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REPORTAJE
La consulta dental, un centro clave para detectar la diabetes de forma temprana
Diferentes estudios han demostrado la relación bidireccional entre la enfermedad periodontal y la diabetes. Los diabéticos son más susceptibles a enfermedades de las encías y la enfermedad periodontal severa puede empeorar la diabetes, afectando el control de la glucemia. En los últimos dos años ha aumentado un 42% el número de personas con diabetes en España que ya es de 5,1 millones, siendo el segundo país con mayor prevalencia en Europa, según la 10 Edición del Atlas de la Diabetes de la Federación Internacional de Diabetes (FID). Además, el 30,3% de las personas que viven con diabetes en España no están diagnosticadas. «La consulta dental es un centro sanitario idóneo para cribar pacientes que pueden padecer prediabetes o diabetes sin saberlo», destaca el Dr. Miguel Carasol Campillo, coordinador de la Alianza por la Salud Periodontal y General de la Sociedad Española de Periodoncia (SEPA).
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Dr. Miguel Carasol (SEPA): "La consulta dental es un centro sanitario idóneo para cribar pacientes que pueden padecer prediabetes o diabetes sin saberlo"
Hay un porcentaje importante de la población que acude anualmente al dentista, pero no va al médico porque piensa que se encuentra bien. «SEPA ha desarrollado un protocolo muy sencillo de cribaje, mediante el cual, si en algún momento de las visitas del paciente se sospecha la posibilidad de diabetes, mediante la historia clínica, la presencia de algunas manifestaciones orales más frecuentes en el paciente con diabetes, o la realización de pruebas más específicas, pero muy sencillas, como el cuestionario Findrisk o la determinación de hemoglobina glicada en sangre capilar, el dentista puede recomendar al paciente que acuda a su médico especialista en atención primaria o al endocrinólogo, para que realice el diagnóstico oportuno de la enfermedad», detalla.
El Dr. Miguel Carasol subraya que este sencillo procedimiento puede tener un «valor preventivo enorme» a nivel de salud pública, ya que en España existen más de 40.000 dentistas distribuidos en unas 22.000 clínicas dentales. Una diabetes mal controlada se asocia con una mayor prevalencia y gravedad de la enfermedad periodontal. Asimismo, hay patologías e infecciones crónicas, como la enfermedad periodontal, que pueden aumentar el riesgo de padecer diabetes.
Conocimiento sobre diabetes y salud oral
«Es muy habitual encontrarnos con las personas con diabetes muy familiarizadas con aspectos concretos de la diabetes: tratamientos, tecnología, nutrición, etc… Sin embargo, hay áreas muy relacionadas directamente con la enfermedad en las que falta divulgación y concienciación». Así lo recalca Jorge Hinojosa, gerente y responsable de relaciones institucionales de la Asociación Diabetes Madrid. «Hay una relación bidireccional entre salud bucodental y diabetes extraordinaria».
Respecto a los hábitos y precauciones específicas de las personas con diabetes a la hora de cuidar su salud oral, el gerente de la Asociación Diabetes Madrid señala que hay que tener en cuenta tres consideraciones: «mayor control de la glucosa ya que la insulina puede afectar de forma distinta (elegir las mañanas para la consulta médica), atención especial dadas las mayores dificultades de cicatrización tras las intervenciones y una mayor vigilancia de la salud bucodental ya que la diabetes ayuda a la aparición de enfermedades periodontales»
Principales problemas de salud oral en pacientes con diabetes
Son numerosas las lesiones orales que se pueden presentar en los pacientes con diabetes, fundamentalmente en los enfermos que tienen un mal control metabólico. «Entre las mismas, destacan infecciones como la candidiasis, la caries dental progresiva, la periodontitis o los abscesos recurrentes. Es frecuente también la presencia de boca seca, el síndrome de boca ardiente, las lesiones liquenoides o la mala cicatrización de las heridas», explica el Dr. Miguel Carasol.
De todas ellas, destaca la periodontitis, enfermedad inflamatoria crónica que destruye los tejidos que sustentan al diente. «Existe una evidencia científica muy importante que relaciona la diabetes de manera bidireccional con la periodontitis. Por un lado, una persona con diabetes tiene un mayor riesgo de desarrollar periodontitis y de que ésta progrese más rápido, como consecuencia de la respuesta inmune e inflamatoria alterada frente a los patógenos bacterianos del biofilm de la placa dental. Por otro lado, los pacientes con periodontitis tienen un riesgo aumentado de sufrir diabetes, de que el control metabólico de la enfermedad sea más complejo y de padecer complicaciones a largo plazo asociadas a la diabetes», afirma.
Jorge Hinojosa (Asociación Diabetes Madrid): "Hay áreas muy relacionadas directamente con la diabetes en las que falta divulgación y concienciación"
Además, asegura que es muy destacable que, en pacientes con periodontitis y diabetes, el tratamiento periodontal es «seguro, eficaz y, además, beneficioso a la hora de mejorar el control metabólico de la diabetes». Por ejemplo, en la periodontitis avanzada, subraya que el tratamiento periodontal básico puede conseguir «una reducción en la hemoglobina glicada de aproximadamente 0,4%, equivalente a la utilización de un segundo agente hipoglucemiante».
Precauciones del odontólogo al realizar tratamientos a pacientes diabéticos
El Dr. Miguel Carasol expone que, cuando el odontólogo va a tratar a pacientes diabéticos, «además de la completa exploración estomatológica, es esencial realizar una historia clínica general que refleje los antecedentes, la presencia de diabetes o de las complicaciones crónicas de la enfermedad» (nefropatía, arteriopatía, neuropatía autonómica, etc.). Igualmente, considera esencial valorar lo que haga sospechar al odontólogo de la presencia de una diabetes no conocida por el paciente (cuestionario Findrisk, hemoglobina glicada…). Además, hay que considerar el tratamiento antidiabético que tiene el paciente, valorando los fármacos que pueden inducir hipoglucemia por la modificación de la ingesta posterior. «Por ejemplo, no administrar el antidiabético o reducir la dosis de insulina un 20-50%».
El Dr. Miguel Carasol precisa que «es muy importante valorar el riesgo del procedimiento odontológico en función de la situación clínica del paciente, sobre todo en lo relativo al control metabólico de la enfermedad, teniendo siempre prevista la posible incidencia de complicaciones agudas (hipoglucemia, hiperglucemia). Es muy recomendable el control de la glucemia antes del procedimiento y durante el mismo, si es prolongado». En este caso, se debe tener en cuenta si el paciente se encuentra en ayunas, o alternativamente realizar una determinación de hemoglobina glicada previa al tratamiento, lo cual obvia esta situación.
En cualquier caso, y ante cualquier tipo de duda, el coordinador de la Alianza por la Salud Periodontal y General de SEPA recuerda que «la consulta con el médico de atención primaria o endocrinólogo del paciente es esencial», ya que permite el manejo del enfermo en las mejores condiciones posibles.