Pase Entre Lineas - Edición Noviembre 2019

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Año 20 // Edición Noviembre 2019

PASE ENTRE LINEAS

2019: JUGAMOS TODOS

EL DIAMANTE EDIL

PASIÓN FEMENINA

El ARTE DE LA PACIENCIA

Adrian Zela y su historia de exito con las gemas y el futbol

Cindy Novoa y el nacimiento de las nuevas promesas del futbol femenino en la selección peruana

La campeona de frontenis en los Juegos Panamericanos Lima 2019 cuenta sus virtudes



edi t or ia l En el 2019, fuimos observadores y participantes del mundo deportivo con diversos eventos que opacaron varias semanas del presente año. No solo vestimos la querida franja roja en los partidos amistosos y haber conseguido el subcampeonato en la Copa América 2019 con la selección peruana, sino más bien alentamos con fevor en los Juegos Panamericanos Lima 2019, donde conseguimos alrededor de 39 medallas. Asimismo, nos alejamos un poco más de lo que era realmente los deportes insignias que protagonizaban los eventos más grandes en cada rincón de nuestro país como el futbol, voley o el basketball, pues con los hitos conseguidos en las diferentes disciplinas realizadas. En esta nueva edición de Pase Entre Lineas, dejamos de lado los clasicos articulos informativos y traemos historias de personajes del mundo deportivo de nuestro país, quienes pasaron por varios tropiezos y lamentos en el camino para llegar al éxito destacando ciertas caracteristicas y habilidades en los protagonistas de esta revista. Pase Entre Lineas.

equ i p o Editor General: Ricardo Montoya Editor Gráfico: Jose Manuel Figueroa Editor Fotográfico: Arturo Grados Editor Multimedia: Jesus Orna Producción: Roberto Paolo Mamani

Pase Entre Lineas

Redactores: Jose Manuel Figueroa Arturo Grados Roberto Paolo Mamani Jesus Orna

@PELPER1

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CONTENIDO

INDICE

El Diamante Edil 04-07 Pasión femenina 08-10 El arte de la paciencia

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La Reina del Ring

14-16


Futbol

Cinco minutos.Adrían solo jugó poco tiempo con Perú ante Nueva Zelanda.

el diamante edil


“De pequeño veía algunas piedritas brillantes de colores que me fascinaban. Escuchaba los negocios, eso me iba atrayendo. Pero en un principio pudo más el fútbol. O soy futbolista o soy gemólogo” – dijo “El Leñador”, quien por su altura y seriedad sostenía una mirada dura y, a la vez, de reflexión. Escribe: José Figueroa / Fotos: Andina.pe

E

ra una noche fría y muy agitada en la ciudad de Lima. Las personas circulaban por ambos sentidos de la acera por la Avenida 28 de Julio. Turistas y peruanos por doquier temblando por el aire que recorre por la piel de gallina de muchos en búsqueda de un lugar cálido y entretenido para charlar o ir a relajarse viendo el cielo limeño por Larcomar con una gran vista. Pero él se sentiría muy cómodo en su oficina amplia blanca con filas inmensas de papeles, un teléfono alámbrico sonando a cada minuto y personas con elegantes sacos y prendas de altas costuras dentro de Diamante Perú: una de las joyerías más reconocidas de la capital, una empresa familiar de varios años en vender y poseer grandes marcas de radiantes diamantes brillantes como tesoros antiguos que son exportadas a diferentes partes del mundo gracias a la familia Zela Terry. Al momento de cruzar la puerta de ingreso, él terminaba de coordinar algunos envíos al sur de nuestro país en paquetes grandes envolviendo, puliendo y guardando unos collares deslumbrantes de 15 quilates. El “Leñador” de alta talla, tez blanca, ojos marrones, con una barba recién rasurada portaba un estilo elegante de todo señor empresario eficaz y solvente, quien estaba cerrando y verificando que toda la joyería esté segura y sin ningún problema. Como dicen muchos, el fútbol es un deporte que ha llegado a ser tirano, pues un día estás en la cima de la gloria máxima siendo portada en toda revista limeña, pero todo puede desaparecer en un chasquido de dedos como una gema rota tras impactar al suelo. Ha pasado casi más de un año desde que Adrián Zela Terry, un treintañero de alta estatura y gran biotipo técnico de juego, pues es sumamente conocido por ser considerado uno de los defensas más destacados de nuestro país en los últimos veinte años. Desde muy pequeño anhelo por ser un atleta, debido a que paraba constantemente viendo por la televisión las grandes escenas del actor Sylvester Stallone con las magníficas entregas de la saga de “Rocky”, quien era su modelo a seguir. Asimismo, dentro de las habitaciones de su hogar del distrito de Surco, practicaba y se la pasaba viendo partidos de fútbol, donde su ídolo máximo era el italiano Baresi alzando en España la Copa del Mundo o un Laurent Blanc siendo un jugador emblema de París y qué decir de aquel joven “grone” que fue vital en la zaga del equipo blanquiazul por varias temporadas como Juan Máximo Reynoso. Con ello, Adrían comenzaría su trayecto deportivo en los campos de grass, copas y amistosos en el colegio Carmelitas, su alma mater, ubicado en el distrito de Miraflores, donde hasta la actualidad reside en su casa cerca a Larcomar. Señala que se quedaba un par de horas extras para entrenar con sus amigos del colegio con miras de ser los mejores en ADECORE (Asociación de Colegios Religiosos) Queda marcada esa frase típica de que el mundo era redondo, pero ese mundo era una batalla de once gladiadores

Soldado Edil. Zela se incorporó al Deportivo Municipal en el 2014 .

