2 minute read
Resérvaloen www.jolube.es
Mitratae (3) C. basilaris, C. caryophyllea, C. depressa
Clado Conica (1) C umbrosa
Advertisement
Rhomboidales (1) C. brevicollis
Chlorostachyae (1) C. capillaris
Clandestinae (1) C. humilis
Hallerianae (2) C. halleriana, C. rorulenta
Acrocystis (2) C. montana, C. pilulifera
Clado Carex (6)
Phacocystis (7)
C. hirta, C. lasiocarpa, C. pseudocyperus, C. riparia, C. rostrata, C. vesicaria
C. acuta, C. cespitosa, C. elata, C. nigra, C. quixotiana, C. reuteriana, C. trinervis
Carex (77)
Limosae (1) C. limosa
Hispanicae (1) C. durieui
Clado Tomentosa (1) C. tomentosa
Paniceae (3) C. bicolor, C. olbiensis, C. panicea
Clado Flacca (8) C. asturica, C. austroalpina, C. brachystachys, C. caudata, C. depauperata, C. flaca, C. grioletii, C. hispida
Racemosae (2) C. atrata, C. parviflora
Frigidae (1) C. frigida
Rhynchocystis (3) C. leviosa, C. pendula, C. sequeirae
Ceratocystis (6)
C. demissa, C. flava, C. hostiana, C. lepidocarpa, C. nevadensis, C. oederi
Strigosae (1) C. strigosa
Sylvaticae (3) C. paui, C. sylvatica, C. vulcani
Ammoglochin (4) C. arenaria, C. brizoides, C. pseudobrizoides, C. praecox
Remotae (1) C remota
Clado Annectens (1) C diandra
Physoglochin (1) C. davalliana
Holarrhenae (1) C. disticha
Cyperoideae (2) C. bohemica, C. leporina
Spirostachyae (13) C. binervis, C. camposii, C. distans, C. extensa, C. helodes, C. hochstetteriana, C. laevicaulis, C. laevigata, C. lainzii, C. lowei, C. mairei, C. perraudieriana, C. punctata
Clado Castanea (1) C. debilis
Clado Mollicula (1) C. pallescens
Paludosae (1) C. acutiformis
Encuadramiento taxonómico de las especies de Carex presentes en el territorio. Entre paréntesis se indica el número de especies.
Características morfológicas.
Todas las especies de Carex son plantas perennes, aunque en ocasiones, como el caso de C. oederi, de vida corta. En función de la longitud de los entrenudos del rizoma (véase Introducción general), el hábito puede ser densamente cespitoso (entrenudos muy cortos), a veces formando incluso voluminosas macollas, como en C. paniculata y ciertas especies de la sección Phacocystis (C. reuteriana y C. acuta, por ejemplo). Sin embargo, otras especies (vg. C. arenaria y C. divisa) exhiben tallos aéreos muy espaciados unos de otros, debido a que los entrenudos del rizoma son muy largos. Los tallos fértiles son trígonos (más raramente cilíndricos o casi) y, en las especies ibéricas, oscilan entre los 2 cm de altura en ciertos ejemplares alpinos de C. capillaris y los más de dos metros de algunos individuos robustos de C. pendula y C. leviosa. La forma y consistencia de las hojas se ajustan a lo descrito para el conjunto de la familia.
Las flores son siempre unisexuales y aclamídeas (sin perianto), las masculinas reducidas a tres estambres dispuestos en la axila de una gluma y las femeninas a un ovario sincárpico bi o tricarpelar (excepcionalmente con 4 carpelos en algunas especies no presentes en el territorio). La forma, color, ápice y número de nervios de las glumas proporcionan interesantes caracteres taxonómicos.
La unidad básica de la inflorescencia es la espiguilla, cuyo conjunto forma 1-numerosas espigas, agrupadas a su vez en espigas, racimos o panículas. Las espigas pueden ser masculinas, femeninas, andróginas (con flores masculinas en la parte superior de la espiga y femeninas en la inferior) o ginecandras (flores femeninas en la parte apical y masculinas en la basal). En raras ocasiones pueden observarse espigas con flores masculinas en la zona apical, femeninas en la media y masculinas en la basal (androginecandras) o con flores femeninas en el ápice, masculinas en la parte media y femeninas en la base (ginandróginas); mucho más raramente, ciertas especies presentan una distribución irregular del sexo de las flores en las espigas (vg. C. bequaertii, ausente del territorio cubierto por esta guía).