Suplemento literario #45 oct 13

Page 1

SUPLEMENTO LITERARIO Barranquilla, Colombia / 13 de Octubre de 2013 / Diario La Libertad / Esper Impresores / 8 paginas / 45潞 Edici贸n


2

SUPLEMENTO LITERARIO

LA LIBERTAD Barranquilla, Domingo 13 de Octubre de 2013

ALEJANDRA MORENO ASTWOOD, REVELA EN SU LIBRO “DÉJATE TOCAR”:

“¿De qué me ha servido la poesía?” “Quisiera llegar a las personas que podrían no encontrarse en una buena situación. Quizá atraviesan una situación similar a la que viví” La Comunicadora social Alejandra Moreno Astwood, nos presenta su trabajo poético: DÉJATE TOCAR, una obra de la colección Luis Carlos López, de SantaBarbara Editores, con el apoyo de Imcolibros SA. y la Fundación Barranquilla es poesía. “DEJATE TOCAR” es un trabajo literario, que transmite sensibilidad y una invitación a utilizar la escritura como una forma de terapia; nos transporta a momentos difíciles superados. A tomar la poesía como catalizador de las emociones; basado en la experiencia de su andar en al amor, en la alegría, en la tristeza, en el fracaso, en los sueños y anhelos. Entregándonos una obra que vale la pena leer y compartir. SantaBarbara Editores realizara la presentación del libro: Déjate tocar, de la autora en mención, el 13 de noviembre, a las 6:30pm en el museo Bibliográfico Bolivariano, de la Universidad Simón Bolívar / Calle 68 No 53 – 56. Y desde ya puedes adquirirlo a los teléfonos: 300 5356726 – 3002624557. “Escribía diariamente, combinándolo con lecturas de mi preferencia, motivadoras e inspiradoras; al principio no se lo compartía a nadie, solo lo guardaba, las páginas en blanco que antes me asustaban comenzaban a llenarse, y mientras más se llenaban, más tranquila me sentía. Bajaron mis niveles de ansiedad y la gente que me rodeaba vio cambios en mí, que yo no había visto. Por ejemplo deje de llorar tanto, y al descargar toda esa energía negativa, transmitía nuevamente luz. Puedo decirte, sin temor a equivocarme, que cuando comiences a escribir, así sea 20 minutos diarios sobre tus tristezas o preocupaciones, con el pasar de los días te sentirás mejor, con más ganas de vivir; y si tienes que llorar hazlo, al principio el llorar nos libera, pero no cura del todo. Por eso luego de pasar por mi duelo, comencé a escribir poesía, porque lo disfruto, quizás a ti no; pero puedes escribir el género literario que te guste, cuando se trata de uno, hay que escoger lo que nos hace sentir más cómodos. La escritura es una excelente gimnasia para el cerebro porque ejercitamos al mismo tiempo nuestras capacidades motoras, visuales, y cognitivas. Quienes escribimos sobre nuestras amarguras, temores y luchas, saldremos beneficiados. En los Estados Unidos se realizó un estudio, publicado en la revista The Oncologist, que demostró que los pacientes con cáncer que expresaban por escrito sus sentimientos antes de las terapias, se sentían mucho mejor (tanto

