olvido
XXXVIII
LETRAS DE RESERVA
olvido
Portada: Ernesto Guevara Manzano (dibujo con sangre de puerco 2010) Colaboradores:
La Reserva:
A. Edgar Poe
Lisa amano Ki
Ana Publinsky
Ari Guerrero
Mercedes Alvarado
Danna
Carlos J. Rodríguez
Muzy Eguiza
Frizia Guerrero
Diana Urobórica
Peter Paul Ramírez Chávez
Inoniel
ERnesto Perro Muerto
Sandrah Mendoza
Leonardo Gabriel García Muñoz
Sergio Daniel Alonso de la fuente
Isamar Pinales Blanco
Xavyer Hiker
Paco Nihil Ro Lis
olvido
Asimismo, el olvido se muestra como una forma de catarsis para superar aquello que nos aqueja, por ello existen decenas de canciones y poemas para hacerle enterar a esa persona que ha sido superada, que quedó en el olvido y así poder dar vuelta de hoja. Nuestros colaborares en éste tomo, tomaron el consepto de Olvido y crearon diversos textos donde nos dan a conocer su persepción acerca de éste. Dentro de las páginas, encontrarán una breve entrevista a Ernsto Guevara, joven pintor de Xochimilco que nos comparte un poco de él. Esperamos disfruten las próximas páginas y no nos dejen en el rincon del olvido.
Letras de Reserva
CARTA EDITORIAL
Todos en algun momento hemos sufrido de el olvido: olvidar las llaves, olvidar una cita, olvidar las clases de álgebra, olvidar tu propia identidad. Y muchas de éstas veces, aquel pequeño despiste nos causa grandes problemas, pero en otras ocasiones, somos nosotros los que no deseamos recordar algunos momentos de nuestras vidas, ya sea por cuestiones del amor o por traumas que preferimos dejar de lado.
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olvido El abandono 5 Ari guerrero
Contenido
Esbozo 6 Leonardo Gabriel García Muñoz Las ruinas del olvido 7 Diana Urobórica Debajo de los escombros 8 Sandrah Mendoza ¿Qué es el olvido? 9 Xavyer Hiker Sin título 10 R. Lis Los enviados de dios 12 Sergio Daniel Alonso De La Fuente La fría espera* 13 A. Edgar Poe Sin título 15 Muzy Eguiza Entrevista a Ernesto Guevara Manzano 16 Paco Nihil (Otro) Poema para llorar 24 Mercedes Alvarado Tiempo y olvido 25 Carlos J. Rodríguez In-the-gente 26 Ernesto Perro Muerto Quiero sentir la muerte 28 Peter Paul Ramírez Chávez La hortensia 29 Lisa Amano Ki Soledad Tendida 31 Frizia Guerrero
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La mentira radica en la vida cotidiana, la apariencia constante de las cosas y la permanente estructura de los edificios y monumentos. Todos los escenarios que recorrí a tu lado no son más que un oasis en el desierto de mis sentimientos. En ocasiones me doy cuenta de que han cambiado la pintura de alguna fachada, que han tumbado de repente un árbol para ampliar un lugar de estacionamiento o simplemente que el foco del vecino se ha fundido, es entonces que parece que he olvidado algo. Trato de evocarlo y lo pienso incansablemente hasta causarme migraña. Mastico un par de pastillas y cuento un centenar de ovejas para poder dormir. En mis sueños encuentro respuestas que no puedo retener, sin embargo la mañana siguiente es esperanzadora.
¿Hace cuánto no pienso en ti?, ¿Desde cuándo no estás conmigo? Es una tremenda mentira que el tiempo sane las heridas, todo se mantiene tan igual que el único camino que nos queda es el abandono de lo que no está. Tenía razón en pensar que el ayer me llevaría a este momento, tan alejado de tu risa o mi llanto por tu partida. Hoy es ese futuro que no me quería encontrar. Tu recuerdo ya no vendrá.
