tus regalos
TUS REGALOS PUEDEN CAMBIAR VIDAS
pueden cambiar vidas
MÓVILES
PULSERAS HECHAS A MANO
PAÑUELOS MARINA SILK
BOLSA TELA
WALL HANGING WITH BAG 400 RS
2 BANGLES WITH BAG 200 RS
SCARF 1.000 RS
TEXTILE BAG 300 RS
MÓVILES DE CORAZONES
COLLARES
LLAVEROS
MARCAPÁGINAS
LÁPICES
HEART WALL HANGING WITH BAG 400 RS
NECKLESS 300 RS
KEYRINGS 120 RS
BOOKMARK 100 RS
PENCILS 70 RS
Sawan month da la bienvenida a dos nuevas voluntarias
Mientras en España es tiempo de vacaciones, en Varanasi la actividad de Semilla no para. Después de unas semanas de vacaciones, los niños y niñas del programa de educación han vuelto a las clases y dos nuevas voluntarias han llegado a India para unirse a nuestro equipo durante unos meses, dejando atrás el sol y la playa para vivir una experiencia diferente y solidaria. Este es el caso de Soco Puente, coordinadora del grupo de voluntariado Semilla para el Cambio de Madrid con muchos años de experiencia como docente, y Hanna Navarro, publicista y comunicadora de Valencia con experiencia internacional.
Soco conoció a la directora de la ONG, María Bodelón, en los comienzos de Semilla, tras un viaje turístico por India. Desde ese momento, ha colaborado con la ONG desde Madrid, formando parte de su grupo de voluntariado en la ciudad y participando con donaciones. Además, ha sido una de las principales impulsoras del proyecto de hermanamiento entre Semilla para el Cambio y el Colegio Nobelis de Madrid, donde trabajaba. Después de varios años, Soco ha decidido repetir la experiencia en India y ha llegado a India a principios de julio para colaborar en el programa de educación en Dash y Sigra y apoyar el programa de visitas de la ONG durante un largo período de tiempo. Toda una aventurera, Soco, ha querido hacer partícipe de esta experiencia a su familia, su marido y sus dos hijos, quienes también han venido a conocer Semilla en Varanasi. “Poder comprobar de primera mano la evolución que este bonito proyecto ha tenido durante estos años, es algo increíble. Conocí a Semilla en un humilde edificio en el centro de Varanasi con unos 20 niños y poder visitar ahora sus dos centros con más de 180 niños escolarizados y los proyectos dirigidos al empoderamiento de la mujer puestos en marcha, me parece admirable. La “semilla” de este proyecto me ha acompañado durante todo este tiempo, y poder ver y disfrutar de todo lo que ha crecido ha sido un regalo para mí y para toda mi familia”, nos cuenta Soco. Durante su estancia, sus hijos, María de 10 años y Pablo de 8 años, asisten cada día a las clases de Semilla con el resto de alumnos y alumnas del proyecto educativo, y se han integrado perfectamente. Asimismo, su marido Santiago Domingo, también voluntario del grupo de Semilla en Madrid, colabora impartiendo clases de español en el programa CIL (Ciclo de Inserción Laboral) . Este nuevo proyecto se lanzó hace unos pocos meses con dos objetivos clave; reducir el abandono escolar y preparar una futura vida laboral a los alumnos/as de los últimos cursos de nuestro Proyecto de Educación, ofreciéndoles refuerzo en español e inglés, informática avanzada y formación profesional enfocada al sector turístico. Hanna, recién llegada a la India, se encargará de la comunicación de Semilla para el Cambio en India y estará con nosotros durante el próximo mes de agosto para informarnos del día a día de la ONG en Varanasi. Esta joven valenciana quería dar un giro a su vida, sentirse realmente útil y decidió tomar otro camino más solidario. “En ocasiones hay que dejarse llevar por las oportunidades que la vida nos presenta. Es por esto que decidí dejar todo y volar a la India para colaborar en este bonito proyecto de Semilla para el Cambio. No conocía nada de la India y no sabía a qué me enfrentaba. Sin embargo, mi impresión ha sido de lo más grata y sorprendentemente satisfactoria. Puedo decir que está siendo la aventura más arriesgada y maravillosa que he tomado nunca. Me encuentro como en casa, acogida por la organización de una forma que nunca hubiera esperado. Semilla para el Cambio es un proyecto muy especial y cooperar en el es muy gratificante. Tenemos, sin duda, muchas cualidades que aprender de este proyecto, el lugar y su gente, su estilo de vida y entusiasmo. Sé que el trabajo de la organización en las comunidades más desfavorecidas de Varanasi va a aportarme grandes valores que sin ella no hubiera encontrado”.