maravillosa forma de conectarse al sentimiento, una catarsis de la propia existencia. Por mi parte, he hallado en la poesía una cuerda donde colgar mis emociones, o una vasija para dejarlas en remojo. En concordancia, te invito a dejarte tocar por los versos, las rimas, las palabras que te dan alas, las letras que desean tomarte de la mano, para llevarte a donde jamás podrías llegar solo. Escribo para decirte que no estás solo, que no estás sola; la soledad es solo el boleto que a veces nos toca tomar para encontrar la esencia de quienes somos, y conocer nuestra verdadera misión. Y fue a través de la poesía que encontré la forma de hallarme cuando me pierdo, de pintar aquello que sueño, de gritar aquello que callo, de liberar aquello que me ata. Es a través de la poesía-terapia, que logre saborear la paz interior. Ahora mi querido amigo, mi estimada amiga, en las palabras no existen barreras, como en la poesía no existen los límites; las emociones abandonan su estadía en las suspendidas cajas mentales. Comienza a leer, a escribir tu propia historia, y DÉJATE TOCAR por la poesía, donde una palabra se hace carne, un verso se transforma en vino, el llanto se vuelve mar, y suceden cosas extraordinarias.” MI CIUDAD Por estas mismas calles rodaron lágrimas por estos callejones caminaron ansiedades por estos rincones se alzaron los desvelos física como mentalmente), en comparación con quie- por estas aceras corrieron tribulaciones. nes no escribían. La investigación fue realizada por el por estos parques, jugué mi infancia equipo de Nancy Morgan, en el Hospital Universitario por estas casas, transitaron mis congojas de Georgetown, Washington DC, con 71 pacientes con por estas escaleras de mi ciudad, perdí el aliento linfomas y leucemias. Y en mí no solo se estaban viendo los cambios, en mi y una gota de sudor, se escapó por mi oreja. interior comencé a sentir paz, a entender lo que me por estas aceras vagaron mis sueños pasaba y a liberarme de ello, a medida que escribía por este pavimento erraron mis pensamientos vislumbraba soluciones, que antes ni siquiera podía y aun a lo lejos de sus brazos imaginar. La poesía se convirtió para mí en una com- barranquilla me abraza pañera, en una aliada para descargar mi alma, sin y yo la llevo en mi pecho. dañarme, o dañar a otros. Es entontes, la poesía una por estas mismas bancas terapia, que desprende de nuestra alma, de lo que durmieron ilusiones somos; llevándonos a vernos de frente con nosotros el cansancio del caminante mismos, mostrándonos que en la mayoría de ocasiones, del que tuvo y jamás tiene. Barranquilla, ciudad de avatares hemos sido nuestro propio enemigo. Con ello, no estoy diciendo que la poesía, sea el único de calles que crecen medio para sanar las heridas emocionales; porque es de calles que envejecen el arte mismo en toda su extensión (pintura, música, de calles que mueren etc.). Pero no se puede negar que la literatura, es una como muero yo en su regazo.

Director: Roberto Esper Rebaje Director de Redaccion: Javier De la Hoz/ Luis Roncallo Directores Literarios: Ricardo Avila/ Federico Santodomingo Colaboradores: Carlos Angulo Menco//German Morales// José Angulo E-mail: Supleliterario@Gmail.com; riavica@yahoo.com; Jdeorosierra@Gmail.com. Suplemento Literario de La Libertad

Issuu: Suplemento Literario

¿Escribes? ¿te gusta La poesía, la literatura,y todo lo relacionado con el arte? llamanos o escribenos y publicaremos tus obras de arte hecha letras... Cel. 3216909351 E-Mail:Supleliterario@Gmail.com; lalibertad@lalibertad.com.co


SUPLEMENTO LITERARIO

LA LIBERTAD Barranquilla, Domingo 13 de Octubre de 2013

3

UN CUENTO DE ÁLVARO MUTIS

El último rostro (I) Las páginas que van a leerse pertenecen a un legajo de manuscritos vendidos en la subasta de un librero de Londres pocos años después de terminada la Segunda Guerra Mundial. Formaron parte estos escritos de los bienes de la familia Nimbourg-Napierski, el último de cuyos miembros murió en Mers-el Kebir combatiendo como oficial de la Francia libre. Los Nimbourg-Napierski llegaron a Inglaterra meses antes de la caída de Francia y llevaron consigo algunos de los más preciados recuerdos de la familia: un sable con mango adornado de rubíes y zafiros, obsequio del mariscal José Poniatowski al coronel de lanceros Miecislaw Napierski, en recuerdo de su heroica conducta en la batalla de Friedland; una serie de bocetos y dibujos de Delacroix comprados al artista por el príncipe de Nimbourg-Boulac, la colección de monedas antiguas del abuelo Nimbourg-Napierski, muerto en Londres pocos días después de emigrar y los manuscritos del diario del coronel Napierski, ya mencionados. Por un azar llegaron a nuestras manos los papeles del coronel Napierski y al hojearlos en busca de ciertos detalles sobre la batalla de Bailén, que allí se narra, nuestra vista cayó sobre una

palabra y una fecha: Santa Marta, diciembre de 1830. Iniciada su lectura, el interés sobre la derrota de Bailén se esfumó bien pronto a medida que nos internábamos en los apretados renglones de letra amplia y clara del coronel de coraceros. Los folios no estaban ordenados y hubo que buscar entre los ocho tomos de legajos aquellos que, por el color de la tinta y ciertos nombres y fechas, indicaban pertenecer a una misma época. Miecislaw Napierski había viajado a Colombia para ofrecer sus servicios en los ejércitos libertadores. Su esposa, la condesa Adéhaume de Nimbourg-Boulac, había muerto al nacer su segundo hijo y el coronel, como buen polonés, buscó en América tierras en donde la libertad y el sacrificio alentaran sus sueños de aventura truncados con la caída del Imperio. Dejó sus dos hijos al cuidado de la familia de su esposa y embarcó para Cartagena de Indias. En Cuba, en donde tocó la fragata en que viajaba, fue detenido por una oscura delación y encerrado en el fuerte de Santiago. Allí padeció varios años de prisión hasta cuando logró evadirse y escapar a Jamaica. En Kingston embarcó en la fragata inglesa “Shanon” que se dirigía a Cartagena. Por razones que se verán más adelante, se transcriben únicamente las páginas del Diario que hacen referencia a ciertos hechos relacionados con un hombre y las circunstancias de su muerte, y se omiten todos los comentarios y relatos de Napierski ajenos a este episodio de la historia de Colombia que diluyen y, a menudo, confunden el desarrollo del dramático fin de una vida. Napierski escribió esta parte de su Diario en español, idioma que dominaba por haberlo aprendido en su estada en España durante la ocupación de los ejércitos napoleónicos. En el tono de ciertos párrafos se nota empero la influencia de los poetas poloneses exiliados en París y de quienes fuera íntimo amigo, en especial de Adam Nickiewiez a quien alojó en su casa. 29 de junio. Hoy conocí al general Bolívar. Era tal mi interés por captar cada una de sus palabras y hasta el menor de sus gestos y tal su poder de