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ari guerrero
Cierro con fuerza los parpados tratando de encontrar una imagen precisa de aquellas épocas o un sonido parecido al de tu voz, pero no los hay. Empiezo a contar los días y tampoco puedo recordar la temporalidad de este asunto
el abandono
Una pequeña laguna en mi conciencia me lleva a sentir que estoy a tu lado. Extiendo el brazo y aunque el sol empieza a caldear la habitación, tu espacio sigue frio, vacío. La luz entra siempre por la misma rendija y señala el sitio donde antes estaba tu ojo cerrado o la nuca cuando dormías boca abajo. Me enredo en las sabanas e imagino tu reacción de disgusto al despertar (empezaría nuestro habitual juego de poder y pelearías con todas tus fuerzas para salvarte del frio, por obtener la parte que te toca; nunca me rendí en aquellas guerras, pero siempre perdí ante tus brazos, tus ojos y labios).
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olvido
Tus labios de tiza
esbozo
leonardo gabriel garcía muñoz
con paño seco he borrado, extraño tus dibujos rayando garabatos, no distingo el de mejor trazo, pero si, el que más amo, y ahora, con duda y agua, contemplo esta mancha que me quedó.
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olvido
el tiempo les toma arrebatadamente sus raíces, su abrazador refugio. Aquella sabiduría, se volvía polvo, al igual que las rocas. al igual que el viento.
La noble belleza era arrastrada por la ignorancia, como el viejo que quiere ser joven, como la historia, sin un imperio.
Los pasos cascoteados, dejan escombros de herencia, su autenticidad moral camina con las estaciones del año, dejando carcasas que retomarán camino, como impenetrable batallón de guerra, como una extraordinaria obra de arte.
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diana urobórica
Como una tribu sin danzantes.
las ruinas del olvido
En el mundo del porvenir sollozaban,
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sandrah mendoza
facebook/SandrahFou jodiendomisfalanges.blogspot.com
debajo de los escombros
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“Sospecho que así, se vengaba a través del olvido, Cupido de mí...” (Sabina)
Tengo miedo a veces mucho otras no importa y ni miro a ver si hay autos en la pista sólo paso desvío la vista y pienso: Otros días he estado triste hoy es sólo la costumbre de poner saxofones entre mis paredes mientras observo éste techo que parece caer a pedazos Pero ya no escupo hacia arriba ya no blasfemo ya no estoy ebria ya no pienso en ti Hoy hace frío y aún no es Diciembre no sé qué haré esta vez pero estoy segura de que no volveré a verte...
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olvido
LETRAS DE RESERVA
Olvido, ¿Qué es el olvido? Quizá el recuerdo ausente de un hecho pasado Quizá la mirada perdida en lo profundo del tiempo
Quizá una gota de lluvia perdida entre la tormenta Quizá lo que siento cuando miro confundido tu foto y no sé quien fuiste Quizá lo que impulsa a los hombres a cometer los mismos errores, las mismas guerras, los mismos dolores y los mismos cantos. Quizá el nombre de los ya sin vida porque el olvido no les sirve a los inmortales. Quizá olvido seas tú, o yo, o todos ellos. ¿Qué importa? igual, ya no lo recuerdo.
Xavyer hiker
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¿qué es el olvido?
Quizá el sonido de un intrépido árbol cayendo en medio de la nada
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R.LIs Canon EOS XS Canon EF 50mm 1:1.8 Fuji proplus II Iso 200 35mm (Escala de rojos) C41
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sergio daniel alonso de la fuente
los enviados de dios
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Dios marchito, justicia divina del modo más violento persecuciones de hambre y venganza de encuentros fortuitos, incertidumbre y desesperanza con la mirada podrida pero de nuestros fluidos sedientos, cuando el cielo se consuma se tornará en cementerio, la lluvia nos matara a todos y los muertos caminaran entre nosotros. Ya no habrá justos, todos somos pecadores, se escuchan gritos y sangre en el pavimento brotarán los olvidados y enterrados en el tiempo restos de epitafios, hedor funesto que no se disipa con el viento de nuestros crímenes. No quedaremos impunes ni lejanos a todo el mal que hemos creado. Un ser supremo ha enviado a los no-muertos consumen pecados, somos su alimento.
