6. Premsa, internet i xarxes socials

L’IEMed ha consolidat les bones pràctiques i experiència acumulades durant l’any 2020, marcat per la pandèmia, per oferir en línia l’activitat que tenia programada, tant de cicles de conferències com actes diversos de l’IEMed i dels projectes a escala local i internacional que du a terme. Ho ha fet, a més, durant el mateix any en què ha publicat un web corporatiu que ofereix una imatge renovada de l’Institut a la xarxa.

Un any més, ha seguit de prop temes cabdals per a la regió com les migracions, els conflictes regionals, la política exterior europea a la regió, l’extremisme violent, la promoció del desenvolupament socioeconòmic de la regió, la lluita per la igualtat de gènere a la Mediterrània... D’aquests i d’altres fets i tendències que afecten la regió, l’IEMed ha continuat oferint-ne, tant a les institucions com a l’opinió pública, les claus i les anàlisis necessàries per poder interpretar-los.

Ho ha fet, com sempre, a partir de la celebració de conferències, seminaris i trobades retransmeses en línia que han començat a tenir lloc també presencialment a partir de la tardor. Però també amb la difusió en línia dels continguts de les publicacions de l’IEMed: l’Anuari de la Mediterrània, afkar/ideas, Quaderns de la Mediterrània, els articles Focus o els papers i anàlisis breus en col·laboració amb EuroMeSCo, la principal xarxa de think-tanks en política i seguretat a la Mediterrània que l’IEMed coordina des de 2010.

Tot i que la pandèmia ha continuat acaparant bona part de l’atenció dels mitjans de comunicació, l’IEMed ha mantingut un contacte estret amb els mitjans de comunicació i, en especial, amb els periodistes que segueixen la regió mediterrània. Els 10 anys de la Primavera Àrab i de l’inici de la guerra a Síria o Líbia, la celebració del primer Dia de la Mediterrània a Barcelona i del 6è Fòrum Regional de la UpM, així com projectes destacats com la conferència anual de la xarxa EuroMeSCo a Barcelona o l’exposició “La mirada del biblista” han rebut una atenció particular per part dels mitjans.

Les campanyes d’e-mailing i la difusió a través de xarxes socials s’han vist reforçades per la publicació d’un nou web, més visual i modern, eina clau de l’IEMed per oferir en línia tota la seva activitat i tots els continguts de les seves publicacions.

© El Periódico de Catalunya. Todos los derechos reservados. Esta publicación es para uso exclusivamente personal y se prohíbe su reproducción, distribución, transformación y uso para press-clipping.

22 | Internacional

Martes, 23 de noviembre de 2021 |

Khadija Mohsen-Finan

Profesora de Ciencias Políticas en la Universidad de París. Experta en el Magreb y el conflicto del Sáhara Occidental, acaba de publicar Tunisie, L’apprentissage de la démocratie 2011-2021 (Túnez, el aprendizaje de la democracia 2011-2021). El jueves participó en Barcelona en un debate sobre los retos para la estabilidad del Mediterráneo en el Institut Europeu de la Mediterrània (IEMed). «La solución para el Sáhara Occidental es un arbitraje de la ONU»

LAURA PUIG

Barcelona

— Marruecos y Argelia viven un momento de alta tensión. ¿Cree que puede acabar derivando en un conflicto armado o esa posibilidad no interesa a uno ni a otro?

— Pensamos mucho en una escalada militar porque los dos países están muy armados. El informe del Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (SIPRI) muestra que son los países de África que compran más armas tras Egipto, cada vez más sofisticadas y de procedencias distintas. Pero no están destinadas a luchar contra el yihadismo, es un armamento de guerra. No obstante, yo creo que los dos estados no irán a la guerra; no beneficia a ninguno. Pienso que el conflicto continuará entre los dos más allá de sus fronteras, en Mali o Libia, quizá políticamente en el seno de la Unión Africana, pero no creo que acabe en un conflicto real.

— ¿Debe España jugar un papel de árbitro en el conflicto?

— España podría, en mi opinión, pero no lo quiere realmente. No tiene interés en enemistarse con ninguno de estos dos países porque debe negociar con Argelia en la cuestión energética y es un socio a nivel económico para Marruecos, que es un gran comprador y va a ser un gran comprador de gas argelino.

— En 1991, el Consejo de Seguridad estableció que debía de prepararse la celebración de un referéndum de autodeterminación en el Sáhara Occidental. Treinta años más tarde, sigue sin celebrarse…

— No creo que vaya a celebrarse nunca. Ya no fue posible organizarlo en 1992 y hoy es imposible hacerlo desde el punto de vista técnico y político.

— Entonces, ¿cuál es la solución?

