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Mes de abril de 2020 NUESTRA FE, ¿EN CUARENTENA? La pandemia causada por el Covid-19 nos está mostrando lo importante que son las actividades sociales, las cuales se las extraña. Las reuniones familiares, las relaciones de parejas, los cultos, las fiestñas, las juntadas, las charlas de café, etc. son actividades que están tan incorporadas en nuestra vida que de repente la cuarentena ha evidenciado la necesidad de volver a aquellas actividades, o no. En el campo de la fe, la cuarentena ha evidenciado ciertas limitaciones en la vida de fe comunitaria, así mismo ha potenciado otras. Vivir la fe en este tiempo de cuarentena, por un lado, ha potenciado la relación personal con Dios a través de la oración, la lectura de la palabra, música, etc. Por otro lado, ha evidenciado la limitación de la vida comunitaria, como reuniones culticas, campamentos, reuniones juveniles, estudios bíblicos, etc. Todos estos fenómenos sociales de alguna manera cuestionan y desafían a las actividades de la comunidad eclesial, así también la vida de fe y su teología. A esto se suma la realidad virtual y tecnológica que surge como una posible respuesta a todas estas limitaciones comunitarias. Las redes sociales están fortaleciendo la vida comunitaria de otra manera distinta a la de la presencial. Incluso el mensaje evangélico está llegando a lugares que no llegaba por medio del mensaje del púlpito. Esta realidad está potenciando nuevas maneras de transmitir el mensaje evangélico y de cuidar la relación comunitaria de la fe. Sin embargo, las resistencias a dichas redes se dan por la falta de acceso, la falta de capacitación, miedo a nuevas formas de comunidad o por rigidez personal. Estos y otros motivos de resistencia a nuevas formas de expresión de fe están sostenidas por una(s) posición(es) teológica(s). Sin adentrarnos en especificar cada posición teológica que sostiene las resistencias de diálogo con las nuevas realidades virtuales y tecnológicas, como por ejemplo las redes sociales y grupos de chats, propongo pensar una clave hermenéutica que nos permita discernirlas, desde la fe cristiana. Para ello, buscaremos en la singularidad de nuestros testimonios de fe dos elementos que nos posibilitarán el camino de diálogo y recreación en nuestra vida de fe personal y comunitaria. La crucifixión y la resurrección de Cristo son don hechos fundantes de nuestra fe cristiana. La Pascua nos trae a la memoria la resurrección del crucificado. Ambos están completamente relacionados, una no puede ser entendida sin la otra y viceversa. No hay resucitado sin el crucificado y es trágico entender al crucificado sin la esperanza de la resurrección. La crucifixión se usaba como castigo a los que habían cometido determinados delitos. A Jesús lo llevaron, aunque no había cometido ningún delito, pero lo sentenciaron como un rebelde. Quedarnos solamente con la cruz implica el mayor fatalismo de la vida y obra misionera de Jesús. La cruz sola es llorar por lo que no pudo ser, sería la tragedia de la fe y el fin de toda obra misionera. Es echar culpas y lamentarse por lo que no pudo ser. La resurrección es la promesa de Dios a una nueva vida. Pensar aisladamente la resurrección es esperar pasivamente la nueva vida sin tener injerencia sobre la historia. La resurrección es posible en cuanto hubo un crucificado.
La Cruz y la Resurrección de Cristo son una crítica a los sistemas de opresión e injusticia. La cruz evidencia la injusticia y el deterioro de la vida y la convivencia. Y la resurrección es la posibilidad de una nueva vida que dignifica a las personas. Ambas critican los sistemas de discriminación, violencia y maltrato, poniendo en cuestión el egoísmo y el poder que destruye vidas. Así mismo proyecta una nueva vida para la creación toda. Pastor Bladimir Coro
PADRENUESTRO Hoy, al iniciar la mañana mientras oraba vino a mí un extrañar el sentir compartido de la oración comunitaria. Ahí me di cuenta que el Padrenuestro es un oración en donde Jesús nos desafía como comunidad de fe. Qué diferente sonaría si fuera Padre mío que estás en los cielos… venga tu reino a mi…, dame el pan mío de cada día…, perdona mis deudas así como yo perdono a mis deudores…, no me dejes caer en tentación… líbrame del mal… Suena como alguien que está metido para adentro, para satisfacer sus propias necesidades, atender sus propios males, encontrar un equilibrio netamente personal. Pero no fue así cuando Jesús pensó en educarnos sobre cómo orar. Lo pensó de una manera comunitaria. El Padre de todos, aquel que nos abraza y a quien le pedimos entre todos que Venga su Reino, es El que nos convoca como