SOLO LO QUE ME GUSTA EXISTE
GIOVANNI ASTENGO
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Giovanni Astengo
SOLO LO QUE ME GUSTA EXISTE
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Solo lo que me gusta Giovanni Astengo
existe
Montecristo Cartonero 2017 Diagramación a cargo de Juan Cifuentes Diseño por Juan Cifuentes Pintura portada: GI4, Tomasz Alen Kopera, 2014. Impreso en los talleres de Montecristo Cartonero Corregidor Fernando de Alvarado 8, Hacienda Los Fundadores, Chillán Viejo, Chile Esta obra está licenciada bajo la Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.
Se permite la reproducción parcial o total de la obra sin fines de lucro y con autorización previa del autor.
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SOLO LO QUE ME GUSTA EXISTE
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De: La morada irreal, Mago editores, 2006, Ed, Bordes, 2016.
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LA SILLA
A quién espera esa silla, a quién sueñan los libros a qué manos. Pasan los días y a los días sólo lo alumbran dos velas. No vendrá Gauguin y a cambio de él los cuervos silentes auguran algo de eternidad en los fragmentos y detalles donde quisiera estar soñando sentado sobre una espera: En la visión de las visiones.
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CORREO A DESTIEMPO a Nury Álvarez
Camino por los charcos de agua de la calle impresionista que me dejaste como un paso al otro mundo. Así como Alicia así de esa edad te quedaste en mi memoria hasta que nos veamos en el bello país de las maravillas y pienso en una calle de Mallorca el metro de Santiago el café Can Toni y en bandas de blues. Nury tú sabes que la poesía disipa toda geografía y ahora que la cruz del sur nos vigila y es tarde nos encontramos. Nury me enviaste un poema de Li Po cuando en España era invierno y caía la nieve y no pudo ser porque nadie recoge los frutos del árbol que nadie riega. Te quedas de esa edad como Alicia para siempre. Desde el otro lado los espejos nos asaltan.
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AL OÍDO DE JAVIERA Instante fugaz, detente. ¡Eres tan hermoso! J.W. Göethe
Las manecillas del reloj te distraen En un juego más precioso que el mismo tiempo y por qué no más preciso también como si de una luz anterior al desorden luego tu imitaras a la luz reinventándola antes de lo lúdico apagándose en otro juego hecho a la medida de las manecillas girando y girando lejos de un orden fiel al universo que tú ahora ordenas en tus ojos fijos a la medida del amor.
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De: Cuartos de motel, 2008, Mago editores
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LENGUA ASTRAL –Motel Marín–
I … esa es la figura de la sacerdotisa la que ya no lee porque lee para dentro la que tiene el libro en la mano no la que besa o se deja besar, sino la que espera con el libro / en la sien… _Es un poco de Tarot_ Otra vez se introyecta en mí pétalo a pétalo desordena el cauce aleatorio de las cosas / se espuma –estalla como río/ la (Muy) rompiente– / y se vuelve tráfico de influencias Incienso aroma sándalo y café de granos: Narrar su bitácora / sería hundirme de mismidad, besar –valga la repetición– / mis labios y en el espejo ella en su doble vida de gata lamiéndose el pelaje, contorsiona el ámbito de intriga / y seduce
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citando a Perec, Millรกn y algo de estallidos, los pistilos / para las flores como la lengua para nosotros son รณrganos inoperantes, / trampas en los puzzles exequias del verbo y del barro/ cartas de desalojo y embargo.
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III
La lengua dista mucho de ser órgano de consumo –de hecho las prostitutas no besan– la lengua reviste un bien raíz devaluado una verdadera lengua entra húmeda a otra boca y sale verdaderamente seca como un reptil. Ora/ versifica/ habla en quiebros la pedestre Lengua viva o muerta. / Pero el beso es otra cosa: El beso asume un lenguaje de ciegos / Palpando apenas la oscuridad que somos.
