“La Relación Apropiada Entre el Cristiano y el Mundo”1 Parte 1/3 Por: Juan C. Reyes Zayas Biblia Versión Reina Valera 1960
Introducción Santiago 4:1-4 1 ¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros? 2 Codiciáis, y no tenéis; matáis y ardéis de envidia, y no podéis alcanzar; combatís y lucháis, pero no tenéis lo que deseáis, porque no pedís. 3 Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites. 4 ¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.
Dentro del pueblo cristiano existe una tendencia a hacer referencia extensa a lo que se conoce como el “mundo”. Como en este versículo, existen otras referencias al mandato como cristianos de mantenernos sin mancha del mundo. Por ejemplo, examinemos otra porción: 1 Juan 2:15-17 15 No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. 16 Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo. 17 Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.
Por medio de esta primera clase es mi misión desarrollar una definición clara de nuestros términos. La verdad es que la palabra mundo ha sido en innumerables ocasiones mal utilizada, siendo el significado de la palabra estirado de tal manera que perdemos el mismo. Este abuso de la palabra lamentablemente ha tenido consecuencias negativas dentro del pueblo cristiano, pero en específico me quiero concentrar en las consecuencias relacionadas a la actitud del cristiano con relación al mundo. Ahora bien, antes de profundizar en dicho tema es necesario pensar qué en realidad significa la palabra mundo en estos pasajes de la escritura. Pero, antes de definir algunos términos, veamos cuál es la importancia de definir y contextualizar.
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Toda cita no bíblica fue traducida por mí del ingles.
La Importancia de Definir Nuestros Términos ¿Por qué es importante definir nuestros términos? Veámoslo de esta manera, antes de profundizar en cualquier tema es necesario comenzar desde el principio. Tal y cómo se construye un edificio, comenzando con el fundamento, así mismo necesitamos proceder en cualquier tema para llegar a conclusiones plausibles. Para cumplir con la misión de esta primera clase quisiera tomar un acercamiento peculiar pero funcional. Veámoslo en términos de conceptos y relaciones entre conceptos. En cualquier relación C, donde C se compone de A y B, es necesario definir A y B para luego pasar a qué tipo de interacción C debe de existir. Podemos decir que A y B son como dos islas y C el puente que las une y nos ayuda a desarrollar ideas correctas y fundamentadas con respecto a A y B. Por ejemplo, digamos que A y B son músico e instrumento respectivamente. ¿Qué tipo de interacción C debe de haber dado nuestro entendimiento de las palabras “instrumento” y “músico”? C, la unión entre músico e instrumento (A y B) se debe caracterizar por lo siguiente: 1) Creación de música : El músico no debería usar su intrumento para cocinar. 2) Práctica y aprendizaje : Para que el músico pueda crear música este debe de preocuparse por aprender la teoría necesaria y ejercitar las partes físicas necesarias. 3) Cuido y mantenimiento : Sin instrumento, no hay música. Un músico no debería utilizar su instrumento para jugar pelota ni para afeitarse, pues el instrumento musical no fue creado con estas funciones en mente. Nótese que sin una definición apropiada de nuestros términos sería imposible profundizar en la verdad de cualquier materia. Si ahora mismo tomamos cristiano como A y mundo como B, ¿qué interacción C debería de haber? Para esto es compulsorio un entendimiento bíblico de lo que es un cristiano y lo que es el mundo y entonces luego llegar a conclusiones. Muchas personas brincan estos pasos y llegan a conclusiones erróneas o sin fundamento. En casos como este, donde la biblia tiene algo que decir, no es correcto depender de meras opiniones. Pasemos pues a definir nuestros términos.
Cristiano De estos términos se podrían escribir libros enteros de lo que significa cada cual en todas sus dimensiones. Pero, dado a que el tema en nuestras manos se enfoca en la relación del cristiano y el mundo no dedicaré mucho tiempo a la definición de los términos. Ahora bien, pasemos primeramente a definir lo que entendemos por la palabra cristiano. El término cristiano, de acuerdo al libro de Hechos, surge primeramente en Antioquía donde a los discípulos de aquel momento se les comenzó a llamar cristianos (Hechos 11:26). De acuerdo a Bruce Shelley, autor de Church History In Plain Language, “Originalmente, oponentes de la iglesia utilizaron el término de una manera despectiva hacia los ‘devotos del Ungido’ (en griego, christianoi). Pero los nazarenos adoptaron el término luego con gusto”2. El nombre surge dentro de un contexto de expansión del evangelio, milagros, persecución y crecimiento mientras la Iglesia primitiva, con el apoyo y dirección del Espíritu Santo, cumplía con la Gran Comisión (Mateo 28:19-20). Ahora bien, sin profundizar demasiado, ¿qué implica ser un seguidor de Jesús? John Stott, predicador y erudito reconocido a nivel mundial, en su libro Basic Christianity nos dice lo siguiente: “¿Eres cristiano? ¿Un cristiano verdadero y comprometido? La respuesta depende de otra pregunta – no si vas a la iglesia o no, crees en los credos o no o si vives una vida decente o no (aun siendo importante estas cosas en su debido contexto). Mas bien la pregunta correcta debería ser la siguiente: ¿en qué lado de la puerta de nuestro ser se encuentra Jesús? ¿Está Él adentro o afuera? Esta es la temática más importante.”3 Siguiendo el punto de Stott, el cristiano se define por la respuesta que ha dado al evangelio. En su libro Systematic Theology, Wayne Grudem, profesor de biblia y teología en el seminario de Phoenix en Arizona, relata que los siguientes hechos son fundamentales para la comprensión del evangelio (las buenas nuevas)4: 1. Toda persona ha pecado (Romanos 3:23) 2. La paga del pecado es muerte (Romanos 6:23) 3. Jesucristo murió para pagar por la penalidad de nuestros pecados (Romanos 5:8)
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Bruce L. Shelley, Church History In Plain Language (Thomas Nelson, 2nd Ed. 1995), p. 19 John R.W. Stott, Basic Christianity (Grand Rapids, MI: Eerdmans, 2nd Ed. 1971), p. 140 4 Wayne Grudem, Systematic Theology (Zondervan, 1994), p. 694 3
El evangelio conlleva un sinnúmero de cosas, pero en esencia todos debemos tener un conocimiento básico de la obra de Jesús en la cruz. Toda persona necesita de Cristo, lo reconozca o no. A fin de cuentas le corresponde a toda persona tomar una decisión de confiar en Jesús como Señor y Salvador. Jesús dijo: Mateo 16:24-26 24 Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame. 25 Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará. 26 Porque ¿qué aprovechará al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su alma? ¿O qué recompensa dará el hombre por su alma?