— Es un arbitraje que vendrá por la ONU y por terceros países que sean capaces de discutir con el Frente Polisario y Argelia y con Marruecos. España y Francia es difícil porque fueron los países colonizadores. En todo caso, hay que ser realista. Pero a pesar del agravamiento de las tensiones, el conflicto tiene problemas para salir de su letargo y uno de los grandes responsables es Naciones Unidas, que ha jugado el juego de Marruecos en la organización del referéndum. Pero también es responsable EEUU, que no ha sido capaz de imponer un mecanismo de observación de los derechos humanos a la MINURSO. Se han hecho muchos regalos a Marruecos, que no ha sido respetuoso con el derecho internacional, y hoy en día no entiende que se le pida negociar un territorio que ocupa de hecho desde hace 45 años. La solución era difícil de encontrar en 1975, pero hoy es aún más difícil porque hay una población que es víctima de esta situación. Están en una cárcel a cielo abierto.

— Ya hace más de 10 años de la Primavera Árabe. ¿Queda algo de ella? — Sí, queda todo. Queda la revolución, la protesta, unas formidables

Elisenda Pons

Khadija Mohsen-Finan, el pasado jueves en el IEMed, en Barcelona.

ganas de cambio. Hoy estamos en una situación de fracaso, pero si vemos la historia ninguna revolución ha dado satisfacción en el espacio de 10 años, ninguna. Hay avances y retrocesos, pero las cosas ya no serán jamás como antes, ni siquiera en Egipto. El espíritu de la revolución está ahí. Y lo hemos comprobado, pues en 2019 llegó a Sudán, el Líbano y Argelia.

— Túnez, el país donde prendió la mecha y el único en el que acabó cuajando un sistema democrático, vive actualmente una grave crisis política. ¿Dónde quiere llegar el presidente Kaïs Saied?

— No está claro. Saied venció en 2019 con un programa un poco loco. Decía que no creía en la representación política, en los partidos, que iba a invertir la pirámide de poder... algo parecido a la democracia directa. Sin embargo, ha acabado acaparando todo el poder. Ha hecho un desierto a su alrededor, sin contrapoder, sin Parlamento. La democracia directa no es esto. Su golpe de Estado del 25 de julio fue muy bien acogido porque la gente está fatigada. Hoy Túnez atraviesa una crisis social, económica y financiera. Saied debe encontrar 3.000 millones de euros antes del 31 de diciembre para pagar la deuda y a los funcionarios. Está al pie del muro y hace falta que dé respuestas. Él es el responsable de todo. Es la buena y la mala noticia. No veo cómo puede perdurar.

«España no quiere ser árbitro de Argelia y Marruecos, no quiere enemistarse con uno ni otro»

— La emigración es uno de los grandes problemas del Magreb. ¿Cómo debe abordarlo Europa?

— Europa debe saber que hay personas completamente desesperadas que intentan marcharse en barcas poniendo en peligro su vida y hay personas con estudios que emigran por la vía normal. Los que se quedan lo hacen porque no pueden irse. ¿Cómo gobernar una sociedad que solamente piensa en emigrar? Es imposible. Europa debe acompañar el cambio y no tiene que fomentar el statu quo; debe ser exigente a nivel político, que las cuestiones de los derechos humanos se tengan en cuenta. Y tiene que condicionar su ayuda a un cambio real, efectivo. n

e12 Vic - Barcelona

Cada trayecto por sólo* 3,83€

49 salidas por sentido de lunes a viernes laborables

Vehículos accesibles WIFI gratuito Prensa gratuita a bordo Servicio directo entre Vic y Barcelona en tan sólo 55 min.**

*Precio con la S6. Título de 10 viajes que no admite transbordo. **Trayecto entre Estación de Autobuses de Vic hasta Barcelona.

902 13 00 14

Compra tu billete en: www.sagales.com

LA PARADA DE C/CASP - C/PAU CLARIS SE TRASLADA A GRAN VIA DE LES CORTS CATALANES - ROGER DE LLÚRIA

C/Roger de LlúriaGran Via de Les Corts Catalanes C/Roger de Llúria NUEVA PARADA

4 min.

C/Casp C/Pau Claris Urquinaona

© El Periódico de Catalunya. Todos los derechos reservados. Esta publicación es para uso exclusivamente personal y se prohíbe su reproducción, distribución, transformación y uso para press-clipping.

