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La corrida al completo de Santiago Domecq
demos de ellos, pero claro muchas veces nosotros nos tenemos que amoldar a nuestra finca y a cosas que otros hacen nosotros no las podemos hacer y viceversa.
Hábleme de la finca, “Garcisobaco”, que es un icono y un emblema no solo en la denominada “Ruta del Toro” ni entre las dehesas andaluzas, sino todo un referente del campo bravo español.
Es una finca que está en una zona muy bonita porque está en el Parque Natural de los Alcornocales, y tiene las virtudes de las buenas dehesas de Cádiz, que para mí tienen una buena variedad de vegetales y alimentos muy nutritivos, que no lo digo yo, lo dicen los expertos y científicos. Después la finca es movida, tiene mucha sombra. Tuvimos un problema hace años porque nos expropiaron parte del terreno por un pantano y tuvimos que reacondicionar sobre todo el tema de los cerrados de los toros, pero ya lo tenemos bien organizado. El ganado, quitando los toros que se van a lidiar, los becerros de destete y los sementales que van cubriendo, está como mínimo nueve o diez meses del año comiendo del campo, y cuando digo del campo es comiendo de vientre del campo, y esos dos o tres meses que faltan se lo complementamos con heno, que producimos nosotros también. A veces tenemos ciertos problemas porque al estar el ganado comiendo gran parte de su vida solo del alimento natural del campo tiende a afinarse, nuestra ganadería es relativamente fina y no muy grande de cuerpo, entonces muchas veces tenemos problemas para ir a plazas de primera porque no tenemos mucho toro grande, que es lo que se pide en las plazas de primer nivel. Pero al final es lo que nosotros criamos y como lo queremos criar, y nos sería muy difícil ahora mismo cambiar el sistema. Iremos poco a poco para poder tener el mayor número de toros con el trapío suficiente para poder ir al mayor numero de plazas de primer nivel.
Cuando decía que había afinado la selección no sé si se refiere a que ha reducido ganado, o tiene el mismo número de hembras y de sementales de siempre…
No. Yo reduje, pero reduje hace más tiempo. En la anterior crisis, la de 2008, coincidieron varios temas en mi casa que me impedían dedicarle más tiempo a la ganadería. En aquella época nosotros lidiábamos catorce o quince corridas, disminuí la ganadería y me quedé con un 60%, porque entendía que no iba a poder atender la misma en condiciones con esos volúmenes. Coincidió con aquella crisis, pero no fue por la crisis, sino porque me surgieron unos temas en casa que me hacían tener que dedicar más tiempo a otras cosas que a la ganadería, y por ahí reduje. Luego hemos seguido manteniendo un número aproximado de 300 vacas desde entonces.
Otro toro de premio en esta plaza y en esta feria fue el célebre “Novelero”, también de su propiedad. ¿Es comparable a “Contento”, el astado premiado este año con la vuelta al ruedo?
Novelero era del hierro de mi madre. Ese hierro lo sacamos mi primo Fermín y yo, porque quisimos hacer una apuesta creando una vacada pura de Osborne. Luego Fermín tenía más lío y no lo podía atender y yo le compré su parte. Entonces tuvimos un problema ahí, porque nosotros le compramos a Osborne y a Núñez del Cuvillo y no encontrábamos sementales puros Osborne que nos llenaran. Hicimos varios intentos tanto en la línea Joaquín Núñez como en la propia de Osborne y no conseguíamos ese toro que nos llenara, de modo que empezamos a cruzarlo con toros nuestros. Ese toro “Novelero”, era 50% Osborne la madre, y el padre 50% Santiago Domecq. Hace mucho tiempo de aquello, cuando redujimos la vacada nos quedamos con ocho o diez vacas nada más de la línea Osborne, o sea que es poco relevante ahora mismo esa sangre dentro de la ganadería.
El hierro de Ana María Bohórquez lo tienen parado entonces… Sí. Lo seguimos teniendo parado porque era un lío tener dos hierros. Si hiciera falta por las razones que sea pues se volvería a activar, pero a día de hoy lo veo una tontería, por eso lo tenemos parado.
De ese toro la gente se sigue acordando, a pesar de los años, incluso El Juli, su lidiador, porque ha sido una de sus grandes faenas en esta plaza…
Fue una gran faena, le cortó una oreja y se le pidió con fuerza la segunda. En aquella época se le medía con fuerza a El Juli y muy estrictamente en Madrid. Entiendo que la faena era de dos orejas claras, pero no solo fue con “Novelero”, también con “Cantapájaros” el año después. Lo medían excesivamente en aquella época y eran muy duros con él.
¿Siente, después de la repercusión que ha tenido su corrida para el aficionado, que se ha hecho “ganadero de Madrid”?
Aún es muy pronto para adquirir esa consideración. Para nosotros sería una gran satisfacción seguir en la línea que estamos ahora, y nuestro trabajo se centra en mantenerla. Ojalá lo consigamos.