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2.1. LÍMITES

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1. PTERIDÓFITOS

1. PTERIDÓFITOS

7.1. Primeras citas ............................................................................................................... 183

7.2. Plantas descritas como nuevas a partir de recolecciones en las sierras de Gúdar

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y Javalambre (especies y subespecies)..................................................................... 183

8. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS .......................................................................... 187

9. ÍNDICE DE ESPECIES ........................................................................................... 193

A al venta en la librería Montiberica www.floramontiberica.org

1. INTRODUCCIÓN

Han pasado cincuenta años desde que salía a la luz el trabajo titulado “Estudio sobre la vegetación y flórula del macizo de Gúdar y Javalambre”, como volumen monográfico de los Anales del Instituto Botánico A.J. Cavanilles, tras más de una década de estudios florísticos y fitosociológicos liderados por Salvador Rivas Goday, con el apoyo continuado de José Borja y la colaboración más esporádica de otros botánicos de la época como Monasterio, Mansanet, etc.

En estos cincuenta años han tenido lugar más avances en el conocimiento de la flora ibérica que en todos los anteriores desde el inicio de la Botánica moderna, tras la publicación de la obra de C. von Linné en el siglo XVIII. En los casi doscientos años desde la edición del Species Plantarum de Linné hasta 1951 la mayoría de los países europeos habían prospectado minuciosamente su territorio y publicado numerosas ediciones de sus floras nacionales, regionales y locales. Por el contrario en España sólo se había editado un avance de flora española –por parte de M. Willkomm y J. Lange− en la segunda mitad del siglo XIX y unas pocas floras regionales o locales de cierto rigor y extensión (Cataluña, Galicia, Baleares, etc.). En la provincia de Teruel destaca la labor del equipo formado por Francisco Loscos y José Pardo en la Tierra Baja del noreste y la de Carlos Pau en las sierras del sur: Albarracín, El Toro y Javalambre. Ninguno de ellos abordó la publicación conjunta de los datos disponibles sobre todo o parte del territorio objeto de este trabajo, con lo que cuando salió publicada la obra de Rivas Goday y Borja se trataba de la primera aproximación a una síntesis sobre la flora de la zona y traía consigo el aporte de numerosas novedades no mencionadas por sus predecesores. El principal problema al que se enfrentaron los autores de ese trabajo era la muy limitada bibliografía disponible, en lo que se refiere a obras de síntesis o claves de determinación útiles en esta zona, por lo que el trabajo tuvo que basarse sobre todo en el apoyo de los dos herbarios básicos de España en la época: MA (Real Jardín Botánico de Madrid) y MAF (Facultad de Farmacia, Universidad Complutense), amén del mencionado Prodromus de Willkomm y Lange, los artículos de Loscos y Pau, así como las floras francesas y portuguesas de la época. Otro problema añadido, que realza el valor del trabajo, era la escasez y precariedad de las vías de comunicación y medios de locomoción en aquellos años, lo que dificultaba notablemente la prospección. El asunto es que años después comienza la publicación de la influyente Flora Europaea, que va a iniciar cambios importantes en los estudios de flora española, al disponer de una síntesis accesible y actualizada. Apoyada en ella surgen en los ochenta los proyectos de las primeras floras modernas en nuestro país, como la Flora dels Països Catalans o la Flora de Andalucía Occidental, y −sobre todo− el proyecto nuclear: Flora iberica. Sobre estos apoyos pudimos abordar a finales de los ochenta la elaboración del catálogo sintético de la flora de la provincia de Teruel. A finales de los noventa ampliarlo en el nuevo catálogo provincial que muestra la tesis doctoral de Silvia López Udias y durante los primeros años del presente siglo con las dos ediciones de la flora de la Sierra de Albarracín, cuya continuidad natural era abordar las de Gúdar y Javalambre, para lo que quisimos aprovechar la situación inmejorable que ofrecía el A al venta en la librería Montiberica www.floramontiberica.org cincuentenario de la obra que con ésta queremos homenajear.

2. EL MEDIO FÍSICO

2.1. LÍMITES

El territorio seleccionado comprende un macizo principal con una gran superficie de terrenos por encima de los 1500 m, de contorno redondeado, en el interior del polígono que delimita aproximadamente la línea que une los núcleos urbanos de Allepuz, Villarluengo, Iglesuela del Cid, Puertomingalvo, Nogueruelas y Cedrillas. Corresponde a lo que habitualmente se conoce como Sierra de Gúdar, aunque exceda los límites de lo que por tal se entiende a nivel administrativo.

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