28 | Entre Todos

Martes, 27 de abril de 2021 |

Laurent Bonelli

El investigador social de la Universidad de París-Nanterre tuvo acceso a 133 expedientes de menores franceses procesados por terrorismo yihadista y señalados por radicalización entre 2012 y 2017. En una conferencia organizada por el Institut Europeu de la Mediterrània, compartirá hallazgos de su estudio que dinamitan ideas preconcebidas sobre las causas de la radicalización a edades tempranas. «Los menores yihadistas fueron buenos alumnos en la escuela»

GEMMA TRAMULLAS

Barcelona

— ¿Cuál era su hipótesis inicial? — Pensábamos encontrar un perfil de joven marginal con un historial de fracaso escolar, pero los menores más convencidos con la causa yihadista fueron buenos alumnos en la escuela. Eran pequeños intelectuales muy integrados. Una chica escribió una novela con 13 años.

— Habla de «burbuja parental».

— Son jóvenes nacidos en Francia de familias migrantes que viven en ciudades pequeñas. Sus padres les han protegido de las malas influencias del barrio y se han esforzado para integrarse y que sus hijos tuvieran éxito en la escuela.

— Entonces, ¿el detonante no sería la falta de integración sino la excesiva presión para integrarse?

— La integración no explica lo que pasa, hay que estudiar muy de cerca las trayectorias de estos jóvenes. Lo que hemos encontrado es que cargan sobre sus espaldas el peso de todo un proyecto familiar de ascensión social que en un momento determinado se rompe.

— ¿Cuándo?

— Cuando pasan del colegio al instituto, a los 14 años. Estos centros son más exigentes y ellos pasan de ser muy buenos alumnos a ser mediocres. En Francia, como buenos progresistas, nos gustan mucho los buenos alumnos de origen pobre y también lidiamos con los malos, pero sentimos un profundo desprecio por los mediocres.

— Pasan de la protección de la burbuja a ser despreciados.

— Sí, tanto por parte de la institución como de compañeros que practican el racismo social. A uno de los chicos, que era el único árabe de su clase, le llamaban «el kamikaze». Ahí fracasa su misión de ascenso social, dejan de sentir que ese es su lugar y buscan una alternativa intelectual crítica. “ «Estos jóvenes cargan a sus espaldas todo un proyecto familiar de ascenso social que en un momento determinado se rompe»

«El islam radical les permite rebelarse contra sus familias y contra el sistema escolar»

‘¿Qué sabemos de la radicalización yihadista?’

CONFERENCIA

Fecha: 28/4/2021 Hora: 18.30 Lugar: En línea, a través del canal de Youtube del IEMed.

Laurent Bonelli es coautor del libro ‘La Fabrique de la radicalité’.

— ¿Pero por qué el islam radical?

— Porque en gran parte es una revuelta contra los padres, que practican un islam tradicional, además de contra el sistema escolar.

— Pero eso no explica el paso a la violencia física.

— No. Para eso tienen que juntarse dos elementos: primero tienen que conocer a militantes más experimentados, mal conocidos como reclutadores, que adaptan el debate teórico del yihadismo a las experiencias propias de estos jóvenes.

— Les ofrecen respuestas a sus preguntas.

— Sí, pero el poder de estos intermediarios es limitado, lo que es muy importante es el grupo. Al principio entran en foros con mucha gente pero poco a poco quedan solo los convencidos. Es lo que ocurrió con la célula terrorista del 11-M en España. Los contactos exteriores desaparecen y el grupo fortalece sus vínculos de lealtad y de amor.

— Construyen una nueva familia.

— Una de las chicas lo verbaliza así: «He encontrado otros yo». Dentro del grupo se fomenta la radicalidad, no se puede pasar por cobarde y ahí se inicia la escalada que lleva a la acción.

— ¿Qué objetivos comparten los menores que ha estudiado?

— Tres cosas: viajar a Siria para construir un estado islámico donde se resolverán todos sus problemas; convertirse en intelectuales de la causa o «muyahidines del teclado» como dice uno y, finalmente, los atentados, aunque sus planes para cometerlos son irreales porque no tienen trayectorias de delincuencia.

— En Ripoll, de donde procedía el grupo de jóvenes (en este caso mayores de edad) que atentó en la Rambla de Barcelona y en Cambrils, existe un programa escolar específico para tratar temas de identidad y emocionales.

— Es difícil pensar políticas públicas solo en función de una minoría ínfima que puede pasar a la violencia en un momento dado. Siempre habrá individuos que resuelvan sus problemas con la sociedad mediante la violencia y nunca se podrá impedir del todo que algunas personas cometan actos violentos.

— ¿No le parece una medida útil? — Estos programas tienen sentido para fomentar la cohesión social y la convivencia, pero las políticas públicas tienen que estar enfocadas a la mayoría y las excepciones deben gestionarse de otro modo. No se puede usar la excepcionalidad para razonar sobre la normalidad.

— ¿Centrarse en el yihadismo ha dejado el terreno libre para la violencia ultraderechista?

