Diego Rivera impone rĂŠcord
Arte mexicano en ParĂs Coleccionistas de trivialidades Empezar con arte: Semillero de coleccionistas
$40.00
2017, No. 3
Todo coleccionista es un mecenas
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Sumario Tema de portada
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Supera Diego Rivera a Frida Kahlo e impone récord latinoamericano Por primera ocasión desde la muerte de los esposos y pintores mexicanos, Diego Rivera y Frida Kahlo, una de las obras del famoso muralista, se cotizó por encima de las de su mujer. Por Horacio Chávez
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El proyecto que busca convertir seis mil bebés en coleccionistas de arte
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Antigua Hacienda de Tlalpan DIRECCIÓN GENERAL
Eda Chávez EDITOR
Edwin Vidal REDACTORES
Horacio Chávez Laurence Vandiver Fernando Calvillo DISEÑO
Alejandro Mascarúa Maciel TRADUCCIÓN
Margarita Montero
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Efervescencia del arte mexicano en el siglo XX en París
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Todo coleccionista de arte es también un mecenas
ADMINISTRACIÓN
Laura Luz Sánchez
www.incurablecollectors.com Suscripciones y venta de ejemplares atrasados (55) 56877314 suscripciones@incurablecollector.s.com
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Incurable Collector, Año 1, Número 3, Enero 2017. Magazine mensual editado por Incurable Collector, S.A. de C.V. Reserva de Derechos de autor: 04-2013070813450500-102. Certificado de licitud y contenido: 11172. Certificado de título: 13599. Los artículos aparecidos en Incurable Collectors no pueden ser reproducidos parcial o totalmente por ningún medio escrito o electrónico sin autorización previa por escrito de Incurable Collectors, SA de C.V.
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Coleccionistas de trivialidades
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El glamour de Alexander McQueen
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Efervescencia del arte mexicano en el siglo XX en París La muestra de arte fue la más importante presentada en Francia desde hace casi 30 años y redescubrió la creatividad mexicana del siglo XX.
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na exhibición en la ciudad de París, presentó a más de 200 obras de artistas mexicanos, incluyendo de los tres grandes muralistas, Diego Rivera, José Clemente Orozco y David Alfaro Siqueiros, además de Frida Kahlo. De acuerdo a la embajadora de Francia en México, Maryse Bossière, “México 1900-1950, Rivera, Kahlo, Orozco y las vanguardias”, fue la manifestación más grande consagrada al arte mexicano en la nación europea desde 1990.
“La exposición sobre México, ofreció un panorama de artistas célebres mexicanos y de la efervescencia de la creatividad artística del país a lo largo del siglo XX”, dijo la diplomática. “El público redescubrió a los tres grandes muralistas que fueron Rivera, Orozco y Siqueiros, y que desempeñaron un papel tan importante en el desarrollo de la singularidad de un arte mexicano en los años 1920”. “También se reencontró con trabajos de otros célebres pintores
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Las Dos Fridas, de Frida Kahlo, 1939.
mexicanos como, Frida Kahlo y Rufino Tamayo”, destacó. La muestra fue una retrospectiva histórica del trabajo de 50 años de arte mexicano como parte de las gestiones del Año Dual México – Francia en 2016. Agustín Arteaga, curador de la exposición señaló por su parte que “buscamos profundizar en la realidad del arte mexicano, más allá de los titanes, conocidos internacionalmente como Rivera, Orozco, Siqueiros, Kahlo y Tamayo”. Durante mucho tiempo, la producción de arte en México estuvo marcada por una intención nacionalista de promoción de la identidad. Arteaga abundó que la muestra amplió la visión que se tiene en el extranjero sobre el arte mexicano de la primera mitad del siglo XX, y exploró a
aquellos artistas que fueron ensombrecidos por la figura de “los grandes”, pintores mencionados. Para lograrlo se eligió, junto a las pinturas una selección de obras que incluyen esculturas, fotografías, instalaciones y películas cinematográficas. Según Arteaga la obra de Kahlo y Rivera se volvió incluso parte de la cultura pop, por lo que ahora es tan conocida. El arte mexicano en Europa es parte de “el cliché máximo” porque solo reconoce a tres grandes figuras. Las mismas que dan nombre a la exposición México 1900-1950. Diego Rivera, Frida Kahlo, José Clemente Orozco y las vanguardias. La exposición presentó por ello creaciones de artistas menos conocidos como: Marius De Zayas, Saturnino Herrán, Francisco Goitia, Miguel
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El público podrá redescubrir a los grandes muralistas en el arte mexicano del siglo XX.
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La muestra es la manifestaciรณn mรกs grande consagrada al arte mexicano en la naciรณn europea desde 1990.
Se pueden ver las imágenes en blanco y negro de la película ¡Que viva México!, de Sergei Eisenstein.
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Durante mucho tiempo la producción de arte en México estuvo marcada por una intención nacionalista de la identidad.
Autorretrato, de Rosa Rolanda, 1952.
Covarrubias, Germán Cueto, Nahui Ollin, María Asúnsolo, Mathias Goeritz y Minerva Cuevas. El ex director del Museo Nacional de Arte y actual titular del Dallas Art Museum estimó que, “pensar sólo en tres grandes es una visión reduccionista, como lo es creer que todo (el arte mexicano) ocurre a partir de la Revolución”. “Por supuesto que tuvo un papel fundamental, pero el arte no acabó, como tampoco empezó ahí. Este país ha tenido un papel relevante y lo va a seguir teniendo, los artistas contemporáneos están siendo presentados y adquiridos por las instituciones más importantes del mundo”, precisó.