contra once contrincantes por la gloria y el triunfo en el balompié. De uno de los cajones de aquel escritorio alejado a pocos metros de su oficina, sacó una foto de un grupo de jóvenes campeones de Sportivo Circolo Italiano en el año 2004, cuando Adrián tenía quince años en la categoría de menores donde conoció lo que realmente era jugar en un club de élite peruano y a varios compañeros fieles al fútbol peruano. Entró una llamada en su oficina, se paró para contestar y era el “Colorado”, quien le decía en qué momento iba a estar libre de oficio y de labores para ir a jugar un poco de frontón en aquel club de Chorrillos con “Kevin” y “Lucho”. A Óscar lo conoció en las canchas del cuadro italiano, donde se hizo de una gran amistad entre camerinos y algarabías entre ambos y sus compañeros. Su amistad fue tan grande que el destino los ha juntado de manera efímera en varias oportunidades, estando así en contacto uno con el otro. Ya han pasado más de diez años donde el “Leñador” y Vega se conocen, tienen varias anécdotas y se juntan a ver y a disfrutar del deporte “Si tengo que jugar con alguien atrás, que me grite o me avise a quien tengo a mi lado ese es Adrían, de todas formas” – señala Vega con un tono burlesco provocando risas a Adrián. Cada jugador tiene un equipo a quien alentar cada domingo en el estadio, ver cuántos puntos le restan para salir campeón o poder aspirar a un campeonato internacional. En su oficina, sacó un calendario impreso que contiene todos los partidos jugados con su equipo de primera división del fútbol. De igual forma, señalaba que siempre apuntaba todo los resultados cuando veía jugar al


circunstancias apuntaron hacia mí. – señala Zela. Se le acabaron las chances, su mundo estaba derrumbado por varias voces que lo mandaron a un lugar oscuro de depresión y de vació en el deporte que amaba desde pequeño. Ante este gran declive emocional y futbolístico, Adrián se juntaría con sus mejores socios empresarios que llegó a tener en toda su vida: su padre, abuelo y hermanos. La presión y las críticas hicieron que Adrian tomara una decisión radical: dejar la pelota por los diamantes. Dejar de ver el mundo redondo con miras a un arco a cuidar un conjunto de gemas y diamantes como compromiso firmado en un papel estampado en la piel. Agarró sus maletas, compró un pasaje y el defensa se inscribió y se animó a estudiar gemología, la ciencia de las piedras preciosas que dejan boca abierta y sin vista a cualquiera.

Entre joyas . La familia Zela Terry es dueña de Diamante Perú, una de las joyerías más exitosas en nuestro país.

equipo de sus amores: Alianza Lima, donde llegó a participar en las divisiones menores gracias a la visión de diversos reclutadores que asistieron a sus presentaciones con el cuadro italiano a su corta edad. Sin embargo, no perdurará en el barrio de la Victoria, pues su despegue al éxito comenzaría lejos de casa. En el año 2007, a sus cortos 19 años, haría su debut en las canchas de fútbol con el club Coronel Bolognesi de Tacna, club recién ascendido en aquella época. Adrían pensaba que iba a luchar por la permanencia total en la Primera División. Sin embargo, los tacneños hicieron una campaña de ensueño, con que “El Leñador” saldría campeón con el “Rojo” del Torneo Clausura de dicho año, en el cual el defensa tuvo poca participación dentro del plantel y para conseguir dicho campeonato. Ser profesional es una de las cualidades que Zela mantiene desde pequeño. No le importaba donde jugar, solo bastaría ser una persona íntegra dentro y fuera de las canchas. Sería el momento de hacer una llamada al “compadre”. Adrían llegaría al club Universitario de Deportes, quien tuvo buenas referencias para el cuadro crema, en donde parecía tener un buen proyecto a futuro y llega a ser parte de la selección Sub-20 de Perú. No obstante, “fue un momento en el que no se sentía bien consigo mismo y la línea ascendente se detuvo”- señala Adrián contando este hecho con un rostro descontento y voz seria, pues dentro de su participación con el cuadro merengue tuvo un rendimiento muy pobre, de muy bajo nivel y esto se debe por la responsabilidad que le daba Chemo del Solar, pues para la hinchada crema la defensa era colosal y baluarte con ídolos como Carlos “El Negro” Galván y Jhon Galliquio como zagueros centrales, un muro de Berlín formado en cada partido de Universitario de Deportes. Esto hizo a que Zela Terry tenga varios desaciertos, críticas y falta de juegos en el torneo. “En un plantel con larga historia, darle la responsabilidad a un chico de 21 años fue mezquino. Había referentes que no rindieron y las

Cambiaría un balón de fútbol por la química y la física en la Gemological Institute of América, en donde su padre y gran amigo Gerardo Zela, co-fundador de Diamante Perú y uno de los primeros gemólogos destacados del país, lo incentivó a estudiar y llegar a convertirse como uno de los grandes gemólogos que nuestro país ha de tener en los últimos tiempos. “En el mercado, un futbolista ha de costar como un anillo aproximadamente y que el valor de dicha joya se debe a que se ha cuidado con el tiempo y no ha tenido ninguna lesión en sí “– señala Gino, su hermano, quien llegaba a conversar con Adrían sobre un socio corporativo a poder cerrar una venta en los próximos días. De una manera u otra, aprendió a alzar la mirada en las ventas como lo hacía para dar un pase a un compañero, era el líder sin cinta de capitán dentro de una empresa familiar, su mejor amigo. Sentado en su mesa de su cálido hogar, recuerda haber llegado de un viaje. Cerró los ojos y escucha una llamada. Era un ex jugador profesional llamando al celular de Zela de Diamante Perú quien le invitaría a ser parte de este proyecto de manera de “hobbies”, pues ya se había cambiado de mentalidad desde que se retiró provisionalmente del gramado verde del juego. Era Yaco Eskenazi, un retirado de las canchas, avisaba a Zela para probarse en el Sport Boys del Callao junto a varios jugadores reconocidos para ayudar a cuadro chalaco a ascender a la Primera División. Su mundo era cerrado, solo creyendo en el negocio familiar, pero Gino y Gerardo verían en Adrián varias cualidades aprendidas en seis años de alejamiento de las canchas. Zela saldría por la puerta grande del regreso jugando por el Lima Cricket y San Lorenzo de Porococha, ambos equipos jóvenes de bajo presupuesto en la temible Copa Perú. Su rendimiento sería pobre, habría perdido el tiempo de nuevo frente al balón y viendo a todos los equipos con varios puntos y victorias encima de esos equipos.

