LA TRANSFORMACIÓN SOCIAL COMO COMPONENTE PRINCIPAL EN LA ESTETICA DE LA CIUDAD “La ciudad no es lo urbano. La ciudad es una composición espacial definida por la alta densidad poblacional y el asentamiento de un amplio conjunto de construcciones estables, una colonia humana densa y heterogénea conformada esencialmente por extraños entre sí. La ciudad, en este sentido, se opone al campo o a lo rural, ámbitos en que tales rasgos no se dan. Lo urbano en cambio, es otra cosa: un estilo de vida marcado por la proliferación de urdimbres relacionales deslocalizadas y precarias. Se entiende por urbanización, a su vez, ‘ese proceso consistente en integrar crecientemente la movilidad espacial en la vida cotidiana, hasta un punto en que ésta queda vertebrada por aquella’. La inestabilidad
se
convierte
entonces
en
un
instrumento
paradójico
de
estructuración, lo que determina a su vez un conjunto de usos y representaciones singulares de un espacio nunca plenamente territorializado, es decir sin marcas ni límites definitivos”.1 Manuel Delgado, “El animal público”. Capítulo 1: Heterópolis: La experiencia de la complejidad.
Para entender el concepto de transformación dentro de las sociedad, es preciso hacer un paréntesis y detenerse en la historia, que hoy luego de siglos y siglos ha llevado al individuo a construir y ampliar el significado de lo que debería ser la respuesta al sentido de grandeza que representa la arquitectura y el hombre dentro del mismo entorno. Es entonces cuando se plantean miles de preguntas que no son más que el mismo cúmulo de espacios en que el hombre se ve absorto a lo largo de la vida, llegando a la sencilla conclusión de que las estructuras son parte de toda la dinámica en la experiencia de construcción del sentido de la vida
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Manuel Delgado. El animal político: Heterópolis: la experiencia de la complejidad. Barcelona: Editorial Anagrama, 1999. Pág. 23.
del hombre en sociedad; y más que su estética, es la aglomeración de sentimientos abstractos, que le permiten entender su estrecha relación con el arte.
La forma entonces de interpretar la ciudad ha llevado al ser humano a hacer todo un análisis antropológico donde combina la relación entre los espacios físicos y el comportamiento de los individuos, que son el resultado de la identidad y la cultura que se desarrolla dentro de las ciudades, donde cada planeación y sistematización de los proyectos es pensada en gran medida en el impacto que no solo pueda traer para el cuidado del medio ambiente, sino, que antes de todo, está la gente, como signo de inspiración para que los espacios sean el resultado de un sentido desarrollado dentro del contexto pasado, presente y futuro. Richard Alonso Uribe Hincapié en su ensayo “Referentes prohibidos del lenguaje y la ciudad” dice: La ciudad, por ende, funciona como un lienzo que ha sido inspirado por el ciudadano – pintor; se retrata en esa galería urbana de contemplaciones para generar vida y sentido … Este artesano urbano talla en su propio espacio toda una poética de su propia condición estética humana … 2 Porque es al mismo tiempo que el sentido de las cosas se puede ver evocada en cada rincón de la ciudad, donde el individuo plasma en la estética la necesidad de transformar el ornamento, sosteniendo un estilo que no es más que el resultado de lo que puede llegar a engalanar su contexto de vivencias diarias. Laura Mercader en libro “Antoni Gaudí: escritos y documentos” precisa con respecto a la estética y la importancia que supone el ornamento dentro de la transformación de los espacios: “la ornamentación, puede ser interesante, ha de representar objetos que nos recuerdan ideas poéticas, que constituyan motivos. Los motivos son históricos, legendarios, de acción emblemáticos, fabularios con respecto al hombre y su vida, acciones y pasiones”.3
2
Olga Lucía Arbeláez Rojas, Adriana del S. Álvarez Correa, Juan Eliseo Montoya Marín (Compiladores). Lectura y escritura en la Universidad (Tomo 4): “Referentes prohibidos del lenguaje y la ciudad”. Medellín: Universidad Pontificia Bolivariana, 2012. Pág. 86 – 87. 3 Laura Mercader. Antonio Gaudí: Escritos y documentos. Barcelona: El Acantilado, 2002. Pág. 42.
Es así, como a partir del proceso de investigación, no solo presencial sino a través de las diferentes civilizaciones, entendimos la dinámica de las ciudades, dentro de contextos donde el individuo se ha encargado de crear espacios de gratitud a ciudades como las sumerias, persas, egipcias, griegas, romanas, islámicas, medievales, europeas, incas, mayas, aztecas, renacentistas, rococó y barrocas. Dándole sentido a las necesidades de una ciudad y su cambio evolutivo, que ha sido la síntesis de una arquitectura que más que estética, ha permitido integrar los cambios sociales y culturales de una región, una ciudad, un país y hasta un mundo entero, y que hoy son parte de la estrecha relación entre la TRANSFORMACIÓN y el SER HUMANO.
El filósofo, pedagogo y psicólogo estadounidense Jhon Dewey decía: “La experiencia estética es una manifestación, un registro y una celebración de la vida de una civilización, un medio de promover su desarrollo, y también el juicio último sobre la cualidad de una civilización”.4
4
http://www.frasesypensamientos.com.ar/frases-de-estetica.html
BIBLIOGRAFÍA - El animal político / Manuel Delgado. Barcelona: Editorial Anagrama, 1999. 219 P.
- Lectura y escritura en la Universidad (Tomo 4) / Olga Lucía Arbeláez Rojas, Adriana del S. Álvarez Correa, Juan Eliseo Montoya Marín (Compiladores). Medellín: Universidad Pontificia Bolivariana, 2012. 286 P.
- Antonio Gaudí: Escritos y documentos / Laura Mercader. Barcelona: El Acantilado, 2002. 332 P.
CIBERGRAFÍA -
http://www.frasesypensamientos.com.ar/frases-de-estetica.html
Realizado por: Isabela Castaño Díez. María Montoya Mejía. Carolina Arbeláez Hernández. Susana Casas Toro.