NATURALEZA La Jornada Aguascalientes / Aguascalientes, México. SEPTIEMBRE 2016 / Año 7 No. 124
El eterno entorno entre lo natural y lo artificial dos tipos de animales, los domésticos y los salvajes, los primeros eran mansos y susceptibles de domesticación. El filósofo griego también distinguió entre la crianza de animales y la crianza de seres humanos. Luego, a través de Nietzsche podemos hacer una lectura de Platón que sugiere la posibilidad de la domesticación de los seres humanos. El Zaratustra de Nietzsche se refiere al ser humano como criador de otros seres humanos, a través de la crianza el humano se aleja de la bestia, pero advierte, esta acción también lo vuelve más pequeño. “Celosamente y a gritos conducían su rebaño por su vereda: ¡como si hacia el futuro no hubiera más que una sola vereda! ¡En verdad, también estos pastores continuaban formando parte de las ovejas!”2 –Así habló Zaratustra–. El discurso de Nietzsche es un llamado a la emancipación, pues el ser humano se encuentra varado entre la bestia y el súper hombre; porque la moral, la crianza, le ha inhibido su propia superación. Para Sloterdijk este amansamiento de la humanidad es un ejercicio de poder que se ha justificado en el alejamiento de la barbarie, una manipulación que requiere un cambio estructural. “Los humanizados no son en principio más que la secta
de los alfabetizados, y al igual que en muchas otras sectas, también en esta se ponen de manifiesto proyectos expansionistas y universalistas.”3 De acuerdo con Nietzsche, Sloterdijk también responsabiliza al humanismo de tales acontecimientos y para resolverlos plantea la necesidad de superar el dualismo entre lo natural y lo artificial, casi imperceptible en nuestros días. ¿Pero qué le queda de natural a nuestro entorno? Si la domesticación de plantas para el cultivo y la crianza de animales se han ampliado a lo largo de la historia hasta nuestros días de manera radical. Si la intervención de los seres humanos alcanzó niveles divinos con la manipulación genética de flora y fauna, y estratosféricos al buscar generar vida fuera de nuestro planeta. Incluso la domesticación de plantas y animales ha adquirido una tarea compensatoria al tratar de salvaguardar a la misma naturaleza conservando especies, reforestando y recuperando especies extintas de manera artificial. Si el origen de la humanidad está en la domesticación, podemos sostener con Nietzsche el fracaso de su animalidad pero no la extinción de su voluntad. El ser humano es el acontecimiento fronterizo entre lo natural y lo artificial que desdibuja la dicotomía con su forma de habitar el mundo. Nietzsche y Sloterdijk ponen sobre la mesa la disputa entre los criadores del ser humano en dirección a lo pequeño y los criadores hacia lo grande. Éste es el entorno en el que habrán de llevarse a cabo las determinaciones del futuro de la especie humana. Dicho sea de paso, las determinaciones de crianza a partir del cuidado y no de la violencia.
2 Nietzsche, Friedrich, Así habló Zaratustra, Editorial Tomo,
3 Sloterdijk, Peter, Normas para el parque humano, Siruela,
Lucía Carolina Muñiz Leal
E
l calendario cósmico es la historia del universo resumida en un año. De acuerdo a esta escala, el Big Bang se sitúa en el segundo primero del día uno del mes de enero mientras que el planeta Tierra apareció hacia el mes septiembre. Así, cada segundo equivale a unos 500 años de nuestra historia, según la narración de Carl Sagan, la especie humana apareció a las 22:30 horas del 31 de diciembre del calendario cósmico y a las 23:46 horas los seres humanos dominaron el fuego. Toda nuestra historia, la memoria registrada por la humanidad, se resume en los últimos diez segundos de dicho calendario. Pero son las 23:59:20 horas, el instante que nos ocupa, cuando comenzó la domesticación de plantas y animales.1 El entorno es el espacio y tiempo en el que hemos surgido, la humanidad surgió a las 22:30 horas del último día del calendario cósmico. Pero, casi una hora y media después, es decir, poco menos de 30 millones de años después a las 23 horas con 59 minutos y 20 segundos el entorno natural comenzó a ser intervenido por la humanidad a partir de la domesticación. Este momento es clave para entender la transformación del entorno humano por su propia mano. La domesticación de plantas y animales generó un entorno artificial en el sentido etimológico de la palabra, arte y facere. Es así como el ser humano añade su propia obra a la naturaleza. El binomio natural-artificial es una pareja de contrarios, un par excluyente entre sí; sea este el caso, si entendemos por natural y naturaleza todo aquello libre de la intervención humana y, por el contrario, artificial como parte de la cultura, comprende todo aquello creado por los seres humanos. Para el filósofo alemán Peter Sloterdijk, la humanidad es incapaz de quedar confinada al territorio de la animalidad, pues se yergue sobre sus dos pies como la única especie capaz de transformar la naturaleza, a tal grado que el producto no pueda ser reintegrado a la misma. El autor, en su controversial obra Normas para el parque humano, acusa al humanismo de ser una manera de domesticar. Es así que la sociedad humanizada resulta una sociedad domesticada. Mucho antes que Sloterdijk otros autores reflexionaron sobre la domesticación. Platón distinguió 1 Carl, Cosmos: un viaje personal, capítulo 1 “En la orilla del océano cósmico”, 1980.
México, p. 27
p. 31.
Kimm, Calamar gigante.
En el principio fue el caos…
CONTENIDO: El eterno entorno entre lo natural y lo artificial. LUCÍA CAROLINA MUÑIZ LEAL Bitácora del Capitán. Historia inspirada en la obra Criaturas Abisales de Kimm. SUZETTE HERRERA ORONA Naturaleza, existencia y muerte: los latidos de la vida en los antiguas nahuas. WALKIRIA TORRES SOTO Lodo. JANETH MARTÍNEZ SALAZAR Una naturaleza insólita: las criaturas abisales y los seres humanos. ENRIQUE LUJÁN SALAZAR
• PÉNDULO21 / 1 / SEPTIEMBRE2016 •