DIARIO 2 53
Diario de Navarra Martes, 14 de enero de 2014
Arqueología
teléfono para las visitas
LaAsociaciónde Periodistaspremia aPedroMecaporsu trabajoconlospobres
848 42 15 26 A partir de febrero Son visitas guiadas programadas en grupo.
El dominico navarro trabaja en París desde 1969 para mejorar la vida de los sin techo de la capital francesa Efe. Pamplona
“Se han hecho muchas intervenciones en iglesias y en ocasiones ha desaparecido totalmente la memoria de que esas piezas estaban ahí”, añadía Sesma mostrando un esmalte de Francia que representa a Cristo. Pertenecía a un evangeliario de la primitiva iglesia de Artajona había un evangeliario y estaba decorado con esmaltes de Francia. “En un momento dado se perdió y en las excavaciones se recuperó”. Una pieza muy singular, por lo poco común, es la funda de cuero de una espada que procede de la plaza del Castillo de Pamplona. “Normalmente ni el cuero ni la madera se conservan a lo largo de los siglos, salvo que estén en un medio donde no haya oxígeno y no puedan proliferar los microorganismos. Esto se produce si está en agua o barro muy húmedo. Y es lo que ocurrió en la plaza del Castillo”. De los siglos XVII y XVIII, piezas de madera: cucharas, parte de los encajes de bolillo, peines, ruecas, husos, mango de una aguja para hacer calceta..., de la avenida de Roncesvalles de Pamplona. Y pipas de fumar. “Entonces se pensaba que el tabaco era bueno para todo: para los dolores de cabeza, reumatismo... para un montón de males. Estaba muy extendido”. El recorrido finaliza con restos de armamento, de la fábrica de Orbaiceta, que, junto con otra de Cantabria, abasteció prácticamente a la península durante un siglo.
Yolanda Barcina, con una cerámica de la Edad del Hierro, escuchando a Jesús Sesma.
Mosaico de las termas de la calle Curia de Pamplona de la época romana (siglos I-V).
J.C.CORDOVILLA
J.C.CORDOVILLA
El padre dominico Pedro Meca Zuazu, conocido como el “capellán de los vagabundos de París”, ha sido galardonado con el Premio Periodistas de Navarra, con el que se pretende reconocer su labor en La Moquette, un centro que ofrece a las personas sin techo un clima de acogida y escucha. La Asociación de Periodistas de Navarra entregará este Premio en la tarde del próximo viernes 24 de enero en la sociedad gastronómica Napardi, en Pamplona, con motivo de la celebración de San Francisco de Sales, patrón de los periodistas. Según ha informado esta asociación, el dominico Pedro Meca está considerado como un “embajador de la Comunidad Foral de Navarra” que promueve una imagen positiva de esta comunidad y que en París, lugar donde ejerce su labor solidaria, es llamado “Pedro de Navarra”. El religioso nació en Villava en 1935, aunque a los 17 años
marchó a París en busca de su madre, lugar donde fundó La Moquette, sede de la Association les Compagnons de la Nuit (Compañeros de la noche), además de participar en algunos proyectos con el conocido “abbé Pierre”, creador de los “Traperos de Emaús”. La Asociación de Periodistas de Navarra califica su trayectoria de “iconoclasta”, comentando sus facetas de “contrabandista, sacerdote dominico, activista político, la lucha contra el régimen de Franco, educador y escritor”. Con los Compañeros de la Noche, una organización compuesta por trabajadores sociales y voluntarios, el religioso creó La Moquette, un lugar desde donde tratan de “romper el aislamiento” de los desfavorecidos, con o sin hogar. Desde La Moquette organizan encuentros nocturnos, espacios de intercambio y creación, conferencias y debates o actividades culturales. Este local no es “un refugio”, pues no ofrece ni lugar para dormir ni ayudas sociales del tipo dinero, ropa o alimento, sino que se centra en las necesidades relacionales, y trata de acoger tanto a los sin techo como a los transeúntes, estudiantes o periodistas.
Guerrero de Beire de la Edad del Hierro. J.C.CORDOVILLA
Pedro Meca, el pasado mes de octubre en Pamplona.
CORDOVILLA/ARCHIVO
“Nadie está condenado a ser lo que es en un momento dado” Pedro Meca estuvo el pasado mes de octubre en Pamplona, donde ofreció una conferencia titulada Cambiar la mirada en la que pedía un replanteamiento a la hora de ver a las personas con necesidades. “Nos quedamos en las carencias, en los problemas, y nunca vemos las potencialidades, sus cualidades. Debemos ver personas, no necesidades o huecos que rellenar”, aseguraba Meca. No se trata, en su opinión, de un problema de recursos, sino de enfoque: “El primer recurso es la propia persona, y eso se suele olvidar. Vivimos en una sociedad que mira sólo a lo inmediato”. El dominico navarro recordaba que cuando empezó a trabajar con la gente de la calle “no había ni un solo trabajador social por las noches”. Ahora, oficialmente jubilado, ya no trabaja por las noches, aunque sigue en la calle, auxiliando a los vagabundos: “Les ayudo, por ejemplo, a buscar un trabajo por horas”, señalaba el pasado otoño.