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I INFORMES
Villa Gonnet, Argentina Quilmes, Argentina
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Puerto Rico, Argentina Mercedes Nº 1, Argentina
Aniversarios en Argentina y Uruguay
Como cada vez que se celebra un cumpleaños, nos alegra saber que varias de nuestras iglesias durante esta primera parte del 2021 han cumplido un nuevo aniversario. Desde las más “ancianas”, con 75 y 70 años transcurridos desde su inauguración, hasta las más jóvenes, que llegaron a sus primeros 25 años.
Los festejos presenciales en varios casos debieron postergarse debido a la situación vigente de la pandemia por coronavirus. No obstante, también en esos casos los hermanos y hermanas pudieron festejarlo de diversas maneras. A la distancia, pero unidos en el mismo sentimiento de amor hacia su comunidad.
Quilmes y Riachuelo
La primera, en Argentina; la segunda, en Uruguay. Ambas tienen en común haber cumplido 75 años desde su inauguración.
En sus comienzos, alrededor de 1920, la primera comunidad de Quilmes estaba formada por unas pocas familias alemanas. Más tarde se sumarían hermanos y hermanas locales, incorporándose en la década de 1930 la prédica en español. La iglesia fue inaugurada el 10 febrero de 1946 por el Ayudante Apóstol José Toplisek.
Riachuelo se encuentra en una pequeña población rural que recibe su nombre del arroyo que desemboca en el Río de la Plata, a 10 kilómetros de Colonia del Sacramento, capital del departamento. Los primeros testimonios de la fe nuevoapostólica llegaron en 1938
José León Suárez, Argentina
Doce de Octubre Nº 1, Argentina Riachuelo, Uruguay
Olavarría, Argentina
y se fue conformando la comunidad. En enero de 1939 se comenzaron a realizar Servicios Divinos en la casa de la familia Álvarez. Ese mismo año tendría el lugar el primer Santo Sellamiento.
La consolidación de la comunidad se fue dando con el esmero de los fieles y siervos. Por su ubicación en un medio rural muchas veces los portadores de ministerio que brindaban la asistencia espiritual cubrían a pie el trayecto desde Colonia, por falta de trasporte. En épocas de lluvia, incluso lo han hecho descalzos (en el intento de resguardar el calzado para el Servicio Divino).
La congregación de a poco se fue afianzando y más tarde, uno de los fieles donó el terreno para empezar a dar forma al sueño de la “casa propia”. Otro aportó los ladrillos y entre varios llevaban los materiales necesarios en carros tirados por caballos. De modo que así, con el aporte y entusiasmo conjunto, finalmente se construyó la iglesia, que pudo ser inaugurada el 5 de mayo de 1946 por el entonces Obispo Godofredo Rufenacht.
70 aniversario
Muy cerquita en edad, otras dos iglesias de Argentina, que en su caso celebraron 70 años: Mercedes Nº 1 y Lomas de Zamora (Buenos Aires).
La historia de Mercedes N° 1 comienza en 1940 y ya un año después se pudo realizar el primer acto de Santo Sellamiento. Primero, una hermana cedía parte de su vivienda para efectuar los Servicios Divinos. Ahí nació la comunidad Mercedes, en 1941. Un hito para la comunidad fue la visita, en 1944, del Ayudante Apóstol Mayor Schlaphoff, que alentó a la comunidad a seguir trabajando en su crecimiento. Así fue y unos años más tarde se adquirió el terreno donde el 18 de marzo de 1951 abriría sus puertas la flamante iglesia. Unas décadas más tarde, sería remodelada para acondicionar su edificio. El 11 de noviembre de 1984 el Apóstol Pablo Bianchi realizó el Servicio Divino de reinauguración, acompañado por los Apóstoles Mario Fiore y Guillermo Vilor.
En Lomas de Zamora la primera comunidad comenzó a funcionar en 1944, pasando por varios locales hasta su inauguración como iglesia, que fue el 27
de junio de 1951. Ese día presidió el Servicio Divino festivo el Apóstol Edmundo Glessman. Con el paso de los años también fueron realizadas algunas reformas edilicias. De los testimonios surgidos desde Lomas de Zamora hacia barrios cercanos surgiría más tarde también la comunidad de Villa Rita.
La expresión “bodas de diamante” se utiliza para referirse a un 60° aniversario de bodas. Si tomamos en cuenta la fecha de inauguración, dos de nuestras iglesias celebraron entonces sus “aniversarios de diamante”. Se trata de Villa Gonnet y José León Suárez, ambas en Buenos Aires (Argentina). Fueron inauguradas en el año 1961, el 22 de enero y el 26 de febrero, respectivamente.
Villa Gonnet surgió en la década de 1950, cuando aún era un barrio en plena formación, casi descampado. El 12 de enero de 1952 nació la primera comunidad en una humilde y pequeña construcción. Pasado algún tiempo se pudo adquirir el terreno y la edificación de la iglesia llevó aproximadamente un año, hasta su consagración.
