Patojo Mayor — Biografía de Juan Pablo Romero by jairocho

El Patojo Mayor - Juan Pablo Romero Obra seleccionada por: Michelle Orozco, Cecilia Oxóm, María Flores Edición con fines académicos Universidad de San Carlos de Guatemala Guatemala, Septiembre del 2017 Diseño de portada: Michelle Orozco Fotografías por: Cecilia Oxóm Derechos reservados ISBN 978-9929-8038-3-1 Se prohíbe la reproducción total o parcial con fines comerciales de esta obra sin el permiso explícito de los autores. Impreso en Guatemala, C.A. Todos los derechos reservados.

A todos los patojos que viven, crecen y sueĂąan...

PRÓLOGO

ctualmente en Guatemala comienzan a suceder avances progresivos y destacables, que buscan soluciones alternativas e innovadoras para responder ante los diferentes problemas sociales que enfrenta el país. Juan Pablo Romero “El Patojo Mayor”, es una de las jóvenes personalidades que hoy en día están aportando cambios valiosos, en su caso particular al sector de la educación. El Instituto Nacional de Estadística (INE) estima que el promedio de escolaridad es de solo 2.3 años por persona. Este nivel educativo es tan bajo que afecta directamente a las oportunidades de desarrollo y calidad de vida. Consciente de esta y más dificultades, así como de la falta de oportunidades a las que los niños guatemaltecos se enfrentan, Juan Pablo contribuye dándoles esperanza desde el entorno de su comunidad. Así surge la razón de ser de este libro, creyendo que es vital dar a conocer y apoyar a los agentes de cambio que hay en Guatemala. Con tal motivo, las siguientes páginas cuentan por medio de una entrevista la vida de Romero, que gira en torno a su proyecto social, a los niños, el arte y el amor...

Biografía

inicia

UNA VIDA E

ducador, autodidacta, curioso, necio e inquieto, preguntón, gestor cultural, columnista, aprendiz de músico, analista independiente, fundador de un programa comunitario. Un adicto al café, los libros y a las flores. Así es como se describe el Patojo Mayor. Juan Pablo Romero Fuentes vio la luz por primera vez el 16 de septiembre de 1983. Nació y creció en el municipio Jocotenango, ubicado en Sacatepéquez, cerca de la ciudad de Guatemala. Fue criado por sus padres, Rudy Romero y María Fuentes en un pequeño barrio de La Antigua Guatemala. Durante sus años de adolescencia logró ver que varios de sus compañeros sucumbían en las drogas, las pandillas y la delincuencia.

Con mucho esfuerzo él se graduó del colegio como maestro, en su ciudad natal. Durante ese proceso se dio cuenta de que muchos de sus estudiantes luchaban con los mismos problemas que su generación había enfrentado. Padres sin trabajo, familias desintegradas, falta de esperanza y desmotivación. De ahí que considera que en Guatemala los niños se ven obligados a crecer en un ambiente muy duro lleno de violencia y situaciones adversas.

Biografía Juan Pablo Romero Activista , protector de los niños

Historia

Como maestro, ¿Cuál crees tú que es la parte más importante de la educación?

EL PROFE buena onda

Alumnos de 3 a 6 años Grado “Las semillas” equivalente de preparatoria

irá, yo tengo una cuestión clara en el proceso educativo y pedagógico. De primero, tenés que aprenderte de cosas materiales y entender que la educación desde el punto de vista pedagógico o didáctico es un acto puro de servicio. Entonces siempre lo más importante en la educación es el servicio, aprender a escuchar, a estar ahí, a volverte y ponerte en los zapatos de cada mara, entender sus contextos, a preguntar cómo están, de dónde vienen.