El arte mexicano comenzó a figurar internacionalmente a principios del siglo pasado. “En México se vivió la primera revolución social del siglo XX y fue la primera vez que se grabaron escenas en vivo y se difundieron a través del cine alrededor del mundo; eso creó una tensión particular”, opinó Arteaga. Por ello la figura de los artistas mexicanos empezó a tomar relevancia, a partir de su presencia en la Escuela de París. “Hubo relaciones entre los artistas a lo largo del Atlántico, más de lo que nos podamos imaginar; la correspondencia, la movilidad de las publicaciones, todo
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Una de las secciones importantes de la exposición es la de México y la Revolución.
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eso lo facilitaba. En 1921, Jean Charlot fue el primer artista que habló de que en México estaba ocurriendo un renacimiento como no estaba ocurriendo en ningún otro lugar del mundo”, dice. La exhibición presentó un retrato de Ramón Gómez de la Serna, un cuadro de la época cubista de Diego Rivera pintado en 1915 y prestado por el Museo de Arte de Latinoamérica de Buenos Aires, con la Poetisa de Ángel Zárraga: silueta femenina gris en tela de fondo, tres libros de color rojo (uno abierto, dos cerrados), un delicado rollo de papel y dos plumas en el primer plano. Estuvieron dos retratos de Diego Rivera: el de Adolfo Best Maugard y el de Angelina Beloff, pintado a la manera del Retrato de Madame Récamier (1800) de Jacques Louis David.
Una de las secciones importantes de la exposición fue la de México y la Revolución, que dedicó tres salas, una respectivamente a los tres grandes del muralismo: Orozco, Rivera y Siqueiros; y una cuarta en la que se rindió homenaje a las mujeres fuertes, pintoras, musas y mecenas. Autorretrato (El coronelazo), de Siqueiros; dos Vendedoras de alcatraces, de Diego Rivera (una pintada en 1942 y otra en 1943) o Cabeza flechada e Indias, de la serie Los Teúles, de Orozco. Destacaron también Tata Jesucristo y Paisaje de Zacatecas, de Francisco Goitia; Los músicos, de Luis Martínez; La tienda del buen poeta, de Roberto Montenegro; Sueño de la Malinche, de Antonio Ruiz El Corcito; y los cuadros Mujer con jarra y La danza de las Malinches, del artista de origen francés Jean Charlot.
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La vendedora de frutas, de Olga Costa, 1951.
La exposición ofrece un panorama de artistas mexicanos y de la efervescencia artística del país a lo largo del siglo XX.
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Todos estas piezas fueron acompañadas con las imágenes en blanco y negro de la película ¡Que viva México!, de Sergei Eisenstein, proyectada en una gigantesca pantalla. La muestra incluyó además obras espléndidas: Autorretrato, Sueño y Presentimiento, y Niña indiferente, de María Izquierdo; dos autorretratos de Olga Costa; otro de Rosa Rolanda, Gloria Marín de Rivera pintado por Amado de la Cueva; el Retrato de María Asúnsolo, de Siqueiros; y el Retrato de Dolores Olmedo, de Diego Rivera.
Nahui Ollin, quien aparece retratada en dos cuadros del Dr.Atl, en fotos sublimes de Antonio Garduño, además de la exhibición de varias obras suyas como Nahui y Lizardo frente a la bahía de Acapulco. No faltó Frida Kahlo, con sus composiciones Autorretrato con pelo cortado, Sol y Vida, Las dos Fridas, entre otras. Fernando Calvillo
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Coleccionistas de trivialidades Existen algunas colecciones privadas, incluyendo de obras de arte o joyas, cuyo valor alcanza miles de millones de dólares estadounidenses. Sin embargo otras llegan a tener solo un valor estimativo o sentimental cuando representan un “tesoro” exclusivamente para el propio coleccionista.
n esta ocasión centraremos nuestra atención en esas colecciones de objetos triviales. Al igual que la vida misma, cuando de colecciones se trata, aplica el dicho: “en gustos se rompen géneros”.
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E
l ejército de casi 500 figuras de troles diferentes de Sophie Marie Cross, en Reino Unido, es el mayor del mundo. En la mitología escandinava, los troles son monstruos malignos que habitan en bosques o grutas. Sophie empezó a coleccionar estas ¿adorables? y pequeñas criaturas en 2003. Los troles se caracterizan por su cabello alborotado, largo y colorido, su nariz chata y sus orejas puntiagudas parecidas a las de los duendes. Las figuras de la colección de Marie van de una que mide solamente un centímetro de altura hasta aproximadamente un metro. Algunos tienen ojos que se iluminan con baterías eléctricas y otros montan patineta. “Me parece que son personajes hermosos. Yo sé que tiene reputación de feos y malos, pero a mí me encantan sus caras”, señalo Marie Cross.
