativa. Resulta interesante, que cuando este libro ya estaba prácticamente terminado, en los cuartos de final de candidatos en Bruselas se celebraba la siguiente partida. Short - Gelfand (Bruselas, 1991), 15. hg!?. La misma idea de la partida comentada, pero realizada de otra manera. 15. ..., ab; 16. 'f! c2, g6; 17. ~ h6, bl. e8; 18. ~ xb5, g e4 (18. ... , ~ d7; 19. ~ c6), 19. g5, 'f! d6; 20. ~ e5, 'f! e6; 21. f4. (Ver diagrama) La posición parece bastante peli-
grasa para las negras, su flanco de dama está sellado, y el cambio en e5 no tiene perspectivas. Mientras tanto se amenaza ~ d3 seguido de f4-f5. Sin embargo Gelfand encuentra un medio, con la ayuda de un sacrificio de pieza, para escapar de una posición delicada. 21 . ... , ~ c6!; 22. ~ xc6 (22. ~ xc6, ~ xe5; 23. ~ xa8, ~ xf4, con peligrosas amenazas, pero es interesante 22. f5), 22. ..., bt xf4; 23. bl. xf4, ~ xf4. Dos piezas menores contra torre es una gran ventaja, pero si se tiene en cuenta que el alfil h6 está encerrado sin remedio, las posibilidades de ambos bandos pueden, perfectamente, considerarse iguales. 24. ~ e5, ~ xe5; 25. de, 'f! xe5; 26. a4, 'f!e1+; 27. ~ h2, g c8; 28. 'f! d3, 'f! e5+; 29. 'f! g3, 'f!xc3; 30. 'f! f4, 'f! c7; 31. ~ g3, 'f! c3+; 32. ~ h2, 'f! c7; 33. ~ g3 . Tablas. 175
15. 16.
... , e xd5 hxg4, ~ c6!
Única, pero suficiente. 17. 1S.
~ g5, ~ e4,
h6 ...
Las blancas crean varias amenazas, 19. ~ xh6, 19. g5, 19. e f3, pero las negras encuentran un procedimiento para rechazarlas todas. 1S. 19.
... , .ll adS! g5, ...
No Valí a 19. e f3, debido a 19 .... , ~ e5!, y a 19. ~ xh6, tiene la respuesta 19 .... , ~ xd4. 19. 20. 21. 22.
g feS g e 1, ~ xd4!
... ,
cxd4, e xd4 e c2!, ...
No valía 22. ~ f6+, gf; 23. b,i xe8+, g xe8; 24. ~ h7+, ~ xh7; 25. e xd4, g e 1, mate. 22. 23.
... , e xd3 e xc7, .!l eS
Pero no 23 .... , hg; 24. ~ xg5, f6?; 25. ~ xf6!. 24.
e b7, .ll xc1
Y aquí en caso de 24 .... , hg; 25.
176
~ xg5, f5, decide la maniobra del alfil 26. ~ f6!.
25. 26. 27.
2S. 29. 30. 31.
g xc 1, 'f! xe4 '!!' xb6, e t4 g f1, g e6 'f! dS+, ~ h7 e d3+, e e4 m xe4+, g xe4 gxh6, ~ xh6
Como resultado de una escaramuza tempestuosa ha surgido un final de torres igualado. La torre negra es algo más activa, y por eso decidieron "hacer sufrir" un poco a su adversario. Pero las tablas son el resultado inevitable. 32. 33. 34. 35. 36. 37. 3S.
39. 40. 41. 42. 43. 44. 45. 46. 47. 4S. 49.
Tablas.
g d1, g a4 g d2, ~ g5 g3, g6 ~ g2, f5 g b2, g a3 g c2, ~ h5 g d2, a5 g c2, a4 J:i d2, g5 J:i c2, ~ g4 .ll c4+, f4 gf, gf .ll c2, ~ f5 Zl b2, bl c3 g b4, a3 boi a4, ~ g4 g aS, ~ f5 g a4, ~ e5.
Partida 29 D. Howell - S. Makarichev Frunze, 1989 1. 2. 3.
e4, eS 0J f3, 0J f6 d4, ...
Las dos últimas partidas que dedicamos a la defensa rusa se dedican al sistema llamado ataque Steinitz. 3.
..., 0J xe4
Una de las posibilidades principales, 3. ..., ed, la examinaremos con detalle en los comentarios a la Partida 30.
4.
~ d3,
...
Después de 4. 0J xe5, d6; 5. 0Jf3, por transposición de jugadas (3. 0J xe5, d6; 4. 0J f3, 0Jxe4; 5. d4), se llega a una posición que ya conocemos con anterioridad. En los manuales de aperturas se ofrece, normalmente, la demostración de que en caso de 4. f! e2, o 4. de, las negras igualan con facilidad. 4. 5.
..., d5 0J xe5, ...
(Ver diagrama)
Aquí 5. de, no goza del favor de la teoría. Por lo visto, sólo juega así el gran maestro O. Romanishin: 5 . ... , 0J e6; 6. 0-0, ~ g4; 7. 0Jbd2. En la partida Romanishin Ehlvest (Erevan, 1988), después de 7. 0J e3, 0J xe3; 8. be, ~ e7; 9. Zi e 1, las negras hicieron algunas jugadas imprecisas, 9 . ... , f! d7; 10. h3, ~ h5; 11. bl, b1, 0J d8; 12. ~ e2, e6; 13. e4, de; 14. f! xd7+, ~ xd7, pasando por alto el golpe 15. e6+!. Cinco jugadas después, 15. ..., f/fl e7; 16. ef, 0J xf7; 17. ~ xe4, ~ d6; 18. 0J d4, bl,he8; 19. 0Je6+, ~ d7; 20 . .f:h b7+, las negras abandonaron. 177
7 .... , ~ xd2; 8. ~ xd2, ~ d4; 9. ~ e2, ~ xe2+; 1 O. ~ xe2, ~ d7; 11. h3, Q1, xf3; 12. ~ xf3, Q1, c5; 13. c4, 0-0-0; 14. bl, ad1, ~ e6; 15.
Q1, g5, bl d7; 16. bl xd5, 17. cd, ~ xe5. Tablas (Romanishin - Makarichev, Frunze, 1985). Aquí la continuación 5 .... , {/¿ e 7, es algo pasiva, por eso las negras eligen entre la antigua 5 .... , ~ d6, y la actual 5.... , ~ d7. Antes de examinar la jugada del caballo, más popular, vamos a ver una partida interesante, en la que se sacó antes el alfil. Kasparov - Anand (Linares, 1991) 5 .... , ~ d6; 6. 0-0, 0-0 (en la 8ªpartida del match Timman- Yusupov, Linares 1992, se jugó 6 .... , ~ c6; 7. ~ xc6, bxc6; 8. c4, 0-0; 9. c5, ~ e7; 1O. ~ c3, f5; 11. ~ e2, ~ f6; 12. ~ a4, ~ d7; 13. f3, ~ g5; 14. ~ f4, ~ e7; 15. ~ d2, g6; 16. bl, ae1, ~ g7; 17. Q1, c3, h5; 18. ~ a6, ~ ab8; 19. ~ d3, h4; 20. ~ e5, f4; 21. h3, blbe8; 22. ~ d3, ~ xe5; 23: bl xe5, ~ xe5; 24. dxe5, ~ e7; 25. ~ xa7, ~ e6; 26. b4, ~ g5; 27. ~ h1, ~ h7; 28. a4, bl f7; 29. b5, d4; 30. Q1,b4, ~ g7; 31. bl g1, Q1, f5; 32. Q1, c4, bl, e7; 33. ~ b8, ~ h5; 34. ~ g8+, ~ h6; 35. ~ e1, ~ g3+; 36. ~ h2, bl, g7; 37. ~ h8+, blh7; 38. ~ f8+, ~ h5; 39. b6, cxb6; 40. cxb6, d3; 41. ~ f6, ~ e2; 42. blf1, ~ d4; 43. a5, ~ c2; 44. ~ xg5+, ~ xg5; 45. a6, ~ e3; 46. bl, f2, Q1, c8; 47. ~ xd3, bl, d7; 48. a7, ~ b7; 49. Q1, a6! y las negras abandonaron); 7. c4, ~ xe5. En los últimos años esta captura ha desalojado a las ~ xd5;
178
restantes continuaciones: 7 .... , f6, 7 .... , ~ f6, 7.... , ~ c6 y 7.... , c6. 8. de, ~ c6; 9. cd, ~ xd5; 10. ~ c2, ~ b4; 11. ~ xe4, ~ xc2; 12. ~ xd5, ~ f5. Las cinco últimas jugadas, como ya ha quedado establecido, son las mejores para ambos bandos, y no tiene ningún sentido desviarse de ellas, ni para las blancas ni para las negras. 13. g4, ~ xg4. La posición crítica de la variante. 14. ~ e4, ~ xa1; 15. Q1, f4, f5; 16. Q1, d5+, ~ h8; 17. bl c1, c6. Si 17 .... , bl,ad8, entonces 18. ~ c3, b5; 19. e6!, ~ feS; 20. Q1, xc7, blc8; 21. 0ixb5, bl, e7; 22. bl,xa1, bl, exc7; 23. ~ xc7, bl, xc7; 24. bl,e1!, bi e7; 25. b4!, con clara ventaja blanca (Giek - Barlamov, URSS, torneo por correspondencia, 1987). 18. ~ g2. Es posible 18. ~ e6, g5; 19. ~ xg5, bl, ae8; 20. ~ h6, bl, xe6; 21. ~ xf8, ~ h3; 22. blc3, bl, g6+; 23. bl g3, ~ g8; 24. ~ e7, f4; 25. bl, xg6+, hg; 26. ~ a3, f3, con igualdad (011 - Jalifman, Vilnius, 1988). 18. ... , ~ fd8. No vale 18 .... , bl ad8; 19. ~ c3, bl, d4; 20. Q1,e3, blb4; 21. ~ c5, ganando. 19. 0i d2. Es inofensivo para las negras 19. 0ic3, ~ d4; 20. Q1, e3, ~ b4, o 19. f3, Q1,h5; 20. ~ a3, bl, d4; 21. ~ e3, bl,b4; 22. ~ c4, ~ a4; 23. ~ a3. Tablas (Sax - Yusupov, Salónica, 1988). (Ver diagrama) 19 .... , bi xd2!. Un agudo procedimiento para restablecer el equilibrio de material. Desde luego, si
.: .!.!
