Crónica de un amor

CróniCa de un amor

Crónica de un amor

José Ygnacio Ochoa

1ª edición: © Ediciones Estival 2014

Colección El Divino Narciso nº 6

Depósito legal: lf0432014800596

ISBN: 978-980-12-7543-5

Editor Juan Martins

©Proyecto codarte a.c.

Correspondencia al correo electrónico: edicionesestival@hotmail.com

Levantamiento de textos y artes finales: © Ediciones Estival

Diseño de portada: Karwin Poleo

Impresión: Talleres de Codarte A.C.

El autor desea agradecer a sus alumnos que hoy día los considera sus aliados y amigos por dar apoyo al feliz término de este libro. En especial a la empresa Flexoven C.A..

José YgnaCio oChoa

CróniCa de un amor

CróniCa de un amor

CróniCa de un amor

CróniCa de amor perdido esta crónica de amor perdido por las escaladas de la memoria en lo recóndito impermeable reinventado a cada paso de la procesión los arquetipos reducidos a la mirada al cansancio de no estar con ella esta crónica que no quiere un final más bien una despedida sin abrazos sin pasos que determinen la distancia

Gira la mirada

gira la mirada en torno al vaso el agua contiene una imagen nunca vista es ella quien aparece en una figura ondulante no se parece en nada sólo en su gota de lágrima desde su ombligo hasta la comisura de sus labios respóndele con un sí por favor para que no se desborde su necesidad dile que su trémula paciencia está al borde de un colapso

JueGos trastoCados

qué pasó con la historia la que alguna vez me contaste qué pasó con la memoria de otros tiempos de las ramas donde los árboles nos decían cómo hacer de los desvelos por la impericia de los protagonistas incautos como aquel Aquiles soberbio sin desmesura por Patroclo y su esclava dime que pasó con esas historias donde nos regodeábamos desde la madrugada para no despedirnos nunca dime dime entonces qué pasó

el veneno no está en ella está en cualquier parte del espacio compartido por los vínculos inasibles ríen son ellos los encargados de contrarrestar las ausencias de los días las horas no las encuentran

Veneno puro

siGue su andar este aire participa de un vuelo sin brújula se topa con todo cuando está en su presencia cae se levanta sigue su andar

inerte se lanza contra él quien responde con un doloroso inerte río de emociones en estas circunstancias nadie dejará de sentir el aroma natural de sus cuerpos

CauCe

temporal se congela su imagen a orillas del río piedra con peces alimañas deslizadas en el cauce temporal

oJos en las Gotas

el ímpetu por desaparecer se desvanece entre el ropaje y la lluvia concentra los ojos en las gotas de sudor amargo río abajo por el caño natural creado por las sórdidas largas interminables lluvias de invierno

artifiCios

rompe todos los artificios que la alambrada no pudo contener por allí se fue el agua del río en un hilo sigiloso no es el mismo río de ayer hoy es otro somos el otro

neCesidad de enContrarla

Alguna vez me dijiste: «No soporto este encierro». No sé si es esto una condición para expresarte todas las fantasías por ti, desde la madrugada aquella en la oscuridad te sentí.

Era una silueta con toda la esencia de tu aroma, los rasgos impregnados en el umbral de la puerta dejaste desandar la necesidad de encontrarte.

Regresa para dejar de contener El aire insinuador

sentirse culpable no era su afán besó la tierra mojada cincuenta y dos veces, a la siguiente alborotó sus alas y se fue sólo con su sangre en la fuga.

Con la letra de la CanCión

Solo pensaba en ella con la única posibilidad de [encontrarse con la soledad a cuestas como la consiguió posteriormente la conoció no quiso decirle de dónde vino ni cuántos [hombres realmente estuvieron con ella en la cama de ella o la de ellos pero no dijo [nunca cuántos fueron realmente la canción del Trigo limpio sonó incesantemente «eres como el mar» sonó la repitió todas las veces que quiso ella la tarareó cada vez que sonaba era como hacer un viaje a solas con la letra de la [canción: Eres como el mar Te acercas sí, te alejas sí Preguntar ¿Qué tal? «Me dejas»

él no la soportaba con su cancioncita se despidieron no se abrazaron ni se besaron ni se vieron a los ojos.

quedó tendida

Aspiré el perfume de sus cabellos Rocé su leve cuello con mis labios ansiosos eduardo Serrano orejuela

Ni Carl Jung podrá remediar su desequilibrio [impuesto por su terquedad quedó tendida en la cama después de estrujarle toda su pasión por la piel, durmió toda la noche. No dijo nada al levantarse procuró no decir nada altisonante respiró como cuando se le da a alguien una noticia [aterradora. Se fue no dijo nada sus pasos marcaron el compás de su desesperanza se esfumó entre la calle oscura sola o le acompañó un grillo con su canto mítico y [ensordecedor, pero sí lloró lloró toda su vida después de esa noticia. Nunca se supo qué fue lo que le contaron las viejas que se acercaron ese día por la tarde después de sentirse gratificada por el encuentro [con aquel hombre que tampoco volvió a ver ni a saber de él pero sí lloró toda su vida tanto que en su habitación siempre tenía agua. ...

