Caracas, domingo 08 de febrero, 1998 G u ille rm o d e Y a v o rs k y in te rp re ta e l d e p o rte c o m o fe n ó m e n o s o c ia l
IMÁGENES SIN APARTHEID SUS FOTOGRAFIAS cruzan distintos parajes. Primero fue La Habana, luego China. Ahora es Suráfrica y su selección futbolística, el motivo que persigue su lente, más ocupado en retratar el deporte como fenómeno social, político y de marca que como actividad puramente física
Mariveni Rodríguez El Universal Caracas.- Abrió el obturador, aguardó por la acción de un gol del equipo surafricano, pero al sonar el click de su cámara, un niño que se apoyaba en sus muletas se atravesó en el encuadre y desde entonces Guillermo de Yavorsky supo que el fútbol podría ser retratado y documentado bajo la óptica de un fenómeno social y no sólo como deporte. La beca que obtuvo por el International Artistic Commite de la Unesco dentro del programa Unesco-Aschberg para jóvenes artistas (1997) le garantizaría seguir de cerca el auge y desarrollo del fútbol en Suráfrica, pero en dicho recorrido De Yavorsky se enteró de que los héroes de barajitas y las estrellas futbolísticas representaban para los chicos africanos más que una imagen de colección. Son un sueño y, en realidad, la única opción que tienen para llegar a la meta: ser grandes, comer bien, crecer y alcanzar un estatus diferente al que la mayoría tiene acceso en un país tercermundista. De Yavorsky interpuso su mirada al acierto y al fracaso de una jugada, incluso, al orgullo que implica representar una nación, y así su visión de fotógrafo sensibilizado con el arte _con la humanidad_ lo condujo a captar una raza, la derrota del racismo y la unión del hombre blanco y hombre negro en medio de la euforia deportiva. Hoy, Guillermo de Yavorsky está más ocupado en registrar el deporte como identidad social, política, comercial y comunicativa que como una acción fanática o reporteril. Sabe que las dos piernas abiertas frente a la arquería siguen esperando por un gol; que la lesión de Nicolás Pereira es el esfuerzo de un jugador, pero también reconoce que éste fue sancionado por jugar en las canchas surafricanas y que allí, en medio del arbitraje mundial, Jordan, Mark Fish, Lucas Radebe o el equipo Bafana Bafana constituyen un mundo que aprovecha su transmisión para descubrir su más interesado léxico: Nike, Gatorade, entre tantas marcas que se distinguen como vallas de una sociedad de consumo. 'Crimen', 'apartheid', 'seguridad', consignas que el público evoca detrás de esa ola de cuerpos. Esos cuerpos sanos, su sudor o la tensión de un músculo, son imágenes que Guillermo de Yavorsky registra en aras del deporte y la sociedad.