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W hotel Barcelona

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revista iCruceros

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W hotel Barcelona

Texto: Conchi Castañeira

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Fotos: Hotel W Barcelona

Es indiscutible que este original y exclusivo hotel con forma de vela -de hecho coloquialmente es conocido como Hotel Velase ha convertido en todo un símbolo de la ciudad de Barcelona desde su apertura en el año 2009. Con un enclave privilegiado, y como si de un barco atracado al final de la playa de la Barceloneta se tratase, el W Barcelona Hotel es todo un canto al diseño, la modernidad, la arquitectura vanguardista y sobre todo a la libertad de elección. Para ello y siguiendo su slogan de “Whatever, Whenever” -lo que sea, cuando sea- ofrece a sus clientes múltiples opciones de horarios, deporte, diversión, gastronomía y sobre todo confort.

WHATEVER WHENEVER

En cuanto ponemos los pies en él nos damos cuenta de su original diseño. Según nos comentan, su arquitecto Ricardo Bofill, quiso plasmar el aire marinero de la ciudad de Barcelona y es por ello que su lobby se abre al visitante como si de las entrañas de un pez se tratase y que, según vas avanzando, sus escamas te envuelven con brillos de diferentes y cambiantes colores. Quizás para otros, entre las que me incluyo, se asemeje más a un buque en un astillero, pero sea cual fuere tu visión, la realidad es que no te deja indiferente.

Detalles como centros de preciosas y frescas orquídeas, grandes lámparas de pie y originales sillones colgantes le confieren ese aire confortable que cualquier hotel que se precie debe trasmitir al viajero que llega por primera vez y que piensa alojarse en él. Por no hablar de su amplio y joven personal que te recibe con amplias sonrisas y amabilidad extrema.

Seguimos avanzando y ante nosotros se abre una gran zona de restauración, relax, bar y quizás de todo un poco.

El W Lounge. Espaciosos sofás y atrayentes lámparas, todo en tonos suaves que oscilan desde los azules a los turquesas y que incitan a tomarse un descanso o una copa con los amigos. Una vanguardista chimenea al fondo, rodeada de butacones y de sillones colgantes, quizás es el área más demandada de este enorme espacio de confort. ¿El motivo?...su carácter acogedor y la gran pared de cristal que, a modo de cuadro gigantesco, remata esta parte y desde la cual accedemos al exterior y divisamos el Mediterráneo pudiendo casi cogerlo con la mano. Vamos entendiendo sus colores en la paleta de azules y turquesas tan acordes con el Mare Nostrum.

A un lado una gran mesa de DJ rodeada de agua y grandes velas. Todo en este hotel parece girar alrededor de la música, la fiesta y sobre todo del carácter joven y dinámico. Al otro extremo, la propia barra de bar y divanes enmarcados con pinturas marinas.

Separado por más sofás, se nos muestra el restaurante Wave. Las mismas vistas para dejar que nuestros ojos se relajen mientras desayunamos, comemos o cenamos.

El buffet del desayuno es simplemente espléndido. Variado, extenso, con productos de alta calidad y con una presentación de todos ellos original y delicada. Batidos naturales, zumos de fruta, detox antioxidantes, cereales, frutos secos, una variada tabla de quesos, embutidos, fruta fresca, yogures y leche de varios tipos y necesidades alimenticias, repostería del día que va desde los croissants

hasta las tartas pasando por todo tipo de dulces tentaciones, platos calientes, panes, cava y una gran cafetera Nespresso para que los amantes del café disfrutemos de lo lindo.

Se necesitarían horas para probarlo todo y si así lo hicieras seguro que quedarías más que saciado para todo el día.

La carta de comidas y cenas presenta varios platos muy mediterráneos fusionados con toques vanguardistas. Y sobre todo cabe destacar en todos los servicios la amabilidad y disposición de todo el equipo de restauración.

A este restaurante le añadimos el Bravo24 del visionario chef catalán y estrella Michelín, Carles Abellán, en el que se puede degustar cocina local combinada con toques de vanguardia y el Salt Restaurant & Beach Club, con una carta de hamburguesas gourmet y que ocupa un espacio de su propia playa privada para de esta forma rematar el verano barcelonés.

Una pequeña pero exclusiva tienda concluye el W Lounge.