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A MODO DE DEDICATORIA
Semejante a mí mismo frente a un espejo pongo este ejercicio a todas tus disposiciones con todos sus malabares y unas cuantas gotas de rocío que de mis manos resbalan. Por ti y por mí ejercer oficio –estos malabares– por mí y por ti –y otras cuantas mujeres que cruzaron y cerraron esas puertas– cada una un eslabón más a lo terrible de estos puzzles, como si el analista consignara demonios en su libreta y yo solo frente a un espejo besándome los labios saltara de un pozo a otro pozo –en sueños– pero ya sin esa herida en el costado.
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PUZZLE 1
Casa de signos aleatorios cifrados desde niño, el reloj tic-tac, la válvula de un escape imaginario y a pulso –y de pulsiones expuestas– letras opacas como el ciego frente al sistema escritural/ el tacto donde la muerte es el techo. Exhausto recorro la zona oblonga / de un universo en el cielorraso en una pieza con papeles y libros tirados –también tatuados– como animal tras la presa, el regocijo del amante que ha hecho bien el trabajo y fuma –como rito– y mira de reojo la sábana / colgada en el patio/ la correlación absoluta entre un búfalo pintado en la / piedra y un búfalo desgarrado por sus propios dientes.
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PÉTALOS ROJOS SOBRE LA CAMA –Motel Bordeux–
Se introyecta en mí, pétalo a pétalo como parásito y de saberlo esgrime palabras opacas, duras y ultra-usadas como Amor Guerra Hambre Dios y Ecología –La mayúscula masculla como agravia– Pero duerme tranquila, en fin sus sueños son sus sueños, y éstos mis pasiones más bajas después un texto de Marcial susurrándole al oído soy su verdugo –es una forma de decir– su cónsul de esa lejanía, la ínsula que somos expropiado lenguaje –un decir al fin– no dice nada En Fin.
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EN FIN –Motel Carmen 111–
Ni virtud ni belleza sólo necedad, la vida es un acuario el detalle nimio de un cuarto me asquea, tanto como la ley de la vida y la sedentaria eficacia de la costumbre de nombrarnos y hacernos Uno –esta agonía de ser Dos– Víctimas de todo orgullo razón y des-patria.
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CASA DE LOS SIGNOS Firmas en blanco. Al rubricar borras todo lo escrito antes arriba, de atrás para adelante. Gonzalo Millán
Tan sólo un recuerdo vívido, casi un año y el más allá que es la opacidad de un lenguaje que simula –pero a la vez estimula el corpus– Y hace que aparezca algo donde la vida era eriazo, una mujer con mil lenguas de fuego que salen de sus cabellos
y torres de libros marcados por un supuesto intertexto no visible, pero que expele como late la praxis de lo inevitable.
Sacar la hoja de la hojarasca de los días Así violar la sintaxis no es respuesta1 ni para la infancia ni el dolor ni el desgaste de un día a día a tablero vuelto en las loterías de la vida puede ser que hable más de la cuenta de lo que falta lo que so-sobra/ en mi lengua expuesta tartamudea el aire el resto es demasiada literatura y nos altera cae con violencia como un durazno del árbol viejo sobre la cabeza sangrante, mas lo que arriba del alma y se abre por el cuerpo a modo de estallido te clava, ya se habló de pulsiones– de vida y muerte– ya se habló de este gesto, de esta herida de la sombra –siempre más grande que nosotros– /que nos define y consuela la semilla, el gusano, los duelos y la grieta que (aún) somos. / Verbo y Barro. repetidos al cansancio 1 Sergio Saldes, en Caja de música
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YA SEA TARDANZA/ YA SEA TEMPLANZA Carta de Amor ¿Qué sacas con llorar mujer sobre tu mejilla marcada? Cuando la tardanza húmeda de tu cama aún no te naufraga y sobre la mesa aún esperan uvas y naranjas / naturalezas muertas sobre el blanco que alguien soñó por nosotros y ese fuego tuyo encendido como antiguas fogatas ilumina por fin las noches sin luna para cuando la tardanza sea (Porque no, y también) / templanza y tu duelo sea mi duelo y tu amor mi amor recogido de esas mareas de otros tiempos / cruzando con mercancías de especies en barcos ebrios los océanos color turquesa. Búscame entonces entre los huesos que aún brillan y datan de siglos perdidos de no vernos / sobre esta tierra –aún– encendida.
