TIEMPO FUERA Fernando Guevara Juliana Dolinsky Curaduría: María Forcada
“Un lugar donde la parte sería más vasta que el todo y el afuera también adentro” E. Grossman
TIEMPO FUERA
J. Derrida para ponernos en contacto con cierta doble faz de los acontecimientos inventa (en su caso a través de la escritura) una forma de sublevación permanente para que el público viva algo que no tenía pensado vivir y para que además lo haga desde la propia lengua y sus límites. Es que para el autor todo es frontera, límite. Tiempo fuera trata de ello en tiempo “real”. Discutiéndolo. Es por eso una muestra que nos propone confrontar el estatuto de los tiempos contemporáneos y su correlato en la imagen. Discute los modos y usos que le damos y se pregunta por los lugares donde ambos circulan. Hoy podemos pensar que vivimos en ese margen de tiempo donde estar y no estar al mismo momento se ha hecho parte de nuestra existencia. Mejor dicho: vivimos ese margen en forma constante. En este sentido ésta es también una muestra de frontera. Una muestra que te propone experimentar el límite a partir
de partes separadas del todo. La obra, el artista, el público cada uno por su lado. Es también una muestra de frontera además por eso de que los artistas que la cargan sobre su espalda son de frontera. Ya sea por lengua, por biografía o por estética y ello resulta en una posición crítica inmejorable ya que esta circunstancia es capaz de poner en cuestión toda autoridad de lo bello en la gestión del arte, como forma de llamar la atención sobre lo que la autoridad foránea o local no está dejando ver o simplemente no quiere ni preguntarse. También como forma de sobrevivir al deseo de arte de cualquier artista de frontera. El límite en el tiempo es a su vez un límite dentro de otro límite, se acerca pero nunca se supera. Siempre marca dos bordes, un estar y un no estar allí. Y siempre recuerda que no elegimos una de las dos opciones o mejor dicho, nos recuerda la que elegimos.
El tiempo. Un dominio que se abre a nuevas vivencias y recorre toda nuestra vida. La realidad más allá de nosotros, traza una geografía mental por encima de nuestra historia, de nuestros territorios, una línea de encuentros y también de desencuentros. Tiempo y frontera tanto entre el mundo posmo, light como entre los restos conservadores o tradicionales, Dolinsky y Guevara hablan esa lengua de frontera de muchos modos. Ellos habitan la megalomanía de los noventa, el desencuentro del colectivismo aparente de las vanguardias pero también el de los individualismos de los colectivos post milenium. Tanto se ve esto en sus biografías como en su voluntad de permanente subversión al hecho estético traducidos en sus tiempos, sus atrevimientos y sus raras colecciones… su actualidad es usar y abusar de la propia imagen…. pero en esta oportunidad ya no para transgredir el sentido del código visual, sino para hacer presente el código temporal, ese que nos hace depreciar/reificar lo que vemos.