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Cientos de troles
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¿Señalando la ruta? L
a colección más grande de conos viales y de señalización de tránsito la tiene David Morgan, de Burford, Reino Unido, con casi medio millar de conos diferentes para el tráfico. Es dueño de dos tercios de todos los modelos que existen en el mundo. Morgan de 74 años de edad, es director de ventas de una empresa de objetos de plástico y aparece en el libro Guinness, de récords mundiales. “Para mí coleccionarlos tiene perfecto sentido, vienen en tantos diseños, colores y formas diferentes, además los modelos cambian constantemente”. El cono más preciado, y el más antiguo de su colección es uno de goma de 1956, Lynvale, fabricado en Escocia. 18
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n oso protagonista y sus amigos de varios libros familiares de Alan Alexander Milne, posteriormente llevado a la pantalla por los estudios de Walt Disney, son el objeto de esta colección considerada la mayor del mundo en su tipo. Cuando se hizo el recuento de los personajes de las aventuras de Winnie the Pooh, en la colección de la estadounidense, Deb Hoffmann, el 23 de febrero de 2009, había un total de cuatro mil 405 figuras diferentes. Deb empezó su colección en 1967 y según ella ha invertido cerca de 100 mil dólares en casi cuatro décadas de compras ininterrumpidas. Pooh vive en el Bosque de los Cien Acres en una casa construida dentro de un árbol que tiene un letrero con caracteres dorados sobre su puerta en el que dice “Mr. Sanders” con sus amigos Piglet, Tigger, Conejo, Ígor, Christopher Robin, Rito, Cangu, Búho, Topo, Lumpy el Elefante, y Darby
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El oso Winnie the Pooh
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Patos chicos y grandes… por millares
C
harlotte Lee, de Huntington Beach, Estados Unidos, posee la colección más grande de patos de goma. En 2011, tenía cinco mil 631 patos de goma diferentes, y comenzó a reunirlos en 1996. La profesora adjunta de la Universidad de Washington ha viajado alrededor del mundo comprando diferentes especímenes y sus amistades continúan obsequiándoselos para que incremente su colección. Su esposo que en un principio apoyaba incondicionalmente la afición de Lee y es un ávido cazador de… patos verdaderos, se encargó de construir durante meses las vitrinas de madera y cristal donde su mujer exhibe sus patos de goma dentro de su hogar. “A mí me gustan los patos de goma, a él le gusta cazar los reales, nos complementamos bien”, según Lee.
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Fotografía Interminable A
mediados de 2012, la mayor colección de películas para cámaras fotográficas sin revelar pertenecía a Ying Nga Chow, de Hong Kong, China, e incluía más de mil 250 películas analógicas diferentes. Ying es una aficionada a la fotografía analógica y comenzó su colección en 2008.
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Pikachu y algo más
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a colección más grande de objetos de recuerdo de Pokémon la tiene Lisa Courtney, de Welwyn Garden City, Reino Unido, con más de 16 mil artículos diferentes, que ha logrado aglutinar desde hace más de 14 años. Su colección incluye artículos de Reino Unido, Estados Unidos, Francia y, claro, Japón. La chica hizo varios viajes a Japón específicamente para reunir objetos de esta serie y videojuegos. Parte de la colección fue exhibida en el Museo de Hertford, como parte de una exposición sobre la cultura popular. “Con la ayuda de mis abuelos finados visite Japón al cumplir 21 años. Coincidí con la presentación allá de la undécima película de Pokémon para poder adquirir mercancía de edición limitada Shaymin, fue maravilloso”, explicó Courtney. La joven ha tenido que dejar su habitación en la casa de su madre donde reside, para guardar sus objetos coleccionables. Toda su familia apoya su pasión por coleccionar e incluso continúan regalándole objetos en fechas especiales. Courtney recuerda que su abuelita tuvo que ordenar su primera figura de Pokémon desde Japón para regalársela porque los personajes todavía no habían llegado a Reino Unido.
F
anático de la muñeca más sexy del mundo, Stanley Colorite se llama a sí mismo “El Hombre Barbie”: tiene las paredes de un dormitorio repletas con más de dos mil de las figuras, incluyendo ejemplares valuados en miles de dólares hasta otras muy antiguas, accesorios, casas, autos y completa su loca obsesión con casi mil muñecos, de Ken, el compañero de Barbie. Colorite, que vive junto con su pareja Dennis Schlicker, en Hudson Florida, dirige un negocio de limpieza. “Empecé con una sola muñeca y mi colección sigue creciendo. Barbie no es solo un juguete para niñas, es también para coleccionistas adultos. No puedo parar, es como una droga”, precisó.
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Dos mil Barbies 23
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Gnomos que cobran vida… A 24
nn Atkin, de Reino Unido, se encargó de armar la colección más grande de gnomos y duendes del mundo. Tiene nada menos que dos mil 42 de ellos, y todos viven con ella en un espacio de alrededor 15 mil metros cuadrados: en “La Reserva de Gnomos”, en West Putford, Devon, Reino Unido. Comenzó a coleccionarlos en 1978 después que uno de esos personajes se apareció en su sueño. Desde entonces los colecciona y los ha diseminado entre en los jardines con árboles de su casa de campo, a donde usted puede verlos junto con otros
25 mil visitantes cada año. Atkin cobra una módica suma por la vista que incluye el préstamo de un gorro de gnomo durante el recorrido. “Así creerán que usted es uno de ellos. Para mí los gnomos son una fuerza real y viva de la naturaleza”, destaco Atkin. Muchas de las figuras de su colección son fabricadas por la propia Atkin, que estudió en la Academia Real de Bellas Artes y quien los cuida y les brinda mantenimiento, incluyendo retoques de pintura, conforme lo van requiriendo.
