Jesús Terán 69

JESÚS TERÁN

Editorial

Suplemento sobre Estudios Internacionales para La Jornada Aguascalientes Diciembre

2018

No. 69

Coordinadores: Aurora Terán Fuentes Soren Héctor de Velasco Galván

Andrés Manuel López Obrador y su esposa, Beatriz Gutiérrez Müeller, junto con el vicepresidente de los Estados Unidos, Mike Pence, su esposa, Karen, e Ivanka Trump Fuente: https://twitter.com/BeatrizGMuller

SOREN HÉCTOR DE VELASCO GALVÁN

Ciudad de México. 1 de diciembre de 2018. Desde la tribuna del Palacio Legislativo de San Lázaro, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se dirige a la nación. Su discurso, pausado y marcado por su característico acento sureño, parece avivarse cuando alza la vista para dirigir su mirada hacia la galería de invitados, en donde se encuentra la delegación estadounidense compuesta, entre otros, por el vicepresidente Mike Pence e Ivanka Trump.

El hombre nacido en Tepetitán, Tabasco comenta: “Desde el día de mi elección, he recibido un trato respetuoso del presidente Donald Trump, a quien agradezco que en plan de amistad haya enviado a esta ceremonia a su hija Ivanka”.

La escena arriba narrada sirve como introducción a la edición diciembre 2018 del Suplemento Jesús Terán, la cual está dedicada a analizar los retos de diversa índole que afronta el primer gobierno de izquierda que gobierna México desde 1934.

La perita en temas fiscales, Eréndira de Velasco Galván, enfoca su colaboración en detallar los retos económicos que afrontará el gobierno entrante. Por su parte, la experta en política de América Latina, Anthea McCarthy-Jones, dedica su participación a analizar el dilema que, en materia de seguridad interna, enfrenta el gobierno de Andrés Manuel López Obrador y cuáles son las ramificaciones para la región Asia-Pacífico. Finalmente, el especialista en el mundo anglófono, James Cohen, analiza la relación, personal e institucional, entre los mandatarios de México y los Estados Unidos, Andrés Manuel López Obrador y Donald Trump, respectivamente y cómo esta correspondencia ha logrado impulsar el Plan de Desarrollo Integral de Centroamérica.

Por último, Aurora Terán y el escribano agradecen a nuestra casa editorial, La Jornada Aguascalientes, creer en el Suplemento Jesús Terán y permitirnos su publicación.

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Retos Económicos del Gobierno de México: Pasado, Presente y Futuro del País

ERÉNDIRA DE VELASCO GALVÁN

El secretario de Hacienda, Carlos Urzúa Macías, el presidente de la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo, y el diputado Mario Delgado Carrillo, durante la entrega del paquete económico 2019 Fuente: https://twitter.com/Mx_Diputados

Contador Público

México, una patria llena de cultura, tradiciones, gastronomía y tesoros naturales, el país con más tratados de libre comercio y acuerdos de inversión firmados en todo el planeta, se ha convertido en la decimoquinta economía a nivel mundial. Además, es la segunda mayor en América Latina, pero paradójicamente es el país de los grandes contrastes: una corrupción endémica, uno de los lugares con mayor desigualdad social y económica, cuyo saldo es 65 millones de compatriotas viviendo en la pobreza o pobreza extrema.

En nuestros días, el país está alejado de la época de bonanza de la que alguna vez gozaron sus habitantes, durante el periodo denominado como “el milagro mexicano“, comprendido entre 1946 y 1970. Es decir, un modelo económico proteccionista que buscó un constante desarrollo, con una economía libre de inflación, déficits y devaluaciones. Todo ello para lograr estabilidad macroeconómica, que permitió el crecimiento de la clase media de un 12.5 por ciento en los años 40`s a un 30 por ciento en los años 60`s. Para posteriormente caer durante un amplio periodo en crisis económicas, pérdida del poder adquisitivo de los salarios y devaluaciones monetarias.

En la actualidad el gobierno de México se encuentra ante grandes desafíos que los nuevos tiempos van dictando, a los cuales se les debe prestar puntual atención, tales como: • Establecer la igualdad salarial entre hombres y mujeres que desempeñen un mismo trabajo y cuenten con similar preparación, ya que hoy en día un hombre gana 40 por ciento más que una mujer por el solo hecho de ser un hombre. Según cifras oficiales del INEGI en el país 3 de cada 10 hogares son mantenidos exclusivamente por una mujer, lo que ejemplifica la importancia de tomar medidas que eviten que se siga llevando a cabo dicha discriminación.