comunicación y la intensidad de su pensamiento que, ahora que me siento a fijar en el papel los detalles de la entrevista, me parece haber conocido al Libertador desde hace ya muchos años y servido desde siempre bajo sus órdenes. La fragata ancló esta mañana frente al fuerte de Pastelillo. Un edecán llegó por nosotros a eso de las diez de la mañana. Desembarcamos el capitán, un agente consular británico de nombre Page y yo. Al llegar a tierra fuimos a un lugar llamado Pie de la Popa por hallarse en las estribaciones del cerro del mismo nombre, en cuya cima se halla una fortaleza que antaño fuera convento de monjas. Bolívar se trasladó allí desde el pueblecito cercano de Turbaco, movido por la ilusión de poder partir en breves días. Entramos en una amplia casona con patios empedrados llenos de geranios un tanto mustios y gruesos muros que le dan un aspecto de cuartel. Esperamos en una pequeña sala de muebles desiguales y destartalados con las paredes desnudas y manchadas de humedad. Al poco rato entró el señor Ibarra, edecán del Libertador, para decirnos que Su Excelencia estaba

terminando de vestirse y nos recibiría en unos momentos. Poco después se entreabrió una puerta que yo había creído clausurada y asomó la cabeza un negro que llevaba en la mano unas prendas de vestir y una manta e hizo a Ibarra señas de que podíamos entrar. Mi primera impresión fue de sorpresa al encontrarme en una amplia habitación vacía, con alto techo artesonado, un catre de campaña al fondo, contra un rincón, y una mesa de noche llena de libros y papeles. De nuevo las paredes vacías llenas de churretones causados por la humedad. Una ausencia total de muebles y adornos. Únicamente una silla de alto respaldo, desfondada y descolorida, miraba hacia un patio interior sembrado de naranjos en flor, cuyo suave aroma se mezclaba con el de agua de colonia que predominaba en el ambiente. Pensé, por un instante, que seguiríamos hacia otro cuarto y que esta sería la habitación provisional de algún ayudante cuando una voz hueca pero bien timbrada, que denotaba una extrema debilidad física, se oyó tras de la silla hablando en un francés impecable traicionado apenas por un leve «accent du midi».


4

SUPLEMENTO LITERARIO

LA LIBERTAD Barranquilla, Domingo 13 de Octubre de 2013

RELATORIA SOBRE LA NOCHE DE LOS LAPICES

Crueldad nocturna a estudiantes argentinos POR: HANER SOLANO ANAYA /ARMANDO VILLA VILLARREAL