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Hello… ¡Kitty!
A
sako Kanda es la dueña de la mayor colección del mundo de objetos de Hello Kitty y ostenta el récord mundial Guinness. La japonesa tenia la increíble cantidad de cuatro mil 519 personajes (en agosto de 2011). Su casa está llena de una gran variedad de productos relacionados con el pequeño gatito, incluyendo una sartén, un ventilador eléctrico y hasta un asiento de inodoro de Hello Kitty. Como otras tantas chicas de su generación, La fascinación de Asako con Hello Kitty comenzó durante sus días de educación primaria. “Kitty siempre ha estado conmigo, al menos inconscientemente…”, dijo en una entrevista hace algunos años, Kanda. Su marido, Hiroyuki, la intenta mantener a raya para que no gaste demasiado, pero no siempre puede. Hasta en su boda, en 2000, Asako encargó juguetes de peluche de Hello Kitty para los invitados. Su mayor sueño ahora es vivir en una casa como la de Hello Kitty y una lápida funeraria, cuando muera, con la temática de Hello Kitty.
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Para salir corriendo
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L
a mayor colecciรณn de zapatillas de deporte es propiedad de Jordy Geller de Nevada, Estados Unidos, con dos mil 388 pares de calzado deportivo. Jordy comenzรณ a reunir los pares en 1999, cuando empezรณ a comprar y vender calzado en eBay. Su colecciรณn se limita casi exclusivamente a la marca Nike. Todos los zapatos no han sido estrenados y estรกn en sus cajas originales.
[11] El rey de los ratones
J
anet Esteves, de Palm City, Florida, inició a coleccionar figuras de Mickey Mouse en 1970, después que visito con su marido, Disneylandia en 1970 en su luna de miel. Con el nacimiento de su primera hija en 1978 su pasión por las figuras del ratoncito aumentó y no ha dejado de juntarlas. Hasta el momento cuenta con más de dos mil 760 figuras coleccionables de diferentes tamaños. Ahora son sus nietos los que más parecen disfrutar su colección que mantiene en su casa como si fuera un museo. “Sí es una enfermedad, una verdadera obsesión que tengo con Mickey”, reconoció Esteves, luciendo unos aretes de oro con la figura del ratón y envuelta en el disfraz característico del personaje de Disney con todo y sus orejas negras y guantes blancos. El marido de Esteves mando instalar en su hogar un sofisticado sistema de aire acondicionado con filtros para evitar que su colección acumule polvo pero aun así ella la limpia diariamente.
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Supera Diego Rivera a Frida Kahlo e impone rĂŠcord latinoamericano Por primera vez, desde la muerte de la pareja de pintores mexicanos, Diego Rivera y Frida Kahlo, una de las obras del famoso muralista, se cotizĂł por encima del precio de venta de las de su mujer.
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Fragmento de Autorretrato con chango y loro, de Frida Kahlo, 1942.
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Diego Rivera es uno de los artistas mรกs importantes de la historia moderna y contemporรกnea latinoamericana.
Eduardo Costantini, fundador del MALBA, esperó más de 20 años por la pintura de Rivera, El Baile de Tehuantepec.
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ue sorpresivo para mí que después de 21 años esta obra se vendiera”, dijo el coleccionista argentino, Eduardo Costantini. Costantini, fundador y presidente del Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA), dice que llevaba esperando más de dos décadas por la pintura de Rivera, “El Baile de Tehuantepec”. Le fue imposible adquirirla en una subasta de la casa Sotheby’s en mayo de 1995. “Cuando recibí un email de Phillips hace poco para avisarme que el cuadro estaría nue-
vamente disponible, se me rompieron todos los esquemas. Fue emoción pero también duda. No podía creer que efectivamente que se tratara de esta obra”, precisó. Costantini pago 15 millones 700 mil dólares en mayo de 2016 a la casa de subastas Phillips, con sedes en Londres y Nueva York, por el cuadro en una transacción privada. La obra que mide dos metros de largo por 1.63 de ancho es uno de los cuadros en tela más grandes del artista mexicano.
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El Baile de Tehuantepec, de Diego Rivera, 1928.
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Rivera, quien fuera marido de Kahlo, pintรณ El Baile de Tehuantepec en su etapa de realismo social.
Dos desnudos en el bosque (La tierra misma), de Frida Kahlo, 1939.
Costantini explica que para él Rivera es el artista más importante de la historia moderna y contemporánea latinoamericana y que Baile en Tehuantepec es una de sus obras principales sobre tela. “Hay muy pocas obras de arte latinoamericano que son icónicas y superlativas”, aseguró, Costantini, al considerar Baile en Tehuantepec es una de ellas. Abundó que “es difícil explicar por qué una obra tiene energía y vibración, pero ésta claramente lo tiene”, consideró.
A pesar del interés del argentino explicó que en la subasta de 1995 solo logró comprar el cuadro de Kahlo Autorretrato con chango y loro por cuestiones de presupuesto. El Baile de Tehuantepec fue pintado en 1928 y muestra un grupo de seis hombres y mujeres con atuendos típicos bordados y vivos colores, bailando al compás de una pieza de música autóctona conocida como La Sandunga, bajo la sombra de un árbol de plátano.