"lo mejor de mi carrera fue haber jugado por la selección peruana solo 5 minutos"

“Cuando lo vi en ese partido, su equipo estaba perdiendo por mínima diferencia contra el DIM y él era el único que ponía harta garra en los noventa minutos. Terminó ganando por un gol de él. Lo único que le faltaba era la cinta de capitán y ser expulsado” – señala Claudio Cortijo, quien se encontraba entre las gradas del Estadio Manuel Bonilla, donde jugaba el Lima Cricket y ahí se encontraba el profesor Cortijo, proyectando en Adrían un futuro admirable y de grandes victorias. Terminada la temporada, se acercó a él para que fuese parte del Deportivo Municipal, un equipo destacado quien volvía


a la máxima expresión del fútbol después de varios años, en donde Zela disputará dicho todos los partidos de aquel torneo antes de ser protagoniza en el cuadro de Torneo de Segunda División y salir campeón en el año 2014. “Jugar por Deportivo Municipal fue mi segunda oportunidad de volver a conseguir mis sueños. Estoy totalmente agradecido con el fútbol por haberme acogido estos cuatro años y sentirme en familia”. El zaguero central de la “Academia” no ha tenido un compañero fijo durante estos seis años dentro del “Cuadro de la Comuna”, en donde es un fiel destacado por todos los medios de comunicación todos los fines de semanas con los partidos restablecidos por la Asociación Deportiva del Fútbol Peruano. La vida le dio una segunda oportunidad al “Tanque”, una nueva oportunidad de demostrar que el sueño de un niño de Miraflores estaría en proceso para firmar un nombre en la historia del fútbol peruano. El sol saldría de nuevo, las nubes grises quedaron en aquel lugar de depresión, pues gracias a todas las actuaciones que tuvo dentro de los torneos del país fue considerado como uno de los mejores zagueros del Perú en varias instancias del deporte. Eso llamaría la atención de un “Tigre” argentino que caminaba sigilosamente por los lares de Villa El Salvador, lugar donde Adrían jugaba cada fin de semana con la franja del pueblo. Esto no le fue ajeno mandar a uno de sus colaboradores a ver al leñador a un partido entre Deportivo Municipal y el equipo de la Universidad de San Martín, donde en el transcurso del partido, el defensa gritaría a todo pulmón y sería parte de uno de los goles de dicho encuentro. Aquel “Tigre” lo cazó y lo llevó a ser parte de su manada donde Adrían y varios no podían creer que iba a ser parte de uno de los hitos más recordados por varios peruanos. Junto a él estaban Oscar y Pier, dos de sus grandes amigos. Este último habría sido el amigo correcto de entrenar a Adrían y devolverle el toque fino de Zela, haciendo que pruebe algunos roles que jamás Adrián tuvo en mente como patear algún penal decisivo o probar un tiro libre de más de treinta menos “En cada partido, Oscar, todo el equipo y yo escuchábamos su métodos de juegos dentro del campo. El querer regalar alegría y emociones a los hinchas era algo infaltable en los noventa minutos. No será el mejor con el balón pero es un gran líder y amigo”

Elegancia futbolera. Oscar Vega, Victor "El Chino" Rivera, Oscar Vega Bonadona y Adrían Zela (de izq. a derecha)

"Que Ricardo Gareca me haya convocado, lo considero como la mejor etapa de mi carrera futbolística: llegar la selección y entrar faltando cinco minutos para lograr la clasificación” Era el minuto 85 de aquel miércoles 15 de noviembre del 2017. Personas llorando de felicidad por darse el lujo de ver a su país en lo más alto y otros impresionados con el toque peruano demostrado en el Estadio José Díaz. Se estaba desarrollando el partido de la Selección de Perú y Nueva Zelanda por el repechaje y clasificación directa al Mundial de Rusia 2018. En una conversación con su padre, Adrián tenía una relación familiar lejana con un volante defensor de los años 40, quien defendió la camiseta peruana llamado Alberto “Toto” Terry. Recordando esas palabras, esto era de ensueño para el defensa central, quien por un llamado del “Tigre” Ricardo Gareca se preparaba para ingresar por Christian Cueva. Un “¿Qué tal?, ¿Cómo te sientes?” sería lo necesario para saber que Zela estaba listo y preparado para demostrar sus habilidades con el balón. Tras escuchar la voz del cambio, en ese instante, la vida de Adrián quedó marcada para siempre, pues con su ingreso ha enseñado una lección de vida a todos aquellos que han soñado con ser futbolistas y por las críticas y casos personales no lo aprovechamos. Pasar del retiro a la gloria, de una vida alejada de la pelota a vivir una experiencia sublime del mundo del fútbol. En ese momento, Adrián, fue la gema que impactó serenamente al profesor Gareca y que hoy por hoy puede brillar con luz propia en el fútbol peruano. Así como muchos, Adrián Zela Terry es un digno personaje de admiración y valentía, pues con todas las adversidades que la vida se le interpuso por medio de lesiones, bajos rendimientos en partidos vitales, trabajos correctos y demás labores, nunca desaprovechó la mayoría de estos, sino más bien los recibió de buena manera para ir creciendo como persona y como imagen de una gran empresa y en las canchas donde demostró su calidad de juego. Eso hace brillar a un diamante de rojo y blanco.



pasión femenina El 2019 no solo será recordado por una versión distinta del deporte peruano, los Panamericanos en Lima o la final de la Libertadores, sino por el nacimiento del fútbol femenino en el Perú por chicas que les sobran balones y que reman contra la corriente para hacerse un nombre en el país.

