HB Magazine Año 02, Número 21
Primera publicación impresa Editada por HORROR BROKERS
Medio de comunicación imparcial. Las secciones de esta revista no aluden a los intereses de ninguna empresa en particular. Horror Brokers se deslinda por completo de cualquier conflicto de intereses que puedan existir entre cualquier personaje, empresa o asociación que sea publicada en esta revista. Horror Brokers funge como un medio de comunicación especializado en real estate y su único objetivo es entretener. No nos hacemos responsables por las opiniones divididas que nuestro contenido pueda causar. Las opiniones de los entrevistados no reflejan el punto de vista de Horror Brokers. Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta edición sin previa autorización.
Los saludo muy agradecido como todas las ediciones de esta revista, en verdad muchas gracias por leernos y por hacer de esta revista la más leída en el ramo inmobiliario en Riviera Maya.
En esta edición les presentamos los personajes que han hecho del real estate en Riviera Maya un mercado sólido y lleno de oportunidades. Estos “Sharks” son los fundadores de las empresas más consolidadas y con mayor prestigio dentro del Caribe Mexicano.
Han traído modelos novedosos de negocios de otras partes del globo terráqueo a la jungla maya , tropicalizándolos y haciéndolos rentables.
Sin duda alguna será una revista que disfrutarán mucho, espero poder saludarlos pronto.
Victoria Lugo Negrete Editor en jefeDaniel CEO&FOUNDER.
Fue hace siete años que la italiana Alessandra Luchetta vivió la experiencia de su primera venta, la cual le dejó una gran enseñanza a la ahora directora comercial de GMB, esta es su historia: Alessandra contó que un asesor le estaba enseñando todo lo referente a las ventas cuando tuvo contacto con sus primeros clientes, una pareja holandesa: “entré en poco en pánico, me faltaba mucho por aprender, aún así fui honesta, les aclaré que era nueva, pero los iba a ayudar en todo lo que necesitaran, ellos también eran nuevos invirtiendo”.
Aunque era novata en las ventas, sí contaba con experiencia en bienes raíces pues se desempeñó como abogada corporativa, lo cual le ayudó a dar un feliz cierre a esta historia.
“Como pude le enseñé el proyecto que según yo era perfecto, respondía a sus necesidades y me los llevé a Aldea Zamá para que lo conocieran, cabe destacar que me perdí un millón de veces (risas)… pero lo encontramos, regresando a la oficina me preguntaron sobre temas legales: cómo un extranjero podía comprar en México, impuestos, todo lo legal alrededor de bienes raíces, ese era mi expertice porque venía de eso, yo era abogada corporativa, entonces empecé a decirles todo con mucha seguridad y a darles esa tranquilidad desde el punto de vista legal…”, relató.
“El expertice que tenía les dio a los clientes tranquilidad para invertir, empatizamos y confiaron en mí… cuatro días después cerraron el trato. Hoy en día ellos son mis mejores clientes… ellos y yo éramos novatos y nos volvimos expertos, hay mucha confianza entre nosotros”.
Alessandra compartió la experiencia que su primera venta le dejó: “que la confianza y la empatía son pilares de las ventas, las llamadas soft skills que cualquier asesor tiene que dominar, a eso solo le falta agregar conocimiento, experiencia y una buena organización para volverte imparable, esa es la moraleja de la historia”.
Blanca Capital nace de la fusión de la conceptualización, el diseño y la arquitectura pensada estratégicamente para atraer y satisfacer las necesidades de las personas más exigentes del mundo. Su esencia se encuentra protegida por la mente. Conceptualizador Orlando Aguilar (alma); CEO Ángel Llobet (cuerpo); diseñador Isaac Gutiérrez, y sus tres cofundadores originarios de Cuernavaca, unidos por el amor y la pasión a la arquitectura, la experiencia y sobre todo, la más alta rentabilidad.
Blanca Capital es una empresa holística fundada hace tres años que ha revolucionado el mundo del sector inmobiliario de la Riviera Maya con una acelerada expansión y generando la más alta rentabilidad para sus inversionistas gracias al expertise y pasión de cada uno de sus colaboradores.
