Poemas de memoria - Juan Cameron

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POEMAS DE MEMORIA

JUAN CAMERON

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Juan Cameron

POEMAS DE MEMORIA

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Poemas de memoria Juan Cameron

Montecristo Cartonero 2017 Diagramación a cargo de Juan Cifuentes Diseño por Juan Cifuentes Ilustración: “Serie Cerebro, Invierno”, Igor Morski, 2010 Impreso en los talleres de Montecristo Cartonero Corregidor Fernando de Alvarado 8, Hacienda Los Fundadores, Chillán Viejo, Chile Esta obra está licenciada bajo la Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.

Se permite la reproducción parcial o total de la obra sin fines de lucro y con autorización previa del autor.

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POEMAS DE MEMORIA

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"Mi tĂşnica y mis palabras son simples como la fabricaciĂłn del vino"

Cristian Cruz

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RAYUELA

Sobre el recuadro de Facebook juego al gato con antiguos amores A veces me recuerdan su aroma con gestos misteriosos o el lenguaje secreto A veces se arrinconan temerosas tal si acaso quisieran aflorar desde ese mundo virtual de la memoria En ese cuadro de Facebook a la izquierda donde sueĂąo juntarlas se ocultan en sus fotos de portada.

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MEMORIA

Como un río en el trópico con palabras enfrente con ojos que sonríen y el agua que suaviza como curva en la espalda y la piel asomada como una bandada de peces a distancia Como un río colgado del trapecio del tiempo como vista fugaz hacia el nidal de pájaros como una tarde simple echada en las arenas como adioses de voces que se cruzan Como así la distancia.

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DESEMBARCO

En mis sueños ocurren desembarcos sobre un muelle feroz sobre las aguas las playas reúnen elementos que no reconozco el mar retiene caminos en silencio puentes sin sentido si no tienes los planos necesarios Yo no leo los sueños no me leo a mí mismo sólo observo vehículos colores más bien sordos un movimiento inútil hacia ninguna parte.

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UNA TAREA

Fue acertado acercarme a ti y preguntarte por algo algún trámite, alguna dirección hace ya veinte años Tal vez andaba tras tus pasos sin saberlo o era acaso un agente secreto cuyo encargo era deshacerse de mí vinculándome a tu historia De todas formas cumplí con la misión o tú con la tuya, acaso. Me pregunto si aquel formulario no me hubiese servido si no hubiera bajado la escalara justo cuando subías levemente tus ojos si acaso no aceptara leer junto al poeta en ese bar si tal vez septiembre en otro mes habría sido o tal vez un feriado No me arrepiento de nada de haberme emborrachado de comernos las flores de perdernos chocando entre los autos en la puerta del bar de no habernos ido juntos esa noche Fue acertado también buscarte a ciegas y hallarte en esa casa sobre una esquina arriba donde aquella esperaba tus brazos para alzarla.

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EDADES

En esa imagen quien grita y pide socorro escandalosamente en la puerta a la avenida es Adelaida a sus treinta y ocho El tío Arturo carga setenta al afirmarse en el marco de entrada con gesto de dolor setenta su cadáver sobre el catre con el rostro ligeramente a la derecha La tía Adelaida sigue gritando estrepitosamente ahora de viuda y su dolor quiebra la infancia Tengo la edad de mis nietos cuando voy con Arturo de la mano por la calle arrasada en el incendio de mil novecientos cincuenta y tresEstoy solo, Almirante, gimotea un bombero -un chorro ya sin fuerzas sobre un prado chamuscadoMi madre no cumple los veintiocho en el retrato sobre ese banco verde y al lado mis hermanas Su traje sastre y triste atraviesa el verano Ese año la mayor ya de siete aúlla entre los gritos de mi padre y la tía que la tiran y disputan cada uno de un brazo en el patio del colegio Los gritos fijan su imagen de blanco delantal con orlas en los hombros sobre un jersey verde y falda larga y zapatos por cierto de charol Mi padre es menor que yo cuando sé de su muerte allá en la América del Sur y es verano en mi tierra Mi abuelo Hugo tenía mi edad al despedirse poco antes del golpe de Estado y era un hombre tranquilo y bueno El tiempo es relativo A la edad del menor yo andaba aún perdido por el mundo 13


entre un almanaque y otro sin conocer de fechas ni de plazos ni de otra esperanza (tenía seis cuando volé moqueando vía San Pablo) mássoy menor que el mayor quien vive en Estocolmo al cumplir mis cuarenta en un bar de Estocolmo He regresado de todos los lugares de todos los calendarios de algunos álbumes fotográficos Mis bibliotecas naufragaron en casa de las viudas y llevo la imagen de aquellos siempre mayores y de los menores por cierto mayores de aquellos cuyos rostros son uno en la memoria de los tiempos Y esta vida recién comienza tengo sueños aventuras a emprender algunos trazos del camino viajes sin iniciar y un cuaderno de notas Hoy no recorro las fotos olvidadas quizá en ninguna parte «Las mujeres que amé o que me amaron frisan la cuarentena» dice el poeta Gabriel Chávez Casazola Las mujeres que amé o que me amaron ya no frisan, le respondo con mi letra de niño.

