Jesús Terán #61

JESÚS TERÁN

E D I T O R I A L

SOREN HÉCTOR DE VELASCO GALVÁN

La Casa Blanca, Washington, D.C. 3 de abril de 2018. Gárrulo y rijoso como es su costumbre, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, sostiene un desayuno de trabajo con los mandatarios de los países Bálticos. Sin embargo, al ser cuestionado por la prensa sobre el tema migratorio, el hombre del peluquín rubio declara: “Hasta que podamos tener un muro y seguridad fronteriza, vamos a estar vigilando nuestra frontera con las fuerzas armadas”. Trump se detiene y agrega: “Es un gran paso”. Posteriormente, al ser interrogado respecto al estatus de la renegociación del Tratado de Libre Comercio (TLCAN), el energúmeno agrega: “El TLCAN ha sido fantástico para México, pero malo para nosotros”.

México se encuentra en temporada electoral y, por primera vez, en una generación, la política exterior será, gracias a Donald Trump, un tema toral en la campaña presidencial. Por lo tanto, el Suplemento Jesús Terán dedica su edición de abril de 2018 a examinar la relación de México con sus principales socios internacionales.

Suplemento sobre Estudios Internacionales para La Jornada Aguascalientes Abril

2018

No. 61

9

Coordinadores: Aurora Terán Fuentes Soren Héctor de Velasco Galván

El águila azteca devora a la serpiente Donald Trump Fuente: https://articulo.mercadolibre.com.mx/MLM-550431300-playera-aguila-azteca-devorando-a-la-serpiente-donald-trump-_JM

La colaboración de la experta en política de América Latina, Anthea McCarthy-Jones, es sobre la creciente importancia que reviste, como socio estratégico, Australia. Esta relación ha cobrado importancia a la luz de los acuerdos tales como la Alianza del Pacífico y el Acuerdo Transpacífico.

A su vez, el escribano entrevista a dos ciudadanos de nuestros países socios en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN): Susan Ballew, activista estadounidense, y Barry Prentice, oriundo del Canadá, para inquirirles su perspectiva sobre el futuro del TLCAN y el estatus de la relaciones bilaterales entre Canadá-EUA, Canadá-México y EUA-México.

Finalmente, el especialista francés en América Latina, Jean-Jacques Kourliandsky, aporta su visión europea respecto a los retos qué deberá enfrentar el próximo presidente de México en su trato con el energúmeno neoyorquino: Donald Trump.

Por último, Aurora Terán y el escribano agradecen a nuestra casa editorial, La Jornada Aguascalientes, creer en el Suplemento Jesús Terán y permitirnos su publicación.

JESÚS 2 TERÁN

L a importante sociedad oceánica de

Australia México

y

ANTHEA MCCARTHY-JONES

Doctora en Política Latinoamericana Escuela de Negocios, Universidad del Nueva Gales del Sur, Australia

El siglo asiático ha sido alabado como “la característica definitiva del siglo XXI” (Libro Blanco, 2012, p.1) y ha recibido considerable atención en los círculos académicos y de elaboración de políticas. Este siglo entrante traerá muchas oportunidades y retos; así, en las décadas de apertura de este siglo, Australia se encontrará en una coyuntura crítica. Mucho del debate actual se enfoca en la alianza de Australia con los Estados Unidos, el surgimiento de China y el subsecuente “pivote” de los Estados Unidos a la región. Sin embargo, en los últimos diez años las naciones asiáticas se han identificado progresivamente con las potenciales oportunidades económicas presentadas por las naciones latinoamericanas, lo cual ha conducido al desarrollo de un conjunto de inversión extranjera directa (IED), un intercambio comercial incrementado, y relaciones diplomáticas más fuertes entre las dos regiones. Vice versa, los países latinoamericanos han estado alcanzando a través del Pacífico en un intento por participar en las actividades económicas y políticas actualmente en marcha. Al entender la oportunidad única concedida a Australia debido a su proximidad geográfica al epicentro de la futura economía global, Australia ha sistemáticamente intentado trazar el curso más claro posible en el cual navegar los retos venideros del siglo asiático mientras que, de manera simultanea, persigue un rango de oportunidades para asegurar la prosperidad de nuestra nación en el futuro. En este contexto, la relación bilateral entre Australia y México requiere más examinación.

La historia de las relaciones entre los dos países estaba caracterizada por un lento crecimiento en comercio, el cual estaba basado en cuatro conceptos erróneos acerca de hacer negocios en América Latina (Esposto y Fien, 2017).

