SALMO 71.1-9 / I TESALONICENSES 1, Traducción en Lenguaje Actual 1
SEÑOR, EN TI HE BUSCADO REFUGIO;
no me decepciones. Rescátame y libérame porque eres justo. Escúchame y sálvame. 3 Sé tú mi roca donde acudo a refugiarme, pues tú diste la orden de salvarme. Tú eres mi roca, mi fortaleza. 4 Dios mío, rescátame de las garras del perverso, del delincuente y del violento. 5 Señor Dios, tú eres mi esperanza; he confiado en ti desde mi juventud. 6 He dependido de ti desde antes de nacer. Tú me has ayudado desde que estaba en el vientre de mi madre. Siempre te estoy alabando. 7 Tú eres mi poderoso refugio, y me he convertido en un ejemplo para los demás. 8 Te honro y alabo con mi boca todo el día. 9 No me apartes de ti en mi vejez; no me abandones mientras voy perdiendo fuerzas. 2
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SIEMPRE DAMOS GRACIAS A DIOS NUESTRO PADRE, Y EN
nuestras oraciones le pedimos que los ayude. SABEMOS BIEN QUE, EN TODO LO QUE HACEN, USTEDES DEMUESTRAN SU CONFIANZA EN DIOS Y SU AMOR POR ÉL. 3 Y AUN CUANDO SUFREN, SE MANTIENEN FIRMES, ESPERANDO LA SALVACIÓN QUE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO LES DARÁ. 4 Hermanos, Dios los ama, y nosotros sabemos que él los ha elegido para que sean parte de su pueblo. 5 Cuando les anunciamos la buena noticia, no lo hicimos sólo con palabras. Al contrario, cuando estuvimos entre ustedes dejamos bien claro que tenemos el poder de Dios, y que el Espíritu Santo actúa por medio de nosotros, para el bien de ustedes. 6 Ustedes siguieron nuestro ejemplo y el de nuestro Señor, y aunque sufrieron mucho, recibieron ese mensaje con la profunda alegría que da el Espíritu Santo. 7 Por eso llegaron a ser un ejemplo para todos los seguidores de Jesucristo que viven en las regiones de Macedonia y Acaya. 8 Ustedes han anunciado el mensaje de Jesucristo, no sólo en esas regiones sino en muchas otras partes. La gente de esos lugares ya sabe que ustedes confían mucho en Dios, y no hace falta que nosotros les digamos nada más. 9 Porque todos hablan de lo bien que ustedes nos recibieron, y cuentan cómo ustedes dejaron de adorar ídolos para adorar y servir al Dios vivo y verdadero. 10 Ellos saben que ustedes esperan que Jesucristo regrese del cielo. Dios hizo que él resucitara para salvarnos del castigo que él dará a los pecadores en el día del juicio.
Preside: D.I. PABLO F. S ANDOVAL JIMÉNEZ
Tú eres mi Dios. Yo alabo y bendigo tu nombre, porque has realizado planes admirables que prometiste desde tiempos antiguos. ISAÍAS 25.1 Preludio HNO. JACOBO NÚÑEZ CABRERA ¡Alabemos a nuestro Dios! ¡Alabemos a Dios en su santuario! ¡Alabemos su poder en el cielo! ¡Alabemos sus grandes acciones! ¡Alabemos su incomparable grandeza! ¡Alabémoslo con sonido de trompeta! ¡Alabémoslo con arpas y liras! ¡Alabémoslo con panderos y danzas! ¡Alabémoslo con cuerdas y flautas! ¡Alabémoslo con sonoros platillos! ¡Alabémoslo con platillos vibrantes! ¡Que alaben a Dios todos los seres vivos! ¡Alabemos a nuestro Dios! SALMO 150 Oración de ofrecimiento Himno: “Te exaltaré, mi Dios, mi Rey” (704)
Ministro: Compungidos/as por la forma en que hemos violentado tus mandamientos y nos hemos alejado de la práctica del amor y la justicia, nos presentamos ante tu trono de gracia para reconocer esas fallas y desobediencias. Y apelamos a tu misericordia para obtener el perdón.