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Eduardo Constantini precisó que el cuadro estará exhibiéndose en su museo de Buenos Aires.
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El coleccionista argentino precisa que el cuadro se exhibirá en su museo de Buenos Aires, y lo prestara al Museo de Arte de Filadelfia y al Museo ARCO de Madrid, España. Según Augusto Uribe, vicepresidente para arte latinoamericana de Phillips, la pintura es la de mayor relevancia en manos de un coleccionista privado fuera de México debido a que ese país prohíbe la exportación de piezas de artistas mexicanos. El cuadro fue presentado por primera vez en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York en 1930 y un año después se exhibió en el marco de una importante retrospectiva de Rivera organizada por
el MOMA (museo de Arte Moderno) de Nueva York. Según Uribe, la obra muestra claramente el estilo propio en la obra de Rivera mediante el que creó una identidad nacional abrazando la “mexicanidad” al romper con las corrientes artísticas europeas del modernismo. Rivera, quien fuera marido de Kahlo, lo pintó en su etapa de realismo social, luego de sus obras cubistas. Después de exhibirse en Nueva York por primera vez, la obra fue expuesta en otros lugares de Estados Unidos y Europa. Entre 1962 y 1995 perteneció a la colección de la Galería de Ciencia y Arte
En 1995, Constantini solo logró comprar el cuadro de Kahlo Autorretrato con chango y loro por cuestiones de presupuesto.
de IBM. En la subasta de 1995 fue adquirida por un coleccionista anónimo y quedó fuera de exhibición. El precio pagado por Costantini impuso varias marcas sin precedentes, al establecer un nuevo tope histórico para una pintura de un artista latinoamericano. Fue la primera vez desde la muerte de Rivera y Kahlo, en que una pintura del gran muralista superó en precio a uno de los cuadros de la que fuera su esposa. En mayo de 2016 el cuadro de Kahlo denominado, Dos desnudos en el bosque (La tierra misma) fue adquirido en una subasta de Christie’s por poco más
de ocho millones de dólares, imponiendo un nuevo récord histórico para Kahlo y el arte latinoamericano. Dicho récord monetario duró poco más de una semana al ser batido ocho días después, casi al doble de precio, por la obra de Rivera,que compro Constantini. Cuando se subastó en 1995, El Baile de Tehuantepec, se vendió por dos millones 800 mil dólares y hasta ahora era la obra más cara del pintor mexicano. Horacio Chávez
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El proyecto que busca convertir seis mil bebés en coleccionistas de arte En 2006, mientras se desempeñaba como profesor adjunto en Pittsburgh, Pensilvania, el fotógrafo, Matthew Conboy, se sorprendió al enterarse que la mayoría de sus alumnos, jamás habían visitado alguno de los museos de la ciudad.
ittsburgh tiene una riqueza de museos de arte, el Carnegie, el Mattress Factory, y no estaban aprovechando estas oportunidades”, señaló Conboy. Casi al mismo tiempo, con el equipo local de futbol americano, Acereros de Pittsburgh encaminado hacia el Súper Tazón (que finalmente ganaron), los hospitales de la ciudad estuvieron regalando a los padres de bebes recién nacidos toallas amarillas, llamadas de cariño, toallas terribles, las mismas que los fanáticos agitan al aire entusiásticamente durante los partidos. 38
“Guardé eso en mi mente, pensando en ese regalo y pensando al mismo tiempo en mis estudiantes, quienes seguramente tendrían un clóset lleno de esas toallas cuando se hubieran inscrito en la universidad”, precisó Conboy. Durante los años siguientes, Conboy, siguió pensando en el regalo del hospital a los recién nacidos y así desarrollo un proyecto para involucrar a residentes de Pittsburgh con el medio cultural de la ciudad. Asimismo ideó la forma de apoyar a artistas locales mediante la exhibición de sus obras a nuevas audiencias.
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Su iniciativa, nació el primero de enero 2015, y la llamo, “Empezar con Arte”, mediante la cual se obsequia a bebés recién nacidos una copia impresa de una fotografía de edición especial de la obra de un artista de Pittsburgh. “Estoy usando el modelo que los hospitales ya tenían, cuando obsequiaban toallas terribles, pañales o comida para bebé a los papás y mamás de recién nacidos, pero yo en lugar de eso estoy utilizando arte”, explicó Conboy. Trabaja con 12 artistas diferentes de la ciudad cada año, dedicando un mes entero al trabajo de cada uno de ellos. Mensualmente imprime entre 275 y 350 copias de fotografías en su estudio (con
una impresora que le dono Epson), y las entrega a tres hospitales locales: Midwife Center for Birth & Women’s Health, St. Clair Hospital, y UPMC Mercy. De acuerdo a Conboy dichos nosocomios estuvieron de acuerdo en apoyar desde el inicio su proyecto, “Empezar con Arte”. Durante los pasados dos años ha podido así, regalar las fotografías de las obras de arte a casi seis mil bebes recién nacidos para que las admiren y se convierten esencialmente en coleccionistas de arte potenciales desde el primer día de su nacimiento. La dedicación de Conboy hacia una nueva generación de amantes del arte se equipara solo con su convicción de apoyar a artistas de Pittsburgh.