Escribe: Jesús Orna / Fotos: Andina.pe

N

o es un despropósito resaltar como una aparición a las mujeres en el fútbol. Pese a que el 2 de marzo de 1998 fue el debut de una selección femenina, nadie logra identificar fácilmente nombres como Vivian Ayres, Miryam Tristán o Fabiola Herrera, quienes han sido parte de una deslucida historia en el balompié femenino desde aquella fecha. Sin embargo, el presente año el fútbol femenino ha levantado la voz. “Siempre he jugado al fútbol desde que tengo conciencia, surgió como algo natural y por medio de ese don creo que tengo un propósito para esta vida. Te puedo decir que lo disfruto y es el único lugar donde soy feliz, jugando futbol”. Cindy Magali Novoa Díaz. La jugadora de la Universitario y seleccionada nacional sabe que la perseverancia será la principal arma para que cada vez más peruanas puedan convertirse en futbolistas, a pesar que nuestro país aún está muy lejos de profesionalizar el deporte rey en su versión femenina. Ella es de Achamal, Amazonas donde descubrió su amor por el fútbol. Nunca faltaba una pichanga en el recreo de su colegio en la cual apostaban 50 céntimos, dinero que, asegura ella, tenía mucho valor en aquel entonces. Puede decirse que el romance con la pelota se dio en estas épocas y, como en toda relación, siempre habrá contravientos que uno debe superar. En su caso, un machismo presente en provincias fue su primer obstáculo “No era bien visto que las mujeres jueguen fútbol porque decían que no podían jugar o que las iban a golpear ya que supuestamente ellos eran más fuertes”

es la línea de volantes del equipo. En la selección juego de 6, soy más de recuperación y cambiar de juego por las bandas. En la ‘U’ soy tipo 8 y 10, también tengo pase gol y buena precisión en los pies” destaca Cindy quien también es la primera encargada de patear los penales en el torneo femenino. Ella comparte la idea de fijar este año como punto de partida del fútbol de mujeres en el Perú. Apenas en el mes de abril, la selección jugó su primer partido transmitido por un canal de televisión; Movistar Deportes fue el pionero en proyectar el amistoso entre Perú y Colombia previo a los panamericanos Lima 2019. Sin embargo, durante aquella fase de preparación, Maryory Sánchez, arquera de la selección hizo una denuncia a través de redes sociales donde aseguraba que la Federación Peruana de Fútbol prioriza las instalaciones para las selecciones de juveniles de varones. “En ese momento apoyamos a Maryory y viralizamos el mensaje. Es una lucha por hacernos notar que todavía está continuando. No es nuestro fin quejarnos ni reclamar pero si hacer acordar que hay fútbol femenino. Queremos una oportunidad de ser vistas, no somos divisiones menores, nosotras somos fútbol. No se está dando de la mejor forma, siento que sigue un ambiente donde los gerentes y administradores más altos no tienen interés por nuestro fútbol. Buscamos personas serias que trabajen por nosotros. La información se puede quedar ahí nada más. Desde esa denuncia, las cosas han ido mejorando un poco, un ejemplo es que ahora ya hay medios para visualizarnos y también la publicidad ha mejorado pero no lo suficiente como para sostener un largo plazo.”

“no tenemos campo, no nos pagan, pero vamos a entrenar y buscar un buen lugar ”

Su moño pelirrojo y su voz entrecortada pero decidida es lo primero que la identifica a primera vista pero ella se describe a sus 24 años como una persona muy perseverante y disciplinada. Dice que las cosas no salen con una varita mágica pero, como dice su estado, “Yo sé que lo lograre pero tiempo al tiempo y al proceso”. Cindy comenta que llegó a la capital, pasó algunas pruebas en Alianza Lima y luego fue a Chosica para incorporarse al club femenino Real Maracaná, seguidamente llega a la ‘U’ donde tuvo un breve paréntesis en Sport Boys pero regresó y es una de las capitanas del conjunto merengue. Aquel talento en el mediocampo le valió para ser convocada a la selección nacional. En medio de sus pininos en el fútbol recibió la noticia de la pérdida de su padre, una etapa que la relata con más orgullo que pesar pues considera que esa pasión por el fútbol la heredó de él. Superada esta etapa, enfocó su mirada al fútbol donde encontró su posición como centrocampista mixta. “Juego en todo lo que

Según Cindy, el 2019 fueron dos momentos cruciales los que pusieron en vitrina el fútbol femenino: La participación en Panamericanos y el clásico por la final de la Zona Lima. El primer certamen no solo significó el mayor evento deportivo en nuestra historia sino que fue el pretexto perfecto para que la gente conozca de cerca el trabajo femenino. El 28 de Julio fue un día histórico para el país, claro está, y también para sus mujeres. La selección debutó en el torneo femenino contra Argentina ante 20 mil espectadores que se dieron cita en el estadio San Marcos y se estableció un récord en gente que asistía a partido de este tipo. El resultado no acompañó pero fue la primera vez que las chicas no cantaban el himno ante tribunas vacías “En los Panamericanos me gustó interés de la gente, cada persona que fue por sus propios méritos, pagó su entrada para apoyarnos.


