CONVERSANDO ACERCA DE CIENCIA TECNOLOGÍA Y SOCIEDAD Rosa Galvis, Belkys Guzmán y María de Pablos INTRODUCCIÓN El desarrollo de las naciones depende en gran medida de las relaciones que se establecen entre sus miembros, del cómo cuiden y valoren el ambiente y de la calidad de la educación que impartan. Por lo tanto es el hombre el eje central. Tiene el encargo de hacer las demandas pertinentes para que el estado ponga en marcha las propuestas y así impulsar el desarrollo que se desea. Pero ello no se podrá lograr con un hombre sumiso, inculto, egoísta que solamente piense en él. Por el contrario, se requiere un individuo que esté por encima en la pirámide; un ser que tenga las competencias que le permitan alcanzar sus metas y tomar decisiones conscientes a corto, mediano o largo plazo. Decisiones que deberán estar bien fundamentadas y con sustento ético, de tal manera que lo beneficien a él, a sus congéneres y por ende al planeta. En correspondencia con esos deseos es imperante que los ciudadanos se eduquen, conozcan, y valoren los adelantos científicos y tecnológicos que son los que a fin de cuenta, le van ha permitir vivir cómodamente, y con la esperanza, de que en éste tiempo de avances en Ciencia y la Tecnología, se podrán erradicar enfermedades, minimizar los niveles de la pobreza y aumentar el desarrollo socioeconómico del país. Sin embargo, no hay que perder de vista que los alcances tecnológicos y científicos se construyen en torno al hombre y su dignidad como individuo inconfundible y único, pero también son un riesgo prometedor para el hombre con expectativas de satisfacer su curiosidad en búsqueda de sus verdades (Roth, 2000). La Ciencia y la Tecnología son parte del sustrato del mundo de hoy, razón por la cual son considerados promotores del desarrollo. Espacios físicos y geográficos que en otras épocas fueron considerados barreras insalvables y obstáculos para el intercambio de la información entre individuos de diferentes lugares del mundo con culturas e idiomas diferentes, pero con muchos intereses, gustos y problemas en común, son ahora posible con sólo mover los dedos (Roth, 2000). Hoy es posible pasar de una comunidad real a una virtual. Pertenecemos a una sociedad donde a través de una serie de dispositivos, se pueden realizar transacciones bancarias, múltiples compras, buscar información variada en diferentes fuentes, idiomas y en cualquier parte del mundo y todo ello sin movernos de nuestro hogar. Por otro lado están los avances en biotecnología que han permitido al hombre alcanzar logros en la medicina, agricultura, ganadería y la industria; el descubrimiento del código genético y la posibilidad de modificarlo a voluntad para la cura de enfermedades; la clonación, los alimentos transgénicos, la congelación de embriones humanos, los implantes electrónicos entre otras. Algunos de los cuales han sido objeto de mucha controversia por sus alcances, implementación y producción (Medina, 2000). En definitiva vivimos una época caracterizada por el conocimiento, el saber y su difusión; donde los niños que han nacido en ésta era de infotecnología la enfrentan y usan con naturalidad, y donde muchos adultos se sienten abrumados, ya que diariamente, quieran o no, todos están impregnados por estos aires científicos y tecnológicos. El mundo globalizado de hoy sigue su marcha y no nos queda otra que avanzar con él. Como docentes estamos comprometidos con el proceso de cambio. Tenemos la obligación de motorizar e impulsar un desarrollo sustentable que permita el logro del bien común y el alcance de una mejor calidad de vida, con un costo ambiental mínimo. Sabemos que tenemos un arduo trabajo, ya que son muchos los obstáculos que salvar y variados los caminos a seguir, ¡de allí nuestro temor, de allí el sentimiento de incertidumbre que a veces nos embarga!. Día a día nos invaden múltiples interrogantes para las cuales posiblemente no tenemos, ni tendremos respuesta inmediata, pero siempre nos encaminaremos hacia la búsqueda de soluciones que 1