J. .!
las blancas consiguieran capturar el caballo, atrapado en la esquina del tablero, las cosas irían mal para su adversario. Es curioso que la posición del diagrama ya se encontrara en la práctica en la partida Rozentalis - Gelfand (Vilnius, 1988). Después siguió 19 ...., h6; 20. h4, ~ d3; 21. bl xa1, g5; 22. hg, hg; 23. ~ xg5, 'ªg8, y aquí llevaba a una gran ventaja 24. ~ f6+, V!h7; 25. ~ f1, f4 (en caso de 25 .... , ~ f3, decide 26. ~ g3, f4; 27. ~ xf3, blxf3; 28. V!g2, l'ld3; 29. l'lh 1+, V! g6; 30. ~ e4!, V! f5+; 31. ~ g5, ~ xg5+; 32. ~ xg5, V!xg5; 33. l'le1), 26. V!h2, ~ f3 (en la semifinal de Candidatos, Linares 1992, Yusupov jugó contra Timman: 26 . ... , bl g6; 27. bl e1, l'lh6+; 28. V! g 1' .llg6; 29. V!h2, blh6+ y se produjo el empate por jaque continuo); 27. ~ h3, ~ g4; 28. ~ xg4, 'ª xg4; 29. V!h1!, preparando ~ h2 (Rozentalis). En el citado match Timman- Yusupov, Linares 1992, 6-ª partida, se intro-
dujo una importante innovación, tras 19 .... , h6; 20. h4, .ll d3; 21. ~ f 1!, l'ld4; 22. ~ e3, l'l d5; 23 . ~ xa1, 'ª xe5; 24. ~ c4, 'ªd5; 25. ~ g2, bí, b5; 26. bí, e1, bí, d8; 27 . ~ xa7, bí, d1; 28. 'ª xd1, ~ xd1; 29. ~ d4, f4; 30. ~ e4, blb4; 31. b3, ~ e2; 32. ~ c3, bí,b5; 33. ~ d6, .llh5; 34. f3, ~ a6; 35. ~ f5 , ~ g8; 36. ~ xg7, b!. xh4; 37. ~ f5, ~ e2; 38. ~ e6+, V!h7; 39. ~ f5+, V! g8; 40. ~ g2, c5; 41. ~ f6, ~ xf3+; 42. ~ xf3, .llh2; 43. a4, V! f7; 44. ~ e5, ~ e7; 45. ~ e6, b!.h5; 46. V!xf4, b!.h4+; 47. V! e3, c4; 48. b4, h5; 49. a5, bí,h1; 50. ~ f4, 'ªc1; 51. V! d2, bí, f 1; 52. ~ e4 y negras rindieron. 20. ~ xd2, b!. d8; 21. ~ c3, 'ª d1+; 22. b!. xd1, ~ xd1; 23. f4, ~ c2; 24. V! f2, ~ g8; 25. a4, a5; 26. ~ x a5, ~ d4; 27. ~ f1, ~ b3!. Tablas. 5. 6.
~ d7 ~ xd7, ...
... ,
Ahora este cambio se realiza casi automáticamente, pero en años anteriores se empleaban diversas continuaciones: 6. ~ c3, 6. 0-0, 6. ~ e2 y 6. ~ xf7. En la actualidad se ha determinado que ninguna de ellas es peligrosa para las negras, como se puede ver fácilmente estudiando una monografía de aperturas. 6. 7.
..., ~ xd7 0-0, ...
No da nada 7. ~ e2, ~ e7; 8. 0-0, 0-0-0; 9. ~ d2, ~ g5 (también es 179
buena 9.... , 'l)xd2), 1O. ~ xe7, 24 xe7; 11. f4, 'l)e6; 12. 'l) f3, bl df8; 13. f5, 'l)d8; 14. 'l)e5, 24e8; 15. 'l)g4, f6; 16. ~ f4, ~ f7, con igualdad (Geller- Arkhipov, Moscú, 1986).
7.
... ,
~ h4
El ataque de la dama en h4 es la continuación más actual. Pero antes de seguir adelante, vamos a detenernos en otras tres jugadas, 7.... , 24d6, 7 . ... , ~ f6 y la más reciente 7.... , 24e7. Sveshnikov - Mijalchishin (Kuibyshev, 1986), 7 . ... , ~ d6; 8. e4!, e6; 9. 'l)e3, 0-0. Es más floja 9.... , 'l)xc3; 1O. be, de; 11. ble1+, ~ e7; 12. 24a3, ~ e6; 13. 24xe7, ~ xe7; 14. ~ xc4, 0-0; 15. ble5, ~ a3; 16. ~ xe6, fe, y las negras tienen un final difícil (Short - Hübner, Wijk aan Zee, 1986). 1 O. ~ h5, <Z)f6; 11 . ~ h4, de; 12. ~ xe4, Zi e8; 13. ~ g5, h6; 14. ~ xf6, ~ xf6; 15. ~ xf6, gf; 16. 180
bl fe1, ~ e6; 17. 'l)e4, 24 e7; 18. 24 xe6, fe; 19. 'l)e5, ~ xe5; 20. de, bl ad8; 21. ~ ad1, ~ f7. Tablas. Korolev - Glek (campeonato de la URSS por correspondencia, 1986-88), 7 .... , ~ f6; 8. ~ xe4, de; 9. 'l)e3, 0-0-0; 1 O. 'l)xe4, ~ g6 (es mala 1O.... , ~ b6; 11. lle 1, h5; 12. ~ d3, h4; 13. h3, bl,h5; 14. c4, bl e8; 15. ble2, A. lvanov Rozentalis, Klaipeda, 1985), 11. f3, f5 (no es mejor 11 ...., h5; 12. ~ f4!, h4; 13. ~ d3, h3; 14. g4, ~ b6; 15. a4!, 24e6; 16. blfd1, a6; 17. a5, ~ xb2?; 18. 'l)c3, ~ b4; 19. bl.a4, ~ e7; 20. d5, A. lvanov Kochiev, Kostroma, 1985; es más tenaz 17.... , ~ c6; 18. ~c3, ~ xc3; 19. 'l)xc3, las blancas tienen un peón de ventaja en el final, pero la pareja de alfiles dif iculta su realización), 12. 'l) f2, ~ b5; 13. bl, e1, 24 d6; 14. 'l)h3, bl de8; 15. 24f4, Zi xe1+; 16. ~ xe1, lle8; 17. f!g3, f! f6; 18. e3, ble2; 19. b3, bl.e2; 20. ~ xd6, ed; 21. f! e1. Las blancas tienen una sensible ventaja. Finalmente, en la partida Timman- Yusupov, 4-ª del match, Linares 1992, se ensayó: 7 .... , ~e7; 8. f!f3, 0-0; 9. c3, ~ d6; 1O. 'l)d2, f5; 11. c4, c6; 12. 'l)b3, ~ c7; 13. h3, dxc4; 14. 24xc4 +, ~h8; 15. 24 d2, btae8; 16. blac1, ~ b8; 17. a4, ble7; 18. blcd1 , f4; 19. 24d3, ~ f5 ; 20. 'l)c5, 'l)g5; 21. ~ h5, ~ xd3; 22. 'l)xd3, 'l)e4; 23. bife 1, f3; 24. gxf3, 'l)xd2; 25. blxd2, btxe1+; 26. 'l)xe1, f!d8; 27. 'l)d3, f!f6; 28. 'l)e5, g6; 29. ~h 6, 24xe5;
30. dxe5, ~ xf3; 31. e6, ~ e4 ?? y abandonaron las negras ante 32. ~ xf8 mate.
8.
c4, ...
Después de 8. ~ e1, 0-0-0; 9. f3, ~ xe 1; 1O. ~ xe 1, <D d6, el juego se equilibra (Timoshenko - Nogueiras, Salónica, 1988). 8.
... , 0-0-0
9.
c5, ...
Una idea relativamente nueva: las blancas rehusan el juego en el centro y se proponen crear amenazas peligrosas en el flanco de dama. A 9. cd, es fuerte 9.... , ~ d6; 1O. g3, <D xg3; 11. fg, i'l1. xg3; 12. ~ d2?, i'l1. xh2+!; 13. ~ xh2, ~ xd4+, y 14 .... , ~ d3, con ventaja negra debido a la posición descubierta del rey enemigo. 9.
... , g5
El sentido de esta activa jugada se verá más adelante. No pasa 9. ... , <D xf2; 1O. ~ xf2, ~ xd4, por 11. c6, o 11. b4!, ~ xa1; 12. ~ b2, ~ xa2; 13. <Dc3. Es pasiva 9 .... , <Df6; 1O. <Dc3, g6 (1 O.... , ~ xd4; 11. c6!), 11. <D e2, ~ h6; 12. ~ xh6, ~ xh6; 13. ~ c1, ~ heS; 14. b4, ~ b8; 15. b5, i'l1. f5; 16. ~ c3, etc ... (Prasad- Ravikumar, India, 1987). A ventaja blanca lleva 9.... , g6; 1O. <Dc3, ~ g7; 11. <De2, <Df6; 12. b4, <Dh5; 13. b5 (Timman - Hübner, Tilburg, 1983).
1 O.
<D c3, ...
Otra posibilidad es expulsar directamente al caballo. Después de 1O. f3, <Df6; 11. i'l1.e3, las negras pueden elegir entre 11 .... , ~ g8 y 11 .... , ~ e8. Sobre este tema se jugaron dos partidas interesantes entre Dolmatov y Makarichev. Vale la pena examinarlas. Dolmatov - Makarichev (Palma de Mallorca, 1989). 11 . ... , ~ g8; 12. <Dc3, g4! (después de 12 .... , ~ e8; 13. i'l1.f2, e h6; 14. ~ d2, las blancas tienen clara ventaja), 13. ~ e1?.