Para empezar se le conoce a “La noche de los lápices” a la serie de secuestros y asesinatos, ocurridos durante la noche, válgame la redundancia, del 16 de septiembre de 1976, hace 37 años, hechos ocurridos en Buenos Aires, Argentina, más exactamente en la ciudad de La Plata. Fue quizás el suceso más cruel de las dictaduras cívico militares de la nación suramericana durante el período comprendido entre 1976 y 1983, bajo la dictadura militar del entonces presidente Jorge Videla que le tocó vivir al país argentino. Los jóvenes en su gran mayoría estudiantes de secundaria y menores de edad, fueron torturado antes de ser asesinados cruelmente. El caso tomó notoriedad pública en 1985, luego del testimonio de Pablo Díaz, uno de los sobrevivientes, en el Juicio a las Juntas. LAS POSIBLES CAUSAS O ANTECEDENTES Las víctimas fueron en su mayoría estudiantes de la UES (Unión de Estudiantes Secundarios), rama estudiantil del peronismo revolucionario, de la ciudad de La Plata. Esta agrupación, junto a otras escuelas, había reclamado en 1975, ante el Ministerio de Obras Públicas, el otorgamiento del boleto de autobús con descuento estudiantil secundario. Pablo Díaz, ha popularizado la hipótesis de que los secuestros hayan sido consecuencia directa de aquel reclamo. Pablo Díaz afirmó que el boleto estudiantil, que habían conseguido los estudiantes secundarios en septiembre de 1975, fue suspendido en agosto de 1976 con la intención de detectar, mediante un trabajo de inteligencia, quiénes eran los líderes (a quienes llamaban «potenciales subversivos») en cada escuela e ir a buscarlos. Al respecto, menciona un documento de la Jefatura de Policía de la Provincia de Buenos Aires llamado La Noche de los Lápices, firmado por un comisario mayor Fernández. Que lo atestigua en su libro el escritor Felipe Pigna en su obra titulada “lo pasado pensado”, pagina pág. 343. Los secuestrados fueron los siguientes: Claudio de Acha 17 años desaparecido, Gustavo Calotti 18 años sobreviviente; María Clara Ciocchini 18 años, desaparecida. Fue secuestrada junto con María Claudia Falcone. Pablo Díaz 19 años, 21 de septiembre de 1976, sobreviviente; en 1985 hizo público el caso en el Juicio a

las Juntas. María Claudia Falcone 16 años, 16 de septiembre de 1976, desaparecida. Fue secuestrada en casa de su tía abuela junto a María Clara Ciocchini que estaba viviendo con ella. Francisco López Muntaner 16 años, 16 de septiembre de 1976, desaparecido. Patricia Miranda 17 años, sobreviviente. Fue secuestrada el 17 de septiembre. Era una estudiante de Bellas Artes, no había tenido militancia política ni había participado de los reclamos por el boleto estudiantil. Emilce Moler 17 años, sobreviviente. Daniel A. Racero 18 años, 16 de septiembre de 1976, desaparecido. Fue secuestrado en casa de Horacio Ungaro. Horacio Ungaro 17 años, 16 de septiembre de 1976, desaparecido. La Policía bonaerense había preparado

un operativo de escarmiento para los que habían participado de la campaña por el boleto estudiantil, considerado por las Fuerzas Armadas como «subversión en las escuelas», y que los adolescentes secuestrados habrían sido eliminados después de padecer tormentos en distintos centros clandestinos de detención. CONCLUSIONES SOBRE LA PELICULA Y TEXTOS LEIDOS SOBRE EL TEMA Acciones represivas eran nominadas como operaciones de guerra en la “lucha contra la subversión”, encontramos en esta categoría de víctimas un argumento incontrastable. ¿Qué peligrosidad podía adjudicarse a adolescentes que realizaban reclamos escolares? La violencia des-

plegada por el Estado contra supuestos enemigos de la patria revelaba en estos hechos una dimensión inusitada y rebatía casuísticamente los argumentos de la guerra que pretendían legitimarla. El juicio a las Juntas fue el escenario donde tomó publicidad el acontecimiento a través del testimonio de Pablo Díaz, el “único sobreviviente”, cuyo relato se transformó en prueba jurídica de los crímenes. Llegamos a la conclusión de que la inocencia de los desaparecidos no sólo se fundaba en su corta edad sino también en su compromiso político, insospechado de cualquier vinculación con la violencia. El filme se basa en la investigación periodística de que hallas hechos siniestros protagonizados de la década del 70 en Argentina.Ha sido la primera película que cuenta una historia desarrollada en un centro clandestino de detención creando los primeros fotogramas del “horror”. A través de la representación en la pantalla del testimonio de Pablo Díaz en el estrado judicial se pone en escena el padecimiento de las víctimas en manos de los perpetradores, lo que viene a reforzar la verdad de las denuncias de sobrevivientes y familiares por medio del efecto de verosimilitud que crea el cine. A partir de allí fue posible “ver” lo que muchos argentinos y porqué no latinos, ni siquiera pudieron imaginarse. Tal como hemos analizado la eficacia de estos vectores de transmisión -el testimonio de Pablo Díaz, el libro y la película- no ha implicado la inexistencia de otras versiones que confrontan con estos modos de narrar. Emile Moler, conocida desde mediados de los noventa como “la otra sobreviviente” de la Noche de los Lápices, ha sido la primera en poner en cuestión públicamente varias de las tesis sostenidas en estos relatos canónicos, sobre todo la que refiere a la explicación de los secuestros y la reducción del compromiso político a una reivindicación estudiantil. Moler insiste “En que fueron secuestrados porque eran militantes políticos”. La Noche de los Lápices ha logrado ser contada a través de códigos universales, que logran descifrarse a pesar de los cambios de época e incluso tienen la capacidad de construir significados para experiencias disímiles y distantes Finalmente, en el año 2006, al cumplirse treinta años de la Noche de los Lápices, un decreto presidencial de Néstor Kirchner lo instituyó como “Día Nacional de la Juventud”.