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It’s a Beautiful Day, de Rose Clancy, 2017.
“Empezar con Arte” obsequia a bebés recién nacidos una copia de una fotografía de la obra de un artista de Pittsburgh.
“Pensaba lo difícil que es para un artista atraer con su trabajo nuevas audiencias, y la única demografía que se me ocurrió que es incapaz de decir que no, son los bebés”, reconoció. Destacó que los bebés se ven obligados prácticamente “a aceptar los regalos”, porque todavía no han aprendido a rechazar nada. Conboy quien posee una maestría en Bellas Artes, con especialidad en fotografía, estimó que su propio enfoque multidisciplinario le permitió expandir los horizontes de su proyecto más allá de sus colegas fotógrafos.
Otros artistas con los que se ha asociado hasta ahora incluyen bordadores, impresores e incluso poetas, quienes reciben honorarios modestos. “He trabajado con artistas de diversas disciplinas, a algunos ya los conocía y a otros, cuyo trabajo respeto, que no conocía personalmente”, admitió Conboy. Enfatizó que antes de que un artista acepte participar en su proyecto y le presente una fotografía de su obra, se reúne con cada uno de ellos en privado para platicarles los objetivos de, “Empezar con Arte” y para asegurar que estarán totalmente dedicados al proyecto durante al menos 30 días.
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Blue-breasted Kingfisher, de Maria Mangano, 2015.
“Empezar con Arte” ha regalado fotografías a casi seis mil bebes para que se convierten en potenciales coleccionistas de arte.
Además les entrega una pequeña guía con consejos elementales. “Les digo que no busquen complacer los gustos de los bebés. Quiero que esos bebés y sus familias sigan disfrutando de esas obras, lo mismo hoy que 30 o 50 años después”, subrayó. En ese sentido Conboy dijo que, “por eso les insisto que no necesariamente tiene que ser la imagen de un patito o un corderito en colores pasteles. Deseo que presenten obras serias”. Empero, aseguro que debido al respeto que le merecen todos los artistas, gozan de libertad de estilo y de la elección del tema de su trabajo.
“Abarcan desde paisajes, hasta abstracciones pasando por obras de artes extremadamente conceptualizadas”, describió Conboy. Puso como ejemplo una copia impresa de una fotografía que uno de los artistas presentó en diciembre pasado en la que mostraba una escultura en el bosque de otro artista, Danny Bracken. Los artistas pueden elegir libremente si comparten sus obras existentes o las de otros, o si crean algo completamente nuevo. “Algunos disfrutan creando algo totalmente nuevo y eso es muy común entre los fotógrafos”, acotó.
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Los artistas gozan de libertad de estilo y de la elecciรณn del tema de su trabajo / Rising, Gathering, de Danny Bracken, 2016.
Se planea ampliar el proyecto a otros hospitales y a más ciudades de Pensilvania, incluso hasta Maryland y Wisconsin.
Conboy reconoció que en julio pasado colaboró con la poetisa Jessica Server, quien incluyó una impresión de uno de sus poemas en una fotografía. Inicialmente Conboy se asoció con artistas emergentes jóvenes, entre los 20 y 30 años de edad, pero en fechas recientes ha buscado la colaboración de nombres más reconocidos como son: Martha Rial, premio Pulitzer de fotografía, Lori Hepner y Dylan
Vitone, cuyos trabajos están siendo enviados a la Luna por la Universidad Carnegie Mellon. “Estamos en nuestro tercer año y nadie me ha dicho que no todavía”, señaló Conboy. De la misma manera que artistas y hospitales han participado animadamente en el proyecto, también hay benefactores que generosamente han brindado apoyo económico.
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North Star, de Casey Droege, 2010.
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Conboy confesó que inició su iniciativa con una donación de 10 mil dólares del grupo privado, Crusade for Art, y desde entonces recibe fondos también del Consejo de Artes de Pittsburgh, del Opportunity Fund, y de Heinz Endowments, que servirán para cubrir los gastos en 2017. Reveló que ha iniciado conversaciones para ampliar su proyecto a otros hospitales mediante franquicias y a más ciudades de Pensilvania, e incluso hasta Maryland y Wisconsin. “Me parece que en este año es cuando podemos empezar a pensar en crecer a una escala mayor”, concluyó.
Según Conboy el proyecto ha demostrado ser positivo para miembros de la comunidad que se benefician con las fotografías de las obras de arte como el caso de una familia inmigrante de Bután que recibió una copia de una pintura de Terry Boyd. Casualmente Boyd eligió pintar un paisaje real de un monte con un sembradío de arroz en Bután que la familia reconoció y quedó conmovida. Otra familia obtuvo una fotografía del trabajo de Kara Skylling, y al mostrarla a otros amigos, les gusto tanto a éstos, que ahora compran obras de la artista cada año para sus pequeños hijos. Felipe Pando
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Antigua Hacienda de Tlalpan,
calidad en el más selecto ambiente
Dirección: Calzada de Tlalpan 4619, México, DF Horario: Lunes a sábado de 12:30 pm a 1:00 am hrs. y domingos de 12:30 pm a 19:00 hrs. Reservaciones: 5655 7888 / 5573 2361 www.aht.mx
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o más exquisito de la cocina clásica internacional, en un ambiente selecto y elegante de la ciudad de México, forman el carácter del exclusivo restaurante Antigua Hacienda de Tlalpan. Una señorial hacienda cuya construcción data desde 1837, situada en el corazón del Tlalpan colonial, la Antigua Hacienda de Tlalpan, es un sitio ideal para sus citas personales o de negocios y animadas reuniones, por su calidad gastronómica y avanzado concepto de servicio. La regia construcción rodeada de amplios y bellos jardines, que en otros tiempos fue lugar de descanso, conserva sus más sofisticados detalles para brindar a los comensales un marco de gran exclusividad, mientras disfrutan lo más exquisito de la muestra gastronómica internacional y de la fina cocina mexicana.