(Ver diagrama) Un descuido táctico. Era imprescindible 13. g3, ~ h3; 14. f4, <Dh5 (es más prometedora para las negras 14 .... , ~ e8), y sólo ahora 15. ~ e1!. Esta posición surgió un poco después en la partida Riemsdijk - Casafús (Buenos Ai181
,Wl .(,: .l .l .i.
res, 1990). Siguió 15 .... , bt e8; 16. ~ f2, 0J f6; 17. bt fe1, ~ g7; 18. ~ c2, bt e 7; 19. ~ f2, bt ge8; 20. bt e5, c6, y aquí en vez de 21. bt ae 1, 0J g8; 22. b4, daba clara ventaja 21. b4!. Ahora se sabe por qué Makarichev, en su segundo encuentro con Dolmatov, rehusó 11 .... , bt g8, a favor de 11. ... , bt e8. 13 .... , g3!. Makarichev, comentando la partida, dice que su adversario sólo había visto 13.... , ~ h5, calculando en caso de g4g3 esta bella variante: 14. hg, bt xg3; 15. 0J e2!, bt xg2+; 16. ~ xg2, ~ h3+; 17. ~ g1, ~ d6!?; 18. cd, bt g8+; 19. ~ g5!!, en la que las blancas ganaban huyendo con el rey: ~ g 1-f2-e3-d2. El sentido del peligro traicionó a Dolmatov ... 14. hg, bt xg3; 15. ~ d2. Resulta que a 15. 0J e2, decide 15. ..., ~ d6!, 16. cd, y sólo ahora 16 .... , bí xg2+; 17. ~ xg2, bt g8+!; 18. ~ g5, bt xg5+; 19. 0J g3, ~ h3+, etc ... 182
15 .... , ~ xe5!; 16. de, bí dg8!; 17. bt fd1, d4!; 18. e6, de; 19. ed+, ~ d8. Las blancas abandonaron. Dolmatov - Makarichev (Reykjavik, 1990): 11 .... , bt e8; 12. ~ d2. Una sorpresa preparada por Dolmatov especialmente para esta partida (la dama no sólo juega un papel de defensor del alfil, sino que tiene en su punto de mira la casilla a5). 12 .... , bt xe3!; 13. ~ xe3, 0J h5; 14. bt fd1, ~ g7; 15. ~ f1, g4; 16. e6. Una jugada azarosa. Después de 16. fg, bt e8; 17. ~ d3, ~ xg4; 18. 0Jc3!, ~ xd1, 19. bt xd1, las tablas están próximas. Esta variante se desarrolla también en la partida, con la diferencia de que las blancas entregan un peón. 16. ..., be; 17. fg, bt e8!; 18. ~ d3, ~ xg4; 19. 0J e3, ~ xd1; 20. bt axd 1, ~ g5. Ha llegado la calma, y las negras se quedan con un peón de más. Si bien es cierto que luego cometieron una seria equivocación, y Dolmatov consiguió tomarse la revancha en esta variante ... Regresemos a la partida principal. 1
o. ...,
~ g7
También se ha probado 10 .... , 0Jf6, 1o.... , f5 y 1o.... , bt g8. Rodríguez - Arkhipov (Belgrado, 1988): 1 O.... , 0J f6; 11. ~ e2 (a 11. g3, no sigue 11 .... , ~ xd4; 12. c6!, sino 11. ..., ~ h3 y si 12. ~ xg5, entonces 12 .... , 0Jg4!; a
juego confuso lleva 11. ~ f3, 12. ~ f5, ~ b8; 13. g3, 14. ~ xg5, ~ e5; 15. ~ xd7, Zl xd7; 16. h4, 0le4; 17. ~ f4, ~ e6; 18. bH e1, f5; 19. 0lb5, a6; 20. a4, ~ e5; 21. bl, a3, d4, Grünfeld - Mijalchishin, Palma de Mallorca, 1989), 11 .... , 0l g4; 12. h3, 0l h6; 13. ~ d2, bi g8; 14. f3, f5; 15. ~ e1, ~ h5; 16. b4, bl, e8; 17. ~ f2, g4? (era correcta 17 .... , f4!), 18. 0l f4!, ~ f7; 19.g3!, con clara ventaja blanca. Wedberg - Schneider (Torshavn, 1987): 1 O.... , f5; 11. 0l xd5, 0l xf2!?; 12. bl, xf2, ~ xd4; 13. ~ xg5, ~ xc5; 14. 0le3, f4!; 15. ~ xf4, b1. hf8; 16. ~ f1, ~ xe3!; 17. ~ xe3, ~ xe3; 18. ~ e2, ~ xf2+; 19. ~ h1, Zl de8. Las negras tienen determinada compensación por la dama. Rodríguez - Casafús (Buenos Aires, 1990): 1 O.... , bl, g8!?. Una novedad, que trae el éxito a las negras. 11. 0l e2? (es mejor 11. 0l xd5, bl, g6; 12. f3, b1.h6; 13. ~ xe4, ~ xh2+; 14. ~ f2, ~ h4+; 15. ~ e3, f5, con juego complejo), 11 .... , g g6!; 12. f3, bl, h6; 13. fe, de; 14. ~ c2, ~ xh2+; 15. ~ f2, ~ h4+; 16. g3 (16. ~ g1, ~ h1+; 17. ~ f2, bl, f6+; o 16. ~ e3, ~ g4!; 17. ~ xe4, bl, e6), 16. ... , ~ g4; 17. a4, Zl h2+; 18. ~ e1, ~ e6!, y la posición blanca es desesperada. ~ g7; ~ xd4;
11.
0l e2, ...
En los últimos tiempos también se juega g2-g3, desviando a la
dama de las casillas centrales. Geller- Howell (Reykjavik, 1990), 11. g3, ~ h3; 12. 0l xe4, de; 13. ~ xe4, ~ b5; 14. ~ xg5, bl, xd4; 15. ~ g2!. Más precisa que 15. ~ b3, b!, xe4; 16. ~ xb5, h6; 17. ~ e3, bl,h4; 18. bl, fd1, ~ xh2+; 19. ~ f1, ~ h3+; 20. ~ e1, bl, e4; 21. c6!, Zlxe3+; 22. fe, ~ xg3+; 23. ~e2, ~ g2+; 24. ~ e1, ~ g3+. Tablas (Dolmatov - Akopian, Erevan, 1988). 15 .... , ~ f5; 16. ~ b3, c6; 17. ~ e3, ~ xf1; 18. b!, xf1, Zl d7 (merecí a atención 18 .... , bl,hd8; 1O. ~ xd4, ~ xd4, y la posición está equilibrada), 19. ~ a4!. En la partida A. lvanov - Makarichev (Reykjavik, 1990), donde se jugó por vez primera 15. g3, después de 19. ~ a3, ~ b8; 20. b4, las negras podían jugar 20 .... , bl,hd8, preparando 21 .... , g d1. Ahora la casilla d1 está atacada, pero las negras tienen bastantes preocupaciones por el punto c6. 19 .... , ~ b8; 20. b4. La relación material de fuerzas está igualada, pero Geller ataca decisivamente el enroque enemigo. (Ver diagrama) 20 .... , ~ d3; 21. ~ f4+, ~ aS; 22. ~ d6!, b1. xd6; 23. cd, ~ xd6; 24. b5, cb; 25. ~ xb5, Zlb8; 26. b!,b1, ~ c7; 27. a4, ~ c3; 28. b1. c1!, ~ e5; 29. ~ b3, ~ d4; 30. ~ xb7+. Y las negras abandonaron. 11.
... , bl. he8 183
Aquí hay que atender dos partidas, en las que las negras jugaron de otra forma. Sax - Salov (Bruselas, 1988): 11. ... , f5; 12. f3, bl, hf8!?; 13. a4, bí, de8; 14. ~ e1, 9 xe1; 15. bl, xe1, f4!; 16. fe, de; 17. ~ c4, f3; 18. ~ e3, fe; 19. bl, xe2, c6!; 20. d5!, cd; 21. ~ xd5, h6; 22. bí, d2, bí, d8; 23. bl, ad1, ~ xa4; 24. ~ xb7+, 'i/Ef c7; 25. bl, xd8, bl, xd8; 26 . .l:l xd8, 'i/Ef xd8; 27. ~ xe4, 'i/Ef c7; 28. c6, a6; 29. ~ d3, ~ xb2. Tablas. Ulibin - Akopian (Borzhomi, 1988) 11 . ... , bl, de8; 12. f3. Después de 12. a4, la torre consigue llegar a la casilla h6, 12 .... , bl, e6; 13. f3, Zlh6!; 14. fe, de; 15. ~ c4, ~ xh2+; 16. 'i/Eff2, bl, f6+; 17. 'i/Efe1, !i'xg2; 18 . .l:l xf6, ~ xf6; 19. ~ e3, ~ g7. Las negras tienen tres peones por la pieza, y las posiblidades de ambos bandos son iguales (loseliani - Gaprindashvili, Borzhomi, 1990). 12 . ... , <í) f6; 13. ~ d2, 1lxe2!. 184
Este golpe también sigue en la partida principal. La partida fuente Ulibin - Akopian tenía que haberse incluido en el "argumento principal" del libro, pero más tarde el encuentro de Makarichev le quitó el puesto, dado que allí las negras consiguieron realizar su proyecto al 100%. 14. 9 xe2, <í) h5; 15. 9 f2, !i' xf2+; 16. bl, xf2. Antes de seguir adelante, hay que advertir que en una posición similar (la casilla e8 estaba ocupada por la otra torre), Howell tomó en f2 con el rey, al no desear entregar la calidad. Por otra parte, aquí es peligroso tomarla, a 16 .... , ~ xd4, sigue 17. ~ c3!, y después de 17. ... , ~ xf2+; 18. ~ xf2, las blancas gracias a la ventaja de la pareja de alfiles tienen grandes oportunidades de victoria. · 16 ... , <í) f4; 17. ~ xf4, gf; 18. c6!, ~ e6!; 19. cb+, 'i/Ef b8; 20. 'i/Ef h1, ~ xd4; 21. bl, c2, ~ e3; 22. b4, 'i/Ef xb 7. Las negras por la calidad tienen peón y dos alfiles activos, lo que les permitió mantener la posición. 12.
f3, ...
Es interesante la partida J. Polgar - Gaprindashvili (Novi Sad, 1990), donde las blancas jugaron 12. 9 e1, y 12 . ... , <í) f6; 13. ~ d2, <í)e4!; 14. 9 e1, <í) f6, podía llevar a repetición de jugadas. Sin embargo Polgar rehusó las "tablas de grandes maestros", respondiendo 14. ~ a5!?.
Después de 14 .... , ~ b8; 15. f3, <í) f6, las blancas sobreestimaron sus posibilidades, jugando 16. g3?! (16. ~ d2, <í) g4; 17. fg, .llxe2; 18. ~ xe2, ~ xd4+; 19. ~ h1, ~ e5; 20. h3, ~ g3; 21. ~ g 1, llevaría a tab las forzadas). 16 .... , ~ h5; 17. a4?, Gaprindasvili llevó con energía la partida hasta el final. 17 .... , <í) g4!; 18. fg, ~ xg4; 19. <í) f4, ~ xd4+; 20. ~ g2, gf; 21. ~ xf4, ~ e5; 22. c6, ~ eS; 23. ~ b4, ~ d6!; 24. ~ b3, ~ xf4; 25. J'h f4, b!. e3; 26. ~ c2, ~ h3+; 27. ~ h1, b!. xg3; 28. cb, ~ xb7; 29. l b f7, b!. c8; 30 . ~ b5, d4+; 31. ~ c6, g c3!. Las blancas abandonaron. 12. 13.
... , <í) f6 ~ d2, ...
Después de 13. ~ e1, ~ xe1, las posibilidades de ambos bandos se igualaban.
13.
... , bl. xe2!
La idea de Akopian, realizada en esta partida, aún resulta más favorable para las negras. Es curioso que el asalto a la fortificación del rey blanco se presente por una línea accesoria, lo que no es característico en este tipo de variantes. 14.
~ xe2,
...
