JESUS TERAN 56

JESÚS TERÁN

Editorial La edición de noviembre del Suplemento Jesús Terán está dedicado al tema de las regiones y pueblos, así como sus movimientos para separarse de los países a los que pertenecen. A lo largo de la historia podemos observar cómo se ha ido modificando la división política debido a guerras, conflictos internos, movimientos de independencia o separatistas, expansionismo o desmoronamiento de grandes imperios. El mundo en un gran mosaico cultural y cada uno de los países también lo es, por lo cual, dentro de sus fronteras cohabitan varios pueblos con sus creencias, formas de organizarse o concepciones de mundo, de ahí la importancia de trabajar en el reconocimiento de la diversidad, porque es parte de nuestra naturaleza.

En las noticias recientes hemos sido testigos del proceso que ha vivido Cataluña con respecto a su pertenencia o independencia con España, no obstante, hay muchos ejemplos a lo largo de la historia, que implican modificaciones de los mapas políticos.

En esta ocasión las colaboraciones abordan el tema de México, que en el siglo XIX al irse configurando como una nación independiente, perdió territorio

Suplemento sobre Estudios Internacionales para La Jornada Aguascalientes Noviembre

2017

No. 56

Coordinadores: Aurora Terán Fuentes Soren Héctor de Velasco Galván

Mapa de México de 1827.

Disponible en: https://render.fineartamerica.com/images/rendered/medium/greeting-card/images-medium-5/1827-finley-map-of-mexico-upper-calif

AURORA TERÁN FUENTES

y enfrentó conflictos. El primer artículo aborda el peligro del archipiélago, una metáfora que refiere a la fragmentación total de un país, posteriormente tres estudiantes de Ciencias Políticas escribieron sobre el caso de Texas y el de Yucatán, sabemos que la primera se indenpendizó, primero se conformó como República y luego se integró a los Estados Unidos, aunque todavía en el presente no se abandona el sueño de la independencia, es el tema de la colaboración de Marcopolo Ortiz, sin embargo, también está el caso de Yucatán que declaró su independencia, y no sólo una vez, aunque finalmente sabemos que es una entidad federativa de México, el anterior es el tópico que desarrollan por separado Melissa Mares Ortiz y Elizabeth Gordiano Moreno.

Independencia y separatismo, son asuntos de actualidad, pero también han sido recurrentes a lo largo de la historia en diferentes geografías, además de ser fenómenos no sólo políticos y geográficos, sino relativos a la identidad cultural de los pueblos y naciones.

No me queda más que agradecer el espacio que La Jornada Aguascalientes nos sigue proporcionando, porque nos ha permitido presentar y discutir, desde

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El Peligro del Archipiélago

AURORA TERÁN FUENTES

Archipiélago Naantali (Finlandia).

Disponible en: https://curiosoando.com/wp-content/uploads/2016/05/archipielago-Naantali-Filandia.jpg

Doctora en Historia Universidad Pedagógica Nacional, Unidad 011

A lo largo de la historia diferentes países se han conformado por una diversidad de regiones, de pueblos, religiones, lenguas, tradiciones. Ejemplos los podemos encontrar en México, España, la extinta Yugoslavia, entre otros.

También se observa lo anterior en los imperios, por ejemplo el Romano por su gran extensión, se nutrió de diversos pueblos con sus culturas, como los galos, los iberos, los griegos, los egipcios, etc. Otro caso lo encontramos con dos imperios que se desmoronaron después de la Primera Guerra Mundial, me refiero al Austro-Húngaro y al Otomano, cuya extensión territorial se ubicó en la parte de Europa del Este y Euroasia, es importante reconocer que dicha franja europea se ha caracterizado por ser frontera y tierra de choques culturales, así como de asimilaciones culturales (desde el tiempo del imperio Romano), lo que ha provocado que diversos pueblos coexistan en mismos lugares y paulatinamente queden integrados a los Estados.

Según los especialistas, el caso del imperio Austro-Húngaro llevaba en sí mismo la contradicción por el gran mosaico cultural y por lo lógica expansionista, que dio como resultado movimientos de resistencia nacionalistas entre los pueblos eslavos. No hay que olvidar que una de las causas profundas de la Primera Guerra Mundial fueron los nacionalismos, que se concretaron a lo largo del siglo XIX en oleadas revolucionarias, denominadas la Primavera de los Pueblos.