SUPLEMENTO LITERARIO

Erase una vez un hombre que se llamaba Gulliver. Era médico de un barco y a menudo emprendía viajes que le llevaban a tierras muy lejanas. En uno de esos viajes, a bordo del mercante Antílope, no podía ni imaginar cuán lejos le llevaría el barco ni qué asombrosas aventuras le aguardaban. Después de muchos meses navegando, el barco se acercó a las costas de una tierra desconocida. De pronto estalló una terrible tormenta y el viento arrojó al Antílope contra las rocas. Inmediatamente, el barco se partió en dos. Antes de que se hundiera, los tripulantes, aterrados, se tiraron por la borda. Sólo Gulliver consiguió nadar a través del furioso oleaje y llegar a tierra sano y salvo. Los otros marineros se ahogaron todos. Una vez fuera del agua, Gulliver se arrastró por la playa. Luego, completamente agotado, quedó sumido en un profundo sueño. Al despertar, sin idea de cuánto tiempo había estado durmiendo, el sol brillaba intensamente en sus ojos. Soltó un gemido e intentó estirarse, pero comprobó horrorizado que no podía moverse. ¡Tenía los brazos, las piernas y la espesa cabellera firmemente sujetos al suelo! Entonces sintió que algo le subía por la pierna. Levantó la cabeza cuanto pudo y vio a un diminuto personaje -no mayor que su dedo meñiquecaminando sobre su pecho. Luego vio con asombro que al menos otros cuarenta hombrecillos trepaban por todo el cuerpo ¡armados con pequeños arcos y flechas! Lanzando un enorme grito, Gulliver trató de liberarse. Rugió tan violentamente que muchos de los hombrecillos que se habían encaramado a él cayeron al suelo; los otros salieron huyendo. Pero al ver que Gulliver no podía soltarse, se volvieron y le lanzaron una lluvia de flechas, tan

LA LIBERTAD Barranquilla, Domingo 13 de Octubre de 2013

5

contemplaban con la boca abierta. A cierta distancia de la muchedumbre había un magnífico caballo, sobre el cual iba sentado el emperador, de porte majestuoso. Más alto y bien parecido que el resto de la gente que había visto hasta entonces Gulliver, el emperador de Liliput lucía un casco de oro, incrustado con piedras preciosas y decorado con un airoso penacho. En su diestra sostenía una espada casi tan grande como él, con la empuñadura engarzada con brillantes. El caballo, al ver a Gulliver, se encabritó asustado; entonces el emperador desmontó y caminó majestuosamente en torno a los enormes pies de Gulliver. Cerca del templo había una elevada torre, casi tan alta como el propio Gulliver y, con mucho, el edificio más alto de Liliput. El emperador y sus cortesanos subieron las escaleras de la torre para ver mejor a Gulliver. Luego se dirigieron a él a través de

pequeñas y afiladas como agujas. —¡Ay! ¡Ay! -exclamó Gulliver al sentir las flechas que le herían en la cara. Más tarde, otra rociada de flechas le dio en el pecho y en las manos. Retorciéndose de dolor, Gulliver trató desesperadamente de romper los miles de hilos que le sujetaban al suelo. Pero era inútil luchar: las ligaduras eran demasiado fuertes. Por fin, Gulliver se dio por vencido. Permaneció tendido en silencio y poco a poco le fue venciendo el sueño. Al cabo de un rato le despertó el ruido de martillazos. Volviendo otra vez la cabeza cuanto pudo, vio que junto a él habían construido una pequeña plataforma de madera y un hombrecillo, elegantemente vestido, se encaramaba a ella lentamente.

-¡Hilo bigismo ad poples Liliput! Ig Golbasto magnifelus Emperoribory... -gritó el hombrecillo al oído de Gulliver. Gulliver le respondió: -No comprendo. ¿Dice usted que su país se llama Liliput? Gulliver trató de hacerle entender al hombrecillo que estaba hambriento y sediento. Pero cuando le trajeron una bebida, ¡resultó estar drogada! Total que quedó dormido. Mientras dormía, quinientos carpinteros e ingenieros construyeron una estrecha carreta de madera para trasladarlo a ver al emperador de Liliput. Fueron necesarios novecientos hombres armados con palos para colocarlo sobre la carreta y más de mil caballos para transportarlo a la ciudad. La procesión se detuvo a las afueras de la población, junto a las ruinas de un viejo templo. Allí fue trasladado Gulliver, donde le colocaron pesadas cadenas en las piernas aseguradas con cientos de candados. Cuando se despertó, Gulliver comprobó que habían cortado todas las ligaduras que le sujetaban. Se levantó despacio y miró a su alrededor. Asombrado, vio a sus pies una ciudad entera en miniatura, con casas, calles y parques. Miles de personajillos le

