El acompañamiento socioemocional es una de las áreas identificadas por la Unesco como fundamentales a desarrollar en el ámbito educativo, en el contexto de la pandemia por COVID-19. Se destaca la importancia del acompañamiento al desarrollo socioemocional como un deber ético y se considera una adecuada conectividad como un derecho fundamental que debiese estar garantizado, para así cumplir con las necesidades educativas de la población en contexto de emergencia sanitaria.