Historia

llegan

LOS NIÑOS ¿Cómo fue que nació el proyecto Los Patojos?

n día de septiembre de 2006, cuando yo tenía 22 años y acababa de renunciar a mi trabajo de profesor de inglés en un instituto de Antigua Guatemala, les prometí a mis alumnos, de los que era más bien un consejero, terminar el curso por las tardes en el garaje de mi casa. Tal día salimos a la calle, saltamos la cuerda y nos divertimos mucho, que de ahí tres niños de mi barrio se interesaron en lo que hacíamos. Me preguntaron si íbamos a jugar otros días. En lugar de eso, les propuse que se unieran a nuestras clases, que ya se habían convertido más en pláticas que otra cosa. Los niños llegaban a mi casa por las tardes y yo los ayudaba con sus tareas, jugábamos y les daba leche con galletas. Ellos me contaban su contexto, los problemas con sus papás y los peligros a los que se enfrentaban en la calle. En ese momento supe que no daría clases convencionales y que gestaba algo desde adentro de los chavos. Me centré en sus necesidades y realidades y empecé a diseñar una metodología que con el tiempo bauticé como patojiana. La voz de que yo recibía niños en mi garaje se regó y llegaron muchos más. Algunos venían de la calle y encontraban en la casa un espacio seguro y de aprendizaje. En 2007, el garaje ya tenía 70 niños y un cuate me apoyaba. Un año después, con casi 150 personas tuvimos que ocupar toda la casa, mis papás me la cedieron y se mudaron a la parte trasera. Conseguí donantes y tomó forma la Asociación Los Patojos, como decidí nombrarla.

La casa estaba llena todo el día, de 7:00 de la mañana a 10:00 de la noche. Con más amigos y familiares, la mayoría exprofesores, dábamos talleres de música, de danza, formación política, pintura, ciencias. Enseñábamos manualidades, a pensar, a cantar. No habían reglas ni estructura. Aquí todos enseñábamos y aprendíamos, así al mismo tiempo que protegíamos a los niños. Pero la casa de nuevo nos quedó pequeña y en diciembre de 2012 comenzamos a buscar otra sede. Ya no solo queríamos un espacio para crecer, sino para abrir una escuela de primaria autorizada por el Ministerio de Educación (con nuestro método educativo), una clínica, un teatro, espacios amplios para los talleres y cafetería. Encontramos un terreno, lo compramos y lo construimos gracias a donaciones.

La fundación

los PATOJOS E

l equipo de trabajo, es bien diverso, joven y la mayoría han sido resultado de los mismos procesos que se han trabajado durante años, aquí han crecido, han aprendido la filosofía, a ver la educación de otra forma. Entonces, más que por algún salario o por cumplir algún requisito están por causa social, ya que es una idea y también es un sistema. El sueño de Los Patojos es crear en Guatemala 25 sistemas, no son escuelas sino son sistemas. Lo que hace diferente de algunas otras ONG, asociaciones o proyectos con los que se lograron construir el inicio de un movimiento social, es que las personas que están involucradas cuentan con un salario, por cuestiones dignas y de respeto, pero no es prioridad de la filosofía de la institución, su prioridad es construir una ideología diferente de organización comunitaria para todos. El equipo de Los Patojos, es uno de los más valientes y creativos, son poetas, artistas, músicos, hacen pan, bailan, construyen, y son multiusos. No se podrá encontrar a un maestro sólo dando la clase, no funciona así, un requisito es saber hacer bien un poco de cada cosa. La filosofía del programa es enseñar haciendo, sin importar tu edad, por ejemplo, todos sabemos un montón de cosas, pero no sabemos otro montón de cosas, pero cuando se aprende a comunicar lo que se sabe eso es maravilloso, ya no se tiene que ser un adulto de muchos años para enseñarle a una niña cómo hacer una flor.