bocinas. Pero aunque Gulliver les habló en inglés, alemán, francés, español e italiano, aquéllos parecían no entender una palabra de lo que les decía, y él no lograba entenderles a ellos. El emperador bajó de la torre y dio unas palmadas. De inmediato le fueron llevadas al gigante veinte carretas repletas de carne y pan. Al mirar a la multitud que había congregada a sus pies, Gulliver pudo distinguir a las damas de la corte por sus lujosos ropajes. Cuando se inclinaron ante él con una reverencia, sus mantos de raso y las colas plateadas lanzaban destellos. Eran todas tan bonitas que Gulliver sintió deseos de tomar a una en sus manos para examinar “más de cerca sus diminutos vestidos”. Pero era demasiado educado para hacer semejante cosa.


6

SUPLEMENTO LITERARIO

LA LIBERTAD Barranquilla, Domingo 13 de Octubre de 2013

PLUMA BUILISTA-IED MIGUEL ANGEL BUILES

La Misericordia POR: HNA. FABIOLA ESQUIVEL VILLAFAÑE

La Misericordia es una de las “dimensiones” que Monseñor Miguel Ángel Builes experimentó con gran hondura en su camino hacia el encentro con el Dios-Padre-Madre y donde sus sentimientos se trocaron en amor divino. No es sorprendente que Monseñor Builes considere la Misericordia como la fuente de donde debemos beber para continuar y completar la vida y obra de Jesús-Misericordia del padre. Compasión y Misericordia fueron habituales en él. Vivió su vida en una compenetración “total con Cristo”. Por eso, este deseo de “identidad con el Cristo total” es el resultado de la experiencia de sentirse amado y amado con amor misericordioso. Ser misericordiosos, desde la perspectiva de Monseñor Builes es apelar a la experiencia fuerte de una vida compasiva expandiendo nuestro corazón en el deseo de salvación de nuestros hermanos, por eso hay que “obrar como Cristo obraría” dejándonos impulsar por ese fuego que arde desde un corazón compasivo, tierno y misericordioso. Entonces, ser misericordiosos es amar como ama Dios: con amor personal y gra-

tuito, absolutamente desinteresado, a fondo perdido… Amar simplemente por amor, no por otros motivos. En definitiva, la perfección cristiana en Monseñor Builes consiste en vivir la Misericordia, es decir, amar como Dios ama. Amar con locura para que el padre sea glorificado eternamente. Podemos decir, que el rostro de Dios que descubre Monseñor Builes, es el rostro de la misericordia. El Dios que tiene paciencia, que se entrega en fidelidad en la cruz, que somos el blanco de su amor, que nos hace parte de sí que nos injerta en su vida divina, en una palabra nos diviniza. Misericordia quiere decir, según podemos deducir, amor gratuito

y personal, bondad, comprensión, cariño entrañable y, sobre todo fidelidad. No es tibieza, fragilidad, ni infidelidad. Es un amor fuerte que labora y nos transforma en Cristo, en intimidad de amor, presencia, humildad, celo ardiente, amor eficaz, en fin, otros cristos. Así, podemos entender que en Monseñor Builes, la experiencia de amor lleva al cambio de corazones; el corazón va pasando de la dureza a la compasión y se hace uno con Cristo. De ahí, que mis ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón, todo mi ser , entra en esa comunión de amor y nos lleva a vivir la intimidad y la armonía con los demás. El corazón orante se vuelve corazón amante.

Porque orar es amar y amar es orar. Esto, lo promulgaba desde su experiencia diaria de intimidad, en el encuentro con su amado. En esta tarea nos ayudará María, la Madre de la Misericordias que participa como expresión de ese rostro materno que participa de las bondades divinas: es la discípula, modelo que persevera en fidelidad, es la obra perfecta de Dios. María, la llena de gracia y libertad. La madre y señora de las Misericordias. Modelo también de entrega y de amor, haciendo con ello, presencia de las misericordias de Dios para con la humanidad. “Bienaventurados los que aman por amor porque serán amados por amor”…


SUPLEMENTO LITERARIO

LA LIBERTAD Barranquilla, Domingo 13 de Octubre de 2013

7

Sobre “Una silueta en la partitura” de Enrique Dávila Martínez POR RODOLFO PLATA CEPEDA