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De: Sección de objetos perdidos, Ed. Raíz, 2014
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Los ves soñando un sitio donde encontrarse Como en un espejo las cosas que perdimos en lugares públicos ya no son nuestras solo algo que dos empleados archivan y clasifican Por ejemplo, la idea del amor se quedó allí en un anillo un reloj o un mapa de Santiago y nadie jamás reclamará por ellas Así la muerte siempre avanza unos pasos por anticipado.
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Los empleados de la sección aquella vez lloraron no había nombres no había marcas ni lugares fue como tener el amor entre sus manos -el amor que para ellos había sido esquivoDonde hubo piel hubo amor –pensaronAunque eso dure un instante y nada más. Lo olieron, lo rozaron, lo vivieron. Sin importar las cámaras de seguridad lamieron el calzón de la muchacha el aroma de su sexo pasó / como pasa todo Después lo guardaron y archivaron y nadie hizo reclamo.
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Perdieron su alma los infames de la sección ¿Dónde ponemos esto? ¿Qué hacemos? clasificaciones de ese orden no se registran. Salieron a la calle a fumar Mover las piernas respirar un poco. Salir, fumar, mover, respirar: Reflejos automáticos de cuerpos inertes.
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(ÂżWhoisthisgirl?) Solo porque ella existe a la misma hora hay santos en las parroquias y bebedores en las tabernas.
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ESCRITO EN LA PLAYA
¿Acaso hay algo más que eso? Un como en un cuando, un punto suspendido en el tiempo. /Y recuerde que un día mi padre me desordenaba el cabello suavemente / el amor roza, a veces ¿ Acaso, algo más importa? No hay tiempo, no hay destino, ni retorno Tan sólo la brisa del mar una tarde en Santo Domingo / el amor roza, a veces Unas hojas en la hierba o una mujer que pasa / el amor, a veces, sólo roza. Una lágrima y dos calas sobre la tumba de los abuelos / el amor que a veces, solo es rosa y pasa.
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ÍNDICE La silla Correo a destiempo Al oído de Javiera Lengua austral A modo de dedicatoria Puzzle 1 Pétalos rojos sobre la cama En fin Casa de los signos Ya sea tardanza/ ya sea templanza Los ves soñando un sitio 6 7 (¿Whoisthigirl?) Escrito en la playa
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GIOVANNI ASTENGO M. (Santiago de Chile, 1972 - ) Poeta,. Colabora en Carajo!, Revista de Literatura Hispanoamericana. Su obra ha sido recopilada en diferentes revistas y libros, entre los que destacan: Onomatopeya: Lecturas de poesía (2010), Al fin del
mundo:
Antología
del
VI
Encuentro
Internacional de poesía del Valle de Colchagua (2010), Estafeta del viento (2011) Ohne Lied: Gedichte von Gewalt (Leipzig,Alemania2013). Ha publicado: Anteayeres (1999), La morada irreal (Mago editores,2006), Cuartos de motel (Mago editores,2008), Puzzles (2011), Sección de objetos perdidos (2014, Ed. Raíz). La morada irreal (Nueva edición, ed. Bordes, 2016)Actualmente trabaja en latrilogía:Soñé estos poemas.
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Solo lo que me gusta existe Giovanni Astengo
Se terminó de diseñar en el mes de mayo del 2017 En los talleres de Editorial Montecristo Cartonero
Tiraje según demanda
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EDITORIAL MONTECRISTO CARTONERO ESTÁ COMPROMETIDA CON EL DESARROLLO LIBRE DEL ESPÍRITU, LA CULTURA Y EL CONOCIMIENTO DEL SER HUMANO COMO BALUARTES DE NUESTRA SOCIEDAD. CADA LIBRO PUBLICADO POR NUESTRA EDITORIAL ES EN SÍ UNA OBRA DE ARTE CUYO TRABAJO ES MANTENER VIVA LA LLAMA DE LA SABIDURÍA.