Los cuatro conceptos erróneos estaban relacionados con una noción percibida de que las interacciones con los gobiernos latinoamericanos a menudo involucraban impedimentos burocráticos indeseables y corrupción, la posición histórica de las economías latinoamericanas operando como competidores naturales a los intereses económicos de Australia, el paralizante efecto de “la tiranía de la distancia” y la miope preocupación de Australia con Asia, la cual permitió a los hacedores de políticas ignorar a los “gigantes dormidos” de América Latina. Sin .embargo, la reciente firma en marzo de 2018 del Acuerdo de Asociación Transpacífico (CPTPP, por su siglas en inglés), un acuerdo de libre comercio involu-

Apretón de manos entre el presidente de México, Enrique Peña Nieto, y el gobernador general de Australia, Peter Cosgrove.

Fuente: https://www.gob.mx/gobmx/paginas/543

crando a 11 países en la región Pacífico (Australia, Brunei Darussalam, Canadá, Chile, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam) proveerá una miríada de oportunidades para Australia y México para superar potencialmente concepciones erróneas pasadas que han probado ser obstáculos al crecimiento sostenido en las relaciones económicas y políticas entre los dos países. El CPTPP debiera permitir a ambos países la oportunidad de desarrollar intercambios bilaterales significativos entre las empresas, el sector educativo y las instituciones de gobernanza que, a su tiempo, animarán el surgimiento de nuevos sectores impulsores para los productos de exportación e importación.

Para aspirar exitosamente a los beneficios de esta relación globalizada en el futuro, tanto Australia como México deberán gestionar cuidadosamente cualesquiera retos que pudieran descarrilar la estabilidad de estos nuevos arreglos. La creciente influencia del crimen organizado trasnacional en la región presenta una de las amenazas más urgentes a esta importante relación bilateral.

La actividad de los negocios ilícitos en la zona revela crecientes niveles de cooperación entre los grupos del crimen organizado de América Latina, Asia y Australia, especialmente en las áreas relacionadas a la producción y distribución de los narcóticos ilícitos tales como cocaína, heroína, metanfetamina y fentanyl (McCarthy-Jones, 2017). En octubre de 2017, la Policía Federal Australiana designó un oficial de enlace permanente en México para trabajar en colaboración con el Gobierno mexicano para atender la amenaza del crimen organizado trasnacional en la región. Esto demuestra un positivo primer paso que utiliza la relación bilateral como una potencial herramienta para la resolución de problemas, pero más necesita ser hecho. Finalmente, las políticas enfocadas en el fortalecimiento de la novel relación australiano-mexicana en el contexto del nuevo CPTPP necesitarán continuar para evaluar las implicaciones de estos aspectos “más oscuros” de la globalización para comprender totalmente la naturaleza exacta de esta importante, pero todavía compleja relación que se mueve hacia adelante.

* Traducción de Soren Héctor de Velasco Galván.

JESÚS 3 TERÁN

El futuro del TLCAN: La perspectiva de los socios

SOREN HÉCTOR DE VELASCO GALVÁN Maestro en Ciencias Económicas y Administrativas Universidad Tecnológica del Norte de Aguascalientes

Con motivo de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), el escribano entrevistó, mediante la formulación de tres de preguntas - ¿Cuál es el futuro del TLCAN? ¿Cuál es el estatus de la relación Canadá-EUA? Y ¿Cuál es el estatus de la relación EUA-México?- a dos prominentes ciudadanos de nuestros países socios: la ejecutiva Susan Ballew, ciudadana estadounidense, y el académico Barry Prentice, oriundo del Canadá, para conocer su visión sobre el porvenir del acuerdo comercial.

PERSONAJE

PAÍS

RESPUESTA

Susan Ballew,

EUA

1.- En mi opinión, las pláticas del TLCAN concluirán finalmente con un acuerdo modernizado en el cual los Estados Unidos, Canadá y México pueden lograr exitosamente una ganancia.

Sin lugar a duda, el futuro del sistema de comercio global, incluyendo al TLCAN, encara una mayor incertidumbre desde su creación después de la Segunda Guerra Mundial. En gran parte, esto se debe al surgimiento del proteccionismo y el nacionalismo, no sólo dentro de los Estados Unidos, pero también a una reacción anti-global en Occidente. Por ello, es importante no perder de vista el rol del TLCAN en fortalecer la prosperidad y estabilidad de nuestra región en los últimos 25 años, ni su rol futuro en vigorizar la competitividad de la América boreal. A través del realce y modernización de nuestro acuerdo trilateral de comercio podemos crear el bloque económico más fuerte en el mundo.