Además, las dos han llegado en un momento muy especial, el mes de Sawan, también conocido como Shravan Somwar, un mes entero dedicado a la búsqueda de bendición del Dios Shiva. En estos días, Varanasi se llena de peregrinos, color y energía que hace a la ciudad aún más especial y única. Así, Soco y Hanna no sólo han podido conocer de primera mano las dos escuelas y proyectos desarrollados por Semilla, sino también sentir de cerca la realidad cultural de la ciudad, su gente y su magia tan peculiar. ¡Qué mejor manera de comenzar esta nueva experiencia que adentrándose en sus ritos y festivales, conociendo el secreto del río Ganges a través de paseos por sus 100 Gaths, aprendiendo de una nueva cultura tan atractiva, mientras desarrollan un trabajo solidario y dejan su huella en Semilla para el Cambio!
Nos vamos a comprar telas con Hemant
REGALOS SOLIDARIOS Nos vamos a comprar telas con Hemant ¡Hoy nos vamos de shopping! Tras varias semanas lloviendo, por fin ha llegado el buen tiempo y nos vamos con Hemant, supervisor y administrativo del taller de Corte y Confección, a comprar al mercado textil de Nai Sadak para renovar las telas y los materiales del taller. Un buen modo de introducirnos y familiarizarnos con la realidad mercantil de India y a conocer de primera mano el origen del material de cada uno de los regalos solidarios que las artesanas confeccionan todos los días en los talleres de Semilla en Sigra. Hemos pasado una mañana de lo más excitante en el mercado de telas donde hemos encontrado todo lo que buscábamos para nuestros regalos solidarios, desde lo más común hasta materiales textiles más específicos y nuevos diseños completamente diferentes. Fabulosas tiendas con hasta 4 dependientes a nuestra total disposición para enseñarte todo tipo de telas. Y es que India es un auténtico paraíso del textil por la calidad, el abanico de estilos y de colores que ofrece, que en España es impensable encontrar. Hemant acude al mercado al menos entre tres y cuatro veces por mes. Siempre intenta encontrar aquellos diseños más creativos, con colores únicos y de buena calidad para conseguir el resultado más apropiado. Al llegar pensé que nos volveríamos locos encontrando telas, hay tantos puestos con tantísimas opciones de tejidos, colores y estilos además de compradores y dependientes invitando a ver su puesto, que no sabes dónde acudir, puedes perderte dentro del mismo mercado e irte de ahí sin nada en las manos. Pero Hemant ya sabe dónde acudir directamente sin tener que pasar por los más de 100 puestos de telas y algún que otro sastre: Cotton Fabric Shop 35 y Chaudhary Suit Center son los dos puestos donde siempre encuentra los mejores productos a precio más competitivo. Un hombre con gafas y larga barba y expresión jovial nos sonríe de lejos, es el propietario del puesto. En cuanto llegamos, nos ofrece un Chai mientras dos jóvenes desenvuelven rollos de telas de algodón para nuestra observación. Después de tan sólo 30 minutos ya hemos acabado y nos dirigimos entonces a la ONG con 4 bolsas con metros y metros de tela. Como sabéis, las mujeres del programa de empoderamiento de la mujer que trabajan cada día en los talleres de artesanía y corte y confección, producen a mano, a través de múltiple variedad de textil, productos como móviles de tela, pulseras, llaveros, marcapáginas, bolsas de tela, y collares dando resultado a nuestros regalos solidarios, reflejo de toda una cadena de esfuerzo, pasión y entusiasmo que comienza en un mercado y acaba en un regalo. ¡Y acompañar a Hemant al mercado de telas para conocer el inicio de este proceso ha sido una experiencia inolvidable! Un día en el mercado donde perderse entre telas y tiendas, donde poder pasar toda una mañana sin ser consciente del transcurso del tiempo. Metros y metros de tela que se convertirán en regalos solidarios que las mujeres de los slums producen con mucho amor para luego venderlos en el centro de Semilla de Varanasi y a través de la nuestra página web www.regalossolidarios.org.