En fin, cristiano es aquel que ha reconocido su pecado ante Dios, ha aceptado la oferta de reconciliación por medio del sacrificio de Jesús y procede a hallar vida en abundancia siguiendo en los pasos del Señor Jesús, Hijo de Dios (“…el camino, la verdad y la vida…” Juan 14:6), adorándo y exaltando Su nombre en ésta vida y por la eternidad. Habiendo definido cristiano, veamos la otra isla (la letra B), el mundo. Kosmos Como les decía horita, esta palabra es bien famosa dentro del pueblo cristiano. Pasemos a definir la palabra mundo como aparece en el Nuevo Testamento. En griego, la palabra que se utiliza es kosmos (κόσµος). Esta aparece 185 veces en el Nuevo Testamento y 105 de esas aparece en el evangelio de Juan. Para esta parte estaré dependiendo mucho de J.P. Moreland, un distinguido autor, filósofo y orador. La información que obtuve fue de una charla con el título de Christ and Culture que se puede acceder por medio de su website5. Moreland provee tres definiciones que se utilizan dependiendo del contexto donde se utiliza la palabra. Kosmos se puede referir a: 1. El universo (Ej. Hechos 17:24) 2. La población mundial (Ej. Juan 3:16) 3. Sistema organizado dirigido por Satanás que presenta oposición a Dios (Ej. Santiago 4:4, 1 Juan 2:15-17). Moreland en sus propias palabras dice que se puede referir a un “cuerpo organizado energizado por el mal donde el agente no siempre es Satanás, sino el hombre”. 5
http://www.kingdomtriangle.com/audio/default.asp
Contrario a lo que pueda haber en la mente de la mayoría de los cristianos, la palabra mundo bíblicamente no se refiere a la cultura no cristiana. La cultura no cristiana no necesariamente cae bajo la tercera definición. Solo aquello que va en contra de la verdad que conocemos por medio de la palabra de Dios debería ser considerado “mundano” de acuerdo a la tercera definición. El apostol Pablo dijo en cierta ocasión: Filipenses 4:8 Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad.
En nuestra cultura podemos hayar modos de pensar buenos, neutrales y malos. El ser humano, creado a imagen y semejanza de Dios (Génesis 1:27), teniendo la ley moral escrita en sus corazones (Romanos 2:15), es capaz de lograr hacer cosas dignas de admirar y considerar. Ahora bien, aunque nosotros somos capaces de errar también, aquel que no conoce o ha rechazado la revelación dada por Dios está expuesto a promover falsedad y maldad (Romanos 1:18-32). Así que no toda la literatura, música o ideas no cristianas son necesariamente mundanas bajo la tercera definición. En la biblia, de hecho, se reconoce la sabiduría existente en otras culturas e ideologías fuera del judaísmo y cristianismo. Un ejemplo de esto lo vemos en el discurso de Pablo en el Areópago en Atenas. Cuando Pablo dice: Hechos 17:28 Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas también han dicho: Porque linaje suyo somos.
está citando al poeta Epimenides, quien era pagano y posiblemente creyente del estoicismo6. Con esta información se puede decir que ya estamos preparados para construir ese puente del cual les hablé al principio. Habiendo ya examinado la definición de nuestros términos (cristiano y mundo), ¿de qué manera se debería relacionar el cristiano al mundo? Esta parte la dejaremos para la próxima clase, pero los dejo con el siguiente texto bíblico que servirá de trampolín hacia el próximo tema:
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“Escuela filosófica que deriva su nombre de Stoa Poikile, el pórtico en Atenas donde Zeno de Citium (335-263 A.C.) primero enseñó las doctrinas que la caracterizan.”, New Bible Dictionary (Inter-Varsity Press, USA, 3rd Ed. 2006)
Mateo 5:13-16 13 Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres. 14 Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder. 15 Ni se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en casa. 16 Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.