Ex presidenta del Consejo de Comercio Internacional del Gran Kansas City y de la Asociación de Ciudades Hermanas de Kansas City, Missouri.

2.- Las relaciones Canadá-EUA siempre han sido fuertes. Ahora tenemos una relación más forzada debido a la política comercial de “América Primero” de la actual administración estadounidense.

3.- México y los EUA tienen una relación fuerte, aunque difícil, debido a los asuntos relacionados con la inmigración ilegal y el tráfico de drogas. Sin duda, el presidente Trump ha forzado aún más la relación con su llamado para que México pague el nuevo muro fronterizo.

Como vecinos con una frontera e historia compartida, tenemos mucho en juego.

Barry Prentice

Profesor de la Cadena de Suministro, Escuela de Negocios I.H. Asper Universidad de Manitoba.

Canadá

1.- Un nuevo TLCAN debe emerger porque las economías de América del Norte se han integrado demasiado como para desengancharse. No exportamos e importamos automóviles estadounidenses, automóviles mexicanos o automóviles canadienses. Los países del TLCAN construyen los vehículos en conjunto. Los EUA excluyeron a Canadá y México de sus reciente aranceles al acero y el aluminio porque reconocieron el daño que causaría a su industria manufacturera. De manera similar, terminar con el TLCAN causaría un daño severo a la agricultura estadounidense y a muchas industrias sensibles. Como las cuerdas que atan al gigante en Los Viajes de Gulliver, las cadenas de suministro integradas limitan lo que cualquier país del TLCAN puede hacer unilateralmente.

2.- Si bien la política puede conducir a malas decisiones, al final las cabezas más frías prevalecerán. Los pueblos de Canadá y los EUA tiene un idioma, leyes y orígenes en común.

Nosotros admiramos y respetamos la cultura del otro y aceptamos nuestros fallos como miembros de cualquier familia.

3.- La relación entre Canadá y México es diferente pero se fortalece cada año. Ambos países se han unido al Acuerdo Transpacífico. Mientras que la mayoría de los mexicanos quizá conozcan a Canadá a través de las imágenes de televisión, muchos canadienses han disfrutado de un vacación en una playa mexicano o quisieran hacerlo. Esto puede distorsionar la visión canadiense de México, pero significa que tenemos un lugar en nuestro corazón para un país con una cultura única y un abrazo agradable.

Tabla elaborada por! el autor con información de los cuestionarios.

Imagen: El engranaje de América del Norte.

Fuente: http://mexicoxport.com/noticias/34667/ip-y-autoridades-del-bajio-sin-temor-al-tlcan-2-0

JESÚS 4 TERÁN

M é x i c o , e n t re la espada de

E UA

JEAN-JACQUES KOURLIANDSKY

Doctor en Historia.

Instituto de Relaciones Internacionales y Estratégicas (IRIS), París, Francia

Los mexicanos votan para escoger su futuro presidente el 1 de julio de 2018. Los distintos candidatos tienen que presentar un programa. Pero, a diferencia de las consultas anteriores, enfrentan un desafío inesperado: tienen que responder a las fuertes presiones y críticas multidimensionales dirigidas a México por Donald Trump, jefe de los Estados Unidos, desde enero de 2017.

La vecindad con la mayor potencia americana en el siglo XIX, hoy día todavía la mayor del mundo en lo militar, lo económico y lo cultural, planteó problemas difíciles a México, casi desde el primer día de su independencia1.

Después de perder una parte importante de su territorio, aguantar invasiones e injerencias, un modus cooperandi normalizó progresivamente la relación. Hasta llegar en 1994 a una forma de cooperación contractualizada en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte2.

México integraba el espacio productivo y de intercambios de América boreal. Estados Unidos respetaba el no alineamiento diplomático mexicano.

Este equilibrio está amenazado de caducidad. La línea diplomática del nuevo responsable norteamericano, “Primero América”, reabre el espacio de las agresiones en las relaciones bilaterales. México, entonces, se encuentra en una situación altamente incómoda, pues no se había preparado para la victoria de Donald Trump. Por lo tanto, México tuvo que improvisar entre la espada blandida por Donald Trump y la pared de una política alternativa inexistente.