Por ese lado, yo creo que el futbol femenino es bien visto pero aún no hay estructura que ayude. Fue un momento increíble el sentir que no estábamos solas y que nuestro canto estuvo acompañado por muchas voces”.El otro gran momento se vivió el 26 de octubre cuando Universitario enfrentó a Alianza Lima por la final de la Zona Lima del Campeonato Nacional Femenino. Al margen de la conocida rivalidad de “los compadres”, los hinchas colmaron las tribunas de oriente y occidente. La ‘U’ se impuso 2-1 con una gran actuación de Cindy que también anotó un tanto. Al terminar ese partido ella no pudo disimular su emoción y con una gran sonrisa le dedicó su gol al público en general que asistió al partido. En esta oportunidad cientos de personas también pudieron disfrutar la final a través del Facebook de la web de noticias UCI. De esta manera podemos confirmar dos fechas históricas en esta nueva relación entre las mujeres y el fútbol. El difusión de este deporte en la rama no pasó solo por demostrarlo dentro de la cancha sino por hacer todo un movimiento social que caló en la gente con la campaña #QueremosSerVistas. Una iniciativa de las jugadoras para que esta entrega en el deporte rey sea tomada en cuenta a fin de mejorar las condiciones en las que se desempeñan actualmente. El fin es iniciar un proceso de diálogo con la Federación Peruana de Fútbol y al Instituto Peruano de Deporte en aspectos como el de infraestructura, visibilidad, dirección técnica, planeamiento de un mejor torneo y un presupuesto que sostenga este fútbol. Cindy y sus compañeras han empezado a luchar de forma colectiva para tener un piso mínimo que todo deportista merece por lo que se han realizado banderazos y presentaciones en medios de comunicación. El camino será difícil sobre todo, por un desconocimiento de lo que algunos puedan entender como fútbol femenino y viven en el siglo pasado pensando que fútbol y hombres son palabras sinónimas. ¿Qué pueden aprender del fútbol femenino? Cindy la pone simple y dice ue tan sólo hagan el esfuerzo de ponerse en el lugar de ellas. Los hombres pueden aprender de nosotras la constancia, disciplina y compromiso porque nos cuesta el doble que a un hombre. Estoy segura que ningún chico soportaría las cosas q pasamos las mujeres, por ejemplo entrenar en un mal campo, no tener notoriedad, no lo demuestran pero en el fondo creo que les gusta tener mucha prensa. Sabiendo que no tenemos un buen campo, vamos a entrenar; sabiendo que no nos pagan, vamos a entrenar; sabiendo que no tenemos campo libre salimos 5am de nuestras casas para agarrar un campo libre más temprano y hacer nuestro calentamiento y prepararnos. Además de ser una portavoz importante para esta causa, Cindy no deja de pisar tierra y sabe que a sus 24 también debe de cubrir muchos aspectos de su vida “Te soy sincera y aún no se si es que esto va ir en serio. Es un poco contradictorio pero estoy siguiendo esa línea hasta donde pueda llegar. Tal vez, cuando se profesionalice esto pueda decir “oye ya quiero dedicarme solo a esto” pero, por ahora hay cosas paralelas al jugar fútbol. Por ejemplo, yo estudio y estoy terminando mi carrera, entre otras cosas. Por supuesto que seguiré jugando y sé que puedo inspirar a muchas personas para que se superen pero quizá puede ser que estemos lejos de una profesionalización y ahí no podría vivir solo de jugar fútbol. Respecto a su deseo de seguir jugando ella tiene objetivos personales que le gustaría cumplir. Primero ser parte del cambio que puede empezar desde la federación, un cambio de mentalidad que no imitará la mejor versión femenina del fútbol mundial de la noche a la mañana pero que puede cubrir

Todo corazón. La selección peruana femenina disputó una fase breve en los Juegos Panamericanos Lima 2019

derechos básicos que las chicas necesitan para hacer lo que más les apasiona dentro de la cancha. “Me gustaría primer tener un campeonato femenino que no sea un copia y pega de Copa Perú, lo ideal sería que sea como una Liga 1 y buscamos conversar con la dirigencia sobre eso, espero que se de pronto por parte de ellos ya que el público si ha respondido muy bien este año. Si la situación mejora me gustaría irme a otro país para desarrollarme más, un sueño es jugar en España.” Cindy sueña en grande con la ambición que toda joven debería tener. Su mirada ahora está en la etapa regional del fútbol femenino del Campeonato Nacional Femenino. Las merengues vienen arrancando con un inicio perfecto con goleadas de 10-0 y 4-0 a sus rivales de turno. Cindy anotó doblete en el primer juego y otro tanto en el segundo; torneo que podría clasificarlas a la Copa Libertadores Femenina 2020, una oportunidad aún mayor para ser vista internacionalmente. El 2019 ya está por terminar y a pesar de lo que está pendiente, ella agradece a todas las personas que apoyaron al fútbol de mujeres durante el año. Asimismo, hace un llamado a que el público se dé un salto a la VIDENA para observar los partidos y se olviden de ciertas conductas que no hacen más indiferentes que no hacen más que restarnos como sociedad. “Invito a que nos conozcan más porque el machismo parte de un prejuicio sin mayor conocimiento de la realidad. Que vayan cada fin de semana a los partidos de nuestro torneo y aprovechen que es gratis, que nos vean y se la crean que existe fútbol femenino. La única diferencia entre hombres y mujeres es la genética, quizá son más rápidos y tienen más fuerza pero pienso que tenemos la calidad y técnica que muchos de ellos no tienen.” “Acá debemos ganar algo, entonces debemos de ganar algo para que la gente vea y tengamos motivos para pedirles apoyo. Al final, todos somos Perú y si ganamos vamos a hacerlo en nombre del Perú”. Además, reflexiona sobre el triunfar como el principal motor y motivo para un reconocimiento dentro y fuera de las canchas. Algo no muy ajeno a la situación de la mujer en el Perú pues, sin tapar el sol con un dedo, sabemos que el machismo aún mantiene un fuerte olor en la sociedad. Uno como hombre puede quedarse cómodo viendo como se incrementan esto o tener la valentía de unirse a la lucha contra el maltrato y la discriminación. Este es un tema que incumbe no sólo al deporte sino al país. La historia de Cindy no es la de una futbolista, es la de todo un movimiento que exige igualdad en el fútbol. Una igualdad por la que luchará hasta el final con fútbol pero también con palabras, puesto que ella se sabe como fuente de inspiración de niñas y adolescentes que descubren en el fútbol a su primer amor.



