Buen otoño, gente guapa!
Arrancamos una nueva temporada,
con tantas cosas que contar que seguramente
no lleguemos a todas.
Hay dos cosas muy gordas por las
que recordaremos este fatídico verano.
La primera -y motivo de nuestra
portada- es la imagen de los refugiados
luchando por su vida e intentando
salir o entrar en distintos países;
siendo blanco de todas las bajezas
habidas y por haber (porque habrá
más, no lo dudéis) y que han despertado
en algunos una solidaridad irrisoria,
porque no han hecho nada.
La segunda, las puñeteras elecciones,
que han traído una cola muy fea y,
aunque a algunos no nos haya sorprendido
demasiado, igual jode. Parece
que los naranjitos, pijos fachas,
que no dejarán abortar a nuestros hijos, que le quitarán el derecho a la
sanidad a todo aquel que no tenga
papeles -y a los que los tengáis también-
representan al conjunto mayoritario
de votantes de Nou Barris!
Zas!! En toda la boca.
¿Qué os pasa? ¿Serán las líneas de
alta tensión del barri