En caso de 14. ~ xe2, también surge una bella e interesante variante. La quintaesencia del plan negro es la eliminación del peón d4, pero no con la dama, sino con el alfil fianchettado: 14. . .. , <í) g4!!. Ahora después de 15. fg, el rey blanco sale disparado como una bala de su escondrijo al centro del tablero, donde encuentra la muerte: 15 .... , ~ xd4+; 16. ~ h1, ~ e5; 17. ~ f4 (17. g3, ~ xg3; 18. ~ g2, ~ xh2+; 19. ~ f3, bl. e8!; o 17. h3, ~ g3; 18. ~ g1, ~ h2+; 19. ~ f2, ~ d4+; 20. ~ f3, f5!), 17. . .. , ~ xf4; 18. bl. xf4, gf, 19. ~ xd5, bl. e8!, y la posición blanca es desesperada (Sherzer - Halasz, Budapest, 1990). Es correcta 15. ~ f4!, gf?; 16. fg, tapando la brecha, o 15 . ... , <í) xh2?; 16. ~ xh2, ~ xd4+; 17. ~ h1, ~ e5; 18. f4, ~ xf4; 19. g xf4, y las negras están mal. Sin embargo, es más fuerte 15 . ... , <í) f2!, con excelente juego en todas las variantes: 16. ~ xg5, <í)h3+!; 17. gh, ~ xg5+; 18. ~ h1, ! H4; o 16. g3, ~ h6; 17. 185
~ xf2, gf; 18. g4, 'í!!i' f6; o 16. ~ g3, 0J xd1; 17. ~ xh4, ~ xd4+; 18. ~ h1, 0Je3; 19. ~ xg5, ~ eS; 20. ~ xe3, bt xe3 (Makarichev).
14.
..., 0J h5!
Desde luego, no vale 14 .... , 'í!!i' xd4+, por 15. ~ e3. 15.
'í!!i' f2, ...
Las blancas tienen una única respuesta, después de 15. ~ e 1, 'í!!i'xd4+; 16. ~ f2, 0J f4!, ya están peor. 19. 15. 16.
..., 'í!!i' xf2+ ~ xf2, ...
Ulibin contra Akopian, como recordamos, tomó con torre, 16. Zl xf2 y a 16 .... , ~ xd4, respondió 17. ~ c3. Pero ahora las negras no tienen la torre en h8, y después de 16. Zl xf2, ~ xd4; 17. ~ c3, además de recuperar la calidad consiguieron tomar un peón, 17 .... , ~ xc5.
16. 17.
..., 0J f4! ~ xf4, gxf4
~ f1, ~ xb2!
El alfil permanece en la gran diagonal y no deja llegar a la torre a e5 (en caso de 19 . ... , .Q¡,xc5, le daba contrajuego a las blancas). Además es muy útil dejar al enemigo con peones aislados. 20.
bl. ab1, ...
Era más precisa 20. ~ ad1, y las negras sólo tendrían una mínima ventaja. 20.
... ,
~ d4
(Ver diagrama) En una posición bastante tranquila las blancas disponen de ventaja material y el turno en el juego, pero deben buscar las tablas, ya que no pueden impedir la pérdida de dos peones. 18. 186
-ª fe1, ~ xd4+
En caso de 20 .... , irrumpe en e5. 21 .
~ a3,
la torre
Zl e7?, ...
Después de 21. Zlbc1, ~ e3, seguido de c7-c6 y b7-b6 las negras creaban unos peones pasados y ligados "e" y "d", pero las
blancas tendrían posibilidades de salvación. Ahora su torre cae en una emboscada.
21.
..., 'ª f8!
El intento inmediato de atrapar a la torre podía volverse en contra de las negras: 21 .... , ~ e6?; 22. c6!, ~ c5? (mejor 22 .... , ~ b6), 23. 'ª xb7, ~ xe7; 24. ~ a6, ganando. Makarichev defiende el peón f7 y no deja el control de la casilla c6.
22.
.í%i. xh7, ...
Ahora la torre, definitivamente, perece en el cautiverio, pero su devolución proporciona la caí da del peón c5, y las negras reciben no dos, sino tres peones pasados. Razonablemente, el peón pasado blanco "h" no puede compensar esta pérdida.
22.
...,
~ e6
23.
lle 1,
~ e3!
Previniendo la doble captura en e6.
24.
g4, 'ª h8!
Es oportuno tomar primero en el punto de mira al peón "h".
25. 26.
~ f5, ~ d8
'ª xe6, ...
En caso de 26. ~ xe6, las negras mediante 26 .... , ~ xe7; 27. ~ xd5, 'ª xh2; 28. 'ªe2, 'ª xe2; 29. ~ xe2, c6; 30. ~ c4, ~ xc5, forzaban el cambio de torres con una fácil victoria en el final de alfiles. Algo parecido ocurre en la partida.
26. 27. 28.
..., fxe6 'ªxh2 'ªd1, Zl h1+ ~ xe6,
Las blancas abandonaron.
187
Partida 30 G. Kasparov -A. Karpov Match por el campeonato mundial, 1Oª partida Nueva York, 1990 Esta partida es la última en mi discusión particular con Kasparov sobre la defensa rusa. Con ella también termino el examen de esta apertura abierta. 1. 2. 3.
e4, e5 0l f3, 0l f6 d4, ...
Hasta ahora nuestros encuentros empezaban con la captura 3. 0l xe5. En esta ocasión Kasparov cambia la dirección del juego, pero no me pilla de sorpresa.
En otros tiempos fueron muy populares las jugadas 5. ~ e2, 5. ~ d3 y 5. ~ b5, aunque finalmente se estableció que la centralización de la dama era la continuación más peligrosa para las negras.
5.
... , d5
6. 7.
exd6, 0l xd6 0lc3, ...
También están muy investigadas 7. ~ g5 y 7. ~ d3.
7.
3.
La teoría da preferencia a la captura 3.... , 0l xe4. En la partida precedente la hemos examinado con detalle. La elección de la jugada 3. ... , ed, se debe a que preparé especialmente para el match una interesante novedad teórica. Y aunque la partida no resulta muy atractiva, su valor teórico es indudable.
4. 5. 188
... , 0l c6
... , exd4
e5, 0le4 ~ xd4, ...
Hace treinta años que se desechó el ataque del alfil 7.... , ~ f5; 8. ~ e5+, ~ e7; 9. 0ld5, ~ xe5+; 1O. 0l xe5, f6; 11. 0lf3, '11il d7; 12. ~ f4, con clara ventaja blanca (Bronstein - Borisenko, campeonato de la URSS, 1961 ). 8.
~ f4,
...
(Ver diagrama) Una posición conocida, en la que se han probado muchas continua-
cienes: 8 .... , ~ e7+, 8 .... , ~ e7, 8. ... , g6, 8 .... , ~ f5. Todas ellas han sido investigadas por la teoría de cabo a rabo, y se ha establecido que las blancas reciben una ventaja sensible. Limitémonos a un solo ejemplo interesante, que ilustra la última de las posibilidades indicadas. Klovans - Harman (campeonato de Europa por correspondencia, 1983-1987): 8 . ... , ~ f5; 9. ~ b5. Este ataque de alfil da ventaja a las blancas también en caso de 8. ... , g6. 9 . ... , ~ e7+. La defensa 9 .... , ~ e7; 10. ~ xc6+, be; 11. ~ e5, 0-0; 12. ~ xc6, ~ eS; 13. ~ xe7 +, ~ xe7+; 14. ~ e3, ~ xc2; 15. :Qc1, ~ d3; 16. ~ d5, ~ d8; 17. ~ d4!, llevó a ventaja blanca en la partida Sax - Yusupov (Rotterdam, 1988). 1 O. ~ f 1. La variante teórica forzada 1O. ~ e3, ~ xb5; 11. ~ xb5, ~ b4+; 12. ~ xb4, ~ xb4+; 13. c3, ~ d6; 14. ~ xd6+, cd; 15. 0-0-0,
~ e6; 16. bl xd6, ~ xa2, da a las blancas mejores posibilidades, pero la simplificación es muy grande, lo que no agrada a todo el mundo. 1 O. ... , ~ e4; 11 . ~ xc6+. Se juega con frecuencia 11. ~ a4, 0-0-0; 12. ~ e3, f6; 13. ~ xe4, ~ xe4; 14 . .G, d1, y las blancas están mejor (recomendación de P. Keres). 11 . ... , ~ xc6; 12. ~ e5, 0-0-0. Las negras se ven forzadas a llevar al rey al debilitado flanco de dama. Otras continuaciones no les ofrecen nada mejor: 12 .... , ~ b5+; 13. ~ xb5, ~ xb5; 14. ~ xf7, ~ xf7; 15. ~ e5+; o 12 .... , ~ e6; 13. ~ xc6, be; 14. ~ f3, ~ d7; 15. ~ a4. 13. ~ xc6, be; 14. ~ a4, ~ b5; 15. ~ a6+, ~ b8; 16. ~ e3, m b4. Es mala 16.... , ~ d4; 17. :Qd1, m e5 (17 .... , c5; 18. ~ b5), 18. ~ xd4,
:Q xd4; 19. bi e1. 17. m xc6, ~ d4. Esta posición se consideraba antes como satisfactoria para las negras. En efecto, después de 18. ~ xd4?, bl, xd4, o 18. ~ e4, ~ c5 (con la amenaza bl,he8), 19. a3, ~ c4+; 20 . @d3, @xd3+; 21. cd, ~ c2, su iniciativa puede llegar a ser peligrosa. 18.
@a6, ...
(Ver diagrama) Klovans descubrió una continuación que cambia de raíz la valoración de la posición. Aquí las negras adivinan el astuto proyecto 189
del adversario: 18. ..., g d6; 19. !!id3!, y es mala 19 .... , <í)b3, por 20. ~ xa7 +, y después de 19 .... , :le7; 20. a3, no tienen compensación por el peón. 18 . ... , !l eS; 10. a3, !!ib7; 20. !!i xb7+, ~ xb7; 21. g c1. Así, la apertura ha terminado a favor de las blancas, que sencillamente tienen un peón de más. Si bien es cierto que en su realización invirtieron cinco(!) años, claro que la partida se jugaba por correspondencia ... ¿Por qué elegí una variante que daba a las negras serios problemas (en cualquiera de los cuatro métodos de juego que eligiera en la octava jugada)? ¡Resulta que disponen de un quinto procedimiento, ideado por l. Zaitsev!
que paradójica bajo los patrones formales, que hasta ahora no se le había ocurrido a nadie. A simple vista se ve que es lógica. Y que es paradójica ... Ya hace tiempo que se sabe que perder tiempo con las maniobras de una pieza, especialmente en las aperturas abiertas, no suele salir bien. Y con sólo ocho jugadas efectuadas el caballo negro ha gastado cuatro, y parece inverosímil que esto sea inofensivo para ellas. 9.
Después de 9. <í)b5, ~ b4+; 1O. c3, !la5; 11. g4, 'Z) fe7, las negras tienen todo en orden. 9.