Testimonio Gauri Apadrinamiento
“De mayor quiero ser doctora y sé que asistiendo a las actividades de Semilla y a la escuela, podré conseguirlo algún día” Gauri Shekh, de 12 años, es una de las estudiantes del programa educativo de Semilla para el Cambio en Varanasi. Todas las mañanas asiste a nuestro centro de Sigra a las actividades lúdicas y luego a sus clases en el Colegio Montessory. Hace unos años Gauri recogía basura, pero gracias al programa educativo de Semilla ha podido abandonar este trabajo y estudiar como cualquier otra niña. En breve cumplirá 4 años escolarizada gracias al programa de apadrinamiento de la ONG. Gauri comparte con nosotros su experiencia. A los 9 años te incorporaste al programa educativo de Semilla y ya han pasado cuatro años... ¿qué sientes con esta oportunidad de estudiar gracias al programa de apadrinamiento? Me siento muy afortunada porque ahora tengo la oportunidad de asistir a la escuela donde estoy mejorando cada día mi lectura y escritura en hindi e inglés a través de los talleres de refuerzo. No sólo eso sino que este año he empezado el curso de informática donde estoy aprendiendo a hacer uso de Internet, programas como Word y Power Point. El próximo curso comenzaré también el programa CIL (Ciclo de Inserción Laboral) y sé que esto se verá reflejado en mi futuro profesional. Y hablando de tu futuro profesional ¿qué te gustaría hacer en un futuro? De mayor me gustaría ser doctora para ayudar a la gente de Varanasi. Sé que asistiendo tanto a las actividades en el centro de Semilla como a la escuela, podré conseguirlo algún día. El próximo año empezaré mis clases de español y esto me ayudará aún más.
¿Te gusta venir a la escuela y estudiar? Sí, mucho, porque puedo realizar las actividades con mis compañeras y profesoras, aprendo mucho en los programas y clases de hindi e inglés. Siento que estoy mejorando mucho en lectura, escritura y expresión al trabajar siempre en grupos. Me esfuerzo mucho porque al final veo una mejora y las oportunidades que puede aportar para mi futuro. ¿Y qué sientes al saber que alguien está apoyando tu educación? Me gusta mucho leer, dibujar, aprender nuevas cosas y pasar tiempo con mis compañeros y sé que, gracias a la contribución de mi madrina, puedo desarrollar estas habilidades. Sé que ella confía en el programa, en mí y mi familia y ello me motiva, me siento afortunada. Siento que puedo cambiar mi futuro a uno mucho mejor con mayores posibilidades.
Además, tu hermana Saniya y tu hermano Sahil asisten también al programa de Semilla. De hecho, Saniya acaba de ser matriculada este abril... ¿Te alegra que ellos también vayan a la escuela? Me alegra poder ver a mis hermanos aquí conmigo en la escuela y poder compartir nuestro aprendizaje juntos. Poco a poco mi familia está comprendiendo la importancia de este
programa. Se ha vuelto más seria con mis estudios al ver mis logros y aprendizaje académico involucrándose en este y haciendo partícipes a mis hermanos. Saben que con esto podremos conseguir un futuro más prometedor.