Su intimidad, su pequeña pertenencia siempre estuvo empapada de su llanto.

leGado azul

Me lo contó Ingrid Orjuela, la periodista, aunque [ella no se acuerda, Llévame a Tarragona, le dijo ella con una voz casi [imperceptible necesito reencontrarme con mis antepasados, en la [calle angosta con el aire medieval, donde siempre es primavera. Necesito estar frente al mar en el templo de espejos, encerrarme en el anfiteatro de tus manos pasearme por el balcón mediterráneo con el más [antiguo de los sabores de Tarraco necesito llegar a tú península con los vestigios [de los hierros forjados en los gladiadores del siglo iii antes de Cristo derrámame su playa azul en el ocaso de mi [civilización tu legado.

fraGmentaCión entre sombras

Donde el viento de primavera Entristece todas las despedidas antonio colinaS

La echaron de la habitación donde pernoctaba hacía [tiempo atrás habría de estar con sus recuerdos ella ese día para [comprender su hazaña frente a los desencuentros con las alimañas de sus reparos sagrados.

Entonces entró en la interminable quietud de las aguas entrecortadas en los logos de Heidegger, quebrado entre sombras, rodeó su historia en un instante, Cambió de parecer al comprobar la ausencia de los secretos.

el andar de los sonidos

En esta mañana de desencuentros, en el andar del sonido se deja esa sonoridad y la palabra entre oscuros claros brillos reprueban el nacimiento del día.

Con la liviandad no le dejes sola búscala, dale la mano.

tu mediodía

Estás conmigo veo tu imagen y te reconozco en ella, no pasará mucho tiempo para tener todo bajo control. Vuélvete el zumbido de la cigarra, penetra en el viaje, desaparece a lo lejos, ilumina la distancia de ella con sus hijos.

entre los residuos

Desata la imagen desde la instancia con los caminos [de siempre mañana tarde noche el pensamiento mantiene incólume, las nubes no contestan al llamado. Deja la máscara deslizarse por los rostros. más gesto que palabra el retozo de ella no calma el desatino hierático del cíclope márcala, trasládala reinvéntala para los que vienen, conviértela en la historia única con el más íntimo racimo de verdades.

alGunos no saben lo que le suCedió

Cansada se reclinó en la noche y por la mañana la llamaron como de costumbre no contestó no dijo nada ni palabra alguna amaneció tal cual estaba en la noche anterior.

peCaminosa

La palabra confusa no tiene cabida en esta caótica [certeza de encontrarla con la expectante quimera, antiguas querencias al filo de la inconciencia marca la puerta con el compás rutinario, sigilosa entra en lo más profundo de las entrañas de los [juegos furtivos.

el otro enCuentro

Un pedazo de la vida de ella se quedó en aquel mundo mínimo casi que inframundo de alquitranes, como mínimo es el entusiasmo de los que habitan en las entrañas. De las soledades iracundas ráfagas de harapos perpetrados por la ignominia de los desafueros incólumes.

Ella no dijo nada le sacaron toda su vestidura, la desearon todos los que la vieron desnuda en la callecita aquella de luz opaca. La dejaron sola tendida en el piso nadie vio por ella. Amaneció, el sol la acompañó.

la Última hazaña de ella

Imágenes de vidrio…

Ni la mesa de juego…

Muecas horribles….

juan SáncHez Peláez

Cuéntale de los devaneos de él con ella en la habitación a oscuras, cuéntale de las impericias que confrontaron los dos. Cuéntale de sus cuitas, cuéntale por amor de Dios pero cuéntale de verdad.

CróniCa de un amor Crónica de amor perdido 9, Gira la mirada 10, Juegos trastocados 11,Veneno puro 12, Sigue su andar 13, Inerte 14, Cauce temporal 15, Ojos en las gotas 16, Artificios 17, Piernas del ave oscura 18, El agua de ella 19, Cardón adentro 20, El caño temporal 21, Se detiene el frío 22, El tiempo del poeta 23, Signos trazados 24, Sus ausencias 25, Parca 26, Últimos colores 27, Norte, sur, este y oeste 28, Otear 30, Crónicas de los demás 31, Camina y piensa 32, Alambique y aguardiente 33, Una costumbre al menos 34, Su fatiga y su andar 35, Sudores con colores 36, Una ausencia, una memoria 37, Su vestido 38, El recuadro 39, Imperfecciones 40, Oscuridad del ángel 41, La historia aquella 42, Solos en la casa antigua 43, Sed en la memoria 44, Voluntad geométrica 45, Aun luminosas 46, Los demonios desandan 47, Su voz en el fuego 48, Años transcurridos 49, Comisura 50, Siempre 51, Su mirada 52, Nada 53, Cuitas 54, La criatura de ella 55.

los reCodos en la raíz Los recodos en la raíz 59, Quisiera ella que mañana surtiera un efecto 60, Nadie cuenta de sí 61, Desventura nocturnal 62, Imagen colosal 63, Así es la vida 64, Historia incontable 65, Descomunal proeza 66, Solicitud de un abrazo 67, Agua tibia para calmar las precariedades 68, Necesitará de él 69, Larga la espera 70, Vestida de negro 71, Su cuerpo de siempre 72, Temeraria excitación 73, Recónditas faenas 74, Ecuánime 75, Cansancio de la madrugada 76, Su paisaje interior 77, Penélope Cruz 78, Necesidad de encontrarla 79, Con la letra de la canción 80, Quedó

tendida 81, Legado azul 83, Fragmentación entre sombras 84, El andar de los sonidos 85, Tu mediodía 86, Entre los residuos 87, Algunos no saben lo que le sucedió 88, Pecaminosa 89, El otro encuentro 90, La última hazaña de ella 91.

imPrimátur

Crónica de un amor cuyo autor es joSé ygnacio ocHoa se terminó de imprimir durante el mes de Noviembre de 2014. Labrado con la ayuda de Dios para el cual se usó papel Bond. En su alzadura se emplearon Tipos Book Antiqua de 9 a 10 puntos y Garamond de 14 a 18 puntos.

Edición de 500 ejemplares