Ya me leí el libro “Una silueta en la partitura”, me gustó full… es una buena introspección del propio Enrique… Los que lo conocemos desde la infancia, encontramos cantidades de coincidencias entre las reflexiones de vida del famoso Director Musical Dante Deledda y él… adobadas por varias descripciones de la Barranquilla que compartimos… de expresiones propias de nuestra jerga local y hasta recuerdos de las clases de Física del Colegio San José; como la del ex padre Velez quien nos enseñó la 2da Ley de Newton, la cual, para mi sorpresa, él cita!!!!! E, inclusive, se atreve a imaginar en alucinación artística que para que sus momentos de éxtasis perduren y poder detener el tiempo algunos instantes, deberíamos entonces parar el movimiento de la tierra para “no alterar la correspondencia entre el tiempo y el espacio” aunque presupone que ello conlleve, cuán iconoclasta que es, a que “todo se salga por la tangente por aquello de la inercia”…!!! Ja, Ja. Pero, por supuesto, cómo nos va a sorprender apenas hasta ahora, a quienes lo conocemos tan bien, el que su prosa se ratifique “cuidadosa y elaborada” como la define nuestro compañero Jorge Tarchópulos, si desde niño cuando una vez se le fue una pierna en un hueco y aterrizó de cabeza contra un andén raspándose horriblemente nariz y frente, nos describió lo sucedido diciendo: “carachas, me fui de bruces en un zanjón!”. Ahora, en el libro que nos concita, es de admirar su fluidez paseándose por un

verdadero compendio de música clásica contemporánea y el dominio que tiene, no sé si por experiencia propia o por releer la famosa Guía Micheline Verde, de las direcciones de París. Pero más fantástico aún, es cómo cruza el Océano Atlántico de ida y vuelta de un plumazo para referirse, por ejemplo, a la Fundación Internacional de Herbert Von Karajan y a la Escuela de Bellas Artes que sí conocemos, o a Tshaikovski, Bizet, Giordano, Haydn, Zwmilinski y Puccini por un lado y a Pacho Galán, Willie Colón, Héctor Lavoe o Joe Cuba que sí conocemos, por el otro. O a la Opera de París y al Teatro Amira De la Rosa, que también conocemos!!!!!. O a un supuesto Profesor y Director Rumano Titu Petrescu, quien creo que en verdad no existió, y al Maestro Biava!!! O a Las Bodas de Fígaro, al Allegro Assai de la Apassionata, a

su supuesta propia obra musical “Danza bohemia para piano” y al Negrito del Batey, Mi viejo muelle, Boquita Salá y Ay Cosita linda mamá… O a un paseo por el Bois de Boulogne y otro por las Ceibas del Hotel El Prado, y citar uno que otro término en francés perfecto y luego otros como “el chofer sabiendo” o el “Pollo cachaco” o “abracadabra”… O como el personaje que pasa de dirigir la sobre “Una silueta en la partitura” de Enrique Dávila Martínez. atreve a mencionar en la misma categoría a las chicas de Moulin Rouge, el Crazy Horse o el Lido, con la putas de la Calle de la Notaria o el Barrio Chino…Valga decir, que sus numerosas menciones a maestros famosos y a sus partituras, van casi siempre acompañadas de acotaciones entrelineadas, que evidencian su propia crítica musical, que los

melómanos como Alfredo Zúñiga y Jesús Guzmán sabrán calificar mejor que yo. Por supuesto, que lo que permanece a lo largo del libro es su erotismo crónico, siempre ligado a amores clandestinos, que lo conducen a innumerables reflexiones sobre la vida, la felicidad, la razón de la existencia, el matrimonio, etc. etc. con elucubraciones que en algunas facetas nos ligan, como lo relacionado con “el temor a Dios” que las monjas y los curas le inculcaron y que seguramente explica la timidez del personaje en su primera juventud, con la consecuente prolongación de su pubertad (no como desarrollo anatómico sino experimental) de la cual finalmente Luna Liu dio cuenta y paró de un tajo cuando tenía 20 años… Y por ende cualquier parecido con algunos de nosotros no es pura coincidencia….!