Sabemos que tu madrina Francisca ha venido a visitarte y volverá pronto, ¿te ha gustado conocerla? ¡Me ha encantado! He podido conocerla en persona cuando me visitó en Varanasi, y saber que conoce de primera mano el programa, mi progreso y que confía en mi futuro profesional, es para mí algo muy especial. Sobre todo, el poder presentarle mi escuela, mis clases, trabajos y logros de cada año, familia, amigas y compañeros, me emocionó. ¡Tengo muchas ganas de verla pronto!
¡Con tu granito de arena niños y niñas como Gauri pueden lograr mucho más para su futuro y el de sus familias! http://www.semillaparaelcambio.org/colabora/apadrina/
DĂa de la alfabetizaciĂłn
Hoy, 8 de septiembre, se celebra desde hace 40 años el Día Internacional de Alfabetización, que pretende reivindicar este derecho, eje principal de la educación, y recordar a los más de 100 millones de niños y niñas que carecen de la oportunidad de ser escolarizados y a los aproximadamente 800 millones de adultos que no saben leer y escribir. En Semilla, es sin duda, un día muy especial, ya que desde 2010 trabajamos día a día para combatir el analfabetismo de las comunidades más desfavorecidas de Varanasi a través de proyectos de Educación y Alfabetización de adultos. Por eso, queremos aprovechar esta fecha para reclamar el derecho a la educación y recordar que la alfabetización es un fundamento para erradicar la pobreza, lograr el pleno desarrollo y luchar contra la desigualdad. A pesar del impresionante crecimiento económico que India viene experimentando en los últimos años, este país , concentra todavía el mayor número de personas pobres del mundo y es también, el tercero con mayor número de analfabetos a nivel mundial. Según el Instituto de Estadística de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), la tasa de alfabetización en 2013 entre los adultos a partir de 15 años en España es del 98.08 %, mientras que en India, según los últimos datos registrados, es del 66%. Con esto, somos realmente conscientes del alto nivel de analfabetismo que concentra todavía.
Con el proyecto de Alfabetización de adultos, Semilla para el Cambio ha querido poner énfasis en la necesidad de que todas las personas cuenten con una educación mínima parar afrontar su día a día y lograr un cambio social en las comunidades de los slums. Este es el caso de Senarul, uno de nuestros alumnos del centro de Sigra: “Me siento muy bien siendo educado. Antes de asistir al programa, cuando alguien me preguntaba si estaba recibiendo educación o si la había recibido, contestaba avergonzado que no. Ahora puedo contestar con seguridad en mí mismo que sí. Tengo una educación.”
Un proyecto que abre puertas En el proyecto de alfabetización, que se puso en marcha en 2013, proporcionamos habilidades básicas de lectura, escritura y matemáticas, principalmente a mujeres de los slums, para aumentar sus capacidades, su autonomía y su integración en la sociedad. Son adultos/as que, por razones económicas, no tuvieron la oportunidad de asistir a la escuela y que ahora pueden mejorar sus competencias básicas. Cuatro alumnas y u alumno asisten a clases de lunes a viernes con Seema Mehrotra, la profesora de este proyecto desde hace 3 años. Allí aprenden a leer y a escribir en hindi y también matemáticas, -con el fin de poder tener una educación básica y poder contar con la autonomía suficiente para trabajar y calcular sus propios ingresos del día a día. La motivación primordial de los alumnos y alumnas es el deseo de encontrar nuevas oportunidades que les permitan dejar el trabajo de recogida de basura. “Me siento muy a gusto asistiendo a las clases de alfabetización porque podemos aprender diferentes cosas. Escribir y leer me abre nuevas e inmensas puertas”, nos cuenta Mehrunisha.
