¡Por
un futuro alimentario sostenible! (22 de Noviembre Inicio del AIAF)
Lect. 1: El 2014 fue declarado el Año Internacional de la Agricultura Familiar (AIAF). Lo ha decidido, al final del año pasado, la Asamblea General de las Naciones Unidas bajo la presión de 360 organizaciones no gubernativas de más de 60 países. Es un basto movimiento de opinión que se bate, contra el acaparamiento de las tierras por parte de las multinacionales de la agro-industria, y la dificultad de acceso a los recursos productivos (tierra, agua, semillas de calidad, instrumentos) por parte de los pequeños criadores y de los productores agrícolas. La Agricultura Familiar es pieza clave en la lucha contra el hambre y la pobreza, habida cuenta que en los países en desarrollo existe una población agrícola entre el 50 y el 80%. Sin duda, el tema de las inversiones agrícolas a nivel familiar es crucial. Guía:
Comenzamos nuestra oración manifestando nuestra fe. Creemos Padre, que tu has creado la tierra para todos y que de barro nos hiciste — y creemos, en la fuerza de tu acción creadora, que nos has dado la capacidad para cuidarla y compartirla, sin poseerla ni dominarla. Creemos Jesucristo, que con tu encarnación asumiste nuestra misma tierra, la misma historia y la misma esperanza, y nos hiciste hermanos y hermanas, familiares de Dios — y creemos, que con la fuerza de tu encarnación, que todos estamos llamados a servir a la vida y a todo aquello que sea necesario para su cuidado y para el uso sostenible y solidario de los recursos. Creemos, Espíritu de Amor, que eres el aliento del Dios vivo que fecunda la tierra y construye la comunión, — y creemos, que con la fuerza de tu presencia vivificadora en la historia, que cada persona de buena voluntad puede garantizar la integridad de nuestra Casa Común y comprometerse en promover políticas económicas éticas que favorezcan la inclusión, la soberanía alimentaria y el comercio justo. Guía: Escuchemos algunos fragmentos de la «Carta de Brasilia a los trabajadores del campo», del III Congreso Nacional del Movimiento de los Trabajadores Rurales sin tierra, para tener su imagen delante de nuestros ojos y su voz en nuestro corazón. (Proyección de imagenes de “Family Farming”) Lect. 2 :
“A quien pregunte quienes son los trabajadores sin tierra, díganles: Somos los hijos de la tierra. Hombres, mujeres y niños que luchan y sueñan con que todos tengan tierra. Tantos no tenemos todavía el derecho a la tierra por la fuerza de las alambradas. Por la sórdida fuerza del dinero. Somos hombres y mujeres de paz. Somos la mano humana que fecunda la tierra. Somos aquellos que hace años aprendemos a escuchar el trabajo de la semilla. Leemos, en la caligrafía de los vientos y de las estaciones, el tiempo de plantar y el tiempo de cosechar. Somos los que conocen la flor y el fruto. 1