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La respiración se aceleraba mientras la sangre corría velozmente por su cuerpo, insuflando a los miembros un vigor poco visto, a pesar de tener una herida por la espalda, justo en dirección de la axila izquierda, su respiración se dificultaba demasiado, podía oír el gorgoteo del pulmón perforado. No debía rendirse, necesitaba sacar fuerzas de la flaqueza, pues quería ver una vez más a su hijo y nieto recién nacido. A lo lejos divisó una pendiente por donde podía llegar a su campamento y pedir ayuda. Mientras tanto quiso remover la flecha cuando descansaba por unos minutos, pero en su afán, la punta se incrustó más, rompiéndose la varilla a la que estaba atada.
Se apresuró pendiente arriba con los cuatro enemigos pisando sus talones, las fuerzas estaban abandonándolo, se iba en sangre, el miedo erizó su piel y el instinto de supervivencia hizo que girara de imprevisto para defenderse, golpeando a uno con su hacha y partiéndole el antebrazo.
un mandoble por la espalda, abriendo los músculos con la espada, un grito aterrador se sintió chocar en las paredes rocosas, detuvo otro golpe con su mano sobre el filo, la piel cedió rápido ante el avance del metal, el corte profundo le quitó el equilibrio haciéndole caer cuesta abajo entre las malezas y flores, justo sobre un hueco pudiendo así ocultarse amparado por la oscuridad.
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a. edgar poe
Quizás ese fue el último acto combativo para aferrarse a la vida, para ver a su familia un día más, él sabía que estaba agonizando; hizo frente a los tres restantes, los colocó en línea recta de modo que ellos se estorbaran entre sí para lograr de esa manera una ventaja sobre el número, pero uno se escabulló dándole
la fría espera*
Cuatro eran los persecutores, estaban armados y cazándolo como a un ciervo a corta distancia, en algún momento sería alcanzado, notó las voces de aquellos lobos implacables a escasos metros, se preparó mentalmente, respiró profundo muy adolorido y lanzo piedras con la esperanza de herir a alguno de sus enemigos, pero estos al anticipar sus lentos y torpes movimientos lograron esquivarlos con facilidad.
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Mientras tanto reinaba en sus enemigos la incertidumbre y la falta de ánimos, dialogaban que hacer, decidieron separarse enviando al herido con uno de los más jóvenes de regreso al campamento, el resto esperaría atentamente para rematar al solitario cazador. Luego de varias horas salió de su escondite, ensimismado, como hechizado por el atardecer rojo, quizás alucinando con su agonía, envuelto en la nostalgia que precede a la muerte, sintió al viento acariciar su cuerpo, aquella barba con canas y sus miembros fatigados; había vivido a pleno cada día de su vida, cerró los ojos aun en pie, respiró profundamente, al abrir los ojos notó una sombra acercarse con sigilo, dibujando un brazo en alto con un hacha que bajaba lentamente hacia su nuca, ya no lucharía más. Encerrado en un ataúd de hielo y envuelto por la eterna primavera, su cuerpo fue hallado en septiembre de 1991, luego de 5.300 años en el silencio del glaciar. Walther Parson director de la investigación acerca de Ötzi, cruzo datos genéticos en la universidad de medicina de Innsbruck (Austria) para así cotejarlo con individuos de los Alpes Tiroleses, el hallazgo fue sorprendente, se encontraron 19 parientes, pero por la ley de protección de datos que amparaba la investigación, sus descendientes no podrán saber que lo son, dejando los restos de Ötzi con su sombría y triste espera (la de reunirse con su familia).