Desde Semilla para el Cambio, se acude a los diferentes slums de la zona de Sigra, y se informa a la población sobre el programa de Alfabetización y el cambio que puede dar en sus vidas. Además, se imparten clases adicionales de alfabetización a las y los adultos para compensar la falta de recursos y apostar por una educación integral y de calidad. Este proyecto tiene una duración de un año, de lunes a viernes de 13:00hrs a 15:00hrs. Cada mes se realiza un examen de toda materia dada y cumplidos los 6 meses de curso,, los alumnos y alumnas que lo desean pueden iniciar el proyecto de Corte y confección, al mismo tiempo que continúan con el programa de Alfabetización. Esta también es una motivación para que algunas mujeres se apunten a alfabetización, como Senarul, “las clases de alfabetización, de costura y la limpieza de la escuela me motivan a venir cada día a aprender”, o Shahida, “asisto a este programa de alfabetización porque quiero aprender costura. La combinación de ambos programas me encanta y ayuda a crecer profesionalmente”.
Completado el año académico, los alumnos/as reciben un certificado que acredita que sabe leer y escribir en hindi además de conceptos básicos de matemáticas. Rupika, alumna del programa, nos cuenta su experiencia: “este programa nos ayuda en muchos diferentes caminos. Por ejemplo, podemos comprobar y calcular Rupees en las compras que realizamos el día a día. Antes no sabíamos. Nuestro comportamiento ha cambiado relevantemente, ahora hablamos adecuadamente, usando un lenguaje correcto”. Según nos cuenta Seema Mehrotra, la evolución de los estudiantes durante ese año es admirable. “Cuando mis alumnos vienen por primera, no puede leer ni escribir lógica ni apropiadamente. Esto les complica su trabajo, por ejemplo al vender basura, ya que pueden engañarlos con el cambio. Ahora, sin embargo, puede leer y escribir en hindi. Esto me enorgullece inmensamente”, nos cuenta.
Con solo 14 años de edad, Rupika, que vive en un slum cercano a la escuela de Varanasi, combina su trabajo de recogida de basura con la asistencia a una escuela, donde asiste al proyecto de alfabetización y costura y confección.
Visitas
Visítanos en Varanasi Visita nuestros proyectos en Varanasi para acercarte a la realidad de las familias a las que ayudamos. Descubre en persona los resultados de la solidaridad. Estas visitas están abiertas a particulares, empresas o instituciones, tanto si son colaboradores de Semilla para el Cambio como si no. Están dirigidas a todos aquellos que desean ver con sus propios ojos cómo, gracias al apoyo y solidaridad de nuestros colaboradores, plantamos “semillas de esperanza” entre la infancia desfavorecida en Varanasi, mejorando sus vidas de forma real y directa.
© Hanna Navarro Programa de visita La visita dura aproximadamente unas 4 horas, desde la salida a las 9:00 h en el punto de encuentro fijado hasta la llegada a las 13:00 h en la escuela de Sigra. Después de recoger a los visitantes en un punto de encuentro (normalmente el Assi Ghat), el programa comienza con la visita al centro de Sigra, donde Semilla para el Cambio inició en octubre de 2010 un programa de desarrollo para las comunidades de los “slums”, que incluye proyectos educativos, nutricionales, sanitarios y de empoderamiento de la mujer. Podrás conocer a las mujeres de los proyectos de alfabetización de adultos, el taller de corte y confección y el proyecto productivo Marina Silk. Además podrás presenciar las clases dirigidas a los niños y niñas escolarizados en el RS Montessory, la escuela que colabora con Semilla en el barrio. Igualmente, asistirás a las actividades lúdico-formativas que se llevan a cabo en nuestro centro, orientadas a los alumnos y a las alumnas de los diferentes programas. Las visitas serán guiadas en español por la persona responsable de visitas de la ONGD, teniendo la posibilidad de conocer y hablar con los empleados y beneficiarios. Planificación de la visita Para llevar acabo tu visita, deberás contactarnos al email visitas@semillaparaelcambio.org, notificándonos de la fecha y el número de personas que nos visitaréis. Las visitas se pueden realizar cualquier día de la semana, excepto domingos y festivos, ya que esos días, los colegios permanecen cerrados. Del mismo modo, si quieres visitar a un niño/a apadrinado/a, infórmanos con anterioridad para que su familia pueda recibirte. El alojamiento y organización del viaje corre de cuenta del visitante. Sin embargo, si necesitas asesoramiento también puedes ponerte en contacto con nosotros a través de la dirección de email visitas@semillaparaelcambio.org, en nuestra sección contacta o llamando al +91 9670167493 o al +91 8853662761. Si además, necesitaras más información, también puedes leer nuestra página de Preguntas Frecuentes sobre la visita.
