Versión Femenina

VERSIÓN FEMENINA por J.Berger

(texto para microteatro por dinero)

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SUPERHEROÍNAS: HULKA SPIDERWOMAN Y la colaboración especial de: El Rey del Pollo Frito.

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ACTO ÚNICO Apartamento al que no le falta un perejil, parece un catálogo de IKEA de temporada. Moderno, funcional, aséptico, sin personalidad, en definitiva: asfixiante. Hulka , sí la versión femenina de Hulk, se pinta de verde una de las piernas con brocha y titanlux.

HULKA. (Canturrea) Verde que te quiero verde Verde viento. Verde rama.

El barco sobre la mar y el caballo en la montaña.

Verde porque te quiero verde sí, sí, porque te quiero verde, Compadre, quiero cambiar mi caballo por su casa, mi montura por su espejo, mi cuchillo por su manta.

Verde porque te quiero verde sí, sí...

Entra Spiderwoman, sí la versión femenina de Spiderman; se quita la máscara y se deja caer en el sofá.

SPIDERWOMAN. ¡Qué calor! ¿Qué hay de comer?

HULKA. ¿Esa es una pregunta después de todo un día esperándote?

SPIDERWOMAN. No, perdona grandullona, hoy es miércoles, ¿no? (Saca una lista) Lunes:guiso de espárragos; martes:papas con encaje; miércoles: salmorejo y pescaito frito. Qué rico, niña. Aquí te espero.Estoy reventada, tú.

HULKA. ¿Un besito , no?

SPIDERWOMAN. Ay, qué sentía eres.

HULKA. Sí, mi arañita.

Hulka se acerca a Spiderwoman y trata de darle un beso.

SPIDERWOMAN. ¡Ey, que me manchas, traeme una cerveza grande como tu culete verdoso, enormidad mía!

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HULKA. Termino esto y voy.

SPIDERWOMAN. Sabes que es muy desagradable verte cómo te pintas en el salón. Esas manchas sonrosadas no son normales. ¿Por qué no vas al dermatólogo de la patrulla X? HULKA. Ya fui, me dijo que era dermatitis atípica, que debía tomarme las cosas con más calma, que tengo estrés.

SPIDERWOMAN. ¿Estrés tú? ¡Venga ya, si te pasas todo el día viendo telenovelas, escuchando la radio, dándote un paseito para hacer la compra, charlando por internet, la lavadora, el lavavajillas, si no te falta de nada! Estrés , qué sabrá ese dermatólogo. ¿Quién te lo recomendó?

HULKA. La Cosa.

SPIDERWOMAN. ¡Ya salió! ¿Y te fías de ese? ¿No has visto la piel que tiene La Cosa?

HULKA. Mira, La Cosa, digo Ben, es un hombre muy sensible y su piel al contrario de lo que parezca...

SPIDERWOMAN. No hablemos de La Cosa, ranita mía, y tráeme esa cerveza.

HULKA. Como quieras.

Hulka deja la brocha y la lata de pintura y sale.

SPIDERWOMAN. Anda que si tú tienes estrés no sé lo que debo tener yo después de haber estado luchando contra un supervillano servidor de Magneto vestido de murciélago que lanzaba rayos por los ojos y que tenía secuestrada a media ciudad en un campo de concentración para que cosieran zapatillas para el equipo de badmington de Pakistán. Si tú tienes manchas en la piel por estrés yo debería tenerlas del tamaño de la cabeza de Juggernaut.

Entra Hulka con la cerveza, se la da a Spiderwoman.

HULKA. ¿Con quién has estado?

SPIDERWOMAN. Éxodo creo que se llamaba el lacayo de Magneto, qué nombres se ponen los supervillanos, ¿eh? Electro, Duende Verde, Octopus no son malos nombres, pero “Éxodo” es una película con Paul Newman, ¿no?

HULKA. Sí, y el segundo de los libros del Pentateuco donde se 4

narra la huída de los judíos de Egipto en pos de la tierra prometida.