Según entras en la habitación tus ojos se van al fondo de la misma

En cuanto a las habitaciones, el W Barcelona cuenta con 473 todas recién renovadas, incluyendo 67 suites, 2 WOW Suites y 1 Extreme WOW Suite con vistas panorámicas sobre la cuidad y el Mediterráneo.

Esta última no te deja indiferente, no solo por sus enormes dimensiones, sino por su gran cama redonda giratoria, su futbolín de diseño al más puro estilo Gaudí, su bañera enfrentada a un inmenso ventanal y su espacio dedicado exclusivamente para que un DJ pueda amenizar las fiestas que en ella quieran dar sus exclusivos huéspedes. Con una paleta de colores basada en el azul oscuro, bronce, oro y gris intenso, recrea el ambiente nocturno de la ciudad condal.

Una gran terraza exterior equipada con tumbonas y jacuzzi es uno de sus puntos fuertes para recrearse con las vistas que ofrece de Barcelona y del Mediterráneo.

Las 2 WOW Suites cuentan con un diseño inspirado en la escena artística y cultural de la ciudad, para ello se han ayudado de una cálida y metálica paleta de colores.

Pero los demás mortales nos sentiremos como verdaderos VIPS en el resto de habitaciones, porque si algo caracteriza al W Barcelona es que todas ellas gozan de unas vistas privilegiadas pareciendo que el propio hotel y cada habitación esté suspendida encima del mar.

Según entras en la habitación tus ojos se van al fondo de la misma, donde la pared es sustituida por un enorme cristal y flanqueado por dos cómodos butacones tipo chaise longue desde los cuales sientes Barcelona a tus pies y con ella el mar Mediterráneo. La cama, confortable y de grandes dimensiones, ocupa el centro de la habitación, siempre mirando al cuadro infinito que conforma el ventanal y que será, te lo aseguro, lo último que mirarás antes de cerrar los ojos para dormir y lo primero que verás al abrirlos por la mañana. Un lavabo integrado en la misma habitación, una ducha tipo spa, grandes armarios con todo lo necesario para tu comodidad, baño, mini bar de diseño muy original -cómo gustan las formas redondeadas en este hotel-, cafetera de cortesía, cargador de usb y muchos detalles más, hacen de estas habitaciones un espacio confortable del que te costará salir.

En la última planta, la 26, Eclipse, el lujoso cocktail bar y club del hotel que ofrece las mejores vistas de Barcelona. Por la noche destaca ya en la lejanía por sus luces rosas y azules que incitan a la fiesta. Con dos zonas diferenciadas por su música, este exclusivo skybar es famoso entre clientes y visitantes por su ambiente concurrido- tiene capacidad para 240 personas- y, como no, por sus DJs residentes que pinchan en ella música de rabiosa actualidad. Fusiona perfectamente las vistas panorámicas de 360º, la cultura de la coctelería y la cocina creativa Asian Fusion. Además, semana tras semana, Eclipse celebra las fiestas temáticas más famosas de la ciudad.

En el polo opuesto, la planta baja, el primer Bliss Spa de España que cuenta con una nueva área denominada Getaway dotada de sauna, baño de vapor, circuito de aguas, canal de natación y zona de relax. Gimnasio, cabinas de masajes y tratamientos de todo tipo y todo lo que uno pueda desear para cuidado de mente y cuerpo se unen en esta zona exclusiva. Su esencia se basa en los 3 elementos principales presentes en la incomparable localización

del hotel: piedra, agua y luz. Y, como en todo el W Barcelona, atendido por personal especializado y con una amabilidad y cordialidad infinita.

En sus zonas exteriores, las Wet Deck Summer, donde sobresalen dos piscinas en alturas distintas. En una de ellas, y con vistas a la playa de la Barceloneta, se realizan todos los domingos del verano fiestas al aire libre que ya son famosas en toda la ciudad. Con gran afluencia de gente, la música es la protagonista contando para ello con la presencia de DJs internacionales.

Resumiendo, el W Barcelona Hotel es la elección perfecta para celebrar, disfrutar, dejarse llevar por su ritmo, su lujo rebelde y sobre todo por su cordialidad. Año tras año, además, es capaz de reinventar su oferta de ocio para sorprender tanto al público local, como a los jet-setters internacionales. Y sobre todo, y haciendo honor a su filosofía "Whatever, Whenever", en él podrás transformar tus sueños en realidad.

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