pueblo. Como suele ocurrir, cuando a uno le empieza a faltar algo es cuando más lo empieza a valorar, y en estos días de cuarentena posiblemente empecemos a extrañar el encuentro cara a cara, el abrazo del hermano, el saludo de la paz, el mirarnos a los ojos. Si esto ocurre, es una buena señal, pero si no, habrá que revisar cuál es el vínculo que construyo con mi hermano, mi hermana. Por donde pasa, el Nuestro, el ser comunidad. Entre las cosas que circulan por las redes estos días me llegó la experiencia de cómo viven el ser comunidad algunas aldeas africanas donde prevalece “el nuestro” por encima de la satisfacción en lo personal. Cuánto tenemos que aprender de ellos, y qué lejos estamos. Cuando Jesús vino a esta tierra fue justamente para mostrarnos que la salvación El nos la da con su entrega, principio para vivir. El es nuestra inspiración. Para vivenciar el “nuestro” es indispensable entender esto. La identidad colectiva como cuerpo que cree, que siente y se resiente cuando a alguien le pasa algo, es lo que identifica a la comunidad cristiana. Es su sello. Estos días podrán ayudarnos el contacto virtual y bienvenido sea, lo que no podemos perder es el sentido de cuerpo. Padre Nuestro! Venga a nosotros tu Reino!! Lita Sanahuja - Marzo 2020
LA ORUGA Una pequeña oruga caminaba un día en dirección al sol. Muy cerca del camino se encontraba un saltamontes. – ¿Hacia dónde te diriges? – le preguntó -. Sin dejar de caminar, la oruga contestó: -Tuve un sueño anoche: soñé que desde la punta de la gran montaña yo miraba todo el valle. Me gustó lo que ví en mi sueño y he decidido realizarlo. Sorprendido, el saltamontes dijo mientras su amigo se alejaba: – ¡Debes estar loco! ¿Cómo podrás llegar hasta aquel lugar? ¿Tú? ¿Una simple oruga? …. una piedra será una montaña, un pequeño charco un mar y cualquier tronco una barrera infranqueable… Pero el gusanito ya estaba lejos y no lo escuchó, su diminuto cuerpo no dejó de moverse. De pronto se oyó la voz de un escarabajo: – ¿Hacia dónde te diriges con tanto empeño? Sudando ya el gusanito, le dijo jadeante: – Tuve un sueño y deseo realizarlo, subir a esa montaña y desde ahí contemplar todo nuestro mundo. El escarabajo no pudo soportar la risa, soltó la carcajada y luego dijo: – Ni yo, con patas tan grandes, intentaría realizar algo tan ambicioso. Y se quedó en el suelo tumbado de la risa mientras la oruga continuó su camino, habiendo avanzado ya unos cuantos centímetros. Del mismo modo la araña, el topo y la rana le aconsejaron a nuestro amigo desistir. – ¡No lo lograrás jamás! Le dijeron, pero en su interior había un impulso que lo obligaba a seguir. Ya agotado, sin fuerzas y a punto de morir, decidió parar a descansar y construir con su último esfuerzo un lugar donde pernoctar. – Estaré mejor. Fue lo último que dijo y murió. Todos los animales del valle fueron a mirar sus restos, ahí estaba el animal más loco del campo, había construido como su tumba un monumento a la insensatez, ahí estaba un duro refugio, digno de uno que murió por querer realizar un sueño irrealizable. Una mañana en la que el sol brillaba de una manera especial, todos los animales se congregaron en torno a aquello que se había convertido en una advertencia para los atrevidos. De pronto quedaron atónitos, aquella concha dura comenzó a quebrarse y con asombro vieron unos ojos y unas antenas que no podían ser las de la oruga que creían muerta, poco a poco, como para darles tiempo de reponerse del impacto, fueron saliendo las hermosas alas de mariposa de aquel impresionante ser que tenían en frente, el que realizaría su sueño, el sueño por el que había vivido, por el que había muerto y por el que había vuelto a vivir. Todos se habían equivocado…Dios nos ha creado para conseguir un ideal, vivamos por él, intentemos alcanzarlo, pongamos la vida en ello y si nos damos cuenta que no podemos, quizá necesitemos hacer un alto en el camino y experimentar un cambio radical en nuestras vidas y entonces, con nuevos bríos y con la gracia de Dios, lo lograremos. «El éxito en la vida no se mide por lo que has logrado, sino por los obstáculos que has tenido que enfrentar en el camino». Liliana Contino – Aporte del cuento CUMPLEAÑOS DE ABRIL 07 Gustavo Romero 10 Lydia Di Crocce de Santos 14 Ricardo Giordano 20 Jordi Domenech 30 Gerardo Sivieri