SPIDERWOMAN. Ea, ya salió la culta.

HULKA. ¿Con quién has estado, dime?

SPIDERWOMAN. Ya te he lo dicho, con Éxodo.

HULKA. No, ¿con quién has luchado mano a mano? Conociéndote, me parece mucha empresa para que te enfrentaras tú solita. ¿Quién te ha ayudado esta vez?

SPIDERWOMAN. (Bajito) Los Nuevos Vengadores.

HULKA. ¿Quiénes?

SPIDERWOMAN. Los Nuevos Vengadores.

HULKA. (Aguantando la risa) ¿Quiénes son esos? Los nuevos... pfff... ¿quién conoce a los Nuevos Vengadores?

SPIDERWOMAN. También estuviste tú.

HULKA. Cuidadito con lo que dices. Yo estuve en Los Vengadores, los auténticos, ¡ah, y en los 4 Fantásticos!

SPIDERWOMAN. Sí, y en Héroes de Alquiler...

HULKA. Tuve que aceptar cualquier cosa. No estaba pasando por un buen momento.

SPIDERWOMAN. ¿Qué duró esa serie, un número , dos?

HULKA.¿A qué viene sacar ahora los trapos sucios, eh? ¿Me has escuchado lo de Los 4 fantásticos? La Cosa y yo fuimos prácticamente novios. Evitamos que estallara una central nuclear y al calor de la fusión nuestros cuerpos se rozaron y...

SPIDERWOMAN. ¡Otra vez la historieta de La Cosa! ¿No te cansas, eh?

HULKA. Me pidió que saliéramos un fin de semana.

SPIDERWOMAN. Lo obligaste, como obligas a todos, los asustas. Te tienen miedo.

HULKA. ¿Qué dices? Me invitó a la sierra, ¿sabes?

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SPIDERWOMAN. A tu casa.

HULKA. Bueno sí, porque La Cosa vive en plan ermitaño y no tiene posesiones , es un hombre muy místico.

SPIDERWOMAN. Claro, un hombre de una sola pieza. Lástima que cuando te insinuabas no te dijo aquello de: “oye para, que no soy de piedra”.

HULKA. Qué gracia, no sigas.

SPIDERWOMAN. Al menos la tendría dura.

HULKA. ¿Cómo?

SPIDERWOMAN. La piedra filosofal...

HULKA.Te has pasado, te acabas de saltar el códice del cómic que nos prohibe explícitamente hablar de sexo entre personajes.

SPIDERWOMAN. Tú no hablas, tú intentas tumbarte a todo bicho viviente.

HULKA. No puedo más.

SPIDERWOMAN. Deberías habértelo pensado cuando tu primo Bruce Banner, La Masa, te hizo la transfusión de sangre.

HULKA. Yo qué sabía.

Hulka sale.

SPIDERWOMAN. Ay, pobrecita, tan lista para unas cosas y tan pardilla para otras. Ahora mismo llamo a Stan Lee y le cuentas tus problemas, igual te vende a una colección de manga erótico y te quitas los picores.

Entra Hulka con un cuenco de salmorejo y cubiertos para Spiderwoman.

HULKA. Aquí tienes, comedianta.

SPIDERWOMAN. ¿Tú no comes?

HULKA. Ya he comido.

SPIDERWOMAN. ¿No estarás otra vez obsesionada con la dieta?

HULKA. Peso 230 kilos.

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SPIDERWOMAN. Mides más de dos metros, eres Hulka, She­Hulk, Hulkita, la superheroína más fuerte de todo el universo Marvel, estás al nivel de Hércules, Thor, de tu primo Hulk, ¿qué quieres?

(A público) Lo sé, la actriz que interpreta a Hulka medirá un metro setenta y aunque últimamente se pone hasta arriba de esponjitas bañadas en caramelos no pesa doscientos kilos; menudo casting: doscientos kilos y dos metros y pico largos. Y mira que lo intentamos, ¿eh? llamamos a Shaquille O'Neill, el jugador de la NBA, para que hiciera el papel de Hulka y dijo que no tenía problemas en ponerse unos shorts , una peluca morena y tacones; pero que de verde no se pintaba que no era racista, quién lo entiende.