‘Blanca family’ se afianza por su pasión al sector inmobiliario
Señalaron que uno de sus proyectos más icónicos ha sido Jungle Paradise, el cual tuvo un éxito sin precedentes, logrando un sold out en tiempo récord, diseñado con la pura esencia de Tulum dentro de un espacio nórdico-mexicano, en un entorno selvático paradisíaco. Blanca Capital ha logrado ofrecer un modelo de inversión con la más alta rentabilidad y su cuarto desarrollo es el claro ejemplo: Jungle Oasis, exitoso proyecto con 33 unidades a menos de cinco minutos de la playa, con el diseño más exquisito en Tulum. “Gracias a todo el éxito obtenido y con mucha emoción les compartimos nuestro próximo proyecto en puerta llamado Wabi, el primer proyecto wellness en Tulum, 22 photo opportunities, spa doble altura, 33 amenidades, será impresionante”.
El CEO y fundador de Enrique Domínguez Real Estate Innovation, Enrique Domínguez, lleva 28 años en la actividad inmobiliaria, inició como agente, después se convirtió en socio estratégico de importantes fondos y hoy es un destacado desarrollador. Al respecto, comentó: “Busco generar productos disruptivos que lleguen a romper el mercado de lo que está pasando en la zona, atacando áreas que algunos desarrolladores han omitido o no han visto en la zona, he tenido la oportunidad de participar en un número importante de proyectos y de ahí podemos visualizar cuáles son estás áreas de oportunidad con toda esta visión global que hoy en día nos permite tener un mayor acceso a nuevos mercados”.
Destacó que apuesta a formatos nuevos, como SADHU, enfocado en la salud y el bienestar, “lo desarrollo en una zona en la cual no se venía desarrollando de una manera importante, lo cual me permite ser
congruente con el concepto y el entorno”. Aseguró que estar siempre un paso adelante lo ha llevado a ser un “Shark” inmobiliario en la Riviera Maya, “creo que la experiencia es la que te permite visualizar hacia dónde vamos, hacia dónde va el destino, hacia dónde vamos como agentes inmobiliarios y como desarrolladores, estar a la vanguardia y un paso adelante de lo que está sucediendo en el mercado”. Sobre la etapa profesional que vive actualmente destacó: “Para trabajar con un desarrollador en el tema comercial busco que exista una congruencia entre lo que se comunica, lo que se hace y lo que se opera al final del día, estamos viendo muchos proyectos que tienen muy agresivos sus esquemas de marketing, pero al momento que entran en operaciones vemos ciertas debilidades, en esta etapa de mi vida profesional busco encontrar una congruencia entre lo que es y lo que tiene que ser”.
“En esta etapa de mi vida profesional busco encontrar una congruencia entre lo que es y lo que tiene que ser”
Constancia, disciplina, gran olfato para los negocios y sobre todo siempre estar abierto a los cambios son las herramientas que han llevado a Marc Pujol a ser uno de los “Sharks” del real estate en la Riviera Maya. El español nos abrió las puertas de su oficina para contarnos su historia y cómo nació Gama Master Broker (GMB) empresa referente en el ecosistema inmobiliario del Caribe Mexicano. Marc Pujol siempre ha sido un hombre trabajador. Desde los 9 años de edad colaboró en la empresa familiar y desde entonces se empapó en todo lo referente al mundo de la hotelería. Estudió dirección de empresas hoteleras y un MBA.
Marc decidió buscar su camino lejos de la empresa familiar y entró a Grupo Vivendi, “en un parque de Universal Studio, en el área de marketing, crecí hasta ser director de ventas de Europa, liderar el lanzamiento y apertura de varios parques, y antes de salir tuve la oportunidad de abrir Ferrari Land, solo hay dos en el mundo”, recordó.
Mientras su carrera en el ámbito hotelero iba en ascenso y era reconocida en su natal España, el empresario decidió compartir su conocimiento y se desempeñó como profesor universitario, “todas estas historias en mi carrera profesional fueron marcando mi camino”.
A principio de los 90’s el auge del Caribe Mexicano daba sus primeros destellos como destino estrella al igual que la carrera de Pujol, quien fue contratado por un importante grupo hotelero, “empezamos una nueva cadena hotelera, me tocó todo el proceso hasta que el director general se muda a Cancún, yo era el director
comercial… me quedo solo, estaba muy joven, 24-25 años, así que me rodee de gente de confianza para ocupar puestos claves en el hotel, viajaba dos veces por semana para dar clases, era mucho trabajo pero a la vez fue una etapa muy divertida”.