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ENCUENTRO EN PANAMÁ

Ella venía de Colombia Al padre desmembrado arrojado a la puerta lo remendó su esposa y repartió a los hijos La finca cambió patrones de yuca y cafetal a pura coca el sembradío La patria fue muy pronto un mal recuerdo Él llegó a bordo de un velero de un capitán suicida fugado de El Callao que rescató de pobre desde Valparaíso Dirán que son burgueses que la tierra es de quien la trabaja que son aventureros de paso como un lema rayado en las arenas Hoy sus hijas son fuertes son hermosas y florecen el puente que une los océanos y el continente aparte Quizá esta antigua historia hoy se conozca poco así la poesía Pero el mundo es redondo como el tiempo que todo remienda al cruzar el olvido.

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LA BALADA DEL POBRE ESPELEÓLOGO

La calle germinaba de voces y banderas Yo me iba buscando la raíz y la roca mientras más escarbaba me acechaban las sombras de los otros sus gritos aplacados de a poco por cada nuevo trazo en la epidermis me olvidaron Los árboles desde aquí suben al cielo me decía mientras bajaba en busca del germen de las cosas A poquísimos pasos ya no había señal de los no cultivados apenas sus patadas sobre la superficie o el berrinche de unos pocos hocicos aún hozando en el barro Me introduje en la piedra Ni fracturas ni heridas me lo hicieron difícil ascendía hacia abajo por el río perdido donde el tiempo descansa entre bosques de piedra y sombras verdaderas

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CONSULTA

No es fácil preguntarse en este día -en cualquier momento de este díaque hago aquí sentado en una mesa del café o en el banco de algún supermercado en medio del camino hacia la nada mientras rayo el cuaderno como un viejo recurso para hablar de aqueste paso o el hecho de cantar para una muchedumbre vocinglera muda sin miradas Qué hago me pregunto con un carro de compras y un paquete si afuera está nublado.

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HOTEL DE PASO

Toqué también el cielo en un hotel de paso mas en la Villa Olímpica di mi vuelta de triunfo y alcancé la derrota Dicho sea de paso los novios de mis novias suelen romper mis textos libros autografiados e incluso algún epígrafe tatuado contra la piel Cúidate poeta de futuros amantes cúidate de los furiosos amantes son como US Army en Museo de Bagdag como tropa de Israel en el cedro de El Líbano Así rayé tu piel en un hotel de paso y aunque perdí la vida por tal delicadeza también perdí la poesía esa que hablaba de sus piernas de la razón de la mañana a manos de algún bárbaro que asaltaba tu cielo.

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IMITACIĂ“N DE JOAN MANUEL SERRAT

La mujer de mi amigo no tiene prisa; ella sirve los tragos risa tras risa. La mujer de mi amigo no tiene apuro ni ha de comerse el pan cuando estĂŠ duro. La mujer de mi amigo es como un pozo, en el fondo de aquella mira su esposo. La mujer de mi amigo, no se equivoque, tras su sombra radiante brilla un estoque. La mujer de mi amigo no es casquivana aunque sus ojos prendan como ventana. La mujer de mi amigo es muy generosa. No se confunda usted con otra cosa.

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CARPE DIEM

No temas cantar a una puesta de sol ni alzar la voz de pronto si una dama te induce No temas leer a Shakespeare en el inglĂŠs de entonces ni desanimes frente a un texto de Benjamin No temas traducir la balada de Goldsmith ni arreglar el jardĂ­n en la tarde de junio No temas proseguir esta hermosa pendiente cuyo vuelo te llama a impulsar los talones y cantar otra vez a una puesta de sol.

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MUERTE SÚBITA

Entre tus muslos así una multitud en el estadio un gran signo de admiración y yo y mi pobre Lázaro jadeantes sobre el césped intentamos volar y alzándonos al cielo me revuelco en tus redes cuando ya derrotado en tiempo extra te ovaciono.