Aplica también esta frontera a la posibilidad de confrontar con el sentido de lo imposible ya que no estar en algún lado hace experiencia de ello. Y nos impone una violencia intuida. Esta experiencia se asemeja a la razón nómade que Jean Borreil tematiza para indicar aquello nuevo sin reglas, cambiante. Aquello que no se deja mencionar, ni atrapar, aquello que en ausencia adquiere su sentido concreto. La muestra Aparece como propuesta de exhibición cuando Juliana Dolinsky y Fernando Guevara se plantean unos supuestos que más o menos dicen así. “la imagen actualmente cumple nuevas funciones en nuestra existencia. Lo que miramos y lo que vemos discurre en un tiempo que deja fuera la experiencia de lo real”. Pone en crisis el tiempo en que la imagen es y el que deja de ser, el tiempo en el que se transforma en distracción, el tiempo en que la dejamos transitar por nuestro cuerpo…el tiempo en que transcurre la mirada, el tiempo que nos permitimos mirar… Cuál es el límite que tenemos en lo que vemos? ¿Hacia qué
tiende una cosa? ¿Cuál es el horizonte de lo visual en nuestra actualidad? El tiempo fuera es una hacer político también, un lenguaje del poder que nos opera y con el que operamos. Buscan aquí una estrategia que nos enfrenta con una consecuencia práctica, una real declaración del discurso no sonoro que evidencia toda imagen. Para ello intensifican su densidad, transforman la situación en curso a partir de la experiencia de lo no político, de lo de afuera en #tiempos reales#. Perturbar el privilegio de la imagen… posponer la presencia y estar en el permanente diferido que es el vivo de la trasmisión…perturbar la tradición de la ceremonias del arte… perturbar la propia presencia en el lugar que no es el indicado…Hay decisión justamente allí donde no todo es calculable. Allí, No hay imagen. Hay tiempo. Hoy el sentido se fortalece y se funda en el tiempo. Y el tiempo para el sujeto es una cuestión de elección. La imagen ha cambiado su estatuto, ya no es un asunto del reino de la mirada sino del reino del
tiempo. Más en un mundo donde la ética individualista impera y donde lo compartido sin más, sin contraparte, no encuentra sostén. María Forcada
1: -¿QUÉ ES TIEMPO FUERA?
El asunto no aparece porque sí, ambos artistas vienen trabajando en sus propuestas anteriores las relaciones de la imagen con la esfera de lo público y lo privado. DOLINSKY en 2014 ya decía: “mi objetivo principal es abordar el problema de la representación en la actualidad “y las relaciones que se establecen con los comportamientos de la sociedad y los cambios en nuestra manera de ver y sentir. De ahí la importancia que concederé a las nuevas relaciones que se establecen entre los límites de lo público/privado y ficción/realidad en las prácticas artísticas contemporáneas de Argentina desde el 2001. (1) Lo mismo acerca de las influencias de los medios tecnológicos y el mundo de las redes y la virtualidad en la experimentación de lo sensible, lo bello y el tiempo. GUEVARA: “Si las categorías del espacio y el tiempo se han vuelto relativas (críticas), es porque el carácter absoluto se ha desplazado de la materia a la luz, y sobre todo a su velocidad límite… Estas transformaciones se constatan en nuestra vida diaria, así como en los modos de producción y circulación de prácticas artísticas contemporáneas, donde es posible producir y difundir en un contexto de libre circulación y acceso a la información. La recurrencia a nuevas técnicas -al movimiento-, multiplica las posibilidades de generación de narrativas, donde el artista como productor interviene“. (2)
(1) A partir de un abordaje multidisciplinar que me permita cruzar aspectos sociológicos, psicológicos, estéticos y políticos, tomando autores referentes que trabajan sobre esta problemática; Alan Badiou, Slavoj Zizek y Jean Marie Schaeffer, Jean Louis Comolli, entre otros.” (2) Virilio, Paul. La máquina de la visión. 1994. P. 12. En línea. Pfd Disponible en: http:// www.arteuna.com/talleres/lab/ediciones/libreria/Virilio-Maquinadelavision.pdf
SELECCIÓN JULIANA DOLINSKY
Tiempo fuera es una pausa en el transcurrir del tiempo, un paréntesis para pensar, reorganizarnos y volvernos armar… Existen 4 variantes del tiempo fuera (Wikipedia): • (TF) de aislamiento: consiste en trasladar al sujeto a un lugar menos reforzante. • (TF) de exclusión: el sujeto puede permanecer en el lugar, pero se le niega el acceso al reforzador (tapándole los ojos, por ejemplo). • (TF) de no exclusión: se permite al sujeto permanecer en el lugar pero sin acceder al reforzador, mientras presencia como otros si acceden a él. • (TF) auto-impuesto: el sujeto se somete a si mismo al tiempo fuera a fin de evitar confrontaciones.