— En los últimos 50 años en Francia ha habido oleadas de violencia política cada diez años: por la cuestión de Argelia, Palestina, Líbano, la extrema izquierda y el yihadismo. Pero es cierto que hacía mucho tiempo que no había tantos grupos vinculados a la extrema derecha dispuestos a pasar a la violencia.

— Siempre habla de violencia política y no de terrorismo.

— Hablo el idioma de las ciencias sociales. La palabra terrorismo está cargada de normatividad y el terrorista de unos puede ser el refugiado político de otros. Mandela, Arafat, Begin... todos fueron designados como terroristas en algún momento. Violencia política es un término más neutro que nos permite trabajar como científicos sociales sin entrar en el juego político.

— La radicalización yihadista ha desaparecido casi por completo del debate público.

— Porque estaba muy vinculada a la situación en Siria, con miles de jóvenes europeos dispuestos a ir a combatir. Pero al disminuir el tema de Siria, ha bajado de intensidad.

— ¿Es un ciclo cerrado?

— No. Puede que mañana haya otra oleada de ataques o puede que no. Nadie lo puede prever. n El Periódico, 23/11/2021 El Periódico, 27/4/2021 (d’esquerra a dreta)

© El Periódico de Catalunya. Todos los derechos reservados. Esta publicación es para uso exclusivamente personal y se prohíbe su reproducción, distribución, transformación y uso para press-clipping.

| Miércoles, 10 de febrero de 2021 Entre Todos | 27

Yezid Sayigh

Hace una década, el mundo desayunaba con los titulares de las protestas en la plaza Tahrir de Egipto, un símbolo del anhelo democrático en los países árabes. Dentro del ciclo de conferencias del Institut Europeu de la Mediterrània, el investigador del Carnegie Middle East Center de Beirut explicará cómo ese anhelo ha terminado en un capitalismo estatal represor, un relato en que Europa no sale bien parada. «Se está usando la pandemia para reprimir más a la gente»

GEMMA TRAMULLAS

Barcelona

— Desde el estallido de la pandemia, los titulares sobre Oriente Próximo y concretamente Egipto casi han desaparecido.

— Es preocupante, porque muchos gobiernos están usando la pandemia para reprimir más a la gente. En Egipto han arrestado y encarcelado a médicos por atreverse a criticar al ministro de Sanidad o por denunciar que no tienen suficiente protección. Ya han muerto 358 médicos por el covid.

— ¡358!

— Sí, pero si hablas de esto en Egipto, te meten en la cárcel. Esto indica que la cifra total de muertes por coronavirus es mucho más alta que la oficial de varios miles. Este es el tipo de información que los gobiernos intentan reprimir, junto a otros temas como la terrible crisis financiera que ha llevado al 50% de la población a la pobreza.

— ¿Tahrir es un ejemplo de los límites de lo que una revolución puede cambiar realmente?

— Esta pregunta es un desafío. En Egipto hubo un movimiento revolucionario, en el sentido de que había un sector muy amplio de la población implicado y que se buscaba un cambio en la estructura del uso del poder, pero fracasó.

— Echaron a Mubarak.

— Se marchó un presidente pero no cambió nada más. Si algo ha cambiado ha sido en la dirección de dar al presidente, al Estado y al Ejército más poder en la economía.

— ¿Y Túnez? Es el caso más exitoso de la primavera árabe.

— Incluso allí casi nada ha cambiado en las condiciones sociales y económicas. Además, la insatisfacción y las expectativas frustradas han generado dos fenómenos: Túnez se ha convertido en la principal fuente de voluntarios para ir a la guerra en Siria, especialmente “ «En Egipto han muerto de covid 358 médicos, pero si lo dices allí, te meten en prisión»

«Un argumento académico simple es que si no tiene éxito, no es una revolución»

«El apoyo de la UE a la democracia en Oriente Próximo es pura hipocresía»

‘El papel del Ejército en Egipto 10 años después de Tahrir’

CONFERENCIA

Día: 11/2/2021 Hora: 18.30 horas Lugar: ‘On line’por el canal de Youtube del IEMed

El Periódico

Yezid Sayigh, investigador del Carnegie Middle East Center (Beirut).

yihadistas, y ha emergido una corriente política que tiende a ser antidemocrática.

— Después de estas experiencias, ¿habrá que dejar de asociar la palabra revolución a cambio?

— Cada uno define revolución según le conviene. Un argumento académico muy interesante y simple es que, si no tiene éxito, no es una revolución.

— Entonces, ¿la primavera árabe no fue una revolución?

— Para mí no llegó a ser una revolución en la mayoría de países, aunque Siria se acercaría más a la definición clásica de revolución porque acabó implicando a toda a sociedad. En Egipto no ha cambiado casi nada respecto a la propiedad del capital y dónde radica el poder. Y los países que han cambiado lo han hecho desde arriba, con el presidente o el Ejército llegando al poder y usándolo para impulsar sus propias agendas.