LA ESPADA DE EUA, UNAS EXIGENCIAS BRUTALES El entonces secretario de Estado, Rex Tillerson, intentó diseñar, apoyándose en la Declaración hecha por James Monroe en 1823, un marco más o menos presentable y compatible para la relación entre su país con los otros Estados del continente americano. El 1 de febrero de 2018, en un discurso en la Universidad de Texas en Austin, el diplomático estadounidense definió un adversario común a todo el hemisferio, dos intrusos, China y Rusia y un país traidor, Venezuela. De esta manera, Tillerson intentó articular la preferencia nacional reivindicada por su jefe de Estado, dándole unos fundamentos compartidos, negados por un tuit presidencial poco tiempo después3.

Las exigencias del presidente de EUA cubren tres rubros: el primero, la firma del TLCAN fue un error. El pacto hizo perder miles de empleos y profundizó el desequilibrio comercial de EUA. Conclusión: renegociarlo lo antes posible; el segundo, EUA recibe miles de indocumentados que cruzan una frontera porosa. De esta manera, les quitan trabajo a los norteamericanos, y, por otra parte, pueden introducir enfermedades, criminalidad y terrorismo.

Conclusión: impermeabilizar la frontera con un muro pagado por el gobierno mexicano que exporta sus problemas a EUA. Paralelamente, EUA tiene que revisar las facilidades otorgadas, a los indocumentados por la administración anterior. Finalmente, Trump, retomando un discurso de los años 1990, considera

y e l mu ro d e Tr u m p que México, como Colombia y otros paises de América Latina, no enfrenta, como tendría que hacerlo, a los traficantes de droga, que exportan fundamentalmente la cocaína a los EUA. LA PARED MEXICANA, UN VACIO DE ALTERNATIVAS En mayo de 2016, La Secretaría de Relaciones exteriores (SRE) había preparado un Libro blanco relativo a las orientaciones de la diplomacia de México hacia el 2020. El documento intitulado “México Global”, en ningún momento planteaba este documento la eventualidad de un escenario de divorcio con el vecino del Norte. Apostaba a la perpetuación del ambiente comercial abierto y de una multilateralidad diplomática.

Las autoridades y los partidos politicos mexicanos pensaron que Donald Trump no podía ganar las elecciones y que había que guardar calma y no inmiscuirse en la campaña. En las ultimas semanas de la campaña, algunos colaboradores del presidente Enrique Pena Nieto empezaron a preocuparse. Por ello, improvisaron un encuentro insólito, el 31 de agosto de 2016, con el candidato republicano en Los Pinos. Apostando que este gesto, que indudablemente no podía sino ser interpretado como un apoyo a uno de los dos candidatos presidenciales, podría suavizar el discurso de Trump, quien lo interpretó como una muestra de la debilidad de las autoridades de México. Y entonces, el neoyorquino siguió en su línea brutalmente crítica.

Al triunfo de Trump, México intentó lo siguiente: negociar un contacto directo entre los jefes de Estado, acompañar las iniciativas diplomáticas contra Corea del Norte y Venezuela; mantener relaciones de confianza con los responsables de la política exterior de los EUA; y, finalmente, aceptar la agenda de EUA, y entrar en una renegociación del Tratado de Libre Comercio firmado en 1992.

Igualmente, tuvo que aguantar y denunciar las peticiones repetidas de financiar la construcción de un muro fronterizo. Y también organizar la acogida de los indocumentados expulsados.

BUSCANDO UN RUMBO ALTERNATIVO México debe desarrollar dos estrategias, cualesquiera que sea el candidato vencedor: dialogar sin límites con Washington, dejando la decisión eventual de romper a la parte norteamericana; Y la otra, de apertura comercial y diplomática al mundo, y de cooperación creciente con los vecinos del sur latinoamericano. Al final, Rex Tillerson entendió que la diplomacia guerrera de Donald Trump iba a acelerar lo que no consiguieron los gobiernos de izquierda nacionalista latinoamericanos: una articulación internacional de América Latina y de México progresivamente alejada de EUA. 1

El primer encuentro entre los presidentes Antonio López de Santa Anna y Andrew Jackson el 18 de enero de 1837 en Washington acto de hecho la pérdida del Estado de Texas.

2 Entre Canadá-Estados Unidos y México : TLCN (en español)/NAFTA (en inglés)/ALENA (en francés).

3 Rex Tillerson dejó oficialmente su cargo el 1 de marzo de 2018.

Crédito de imagen: Poster de reclutamiento para pagar por el muro fronterizo Fuente: https://medium.com/americanbridge/no-surprise-here-donald-trump-was-lying-about-the-border-wall-9bcf03f0299