Desintoxica tus células,microbiones y emociones

“El elefante parado en el medio de tu sala”

Por: Habacuc Cardona, CECP, CBCP

Lectura de 7 min.

Es el año 2022. Nada más de mirar los números, se me hace increíble que ya estemos en esta fecha. Recuerdo que cuando era niño pensaba en el 2025 y me imaginaba autos volando y un futuro lleno de naves y cosas así. Cuando lo analizamos, nuestra presencia en el planeta tierra es extremadamente breve, comparado con los miles de años que han pasado y los que vendrán. Así que en realidad somos un instante que toma conciencia brevemente en este plano físico para experimentar la vida desde este punto de vista. Pero esta subcapa es solo una de tantas que existen, una que puede estar llena de recuerdos hermosos o dolorosos. Recuerdos llenos de plenitud o de restricciones, y lo que podría ser una oportunidad para disfrutar de una creación hermosa y llena de posibilidades divertidas se puede convertir en una horrible pesadilla.

¿Pero por qué una subcapa? Bueno, cada ser humano es un ente independiente con voluntad y libre albedrío, lo que significa que nosotros decidimos y tomamos nuestras propias decisiones. Así que, desde nuestros ojos hacia adentro, en cada mente humana está pasando todo un mundo de cosas. Esto afecta a todo nuestro ser de una forma positiva o negativa, ya que todo nuestro cuerpo está conectado y es un todo viviente, donde nada está separado de nada. Inclusive usted y yo, mi apreciado lector, estamos unidos.

En esta primera capa, que es nuestro cuerpo, nacen creencias en base a nuestras vivencias, las cuales se conectan con nuestras emociones. Así que, ¿cuál es la emoción que sientes con más frecuencia desde hace 2 años? ¿Cuál es tu emoción favorita? Si tu contestación a la primera pregunta fue tristeza, por ejemplo, y la respuesta a la segunda pregunta fue alegría, tu percepción no es real. Tu emoción favorita es tristeza; tu cuerpo te la pide y la necesita, como un alcohólico necesita el alcohol.

La razón de esto es que las emociones son estructuras químicas que nosotros decidimos fabricar para sentirlas. La mente es energía y guía a tu cuerpo físico, es como decir un jinete y su caballo. La mente es el jinete y el caballo es tu cuerpo. Cuando el caballo no tiene un jinete, solemos decir que esa persona está “al garete”.

El significado de “al garete” es “a la deriva”. Ya sabemos lo que pasa cuando un barco no tiene capitán. Lo importante es comprender que estos químicos que segregamos y generan una emoción son moléculas específicas, y las mismas son extremadamente adictivas. Lo que significa que nuestro cuerpo tendrá la necesidad de sentirla después de 21 días, y recurre al recuerdo que la genera creando una memoria celular. Ahora tienes atrapada una emoción a nivel molecular en alguna parte de tu cuerpo. En mi práctica personal, yo las he removido de los senos, ovarios, riñones, hígado, lengua, ojos, rodillas; en fin, la lista es interminable. El significado de emoción es E = energía y moción de movimiento, lo que significa que una emoción es energía en movimiento.

El cuerpo responde a la voluntad del espíritu, siendo este también energía vibracional que reside dentro de nuestro cuerpo para manifestarse en este plano físico. Por tal razón, cuando tomas la decisión con conciencia de unificarte a Dios o a la energía universal creadora, la fuente, o como desees llamarle, esa energía se manifiesta en ti. Por otro lado, todo lo que genera la mente, sus pensamientos, emociones y sentimientos son energía, y esa energía es una vibración que vibra sobre lo que está a su alrededor. ¿Y qué es lo que está a nuestro alrededor? Pues nuestro entorno, nuestro hogar, comida, ropa, familiares, trabajo, amigos etc…

Así que, ¿qué sucede si estamos en vibración constante por 2 años de tristeza o cualquier otra emoción negativa? Lo que sucede es que estamos vibrando en esa frecuencia baja, y por ende todo a nuestro alrededor se afecta. Sea eso o cualquier otra vibración negativa, llámese marihuana, pornografía, alcohol, música con significados y mensajes negativos (como muchos artistas que narran acciones indeseables o negativas en sus canciones), etc.

Ahora, ¿qué sucede cuando nos unimos a Dios y tenemos buenos sentimientos, hacemos las cosas bien y generamos energía positiva, pero siempre estoy enfermo? Eso es otro tema, y la respuesta podría estar en INTOXICACIÓN CELULAR.

