El bosón de Higgs impresiona y decepciona La consolidación del Modelo Estándar desvía el interés por la Física hacia otras disciplinas El descubrimiento del bosón de Higgs ha revolucionado el mundo de la física porque confirma el Modelo Estándar, pero también ha decepcionado porque no ha constituido ninguna sorpresa ni aportado ningún progreso significativo en el conocimiento, ya que sólo ha confirmado lo que se sabía. Puede incluso que con este descubrimiento la física empiece a perder interés a favor de otras disciplinas como las neurociencias, la astrobiología o la bioinformática, o que una nueva perspectiva compleja se esté gestando en el conocimiento humano. Por E. Martínez. inShare
Momento del anuncio del CERN, el 4 de julio en Ginebre. Foto: CERN.
El descubrimiento del bosón de Higgs ha sido considerado el progreso más considerable en la comprensión de la estructura fundamental de nuestro universo – y de nosotros mismos- que nuestra especie ha conseguido desde la elaboración del modelo estándar de la física en los años 70, pero al mismo tiempo constituye una cierta decepción, como ha dicho Hawking a la BBC, porque hasta ahora los grandes avances de la física han ocurrido cuando nos hemos encontrado con resultados inesperados. De esta forma, el bosón de Higgs, esa excitación cuántica que los físicos acaban de conseguir materializar gracias a los aceleradores de partículas, se ha convertido en tema de discordia para la comunidad de físicos. Lo que más se lamenta es que el descubrimiento del bosón de Higgs lo que ha hecho es confirmar algo que ya se sabía y que se daba por sentado, ya que estaba predicho en el modelo estándar de la física de partículas. El bosón, efectivamente, permite explicar por qué algunas partículas tienen masa y otras no. Einstein y su masa Se han puesto varios ejemplos para explicar la importancia de este descubrimiento, recogidos en The Slate. Uno de ellos consiste en imaginar una habitación llena de físicos. En esto llega Einstein e intenta pasar de un extremo a otro de la sala, pero los físicos que lo han reconocido lo rodean intentando hablar con él, impidiendo sus movimientos, lo que “aumenta su masa”. Al mismo tiempo, otro físico entra en la sala con la
intención también de atravesarla y, como nadie le hace caso, llega al otro extremo sin problemas. Por último, otro físico lanza un rumor y como consecuencia, todos los demás comienzan a comentarlo y a reunirse espontáneamente. En este ejemplo, la habitación llena de físicos representa el campo de Higgs en el espacio. Einstein es una partícula con una significativa masa. El segundo físico que atraviesa sin problemas la sala, una partícula con poca masa. Y el grupo de físicos que se reúne para comentar el rumor representan una excitación del campo, esto es, el bosón de Higgs. El equivalente del rumor es el acelerador de partículas, en esta analogía.
Artículos relacionados La partícula hallada en 2012 sí es un bosón de Higgs, aunque se desconoce de qué tipo Aún no se sabe si el bosón encontrado es el de Higgs o sólo uno muy parecido Higgs: la invención del bosón en un solo folio Aumenta la certeza del hallazgo del bosón de Higgs El descubrimiento del bosón de Higgs se proyecta en la metafísica y en la filosofía Dudas sobre su trascendencia Si bien nadie discute la trascendencia de este descubrimiento, algunos físicos hablan de que no aportará gran cosa a la nueva física que todo el mundo está buscando. El problema es que el modelo estándar que se consolida con el descubrimiento del bosón de Higgs no describe
todas las fuerzas que animan el universo, sino que contiene todavía muchas lagunas.
Para disolver estas lagunas, se han propuesto numerosas teorías, como las nuevas dimensiones, nuevas partículas, pequeños agujeros negros… Localizar el bosón de Higgs sin validar ninguna de estas nuevas teorías deja muchas cosas en el aire, se lamenta New Yorker.
Para el científico británico Stephen Wolfram, citado por The Atlantic, el modelo de Higgs es como una trampa. En su blog, el físico explica que, después de haber esperado 35 años, desearía haber encontrado una cosa más elegante y profunda para explicar algo tan fundamental como la masa de partículas. Sin embargo, parece que la naturaleza ha escogido una solución simple: el mecanismo de Higgs en el modelo estándar. Añade Wolfram que si el modelo estándar es correcto, el bosón de Higgs es desde luego el mayor descubrimiento que pueden ofrecernos los aceleradores de partículas actuales. Seguramente, estos aceleradores pueden aportarnos todavía alguna sorpresa, pero no es lo más probable, añade. El acelerador de partículas no ha aportado hasta ahora nada significativo, recoge Atlantico. Descubrimiento más complejo Otra física, María Spiropulu, profesora del California
Institute of Technology, ha explicado al NYT que ella tenía la esperanza de ser sorprendida por este bosón, y que desearía que este descubrimiento fuese tan complejo que nos sumergiese a todos en un impasse prolongado. Albert de Roeck, físico del CERN, señala en La Tribune de Genève que su imaginación no alcanza a ver las posibles aplicaciones del bosón de Higgs, pero puede ser que pase lo mismo que con Faraday, que tampoco pudo suponer lo que iba a representar la electricidad que descubrió. Lo que es realmente importante del bosón de Higgs es que explica cómo pudo ser el mundo en la primera millonésima de segundo del Big Bang, añade Roeck, si bien otros físicos, citados por La Tribune, esperan que el bosón sea al menos un poco diferente del previsto por el modelo estándar de partículas elementales. Future Sciences resume bien este estado de ánimo al
señalar, antes de confirmarse la existencia del bosón de Higgs, que la peor decepción sería que fuera idéntico al predicho por la teoría. En ese caso, el gran colisionador de hadrones LHC no habría servido para nada ni aportaría indicios de una nueva física. En cualquier caso, parecería que la física ha agotado su camino con este descubrimiento que consagra al Modelo Estándar, si bien quedan otros campos para avanzar en el conocimiento, como las neurociencias, la bioinformática, la astrobiología, entre otros, añade Future Sciences, donde las expectativas de sorpresas son mayores que en la física después de la aparición del bosón de Higgs.