• Erradicar las prácticas para la subcontratación de trabajadores mediante mecanismos lesivos de outsourcing, honorarios y asimilados a salarios, o bien utilizar sindicatos o terceros para complementar el importe de los sueldos, que si bien están contemplados en la ley, impide a los trabajadores cotizar ante el IMSS e INFONAVIT, con los que pueden tener acceso a la seguridad social, vivienda e incapacidades, además del ahorro para el retiro a través de una AFORE, todas esas estrategias que han devenido en la precarización del mundo laboral, ante lo que cada año nuevos jóvenes profesionistas se van adhiriendo sin mejores expectativas para el largo plazo.

• Establecer mecanismos que inhiban que las empresas persistan en utilizar esquemas para la compra de facturas o planeaciones fiscales dolosas principalmente en el área de servicios, aunque gracias a los

cambios introducidos por la facturación versión 3.3 cada vez es más difícil llevar a cabo actividades de este tipo, derivado del cruce de información que realiza la autoridad fiscal.

• Coadyuvar en el desarrollo de todas las áreas productivas del país, ya que en la actualidad la zona económica que mayor crecimiento refleja es el Bajío, por encima de la media nacional.

• Para cumplir con los programas a los que se ha comprometido, dirigidos en su mayoría a los sectores de la sociedad más vulnerables se depende en buena medida de las contribuciones para que el estado obtenga recursos, en nuestro país como lo enuncia la Constitución en el artículo 31º Fracción IV “Son obligaciones de los mexicanos: Contribuir para los gastos públicos, así de la Federación, como de los Estados, de la Ciudad de México y del Municipio en que residan, de la manera proporcional y equitativa que dispongan las leyes”.

Como lo mencionó el Presidente de México Andrés Manuel López Obrador en sus conferencias matutinas durante su primera semana al ejercicio del cargo, se busca incentivar e invitar a las empresas y ciudadanos a que cumplan con sus contribuciones en el sector formal, para que se conviertan en la fuente de ingresos, lo que permita brindar a toda la población servicios médicos y educativos gratuitos universales, basados en el famoso y mundialmente reconocido estado de bienestar de los países nórdicos, los cuales cuentan con muy bajas tasas de corrupción y altos niveles de vida para todos sus ciudadanos, pero donde todos sin excepción contribuyen.

• Realizar reformas que permitan el verdadero cumplimento y ejercicio en la práctica de lo establecido en el Artículo 123º Fracción VI Segundo párrafo de la Constitución Política de México “Los salarios mínimos generales deberán ser suficientes para satisfacer las necesidades normales de un jefe de familia, en el orden material, social y cultural, y para proveer a la educación obligatoria de los hijos“, Sin duda una asignatura para contribuir para el bienestar de los individuos y en general de la sociedad, logrando que traduzca en paz social y sana convivencia ante los individuos.

Sin duda alguna los cambios y retos que la economía y el país requieren son grandes y diversos, pero hoy más nunca demandan de nuestro amplio compromiso, pero, sobretodo, de nuestra congruencia como individuos, ya que como la conocida frase menciona “No podemos dar lo que no tenemos, y no podemos recibir lo que no damos”

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El Dilema de Seguridad de López Obrador ANTHEA MCCARTHY-JONES Doctora en Política Latinoamericana Universidad de Nueva Gales del Sur, Australia

México está experimentando actualmente una explosión en la actividad del crimen organizado la cual ha conducido a un número record de secuestros y homicidios a lo largo del país en 2017 y 2018. La escalada en la violencia es el resultado de una restructuración sistemática de los grupos del crimen organizado (GCO) en México que ha estado en marcha durante la década pasada. El presidente Andrés Manuel López Obrador ha llegado al poder durante una época particularmente precaria en la historia de México. Su gobierno hereda un conjunto complejo de problemas de seguridad que todos sus antecesores han sido incapaces de resolver. Como resultado, las opciones de política pública deLópez Obrador respecto al crimen organizado y los asuntos de seguridad definirán, sin lugar a duda, su presidencia, como lo hicieran para aquellos que lo antecedieron.