Inspiraciรณn

Clases de Los Patojos Aulas donde los cursos son impartidos

Inspiración

me gusta

TRABAJAR ¿Qué es lo que te sorprende más de los niños y jóvenes de Guatemala? ¿Qué es lo que te inspira a hacer tu trabajo? Lo te hace decir que vale la pena lo que estás haciendo ahora...

o que más vale la pena de hacer Los Patojos y poder convertirla en una institución, es saber que gracias al espacio que hemos hecho hay muchos niños y muchas niñas que están creciendo de forma digna, entonces la oportunidad de dignificar la niñez a través de educación, acceso a alimentos, acceso a salud, arte, recreación y deporte hace que valga la pena, porque ves a seres humanos que están creciendo. Primero, si eran invisibles pues ahora los ves, si estaban tristes, les lograste crear un espacio en donde ahora encuentran balance. Entonces su sonrisa, su alegría, sus sueños, y la oportunidad de que las niñas y los niños vayan construyendo sus historias es lo que a mí me motiva a seguir trabajando cada día.

u increíble capacidad de soñar y no tener miedo, una vez estén acá en Los Patojos, eso me llena de satisfacción, saber que logramos crear un espacio en el que la niña y el niño verdaderamente se sienteen libres, que están en paz, están cómodos, saben que no se van a burlar de sus ideas aunque sea una completa locura. Sabes que el equivocarse es aprender, me impresiona la capacidad de los niños de haber aprendido eso. Primero, eso no tiene por qué existir. Segundo, no es obligatorio venir y siempre vienen. Tercero, si les decís que no hay clases o actividades se enojan con uno, y te demandan por qué. Vos hacés eso en un colegio o en una escuela, y aplauden de la alegría, mejor si se van a la huelga los maestros (jajaja). Entonces todo eso me impresiona y creo que yo lo resumo en su impresionante capacidad de soñar, nosotros les dimos el empujón y ya no quieren parar.

Clases creativas Experimentando con tĂŠcnicas

creatividad

Patoja creativa Aulas donde los cursos son impartidos

felicidad

arte

Anécdotas

los

CUENTOS ¿Cúal crees que es la historia más asombrosa de los todos casos que se han tratado?

l proyecto es joven, entonces para tener historias de cambio de vida es un proceso que lleva tiempo. A partir de los tiempos de cada quien, pero por ejemplo, donde estamos ahorita hablando a mi criterio, como coordinador o director del proyecto, es una de las historias más chileras, porque esto era un basurero, era una de las áreas más peligrosas que hay en Jocotenango, los callejones. Hace unos días, tuvimos denuncias de violaciones, de asaltos muy constantes. Excepto en este sector. Entonces haber construido en una escuela de rendimiento, muy bonita, limpia, decente, en un lugar en donde nadie pensaba que iba a ser posible, eso es lo que más fuerza nos dio a todos nosotros. Entonces toda la gente que viene a Los Patojos, que ve sus colores, las flores, las paredes, cómo nosotros cocinamos, cómo mantenemos los baños. De alguna manera en su inconsciente se lo llevan a sus casas y empiezan a implementar esas prácticas.

Eso para mí es una de las historias más bonitas porque hemos aprendido no sólo a trabajar bien sino a utilizar nuestra infraestructura como fuente de inspiración a las familias. Ya vos desaparecés como actor y sí se crea el impacto que querés de multiplicar el sistema. La idea de dignificar a las personas de lo que quieren hacer y hacia dónde van, y obviamente la autoformación constante,. La planificación es sumamente necesaria. No podes sólo venir a improvisar un curso, o una clase, lo más importante en la educación es eso, creo yo. Transmitir correctamente la información a los niños, siempre con la verdad, con mucha honestidad, sin tabús, sin casacas, sino hablarle a las personas puntual.

Anécdotas

¿Por qué crees tu que todavía hay esperanza en un país como Guatemala?

Los patojos en la pintada Retoque de los Murales de la institución

a gente, la ciudadanía guatemalteca es impresionante. Son valientes, casi 16 o 17 millones de ciudadanos diversos todos los días le ganan la batalla a los malos, a la maldad, esa onda oscura que está ahí. En mi caso, en mi experiencia, mientras haya niñez sigue la esperanza, es como las flores, como la primavera. Mientras hayan niños, hay flores. Mientras hay flore,s hay primavera, hay armonía, hay balance, aunque nuestras autoridades sean corruptas (el estado sea fallido). Igual tenés que aprender a trabajar positivamente. Porque es nuestro deber como ciudadanos también, el construir buenos procesos, buenas noticias, si no esto sería un infierno. Yo sí creo, todos los días hay esperanza en este país, cuesta, pero ahí está el anuncio de la cuestión, identificar cómo te pones de frente.