Deepa, supervisora y coordinadora de Handicraft
Deepa es nuestra joven profesora y supervisora del taller Handicraft en Semilla para el Cambio en Varanasi. Con tan solo 22 años comenzó a ser parte de Semilla para el Cambio y ahora, con sus 26 años, es no sólo profesora de lectura y escritura hindi de los niños y niñas principiantes del centro sino que además, es ella quien controla la calidad de cada uno de los regalos solidarios que las mujeres elaboran cada día al llegar al centro, donde no sólo comparten el lugar de trabajo sino también una manera de escapar de la recogida de basura y entorno del slum. Compartimos a continuación la entrevista en la que nos cuenta su experiencia, trabajo y vivencias en el taller y el avance no sólo profesional sino personal y familiar que están experimentando las doce artesanas que forman el proyecto. Cumples en breves ya 4 años en Semilla, ¿qué es lo que más te gusta del centro y la ONG? Efectivamente, voy a cumplir 4 años trabajando en Semilla y cada día me inspira más mi trabajo. Soy profesora de lectura y escritura, coordinadora del taller de costura y confección y alfabetización, cada proyecto muy diferente y es esto lo que más me atrae. Me gusta los diferentes papeles que desenvuelvo en los diferentes grupos de edades. Es un verdadero e interesante trabajo porque no hay ni un sólo día en el que me aburra, al contrario. ¿Cómo es tu día a día? Cuéntanos un poco... Llego al centro de Semilla en Sigra cada mañana a las 08:30am y comienzo las clases de lectura y escritura hindi con niños de 1 a 4 años. A continuación, paso a ser supervisora de las doce mujeres que integran el taller de costura y confección hasta las 03:00pm. Entonces, paso a las clases de alfabetización a adultos desde las 05:30pm a las 07:00pm. En el proyecto de costura y artesanía ¿cuáles son tus principales tareas? Mi principal tarea en el taller de costura y artesanía es supervisar el trabajo de las mujeres. Divido sus tareas en función de las habilidades y maestría que su experiencia en el taller de Semilla les ha aportado a cada una. Pero además, no sólo coordinas el trabajo grupal de las mujeres sino que también recoges más tareas, ¿verdad? Efectivamente. Me encargo, junto a Hemat, coordinador de Semilla para el Cambio en el centro de Sigra, de la compra del material textil, lo que conlleva una primera etapa de la administración del stock y contabilidad del taller en general. Paso un informe a Hemat sobre el material, él lo compra y una vez aquí en la ONG, compruebo que la calidad sea buena. Les enseño a las mujeres qué pasos seguir en la elaboración de los productos, organizando el trabajo grupal y ya fabricados, paso control todos los días para conseguir el mejor resultado de los regalos solidarios. ¿Qué es lo que más te gusta del taller? Me apasiona este taller por la unidad existente entre las mujeres. Cada vez que las veo trabajar y conversar, compartir emociones y sensaciones, me siento inspirada. Estas mujeres necesitan trabajar y siendo la supervisora me llena de alegría. Es un taller muy creativo y motivador. ¿Ves una evolución rápida en las mujeres? Las mujeres han mejorado muchísimo no sólo en el trabajo sino también en su comportamiento. Al estar motivadas en su trabajo, se nota en la actitud lo que animan a más mujeres del slum a probar el taller. Y es que, están tan motivadas que incluso están aprendiendo inglés y cada vez quieren aprender más al ver que realmente mejoran y han podido dejar la recogida de basura contribuyendo económicamente en casa. ¿Cuáles son los regalos que se producen en el taller? Se intenta producir una gran variedad de productos, todos hechos a mano, siendo los más exitosos los móviles de tela, collares y pulseras, bolsas muy coloridas de tela, llaveros, marcapáginas, etc. Además, también están los pañuelos de Marina Silk, que ahora por la temporada en la que nos encontramos está paralizado hasta septiembre.