SELECCIÓN DE FERNANDO GUEVARA
Internet supera las barreras tradicionales del espacio-tiempo, reconfigurando su sentido, derivando en la instantaneidad y la deslocalización del espacio. El tiempo es un agente globalizador que afecta todos los ámbitos de nuestra existencia produciendo un modo diferente de experimentar la cultura. Hoy en día nos encontramos ante unas prácticas que podemos denominar artísticas, aunque no tengan que ver con la producción de objetos particulares, sino con la circulación de efectos simbólicos, de significados o afectivos que ya no tiene que ver con la representación ni con una materialidad. Se genera un desplazamiento hacia el territorio de la imagen en movimiento y su difusión virtual; la recurrencia de están nuevas técnicas multiplica las posibilidades de generación de narrativas, donde el artista como productor interviene cada vez más en el tiempo real del dominio de la experiencia.1 Nos encontramos ante modelos heterogéneos y singulares de producción de imaginarios alternativos y nuevas formas de ver. Para Jonathan Crary la generación de imágenes infográficas anuncia una implantación de espacios visuales fabricados, diferentes de las facultades miméticas de las tecnologías precedentes, reubicando la visión en un plano escindido del observador humano y puestos en circulación e intercambiados globalmente.2 En el capitalismo del siglo XXI se impone a la vida humana a una duración sin pausa donde las tecnologías perpetúan la ilusión de una instantaneidad a demanda, manteniéndonos aislados de la presencia física de otros.
Según Virilio, “…la supremacía del tiempo real, la inmediatez, sobre espacio y superficie es un hecho consumado y tiene un valor inaugural (anuncia una nueva época).”3 Estamos en un momento dramático en nuestra relación con el mundo, vivimos en el tiempo global que anula las distancias; pero es en esta instantaneidad que parece no tener vuelta atrás, donde considero que han surgido nuevas narrativas que poseen una gran capacidad de reflexión, incluso la posibilidad de atender a las advertencias proféticas de Virilio acerca de recuperar al otro, al paisaje local, al cuerpo y al lenguaje. “Para Virilio existe una paradoja en cuanto a la lógica de la realidad de la representación, que es aquella imagen que domina lo representado durante un momento del tiempo que nos lleva al espacio real, transformando la noción de la realidad, la paradoja es pues la representación mediante una tele-presencia a distancia del objeto que sustituye su misma existencia del aquí y el ahora, ejemplo de esto son todas las imágenes gráficas, fotográficas, cinematográficas, etc. pues ya en su representación en alta resolución o definición en cuanto a la imagen, es más importante que la representación de la propia realidad, es decir, que ya en la actualidad, importa más la imagen que corresponde a la virtualidad de una presencia captada por un aparato en tiempo real, que no solo permite como menciona Virilio, el tele-espectáculo sino también lleva a la tele-acción. Ahora la imagen ya no es más una memoria corta, ahora ya es más bien una voluntad...”4
2-TIEMPO FUERA COMO HACER POLÍTICO…
El artista está ausente en su materialidad, dislocado en el tiempo real de la representación Las obras no importan tanto como la visibilidad de sus autores en el escenario contemporáneo espectacular Los artistas no están acá están en otro lado En una muestra, en un salón haciendo cosas que hacen los artistas Como en una cámara oculta video llamada con amigos sin escucharse… Entretanto en el garaje la imagen que es de jabón se derrite, se ensucia, es corrompida por ratas de barro entre el murmullo…
La brisa del murmullo en el bajo, junto al río y el ruido de las copas con los hielos como grillos congelados en el vientre mientras la música de una estrella que es el accidente de la velocidad refleja contra la esfera celeste que nos cuida Es ese murmullo fuerte a la noche que destapa la olla a presión, que ingresa en la atmosfera para despertarnos en el edificio ¿Cómo respira la fiesta? -me preguntó mi papá yo imité el murmullo bajo el puente ese domingo empantanado y especialmente repetitivo en estos últimos días despertando con el final cada noche En el campo las estrellas de la música en el terreno el sonido del accidente del dolor de las espinas en el cuerpo repitiendo el ciclo natural del ecosistema los factores abióticos como las piedras son los testigos eternos de nuestra presencia sin memoria son los auténticos cómplices del paisaje en el mapa de la República Argentina.