Frontenis

el arte de la paciencia Escribe: Roberto Paolo Mamani / Fotos: Andina.pe

E

l 15 de noviembre del 2019, tres frases que se juntaron antes del mediodía denotan la falta y la necesidad de paciencia. Una enunciada por un cobrador que deseaba no quedarse tras la luz roja, una señorita que se rehusaba a ceder un asiento a alguien que lo necesitaba y la tercera por un profesor que quería salir 30 minutos antes del final de la clase. Todas estas frases dirigidas hacia quien redacta esto, tecla tras tecla, solo con la mano izquierda, mientras la derecha goza de vacaciones en la inoperancia plácidamente acurrcada sobre un cabestrillo después de haber sido sometida a una cirugía. El cobrador necesita ser impaciente para llenar pasajeros, el lesionado paciente entiende que es su trabajo; la señorita necesita ser impaciente para no ceder un lugar, el lesionado ser paciente para comprender que ella llegó primero; el profesor necesita ser tranquilizarse para apurar a sus alumnos, el lesionado paciente para darse cuenta que no es culpa del profesor que tenga que escribir con la mano menos hábil. Y así, vivimos en un país donde la impaciencia se combate con paciencia, si es que no quieres problemas en lo que resta del día. Un mundo donde todo está al revés, donde para ignorar lo que ya has visto solo hace falta mirar hacia donde no estás viendo. Sin embargo, aún se puede encontrar con personas que no les hace falta ver las carencias de alguien para practicar la paciencia, personas que han ganado medallas gracias a dicha virtud, personas que puedes encontrar a través de Skype o en la cancha de Frontenis. Complicaciones al encontrar una locación adecuada surgieron minutos antes de la hora pactada, obligándome a pedir unos minutos de tiempo antes del inicio de la videollamada, a lo cual su respuesta fue positiva. Ya en un cubículo tomé asiento, cerré una ventana para que evitar la bulla y abrí otra para iniciar con la entrevista. Complicaciones al encontrar el usuario con quien debía comunicarme volvieron a surgir, a lo que pedí que ella me buscase a mí y sin problemas la respuesta volvió a ser afirmativa. Algunos minutos de espera mientras respondía a mi llamado virtual me iban presagiando lo bueno de esperar. Cómplices del tiempo, finalmente, nos pudimos ver y escuchar. Dió el gran paso a una vida de entrenamiento en el año 2010 y cuatro años después pisó la cancha de Frontenis y desde ahí entonces no ha parado de sacrificar momentos para lograr sus objetivos. “Lo que sí deje fue los estudios año y medio por dedicarme al deporte.” Uno de sus grandes sacrificios fue dejar de estudiar en la universidad un año y medio, aunque ahora lo retomó y está entusiasmada con llevar una vida deportiva y a la par buenas calificaciones. El proceso de cambio. Su vida no ha cambiado mucho, puesto que desde pequeña estuvo acostumbrada a la vida deportiva “Bueno no ha cambiado mucho, porque como te comenté lo practico desde pequeña y he

estado participando a nivel competitivo, así que no es que haya cambiado mucho, otras personas si empiezan tarde o ya más grandes y tienen que acostumbrarse a los horarios y todo pero yo si ya estaba acostumbrada a entrenar, salir del colegio y entrenar, a veces salir antes del colegio para ir a entrenar, no salir los fines de semana, no ver a mis amigos y estar con el tiempo a las justas, porque la cancha está en Villa María del Triunfo, es la única que hay y tenía que irme hasta allá de todas formas, así que no ha cambiado mucho mi situación, ya estaba acostumbrada.” El gran apoyo invaluable que ha tenido siempre consigo es su madre, docente de profesión, que la motivó a no dejarse derrotar por las dificultades de su vida y la animó a esperar que todo el sacrificio que hace ahora den frutos más adelante. “He logrado bastante hasta ahora y ella es la que ha estado motivándome siempre.” Además, a parte de la madre que está siempre con ella, en estos últimos panamericanos celebrados en Lima cuenta que ha tenido el apoyo incondicional de hasta gente que no conocía sobre su deporte pero que de todas formas iba a animar al equipo y hacer barra. Son las maravillas de la localía que exige a nuestros deportistas un mayor desenvolvimiento y a la vez anima a dejarlo todo en la cancha. “Ha sido increíble porque ya he tenido otros torneos internacionales, pero nunca tanto apoyo en ellos, o sea siempre afuera y al país al que íbamos era el que tenía más barra y todo, pero eso ha sido de verdad increíble.” De pronto viene la parte que resumiría el trabajo en equipo, el sacrificio, las ganas y el éxito. “Yo soy súper paciente,”, es una frase que la acompaña hasta hoy, y si puede relacionar su forma de ser con el deporte tomaría ese camino, el de la paciencia. cómo es un deporte que normalmente se juega en pareja, tienes que entenderte con la otra persona, ser paciente entenderla ponerte en su lugar porque somos un equipo, si una falla el punto y la otra se va a enojar se va todo al tacho porque se sale del partido”.Con actitud aguerrida y personalidad luchadora va al encuentro de cada competencia deportiva, esperando dejar algo más que sangre, sudor y lágrimas, “luchar hasta el final, hay muchas veces en las que se ha remontado partidos difíciles y creo que es esfuerzo, mucho esfuerzo.” En diez años, Nathaly se ve con un titulo otorgado por la universidad en la carrera de Administración y Marketing además de muchas medallas ganadas "De repente estar en un podio como te mencionaba en una copa del mundo, en un mundial y otra vez en un panamericano". Por ultimo, cuando de forma humilde no sabe expresar que cosas le faltarían y que cosas le sobrarían hacer a Nathaly Paredes para continuar con ese camino de lucha, perseverancia y paciencia.