Deepa tiene un talento creativo y organizativo lo que le lleva a ser la mejor en su trabajo de coordinación y control de calidad de los regalos solidarios. Unos productos que reflejan doce historias de diferentes mujeres de India y un esfuerzo y trabajo sorprendente. Gracias a su venta a los visitantes en el centro de Semilla y venta Online en www.regalossolidarios.org.es y al apoyo de muchos de vosotros, estas mujeres pueden seguir confeccionando y transformando así su situación cotidiana hacia un futuro más conveniente.
ArtesaniĚ a que empodera y promueve la independencia
Artesanía que empodera y promueve la independencia Cada día a las doce de la mañana, el taller de artesanía de Semilla para el Cambio empieza su actividad. Las once artesanas que elaboran nuestros regalos solidarios llegan al centro de Sigra para iniciar su jornada laboral. Se sientan en el suelo, con las piernas cruzadas y en torno a una mesa comienzan a cortar, coser y ensamblar piezas.
Para la mayoría, su entorno de trabajo ha cambiado radicalmente. Antes trabajaban recogiendo basura por las calles de Varanasi por un sueldo ínfimo, y ahora se mueven entre bonitas telas, lazos y abalorios.
No tengo marido ni hijos y siempre había tenido que trabajar recogiendo basura para poder comer y pagar al propietario del slum –cuenta Seema-. Semilla me ha dado un trabajo muy bueno que me hace muy feliz. Ahora incluso puedo ahorrar dinero para mi futuro. Bajo la supervisión de Deepa, la profesora y encargada del taller , las mujeres se dividen las funciones según su habilidad y su experiencia. Algunas, como Hasina, Koteja, Rajina y Babita, llevan más tiempo en los proyectos de costura y artesanía de Semilla, por eso son las encargadas de las piezas que requieren de un trabajo de costura a máquina de mayor perfección y sirven de referente para las demás.
Semilla me ha dado la oportunidad de aprender un oficio en el taller de costura. Antes no sabía coger una aguja y no había visto nunca una máquina de coser, y ahora soy capaz de hacer marcapáginas, bolsas o piezas para los móviles, cuenta Reshma. Todas tienen su papel en el proceso de creación de los productos y todas toman decisiones conjuntamente y aprenden a trabajar en equipo. Y es que el ambiente entre las mujeres es una de las cosas que más se cuidan dentro del taller de artesanía. No es sólo un lugar en el que aprender un oficio y trabajar, es también un espacio en el que pueden evadirse del entorno del slum, compartir problemas y divertirse.
Antes sólo me dedicaba a las tareas de casa y me sentía muy sola- confiesa Hasina-. Trabajar en este taller me ha permitido relacionarme con más
mujeres, además de aprender a coser. Ahora estoy muy feliz porque tengo amigas y un trabajo muy respetable.