8.
..., 'Z) fS!
1 O.
(Ver diagrama) Una jugada bastante lógica, aun190
!lbS, ...
..., ~ d6 !!i e4+, 'f! e7
(Ver diagrama) 11.
~ gS,
...
posición blanca sería preferible. A propósito, después de 14. g4 (en lugar de 14. b'1 he1), 14 .... , a6; 15. ~ c4, ~ d6; 16. ~ xd6+, ~ xd6; 17. b'1 de1+, se llegaba a la posición final de la partida comentada con una sola diferencia, que el peón negro "f" permanece en su posición inicial. Después de 17 .... , ~ e7, o 17 .... , ~ e7, es posible la jugada 18. ~ e5, y las blancas mantienen cierta iniciativa. 11. Las blancas no deben apresurarse con el cambio 11. ~ xc6+: en ese caso después del cambio en e4 no amenazan ~ xd6+. Después de 11. 0-0, 0-0 ( 11 .... , ~ d7; 12. ~ xc6, be, también es agradable para las negras), 12. ~ xc6, be; 13. S' xc6, las negras juegan 13. ..., b'1 b8, obteniendo buena compensación por el peón. No ofrece nada especial a las blancas 12. S' xe7, ~ fxe7 ( ~ cxe7); 13. ~ e4, ~ b4. En la partida siguió 11. ~ g5, f6; 12. ~ d2, y la situación del peón en f6 es favorable a las negras. Por eso era mejor directamente 11. ~ d2, y después 11 .... , ~ d7; 12. 0-0-0, S' xe4; 13. ~ xe4, J:i.e7; 14 . b'1 he 1, 0-0-0. Ahora 15. ~ eg5?!, b'1 df8!; 16. g4, J:J. xg5; 17. ~ xg5, ~ d6; 18. ~ xc6, ~ xc6; 19. ~ d4 (19. ~ e5, f6; 20. ~ xc6, fg, con ventaja), 19 .... , ~ d7; 20. ~ e7, b'1 e8; 21. J:J. xd6, cd; 22. f3, como mucho llevaba a tablas, pero después de 15. ~ c4!?, la
... , f6
Desde luego, no vale 11 .... , S' xe4+; 12. ~ xe4, ~ e7; 13. ~ xc6+, be; 14. ~ xe7, y 15.0-0-0, y es dudoso que se pueda salvar este final. 12. 13.
~ d2, J:i. d7 0-0-0, S' xe4!
Jugada única. Son malas 13. 0-0-0, por 14. ~ xc6, y 13 .... , 0-0, por 14. S' xe7, ~ fxe7 (14. ~ xe7; 15. ~ f4!), 15. ~ e4. 14.
~ xe4, ~ e7
¡Casillas conjugadas! Con el caballo en c3 el alfil tiene su lugar en d6, y con el caballo en e4 el alfil debe desarrollarse por e7. Es peor 14 .... , 0-0-0; 15. g4, ~ fe7; 16. ~ xd6+, cd; 17. g5, ~ g4; 18. ~ e2.
15.
g4, ...
El último intento para luchar por 191
la ventaja, en caso de 15. ~ f4, 0-0-0; 16. g4, parece buena 16 . ... , g5. 15.
..., a6?
Era más sólido retirar enseguida el caballo, 15 .... , 0id6 (no es tan clara 15 .... , 0ih6; 16. 0i xf6+, gf; 17. ~ xh6, ~ xg4; 18. ~ d3), 16. 0ixd6+, ~ xd6; 17. ~ de1+ (17 . .1lhe1+, ~ f8!), 17 .... , ~ f8; 18. b!.hg1, b!. e8; 19. Zl xe8+, ~ xe8, con plena igualdad. 16.
~ c4?,
...
ciativa, pues amenazan con 0if3d4-e6.
(Ver diagrama) A su vez, Kasparov no juega aquí de la mejor manera. Después de 16. ~ a4, b5; 17. ~ b3 (17. gf, ba; 18. 0ig3, 0-0-0), 17 .... , 0i fd4, las negras tampoco tienen problemas. Sin embargo, continuando 16. ~ xc6, ~ xc6; 17. ~ he1, ~ xe4 (17 .... , 0id6?; 18. 0ixd6+, cd; 19. 0id4), 18. ~ xe4, 0id6; 19. ~ e2, las blancas conservaban cierta ini-
192
16. 17. 18.
..., 0i d6 0i xd6+, ~ xd6 ~ de1+
Aquí Kasparov, sin esperar a la respuesta evidente (18 .... ,0ie7, o 18 .... , ~ e7), propuso tablas, que yo acepté. Así, ¡nuestra discusión sobre la defensa rusa continuará en futuros encuentros!
Apertura escocesa
Partida 31 J. Timman - A. Karpov Londres, 1984 Mis enfrentamientos con el gran maestro holandés adquieren, con frecuencia, tintes de discusión teórica; en esta ocasión Timman decidió sorprenderme desde el principio, eligiendo esta rara apertura. 1. 2. 3. 4.
e4, eS <í) f3, <í) c6 d4, exd4 <í) xd4, <í) f6
Aquí tiene el mismo valor la continuación 4.... , ~ c5. Después la teoría considera 5. ~ e3, 5. <í)b3 y 5. <í)xc6, aunque ninguna de estas continuaciones promete a las blancas grandes conquistas. Es interesante la jugada 5. <í)f5!?, que le gusta hacer a Timman. Esta es una de sus partidas más interesantes con ese tema. Timman - Smyslov (Bugojno, 1984): 5. 'i) fS, g6. En una partida posterior (Holanda, 1985), Borm jugó aquí 5. ... , d6; ya Steinitz recomendó el sa crificio del peón g7, indicando esta variante: 5. ... , d5; 6. <í)xg7 +, ~ f8; 7. <í)h5, ~ h4; 8. <í)g3, <í)f6; 9. ~ e2, <í)e5; 1O. h3, bl. g8, con mejor juego para las negras. Si bien es
cierto que en nuestros dí as no se realiza la maniobra d7-d5, temiendo , por lo visto, cualquier chasco ... Después de 5.... , d6; 6. <í) xg7+ (se podía eludir el riesgo retiran do el caballo a e3 o g3), 6 .... , ~ f8; 7. <í)h5, ~ h4; 8. <í)g3, <í) f6; 9. ~ e2, 0ie5, se llegó a la posición recomendada por Steinitz. La única diferencia es que el peón no está en d5, sino en d6. Pero en ambos casos las negras tienen sus triunfos. 1O. b4. Es curioso que en ese mismo año en su partida con Handoko (Zagrev, Rijeka, 1985), Timman jugó la apertura escocesa con negras, y aquí después de 1O. f3, <í)eg4 (es mejor 1O. ... , bl. g8), 11. fg, <í)xe4; 12. ~ d5!, f5; 13. bl. f 1, <í)f6; 14. bl. xf5, las blancas consiguieron ventaja. 1O.... , ~ xb4+; 11. c3, ~ c5; 12. ~ a3, <í)xe4; 13. ~ xc5, <í)xc5. La posición negra es agradable, pero la partida terminó en tablas tras un profundo final. 6. <í)e3, <í) f6; 7. <í)c3, 0-0; 8. ~ d3, bl. e8; 9. 0-0, <;) eS; 10. ~ h 1, d6; 11. ~ e2, <í)c6; 12. f3, 0i d4. Es más prudente 12.... , a6. En el mismo torneo de Bugojno el 195
encuentro Timman - Gligoric terminó rápidamente: 12 .... , a6; 13. ~ d2, 0J d4; 14. ~ d3, c6; 15. f4, 0Jb5. Tablas. 13. ~ c4, aS? (era más sólida 13. ... , ~ e6).
bS; 28. ab, ab; 29. ~ g2!, ba; 30. 'f! d4!, ~ xb3; 31. 'f! xf6, a3; 32. m d4, eS; 33. m xd6, Zl c8; 34. m d2, ~ e6; 3S. f4, h6; 36. g4!, ~ xg4; 37. fS!, b% e8; 38. m xh6, gf; 39. h3. Las negras abandonaron. S.
0J xc6, ...
Otro desarrollo, ya conocido en el siglo pasado, 5. 0Jc3, ~ b4; 6. 0J xc6, be; 7. ~ d3, d5; 8. ed, cd; 9. 0-0, 0-0; 1O. ~ g5, hoy en dí a se considera inofensivo para el negro. 5. 6.
14. 0Jg4!. Con esta maniobra inesperada las blancas se apoderan de la iniciativa. Resulta que el alfil enemigo de casillas negras no está en su sitio. Otra cosa sería si en la posición del diagrama estuviera en g7 ... 14 . ... , ~ e6. Abrir la columna "f" favorece a las blancas: 14. ..., 0Jxg4; 15. fg, ~ e6; 16. 0Jd5. 1S. ~ gS. Las casillas negras del campo del excampeón "hacen agua", y está forzado a quedarse sin dama. 1S. ..., 0J xg4; 16. ~ xd8, 0J e3; 17. ~ c1, ~ xc4; 18. ~ xe3, 0J xc2; 19. ~ d2, 0J xa1; 20. ~ f6!, ,g e6; 21. ~ xa1, ,g xf6; 22. b3, ~ e6; 23. 0J a4!, ~ a3; 24. ~ c3, ,g f4; 2S. g3, ~ b4; 26. ~ d3, Zl f6; 27. a3, 196
..., bxc6 eS, m e7
Korchnoi continuó con Timman 6 . ... , 0J e4 (Sarajevo, 1984) y aquí las blancas hicieron la novedad 7. ~ e3 (antes se jugaba 7. ~ f3). Si bien es cierto que después de 7. ... , d5; 8. ed, cd; 9. ~ d3, 0J f6; 10.0-0, ~ e7; 11. c4, 0-0; 12. 0J c3, ~ e6; 13. bl. e1, dS; 14. cd, 0J xd5; 1S. 0J xdS, ~ xd5, el juego se equilibró. 7. 8.
m e2, 0J dS c4, ...
(Ver diagrama) La jugada 8. h4, con el objetivo de poner en juego la torre por la casilla h3, la empleó Van der Wiel. En los comentarios a sus partidas el gran maestro holandés reconoce que la maniobra del peón del
.i.
.l
W.i.
.l.l'i'.l.l.l .l • Ji
~iiiiii Wl~ oi extremo la preparó para un encuentro conmigo, sin embargo consiguió introducir la novedad en una partida con Var den Sterren (Budel, 1987). Su adversario respondió 8 . ... , d6, y después de 9. c4, 0l b6; 10. ed, cd; 11. ~ g5, ~ e2+; 12. ~ xe2, ~ e6; 13. 0l d2, h6; 14. ~ f4, ~ e7; 15. 0-0, 0-0; 16. bl ac1, bl fd8; 17. 0l f3, las blancas consiguieron una gran ventaja. Se considera más principal la continuación elegida por Timman (en este caso luchó con negras contra su apertura predilecta), 8. ... , f6. La partida continuó así: 9. c4, ~ a6; 1 O. Zih3!?, fe; 11. bl a3, 0lb4; 12. 0lc3, !f xh4!; 13. g3, ~ d4, y las negras consiguieron buenas posibilidades. 8.