la reina del ring “Me gustaría en unos años estar en la WWE (World Wrestling Entertainment), que coreen mi nombre ante un coliseo de más de 50 mil personas: todo un sueño” Escribe: Arturo Grados / Fotos: Andina.pe

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ucha libre o más conocido como cachascán en nuestro país es una de las disciplinas que congrega miles de fanáticos extasiados que vitorean “esto es lucha”, conocido por ser riesgoso y una difícil profesión de arte luchistica que tiene una historia que ha evolucionado desde los años 60 hasta la actualidad. Si estás por ir a un show de lucha libre en Perú, es mejor que tengas las revoluciones a mil. Los encuentros entre luchadores profesionales se tratan tanto de decir muchas groserías (dentro y fuera del ring) como luchas dramáticamente artísticas. A pocos minutos para empiece el combate, las luces en el pequeño coliseo se apagan y una luz cenital alumbra el cuadrilatero hecho de una plataforma de acero recubierto por maderas de pino con una lona blanca o negra dependiendo del evento y coloridas cuerdas adornan el ring. Los espectadores impacientes comienzan hacer ruidos que ensordecen el ambiente. El anfitrión presenta el único combate femenino de la noche con sus nombres artísticos: Alexa Jade vs Alissa Webb. Dejando sin opción de objetividad ante el sonido de la campana que marca el inicio de las acrobacias, llave, con una duración de diez minutos marca así el show. Por varios años, la lucha libre fue exclusivo solo para los hombres. Las mujeres han tenido que forjarse un terreno a base de esfuerzo y dedicación, enfrentando los típicos estereotipos de discriminación. “Perú sigue siendo un país muy machista y por eso escuchó: ¿Qué haces trepada en un ring? Anda a la cocina. Las críticas vienen por su fortaleza física, por no verse femenina, lo que ella siempre responde: sube al ring y verás quien es la delicada” comparte Alexandra Oyala o en el mundo de la lucha libre peruana Alissa Webb. La Lucha Libre femenil ha tenido que zigzaguear desde sus inicios obstáculos de género, morales. Era considerada un peligro moral porque no correspondía con la identidad femenina peruana; las mujeres debían ser frágiles y sumisas. El wrestling femenino y luchas mixtas ya no son tabú, pues son parte del show y se tienen que enfrentarse en doble o hasta triple jornadas debido a la poca cantidad. En el círculo independiente solo hay diez luchadoras, muchas de ellas solo se presentan en dos o tres ocasiones. Entrenan todos los días con los hombres en el mismo lugar donde se realizan los eventos, van al gimnasio además de conformarse con papeles secundarios en los carteles, que casi nunca estelarizan. ¿Por qué hay tan pocas mujeres? Por desconocimiento: en la tele se vendía a la mujer ‘wrestler’ como la típica modelo que está ahí para enseñar el cartelito, pero

¡ATANGANA!. Alissa Webb es una de las luchadoras peruanas más destacadas en la industria de la lucha libre profesional.

ya no es así, ahora son auténticas atletas y hacen combates más divertidos que los de hombres. A eso se suma que en el país la lucha libre es poco conocida al no haber muchas mujeres con quien pelear, tenía que luchar con hombres por dos motivos: para no perder ritmo de competencia y porque si no luchas no ganas dinero. “La lucha libre en el Perú no da de comer” dice Alexandra mientras se dirige todos los días a sus clases en la universidad. Se transporta todos los días desde su casa en Los Olivos hacia la Universidad Ricardo Palma en Surco. donde cursa el quinto ciclo de ingeniería de sistemas. Es de las pocas mujeres en su clase donde a menudo soporta los chistes machistas de sus compañeros. “Que hace un chica estudiando ingeniería, que vaya estudiar comunicaciones o modas”. Ha vivido con esos prejuicios durante años, desde su primera lucha que se llevó a cabo en un estacionamiento, con más de 10 personas se vivió el nacimiento de su nombre. Al inicio luchaba sin máscara porque no tenía dinero para costearse una, luchó contra “Intifest".Esa vez perdió, pero ganó un gran amigo que hasta el día es un gran apoyo para su progreso. "Ver a una mujer fuerte no es común, no es lo clásico y la gente te ve diferente. Aquí mismo, me he enfrentado a eso, a que a veces te digan que pareces hombre, aunque no sea así, por muy fuerte que estés, el físico de una mujer jamás se va a comparar con el de un hombre, mi genética es de una mujer. Al principio me sentía muy mal, pero ya lo he superado, y por eso siempre trato de estar lo mejor presentable siempre. Hay compañeros que te reconocen, incluso, cuando estás más fuerte que ellos y eso es muy bonito" cuenta. En Perú se han establecido escuelas de lucha libre, entre las que destaca Leader Wrestling Association (LWA), dedicada


