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Reconoce Raúl Elenes “una serie de rezagos en la pesca”; consecuencia de la legislación, dice
Al señalar que la pesca es un tema muy complejo no sólo en México sino en todo el mundo, el senador Raúl Elenes, excomisionado de Conapesca, reconoció que en la actividad pesquera “ha habido una serie de rezagos, consecuencia de la legislación que tenemos actualmente; una especie de ‘parchado y reparchado’ de diferentes ordenamientos jurídicos, buscando habilitar o equiparar o acompañar al parchado que se ha tenido en la administración pública de la entidad encargada del desarrollo y la implementación del cuidado de la actividad pesquera y acuícola de nuestro país”.
Explicó “para darse una idea de qué tanto desfase hay, en la Ley Orgánica de la Administración Pública, en la Ley Orgánica del Congreso de la Unión la pesca aparece todavía como parte de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, de la época en que era Semarnat”.
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En referencia a la Ley vigente, dijo que “es el repositorio de ideas y compañeros legisladores quieren incluir ahí todo el temas sustentable y ahí mismo tenemos un error de técnica legislativa, o sea, es la Ley General de Pesca y Acuacultura Sustentable y la pregunta es ¿lo que no es sustentable no lo cubre la ley?; lo sustentable es una característica, es aspiracional, pero no debe ser parte del motivo de una reglamentación. Y desde ahi hay una serie de terminologías que se van arrastrando por modas, y que termina siendo realmente inoperante.
Manifestó que, “desafortunadamente, en esta administración, muchas de las grandes reformas legislativas surgen del Ejecutivo; aunque los legisladores hagamos un gran trabajo, que lo estamos ha-
ciendo la mayoría, tienen que pasar por el visto bueno de alguna manera de la Administración Pública, porque está empatado, y no es lo que se nos ocurra a nosotros; estamos del lado donde tenemos que proponer solamente y hasta allí llegamos”.
Por otra parte, dijo coincidir con el planteamiento de la CONACOOP (de crear un órgano autónomo de la pesca) y que en el Senado “estamos planteando una alternativa similar”; de hecho hay algunas iniciativas que entraron y yo mismo presenté una en fecha reciente, como una aportación para cambiar entre otras cosas la estructura jurídica de la Conapesca”.
En su mensaje, dijo que “sí merece la Conapesca, por su naturaleza y saber de las necesidades, cambiarla de ser un órgano desconcentrado por lo menos a un órgano descentralizado de la Administración Pública Federal, que le permita a la Conapesca la posibilidad de tener recursos propios, activos, maquinaria, dragas, embarcaciones, etc., como sí lo tiene el Inapesca, que es un órgano público descentralizado, como es PEMEX, el IMSS, etc.”.
Recordó en ese tema, que ha habido personajes e incluso legisladores que han planteado incluso la desaparición de la Conapesca y que se convierta en el apéndice de otra secretaría, porque olvidan el origen del por qué debe haber en un país como México un órgano especializado atendiendo la actividad.
Consideró que “ha habido un error de percepción de parte de los gobiernos de nuestro país, especialmente en la parte neoliberal de la historia, al considerar la actividad pesquera y acuícola como una actividad meramente económica; es relevante, pero por su naturaleza se da en algunas partes del país en ma-
yor o menor manera y a la hora que hacen las sumas, en números económicos, pareciera que es una actividad no tan importante en función del Producto Interno Bruto”.
Desde esa óptica, si fuera exclusivamente atender las actividades con más impacto económico en el país, la silvicultura y la apicultura no se atenderían; si a la pesca a veces no se le percibe, mucho menos actividades económicas más reducidas; pero la verdad es que este país está sostenido no nada más por el recurso económico que generan las actividades sino por el resto de beneficios, hablando de la perspectiva social y la perspectiva de la salud, agregó.
“El día que en nuestro país -ojalá en la siguiente administración-, se cree ya una política alimentaria; así, desde una perspectiva alimentaria y de salud, la pesca tomaría una dimensión totalmente gigantesca comparado con otras fuentes e industrias de alimentos en sus procesos primarios”, aventuró.
Visualizó el senador que, “desde esa perspectiva, la actividad pesquera tendría un valor adicional que permitiría hacer políticas públicas que incentiven y cuiden la actividad pesquera ya existente, no es solo generar nueva industria sino cuidar la que ya existe, porque los recursos naturales nuestros son tan abundantes en materia pesquera y en cierta manera son también tan nobles, que a pesar de todo el tipo de desbarajustes que hemos hecho, se mantienen los mismos niveles de producción; el volumen de producción de camarón y las principales especies están exactamente igual independientemente de quien las capture, que es otro tema a resolver”.
Manifestó que “la naturaleza ha sido y sigue siendo muy generosa con nosotros, esas visiones catastróficas de que desaparecen grandes pesquerías, no ha sucedido, y creo que no va a suceder, precisamente por el trabajo comprometido de los mismos productores pequeros que cuidan su recurso de una manera o de otra. Claro que si dejamos crecer esos fenómenos de la pesca irregular y otro tipo de actividades, sí puede convertirse en una crisis más adelante. Es el momento de corregirlo,” subrayó.
Durante su intervención habló del tema de seguridad en la pesca, señalando que no está fácil atender esa situación, dadas las herramientas que tiene actualmente la Conapesca y el resto de instituciones vinculadas en eso, si hay policías que lo pueden atender pero no están habilitados para hacerlo; habría que impulsar algún mecanismo para que se actúe de manera frontal, como lo que es. Ya no son pescadores, son delincuentes, y hay que atenderlo como una delincuencia organizada. No son los mismos que los pescadores irregulares, que esos por necesidad, aunque no tengan un permiso por diferentes razones y trabas gubernamentales no tienen acceso a tener un permiso; eso es una cosa muy diferente. La pesca irregular, estamos conscientes, nunca le ha pegado realmente al sector como se pensaría, y sí es incómodo y lo ideal es que toda la actividad esté regulada, pero esta pesca irresponsable, que no nada más hace eso, sino otras actividades ilícitas que ponen en riesgo la seguridad personal de comunidades enteras, porque ya no nada más están buscando producto ilegal, sino también otras actividades ilícitas juntas en las mismas embarcaciones, en los mismos barcos, y eso tiene que atenderse con mano dura y otro nivel de autoridad debe entrar para atender eso.