Es triste

Es triste… pero es mi realidad Hace muchos años el país amaneció de Golpe… muchos de nosotros éramos unos niños… y muchos de los que están en la calle, ni habían nacido… Murió mucha gente, cayo un gobierno y se entonó el grito “LIBERTAD”… vimos nuestros canales nacionales bloqueados transmitiendo una grabación de los militares en pro del país… ahora 22 años después, donde quedaron esos militares que querían un país mejor… un país en donde los términos “oligarcas”, “fascistas”, “barrio”, “pobre”, “muerto de hambre”, “rico”, “inseguridad”, “delincuencia”, “inflación”, entre muchos otras, no volverían a sonar en Venezuela, ya que hablaban de unión, de paz y de un país para todos, para la convivencia de todos… donde no importaría las clases sociales, los colores, los partidos políticos, las religiones… pero que nos queda de ese sueño de país, nada de nada… un país dividido, marcado por un color, una tendencia, donde el odio entre hermanos impera… donde nadie sale tranquilo de sus casas… donde no se sabe si se llagara a casa… donde hay que hacer cola para poder comprar, donde en muchos sitios por no aparentar ser rojo rojito ni siquiera te venden alimentos o te los racionan, te dicen que primero son los sectores más necesitados… pero si ahora todos los sectores somos necesitados… y de lo que más necesitamos es de Amor a Venezuela… a que nuevamente nos inculquen respecto, valores, cultura… porque que pasara más adelante cuando los nacidos en revolución se hagan adultos… cuando a estos pobres niños que todos los días escuchan a sus padres hablar de la situación política, donde en televisión ven “PATRIA O MUERTE”, donde es 24 de Diciembre y los padres no pueden darles un juguete, no solo porque algunos no tengan el dinero suficiente, sino porque estamos tan bloqueados que ni eso conseguimos… en relación a esto… en estos últimos días, dado lo que acontece en nuestras calles, los niños y adolescentes han estado en sus casas y las calles de las urbanizaciones cerradas son sus únicas diversión (en las que los GNB no lanzan bombas, ni disparan), pero se les escucha hablar de política, repetir lamentablemente todo la suciedad que se transmite, el odio, las mismas palabras fascista, oligarca, izquierdista, socialista, derechista, marginal, corrupto… esas no son las palabras que quiero que ellos digan, que quisiese uno que aprendieran….

Esos son los hijos de la revolución… admiro de verdad a esos padres que con el corazón en la boca ven a sus hijos salir de sus casas día a día, no ahora en las manifestaciones, sino todos los días, y saber que allá afuera hay inseguridad, odio, desidia… No hablo desde ninguna postura política… hablo desde mi corazón… quiero que se respete a mi Venezuela querida… a mis hermanos Venezolanos… a mi estado… a mi ciudad… quiero que se me respete… respeto moral sobre todo… que mis derechos no sean robados, no sean fusilados, no sean un recuerdo… quiero poder vivir, no sobrevivir… pero en Venezuela… Y hoy más que nunca rezo una plegaria a nuestro Dios, creador, ser supremo, jehova…etc como cualquiera lo quiera llamar por la Paz y la Unión en Venezuela…