Nido de ratas en la biblioteca al abrigo de dios que es amor. La mamá anido en Mateos 22 para proteger a sus crías entre parábolas porque tiene miedo que algo les pase porque nadie la quiere. No la pueden ni ver y está embarazada Sería peor si la ven con sus hijos porque siente el odio eterno de toda la humanidad y se manda a guardar en la biblioteca en Mateos en el rezo para que todo lo que pida, creyendo lo reciba en la biblia del poeta masturbado acabado, que quiere a todo el mundo y que leyó en el libro de biología de 1º que las ratas son las especies de mayor distribución mundial son cosmopolitas, faltando sólo en los polos; se han extendido por toda la Tierra junto con el ser humano, aprovechando los desplazamientos por barco para colonizar nuevos territorios. Que el coito dura solamente de dos a tres segundos y tras una gestación que dura aproximadamente un mes, la rata pare de cinco a veintidós individuos, que deposita en el interior de la madriguera o nido, donde acondiciona un lecho con restos de materia vegetal y pelo, naciendo desnudos, con los ojos cerrados, sin pelo, sin capacidad auditiva y pesando tan solo 5 o 6 gramos. Roberto A.
3-TIEMPO FUERA COMO PRÁCTICA ARTÍSTICA
SELECCIÓN JULIANA DOLINSKY No hay obra, solo un espejo donde nos miramos a través de nosotros mismos….un tiempo que se desdobla, estamos ahí sin estar, estamos buscando a la imagen en un acto antropofágico, la deglutimos para poder volver a encontrarla… “La ilusión que procedía de la capacidad de arrancarse de lo real mediante la invención de formas —capacidad de oponerle otra escena, de pasar al otro lado del espejo—, la que inventaba otro juego y otra regla del juego, es ahora imposible porque las imágenes han pasado a las cosas. Ya no son el espejo de la realidad: han ocupado el corazón de la realidad transformándola en una hiperrealidad en la cual, de pantalla en pantalla, ya no hay para la imagen más destino que la imagen. La imagen ya no puede imaginar lo real, puesto que ella es lo real; ya no puede trascenderlo, transfigurarlo ni soñarlo, puesto que ella es su realidad virtual. En la realidad virtual, es como si las cosas se hubieran tragado su espejo.” 5
Según Baudrillard estamos ante el fin de las representaciones, ya no hay secretos, ya no pueden ilusionar porque la ilusión está ligada al secreto, al hecho de que las cosas están ausentes de sí mismas, se retiran de sí mismas en sus apariencias. En nuestro contexto actual, donde proliferan y se multiplican las imágenes, pareciera que las representaciones se vuelven invisibles; su naturaleza aspectual se vuelve transparente y la representación de lo real se identifica con lo real mismo, que a su vez funciona como un estar fuera del alcance de toda intervención activa de nuestra parte. El sujeto deja de ser el origen del proceso para convertirse en el reflejo del objeto que, por medio de todas nuestras tecnologías, le impone su presencia y su forma aleatoria. Todos somos los espectadores. Con la digitalización de nuestra vida cotidiana, la línea divisoria que separa la realidad de la ficción tiende a tornarse más difusa. Los medios de comunicación, en especial los audiovisuales, ocupan un lugar determinante y complejo en la construcción, el debate y la interpretación sobre lo acontecido tanto en la actualidad como en el pasado. Sobre ellos se asienta el grueso de la información que tenemos en torno a los acontecimientos más significativos de la vida pública.