En José León Suárez los primeros testimonios de la fe nuevoapostólica llegaron en 1946 y la cantidad de fieles fue creciendo rápidamente. Para el Servicio Divino de inauguración, se contó con la presencia del Apóstol de Distrito Martón.
Siguiendo la primera analogía, podemos decir que otras tres iglesias de Argentina tuvieron sus “aniversarios de oro”, habiendo sido consagradas en 1971: Puerto Rico (28 de marzo), Olavarría (29 de mayo), Caseros (26 de junio) y Doce de Octubre Nº 1 (27 de junio).
Las más jóvenes
Finalmente, dos iglesias cumplieron 25 años desde su inauguración. Es el caso de Concepción del Uruguay (ubicada en la provincia argentina de Entre Ríos) y de San Jacinto (en el departamento de Canelones, Uruguay). La primera fue consagrada el 4 de mayo y la segunda, el 18 de mayo, ambas en el año 1996.
San Jacinto, Uruguay
Lomas de Zamora, Argentina
Concepción del Uruguay, Argentina
En conexión: El Apóstol Jorge Franco (vértice superior izquierdo) durante el encuentro virtual con hermanos y
“La música, hermanas que colaboran en el área de Coordinación musical. un recurso maravilloso”
El sábado 19 de agosto, tuvo lugar una reunión virtual del área de Coordinación Musical de la INA Argentina, encabezada por el Apóstol Jorge Franco. En esta ocasión y por la accesibilidad que permiten los medios digitales fueron convocados, de todo el país, el “colaborador musical” por grupo de comunidades y portadores de ministerio que acompañan esta tarea.
Las restricciones sanitarias por la pandemia de Covid-19 modificó muchas actividades del día a día, y también de alguna u otra forma diferentes tareas en nuestra Iglesia, incluso aquellas que forman parte de la liturgia, como lo es la música. En 2020, ya el Apóstol Mayor nos invitaba a no dar por sobrentendido aquello que disponemos por gracia, como lo es cantar con la comunidad. “Hoy, lo extraño”, mencionó en ese momento.1
1 https://www.youtube.com/watch?v=5iRwU2FZRCE
Muchos son los hermanos y hermanas que colaboran o bien participan en nuestros coros y conjuntos instrumentales, ofrendando sus dones al amado Dios y para alegría de la comunidad. Este tiempo de aparente “silencio” despertó nostalgias, pero también nuevas iniciativas. Por ejemplo, mucho se ha trabajado en los coros y orquestas virtuales que nos siguen acompañando en los Servicios Divinos y Palabras pastorales por transmisión, con un dedicado trabajo de grabación y edición. En muchos casos, los distritos o comunidades se organizaron para mantener ensayos virtuales, algo nada sencillo por lo que la temática y sincronización de
tareas requieren. Otros hermanos o hermanas simplemente realizaron un llamado telefónico o grabaron un audio, para cantar uno de nuestros himnos y alegrar el corazón. “A todos nos mueve el mismo objetivo”, expresó el Apóstol Franco en la reunión.
El encuentro contó con más de 100 participantes. De hecho, fue programada una segunda fecha, para quienes no pudieron sumarse. Como introducción, el Apóstol quiso transmitir un sincero agradecimiento. “Esta es una Iglesia que canta… y que también hace música instrumental”, manifestó, en alusión a lo expresado en el sitio web de la INA Internacional.2 Desde ya que todos esperamos volver a participar presencialmente de los Servicios Divinos y cantar a viva voz expresando nuestra alabanza a Dios. “Para nuestra tarea siempre nos hemos enfocado en la importancia de la música en el Servicio Divino”, mencionó el Apóstol.
Convocando a mantener el entusiasmo por la tarea, recordó la tarea del Colaborador Musical por grupo de comunidades: “Es el hermano o hermana que, junto con el siervo a cargo, entusiasma, ayuda, colabora, comparte”, expresó. Es una réplica de Coordinación Musical en el lugar y forma un equipo con el siervo responsable del área musical en el lugar; son una sola cosa. Asimismo el Apóstol exhortó a los portadores de ministerio que acompañan esta tarea, para colaborar en el mismo sentir y aprovechar de la mejor manera los recursos. Tal vez no en todas partes se dispone de lo mismo, quizás hay solo un armonista. Pero el objetivo es el mismo, porque Dios está detrás de cada uno, mencionó el Apóstol: “¡Todos tenemos todo, porque tenemos a Dios!”.