— ¿El espíritu de la plaza Tahrir pervive en la gente joven?

— Es muy difícil decirlo. Diría que en Egipto aún hay gente intentando encontrar huecos de libertad que toman forma artística, de temas de género o de vídeos en Tik Tok. Pero hay mucho miedo y desmoralización. La gente quiere salir del país porque sienten que no tienen futuro, especialmente los que tienen una formación.

— ¿Cuál diría que es el principal sesgo de la prensa occidental al informar sobre Egipto?

— No puedo generalizar sobre medios occidentales, pero me parece ofensivo que los líderes occidentales, especialmente de la Unión Europa, y algunos medios traten al presidente Al Sisi como si estuviera camino de la democracia cuando su historial de derechos humanos es terrorífico.

— ¿Europa no tiene un interés real en la democratización de la sociedad egipcia?

— No tienen absolutamente ningún interés; no digo que se opongan, pero no está en su agenda. El supuesto apoyo a la democracia en Egipto y en la región por parte de la Unión Europea, colectivamente y por países, es pura hipocresía.

— ¿Qué podrían hacer?

— Su papel es limitado, pero Italia, Francia y Alemania podrían ponerse de acuerdo para no vender más armas a Egipto hasta que no coopere en la investigación del horroroso asesinato y tortura del estudiante italiano Giulio Regeni hace cinco años en El Cairo.

— ¿El papel reforzado del Ejército puede evitar futuras rebeliones?

— Esa coalición dirigente formada por Ejército, policía, agencias de seguridad, burócratas y jueces superiores es muy fuerte. Controlan el miedo de la gente, usan el nacionalismo contra cualquier oposición y se apoyan en la violencia directa y la represión. Han destruido los partidos políticos, los sindicatos, cualquier oposición es intimidada o físicamente eliminada.

— Entonces va para largo.

— Aunque los indicadores socioeconómicos del país son muy preocupantes, creo que este régimen puede sobrevivir cómodamente de 3 a 5 años, o de 8 a 10 años mientras pueda seguir vendiendo bonos del Estado e ingresando capital de las monarquías del Golfo y de agencias extranjeras.

— Es una perspectiva sombría.

— El régimen puede mantener la represión mucho tiempo usando el nacionalismo y el conservadurismo social, más o menos como lo hizo Franco durante muchos años después de usar la violencia. La diferencia es que Egipto es pobre y todos los actores sociales, incluido el sector privado, han sido marginados o eliminados. En Egipto no existen los elementos para una transición democrática pacífica sino para otra ruptura violenta. n

ara DIJOUS, 13 DE MAIG DEL 2021 09

internacional

XINJIANG, UNA “PRESÓ A L’AIRE LLIURE”

Els Estats Units van publicar ahir un informe que denuncia la persecució de minories religioses al món i que inclou els abusos comesos per la Xina contra la minoria musulmana dels uigurs a la regió de Xinjiang, la qual un portaveu del departament d’Estat dels EUA va qualificar com “una presó a l’aire lliure”. El mateix secretari d’Estat de Donald Trump, Mike Pompeo, va qualificar el tracte als uigurs de genocidi, una declaració que l’administració de Joe Biden també comparteix. Segons l’informe, el tracte als uigurs és la “culminació de dècades d’opressió a les minories religioses” a la Xina.

Què hi ha darrere de l’escalada més violenta dels últims anys?

La falta de mediació i de lideratges a Israel i Palestina dificulta la sortida del conflicte

Anàlisi

CRISTINA MAS

BARCELONA

Quan Jerusalem esternuda Gaza es constipa. La frase feta ha tornat a ser realitat. L’origen de l’escalada actual es troba a Jerusalem, on en l’últim mes s’han creuat dos focus de conflicte: d’una banda, la Ciutat Vella i l’Esplanada de les Mesquites; de l’altra, el barri de Sheik Harrah, a Jerusalem Oriental, on una quarantena de famílies palestines estan amenaçades amb ser desnonades per entregar les seves cases a colons israelians. Els primers enfrontaments van començar arran de les severes restriccions imposades per la policia israeliana –amb el pretext de la pandèmia, però que no s’havien aplicat a les celebracions jueves– per accedir a la Ciutat Vella, on tradicionalment el jovent palestí es reuneix després de la pregària del vespre durant el Ramadà.