CHILES en NOGADA (Para una persona)
Ingredientes 1 pza 200 grs 60 ml 10 grs 40 grs 10 grs 1 pza 10 grs 60 ml
Relleno Durante los 365 días del año la Antigua Hacienda de Tlalpan deleita a sus comensales con agradable música en vivo en sus amplios salones y jardines. El grupo de expertos chefs del restaurante la Antigua Hacienda de Tlalpan prepara con maestría los más famosos platillos de la gastronomía internacional y de la cocina mexicana. Todas las ocasiones y todos los gustos encuentran perfecta solución con un amplio servicio que incluye: cinco bares, dos comedores con servicio a la carta para 230 y 350 personas, dos terrazas, cinco salones privados para banquetes, un maravilloso jardín que puede reunir hasta mil personas en celebraciones sociales y eventos especiales y amplio estacionamiento para más de 250 automóviles.
150 grs 5 grs 10 grs 10 grs 10 grs 30 grs 1 hoja 1 ramito
chile Poblano relleno salsa nogada nuez en mitades granada perejil chino huevo harina de trigo aceite molida de res azúcar acitrón uva pasa almendra fileteada pasta de tomate laurel tomillo sazonador de carnes
Salsa de nogada
20 grs nuez en mitades 125 ml leche fresca 20 grs crema natural 10 grs anís dulce sazonador
Procedimiento Para preparar el chile
Asar los chiles sobre fuego directo, retirar la piel hasta que queden limpios.
Para relleno
Acitronar la cebolla picada en el aceite, añadir las pasas, las almendras fileteadas y la carne. Ya cocida la carne se agregan la pasta de tomate, acitrón, laurel y tomillo.
Para la nogada
Licuar la nuez con la leche fresca y la crema natural. Sazonar al gusto.
Para el chile
Rellenar el chile, enharinar, capear y después freír.
Montaje
Bañar el chile con la nogada, decorar con perejil picado, granada y nuez en mitades.
María Luisa Gaspar
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Todo coleccionista de arte es también un mecenas La Feria Internacional de Arte Emergente, de Madrid, España, #WeAreFair, pretende poner en valor las nuevas tendencias artísticas: nuevos espacios expositivos, artistas y proyectos que exploren nuevos territorios. Nos comenta en entrevista, Marta Pérez Ibáñez.
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Marta Pérez Ibáñez, colaboradora de #WeAreFair, desarrolla su actividad profesional en los sectores de la gestión y la docencia desde hace más de veinte años. Ha impartido clases magistrales y seminarios en el Máster de Museología de la Universidad Complutense de Madrid, el Instituto Superior de Arte, , la Escuela de Negocios ESCP Europe y la Fundación Claves de Arte, entre otros. Actualmente, compagina la gestión cultural y artística con la docencia en la Universidad Nebrija y otras universidades e instituciones públicas y privadas. Es investigadora, autora habitual de artículos y ponencias, y Section Editor sobre mercado español de arte en la editorial alemana De Gruyter.
s la primera vez que realizas una actividad de este tipo, no? Todo en We Are Fair es nuevo, también mi participación en una feria, hablando precisamente de un tema que tiene tanto que ver, como estimular el coleccionismo de arte en los más jóvenes. ¿Cómo surgió la idea? Cuando José Antonio Mondragón me habló del proyecto de We Are Fair hace meses, me planteó su interés por ocupar un espacio que hasta ahora no se había tratado en otras ferias, como era éste, posibilitar el acercamiento de los niños y los jóvenes al coleccionismo del arte. No sólo a la apreciación del arte, sino al interés por coleccionar obras de arte. Me pareció una idea brillante, me hizo reflexionar sobre este tema, buscar información en muchas fuentes, hablar con coleccionistas de distintas generaciones y llegar a conclusiones que presentaremos en la feria.
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Apreciar el arte no es sólo apreciar la estética o la forma, sino también el discurso del artista, lo que el artista nos transmite.