a promover espectáculos y al mismo tiempo ser un centro de formación, según la página oficial de la empresa peruana. Desde que empezó, nunca ha faltado a una sola clase. Para ser un buen luchador necesitas tener mucha confianza en ti mismo y ser muy carismático. Sin embargo, desde su primer combate se dio cuenta que tenía potencial porque en cuanto empezaba a luchar se transformaba en una persona completamente diferente, afirma Webb. Recibe muchos golpes pero siempre logra levantarse. Mientras se desarrolla la lucha de Alissa hay un stand donde venden cervezas, gaseosas, entre otros snacks. Pero hay uno en particular el stand de las mercancías de los luchadores: entre máscaras, afiches, fotos y calcomanias. En la mayor parte del stand sobresale la mayoría de merchandising de los luchadores, en un pequeño rincón la máscara de Alissa. ¿Por qué tu máscara cuesta más que las demás? Yo costeo la confección de las mismas porque aún no hay una marca patrocinadora. A los mismos luchadores los auspician gimnasios, marcas de ropa deportiva, batidos, entre otras. Gasto entre 20 a 30 soles por cada uno de ellas, por eso lo tengo que vender a 50 soles para poder ganar algo. Y los sticker a un sol, que está hechas por los personajes que más amo, los Simpsons. Estos fueron lo que más se vendieron porque más baratos, a solo un sol. Compré uno y aún lo tengo en el reverso de mi celular. Ella comparte la misma afición de estar en tu ring desde que veía en televisión, especialmente en el canal nueve, pasaban los sábados en mediados de la década de los 2000. Su luchador favorito era Dwayne Johnson o más conocido "The Rock" lo veía con su hermano mayor Aldair. Terminando el programa se ponían a practicar llaves, saltos. "Mi hermano mide 1,80 cm y ya sabrás como me trataba" cuenta luego de terminar su lucha y se dirigía a backstage. Ver cómo luchadores icónicos de WWE como The Rock, The Undertaker y John Cena eran lanzados contra las cuerdas, hizo que que sentimientos dentro de ella se acelerará. "Me encantaban los personajes de los luchadores y las historias que contaban en cada torneo", recuerda. “Me gustaría en unos años estar en la WWE (World Wrestling Entertainment), que coreen mi nombre ante un coliseo de más de 50 mil personas: todo un sueño”", reflexiona. A sus casi 25 años se ha subido al ring con luchadores más conocidos en el circuito independiente sudamericano. Entre la lucha que más recuerda fue contra Zatara en el evento Gladiadores 5 realizado el 2016. Zatara es conocida porque fue la primera la primera chilena en pisar un ring de la WWE, la empresa más grande de lucha libre en el mundo. ¿Qué tal tu lucha contra Zatara? Fue un sueño, había visto luchas en YouTube sobre, antes del salir del ring me tomé una foto con ella antes de salir. Ella es una capa en el cuadrilátero, nos comprendimos bien. Me dejaba en ciertos momentos de la pelea llevarlo a mi ritmo, soy de estilo de movidas áreas por mi peso. Ella es un estilo más rudo con llaveos, movidas de rendición, ella tiene más años en el negocio. Cuándo terminó la lucha me pregunta el porqué de mi máscara y mi traje. Ella es amante de los cómics de DC, en especial Dawn Grander, en ella se basa su traje y su máscara. De niña quería convertirse en superhéroe, se está cumpliendo su sueño porque su personaje es de buena y lucha contra los rudos. Una verdadera representación de las fuerzas de poder entre el bien y el mal, cuando los luchadores técnicos escenifican lo correcto, mientras

que los rudos representan la cobardía, traición. En esos aspectos la lucha libre se vuelve el espectáculo donde coinciden el teatro, la comedia, la actuación, las llaves y los vuelos. El ambiente de gritos, ruidos, abucheos es lo más tradicional de la “práctica luchistica”, hasta los más floridos lenguajes hacen de las porras de la lucha libre, unas de las más singulares.Es en el espectáculo donde el público se vuelca en apoyar a sus favoritos y pifiar a los contrincantes, más aún, convive con los actores desde afuera del cuadrilátero en un verdadero descargo de emociones generados por la lucha. Es la manera más simpática de “desquitar al psiquiatra”. El primer cómic que leyó sobre ella se lo regaló su papá, fue un regalo de navidad. Esa navidad su mamá le regaló una muñeca, obviamente ella nunca la usó, esperaba jugar con un superhéroe pero su casa era muy tradicional. Su mamá pensaba que jugar con la pelota o con muñecos iban ser mujeres no tan delicadas. Ella también al enterarse que practicaba lucha libre le pidió que cuando esté con ella no le mencione el tema. "Mi mamá no aceptaba que practique lucha libre porque me lastimaba, cuando me lesionaba tenía que fingir ningún dolor para no discutir con mi mamá”. Pero eso no le impidió el amor que tiene a la lucha. La lucha libre le encantó desde la primera lección. A veces siente frustrada porque se siente débil o porque no le sale algún movimiento, pero cuando mis compañeros me ayudan se acercan y me dicen que lo vuelva a intentar pero más despacio. Lo cierto es que le motiva y le apoya mucho cuando se siente que se bloquea. La lucha requiere mucha energía. Está acostumbrada a los entrenamientos. Luchar con otros es lo más difícil, aunque los ejercicios de calentamiento también consumen mucha energía. Pero le encanta este deporte, porque creo que te hace más fuerte y valiente que ningún otro. El único problema fue que es muy, muy tímida y para ella fue muy difícil atreverse a salir del cascarón. La máscara fue un soporte para contrarrestar esa timidez. Históricamente la máscara es el elemento más icónico de los luchadores, la magia de la lucha libre nace de eso. Es símbolo de misterio que envuelve al personaje. Muchas personas quieren conocer quien está detrás del antifaz. Las máscaras para lucha libre tienen un diseño único y le da a cada peleador su propia esencia al momento de hacer un personaje. Las máscaras de lucha libre son un tesoro que el luchador usa con mucho orgullo y que te la pueden quitar tan fácilmente y menos en un combate. Son varios los que tienen la habilidad de ser influencia para la elaboración de una máscara, entre Alissa. Ese nombre lo usa en los combates porque así le iba a llamar su mamá pero pensó que era muy americano, así que le puso Alexandra. Webb se debe a ser ella nativa digital, le debe mucho al internet conocer un poco más de las técnicas. 1,2,3 suena la campana y el anunciador indica la ganadora de este combate es: Alissa Webb. Así como ganó su lucha, en muchas industrias se sigue peleando contra el machismo, el sexismo, el racismo o cualquier otro tipo de discriminación o segregación, aquí ella botó esa tremenda piedra, sólo en una tarde, y a punta de lazos al cuello y bombazos a contra lona. El campo de batalla es un cuadrilátero en el que luchan para sentirse vivas, para sentirse fuertes y empoderadas. Su moda de actuar es callarles la boca: demostrarles que, aunque a veces no es tan valorada, a base de esfuerzo puedo ser mejor que un hombre.




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