Así también, el desarrollo de los media ha transformado la naturaleza del espacio público /privado y en consecuencia se vuelven a trazar la cambiantes relaciones históricas entre el poder y la visibilidad. Debemos considerar que las transformaciones de las estructuras de la intimidad y de los procesos constitutivos del yo poseen su proyección en el dominio público, ya que parte de la construcción de la subjetividad pasa por el reconocimiento de su ubicación en el espacio público. Actualmente el espacio público ha perdido su carácter homogéneo y se ha venido transformando en un espacio cada vez más diferenciado y disperso, compuesto por una gran variedad de esferas de lo público. Virilio denomina estas transformaciones como un proceso de deslocalización, el “no lugar de las tecnologías teleópicas”, las formas de comunicación e interacción no se dan a través de la presencia física sino como tele presencia, acompañado de un cambio en los modos de representaciones, en los campos gráficos, tratamiento de imagen, textualidad, que han nutrido a la transformación más profunda en la epistemología de la cultura occidental.
Para Zygmunt Bauman, sin embargo, lo que sucedería en este punto sería el final de todas estas diferenciaciones con una detallada enumeración de límites extintos: “junto al colapso de la oposición entre la realidad y su simulacro, entre la verdad y su representación, llega el “desdibujamiento” y la disolución de la diferencia entre lo normal y lo anormal, lo esperado y lo inesperado, lo corriente y lo raro, lo domesticado y lo salvaje, lo familiar y lo extraño, nosotros y los extraños”.6
Jean Baudrillard va más allá de la anunciada liquidación de lo real y de lo referencial, del “nosotros” y los extraños, afirmando que ésta es la época del “exterminio” del otro con la aparición de lo virtual y de la comunicación perpetua que lo iría diluyendo. Para este autor: “Si la información es el lugar del crimen perfecto contra la realidad, la comunicación es el lugar del crimen perfecto contra la alteridad”.7
Este replanteamiento de las relaciones entre el yo y el otro coincide con la crisis de la representación, y con el nacimiento de los nuevos medios, con lo que nacen un tipo de obras diferentes en las que la identidad se convierte en un interesante tema de trabajo. El resultado final es la transgresión del yo y del otro, la perversión y abyección de los límites entre lo propio y lo ajeno, porque sólo a través del otro es posible el conocimiento del propio yo, lo que debería llevar implícito que el otro ha de poder transitar también el yo para llegar a sí mismo.
La presencia del artista aparece de diferentes modos: desde el yo que se representa como el otro, el artista que usurpa el lugar del otro o la ficcionalizaciĂłn del yo o del otro en un personaje que corre el riesgo de tener mucho de todos y poco de ninguno. En casi todas las opciones abiertas hasta el momento, la mayorĂa de los artistas hibridan experiencias, abordando al otro desde la autor referencialidad o al yo desde la alteridad, para poder no sĂłlo abarcar al otro que les habita sino tambiĂŠn al yo que se les escapa.
“A partir de la Posmodernidad, todos estos yoes habitados por otros (u otros habitados por yoes) de los que se ha ido hablando, han de desarrollar sus propias estrategias para encontrarse, mostrarse y reivindicarse con un rostro reconstruido. Tras la deconstrucción, casi sistemática, tanto de la apariencia como de la intimidad hiper-habitada, el ser humano contemporáneo parece sentirse perdido ante sí mismo y ve en los otros una vía de acceso a su propia naturaleza. En ese peculiar encuentro íntimo con la alteridad, el yo sale reforzado habitualmente por un sentimiento de empatía y una mayor amplitud de miras que hace que las fronteras y los límites de lo propio y lo ajeno en temas de identidad sean cada vez más frágiles.”8