Durante la pasada década, los GCO en México se han diversificado, lo cual significa que una mayor cantidad de grupos está compitiendo simultáneamente por el control y mando de áreas geográficas idénticas. El crimen organizado en México permanece fuertemente fragmentado, y esta fragmentación está impulsando la mayoría de la violencia en el país. En un intento por frenar la influencia de los GCO, la administración Peña Nieto optó por la implementación de una “estrategia principal responsable” –la captura o eliminación de los líderes de la droga en México. Se esperaba que desmantelando al liderazgo de los cárteles a lo largo del país sería la clave para debilitar significativamente la base de poder del crimen organizado en la región. Sin embargo, esta política sólo trabajó para crear una sucesión de violentas batallas dentro de los cárteles y activó un sistema de promoción poco convencional para los líderes emergentes.

A pesar de la fragmentación interna, los GCO mexicanos todavía han sido capaces de modificar exitosamente sus modelos de negocios para expandirse a la producción y distribución de metanfetaminas y fentanilo, enfocándose primariamente en el mercado estadounidense y en las economías emergentes en la región Asia-Pacífico. Este cambio ha sido logrado a través de la colaboración con los GCO que operan en el litoral del Pacífico, particularmente aquellos ubicados en la China continental. La explotación de los recursos marítimos se ha convertido en una parte integral de los proyectos de cooperación de los GCO chinos y mexicanos haciendo que la infiltración y el control de los puertos marítimos sea esencial para la supervivencia de la red ilícita. Por ejemplo, el rápido ascenso del Cartel Jalisco Nueva Generación se ha logrado debido

a su política de explotar sistemáticamente su ubicación geográfica en la costa del Pacífico mexicano. Esto ha permitido que el grupo se posesione, junto con el Cartel de Sinaloa, como la opción preferida para colaborar de las GCO chinos.

La proximidad del Cartel Jalisco Nueva Generación al puerto de Lázaro Cárdenas, Michoacán le ha permitido conseguir un grado significativo de control sobre las importantes rutas marítimas con los mercados de Asia-Pacífico.

Sin embargo, esas interacciones no están limitadas al simple intercambio de precursores químicos y productos finales a través de las vastas distancias geográficas.

Reforzando todavía más la relación simbiótica entre los GCO chinos y mexicanos están las inmensas oportunidades en China para lavar fácilmente inmensas sumas de dinero. Ha emergido evidencia del uso que el Cartel de Sinaloa hace de los bancos y empresas fantasmas de Hong Kong para lavar sus ganancias ilícitas así como también los arreglos recíprocos donde las tríadas de Hong Kong abastecen a los GCO mexicanos con efedrina y pseudoefedrina a cambio del suministro de cocaína a Hong Kong y a la China continental.

Recientemente, la Comisión de Inteligencia Criminal de Australia (ACIC, por sus siglas en inglés) concluyó que los cárteles mexicanos están fuertemente implicados en el abastecimiento de metanfetamina y cocaína a los mercados asiáticos y australianos. Los altos precios pagados por los narcóticos ilícitos en países tales Australia y China –que pueden ser diez veces más altos de lo pagado en el mercado estadounidenseactúan como una atracción gravitatoria para los grupos criminales latinoamericanos expandan sus actividades en Asia-Pacífico. Esas alianzas ilícitas demuestran el alcance trasnacional de los GCO mexicanos y resaltan que los problemas de seguridad interna de México tienen ramificaciones externas significativas para países y regiones fuera de las Américas.

La respuesta de López Obrador a estos asuntos debe ser encontrada en el uso e implementación efectiva de la inteligencia. Para evitar las trampas de las políticas previas que favorecían el enfoque de la “mano dura”, el presidente López Obrador necesitará balancear su agenda de seguridad con un mayor énfasis en las soluciones no cinéticas que fomentan las capacidades de recolección de inteligencia que permiten que los recursos sean enfocados a las actividades de compartir inteligencia con otras naciones, con particular atención a las grandes economías de Asia-Pacífico. Las respuestas de política multilateral proveerán al nuevo presidente con una plataforma más fuerte para enfrentar la actual crisis de seguridad en México. Sin embargo, cuando la presión sea aplicada –y lo será- el presidente López Obrador debe resistir la tentación de regresar a la viejas política –“la mano dura”- que sólo parece reforzar la intratabilidad de los actuales problemas de seguridad de México.