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No te recuerdo ¿Cuándo fue? Si te digo que me voy al fin del mundo en la noche cuando quizá el destino nos quiere ver juntos entonces, con todo; necesito huir. Venir, irme, regresar, tomarte, escapar y olvidar. Al final del día volare tan lejos como pueda como me lo permitan las termitas que han roído desde el pasado mis sueños y así, si la mente me deja no pasarte por alto eventualmente aparecerán como pequeños suspiros lo que dejes en mi cama y antes de dormir con mi vida no seré la única persona que te hubiera amado seré la que no olvides de tu lista y antes de relegar este momento me quedo sin aire. Y lo que respiro de los dos, será para tu bien lo que omita mi memoria.
muzy eguiza
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“Siempre he estado seguro de que la pintura puede significar más que un sólo bello cuadro de antesala.” LETRAS DE RESERVA
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Ernesto Guevara Manzano www.facebook.com/pinturaernestoguevara
Entrevista por Paco Nihil
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¿Cuántos locos rondan por las calles de la nación de la amargura? Las miradas cabizbajas abundan transitando las baldosas de los parques. Farolas citadinas iluminan la oscuridad del alma. Desparraman fragmentos de sueños rotos por las bolsas descosidas de los sacos. Sonrisas desgajadas, profundas. Ernesto se autodescribe como alguien pesimista, sin embargo ha encontrado en la pintura una salida, una válvula de escape que le permite tomar aire de un paisaje onírico y regresar a la realidad. Depresivo, ha tenido lapsos de abuso de alcohol y otras sustancias, adicto a cualquier cosa que provoque placer, incluido el amor. Es un artista que ha desarrollado una técnica que le identifica de inmediato con su entorno y con pedazos de su vida infantil, aunque esta estubiera empañada por la violencia intrafamiliar. Muchas de sus obras las hace con tierra, basura, flores, pedazos de madera, cosas con las que se encuentra y son congruentes con el mensaje que se intenta transmitir. Es también un creador que ha pasado de una faceta estética, a una denotada preocupación social por cuestionar las bases superficiales y edulcorantes de la sociedad actual. Esto lo ha llevado a no creer en el arte, sino situarse como un trabajador que desarrolla un oficio, la pintura, y como cualquier humano preocupado por su trabajo, el vacía estas preocupaciones en su obra. En esta ocasión solo tuvimos la oportunidad de conversar con él por medio del chat, pero su personalidad se deja entrever en cada línea. Sincero, no parece tener nada que ocultar detrás del maquillaje barato de las personalidades sociales actuales, él se muestra tal cuál es, sin intentar mitigar esa personalidad interior de la cual muchas veces intentamos escapar. Título: Golondrina Técnica: acuarela sobre papel de algodón Medidas: 20cm x 10cm Año de producción: 2014
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Paco Nihil: ¿Quién es Ernsto Guevara? Ernesto Guevara: Nací en un hospital del centro de Xochimilco. Mi padre era doctor y mi madre fotógrafa. Crecí en un ambiente sumamente violento, donde mi padre golpeaba a mi madre cuando llegaba alcoholizado. Crecí en una familia donde no había carencias de varo, entonces desde pequeño tuve una cercanía muy estrecha con las artes. Primero me atrajo la música, pero yo era muy malo. Después conocí la pintura y el dibujo. Por el contexto violento en que viví, se convirtió en una ventana que me permitía desprenderme de la realidad en que vivía. A los 18 años conocí grandes pintores y maestros como Luis Nishizawa Flores, Miguel Ángel Suarez Ruíz y Dario Melendez, en la Enap y en la academia de San Carlos. Todo empezó como una medida terapéutica y hasta autista para desprenderme de la realidad o hacerla más llevadera. Actualmente me preocupa no tanto la funcionalidad del arte, sino la responsabilidad social que está debe tener. P.N.: ¿Cuánto tiempo llevas pintando, actualmente vives de eso? E.G.: Pinto desde los 7 años. Sí, vivo de hacer retratos u otros trabajos que luego me encargan. P.N.: ¿Cómo ha sido tu evolución como pintor, que cambios has experimentado de tu trabajo de niño al de ahora? E.G.: No sé si hubo una evolución pues eso hablaría de un crecimiento, pero sí hubo
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Título: Ernesto Guevara M. Técnica: óleo sobre madera Medidas: 125cm x 125cm Año de producción: 2014