Con una exitosa carrera y la vida resuelta, Marc tuvo que tomar una decisión que, sin saber, marcaría su carrera, mudarse a la Riviera Maya. “El director general con el que había trabajado me ofrece trabajar en Cancún, pues el hotel en donde estaba había comprado mucha tierra en este lugar… yo decía: ‘lo mío son los hoteles, a ver cómo me adapto en el tema inmobiliario’”. Con mente abierta y muchas ganas de aprender, empezó a trabajar en Gran Coral, hoy Corasol, donde estuvo siete años y tuvo la oportunidad de colaborar en grandes proyectos, como el que realizó con la reconocida golfista tapatía Lorena Ochoa (Lorena Ochoa Residences).
El CEO y fundador de GMB, un “Shark” inmobiliario del Caribe Mexicano
En sus constantes viajes a Guadalajara, Marc conoció a su esposa Paulina Lizárraga, a quien considera su mano derecha y el motor detrás de todos sus logros, y con quien decidió iniciar su propia empresa. “Arranqué GMB en 2007, pero en 2008 viene una caída inmobiliaria, decido volver a la compañía donde trabajaba, donde vivo una etapa de mucho crecimiento… en el 2012 retomo mi empresa… Empezamos primero con los productos de ANAH, empezamos con un proyecto de 100 departamentos, el primero grande en Playa del Carmen, hicimos todo el marketing, la historia, el show… 60 unidades los vendimos en 90 días… luego lanzamos 300 unidades en Bahía Príncipe y las primeras 100 las vendí en 4 meses, luego traemos a International Living que es una empresa inglesa-americana que se dedica a traer jubilados, yo fui el que los trajo a México y empecé una relación con ellos”.
“Me siento muy orgulloso de lo que GMB ha hecho porque siempre dejamos huella”
Era tiempo de dar un paso más en su carrera y decide convertirse en master broker, lo hace rodeado de los mejores… “levantamos 50 millones de dólares e hicimos en ese inter 500 mdd en proyectos, de 2014-2018, vendí 30 proyectos, todo fue un gran aprendizaje”.
“Llevamos 64 desarrollos terminados, rozamos los mil millones de dólares en proyectos. Tenemos 9 proyectos con GW, firmamos con Inmobilia, haremos un proyecto espectacular con Tulum Country Club, regresaremos a hacer proyectos muy interesantes a Playa del Carmen, Cancún, a desarrollar AXCABA en Tulum y estamos por lanzar GMB Capital, que va a agarrar pocos proyectos sin grandes riesgos y esa será la siguiente etapa… Ese es el juego donde visualizo el nuevo real estate: un poquito de capital semilla y siempre tratar de tener la tierra”.
“Estamos en la etapa más madura de la empresa, grandes grupos nos buscan porque saben cómo trabajamos, traemos 1500 viviendas en proceso… podemos elegir con quién sí y con quien no trabajar… queremos personas que compartan nuestros pilares: honestidad, crear experiencias positivas e impactar al territorio”.
Nicolás Taiana, socio fundador y director comercial de Tulum Real Estate, tiene claro que la honestidad y lealtad son valores que lo han llevado a ser un “Shark” inmobiliario. Con mochila en mano, “Nico” visitó por primera vez la Riviera Maya en 1993 y se enamoró de este paraíso. Como él mismo señaló, aquí encontró su lugar en el mundo y decidió empezar una nueva vida, “en el 2002 finalicé mi contrato de trabajo en Estados Unidos y me mudé a Tulum”. En el año 2007, junto a unos amigos creó un portal de turismo, sin embargo, la inquietud de este argentino lo llevó al sector inmobiliario: “Puse un menú de bienes raíces, no tenía propiedades en venta, saqué fotos a la casa que rentaba y a un terreno baldío, no estaban en venta era solo una prueba, me contactó un cliente, quería viajar a ver la casa”.
Fue así que logró su primer cliente y abrió el camino para una fructífera carrera: “Todo fluyó y mis clientes del portal de turismo me empezaron a contactar para poner en venta sus propiedades, así armé mi cartera de propiedades y clientes. En el 2011 vendí mi parte del portal y me dediqué al 100% a bienes raíces. Hoy cuento con mis excelentes socios, Christian Bailleres y Pamela Linares, que son los pilares en nuestro crecimiento y un excelente equipo de agentes inmobiliarios”. Resaltó que para ser un “Shark”, además de la constancia y aprender de los errores, hay puntos que no son negociables: “la lealtad y la verdad, si uno hace las cosas honestamente todo fluye, cuando hago negocios siempre digo la verdad, sea colega, cliente, desarrolladores, etc. Que una persona crea en ti, que le transmitas confianza y se sienta protegida no tiene precio, la verdad es una herramienta muy poderosa”.