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¿En qué consistirá tu actividad? We Are Fair contará con un programa de visitas y actividades para niños y jóvenes, lo que confío en que estimulará esa necesidad de acercar el arte contemporáneo a esa generación. El lenguaje que los más pequeños demandan es distinto al que usamos los adultos, y su forma de acercarse al arte también lo es. De estas visitas y charlas sacaremos muchas conclusiones sobre cómo entienden y aprecian el arte, lo que les gusta y lo que les plantea cuestiones, que es, en definitiva, lo que el arte contemporáneo tiende a provocarnos. Mi charla, además de analizar estas cuestiones, recogerá ejemplos de grandes
coleccionistas en el inicio de su actividad, y de algunos coleccionistas actuales, padres y madres de los coleccionistas del futuro. ¿A qué edad estamos preparados para coleccionar arte? Quizá la pregunta sería “¿a qué edad estamos preparados para apreciar el arte?”, y mi respuesta es: “desde muy pronto”. Apreciar el arte no es sólo apreciar la estética o la forma, sino también el discurso del artista, lo que el artista nos transmite. Desde muy pequeños, cuando nos enfrentamos a la obra de arte, descubrimos todo un mundo de cosas que
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We Are Fair se interesa por posibilitar el acercamiento de los niños y los jóvenes al coleccionismo del arte.
con el tiempo y la educación irán evolucionando, al igual que evolucionamos nosotros. Si desde pequeños enseñamos a los niños a observar, aprenderán a apreciar y a valorar. “Todo coleccionista de arte es también un mecenas”. A partir de ahí, igual que empezamos coleccionando cromos, chapas o conchas de la playa, también los niños pueden desarrollar el deseo y la necesidad de rodearse de objetos especiales que, por su estética o por su significado, tengan un valor especial: eso ya es una forma de coleccionar arte.
¿Quién educa el amor al arte? Considero que la primera lección de apreciación de la cultura y el arte se debe aprender en casa. Una casa en la que los niños crecen rodeados de libros, de arte, donde se descubre cultura cuando se viaja, donde la cultura es uno más de los temas de conversación, es más susceptible de ser el hogar de nuevos coleccionistas. A partir de ahí, sin el apoyo de la educación cultural y artística en los colegios e institutos, es muy difícil mantener ese nivel y conseguir que los jóvenes se interesen por la cultura, que
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El lenguaje que los más pequeños demandan es distinto al de los adultos, y su forma de acercarse al arte también lo es.
es imprescindible. Dice la máxima que “un niño que lee será un adulto que piensa”, y eso también se aplica al interés por el arte.
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¿Qué están haciendo las ferias para cultivar el coleccionismo a temprana edad?, ¿es suficiente?, ¿qué valor tiene para ti? En realidad, de las muchas ferias que se simultanean en Madrid, no conozco ninguna que fomente el coleccionismo de los más jóvenes, aunque sí hay programas de actividades infantiles en ARCO, por ejemplo. Por eso, es un reto apasionante que We Are
Fair lo incorpore a sus iniciativas, y espero que tenga repercusión y dé resultados interesantes. Estoy deseando, sobre todo, conocer la impresión de los adolescentes, que es un punto de vista distinto y muy enriquecedor, y son los que más cerca están de invertir parte de su paga en arte contemporáneo. Es todo un reto. ¿Qué es para ti una colección? El término coleccionismo, derivado del latino collegere, habla de reunir objetos de una misma categoría, elegidos según un determinado criterio y con el
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Cuando coleccionamos arte, buscamos participar del discurso del artista, identificarnos con su forma de entender el mundo.
fin de producir satisfacción a su dueño. El deseo de posesión y un cierto fetichismo son características comunes de casi todos los coleccionistas. Cuando coleccionamos arte, buscamos también participar del discurso del artista, identificarnos con su forma de entender el mundo. El afán por poseer objetos que tienen un valor para nosotros aparece desde muy temprana edad. Como decíamos antes, una cierta cultura y una cierta curiosidad hacen que el joven coleccionista aprenda a valorar también la creación artística y la propia figura del artista, y quiera rodearse de obras de arte. El valor del coleccionista es, además, su capacidad para posibilitar la creación artística, para favorecer que el artista sobreviva y cree. Todo coleccionista de arte es también un mecenas.
¿Cuál es el mejor ejemplo para ti de un joven coleccionista? Quizá uno de los ejemplos que más me gustan es el de J. Paul Getty, que cuenta en sus memorias cómo, de adolescente, a principios del siglo XX, vino a estudiar a Europa y aprovechó para visitar museos y enamorarse del arte, comprar pequeñas porcelanas, grabados, “hasta donde le llegaba el presupuesto”. Años más tarde, cuando la bolsa de Nueva York se desplomó, su fortuna petrolera le permitió volver y adquirir muchas de las obras que le habían fascinado de joven, y su colección creció hasta lo que conocemos en la actualidad. Así han empezado muchos coleccionistas. Nuria García Arias
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El glamour de
Alexander McQueen
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a temporada pre-verano 2016 de la casa Alexander McQueen desborda glamour con un toque de los años cuarenta. Es una tendencia general de la temporada verano 2016 dedicada a lo inocente y a la vestimenta pastoral. Esta versión lírica, con guiños tanto a la oscuridad como a la luz, ha sido un triunfo para Sarah Burton y el difunto Alexander McQueen. Trajes de noche, faldas cortas o, incluso, de vaqueros; todos ellos causaban el mismo efecto de intenso embellecimiento en el desfile de McQueen. Sarah Burton dice que creó la colección, “pensando en la obsesión de una mujer con las posesiones que atesora”, como sus alhajas, maquillajes y las cosas que colecciona. Una colección femenina que hace fantasear por momentos. Cada temporada, Burton tiene un truco para encontrar una nueva fisura en el mundo de McQueen.
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Es capaz de hacer jirones de organza y sugerir que detrás de la belleza más deteriorada hay una historia.
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