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muchos cambios. De niño, la pintura funcionaba como una ventana onírica que me servía para desprenderme de la realidad. Para eso, hacía lecturas de los espacios y objetos que me rodeaban, regularmente de interiores, con la intención de entender, recrear o reconstruir mi contexto. Fue hasta los 12 años que empecé a dibujar paisajes de Xochimilco. Pero hubo algo que me marco para hacerlo. Una vez que fui al mercado con mi “jefa” vimos a un señor muerto en el parque. La gente sólo se acercaba y lo veía, decían que lo habían matado por teporocho y cosas por el estilo. En ese momento me comencé a preguntar por qué la gente que se acercaba no sufría con él, no importaba que no lo conocieran, pero era un ser humano. En ese
momento comencé a hacer paisajes de Xochimilco, pero no los canales y las iglesias, sino construcciones abandonadas y paredes descascaradas. Después empecé a hacer intervenciones en las calles de Xochimilco con basura, tierra, flores, sangre y más cosas que me regalaban en el mercado porque ya no les servían. Representaba cadáveres en lugares donde habían ocurrido asesinatos y en repetidas ocasiones llamaron a la patrulla. Yo explicaba en el ministerio público que era una simple representación y cuestionaba que con el olor y la presencia de muerte no hicieran nada. Después mi pintura cambió mucho. Me concentre en analizar las carencias en la pintura contemporánea. Yo veía que los vacíos en el arte son vacíos en la vida del ser humano. Título: Estudio de pájaro muerto Técnica: tinta sobre papel (bitácora)
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Algo que me he dado cuenta, es que la pareja que este caminando conmigo en ese momento influye mucho en mi obra e, irremediablemente, las rupturas me mercaban un chingo, porque soy bien depresivo. Hubo un tiempo en que no podía dibujar y sólo me “clave” con la coca y el alcohol. Los cambios que actualmente se ven en mi trabajo los explico en un texto mío que se llama “Fracturando el vacío”.
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Creo que la obra debe ser congruente con el medio que utiliza y el tema del que desea hablar. Utilizaba maderas, pizarrones, cristales, no sólo el típico bastidor de tela. Pero lo de la sangre es algo que utilizo a ratos, no es algo que defina mi obra.
P.N.: Para ti, ¿Cómo se concilian el ámbito independiente y el comercial? E.G.: ¿A qué te refieres? ¿A las industrias culturales? ¿A lo que se denomina arte y P.N.: ¿Qué técnica utilizas y que expli- a lo que no? ¿A los que viven con la idea cación le das a los elementos que usas del artista (pintor) que tiene que morir en tu obra? de hambre y estar siempre situado en E.G.: Utilizo óleo y en algunos casos acu- esta idea idílica y demente de siempre arela. Lo de la sangre, yo creo es por el estarse pintando frente a un espejo: deacercamiento que tuve con ella desde sprendido de todo como un autista? ¿O niño. Me lanzaba a las cirugías de mi a qué? padre y hacía dibujos de las escenas. Título: Obituario
nacional Técnica: refresco (la gente en el transcurso de la noche realiza- ron inconscientemente el dibujo con la mugre de sus zapatos) Medidas : 80cm x 45cm aprox.
Año de producción: 2012
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P.N.: Me refiero a lo que mencionas al final. Esa idea de que el artista que vende su obra y otros que lo hacen por “amor al arte”. De igual manera que pudieras explicar qué significa para ti ser un artista independiente y cuando se es un artista comercial. Qué diferencias o semejanzas encuentras entre ambos tipos de artistas. E.G: No creo ni siquiera como tal en el arte. Yo concibo a la pintura sólo como un oficio, en el cuál hay amor, pero también un chingo de odio. Vender o no vender una obra nunca me ha causado conflicto. Creo que es más importante analizar por qué se consumen ciertas obras y otras no; qué es lo que los museos y estetas/curadores denominan arte y qué no, y más aún qué denominan cultura y qué no. Ante la concepción de cultura, yo me situo en la postura antropológica de la cultura, la cual dice que todos tenemos cultura y que no hay ni menor ni mayor cultura. P.N.: ¿Entonces no crees en el arte? ¿El arte como elitista? ¿Crees que el arte cumple una función más allá de lo estético? E.G: No, no creo en el arte. Seria la intención de que el arte no fuera el mero placer o displacer estético. La pregunta es si realmente cumple o no una función. No creo que situados en una sola disciplina o sólo desde las artes se produzca un ruptura ¿sabes? pienso que hace falta la comunicación y el dialogo intercultural. P.N.: ¿Cuáles son tus pintores o artistas de otras disciplinas favoritos? E.G.: Mis pintores o artistas favoritos, Antonio López, Alex Kanevsky, Héctor herrera, Paulina Jamase, Arturo Rivera, Oscar Muños, Jenny Saville, Omar Rodriguez Graham.