DAMOS GRACIAS… Damos gracias a Dios porque, en medio de esta pandemia que nos impide reunirnos, podemos hacerlo a través del grupo de whatsApp, de los mails, de los llamados telefónicos. Y podemos compartir nuestra fe a través de los cultos por Facebook: www.facebook.com y entrar en Congregación Unida El Buen Pastor Colegiales Estos cultos online nos ayudan a generar comunión. No nos sentimos solos porque Dios está con nosotros y también estamos acompañados los unos con los otros. Damos gracias porque Dios hasta aquí nos ha cuidado y nos ha protegido. Gracias Señor porque tenemos un lugar donde vivir, alimento para nuestros cuerpos y fe y esperanza en Ti´ Te pedimos Señor por los que no tienen trabajo, por los que no tienen comida, por los que no tienen vivienda, por los que tampoco tienen esperanza, por los que no te conocen. Señor te pedimos que seamos generosos, que ayudemos al que está sufriendo en este momento Te pedimos por los niños que tienen que vivir esta situación, por los que sufren violencia en sus casas, por los niños que viven en los hogares, por los que viven en la calle, por los hijos de padres separados, por los que no tienen qué comer. Te pedimos también por los enfermos de coronavirus, por sus familias, por los que han perdido a algún familiar. Padre no olvides a los médicos, enfermeros, personal de sanidad, personal de seguridad, recolectores de basura y a todos aquellos que deben dejar sus casas para atender a otros. Cuídalos Señor. Te pedimos Señor por cada uno de nosotros, nuestros hijos y nietos, nuestras familias, por nuestro país y el mundo. ¡¡¡AMÉN!!! Angélica Arnejo
LECTURAS BÍBLICAS: DOMINGOS DE ABRIL
Domingo 5 - Domingo de Ramos Zacarías 9:9-10 Salmo 118:1-2,19-29 Filipenses 2:5-11 Mateo 21:1-11
Domingo 12 - Resurrección Jeremías 31:1-6 Salmo 118:1-2,14-24 Hechos 10:34-43 Juan 20:1-18
Domingo 19 Hechos 2: 14ª,22-32 Salmo 16: 1° Pedro 1:3-9 Juan 20:19-31
Domingo 26 Hechos 2: 14ª,36-41 Salmo 116:1-4, 12-19 1° Pedro 1:17-23 Lucas 24:13-25
RED ECUMÉNICA DE ESTUDIOS TEOLÓGICOS – Programa REET El domingo, 8 de marzo, se celebró el culto de acción de gracias por el comienzo del ciclo lectivo 2020 del Programa REET (Red Ecuménica de Estudios Teológicos). Nuestra Iglesia Discípulos de Cristo (IDC) forma parte de la REET junto con la Iglesia Evangélica del Rio de la Plata (IERP), Iglesia Evangélica Valdense del Río de la Plata (IERVA), Iglesia Evangélica Luterana Unida (IELU) e Iglesia Anabautista Menonita de Buenos Aires (IAMBA). Compartir un culto con la presencia de la REET nos motivó, por un lado, de responder a las necesidades actuales de las iglesias a través de la capacitación teológico-ministerial; por el otro, buscar un espacio de estudio e investigación en teología, religión y sociedad. La REET ofrece diversos cursos en el campo de la teología y la pastoral mediante la modalidad a distancia o semipresencial, combinando la utilización de una plataforma de estudios a través de internet con espacios intensivos de presencialidad. Agradecemos a todas las personas que estuvieron presentes acompañándonos en el culto La Dra. Kathleen Griffin, Dr. Daniel Beros, Dra. Marisa Strizzi, Dr. Álvaro Michelin Salomón. Así mismo quienes nos acompañaron en la distancia y en el mismo espíritu Dr. Alan Eldrid y Dr. Dario Barolin. Especialmente al Pastor Álvaro Michelin Salomón que nos acompañó con el mensaje bíblico y al Pastor Bladimir Coro con la liturgia.
M. Cristina P. de Maceratesi - mcristinaparodi@yahoo.com.ar Pastor Bladimir Coro- www.iglesiaencolegiales.com.ar iglesiaencolegiales@gmail.com
ACTIVIDADES DE ABRIL Domingos 10.30 hs Culto de adoración – Santa Cena En tiempo de cuarentena-Culto del pastor Bladimir Coro online en Facebook (ver dirección en “Damos gracias”)
Todas las demás actividades que se realizan regularmente se reanudarán cuando finalice la cuarentena.
ESPERANZA Cuando la tormenta pase Y se amansen los caminos y seamos sobrevivientes de un naufragio colectivo. Con el corazón lloroso y el destino bendecido nos sentiremos dichosos tan sólo por estar vivos. Y le daremos un abrazo al primer desconocido y alabaremos la suerte de conservar un amigo. Y entonces recordaremos todo aquello que perdimos y de una vez aprenderemos todo lo que no aprendimos. Ya no tendremos envidia pués todos habrán sufrido. Ya no tendremos desidia Seremos más compasivos.
Entenderemos lo frágil que significa estar vivos sudaremos empatía por quien está y quien se ha ido. Extrañaremos al viejo que pedía un peso en el mercado, que no supimos su nombre y siempre estuvo a tu lado. Y quizás el viejo pobre era tu Dios disfrazado. Nunca preguntaste el nombre porque estabas apurado. Y todo será un milagro Y todo será un legado Y se respetará la vida, la vida que hemos ganado. Cuando la tormenta pase te pido Dios, apenado, que nos devuelvas mejores, como nos habías soñado.
Valdrá más lo que es de todos Que lo jamás conseguido Seremos más generosos y mucho más comprometidos. POEMA DE ALEXIS VALDÉS, comediante cubanoEscrito en marzo de 2020