Mural de Los Patojos Realizados por estudiantes y maestros.

Visión

con el

TIEMPO ¿Hacia dónde quieres ir con Los Patojos en algunos años?

irá, queremos construir 25 sistemas, es una idea y un concepto que incluye infraestructura, proyectos, así como estrategias de autofinanciamiento, a través de lo que cada nuevo sistema produce. Cada vez que queremos crear un nuevo sistema abrimos un negocio y con ese negocio poco a poco nosotros le vamos dando movimiento económico para hacerlo sostenible completamente. La mayoría de patojos lo que necesitan es un empleo, cada quien tiene sus necesidades y contextos , aquí todos quieren trabajo y no hay. Y los que hay tenés que estar graduado, y te piden experiencia cuando no la tenés, es una confusión y el joven llega a un momento a estar tan desesperado que empieza a perder el control, toma decisiones inmaduras y empieza toda la desintegración. Creemos que es bueno construirles su tercera sede y continuar el proceso, por ejemplo, entró a Los Patojos a los tres años y salió a los 22 con su propia empresa; y si quiere continuar estudiando, se paga sus estudios o lo que quiera, pero como él lo quiera, no impuesto, o por los papás, él como ser humano. Para Los Patojos es más importante el enseñar a descubrir el “para qué soy bueno o buena”, te enseña a que antes de que decidás ser diseñadora gráfica, por ejemplo, por qué no hacés pan. ¡Probá y hacelo!

Desarrollo

más ESPACIO ¿Qué crees tú que le falta a Los Patojos?

spacio. Aquí ya no podemos correr, es muy pequeño el espacio. Donde hacemos deporte, allí jugamos, y allí comemos, hacemos obras, realizamos la mayoría de nuestras actividades. Los chavitos y chavitas de acá ya están creciendo, necesitamos hacer deporte, construir más laboratorios, más espacios, seguir enseñando y aprendiendo, entonces la demanda no está impuesta, es una demanda natural del adolescente. Los niños están creciendo tan bien aquí, que llegan a la adolescencia y el proyecto ya llegó a su punto, todo lo que tenemos acá es para niños. Ahora la necesidad de un adolescente y adulto es otra onda.

Clases de Los Patojos Corredores en donde practican arte

Desarrollo

en la

LUCHA ¿Cuál es el obtáculo más grande que se les presenta?

parte del espacio, el financiamiento. Porque todo es bien chilero, pero todo es plata, tenés que pagar el gas, la electricidad, y la luz, y el internet, el mantenimiento, los gastos operativos, el agua que necesitamos. Mantener un espacio digno significa meterle plata, y tener un buen equipo. Pagarle por lo menos lo mínimo al equipo, lo decente, sus prestaciones, contamos con un médico, cocineros, ayudantes de cocina y panaderos. Tenemos que tener muchos recursos para dar clases de arte, la pintura: la tinta, las cámaras. El reto es buscar las formas autosostenibles o socios que inviertan en proyectos. Por ejemplo, un socio que pueda invertir solamente en el proyecto de arte, ya reduciría nuestro presupuesto anual, ya podríamos involucrarlo más en alimentación que es lo más caro en el programa y esa es la estrategia y la lucha. Cada lunes yo me siento a pensar cómo vamos a sacar el mes, los tres meses, los seis meses y el año.