Se hace necesario un envite, imaginario o no, planteado por unos sujetos y para unos sujetos. Un impulso, una pasión, un movimiento que vuelva a poner estas imágenes en juego, las aventure entre nosotros, las haga rodar en nuestros circuitos significantes. En definitiva, hace falta que las imágenes se monten con otras imágenes, con otras asociaciones (Holocausto- Auschwitz, o bien fábrica-campo, trabajo forzado-exterminio, etc.), con palabras, cifras, fechas, con otros signos, otras representaciones, para que la huella, quizás, nos haga una señal (…) Que las imágenes nos identifiquen primero, qué queremos de ellas, de nosotros con ellas, para que así, a nuestra vez, nosotros podamos identificarlas. Presas fáciles, sí, pero que no se dejan domesticar fácilmente. La situación, y más incluso el acontecimiento, el hecho, como subraya Jean-François Chevrier, pueden originar el documento. Pero esta huella no puede sino revelarse como documental a posteriori, años después. La huella está ahí, pero lo que en ella podría documentar permanece oculto, enterrado, escondido.”9
1 LA SOCIÉTÉ ANONYME. Redefinición de las prácticas artísticas, s.21 (LSA47) [en línea]. Disponible en: http://aleph-arts.org/lsa/lsa47/manifiesto.html2 CRARY, Jonathan. Las técnicas del observador. Visión y modernidad en el siglo XIX. AD LITERAM, n.° 4, Colección dirigida por: Miguel Á. Hernández-Navarro; Ed. CENDEAC, Murcia, 2008.3 VIRILIO, Paul. ¡Alarma en el ciberespacio! [en línea]. Disponible en: http://aleph-arts.org/pens/speed.html4 Disponible en: http://artedigitalamm.blogspot.com.ar/2012/08/la-maquina-de-la-vision-paul-virilio.html5 Baudrillard, Jean. El complot del arte. Ilusión y desilusión estéticas. Buenos Aires, Amorrortu editores, 2007, p. 28.6 Bauman, Zygmunt. La sociedad sitiada. P. 657 Baudrillard, Jean. El crimen perfecto. P. 458 Pardo Sainz, Rebeca. El otro yo. De la autoficción al turismo identitario en el arte contemporáneo. P. 87.9 Comolli, Jean Louis. Documento. P. 118/119
APÉNDICE -
Obras anteriores “No digo demasiado. Callo en el medio acuoso que me obliga… En aquel lugar, donde estuve ayer, en la acequia, en el canal, en el río, en el mar… Donde las leyes cambian, donde fui prisionera; quemada bajo el agua. El sentimiento de ser un vidrio frágil, que se cae y se quiebra en todos estos fragmentos que me pertenecen. Y la fatiga… amiga insoportable, potable y gasificada. Tus movimientos… la fatiga del principio del mundo, del que me contaste, esa fragilidad inestable, incolora e insípida. La casa que se cayó… Ese mundo que describiste en el espejo que te refleja, que te refracta y te esconde… En aquel lugar donde tendrás un cuerpo sin cuerpo, transfigurado. Utopía primera. Primaria...” “informo. Informe. Antes que se haga tarde, sentencia de autodestrucción…” “La verdadera imagen de esa realidad absoluta, misteriosa que ninguno vera jamás". “Lo que desaparece es toda la articulación simbólica del lenguaje y el pensamiento. Pronto ya no habrá más superficie sensible de confrontación, ni suspense del pensamiento entre la ilusión y la realidad, ni blanco, ni silencio, ni contradicción, sino un solo flujo continuo, un solo circuito integrado. Y la inteligencia informática se presta a la misma versatilidad de producción y acumulación, de fotosíntesis de todo lo “real posible”.
http://descontemporaneos.blogspot.com.ar/
Clara Ponce Claudia Camplone Florencia Breccia Mariana Baron
Gracias a todos nuestros amigos que siempre nos hacen el aguante
MarĂa Forcada DarĂo Bedoya Alejandra Montero Daniela Quintero
Forcada, María Ángeles Tiempo fuera / María Ángeles Forcada ; Juliana Dolinsky ; Fernando Guevara. - 1a ed . - Las Heras : VOA editorial, 2016. 46 p. ; 12 x 9 cm. ISBN 978-987-46226-4-8 1. Catálogo de Arte Argentino. I. Dolinsky, Juliana II. Guevara, Fernando III. Título CDD 708
Mendoza, 1 de Julio. Š 2016 voa editorial www.visualobjetoa.com.ar
TU TIEMPO FUERA