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DESPEDIMIENTO DEL OTRO «...Valió la pena el sacrificio, valió la pena abandonar la apuesta de la acción para entregarle la vida/ a la inutilidad de la poesía» Marco Antonio Campos

¿Y qué si el otro hubiera sido ministro de la Corte, calvo, obeso acosador de actuarias por pasillos pero buen ciudadano al fin y al cabo, católico, honesto, medio pelo? Mas elegiste a éste al no integrado el de la risa clara al buen viajero ordenado a su modo el descreído y no hay ya modo de inflexión no hay punto de retorno No estrecharás a mano del antiguo que a veces en los sueños te remece: ¡Fracasado! Te agrega pobretón y sonríe con su rostro retorcido.

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ESAS BELLAS

Las bellas que no amé, las que me amaron quienes nunca supieron ser deseadas y aunque pudiendo serlo lo callaron tras el párpado oculta la mirada y ciegas de ese modo fueron brisas sobre esta piel que pronto se olvidara de volver cuando el siglo se desliza sin prisa hacia el final de la jornada Mas aquellas amadas siguen vivas y alegres más que alegres glamorosas olorosas también por anheladas florecientes flotantes esas vagas figuras y de aquellas más queridas construí tras sus ruinas esta fosa.

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MESERA

La cafetera humeaba hacia la leche y el vapor de la tarde se mecía en la música que el cajero observaba en la TV El café era caliente y la tarde aún más cálida y sobre el posavasos dormitaba un cuchillo

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LOS AMIGOS

Lentamente se esfuman los amigos sus tarjetas agotan las llamadas y hay un silencio grande en la pantalla Se gastan los hermanos con el tiempo alguna causa extraña difumina o alguien pulsa la tecla de su nombre Los demás ya se entiende son los muertos y quedan sin consuelo sus miradas susurrándonosallá siempre a lo lejos Borrarlos con la técnica presente como llenar la historia de la nada como cruces de un campo desolado cuando ya ni sus nombres te reclaman.

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NUEVA YORK 11

Esta imagen pertenece al Pabellón de Suicidas: una mesa al entrar al bar de La Unión Chica Nueva York número 11 cuya cifra replica a las Torres Gemelas Ese de espaldas acodado hacia un lado ese de la chaqueta es el poetaTeillier detenido en esta tierra bajo el sol viñamarino De insondable belleza vemos al chico Cárdenas muerto de pura pena cuando partió la Nana y esa a la izquierda en primera línea blanqueada y ya sin flash es Ximena Adriazola ahorcada en Olmué o en uno de esos pueblos a comienzos del 14 (tenía 83) El que ríe torcido tal si buscara un lápiz desde un bolsillo oculto por la mesa ese a ese no voy a nombrarlo por si acaso quisiera escribir este poema este poema que no es un poema sino el llanto de un cachalote que busca su manada A muchas millas náuticas detenido en la foto se mueve a una velocidad inversamente proporcional a una luz que existe en la inconmensurable longitud del tiempo.

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ÍNDICE Rayuela Memoria Desembarco Una tarea Edades Encuentro en Panamá La balada del pobre espeleólogo Consulta Hotel de paso Imitación de Joan Manuel Serrat Carpe Diem Muerte súbita Despedimiento del otro Esas bellas Meseras Los amigos Nueva York 11

09 10 11 12 13 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26

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JUAN CAMERON (Valparaíso, 1947 - ) Ha publicado entre otros Perro de circo (1979), Cámara oscura (1985), Como un ave migratoria en la jaula de Fénix, Rusadir, Melilla, España, 1992, Jugar con la palabra, (antología, 2000), Treinta poemas para leer antes del último jueves (Costa Rica, 2007), Ciudadano discontinuado (México, 2013), Bitácora y otras cuestiones (Ecuador, 2014) y Fragmentos de un cuaderno con vista al mar (España, 2015). Es autor, además, de las crónicas Ascensores de Valparaíso (1999, 2002 y 2007) y Beethoven, el yogurt y nuestros años felices (Estocolmo, 2010). Figura en numerosas antologías de poesía chilena tanto en su país como en el extranjero. Ha obtenido entre otros galardones el Premio Federación de Estudiantes de Chile (1972), Premio Gabriela Mistral (Municipalidad de Santiago, 1982), Premio Revista de Libros de El Mercurio (1996), Premio Villanueva de la Cañada (España, 1997), Premio del Consejo Nacional del Libro y la Lectura (1999), Premio Ciudad de Alajuela (Costa Rica, 2004), Premio Paralelo 0 (Quito, 2014) y Premio Pilar Fernández Labrador (Salamanca, España, 2015).