Puede también que el conocimiento avance en una dirección de mayor complejidad, en la que se integren las diferentes disciplinas alumbrando así una nueva perspectiva, y que en realidad estemos ahora como hace más de cien años, cuando se pensaba que el conocimiento humano estaba acotado y, sin embargo, irrumpió la revolución cuántica que lo cambió todo. Fuente: http://www.tendencias21.net/El-boson-de-Higgs-impresiona-ydecepciona_a12439.html?com#com_3138146
COMENTARIO DE JOSE MEJIA
Esta experimentación exitosa no acerca al re-descubrimiento de los éteres químicos, de vida y luminosos que los ocultistas lo conocían desde tiempos inmemoriales, bautizados así por Newton, reinventados por J. C Maxwell y anatemados o desacreditados por Einstein y que explicará también, en cierto modo, la existencia del 96% por ciento inexplicado de la materia en el Universo o materia oscura, el llamado vacío. Esta confirmación del denominado Campo de Higgs, paradójicamente, va a generar un cúmulo de incógnitas que acercarán inevitablemente a la religión y la ciencia en forma simbiótica. El Universo actual es la Manifestación de Dios. Pero éste no ha sido el único ciclo que se ha producido, y han habido Noches Cósmicas que han seguido a periodos de Caos, de los cuales ha surgido una nueva Manifestación, similar a la que actualmente conocemos, lo que en el marco del hinduismo se denominan Yugas dentro de la majā iugá o „gran era‟. De allí que la Teoría del Big Bang tiene
necesariamente un punto inicial hace miles de millones de años, punto cero en el cual dicen los cosmólogos y astrofísicos que el tiempo se inició al igual que la energíamateria. El tiempo no es lineal, sino cíclico. Pero los científicos soslayan estas aporías pues esta concepción cósmica no ofrece ninguna respuesta a ella y se va en contra del principio actual de la falsación que califica de científico a un postulado. Antes de esta creación, hubo ya otros periodos creativos y seguirán habiendo disgregaciones y noches cósmicas de reordenamiento desde el bendito Caos, pero siempre de manera cíclica y en espiral de forma ascendente. El bosón de Higgs explica fundamentalmente el por qué de la ganancia de masa en el campo gravitacional (gravitones, éstos también todavía en el campo teórico) y la razón de la existencia y cohesión de la materia. Hay otras energías y materias que los especialistas denomina materia y energía oscura y que justifican ciertos equilibrios físico- matemáticos y otras constantes cósmológicas difíciles de entender. El ocultismo sabe que existen éteres que son materia sutilizada que trabajan en consuno con el cuerpo humano y sus funciones vitales y en todas las cosas. Estas sustancias son en definitiva materia sutilizada y con la confirmación de la existencia de la partícula de Higgs, creo que se descubrirá pronto su presencia por medio de experimentaciones científicas que se acercarán a la llamada visión etérica, característica inferior de la clarividencia y la explicarán. Todavía falta entender desde la óptica científica un abanico innumerable de energías que operan en los planos superiores, como por ejemplo las materias de deseos y emociones y por sobre ella la materia mental y que la ciencia ortodoxa apenas vislumbra. El esoterismo científico las
conoce y maneja de sobra aunque la única y segura manera actual de acercarse a ellas es "viviendo la vida", es decir, convirtiendo al experimentador en su propio laboratorio de investigación y desarrollo. Evidente desde el campo del espíritu. Empero y sobre todo, aquello demanda sacrificio, dominio propio y una enorme paciencia y deseo de ayudar a los demás sin esperar nada a cambio, ni gloria ni riquezas o fama, sino solamente servicio desinteresado, lo que hace que este camino sea muy poco atractivo a la gran mayoría de las personas, sobre todo en este momento de la civilización en la que prima el utilitarismo y el consumo, tomados de la mano del placer o hedonismo, como el alfa y omega del “progreso” y de la felicidad. Pero, por este estado humano y como van las cosas, "Ad decem milia annorum".
JOSE MEJIA R
09-07-2012