Lo anterior, tiene que ver con el problema de la identidad, es decir, con quién uno se identifica, con quién se comparte la lengua, las tradiciones, la comida, las creencias; en ocasiones la identidad se construye ajena al Estado o país al que se pertenece, ejemplos de pueblos sin Estado y que están regados por varios países son el gitano y el kurdo, minorías que por defender su identidad, se han enfrentado a la discriminación o limpieza étnica.

Los países son mosaicos culturales, por tal razón, si no hay elementos fuertes y comunes de identidad, así como políticas de inclusión, diálogo constante, respeto y reconocimiento a las diferencias, así como visiones compartidas y comunes de mundo; surgirá el problema del archipiélago, en muchas regiones o pueblos se tienen identidades propias que no se reconcilian con las de carácter nacional, provocando el aislamiento o la marginación política.

Ejemplo lo tenemos en nuestro mismo país, México a mediados del siglo XIX, perdió más de la mitad de su territorio, todavía para algunos es una afrenta,

no obstante, hay que observar a los habitantes de aquellos territorios de tierra adentro, que tenía una identidad propia o más afín con la norteamericana, por ejemplo, muchos eran norteamericanos naturalizados como mexicanos. Efectivamente se perdió la guerra, pero qué tan propios a la nación mexicana eran los territorios del norte. ¿En qué consiste el problema del archipiélago?, en el desmembramiento, en fraccionarse, es convertirse en un montón de islas. México después de su independencia pudo convertirse en un archipiélago, por ejemplo, Guadalajara como centro de la Nueva Galicia, tenía todo para conformarse como un país, con un territorio considerable mayor que algunos países europeos. El norte también.

Yucatán no se quedó atrás, hasta llegó a declarar su independencia para finalmente volver a la federación. Sin embargo, nuestro país sí presentó el problema del archipiélago, hacia el norte (Texas, California, Arizona, Nuevo México) y hacia el sur (países centroamericanos). Si observamos la historia desde las divisiones políticas, Centroamérica es un archipiélago; en Europa, Yugoslavia se desmembró después de una guerra a finales del siglo XX, las antiguas repúblicas soviéticas se separaron de Rusia, lo que ha significado crisis para ambas partes: los que se quedan y los que se van (ya sean estados, provincias, repúblicas, territorios, colonias, etc.)

Por tal razón, no es sencillo de resolver el problema de regiones o pueblos que luchan por su independencia o separación, ejemplos sobran: Cataluña, Chechenia, Kosovo, Yucatán, Escocia, Irlanda, Puerto Rico, el País Vasco, etc. ¿Por qué no es sencillo?, porque si se reconoce la independencia de alguna región o pueblo por más justas que sean sus reivindicaciones; como efecto dominó otros pueden seguir el ejemplo, provocando la desintegración y hasta la desaparición de un país, no obstante, la historia nos demuestra que ha habido momentos en que la liga se truena y no hay marcha atrás, reconfigurándose la división política de una región, que es parte de una dinámica histórica, aunque pensemos que las fronteras o las divisiones políticas no se alteran, precisamente la historia nos muestra todo lo contrario.

De esta forma, habría que analizar lo que significa una mancomunidad, una federación, una confederación o una provincia autónoma, es decir, formas de organización política que reconozcan la diversidad y la autonomía.

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Texas y su ajetreo independentista MARCOPOLO ORTIZ Estudiante de Ciencias Políticas y Admón. Pública Universidad Autónoma de Aguascalientes

El Estado de la estrella solitaria, antiguo territorio mexicano y potencia económica del continente, demuestra sus intenciones de volver a formar, por sí mismo, una república libre e independiente. Esto constituye: Una fractura a la soberanía norteamericana y un ejemplo contemporáneo, de la desconfianza que los Estados tienen hacia la Federación.

Para comprender claramente el presente texano y sus aspiraciones, debemos recurrir al análisis de su pasado, particularmente de su territorio, una historia que involucra a más de una bandera, ya que en un primer momento, de 1685 a 1689, fue una Colonia Francesa, mientras que, de 1690 a 1821 fue una Colonia Española; al término del conflicto entre España y México, pasó a ser territorio de este último, sin embargo, no tardó mucho en considerarse un territorio independiente producto del despotismo centralista del Gobierno Mexicano y el abandono de la Constitución de 1824. Finalmente, en el año de 1845, fue incluido como miembro de la República Constitucional de los Estados Unidos de Norteamérica. Han pasado ya, 172 años.