“Para hacer negocios busco excelencia en calidad, valor humano y proyección para futuras operaciones”
Vio una gran oportunidad de negocio en el sector inmobiliario y la tomó, así es como el notario titular de la Notaría 90, Ricardo Dehesa, se ha consolidado como un “Shark” en la Riviera Maya.
“Soy un eslabón más del real estate, el que da la seguridad jurídica al traslado de dominio en las transacciones inmobiliarias, tengo 21 años en Solidaridad, primero tuve un despacho que se llamó Certeza Legal y litigaba cuestiones inmobiliarias, después fui notario auxiliar de la Notaria 76 y ahora tengo 6 años y medio como notario titular de la Notaría 90”.
Al ver el auge del sector, Dehesa enfocó sus esfuerzos para ser uno de los mejores en su área: “Vi una oportunidad de negocio en la parte jurídica inmobiliaria ya que el sector inmobiliario es el segundo bastión económico de nuestro Estado, después del turístico, van casi de la mano y crecieron a la par, había campo
de trabajo para todos los que llegábamos y así me fui relacionando con todos los sectores que tienen que ver con el ámbito inmobiliario”. Aseguró que la actitud de servicio es el pilar fundamental de su trabajo y es lo que busca en las empresas con las que entabla negocios: “lo que busco siempre es dar un buen servicio, un servicio de excelencia, nuestro lema es: ‘el servicio en equipo es nuestra fortaleza’, y lo mismo busco con los desarrolladores, empresas inmobiliarias, master broker y brokers independientes con los que hago sinergia laboral, que tengan esos mismos valores de servir, de comprometerse y llevar de la mano el proyecto hasta su último eslabón que es la escrituración o fideicomiso”. Dehesa destacó que entre sus planes a futuro se encuentran: “ser un referente en el derecho inmobiliario en mi país, eso es lo que visualizo para la notaría”.
Su visión lo ha llevado a ser un “Shark” en el ámbito inmobiliario
“La vocación de servir siempre es lo que me ha distinguido, voy por la vida haciendo las cosas de manera diferente y buscando la excelencia”
Alos 21 años Sergio de la Torre inició su carrera en el sector inmobiliario en la Ciudad de México, hizo sus pininos en el tiempo compartido, donde descubrió su habilidad y amor por las ventas.
“Empecé vendiendo un hotel en Nuevo Vallarta… descubrí que era bueno para vender, que tenía facilidad, puse una oficina, vendí un terreno y fue cuando dije: ‘esto de las bienes raíces me gusta y me voy a dedicar a esto’”, y así lo ha hecho desde hace más de una década, tiempo en que ha tenido la oportunidad de desarrollar grandes proyectos.
El CEO y Fundador del grupo Inmobiliario de la Torre narró que, tras una exitosa carrera inmobiliaria en la Ciudad de México, donde tuvo la oportunidad de enfocarse en la reingeniería financiera y jurídica de proyectos, se trasladó a Mérida donde empezó su etapa de desarrollador. Tras su paso por la llamada “Ciudad blanca”, Sergio cambió su residencia a Playa del
Carmen, donde realizó importantes proyectos, como “la reingeniería de un proyecto que eran departamentos y terminó siento hotel”. Después de una etapa con socios, Sergio, decidió continuar su camino solo. Aseguró sentirse muy orgulloso de su más icónico proyecto hasta hoy: Kuyabeh, “porque hemos logrado hacer una comunidad ecológica sustentable dentro de un régimen de condominios, es un proyecto único porque nuestros preceptos son salvaguardar la selva maya”. Recalcó que la clave para ser un “Shark” es siempre escuchar a la gente, pues es la única forma de saber qué es lo sueñan y poder materializar ese anhelo. Otra herramienta que le ha permitido destacar en el ámbito inmobiliario es rodearse de gente que comparta sus mismos valores: “tanto con socios como con colaboradores siempre busco trabajar con personas que compartan los mismos valores, que quieran hacer algo que aporte a la sociedad”.
“Mi legado será haber hecho una comunidad como Kuyabeh”
