9. Reflexiones - Reforestar desde la comprensión del Paisaje
La mirada que une Naturaleza y Cultura
Francisco Marco aeje2011@gmail.com
Si valoramos a la Naturaleza únicamente como medio de desarrollo de la vida humana, porque solo nos preguntamos qué podemos percibir de ella, qué recursos nos proporciona y cómo los vamos a extraer, nos hemos equivocado, hemos formulado las preguntas inadecuadas.
Nuestra visión materialista del medio natural ignora por completo los límites de los recursos que obtenemos de la Tierra.
Las cuestiones que debemos afrontar son muy claras, ante la pérdida alarmante de biodiversidad, ante la creciente degradación y continua fragmentación de los ecosistemas naturales, ante las consecuencias nefastas que ya sufrimos por los múltiples efectos negativos del cambio climático que provocamos con nuestras acciones,…, ¿qué estamos haciendo por la conservación de la Naturaleza? ¿cuáles son nuestras prioridades de cara al futuro? ¿nuestro crecimiento y desarrollo económico es infinito? La respuesta a todas estas cuestiones puede resultar compleja pero… si sabemos que la Naturaleza es la respuesta, ¿qué importan las preguntas?
En primer lugar debemos entender que la Naturaleza es valiosa en sí misma y por sí misma. Recuperar el equilibrio ecológico de los ecosistemas y de su diversidad biológica es una necesidad urgente. Cuidar de la Naturaleza, en definitiva, significa cuidar de nosotras mismas, porque somos parte de ella y reconocer con humildad nuestras limitaciones nos hace tomar conciencia de que somos una especie interdependiente e interrelacionada por completo con la Naturaleza que le rodea, con su medio y con las formas de vida que alberga cada rincón del Planeta.
Cuando hemos sido capaces de trabajar con la Naturaleza y no contra ella, cuando hemos valorado su riqueza y hemos aprovechado sola una parte de los recursos que nos proporciona, pero sin comprometer su disponibilidad para las generaciones futuras y para el sustento de la vida, solo entonces, hemos sabido crear, con su inestimable ayuda, paisajes resilientes que perduran en nuestra memoria. Paisajes que son fruto del esfuerzo de mucha gente que ha sabido comprenderla, que ha trabajado a su favor desarrollando una cultura vinculada a su conservación.
Debemos seguir trabajando en educar la mirada del paisaje, una mirada que permita conocer nuestro vínculo con la Naturaleza, que nos descubra sus secretos y su riqueza, un conocimiento
La restauración de los paisajes vegetales en el semiárido español
imprescindible para restaurar su equilibrio y para restaurarnos como personas, como individuos y como sociedad, desde el compromiso y la acción que suponen los trabajos de reforestación.
Estudiar y entender el paisaje contribuye a sentirse parte del mismo, a querer colaborar y cooperar en las labores de reforestación, para conseguir hacer realidad una verdadera participación activa de los diferentes actores sociales que forman parte del territorio.
Estudiar y entender el paisaje posibilita, al mismo tiempo, reforestar con criterios técnicos y científicos basados en la Restauración Ecológica, una garantía fundamental para lograr el éxito de los trabajos realizados.
El paisaje une sociología y ecología, une tradiciones y lugares, nos relaciona con lo que somos, cultura y natura.