Després que al mes d’abril centenars de supremacistes jueus es manifestessin amb el lema “Mort als àrabs”, la tensió als carrers era palpable. Divendres a la nit tropes israelianes van assaltar l’Esplanada de les Mesquites i van començar una sèrie de protestes en diverses ciutats de Cisjordània i d’Israel. Dilluns el ministeri de Justícia es va veure obligat a endarrerir la lectura del veredicte sobre el desnonament de les famílies de Sheik Harrah per evitar més aldarulls. El mateix dia la policia i l’exèrcit israelià van assaltar l’Esplanada de matinada, en plena oració, i van deixar més de 600 ferits. Hamàs va respondre-hi llançant coets des de Gaza.

Per què Jerusalem?

Per als palestins, és el símbol de l’ocupació L’any passat, amb el gendre de Trump patrocinant l’obertura de l’ambaixada nord-americana a Jerusalem, la dreta religiosa israeliana proclamava la seva victòria definitiva i instava els palestins a la rendició incondicional. Però la provocació a Jerusalem ha evidenciat que les coses no són tan senzilles. “Jerusalem cristal·litza tota la injustícia de la colonització israeliana. És no només un símbol sinó una demostració pràctica del que representa l’ocupació –explica a l’ARA des de Jerusalem Inés Abdel Razek, de l’Institut Palestí per la Diplomàcia Pública–. Des del 67 tota la ciutat està sota control israelià i els palestins hi neixen amb menys drets. L’Ajuntament no inverteix en infraestructures als barris palestins, que estan abandonats a la seva sort”, afegeix.

Tercera Intifada?

Hi ha elements de la protesta palestina que ho fan pensar “No es pot saber, però hi ha elements de la protesta palestina que ho fan pensar –explica a l’ARA Lurdes Vidal, cap de món àrab de l’Institut Europeu de la Mediterrània (IEMed)–. Hi ha una idea de persistència, la sensació que no tenen res a perdre i que no només els queda resistir. Per això surten cada nit. Pot ser un movi-

Un jove plorant després de veure el cadàver d’un familiar, mort en un bombardeig

a Gaza. M. TALATENE / EUROPA PRESS ment durador i que no sigui tan fàcil de silenciar”.

De fet, entre les noves generacions palestines pesa el sentiment d’aïllament, la idea que no poden continuar esperant ajuda de fora, arran de la política de “normalització” impulsada per l’administració Trump, que va portar alguns països àrabs (els Emirats Àrabs Units, Bahrain, el Sudan i el Marroc) a establir relacions amb Israel a canvi de beneficis diplomàtics, cosa que esborrava una línia vermella que s’havia mantingut des de la creació de l’Estat d’Israel. “Hi ha un sentiment de traïció entre el poble”, afegeix Lurdes Vidal.

Però el govern en funcions de Benjamin Netanyahu potser ha sobreestimat l’avantatge que li donava haver esquerdat el front àrab, que era més aparent que real. “Si Netanyahu creia que podria enterrar l’estat palestí fent un pacte amb els Emirats i Bahrain, o convencent el Sudan a canvi de treure’l de la llista de terroristes, o el Marroc a canvi del reconeixement pels Estats Units de la seva sobirania sobre el Sàhara Occidental, ara s’adona que això significava molt poc”, escriu l’analista David Hearst.

Lideratge palestí en crisi

Sense eleccions i amb uns joves que no se senten representats Si una cosa frena ara un nou alçament massiu a Palestina és la falta d’un lideratge clar. La setmana passada el primer ministre palestí, Mahmud Abbas, de 85 anys, va tornar a ajornar les eleccions a la desprestigiada Autoritat Palestina, que als ulls de la majoria de joves dels territoris ocupats és només un aparell repressiu al servei d’Israel.

Les últimes eleccions palestines es van celebrar el 2006 i Abbas, amb el seu partit Fatah dividit en tres blocs i sense perspectives, no estava disposat a permetre que Hamàs, que governa Gaza, guanyés també a Cisjordània. Com explica Joel Beinin, professor emèrit de Standford, “no hi ha cap lideratge que pugui mantenir un moviment popular sostingut com les Intifades del 1987 i el 2000”. De moment Hamàs està capitalitzant la crisi actual, però no queda clara tampoc la seva ascendència sobre les noves generacions, protagonistes de les protestes.

Crisi política Israel

Un més que qüestionat Netanyahu se’n pot beneficiar Per a Beinin, el primer ministre israelià en funcions, Benjamin Netanyahu, “és el primer interessat en l’escalada de la tensió a Gaza per desviar l’atenció dels problemes polítics i legals”. Processat per diversos casos de corrupció, el polític conservador al poder els últims dotze anys ha sigut incapaç de formar una coalició de govern estable, després de quatre comicis en dos anys.

