Decálogo de los principales verbos a conjugar en gestión de la investigación traslacional
1. Analizar el sector en el que se desenvuelve la organización, no solo el doméstico sino, y fundamentalmente, el global. Conoce las tendencias del mercado y está atento a los movimientos de los protagonistas más destacados del área. Maneja técnicas de análisis estratégico y la vigilancia tecnológica es una práctica sistemática 2. Comprender la capacidad de la organización. Quien gestiona no tiene por que (tal vez no pueda) pertenecer al mundo científico, ello no impide que conozca las limitaciones y posibilidades de los proyectos por técnicos que se presenten. Contempla tanto el estado del arte de la tecnología que desarrolla como las debilidades y fortaleza de la institución. Las limitaciones del gestor en temas científicos lo conduce a un proceso participativo y consensuado de elaboración de la estrategias 3. Gestionar el conocimiento organizacional. Trabajar con equipos conocimiento intensivos exige comprender su potencialidad y proyección en un escenario de alta competencia vasto en oportunidades y amenazas. El gestor tecnológico incorpora nuevas formas de adquirir conocimiento innovador donde la traslación,
por
antonomasia,
es
una
actividad
inter
y
transdisciplinaria 4. Considerar los aspectos financieros. La IT no solo vincula a sus protagonistas
principales,
investigadores
básicos,
clínicos
y
pacientes, sino a inversores y científicos. Opera entre actores con objetivos, intereses y lenguajes diferentes en un escenario de desconocimiento y de desconfianza mutua que históricamente condujo (aún lo hace) al fracaso desde la comunicación inicial a los compromisos posteriores. Negociar es una acción que tiene
que aprender, practicar y aplicar.
5. Predicer el futuro. El big picture un atributo natural en algunos gestores y adquirido en otros, marca la diferencia entre las actividades operativas diarias y la visión de largo plazo. Se requiere de una mezcla de exploración sistemática e intuición para adaptarse a un mundo en constante cambio. La línea del tiempo está siempre presente en sus decisiones; observa la cadena de sucesos como un continuo. Términos como: vigilancia estratégica,
inteligencia
competitiva
o
prospectiva
resultan
familiares y de manejo experto. 6. Liderar generando seguidores. Induce una visión compartida, el manager tecnológico evita ser un voluntarista solitario relegado a un sueño sin soñadores. El liderazgo efectivo homogeniza primero y cataliza después perfiles de personalidad y capital de conocimientos asimétricos o polarizados entre las diferentes actores. La confluencia hacia un objetivo común es un desafío, alcanzar el objetivo una necesidad, desarrollar capacidades de liderazgo una obligación. 7. Obtener valor. Es natural que cualquier organización pretenda generar utilidades que aseguren su supervivencia y crecimiento futuro,
en
particular
cuando
nos
referimos
a
un
sector
históricamente oneroso. Asimismo, el valor social de la IT es innegable,
su
impacto
en
la
salud
pública
posee
una
potencialidad inédita para una disciplina. Gestionar IT involucra estos dos conceptos de valor que no colisionan sino que se sinergizan. 8. Crear redes de trabajo. El enunciado “la empresas de base tecnológica nacen globalizadas” implica que sus competidores están
en
cualquier
rincón
del
planeta
pero
también
sus
potenciales aliados. No solo en cuestiones financieras sino en el intercambio de información, de proyectos o de tecnología y aún
de comparación (benchmarking). El acceso al capital humano, el conocimiento y la información forman parte de este entramado virtuoso que requiere ser administrado. 9. Enfocar en la calidad. Desde la búsqueda del mejor capital humano hasta la adquisición de tecnología de punta, pasando por los procesos y las buenas prácticas, son pensadas con el concepto de calidad internacional. Naturalmente, estos son diferentes según el área de la organización de la que se trate. Además de asegurar los mejores resultados posibles, permite ser competitivo en el sector biotecnológico global. 10.
Comprometer
esfuerzos
en
responsabilidad
social.
Los
resultados generados a través de la IT, y sus heterogéneas consecuencias, conduce a una creciente preocupación pública para que las organizaciones de I + D tomen conciencia de que paliar las necesidades sociales no son una opción, están obligadas a hacerlo. Así es que, la sensibilidad social, y su consecuente responsabilidad, deberá estar presente en todo el espectro de actores participantes en la generación del nuevo conocimiento científico y tecnológico emergente de la IT. La bioética, como saber y actitud, pertenece al dominio de su accionar. Del libro “La cama y la mesada. Gestión tecnológica de la investigación traslacional”. Jorge Velasco Zamora. Ed. Dunken 2015