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COLECCIÓN MONTECRISTO VERANO 2017
1- EL ATAÚD
Juan Pablo Cifuentes
2- EL ÚLTIMO QU MUERA QUE APAGUE LA LUZ Juan Pablo Cifuentes
3- TERESA
Rosario Orrego
4- LOS PÁJAROS HUYERON DEL NIDO Los Señores Anónimos
5- DIARIO DEL PRIMER VIAJE Y OTRAS CARTAS Cristóbal Colón
6- TITIVILUS
Héctor Navarro Cabello
7- EL MAESTRO Y LAS MAGAS Alejandro Jodorowski
8- REVOLUCIÓN EN CHILE Sillie Utternut
9- TRISTÁN E ISOLDA Richard Wagner
10- WABI-SABI
Miriam Leiva Garrido
11- KARUKINKA
Relato de los selk´nam
12- CANTAR DE LOS CANTARES Salomón
13- CANTO A MI MISMO Walt Whitman
14- BICHO RARO
José Luis Escobar
15- EL EVANGELIO AMERICANO Francisco Bilbao
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COLECCIÓN MONTECRISTO VERANO 2017
16- BESTIA DAÑINA Marta Brunet
17- CANTO DEL MACHO CABRÍO Pablo de Rokha
18- EL CARTÓGRAFO: EL BARRIO DE LA GENTE MEDIANA Christian Gutiérrez
19- CLORODIAXEPÓXIDO Jorge Etcheverry
20- RELATOS DE INSANIA Daniela Páez Rueda
21- UNA NOCHE PINTADA EN LA ROCA Lila Calderón
22- SURCOS DE VENDAVAL Catalina Potocnjak
23- LA REINA DE RAPA NUI Pedro Prado
24- EL CURIOSO CASO DE BENJAMIN BUTTON F. Scott Fitzgerald
25- FUERA DE TIEMPO Lilian Elphick
26- DEL CUERPO DE TODAS Amanda Varín
27- MALDIGO EL PARAÍSO DE TU ABANDONO Margarita Bustos Castillo
28- EL FLAUTISTA DE HAMELIN Robert Browning
29- LOS LADRONES DE CADÁVERES Robert Louis Stevenson
30- BOLA DE SEBO
Guy de Maupassant
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COLECCIÓN MONTECRISTO VERANO 2017
31- CIUDAD PROHIBIDA Claudia Vila Molina
32- LA FAMILIA VURDALAK
Aleksei Konstantínovich Tolstoi
33- EL EMISARIO SECRETO Jorge Calvo
34- MAL AGESTÁ MALA GESTA MAL GESTÁ Ingrid Escobar
35- HISTORIA DE UN MUERTO CONTADA POR EL MISMO Alejandro Dumas
36-MOSCA PULGA EN EL OÍDO Claudia Readi Silva
37- LA MUJER LOBA Frederick Marryat
38- POEMAS DE MEMORIA Juan Cameron
39- LOS CRÍMENES DE LA RUE MORGUE Edgar Allan Poe
40- TODAS ÍBAMOS A SER REINAS Gabriela Mistral
41- MONUMENTO AL MAR Vicente Huidobro
42- QUEDESHÍM QUEDESHÓT Gonzalo Rojas
43- PINTOR DE VIDRIOS ROTOS Carlos Leiton
44- EL REY RANA Hermanos Grimm
45- POEMAS BESTIALES Milko Cepeda Guerra
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¿De qué forma se puede configurar a un poeta dentro de la vastedad de su universo rotulando sus versos dentro de una otra temática en común? Una misión que implica rasguñar dentro de la subjetividad para establecer qué poemas están por sobre otros a la hora de generar una antología. Giovanni Astengo se enmarca dentro de los poetas que han renovado el ámbito lírico nacional a través de la utilización de un lenguaje cercano, directo, lleno de las sutilezas de la franqueza del verso libre destinado a seducir al lector a través de la palabra. Solo lo que me gusta existe es una breve antología con algunos de los poemas fundamentales para comprender y dimensionar la poesía de Astengo, destinados a buscar la complicidad con el lector.
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