..., ~ a6
En el 16 2 encuentro de mi último match con Kasparov preferí 8 .... , 0lb6. Esta jugada tampoco es
mala, pero en ese caso las cosas no se desarrollaron de la mejor manera (hablaremos detalladamente sobre este tema en los comentarios a la última partida del libro) . 9.
'!!l'f e4, ...
Esta jugada se puede considerar como expectante, después de 9. ... , 0l f6; 1O. '!!l'f e2, 0l d5, las blancas deben o conformarse con tablas o "cambiar de disco" ... La continuación 9. b3, se examinará en la siguiente partida. Un año después de la partida comentada , al encontrarse de nuevo conmigo, Timman empleó otro procedimiento. La partida merece atención. Timman - Karpov (Amsterdam, 1985): 9. 0l d2, 0-0-0; 10. '!!l'f e4, 0lb6; 11. a4?!, d5!. La expectan te 11 .... , ~ b 7, en la partida Handoko- Kovacevic (Zagrev, 1985) después de 12. a5, 0lc8; 13. b4!, ~ b8; 14. ~ e2, f6; 15. f4, fe; 16. fe, .G,e8; 17. 0lf3, !fe6; 18. c5, ~ xe2; 19. !fxe2, bl d6; 20. blb 1, de; 21. ~ a6, !fg6; 22 . .G,b2, ~ e7; 23. 0-0, .Q, hf8; 24. 0lxe5, bl xf 1+; 25. !f xf1, !fe6; 26. ~ f4, las blancas consiguieron una clara ventaja. Ahora ya no hay tiempo para expulsar al caballo b6, y la marcha del peón "a" se deprecia en grado sumo. 12. cd, ~ xf 1; 13. d6, .G, xd6!; 14. 0l xf 1. La torre es intocable: 14. ed, ~ xe4+; 15. 0lxe4, ~ xg2, y otra captura diferente del ca 197
bailo no es mejor: 14. ~ xf 1, bl. d5; o 14. bl xf1, bl. d5, preparando f7f6. 14 . ... , bl. e6!
bias por un descuido en mis apuros de tiempo. 9.
1 o.
..., 0i b6 0i d2, ...
En aquél tiempo esto resultó una novedad, en los manuales de aperturas sólo se indicaba 1O. 0J c3, con igualdad.
Al peón "e" hay que atacarlo de frente, en caso de 14 .... , bl. d5; 15. f4, g5, las blancas disponen del importante tiempo 16. 0ie3. 15. f4, g5; 16. g3, ~ b4+; 17. ~ xb4, ~ xb4+; 18. ~ d2, ~ xd2+; 19. 0i xd2, gf; 20. gf, 0i d5; 21. 0-0, b!. g8+; 22. ~ h1, bl. g4; 23. 0ib3. Después de la partida, Timman indicó que era mejor 23. 0ic4, pero aquí 23 .... , f6; 24. f5, bl. e8; 25.b3, fe;26. f6, e4;27.f7, bl. f8; 28. 0ie5, Zl g5; 29. 0i xc6, ~ d7, mantenía una clara ventaja para las negras. 23 . ... , 0i xf4; 24. bl. ae1, bl. eg6; 25. bl. f3, h5; 26. 0i d4, 0i d5; 27. bl. d1, bl. e4; 28. 0i b3, Zl e2; 29. bl g1, bl. xe5. La ventaja negra es indudable, si bien es cierto que Timman supo conseguir las ta198
1 o.
11.
... ,
0-0-0 c5, ...
Las blancas abren el juego, suponiendo que el rey enemigo no se encuentra muy cómodo, sin embargo se advierte que su propio rey no está mejor. Más tarde, en la partida que antes mencioné, en la ciudad de Amsterdam, el gran maestro holandés avanzó otro peón, 11. a4, pero, como ya vimos, el contragolpe d7-d5! le dio buen juego a las negras.
11. 12. 13.
... , ~ xf1 cxb6, ~ a6 bxa7, ...
A 21. ~ c2, es buena tanto 21 .... , c5, como 21 .... , g xe5+; 22. ~ xe5, e xe5+; 23. ~ f2 (23. ~ d1, ~ h5+), 23 .... , ~ d6.
La iniciativa ya está del lado negro, pero tal vez era mejor mover otro peón, 13. be!?. 13. 14. 15.
... , ~ b7 0lb3, f6! f4, ...
En caso de 15. ~ d2, a ventaja negra lleva 15 .... , e xe5; 16. ~ xe5, fe; 17. 0-0-0, d5, y si 18. 0la5+, entonces 18 . ... , ~ b6; 19. b4, ~ b5!. 15. ... , fxe5 16. fxe5, g e8! 17. ~ f4, ~ h4+!
g3, ~ h5 bt c1, ~ a8 h4, d5!
Keene recomendó 20 .... , ~ d6?!; 21. lk 5, ~ xe5; 22. ~ xe5 (22. g xe5, g xe5; 23. ~ xe5, .lle8), 22. ..., d5; 23. g4, g xe5; 24. gh, Zlxe4+; 25. ~ d1. Aquí la posición de las negras es preferible, pero el golpe central es bastante más enérgico. 21.
~ e3,
...
... , g5!
24.
... , g xe5!
~ xg5, ~ b4+ ~ f2, g hf8+ ~ g2, ...
,~
i,
Bastante más fuerte que el otro jaque de dama, 17 ...., ~ b4+; 18. ~ xb4, ~ xb4+; 19. ~ d1, Zlhf8, y las negras sólo están un poco mejor. 18. 19. 20.
21. 22. 23. 24.
Cuando sacrifiqué la torre, mi adversario se quedó algo sorprendido, por lo visto pensaba que lo peor para las blancas ya había pasado. 25 . 26.
~ xe5, ~ f3+ ~ h2, ~ f2+
Las blancas abandonaron. Después de 27. ~ h3, resalta la picar dí a del rey negro, al ceder el paso a su alfil en la jugada 19: 27. ... , ~ C8+; 28. g4, g f3+.
~~~
199
Partida 32 G. Kasparov - A. Karpov Match por el campeonato mundial, 14ª partida Lyon 1990
1. 2. 3.
e4, eS <í) f3, <í) c6 d4, ...
Reconozco que la elección por parte de mi adversario de la apertura escocesa en el encuentro por la corona, fue, para mí, inesperada, aunque, desde luego, en principio yo tenía los conocimientos suficientes para neutralizar la iniciativa de las blancas en esta apertura. Por regla general, consigo resolver con éxito estos problemas sobre el tablero. Es suficiente recordar mis dos encuentros con Timman (ver Partida 31). Pero aquí tenía claro que el campeón mundial tenía preparada una sorpresa. 3. 4. 5. 6. 7.
... , exd4 0J xd4, <í) f6 <í) xc6, bxc6 e5, f!!J e7 'f!!l e2, <í) d5
8.
c4,
cierto que desarrollé la apertura sin precisión, y el blanco consiguió mejor juego. La partida fue muy larga, pero para hacernos un cuadro completo ofrezco la parte principal, incluyendo comentarios breves. Kasparov - Karpov (L yon, 1990, 16ª partida del match), 8. ..., <í) b6; 9. 0J d2, f!!J e6. Son posibles 9 .... , ~ b7, y 9 .... ~ d5, pero elegí la continuación principal, aunque comprendí a que mi adversario se había preparado a fondo para esta jugada. 1 O. b3, aS. Una novedad, aunque no muy afortunada, antes se encontraba aquí 1O. ..., ~ e 7; 11. ~ b2, 0-0; 12. f!!J e4, d5, con igualdad. 11. ~ b2, ~ b4?!. Aunque después de 11 .... , a4; 12. f!!J e3, la posición blanca es preferible, debí ir por ese camino. 12. a3, ~ xd2+; 13. f!!J xd2, d5?!.
~ a6
(Ver diagrama) En la siguiente partida par del match en lugar del alfil preferí retirar el caballo a b6, si bien es 200
Un error estratégico, debí elegir la variante 13 .... , a4; 14. c5, <í)d5;
~
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15. b4, 0-0. Sin embargo traté de conseguir a toda costa una posición activa con contrajuego. 14. cd, cd. Por desgracia, no es mejor 14 .... , S' xd5; 15. S' xd5, cd; 16. b'k 1, o 14 ...., 0J xd5; 15. ~ c4. 15. 'tJ c1, 0-0. El sacrificio de peón es prácticamente obligado. A 15 .... , '!J a7, es muy fuerte la indicación de Kasparov 16. a4, y 15 .... , a4; 16. /j xc7, fuerza a las negras a efectuar el enroque, desde luego 16 . ... , ab; 17. ~ b5+, ~ d7; 18. S'b4, lleva a las negras a una posición desesperada. 16. bl xc7, S'g6. Un intento de aprovechar la ventaja de desarrollo para crear contrajuego (razonablemente tras otra continuación las negras no tienen suficiente compensación por el peón). Tomé esta decisión ya que, como es evidente, 16 ...., d4; 17. S' xd4, S' xb3; 18. ~ e2 (preparando la ruptura e5-e6), 18 .... , ~ e6; 19. ~ d1, S'b5; 20. a4, S'b4+; 21. ~ c3, S' xd4; 22. ~ xd4, 0J d5; 23.
'!Jc5, sencillamente dejaba a las negras en un final sin peón. 17. f3, ~ f5; 18. g4!, ~ b1; 19 . ~ b5!, '[j ac8; 20. '!J xc8, bl xc8; 21. 0-0, h5; 22. h3?!. En las cinco últimas jugadas las blancas han progresado en el desarrollo de su juego y ahora podían reforzar su ventaja con la maniobra 22. S' d4!, hg; 23. 'f! xg4, ~ f5; 24. 'f! xg6, fg; 25. blc1, recibiendo un final técnicamente ganado. La jugada hecha por Kasparov debilita algo su flanco de rey. 22. ... , hg; 23. hg, ~ c2; 24. 'í! d4, S'e6; 25. '[j f2, .!l c7!.
_ji ji ,~¡ -'. ·
Era irreflexiva 25 .... , ~ xb3; 26. y debido a que es imprescindible jugar 26 .... , g6, la posición negra resulta, de nuevo, crítica. Al menos ahora las negras se ajustan a una defensa sistemática. 26. '!Jh2, 0J d7!; 27. b4, ab; 28. ab, 0J f8; 29. ~ f 1, ~ b3!; 30. ~ d3!, ~ c4; 31. ~ f5, S' e7; 32. ~ d3,
201
~ d2, ~ b 1?.