Crédito de imagen: Miembros de la Marina de Guerra mexicana desfilando el 16 de septiembre de 2018 Fuente: https://www.lanetanoticias.com/que-onda-con/20252/comision-ejecutiva-de-atencion-a-victimas-propuso-repara-danos-a-las-fuerzas-armadas

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López Obrador, Trump y el

“Plan Marshall” por el Sur El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, y una traductora durante la conversación telefónica con el mandatario estadounidense, Donald Trump.

Fuente: https://twitter.com/lopezobrador_?ref_src=twsrc%5Egoog-

JAMES COHEN

Doctor en Ciencias Políticas Universidad Sorbonne Nouvelle (París 3), Francia

Cuando, poco después de la elección de Andrés Manuel López Obrador, salió la noticia de la llamada telefónica “muy cordial” con Donald Trump, muchos observadores pensaron que el presidente electo hacía lo necesario diplomáticamente para protegerse y proteger a México contra el comportamiento imprevisible del mandatario estadunidense, quien había iniciado su campaña electoral en 2015 con una denuncia de México y los mexicanos.

Las relaciones aparentemente cordiales entre los dos hombres no eran únicamente cuestión de diplomacia o de personalidades porque sobre un punto muy importante había convergencia objetiva entre los dos: si para Trump los mexicanos y otros migrantes del Sur no son bienvenidos en los Estados Unidos, para López Obrador la migración, en primer lugar, no es un fenómeno deseable, sobre todo cuando se hace por necesidad económica. Por supuesto, las dos perspectivas son totalmente divergentes: Trump rechaza los migrantes por exclusión y racismo mientras que López Obrador busca resolver el problema de la migración por la inclusión social de los trabajadores en sus países de origen para que no tengan que migrar.

Las buenas relaciones entre los dos presidentes siguen, pero las diferencias de enfoque con relación a la cuestión migratoria son cada vez más evidentes. López Obrador siempre ha dicho que rechaza el tratamiento militarizado de las migraciones y que el desarrollo es la mejor manera de resolver el problema, atacándolo desde sus raíces. Estos temas fueron evocados varias veces durante el largo período de transición pero ahora se concretizan: el 17 de diciembre de 2018 se hizo público la intención del gobierno de fomentar un “Plan Marshall” de 30 mil millones de dólares en el sur de México y los países de América Central. La estrategia – o la intención – consiste en invertir capital suficiente para crear empleos en estas regiones y así permitir a las poblaciones quedarse en su país.

No quedó muy claro por qué los organizadores de la gran caravana de migrantes hondureños decidieron, en octubre, salir de su país para llegar, en noviembre, a Tijuana, justo al momento de las elecciones intermedias en Estados Unidos y pocos días antes de la toma de protesta del nuevo presidente mexicano. Era bastante obvio que los migrantes no iban a poder entrar al territorio de Estados Unidos y que Trump iba a poner en escena una “amenaza a la seguridad nacional”. En violación del derecho internacional y de las propias leyes federales estadunidenses, la administración Trump prohíbe a los migrantes recientes entrar en el territorio para solicitar asilo.

La experiencia fue bastante desagradable para el presidente mexicano entrante, pero al menos tuvo la ventaja de revelar una contradicción social enorme, una herida abierta, en las Américas.

La actitud del nuevo gobierno frente a estos hechos ha sido discreta pero no pasiva. Promoviendo su “Plan Marshall” e invitando a los Estados Unidos a participar, López Obrador y su secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, colocan a la administración Trump frente a sus contradicciones.

Según informaciones recientes, la participación estadunidense, que al principio parecía muy improbable, ya no lo es tanto.1 Pero, ¿con cuánto dinero y bajo cuáles condiciones? El término “desarrollo” tiene para López Obrador un significado que es ausente de la lógica neoliberal imperante; Trump no va a convertirse en agente del “desarrollo”. Pero, por razones más pragmáticas, no es imposible imaginar una forma de participación de la Unión American en este plan con el objetivo, en efecto, de disminuir los flujos migratorios, y también de cerrar el paso a la influencia china que no ha parado de crecer en América Latina y ahora también en Centroamérica.

1

“¿Lograron AMLO y Ebrard sacarle a Trump un “Plan Marshall” para rescatar el sur?”, Sin Embargo, diciembre 17, 2018; Azam Ahmed y Elisabeth Malkin, “Mexico’s Strategy for Dealing with Trump: Warn Him About China”, New York Times, diciembre 17, 2018.