Y mientras ellas trabajan, el pequeño Imran juega rodeado de pulseras, collares, bolsas de tela, llaveros y marcapáginas . Es el hijo de Marina, y uno más del taller, ya que cada día acompaña a su madre al taller . Y es que en India, la conciliación de la vida laboral y familiar no es un derecho para las mujeres, es un imprescindible. En una sociedad tan patriarcal, la mujer no puede descuidar sus responsabilidades en el cuidado de la casa y los hijos, aunque trabaje, por eso en el taller de artesanía se permite que las trabajadoras traigan a sus hijos pequeños y se les ofrece una gran flexibilidad horaria . Aunque la jornada laboral dura hasta las 18.00 horas , cada una de las mujeres puedes decidir cuántas horas trabaja y cuándo se va, cobrando su sueldo en función de las horas trabajadas y las piezas producidas. Pero además, el trabajo en el taller les proporciona una cierta independencia económica, así como una mayor influencia dentro de la familia y de la sociedad, con más capacidad para tomar decisiones. Piyari, por ejemplo, se siente muy orgullosa de su trabajo con el que asegura que puede comprar mejores alimentos para su familia y ahorrar para el futuro. Y Laltusi ha podido cumplir su sueño de construir una casa en su aldea. Ya se ha comprado el terreno y su hijo ha empezado la construcción.
A las seis de la tarde, las puertas del taller de artesanía se cierran y las mujeres vuelven a sus casas. Detrás quedan nuevos productos solidarios acabados que se venderán a los visitantes en el mismo centro de Semilla en Varanasi, a través de la web www.regalossolidarios.org.es y de los grupos de voluntariado de la ONG en España. Regalos solidarios que llevan escrita entre la tela y los hilos la historia de once mujeres de los slums. Once mujeres que han podido cambiar su vida gracias a un trabajo y gracias a las personas que apuestan por los productos solidarios y el consumo responsable.
Nutriciรณn
PUBLICADO EL 30 AGO, 2016 EN BLOG
Como ya os hemos comentado más veces, en los comedores escolares de Semilla para el Cambio proporcionamos a los niños/as un menú variado con algunas de las recetas más típicas de la cocina hindú. Uno de los alimentos que comen habitualmente nuestros alumnos y alumnas es el Chapati, un pan sin levadura muy típico de India y Pakistán. Laltusi Shekh, cocinera del Programa de Nutrición desde hace más de 6 años, nos explica cómo cocinarlo. ¡Se prepara en menos de una hora! Ingredientes • 3 tazas de harina • Ghee o usli ghee (mantequilla clarificada que se emplea frecuentemente en la cocina de la India y en la Paquistaní) • 1 taza de agua • 1 cucharadita de sal • 2 cucharadas de aceite Preparación: 1. Vierte la harina de trigo, la sal y una cucharada de ghee (opcional) en un tazón y mezcla los ingredientes con las manos. 2. Agrega poco a poco el agua a la mezcla de harina y revuélvela con tus manos durante 10 minutos hasta que esté suave y elástica. Después coloca la masa en un tazón aceitado y cúbrela durante 25 minutos con un paño o un film de plástico transparente. 3. Divide la masa en pequeñas bolas de más o menos 5 centímetros de diámetro y sumérgelas en harina.
4. Estira la masa con un rodillo hasta que estén completamente planos, que esté uniforme hará que sea posible que todo el chapati se infle.
5. Calienta una sartén, tava o plancha pesada a fuego medio y cocina cada chapati por ambos lados. Debes seguir cocinándolo hasta que aparezcan burbujas a ambos lados de la superficie del pan. Verás que la masa comienza a encogerse e inflarse un poco con el calor. Cuando tu chapati esté dorado, puedes retirarlo del fuego.
6. Retira el chapati del fuego y envuélvelo en un paño hasta que todos estén listos para servir. Disfruta de este delicioso chapati con curry o pepinillos o úsalo para un sándwich wrap.
Si deseas colaborar con el Programa de Nutrición 12×100, que proporciona una alimentación saludable a más de 175 niños y niñas de Varanasi, haz clic aquí para asociarte y multiplica por una alimentación digna para todos/as o también puedes colaborar compartiendo esta receta. ¡Buen provecho!