La intoxicación celular refleja el elefante parado en medio de tu sala. Nunca lo has visto porque puede llegar a nosotros en cientos de formas, o simplemente pudiste haber nacido intoxicado por tu mama. Muchas madres están intoxicadas de metales pesados como mercurio de sus amalgamas, plomo, o cualquier otra sustancia. Otra intoxicación son las drogas, y se les llama madre toxicómana. El bebé, al formarse, absorbe miles de partículas tóxicas de su madre; de por sí, la mujer pasa por una depuración al dar a luz. Por eso, si la madre es drogadicta hay mayores posibilidades de que ese niño nazca con alguna condición.

Imagínate que naciste sano y las toxinas las absorbes al transcurrir tu vida. En este caso, igual terminas con condiciones. Lamentablemente, en la medicina convencional no existen protocolos de desintoxicación, y no saben cómo hacerlo. Por tal razón, muchos síntomas y condiciones que son provocados por tóxicos, también son tratados con más tóxicos (es decir, con los medicamentos). Es así que tu vida se convierte en una pesadilla, aun cuando buscas de Dios, haces todo bien y generas amor por ti y para los demás.

Es simplemente una tragedia, y Dios no tiene que ver en esto. Él no lo ha creado, sino nosotros mismos con nuestra falta de conciencia. Esta gran lección ha sido la que aprendí en mi proceso de intoxicación con mercurio. Siempre he buscado de Dios y he sentido amor por mi y por los demás, pero cuando me intoxique sentí un descontrol en todo mi cuerpo, especialmente en mis emociones. Aunque había aprendido cómo manejarlas y removerlas, sencillamente no tenía control, lo que afectó todo mi entorno, incluyendo mi matrimonio. En ese momento pensaba que no había más y, para mi sorpresa, desperté a un grado mayor de conciencia a través del dolor. Así que del dolor a la conciencia ha sido un viaje horriblemente hermoso, y no es una contradicción.

Porque la experiencia fue horrible, aunque el resultado sea positivo; como la mujer al dar a luz: mucho dolor, pero una vez nace el niño y está en su pecho, el sufrimiento se desvanece para darte una nueva realidad del momento presente.

Entiendo que muchas personas deberían adentrarse en el mundo del conocimiento y aprender, como parte de su proceso de vida, qué es y cómo funciona su cuerpo. De esta forma se puede manejar y controlar el caballo. Se puede llevar el barco a puerto seguro.

Existen protocolos naturales de desintoxicación celular, desintoxicación de patógenos y hasta de microbiones, los cuales podrían ayudarte a retomar tu salud. En este próximo mes de julio he invitado a Puerto Rico al Dr. Shayne Morris, uno de los científicos de Estados Unidos con mayor conocimiento sobre la desintoxicación celular y microbiones. Morris dará una conferencia, y también ha desarrollado protocolos junto al Dr. Daniel Pompa, los cuales son muy específicos para muchas situaciones y síntomas, donde se han logrado resultados increíbles. Estos son los protocolos que me han devuelto mi salud. Hay un dicho de la tribu Asaro (habitantes de los Highlands en Papúa, en Nueva Guinea) que sencillamente me encanta:

“El conocimiento es solo rumor hasta que vive en los huesos”.

Lo que significa que solo aquel que lo siente es quien lo experimenta, y todo aquel que experimenta algo se le convierte en conocimiento. Por eso siempre recomiendo leer, buscar e inquirir. Así como la Biblia le abre camino a nuestro espíritu, también debemos buscar el camino del cuerpo para mantenerlo balanceado. Si nuestras células se intoxican, nuestros pensamientos también, y por ende nuestras emociones.

Vivimos en un mundo nuevo, diferente al que había, y ahora muchos de nosotros debemos tomar acción de forma distinta para mantenernos sanos. No es posible vibrar en total felicidad y amor con un dolor de intensidad 8, siendo el 10 insoportable. No es un acto de felicidad tenerte que quedar en tu casa porque si sales cualquier cosa te da síntomas. Ahora esa es mi misión: compartir mi experiencia con la mayor cantidad de gente para que puedan retomar su salud.

Aprendí un dicho de alguien a quien amo mucho. Cuando él hablaba, decía ”Créalo quien lo quiera creer, y quien no lo quiera creer, que no lo crea”.

En mi plano personal, yo digo muy humildemente, aunque hubiera sido mejor que lo hubieras creído. Es por eso que hago Facebook live, conferencias, charlas, artículos y todo lo que esté a mi alcance para llevar las buenas nuevas a las personas y que puedan retomar la salud, como lo he logrado yo.