L’intent del moderat Yair Lapid de crear una coalició per fer-lo fora del govern –i deixar-lo sense immunitat– ha quedat pràcticament curtcircuitat perquè els partits jueus estan tancant files al costat de l’exèrcit i la policia i difícilment podran tenir el suport imprescindible de la Llista Àrab Unida.e El Periódico, 10/2/2021 Ara, 13/5/2021 (d’esquerra a dreta)

17/12/21 4:43 about:blank La Vanguardia, 21/4/2021

© El Periódico de Catalunya. Todos los derechos reservados. Esta publicación es para uso exclusivamente personal y se prohíbe su reproducción, distribución, transformación y uso para press-clipping.

52 | Cultura

Martes, 30 de noviembre de 2021 |

Un mundo perdido

El museo del monasterio expone una selección de las 6.000 imágenes que el padre Bonaventura Ubach tomó en Siria, Irak, el Sinaí y Palestina entre 1922 y 1951 para ilustrar la Bíblia Grossa de la abadía.

Las fotos del Indiana Jones de Montserrat

ANNA ABELLA Barcelona

En el desierto de Palestina se alza un joven pastor con una honda. Es la imagen perfecta para ilustrar la historia bíblica de David contra Goliat. La tomó en 1925 el padre Bonaventura Ubach (1879-1960), el monje que vino a ser como el Indiana Jones del monasterio de Montserrat, quien dedicó su vida a reunir para la abadía decenas de objetos arqueológicos, momias egipcias incluidas, en sus múltiples viajes por Oriente Próximo. Esa fotografía es solo una de las 6.000 que el religioso tomó en Siria, Irak, el Sinaí y Palestina entre 1922 y 1951, con el objetivo de ilustrar el proyecto de la Bíblia Grossa de Montserrat, traducida al catalán y formada por 28 volúmenes (tres de ellos de imágenes), publicados entre 1926 y 1954.

«Con aquellas fotos le interesaba inmortalizar todo lo que no había cambiado desde los tiempos bíblicos, un mundo que él se dio cuenta de que estaba cambiando y estaba en vías de desaparición ante el avance de la modernidad y de los conflictos que empezaban a extenderse por la región», explica el arqueólogo Joan Eusebi Garcia Biosca, comisario de la exposición La mirada del biblista. Instants d’eternitat, primera muestra temporal desde el inicio de la pandemia que ofrece el Museu de Montserrat.

Al padre Ubach «le interesa la mezcla, detallar la convivencia entre gente de distintas religiones y culturas» entre las que él mismo se mueve –beduinos, árabes, cristianos y, en menor medida, judíos, pues estos eran mayoritariamente llegados de Europa y no le servían para enseñar la Palestina bíblica–. Lo hace con una mirada «etnográfica, antropológica y documental», pero también «orientalista, biblista» y empática hacia la población árabe, detalla el comisario ante un recorrido para el que ha seleccionado 76 imágenes en las que abundan los beduinos, porque eran «los que mejor podían ayudar a entender la sociedad de la Biblia. Eran ganaderos y trashumantes, vivían en tiendas y estaban en peligro de desaparecer».

El pueblo beduino

Además de paisajes principalmente rurales que «reflejan la pequeñez del ser humano», retrata ritos y costumbres, vestimentas y peinados, formas de vida. Unos posan, en grupos familiares, religiosos o tribales. Otros aparecen de forma natural, untando con sangre de cordero sacrificado los soportes de su tienda (varias fotos muestran cierta debilidad del fotógrafo por los rituales de sangre, certifica el comisario), pastores sacando agua de un pozo o labrando los campos con un camello y un asno. Sorprende cómo Ubach, un hombre, logra algo difícil en sociedades musulmanas: mezclarse entre grupos de mujeres, como el de unas beduinas que capta bailando en 1929. «Le ven como un hombre de religión, no como una amenaza. Y no viste como un europeo», apunta Garcia Biosca.

La muestra, que puede verse hasta el próximo 17 de julio y luego viajará a Barcelona, la organizan el Institut Europeu de la Mediterrània (IEMed) y la abadía de Montserrat, que también han recuperado y digitalizado todo el material fotográfico, que podrá ir consultándose en la web de la biblioteca de Montserrat a medida que se restaure. Además, el museo expone en su permanente la colección arqueológica reunida por el padre Ubach en sus viajes.

Abadía de Montserrat

Mujeres beduinas en la entrada de la cueva donde habitaban, en 1926, en una imagen tomada por Ubach.

Abadía de Montserrat

El padre Bonaventura Ubach (izquierda), en Jerusalén, cargando cajas con material arqueológico con destino al Museu de Montserrat.

El monje tenía una mirada bíblica, documental, antropológica y orientalista

La dedicación de Ubach al proyecto de su vida lo atribuye Garcia Biosca a su origen familiar: «Una madre profundamente religiosa y un padre acomodado, oficial de la Marina mercante que volvía a casa con historias de lugares exóticos». Entró con 12 años como novicio e hizo los votos a los 26. El plan de la Bíblia Grossa, cuyos volúmenes también se exponen, coincidió con «el innovador y aperturista León XIII» como Papa y con «Antoni Maria Marcet como abad, que impulsó proyectos culturales y arquitectónicos».