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Título: Proceso (primera sesión) Pie de cuerpo en la morgue Técnica: óleo sobre madera Año de producción: 2014
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Nota del editor: La entrevista no pudo ser concluida, pero aprovechamos el espacio para agradecer a Ernsto Guevara por compartir un poco de su pensamiento y vida personal. Así como invitar a los lectores conocer más de su obra.
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Quiero llorar con tus ojos, llenarte de lágrimas la memoria para dolerte otra vez – alguna vez – como debió ser. Un día al menos para dolernos hasta el estómago como la enfermedad que nunca curamos una tarde para caernos con toda la luz que se nos va sin habernos alumbrado hacia delante.
Mercedes Alvarado
(otro) poema para llorar
Llorarte con tus ojos, congestionarte los pulmones hasta dolerte el pecho, la nariz con que nos exhalamos como vientos que nunca concilian; dolerte en los párpados cargados, hinchados, llenos de agua que no sirve: Dos ríos que el hombre olvidó. Llorarte nuestros días hasta mojar tus pies y luego volverme a mí, vacía de lágrimas. Necesito saber que me lloraste, que fui canción en el mismo sitio donde fuimos más que llanto saber que un día cantarás a mi memoria; otro día, cuando no importe más llorarnos.
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Titulo: Tiempo y olvido Autor: Carlos J. Rodriguez Tecnica: Acuarela A単o: 2014
in-the-gente
ernesto perro muerto
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xxxvii:/fecha:/doce de diciembre del dos mil caotrce/ ”manifestación g u a d a l u p a n a /p e r e g r i n a c i ó n política”:/ambas como dinámicas políticas de comunidades que ponen a disposición el cuerpo y la organización en tanto se encuentran dominados por una idea/por qué no hacer de una peregrinación religiosa una manifestación política/ si desde otro ángulo podemos ver a las manifestaciones políticas casi como una peregrinación “religiosa”/mi idea es conseguir un contingente capaz de insertar una consigna política dentro de las peregrinaciones guadalupanas/la estrategia es conectar las condiciones de la consigna política con las condiciones del mito que provoca la peregrinación/esto es/cristo desaparecidxs/ virgen de guadalupe madre de lxs desaparecidxs/xviii:/ mi cuerpo rueda sobre la calle/ llevo puesto un pasamontañas/un paliacate/una playera del grupo “brujería”/acabo de bañarme en mezcal/detrás de mí camina un grupo de ocho personas/con paliacates rojos en la cara/tras de mí también camina mi mamá/(era su regalo)/mi novia/mi ex esposa/ y mi hijo/(él también traía puesto un pasamontañas)/el contingente
avanzaba al ritmo de guitarra/llevando como estandarte a la virgen de guadalupe/mientras todos cantábamos el himno zapatista/ yo continuaba rodando/y así seguí hasta que el tumulto de gente ya no me permitió avanzar/[en este punto me gustaría dar una breve explicación del acto/el baño de mezcal/ además de ser un bautizo caliente/también tiene que ver con mis primeras borracheras en la vida/a los once años/fueron con mezcal/ la playera de “brujería” tiene que ver con esa rebeldía adolescente/ en la que muchos adoptamos iconos ruidosos/sólo para molestar a nuestros padres/el pasamontañas tiene que ver con el zapatismo/la acción de rodar por el suelo tiene que ver con las procesiones fidencistas/lo que quise tratar con esta parte de la acción fue la marginalidad de las dos dimensiones presentes en la “manifestación guadalupana/peregrinación política” liderada por funden/fuerzas unidas por nuestros desaparecidos/ que son la dimensión religiosa y la dimensión política/en mi caso quise fusionar la marginalidad religiosa del fidencismo/con la marginalidad política que tiene el zapatismo frente al sistema