A continuación, el Pastor Diego Licciardi, quien colabora en la coordinación del área, compartió una serie de indicaciones y recomendaciones específicas a tener en cuenta en la actividad, ya sea durante este tiempo de restricciones y tareas en modalidad virtual, como también ya previendo cuando sea posible retomar los encuentros presenciales, cuando las disposiciones oficiales lo permitan. Un resumen de todo lo expuesto fue previsto puedan disponerlo luego los presentes, para que asimismo puedan compartirlo según corresponda con los colaboradores en cada comunidad.
También y como un recordatorio del objetivo general de la tarea, fue compartido un video llamado “Música en el Servicio Divino”,3 con un extracto de lo expresado en el Catecismo INA (12.1.14). También se presentaron los distintos canales de comunicación institucionales de la INA Internacional y regional con sus apartados referentes a la música. A su vez, fue recordado el contenido del sitio web interno de Coordinación Musical, una herramienta que ofrece material de trabajo, indicaciones de repertorio, preguntas frecuentes, entre otros.
Finalizando el encuentro y previo a la oración de cierre, el Apóstol aun reflexionó acerca de las experiencias que en forma simple pero igualmente emotivas se viven en una comunidad, como puede ser escuchar la letra de un himno en un momento oportuno. “La música es un recurso maravilloso”, concluyó.
2 “En este sentido, la Iglesia Nueva Apostólica es una comunidad que canta y hace música”. https://nak.org/es/comunion/musica 3 https://bit.ly/Música_en_el_Servicio_Divino
Comunidad reunida en la iglesia Necochea (provincia de Buenos Aires, Argentina)
Dos visitas en la costa atlántica
En el mes de abril, el Apóstol de Distrito Enrique Minio pudo visitar las iglesias Necochea y Santa Clara del Mar, ubicadas en la costa atlántica de la provincia de Buenos Aires (Argentina). Bajo los protocolos sanitarios vigentes, celebró Servicios Divinos junto a hermanos y hermanas del lugar.
La primera comunidad visitada fue Necochea. La iglesia lleva el mismo nombre que la ciudad en donde está localizada. Es cabecera del partido homónimo; posee amplias playas y un importante puerto. Necochea, un poco más al sur de Mar del Plata y Miramar, es un conocido centro turístico de verano.
La iglesia se ubica en la calle 67 N°1964. Allí se desarrolló el Servicio Divino, bajo el texto bíblico de Apocalipsis 3: 8, que dice: “Yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar; porque aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra, y no has negado mi nombre”.
“Dios nos conoce. Quiere que seamos fieles y le entreguemos todo nuestro corazón. Cristo es una puerta abierta y el Padre celestial desea que podamos manifestarnos como Él lo hizo”, comenzó diciendo el Apóstol de Distrito a la comunidad. Luego en el desarrollo de la prédica explicó que para lograrlo debemos vencernos a nosotros mismos, aunque esto no sea una tarea sencilla. “Esto es todo un desafío”, había expresado y más adelante agregó: “Para hacerlo hay que ser valientes y confiar en que Dios va a colocar su parte. Él nos consuela y vela por nosotros”. También colaboró en el servir el Primer Pastor Amoroso.
Jesús, la puerta
Situada a unos 20 kilómetros de Mar del Plata, Santa Clara del Mar es otra de las importantes ciudades turísticas que componen la costa atlántica, en el sur de Buenos Aires. Allí fue inaugurada esta comunidad el 2 de septiembre de 2017. Actualmente está compuesta por hermanos y hermanas de numerosos barrios aledaños.
El Apóstol de Distrito ofició aquí el domingo 11 de abril de 2021. La prédica se basó en la cita bíblica de Juan 10: 7-8: “Volvió, pues, Jesús a decirles: De cierto, de cierto os digo: Yo soy la puerta de las ovejas. Todos los que antes de mí vinieron, ladrones son y salteadores; pero no los oyeron las ovejas”.
La palabra del día hizo referencia a Cristo como aquel que es la puerta, a través de la cual el pastor llama a sus ovejas y las protege en todo momento. Cristo nunca obligó a nadie, tampoco lo hace con nosotros. Nos decidimos por esa puerta, nos acompañamos y nos ayudamos mutuamente, seguimos luchando.
“Jesús quiere darnos de su paz y consuelo, a través de la palabra. No olvidemos que para pasar por esta puerta de gracia y bendición, tenemos que dejar todo aquello que nos separa de la voluntad de Dios. Sigamos adelante con el gran desafío de la lucha por nuestra fe, porque el Señor nos ha prometido comunión eterna con Él”, manifestó el siervo durante la prédica.
También colaboraron en el servir el Pastor Nicoletti y el Primer Pastor Benavídez.
Luego de compartir la Santa Cena con la comunidad, el Apóstol de Distrito suministró el Sacramento también a los amados difuntos. “No pongamos límites a la gracia de Dios, porque todos tienen la posibilidad de ser salvos”, expresó.
Así culminaba este segundo encuentro, dejando atrás horas vividas con alegría en ambas comunidades.