Zl c6; 33. ~ d4, .Q a6; 34. Después de 34. ~ c3!, las blancas mantenían una sólida ventaja. Ahora la situación se complica. 34 .... , ll a3; 35 . .llh3, llb3; 36. ~ c2, ~ xb4; 37. ~ f2, 0l g6? (un error en el Zeitnot). La jugada de bloqueo 37 .... , 0le6! (no confundiéndose con amenazas ilusorias del tipo 38. ~ h4, ~ f8!), 38. ~ xb3, ~ xb3, permití a a las negras resistir con éxito. 38. e6!. Era más floja 38. ~ xb3, por la fuerte jugada intermedia 38 .... , 0l f4!, indicada por l. Zaitsev (38 . ..., ~ xb3; 39. ~ e3, da a las blancas buenas oportunidades de victoria). Ahora no es peligroso para las negras 39. llh8+, ~ xh8; 40. ~ h2+, ~ g8; 41. ~ xc4, debido a 41. ... , 0le6!, y tras otras retiradas de la torre, las negras disponen de suficiente contra juego. 38 .... , Zl b1+; 39. ~ xb1?. Devuelve el error. l. Zaitsev propone 39. ~ h2, lle1; 40. ef+, ~ xf7; 41. ~ xg6+, ~ xg6; 42. ~ c2+, ~ f7; 43. ~ f5+, f/!l e7; 44. ~ g5+! (la espectacular 44. ~ f6+?!, gf; 45 . .llh7+, f/!l d6; 46. 9 xf6+, f/!lc5; 47. ~ f8+, f/!lb5; 48. llb7+, falla el tiro después de 44 .... , f/!l d6!), 44. ... , f/!l d7; 45. llh7, 9 b8+ (45 .... , lle2+; 46. f/!lh3, y 45 .... , Zlh 1+; 46. ~ xh1, ~ b1+; 47. f/!l g2, 9 xh7; 48. ~ xg7, lleva a una posición difícil), 46. f/!l g2, lle2+; 47. ~ f2, y las negras tienen una difícil defensa. 39 .... , 9 xb1+; 40. ~ h2, fe; 41. 9 b2!. La jugada secreta, bastante fuerte. Tras el análisis 202
casero vi que el camino de las blancas hacia la victoria estaba lleno de espinas, pero para conseguir las tablas, las negras también tenían que actuar con una precisión extraordinaria. 41. . .. , 9 xb2+; 42. ~ xb2, 0l f4!?. Ya entonces no estaba muy convencido de este plan. Probablemente, 42. ... , e5; 43. .llh5, d4; 44. f/!l g3, f/!l f7, fuera un procedimiento de defensa más prometedor. 43. llh4, 0ld3; 44. ~ c3. En el análisis casero consideré más fuerte 44. ~ a3!?. A juzgar por sus comentarios, Kasparov tenía la misma opinión. Ahora las negras consiguen posibilidades adicionales. 44. ... , e5; 45. f/!l g3, d4; 46. ~ d2, ~ d5; 47. llh5, f/!l f7; 48. ~ a5, f/!l e6; 49 . llh8, 0lb2; 50. lle8+, f/!l d6; 51. ~ b4+, f/!l c6; 52. ll c8+, f/!l d7; 53. bl. c5, f/!l e6; 54. 'tJ c7, g6?. Era correcta 54 .... , 0lc4!; 55. ll xg7, d3; 56. bl g6+, ~ f7; 57. Zla6, d2, con suficiente juego para igualar, debido al lejano peón pasado. 55. ll e7+, ~ f6; 56. 'fJ d7, ~ a2; 57. lla7, ~ c4; 58. ~ a5, ~ d3?!. Quizás sea el error decisivo. Era correcto el sistema de defensa con el caballo situado en d3. 59. f4, ef+; 60. ~ xf4, ~ c2; 61. ll a6+, f/!l f1; 62. ~ e5. (Ver diagrama) Aquí pongo punto final, aunque la partida continuó 40 jugadas más.
~Jffi~, t{g~ La posición negra no tiene salida, independientemente de que los peones "g" permanezcan en el tablero o se cambien. Si bien es cierto que el juego posterior exige a las blancas grandes esfuerzos y mayor precisión, técnicamente tienen el final ganado. 9.
b3,
Se juega con frecuencia 9. ~ e4, 1O. ~ e2, probando las intenciones del adversario: después de 1O. ... , ~ d5, las blancas pueden forzar las tablas, pero también pueden rechazar la repetición de jugadas. Si bien es cierto que si las negras se muestran combativas, ellas mismas pueden rechazar la repetición, jugando 9.... , ~ b6, como hice yo en el encuentro de Londres con Timman. ~ f6;
9.
... , 0-0-0
Un año después del match (Tilburg, 1991), en una partida con Kasparov desarrollamos, de nuevo, esta variante, y allí empleé una novedad, 9 .... , g6, pero después fui por un camino inseguro, y perdí la partida. Por último, en el Torneo de Linares de 1992, volví a jugarla contra Gelfand y después de 9. ... , g6; 1O. f4, ~ b4+; 11. ~ d2, ~ b6; 12. ~ c3, ~ b4; 13. ~ f3, ~ xc3; 14. ~ xc3, ~ b7; 15. 0-0 -0, c5; 16. ~ e3, ~ xc3; 17. ~ xc3, 0-0-0; 18. h4, -ªheS; 19. -ªh3, d6; 20. blhd3, de5; 21. ~ xe5, ~ c6; 22. -ª xd8+, -ªxd8; 23. l:l. xd8+, ~ xd8; 24. ~ d2 y se acordaron tablas. 1 o.
g3!, ...
Esta novedad la preparó Kasparov especialmente para el match. No se justifica la extravagante 1 O. ~ b2?!, ~ b6; 11. ~ e2, bt e8; 12. ~ f4, g5!?; 13. ~ g3, ~ g7; 203
14.
~ c3,
f5; 15. f4, gf; 16. 17. ~ xe5, ~ xe5; 18. 0-0 (18. 0-0-0, d5!), 18 .... , ~ d4+; 19. ~ h1, ~ xe2!; 20. ~ xe2, ~ xc3, y las negras consiguieron la victoria (Ljubojevic Seirawan, Wijk aan Zee, 1986). Después de la jugada conocida 1 O. ~ b2, las negras deben actuar con mucho cuidado, ya que en la partida Hort - Unzicker (Bundesliga, 1983), después de 1 O. ... , ~ g5?!; 11. ~ d2, f6; 12. h4!, ~ h6; 13. 0-0-0, ~ eS; 14. ~ f3, ~ f4; 15. ef, gf; 16. g3, ~ e6; 17. ~ xf6, las blancas obtuvieron ventaja material. Es más precisa 11 . ... , ~ f4; 12. ~ e3, ~ xg2+; 13. ~ xg2, ~ xg2; 14. 0-0-0, c5!, con juego complejo. Hay que decir que uno de los primeros que prestó atención a este interesante juego de piezas, encubierto en este tipo de posiciones, fue el talentoso gran maestro soviético A. Lutikov. ~ xf4, ~ xe5;
1 O.
12.
204
12. 13.
... , fxe5 0-0, h5!
... , bi eS
Es imprescindible apresurarse en crear contrajuego, pues a la jugada inocua 1O.... , g5, sigue con mayor efecto 11. ~ a3!, ~ xa3; 12. ~ xa3, ~ b4+; 13. ~ d2 (es mala 13. ~ d1?, ~ c3+; 14. ~ c2, ~ xe2, y las blancas se quedan sin pieza), 13 .... , ~ xd2+; 14. ~ xd2, y las negras tienen un final claramente peor.
11.
Desde luego, las blancas no pueden jugar 12. ~ d2, ~ b6; 13. c5, ~ xf1; 14. cb, ~ g2; 15. ba, ~ b7; 16. bl g1, ~ f3, o 13. f4, fe; 14. fe, ~ f6!; 15. ~ a5, ~ d6; 16. ~ xa6+, ~ b8, y las cosas no les van bien. En cambio sacrificando el peón, consiguen una posición con muchas perspectivas.
~ b2, f6 ~ g2!?, ...
Durante la partida (y también ahora), me pareció que esta es la única posibilidad para obtener contrajuego en el flanco de rey y oponerse al inevitable asalto del enemigo en el de dama. 14.
~ d2,
...
Se producía una situación bastante tensa después de 14. ~ d2, h4; 15. ~ fe1, hg; 16. hg, ~ g5. Tras 17. ~ f3, ~ h5; 18. ~ h4, ~ xe2; 19. ~ xe2, d6; 20. ~ g6,
bl.h6; 21. 0l xf8, bl. xf8; 22. g ae1, 0le7; 23. f4, 0lf5; 24. fe, 0lxg3; 25. bl. f2, bl. xf2; 26. ~ xf2, 0lf5; 27. e6, 0le7; 28. ~ xg7, bl. g6, o 25 ...., bl. fh8; 26. bl. e3, bl. g6; 27. e6, bl.h 1+!; 28. ~ xh 1, 0l f5+; 29. bl. g2, bl. xg2+; 30. ~ xg2, 0l xe3; 31. ~ xc6, ~ d8; 32. ~ xg7, ~ e7; 33. ~ d4, 0l xc4; 34. be, ~ xc4; 35. a3, a6, el final, a pesar de ser bastante atractivo para las blancas, debía terminar en tablas (toda esta larga variante fue indicada por l. Zaitsev). 14. 15. 16.
... , 0l f6 ~ aS, ~ b7 ~ a3!, ...
Desde luego, las blancas podían tomar el peón, 16. ~ xa7?, pero después de 16 .... , ~ c5; 17. ~ xc5 (o 17. ~ a4, h4!; 18. ~ a3, ~ d4), 17 .... , ~ xc5, su posición perdía todo su atractivo. 16.
... , ~ e6
18.
~ xa7, ~ g4!
Es muy importante mantener vigilado el punto d4, para en su caso (por ejemplo a 19. a4), tener la posibilidad de jugar ~ g4-d4, forzando el cambio de damas. 19.
0l a3, h4
Se podía intentar rechazar la iniciativa del enemigo en el flanco de dama mediante 19 .... , ~ d4, pero entonces después de 20. c5, ~ b4; 21 . 0lc4, ~ b5 (intentando jugar ~ b5-a6), 22. ~ a3, ~ a6; 23. ~ b2, la dama negra se ve apartada del principal teatro de operaciones. 20.
0l c2, h3!
La apertura del juego en el flanco de rey tiene, en esta situación, bastantes menos perspectivas que este avance bloqueador, que restringe sensiblemente la posición del rey blanco.
Merecía atención 16 ...., ~ f7. 21.
17.
~ xf8,
~ h1,
0le4
bl, hxf8!
