El viejo sabio recorrió caminos, muchos caminos; mayores distancias en su mente que en sus piernas; en ocasiones dudaba de su destino o por qué distanciarse, solo su bandera lo apartaban de vacilar, su determinación disputa con la cordura hasta descubrir un punto ondeante donde estas se encontraron... Fue de él un Conquistador Foráneo.
-fin de la primera parte de Lamppost-