HULKA. (A público) Así que me llamaron a mí, conseguí engordar veinte kilos, pero todo a base de retener líquidos, que cuando iba al gimnasio a darle forma a esos músculos salía nadando en sudor, literalmente. Que tenía que hacer abdominales con los manguitos puestos. Sí, soy de interior y no sé nadar. El tiroides lo tengo loco y a doscientos kilos no voy a llegar, ni que fuera Gerard Depardié deprimido.Por lo de la altura estuve ensayando con zancos; y el único que sacó algo en claro fue mi dentista, me pasaba todo el ensayo comiéndome el suelo y me ha tenido que poner fundas en media piñata. Así que por tres euros imaginen que mido dos metros y pico y peso doscientos kilos.

SPIDERWOMAN. ¿Seguimos?

HULKA. Sí. (Vuelve al personaje) ¿Y de qué me sirve mi altura y mi fuerza aquí encerrada fregando platos y haciéndote la comidita?

Para nada, para destrozar los platos y reventarme la cabeza con los marcos de las puertas.

SPIDERWOMAN. Tú quisiste este piso. Podríamos vivir en un polígono, habilitar una nave industrial ; pero la chica quería vivir como los humanos normales. Eres una mutante, qué quieres , no puedes ser normal, nunca serás normal...

HULKA. Quiero tener un hijo.

SPIDERWOMAN. Vaya, esta es nueva. Pues como no lo secuestres.

HULKA. Podría adoptarlo.

SPIDERWOMAN. ¿A quién?

HULKA. Al que sea. Un niño falto de amor, falta mucho amor en el mundo y a mí me sobra.

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SPIDERWOMAN. Claro, cuando llegue la asistente social le decimos: vivimos juntas, somos así de raras como consecuencia de la radiactividad, ella es verde, yo me subo por las paredes y trabajamos luchando contra el mal... antes le dan el niño a la conferencia episcopal.

HULKA. Podría conseguirlo, tengo un trabajo.

SPIDERWOMAN. Sí, de ama de casa. De ama, de nuestra casa normal, para gente normal.

HULKA. No, un trabajo fuera.

SPIDERWOMAN. ¿Ah sí, tumbando camiones, levantando elefantes en el circo o en el tren de la bruja?

HULKA. Soy abogada y la única superhéroina con un doctorado.

SPIDERWOMAN. Y eres verde.

HULKA. En internet, no. Asesoro a mis clientes on­line.

SPIDERWOMAN. Vaya, Hulkita, qué sorpresa. ¿Algo más?

HULKA. Sí, he conocido a un hombre.

SPIDERWOMAN. Has discutido en un foro con Batman “La crítica de la razón pura” y has visto que es superinteligente; o le has dado clases al Joker de “educación para la ciudadanía” y te has dado cuenta de que es supersensible.

HULKA. No, además esos son todos de la DC. SPIDERWOMAN. ¿Qué?

HULKA. De la otra editorial, nosotros somos de Marvel y ellos de DC Cómics, no podemos hablar entre nosotros.

SPIDERWOMAN. ¿Por el códice del cómic?

HULKA. Más o menos.

SPIDERWOMAN. Una lástima, porque Batman es de los nuestros, se sabe que Robín y él en la batcueva...

HULKA. Es un profesor de ciencias de la Universidad.

SPIDERWOMAN. Así podrá estudiar tus tonalidades de verde.

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HULKA. Nos vamos a conocer hoy.

SPIDERWOMAN. ¿Sabe que tú...

HULKA. Sí, y no le importa.

SPIDERWOMAN. ¿De dónde ha salido ese prodigio?

HULKA. De una demanda de divorcio. Le estoy llevando el caso.