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político oficial]/me quedo tendido boca arriba hasta que terminamos de cantar el himno/me dan muchas ganas de llorar/llevo dos días sin dormir/dos días enfermo de ideas en la cabeza/dos días de sueños despierto y despertares en el sueño/sin dormir/veo a los guadalupanos reunirse a mi alrededor/me cubro la cara para ocultar mis lágrimas/en caso de que decidas salir/cosa que no sucede/ el himno termina/me hinco/me quito el pasamontañas/me cubro el cuerpo con un chal/esto como simulando el abrazo de una madre/miro al frente/mucha gente me mira/trato de mirar al mayor número de personas que pueda a los ojos/luego comienzo a gritar el siguiente texto dirigiendo mi mirada hacia la basílica de guadalupe:/”perdóname madre por mi vida loca/perdóname madre por mi vida tan loca/perdóname madre por mi joven aliento a mezcal/pero nunca aprendí a comprar mi muerte con otras monedas/perdóname madre por mi aliento a cerveza/pero nunca aprendí a expiar mis pecados con otras aguas benditas/perdóname madre por tanto caminar/por tanto caminar/por tanto camino/por tanto caminar/perdóname madre por tantas veces que llegué amaneciendo a casa/por tantas veces que llegué sin dinero/por tantas veces que llegué sin trabajo/por tantas veces que llegué sin piernas/sin bra-
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zos/perdóname madre por tantas veces que llegué a casa sin vida/pero llegué/perdóname madre por aquella vez que no llegué a casa/y no llegué/y no llegué/y no he llegado/pero sientes que algún día llegaré/perdóname madre por tantas veces que desaparecí/por haber desaparecido/por haber permitido que me desaparecieran/perdónalos madre por haber permitido que nos desaparecieran/por haber permitido que me crucificaran/perdónalos madre por haber permitido que nos crucificaran/ perdóname madre/perdónanos madre/ que yo ya te perdoné/que nosotros ya te perdonamos/por haberme traído a este mundo/por haberme dado este cuerpo/ por haberme dado esta vida/por habernos traído a este mundo/por habernos dado estos cuerpos/por habernos dado esta vida/perdóname/perdónanos/y perdónalos/líbranos de toda cruz/ amén”/al final me pongo de pie/me escondo tras el contingente/afortunadamente no recibo aplausos/me acerco a mi mamá que llora/ella sí puede/la abrazo y le pido perdón/ella sabe por qué
peter paul ramírez chávez
quiero sentir la muerte
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De un hombre derrotado por el fuego y la espada de los conquistadores... Sentirlo tambalearse sudar y estremecerse gemir hasta quedarse sin aliento. Quiero sentir los gritos del vientre de una madre que se arrastra sin fuerzas y sin piernas a besar a sus hijos silentes desangrados mosqueándose en el barro de la noche. Quiero sentir su pena quiero estar conmovido quiero ser malherido por sus lágrimas y caer junto a ellos con los huesos rotos por el sufrimiento. Quiero sentir su angustia porque es insoportable saber que no se borran las muecas de dolor con sólo dibujarle una bella sonrisa a los cadáveres de un pueblo asesinado. Quiero sentirlo todo pero ¿saben? la mañana es hermosa en esta época: no hay nubes de tormenta no hay furia en las heridas no hay muertos en las fotos de mi alcoba ni temores siquiera... Aquí no pasa el odio con sus cantos de rabia a despertar las ansias de venganza y es tanta la tristeza de esos pueblos es tan cruda y antigua tan lejana que es difícil volcarla al interior de un alma que respira relajada en un mar de rutinas donde los ríos de sangre se disuelven en sales del olvido.