Actualmente, Texas goza de un mercado creciente y atractivo, que le ha valido una situación económica envidiable, que fácilmente duplica el porcentaje de crecimiento nacional, donde los negocios y la inversión se ubican

Del Brexit al Texit. Texas piden tras el voto de Reino Unido Disponible en: http://cdn.hispantv.com/hispanmedia/files/images/thumbnail/20160625/09434869_xl.jpg

El Alamo, Texas.

Disponible en: http://cdn.history.com/sites/2/2013/11/texas-alamo-1.jpg

al por mayor, tan es así, que en 2015, dicho Estado, contaba con un Producto Interno Bruto de 1,639 billones de dólares. No debería sorprendernos, tomando en cuenta que en el mismo año de 2015, contaban ya con 500,000 kilómetros de autopistas, 46 líneas ferroviarias, 16 puertos y 380 aeropuertos. La comunidad texana, es una perla para el Gobierno Norteamericano, pero la relación entre ambos no parece recíproca, ya que ellos no se encuentran satisfechos con el desempeño del Gobierno Federal, principalmente en materia fiscal y pretenden aprovechar los vacíos legales de su anexión, para lograr su independencia. Una estrategia muy interesante, recordando que son el único Estado Independiente reconocido a Nivel Internacional que se encuentra incorporado a los Estados Unidos.

Hasta el momento, Texas se ha beneficiado de la situación geopolítica de Estados Unidos y poco a poco afianza de forma inteligente su separación, tomando medidas de defensa como el establecimiento de un almacén para sus lingotes de oro, aislando sus activos de las fuerzas del mercado inestables y reduciendo su dependencia a las instancias que se encuentran fuera del Estado, reuniendo incluso, algunos de los elementos necesarios para la creación de una moneda propia.

Texas, a diferencia de la gran mayoría de movimientos independentistas de la actualidad, ya ha probado el sabor de la autodeterminación y hoy en día se encuentra más fuerte que nunca. Acaso ¿Será el protagonista de una victoria histórica sobre el gigante de la política expansionista, o nuevamente los medios coercitivos mitigaran las aspiraciones de libertad de los ciudadanos?.

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Independizarnos d e M é x i c o, e l c a s o d e Yu c a t á n MELISSA MARES ORTIZ Estudiante de Ciencias Políticas y Administración Pública Universidad Autónoma de Aguascalientes

Con los hechos ocurridos recientemente en Catalunya, uno de los grandes temas de interés en el mundo es el de los movimientos separatistas.

Un movimiento separatista es un movimiento de carácter político impulsado por una parte de la sociedad que pretende la autonomía política de los ciudadanos de una determinada región geográfica.

En México tenemos nuestro propio caso, con la declaración de independencia de la península de Yucatán en dos ocasiones a lo largo de nuestra historia.

La primera fue en 1841, con un contexto político en el cual en nuestra nación predominaba un sistema centralista (es importante recordar que en estos sistemas las decisiones emanan de un centro sin tomar en cuenta la diversidad cultural que pueda existir dentro de un territorio), la Asamblea de la Cámara de Diputados local emitió el Acta de Independencia, dentro de la cual se contemplaban los territorios de Campeche, Quintana Roo y Yucatán.

Ese mismo año fue emitida su constitución, siendo una de sus características el ser la primera constitución que reconoce la figura jurídica del Juicio de Amparo, además de reconocer la libertad de culto, el bicameralismo, la elección popular directa y la supresión de los fueros militares.

El gobierno mexicano encabezado por Antonio López de Santa Anna realizó acciones militares para evitar esta separación, pero el 5 de diciembre de 1843 fueron firmados convenios que determinaban que Yucatán tendría plena autonomía cumpliendo con la integración de reintegrarse a México, ya que los problemas económicos debido a las irregularidades entre los puertos yucatecos y mexicanos estaban afectando a la península.

En 1845 los convenios se suprimieron y en 1846 de nuevo la Asamblea declaró la Independencia, reincorporándose a México definitivamente en 1848 por decisión de su gobernador Miguel Barbachano, a causa de que la Guerra de Castas había comenzado en el mes de Julio de 1847.