«Tenía una capacidad de trabajo impresionante. Era riguroso y metódico», como demuestran las libretas expuestas donde registraba los datos de cada fotografía, los mapas en los que marcaba localizaciones, qué escena de la Biblia debían ilustrar. También se exponen guías y libros de imágenes y postales de la época que inspiraron a Ubach. Y junto a una cámara Kodak similar a las que usó brillan unas placas de cristal con las que hacía las fotos. Luego enviaba el negativo a Viena, donde se hacían placas de fotograbado, y estas se imprimían en Montserrat. Un mundo, sí, que también ha desaparecido. n

NOVELAS DE ACCIÓN Y AVENTURA La Vanguardia, 17/12/2021 El Periódico, 30/11/2021 (d’esquerra a dreta)

Xarxes socials

El trasllat de tota l’activitat pública de l’IEMed a formats en línia durant bona part de l’any ha impulsat els principals perfils de l’IEMed a les xarxes socials. Facebook i Twitter, primera font d’informació per a àmplies capes de població i principals xarxes d’aportació de tràfic cap al web, han continuat informant de totes les activitats i publicacions de l’IEMed. Però sobretot han mobilitzat un públic interessat en les qüestions que tracta l’IEMed que enguany podien assistir des de casa a conferències i seminaris retransmesos en línia i en directe, així com interactuar amb els ponents. Aquesta més gran activitat en línia també s’ha traduït en un augment dels visionats i subscriptors del canal YouTube de l’IEMed.

Instagram, adreçat a un públic jove, ha duplicat el nombre de seguidors respecte l’any anterior mentre que la comunitat de professionals que segueix l’IEMed a Linkedin també manté un constant creixement. L’IEMed també té un compte Flikr on poder veure galeries d’imatges dels actes més destacats, i un a ISSUU, una plataforma que permet consultar de forma atractiva les publicacions, especialment les corporatives.

L’ús de les xarxes socials per part de l’IEMed li ha valgut aparèixer de nou en l’índex de referència internacional dels millors think-tanks del món en la categoria de millor ús de les xarxes socials (2020 Global Go To Think Tank Index Report, Institut Lauder, Pennsylvania University).

Llocs web associats

A banda del web corporatiu, l’IEMed administra i gestiona els continguts dels següents llocs web:

Xarxa EuroMeSCo

www.euromesco.net El nou web, publicat a finals de 2017, ha impulsat la presència a internet de la principal xarxa de think-tanks sobre política i seguretat a la Mediterrània, l’Euro-Mediterranean Study Commission (EuroMeSCo), coordinada per l’IEMed.

Xarxa MedThink 5+5

http://medthink5plus5.net Creada a Barcelona el maig de 2016 i amb l’IEMed com a secretariat, la xarxa Med Think 5+5 té com objectiu fomentar el diàleg i la recerca sobre com promoure la integració regional i la cooperació a la Mediterrània occidental.

Xarxa Espanyola de la Fundació Anna Lindh

http://redespanolafal.iemed.org Coordina pàgina a Facebook de la xarxa, així com una comunitat a Facebook i un perfil a Twitter del concurs internacional “Un Mar de Paraules”.

Fundació de Dones Euromediterrànies

https://www.euromedwomen.foundation/ Desplega una àmplia presència pròpia a Facebook i a Twitter.

CONNEKT. Un projecte Horizon 2020

https://h2020CONNEKT.eu El projecte estudia els factors potencials de radicalització entre joves de vuit països per millorar-ne la prevenció. Té presència a Facebook, Twitter i Linkedin.

El 2021 en xifres

Més de 278.415 pàgines úniques visitades al lloc web www.iemed.org*

Més de 5.800 subscrits al servei d’avisos, invitacions i butlletins digitals de l’IEMed (es remet en quatre idiomes: anglès, francès, castellà i català).

Més de 17.360 seguidors a Twitter. El compte acumula més de 20.000 tuits enviats.

Més de 9.000 seguidors a Facebook.

Més de 8.260 seguidors a Linkedin.

700 vídeos al canal YouTube de l’IEMed. Amb 45.700 visualitzacions l’any 2021 i 1.690 subscriptors.

Més de 1.200 seguidors a Instagram (680 l’any passat).

Més de 20 cites a l’IEMed en mitjans de comunicació impresos, tant en articles propis com de columnistes, entrevistes, notícies, reportatges i espais d’agenda.

Més de 20 participacions de membres de l’IEMed en entrevistes i debats en mitjans audiovisuals.

*Google Analytics