Momento de oración personal. / Oración audible. Unidos/as: ¡Dejen ya de pecar! ¡No quiero ver su maldad! ¡Dejen ya de hacer lo malo y aprendan a hacer lo bueno! Ayuden al maltratado, traten con justicia al huérfano y defiendan a la viuda. Himno “Porque tú eres bueno” (51) Salutaciones Himno: “Cada día con Cristo”
ISAÍAS 1.16-17
Omnipotente y eterno Dios, ¡qué terrible es este mundo! ¡Cómo quiere abrir sus quijadas para devorarme! ¡Y qué débil es la confianza que pongo en ti! Dios mío, protégeme en contra de la sabiduría mundanal. Lleva a cabo la obra, puesto que no es mía; sino tuya. No tengo nada que me traiga aquí, ni tengo controversia alguna con estos grandes de la tierra. Desearía pasar los días que me quedan de vida, tranquilo, feliz y lleno de calma. Empero, la causa es tuya; es justa; es eterna. ¡Dios mío, ampárame, tú eres fiel y no cambias nunca! No pongo mi confianza en ningún hombre. MARTÍN LUTERO Oración de intercesión
Lectura del Antiguo Testamento Lectura del Nuevo Testamento
S ALMO 71.1-9 I TESALONICENSES 1
Himno: “El Señor es mi fuerza” (551) Celebración de la Santa Cena
¡Oh Señor, Dios nuestro, tuyas son y de ti han venido todas estas riquezas que hemos preparado para construir un templo a tu santo nombre! Yo sé, Dios mío, que tú examinas las conciencias y que te agrada la rectitud. Por eso, con recta intención te he ofrecido todo esto. Y ahora puedo ver con alegría que tu pueblo, aquí reunido, te ha presentado generosamente sus ofrendas. I CRÓNICAS 29.16b-17, DHH Himno “Padre, Dueño y Señor” (436) Oración por las ofrendas
Dios bendice / a quienes no siguen malos consejos / ni andan en malas compañías / ni se juntan con los que se burlan de Dios. / Dios bendice / a quienes aman su palabra / y alegres la estudian día y noche. / Son como árboles sembrados / junto a los arroyos: / llegado el momento, / dan mucho fruto / y no se marchitan sus hojas. / ¡Todo lo que hacen les sale bien! SALMO 1.1-3 Bendición congregacional coral Himno: “Nuestra fortaleza” (661) Postludio Intereses de la comunidad
ACOMPAÑAMIENTO BÍBLICO-TEOLÓGICO I TESALONICENSES: PRIMER ESCRITO CRISTIANO Michel Trimaille
E
l apóstol recoge los ejes centrales de la predicación primitiva y exhorta a una jovencísima comunidad cristiana a vivir en la esperanza de la venida próxima de Jesús. La primera carta presenta un interés muy especial: constituye el primer documento cristiano que ha llegado a nosotros en su edición final. Sólo veinte años después de los acontecimientos pascuales, nos permite encontrar las huellas de las formulaciones iniciales de la fe en Cristo y medir la vitalidad de los comienzos del evangelio. Ilumina también el pensamiento de Pablo en sus primeros destellos y contribuye, por comparación con las cartas sucesivas, a percibir la evolución del apóstol. De este modo nos recuerda oportunamente que el pensamiento de Pablo, lejos de estar fijado para siempre, se fue profundizando a medida de las circunstancias y de los problemas que se le iban planteando. […] Como en el caso de la fe y del amor, no encontramos ninguna definición de esperanza, pero según el contexto de los diversos empleos en san Pablo, puede decirse que para él la esperanza cristiana es una espera paciente y confiada en el porvenir, basada en el misterio pascual de Cristo. […] El fundamento de la esperanza es el amor de Dios manifestado en la cruz y la resurrección de Jesús, ya que allí ese amor se convierte en promesa y es acogido en una fe que, a su vez, se hace operante por el amor es el misterio de Cristo que puede mantener a los creyentes en la perseverancia de una espera activa y rica en obras de fe. La primera carta a los Tesalonicenses. Estella, Verbo Divino, 1982 (Cuadernos bíblicos, 39).
VIVIR COMO LOS QUE SON DE DIOS Expositor invitado Preside: Hna. Amalia Villar Escudero BASE
BÍBLICA:
I TESALONICENSES 2.1-12
_________________________________________________________________________________ Por la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo. APOCALIPSIS 1.9b MATAGALPA 1081, SAN PEDRO ZACATENCO, ALC. GUSTAVO A. MADERO, 07360, CIUDAD DE MÉXICO Tel. 5586 6986, www.igl-ammi-shadday.blogspot.com www.youtube.com/channel/UCwz_EViGm-OGbVm3BMKn0Jw Secretario del Consistorio: A. I. Lauro B. Adame (555781 6736) Pastor titular: Pbro. Leopoldo Cervantes-Ortiz (555180 5146)