A partir 1848 no se realizó otro intento por determinarse como una nación independiente, pero en la memoria histórica de la península Yucateca el recuerdo permanece como una muestra de orgullo local, siendo posible encontrar el día de hoy productos con la Bandera de Yucatán , la cual es verde, blanca y roja y posee cinco estrellas, representando los cinco departamentos en que se dividía Yucatán, los cuales eran: Mérida, Izamal, Valladolid, Tekax y Campeche.

Ejemplos como el de Yucatán, nos permite hacer una comparación entre el deseo de Escocia de independizarse del Reino Unido, las luchas de Chechenia contra Rusia, el reciente referéndum realizado por Kurdistan para separarse de Irak y las fuertes luchas del País Vasco por reafirmarse como nación frente a España y nos lleva a cuestionarnos cuáles son sus motivos y porqué hasta el día de hoy no han tenido éxito en sus aspiraciones.

Bandera de Yucatán Disponible en: https://elbigdata.mx/mexico/no-solo-en-cataluna-tres-estados-en-mexico-quisieron-su-independencia-y-lo-lograron/

Sur vs. Centro ELIZABETH GORDIANO MORENO Estudiante de Ciencias Políticas y Administración Pública Universidad Autónoma de Aguascalientes

La separación por parte de algunos de los estados del norte y sur de México provocó un fuerte impacto en el país en el siglo XIX. Por ende se debe entender la relevancia de la discusión acerca del movimiento separatista por parte del estado de Yucatán y de la relevancia social y política que implica. Es un movimiento producido por la inconformidad de una parte de los pobladores, puesto que son ellos los principales afectados por las decisiones tomadas por el Ejecutivo Federal. Existen dos antecedentes que influyeron en que la inconformidad de dichos pobladores se acrecentara, desde los inicios del México independiente, comenzaron movimientos de inconformidad hacia las élites en el mando: la guerra de independencia (la cual sufrió México en los años de 1810-1821 con el objetivo de independizarse de la corona española); y la revolución de México (que de igual manera sufrió el país para que la dictadura de Porfirio Díaz llegara a su fin).

Estos antecedentes son de gran importancia para el movimiento de independencia de Yucatán. Si se creía que la inconformidad de la sociedad, o en específico la inconformidad de ciertos grupos de la población es algo nuevo, esto no es así, ya que este problema viene desde el comienzo y es parte de la historia de este país. Problemas surgidos por las principales élites del país; por más que esto duela, así es la realidad, y es necesario hablar sobre este tipo de temas, aunque para algunos suene irrelevante, para otros puede ser un empuje para ya no permitir que se diga que hay libertad cuando son las élites quienes toman las decisiones por todo el país o la sociedad misma.

Siempre se ha conocido que las élites son las que ahogan los movimientos que emergen, sin permitir siquiera ahondar más allá de lo que comúnmente se denomina “verdad histórica”. Profundizar sobre este tipo de temas, es semeajante a estar dentro de un laberinto, porque hay muchos caminos y algunos nos llevan a nada; de igual manera es ahondar en esta cuestión, ya que hay ideologías que a lo único que llevan es la nada o lo que es peor aún, se llega al mismo lugar donde se comenzó; sin embargo es importante recorrer cada uno de esos caminos, ya que conociéndolos, es más sencillo encontrar el camino para salir. Para saber qué es lo que pasa dentro de este tipo de sucesos, se debe estar muy de cerca e incluso se dice que la mejor visión es desde dentro, ¿pero cómo ver algo que pasó desde hace tanto tiempo? Es sencillo responder esto, ya que hay sucesos de lucha por autonomía o independencia que en el pasado y hoy en día son ignorados por muchos, pero que son de gran relevancia para otros, no obstante, para conocerlos es necesario estar informados y permitir que ese velo de ignorancia que al parecer es un mal que aqueja a la mayoría de los pobladores de este país, caiga y permita que las personas que creen estar en una situación en donde nada los perturba, provoquen que las cosas cambien. Es de gran importancia no ser tolerantes ante la injusticia, la impunidad, para evitar que la falta de conocimiento de la estructura social y política sean un factor más para quedarse quietos e incluso permitir que las cosas se sigan haciendo de forma incorrecta.