SPIDERWOMAN. Deberías buscarte a alguien de tu estilo. No sé, el gigante verde, el Vengador Tóxico, la rana Gustavo...

HULKA. Muy graciosa.

SPIDERWOMAN. ¿Entonces?

HULKA. Todo ha terminado.* SPIDERWOMAN. ¿Así, sin más?

HULKA. Todo ha terminado.

SPIDERWOMAN. ¿No volverás a pensar en mí?

HULKA. Sí, pensaré a menudo en ti, en nosotras, en la casa.

SPIDERWOMAN. ¿Puedo llamarte al menos?

HULKA. No, jamás. Te lo prohíbo.

SPIDERWOMAN. O por lo menos por facebook...

HULKA. He dicho que no, no aceptaría nada de una extraña.

SPIDERWOMAN. ¿Seré una extraña para ti?

HULKA. Sólo un milagro podría cambiarlo.

SPIDERWOMAN. Dime cuál.

HULKA. Tendríamos que transformanos las dos hasta el extremo de...

SPIDERWOMAN. Transformarnos, ¿estás hablando de otra mutación?

HULKA. No. ¿Ves como no entiendes nada?

SPIDERWOMAN. Di: Tranformarnos hasta el extremo de...

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HULKA. … hasta el extremo de que nuestra unión se convirtiera en amor verdadero. *

*Nota para listos: Los parlamentos entre ambos asteríscos están prácticamente fusilados del final de “Casa de Muñecas”. Ahora que venga Ibsen y llame a la SGAE.

SPIDERWOMAN. Y con él crees que será así.

HULKA. Con él es posible.

SPIDERWOMAN. Dime un nombre.

HULKA. ¿Para qué?

SPIDERWOMAN. Para entender con quién vas a abrazar esa vida normal que tanto ansías.

HULKA. ¿De qué servirá?

SPIDERWOMAN. Sólo te pido eso.

HULKA. Adiós.

Inicia su salida.

SPIDERWOMAN. Un nombre.

HULKA. Parker, Peter Parker.

Hulka sale. Silencio. Spiderwoman queda abatida hasta que explota la risa.

SPIDERWOMAN. Pffff... Una vida normal con Peter Parker... Peter Parker, Spiderman... ¿Normal? Una vida normal con el arácnido... ¡Menudo par de mutantes! ¿Qué va a salir de ahí? Unas arañas verdes gigantes con ocho patas… o Spiderhulk , la masa arácnida...

Ay, esta Hulka, no cambiará... bueno, vayamos a lo importante. ¡El segundo plato! Tráeme el segundo plato, Hulki... (Silencio. Está sola. A público) ¿Alguien sabe cómo se fríe el pescao frito? ¿Nadie? (Suspiro) Otra vez menú a comer en la calle. Me voy a destrozar el estómago.

Spiderwoman recoge su máscara y sale. Oscuro. Suena un teléfono. Descuelgan.

VOZ (OFF). ¿Diga?

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RAMONCÍN (OFF). ¿Microteatro por dinero?

VOZ (OFF). Sí.

RAMONCÍN (OFF). Hola ,soy Ramoncín. Verás, he recibido una queja firmada por DC cómics y Stan Lee denunciando el uso sin permiso de varias marcas registradas sin pagar los derechos de imagen pertinentes; y otra a nombre de Henrik Ibsen por fusilarle el final de “Casa de muñecas”. ¿Oiga, oiga, oiga? (A alguien que está con él) ¡Tedy, Tedy, que no me escuchan! ¡A mí! ¡Que yo también fui un superhéroe! ¿Cómo? ¡Fui el Rey del Pollo Frito! ¡El Rey del Pollo Frito! (Canta) Porque yo soy.../El Rey del Pollo Frito/ Huid!/me estoy haciendo rico/ Huid!...

Y suena “El rey del Pollo Frito” mientras la compañía desmonta antes de que lleguen los perros de presa recaudadores de canciones, cánones y paquitos chocolateros.

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