Por lo visto, la única continuación. Me gustaría jugar 17 .... , bl. exf8, para mantener para el ataque la torre por la columna "h", por ejemplo, en la variante 18. ~ xa7, h4; 19. a4, hg; 20. hg?!, 0lg4; 21. a5, ~ h6, pero las blancas podían jugar enseguida 20. a5!, con la desagradable amenaza a5-a6.
Mi proyecto era muy sencillo: 22. f37, 0l xg3!; 23. fg, 0le2, mate. 22.
a4!, ...
Tras 22. 0le3, 0lc3!; 23. ~ xb7+, 24. ~ xc6+, ~ xc6; 25. 0lxg4, 0le2+; 26. ~ h1, d6; 27. bl, ae 1, 0ld4, las negras tienen suficiente compensación por el peón. ~ xb7;
205
Ahora no tienen problemas para defenderse del impetuoso avance del peón "a", pero, como indicó l. Zaitsev, a 22 .... , c5 (con idea de parar 23. a5, mediante 23 .... , ~ c6, o 23 .... , bl f6L sigue 23. f3!, 0l xg3; 24. ~ xb7+!, ~ xb7; 25. fg+, y a 24 .... , ~ d8, 25. bl f2 (no 25. ~ e4?, 0le2+; 26. ~ f2, ~ xe4L 25 .... , ~ g5; 26. hg, ~ g3+; 27. ~ f 1, y en ambos casos las blancas ganan con facilidad. 22. 23.
... , 0l c3 /l ae1, ...
Puede parecer que es más fuerte 23. bl fe 1, que después de 23 .... , 0le2+; 24. ~ f1, 0ld4; 25. 0lxd4, ~ xd4, según el consejo de Azmaiparashvili 26. ~ xd4, ed; 27. bl xe8+, .llxe8; 28. ble1, bl f8; 29. f4, g5; 30. ~ f2, gf; 31. g4, f3; 32. c5, llegaba a un final favorable a las blancas. Sin embargo con esto se debilita la defensa del punto f2 . Zaitsev recomienda 23. ... , 9 f5!, teniendo previsto a 24. a5; 24 .... , ~ d8!, o 24. 0lb4, e4; (24. ... , ~ d8; 25. .llac 1, c5; 26. ~ xc5 , ~ xh1; 27. bl xc3, con ventaja blanca), 25. 9 e3 (25. Zl ac 1, c5!?), 25 .... , d5, con complicaciones. 23. 24. 25 .
... , 0le2+ bl xe2, 9 xe2 0l b4, ...
(Ver diagrama) La posición negra provoca la alar206
ma, se amenaza el avance del peón "a", y también la maniobra 0lb4-a6. Parece atractiva 25 .... , ~ d8, para a 26. 9 xb7, aprovechar el alejamiento de la dama de la diagonal principal a7-g1 y dar jaque continuo, 26 ...., bl xf2; 27. Zl xf2, 9 e1+; 28. Zl f1, ~ e3+; 29. bl f2, ~ e1+. Sin embargo, las blancas tienen una bella refutación a esta combinación, a 26 .... , bl xf2, sigue la jugada intermedia 27. 9 b8+!, 'íf!l e7, y ahora el brillante golpe 28. 0lxc6+!!. La columna "f" está prohibida para el rey negro por bl xf2+, y por eso perece: 28 .... , de; 29. ~ xc7+, ~ e6; 30. 9 xc6+, 'íf!le7; 31. ~ c7+, 'íf!le6; 32. ~ d5+.
Es curioso que las negras tengan aquí una jugada, encontrada por la computadora "Mephisto", que enseguida resuelve todos sus problemas: 25 .... , bH 3!. Ahora a 26. 0la6 (26. a5, se refuta sencillamente con 26 .... , bl xb3), sigue 26 . ... , 'íf!l d8; 27. 9 xb7 (27. 0l c5,
~ c8!), 27 .... , -ª xf2!. El caballo blanco está apartado de la casilla c6 y la combinación anterior es imposible: 28. -ªxf2, ~ e1+, etc ... ; 28. ~ b8+, ~ e7; 29. ~ b4+, d6; 30. -ª xf2, f! d1+; 31. g f1, f! d4+, con tablas, un resultado justo para el juego precedente de ambos bandos. Así, si hubiera aprovechado la sugerencia de "Mephisto", 25 . ... , bi f3, se hubieran producido las tablas con menos tensión nerviosa.
25. 26.
... , d5?! cxd5, ...
No conseguía el objetivo 26. a5: 26 .... , ~ d2!; 27. ~ c5, 'i!d4.
1!le7; 33. ~ e2, 1!lf7; 34. ~ h5+, ~ g8; 35. ~ xh3. No obstante, también tras esto las posibilidades son iguales. Debido al fuerte Zeitnot, lo que más temí a eran continuaciones del tipo de 32. e a5!?, g fc8; 33. ~ d2+, 1fle6 (33. ... , 1fle7; 34. b4!?), 34. ~ d1, con las dos inquietantes amenazas 35 . .ll c4, y 35. ~ h5. Tras esto aún le quedaba a las blancas cierta iniciativa.
32. 33.
Desde luego, no 33 ... ~ d6 debido a 34. ~ c4+, y 35. ~ d2. 34.
26. 27.
... , .ll xb3 f! xh3+, ~ d8
'i! h5, ...
... , cd5 ~ xd5,
...
Si 27. ~ xd5, entonces las negras disponían de una réplica: 27 .... , ~ a6; 28. ~ c5, 'i! d6. A 27. -ª c1, es fuerte 27 .... , ~ d2; 28. f! c5, ,¡¿,e7!; 29. ~ xd5, -ª xf2!. 27. 28.
... , ~ xd5 ~ xd5, ~ c2!
Cubriendo el punto c7 y previniendo el ataque sobre él por la columna "e". 29. 30. 31. 32.
~ a6+, ~ d7 ~ e3, ~ e4
-ª c1, bib8 f! f1, ...
Parece más peligrosa 32. g d 1+,
Colocando, en condiciones de apuros de tiempo, dos pequeñas trampas: 34 .... , -ª xe3?; 35. ~ g5+, y 34 .... , -ªb1?; 35. ~ d1+. 34.
... , ~ c8!
207
35.
~ d1,
g xe3
Yo podía seguir aferrado a la calidad: 35 .... , g d3; 36. ~ c2, g f7; 37. ~ c4, ~ d4; 38. a5, o 35 .... , ~ d3; 36. ~ g4+, ~ b8 (36 . ... , ~ d7; 37. b!. xc7+, ~ xc7; 38. ~ c4+), 37. ~ xg7, pero sólo al precio de empeorar algo mi posición. Desde luego, si quisiera podí a hacer tablas enseguida, sacrificando la torre: 35 .... , ~ f3!?; 36. ~ xb3, ~ xf2+; 37. ~ h1, ~ f3+, o 36. ~ c2, ~ c3!; 37. ~ xc3, ~ xf2+; 38. ~ h 1, ~ f3+ (aprovechando que es imposible 39. ~ g2?, por 39. ~ f1+, 40. g xf1, Jh f1, mate).
208
36. 37. 38. 39. 40. 41.
fxe3, ~ xe3+ ~ h1, ~ e4+ ~ g1, ~ e3+ ~ h1, ~ e4+ ~ g1, g d8 ~ c2.
(La jugada secreta). En la posición aplazada la iniciativa blanca asegura el empate . Tablas. Bajo mi punto de vista, este enfrentamiento escocés fue uno de los más atractivos en el último match por la corona ajedrecí stica.
In dice 7
Prólogo APERTURA ESPAÑOLA
Partida 1 G. Kasparov- A. Karpov (2,5). Moscú, 1985
11
Partida 2 G. Kasparov- A. Karpov (2,9). Moscú, 1985
16
Partida 3 G. Kasparov- A. Karpov (3,14). Leningrado, 1986
20
Partida 4 G. Kasparov - A. Karpov (3,16). Leningrado, 1986
27
Partida 5 l. Hjartarson- A. Karpov. Seattle, 1989
34
Partida 6 G. Kasparov- A. Karpov (5,4). Nueva York, 1990
40
Partida 7 G. Kasparov - A. Karpov. Amsterdam, 1991
45
Partida 8
J. Timman- A. Karpov. Bugojno, 1986
51
Partida 9 G. Kasparov- A. Karpov (5,12). Nueva York, 1990
57
Partida 10 E. Geller - M. Tahl. Sochi, 1986
62
Partida 11 M . Tahl- V. Korchnoi . Reykjavik, 1987
71
Partida 12 R. Hübner- V. Korchnoi. Tilburg, 1986
75
Partida 13 P. Popovic- J. Timman . Sarajevo, 1984
80
Partida 14 K. Georgiev- V. Tseshkovsky. Minsk, 1987
86
Partida 15 E. Prandstetter- P. Blatny. Checoslovaquia, 1986
93
Partida 16 M. Andrijevic- M. Pavlovic. Yugoslavia, 1986
98 209
Partida 17 A. Beliavsky- V. Malaniuk. Minsk, 1987
104
Partida 18 A. Karpov- B. Spassky. Bugojno, 1986
111
Partida 19 O. Romanishin- Y. Balashov. Erevan, 1986
118
DEFENSA RUSA
Partida 20 A. Karpov- G. Kasparov (1,41). MoscĂş, 1985
127
Partida 21
J. Timman -l. Hjartarson. Rotterdam, 1989
135
Partida 22 A. Karpov- Y. Seirawan . Bruselas, 1986
141
Partida 23 A. Beliavsky- V. Smyslov. R. Emilia, 1986-87
146
Partida 24 G. Kasparov- A. Karpov (2,15). MoscĂş, 1985
152
Partida 25 G. Kasparov- A. Karpov (3,6). Londres, 1986
157
Partida 26 V. Kupreichik- A. Yusupov. Minsk, 1987
163
Partida 27 A. Sokolov- L. 011. Odessa, 1989
167
Partida 28 S. Dvoiris- E. Rozentalis. Lvov, 1990
171
Partida 29 D. Howell - S. Makarichev. Frunze, 1989
177
Partida 30 G. Kasparov- A. Karpov (5, 10). N. York, 1990
188
APERTURA ESCOCESA
Partida 31
J. Timman- A. Karpov. Londres, 1984
195
Partida 32 G. Kasparov- A. Karpov (5, 14). Lyon, 1990
200
210
COLECCION AJEDREZ
TITULOS PUBLICADOS
mil El ajedrez paso a paso Curso general de ajedrez N. V. Krogius
mE Mis finales favoritos estudios de grandes maestros Anatoli Karpov y Evgeni Gik
y
mil C贸mo ganar
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mil C贸mo jugar
las aperturas abiertas Anatoli Karpov
EN PREPARACION
mE Hobby Fiseher Su vida, sus partidas, su retirada D. Bjelica
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