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POEMAS DE MEMORIA Juan Cameron

Se terminĂł de imprimir en el mes de Abril del 2017 En los talleres de Editorial Montecristo Cartonero

Tiraje segĂşn demanda

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EDITORIAL MONTECRISTO CARTONERO ESTÁ COMPROMETIDA CON EL DESARROLLO LIBRE DEL ESPÍRITU, LA CULTURA Y EL CONOCIMIENTO DEL SER HUMANO COMO VALUARTES DE NUESTRA SOCIEDAD. CADA LIBRO PUBLICADO POR NUESTRA EDITORIAL ES EN SÍ UNA OBRA DE ARTE CUYO TRABAJO ES MANTENER VIVA LA LLAMA DE LA SABIDURÍA.

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COLECCIÓN MONTECRISTO VERANO 2017

1- EL ATAÚD Juan Pablo Cifuentes

2- EL ÚLTIMO QU MUERA QUE APAGUE LA LUZ Juan Pablo Cifuentes

3- TERESA Rosario Orrego

4- LOS PÁJAROS HUYERON DEL NIDO Los Señores Anónimos

5- DIARIO DEL PRIMER VIAJE Y OTRAS CARTAS Cristóbal Colón

6- TITIVILUS Héctor Navarro Cabello

7- EL MAESTRO Y LAS MAGAS Alejandro Jodorowski

8- REVOLUCIÓN EN CHILE Sillie Utternut

9- TRISTÁN E ISOLDA Richard Wagner

10- WABI-SABI Miriam Leiva Garrido

11- KARUKINKA Relato de los selk´nam

12- CANTAR DE LOS CANTARES Salomón

13- CANTO A MI MISMO Walt Whitman

14- BICHO RARO José Luis Escobar

15- EL EVANGELIO AMERICANO Francisco Bilbao

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COLECCIÓN MONTECRISTO VERANO 2017

16- BESTIA DAÑINA Marta Brunet

17- CANTO DEL MACHO CABRÍO Pablo de Rokha

18- EL CARTÓGRAFO: EL BARRIO DE LA GENTE MEDIANA Christian Gutiérrez

19- CLORODIAXEPÓXIDO Jorge Etcheverry

20- RELATOS DE INSANIA Daniela Páez Rueda

21- UNA NOCHE PINTADA EN LA ROCA Lila Calderón

22- SURCOS DE VENDAVAL Catalina Potocnjak

23- LA REINA DE RAPA NUI Pedro Prado

24- EL CURIOSO CASO DE BENJAMIN BUTTON F. Scott Fitzgerald

25- FUERA DE TIEMPO Lilian Elphick

26- DEL CUERPO DE TODAS Amanda Varín

27- MALDIGO EL PARAÍSO DE TU ABANDONO Margarita Bustos Castillo

28- EL FLAUTISTA DE HAMELIN Robert Browning

29- LOS LADRONES DE CADÁVERES Robert Louis Stevenson

30- BOLA DE SEBO

Guy de Maupassant

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COLECCIÓN MONTECRISTO VERANO 2017

31- CIUDAD PROHIBIDA Claudia Vila Molina

32- LA FAMILIA VURDALAK Aleksei Konstantínovich Tolstoi

33- EL EMISARIO SECRETO Jorge Calvo

34- MAL AGESTÁ MALA GESTA MAL GESTÁ Ingrid Escobar

35- HISTORIA DE UN MUERTO CONTADA POR EL MISMO Alejandro Dumas

36- MOSCA PULGA EN EL OÌDO Claudia Readi Silva

37- LA MUJER LOBO Frederick Marryat

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¿Cómo configurar los artilugios de la memoria que van y vienen como las olas para situarlos dentro de un punto fijo recordando cada instante como si se viviera nuevamente? Una labor destinada para aquellos que han encontrado en la palabra la virtud bajo la cual los recuerdos transitan entre las páginas. Juan Cameron es uno de los escritores fundamentales para entender la poesía chilena de la década del ochenta hasta la actualidad. Sus versos deambulan con el olor a los cerros y la brisa marina que se entremezclan para ir generando un espacio literario imprescindible, inquietante que incita al lector a una lectura vertiginosa y honesta. Poemas de memoria es un poemario en el cual el vate nos invita a convivir con los recuerdos, con la ilusión de encontrar tras los versos aquellas instancias bajo las cuales la memoria recopila esos pequeños instantes de felicidad.

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