Por lo demás, utiliza para mi concepto muy bien, un buen truco literario para morigerar la densidad de los pasajes más eruditos: mezcla sus relatos, disertaciones musicales, divagaciones existenciales, y la descripción novelesca de amores furtivos, con una trama que involucra un “thriller” o suspenso novelesco cuyo misterio te impulsa a leerse de un tiro el libro completo. Me arrogo el título de ser entre ustedes, mis compañeros del Colegio San José (1965), quien más conoce al Enrique original, me explico, al que nació con él y dentro de él, pues estudié con él desde kinder en el Colegio Lourdes, colegio que tal vez para sorpresa de los jóvenes de hoy, era mixto en toda su primaria. Viví con algunos de ustedes muy cerca de él el traumatizante impacto de la súbita y prematura orfandad de su padre. Y me solidaricé con él siempre

que su exigente pero muy querida y para mí siempre admirada y recordada Celina, me pedía las tareas que Enrique le decía que se le habían perdido. No es extraño pues, que cuando nos hemos vuelto a ver después de graduarnos de bachillerato, lo cual solo ha sido mas o menos cada 10 años y muy fugazmente, nos llamemos desde lejos por un código numérico como si hubiéramos pertenecido a algún correccional. El es el 43716 y yo el 40780..... ésos eran sobre “Una silueta en la partitura” de Enrique Dávila Martínez, nuestros teléfonos de la época escolar!. Ese Enrique, buen hijo, buen hermano y buen amigo era también un rebelde contenido. Por eso, pienso ahora que el otro Enrique, o mejor, el famoso Dante Deledda, de quien yo había oído hablar pero conocía poco, el que surgió después de su arenosa experiencia vital con la bella Luna Liu, en un potrero de Baranoa, de la virginal Cecile al sur de Perpignan, de la cuarentona Marie-Claire vendedora de placer en París, de la modista Pierrette, en su pequeño pero acogedor apartamento frente al Palacio de Versalles, de la odontóloga Eloise Laforete en su estudio en la Île de la Cite, esposa de Honoré, valga aclarar, de la madura pero sensual Lola Fuentes, de la soprano Antoinette Auger, de la candorosa rubia pero exuberante Simone d’Estaing y otras más, ése, repito, pienso ahora es este otro Enrique, quien me actualizó sobre sus últimos 40 años y me deleitó con su obsesión: “Una silueta en la Partitura”.


8

SUPLEMENTO LITERARIO

LA LIBERTAD Barranquilla, Domingo 13 de Octubre de 2013

La ventana de los Poetas

UN DÍA DESPUÉS

AMOR CAPRICHOSO (II)

TÚ (I)

Y después del estropicio, muerte, silencio y miedo. La tarde con tenue luz mortecina sonreía con su místico velo mordiendo el péndulo del tiempo y buscando las miradas de nadie, sin existencia de tierra ni de cielo. Y en los lienzos rustico de las paredes imágenes de sombras proyectadas al mundo imploraban justicia, sin lamentos ni voces quebradas que hicieran de la vida, vil sevicia.

Bueno actúe sin pensar Besé por quererlo Te toqué como una pequeña traviesa Y no como una mujer que soy.

Mis pensamientos son un sentir de lo que mis labios no pueden decir en el momento, y a la vez veloz como el viento te conviertes en mi dulce tormento.

¡Oh fina tarde! de mi pueblo, el sudario, resplandeciente con rayos iracundos, y en las distancias de otros mundos arrástrame en tu carruaje solitario, bajo la diatriba de ese febo moribundo. Y bajo mi inmenso amor fecundo, de céfiros estertores inmaculados, solloza agonía en campanarios, sobre la faz de mi tierra herida, que hicieron del sendero el calvario. DAIRO JOSÉ CASTRO G.

ESTUDIANTE DE ALGÚN PAÍS Está más miserable que doscientos pesos, tiene sólo tela en los bolsillos y un agujero en uno. Quien lo ve simpático no imagina que tiene hambre, y menos si lee libros y ve noticiero. ¿ A través de que nos alimentamos? Si tiene una moneda, tiene un pan. Si tiene un pan, no tiene la moneda. Si tiene un libro, todo lo ha gastado. Vivir es saciar a la vez el estómago y el cerebro…

LIC. FRANCISCO JIMÉNEZ

Será que no te gustó cómo lo hice O acaso buscabas una profesional en el arte de amar? Y no como me dijiste una mujer que acaricie porque quiere no por aventura O acaso mis besos no te gustaron? Es que como no acordarme de ti si fuiste ten delicado que en el primer beso, te distes cuenta Por mi gusto de cómo me gustaras fuese respondido tus besos de tal forma? Esos besos apasionados y ardientes Devoradores, sencillos, pero especiales Únicos, pero compartidos, Besos tuyos que me gustaría tener siempre Pero, aun no comprendo que es un imposible DAYANA MARCELA CASTRO

Que lindo es sentir cuando tú alma vive, y aun sin vida alguna morarías dentro de mí. Pensarte todo el tiempo es más que un pasa tiempo, Mas que un viaje largo con un destino incierto Eres el apego que ilumina mi ilusión, tan vaga e insensata a la vez. No me mires con compasión que me intimida

WENDY PAOLA RIVERA

Lanzamiento literario


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.