Aula Musical Los alumnos aprenden a tocar instrumentos

Haciendo manualidades Actividad de expresiĂłn artĂstica

Clases de Los Patojos Aulas donde los cursos son impartidos

Ayuda

apoyo y AYUDA

¿Qué tanto apoyo reciben Los Patojos y cómo promoverlo?

irá, eso es difícil, porque acá en Guatemala o en La Antigua, las ONG suelen utilizar irresponsablemente el contexto de las familias o las condiciones en las que viven los niños. Mientras más pobre o jodido esté lo proyectas. Más lástima le da a otra persona y algo pasa. Lo chilero sería que los encargados de esas ONG se pusieran en el lugar de la fot de ese niño sucio, a ver si se siente igual. Nosotros rompimos eso y creemos que es

una falta de respeto, entonces cuando vos empoderás y así presentas un proyecto limpio. Los patojos y patojas haciendo arte y que no te da la sensación de que sean pobres versus a un chavito que tal vez pueda ser impresionante. Pero algunos mantienen a los niños como si fueran material para hacer pisto. Bbviamente la mara dice “los patojos ya tienen pisto”, ya están bien. Pero como sociedad muchas veces no entendemos que aquí lo que tenemos que hacer es el trabajo bien hecho, y me refiero a todas las partes que lo conforman.

Ayuda Alumnos pequeños en la pared donde dibujan

Nos ha costado convencer a la mara para invertir porque ya está casi todo y tiene que ser al revés. Necesitamos más, entonces todavía estamos buscando la forma de cómo convencer o comunicar a la mara que está bien invertir en cosas que se vean limpias, que está bien invertir en procesos como este. Es un momento bueno para reflexionar cómo vos estás viendo al ser humano, porque en cualquier momento te toca estar en otro lugar de dificultades socio económica y allí en esos momentos uno entiende lo jodido que eso es.

Si nos cuesta, por ejemplo, ahorita que queremos construir otra escuela la gente dice “pero si ya tienen una”. En un país donde no se promueve la construcción de escuelas, o centros culturales y áreas recreativas, es difícil. Te mentiría si te dijera cómo hemos tenido el financiamiento porque creo que no tenemos un gran financiamiento, hemos aprendido a trabajar con presupuestos bien cortos. Lo que pasa es que somos bien pilas para presentar las ideas, lo que hacemos. Y siempre hay mara así como ustedes que nos apoya a su manera.

Contribuye

seamos

ACCIÓN E

n ver el cambio requiere ser parte de la acción. El desarrollo del país está comenzando con proyectos pequeños, pero que piensan en grande, proyectos comprometidos por el futuro de todos los guatemaltecos. Ya no es posible quedarse a la espera y ver cómo las situaciones no avanzan en nuestras comunidades, en toda nuestra región. Tamposo es posible esperar a que alguien más accione por nuestro país. Ser parte de un proyecto como lo es Los Patojos, es poner los sueños y las ideas en acción. La educación, con el arte y la formación de una cultura que dignifique a la persona, es la única esperanza. Para hacer contribuciones a Los Patojos, la información es la siguiente...

cómo

DONAR Banco G&T Continental Cuenta: 030-0604988-6 Asociación Los Patojos

PARTICIPAR

Contribuye

cómo

Programa de salud La clínica comunitaria preventiva ayuda a los niños y niñas de la Asociación. Pero debido a la demanda abrió sus puertas a las personas externas que lo necesiten. Los días que se dan consultas son: Lunes, miércoles y viernes.

Viernes de retroalimentación Este día los niños se retiran del centro a las 13:00 horas. Los educadores y voluntarios se reunidos en conjunto para evaluar, planificar y coordinar las actividades de la semana siguiente.

Tardes de las Patojas y Patojos Se reúnen a los niños y niñas para recibir clases de: Malabares, música, break dance y otros bailes urbanos. Horarios: De lunes a jueves. De 13:00 a 14:20 horas.

Noches y tardes culturales Se realizan tanto dentro como fuera de la Asociación, para dar a conocer de cerca las nuevas habilidades artísticas que sus hijas o hijos están adquiriendo. Se exponen obras de teatro, baile, ballet, canción, teatro negro, teatro de sombras. Esta actividad se realiza cada dos meses.

Programa de alimentación Este programa es de los más exitosos dentro de la Asociación, pero también de los que más apoyo necesita, por las mañanas los niños tienen acceso a desayuno y luego al medio día reciben su almuerzo, ambos nutritivo y gratis.