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Fue como si una especie de sombra negra me arrastrara bajo la hortensia. Y así fue. Lo último que recuerdo es que yo estaba en el parque. Sentí un jalón y de lo único que puedo acordarme es que era arrastrado por unas raíces que provenían del interior de la tierra. Después de unos segundos, minutos, no losé, yo estaba perdido, cansado, furioso y asqueado por el hedor que despedía el lugar. No sabía dónde estaba exactamente y no lograba concebir cómo me había perdido de tal manera. Me detuve para poder orientarme, pero no había una casa o un árbol que me permitieran ver en dónde estaba. Mientras mis pies se movían nuevamente, el olor putrefacto crecía. Casi podía ver humo verde o era mi imaginación, no lo sé. ¿Qué olía así? Me tapaba la boca, no quería percibir más ese olor. No lo quería dentro de mi aparato respiratorio ni mucho menos en mi estómago. Caminaba y no había ni principio ni fin. No había más que la nada. Después de seguir vagando sin rumbo, me encontré con una niña que estaba hincada. Lloraba. Corrí a ayudarla. Ella me miró.
-He estado sola aquí por tanto tiempo, pidiendo ayuda. Pero ellos me dijeron que me callara que no tenía sentido el gritar, el llorar ni el hacer berrinche. - ¿Ellos?, ¿quiénes son ellos? - Los que llegaron primero. Dijeron que no tenían sitio para mí. - ¡Déjalo! ¡Él no debe ir allá! ¡Por favor, no la dejes ir allí! ¡Si la llevas nunca volverán! - No seas mala. Yo nunca quise venir aquí abajo. No me gusta estar aquí.
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La niña me tomó de la mano. Me arrastraba. Yo no quería dejarla. Así que la seguí. Yo sé perfectamente lo que es estar solo y tener miedo. Yo lo siento todos los días.
la hortensia
- ¿Qué pasa pequeña? ¿Estás perdida? - Tengo que salir de aquí, se me acaba el tiempo. Necesito ir a mi casa. - No llores, estoy aquí. -Es que no quiero ir ahí sola porque me da miedo. - Está bien. Es algo muy normal, el tener miedo. - ¿Me ayudarás? Si estoy con alguien sé que lo lograré. Acompáñame, por favor.
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Miré a la pequeña. Le toqué la cara, las manos, los pies: la piel de la niña estaba fría. Tomé sus manos con calidez y las apreté muy fuerte, para darle valor. -Creo que es mejor no ir a ese sitio. - ¿Entonces a dónde iré? -Iremos arriba. -No quiero. - ¿Por qué? -Estoy sucia. La gente dirá que les doy asco. Seguramente tú también lo dirás. -Yo no diré eso. -Mentiroso. Seguro que lo dirás. ... Yo nunca podría decir eso de la niña. Yo nunca podría decir eso de la niña. Aún sigo sin decir eso de la niña. Soy la única persona que la recuerda. Todavía tengo esa última imagen suya: cuando la sujeté de su rostro carnudo y sucio, junté mi frente con la suya, cerré mis ojos, pero al abrirlos, había un cuerpo óseo, no más pequeña llorona. A pesar de que di parte a las autoridades de aquel cadáver que yacía bajo la hortensia, nadie lo reclamó. Esa cavidad en donde alguna vez hubo unos ojos color café, unos labios que emanaban saliva, unos brazos y unas manos sucias y sudorosas, hoy permanecen en el olvido del resto de la gente. Excepto para mí.
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Preñado desierto adivina -tras vahído instinto referido al confinamiento de estímulos-, el intermitente dimensionamiento de la particular indolencia.
Malsana exégesis
retuerce
obstruido atajo, disloca el sentido de ridículos ritos: Fingido esparcimiento. Disquisición fúnebre rodea; oculta clara fóvea momificada, hirsuta. Precaución flanquea filias discrepantes. confronta
lamentos y gritos que aletargan y enfurecen la emisión de intenciones aplastadas. Bloqueo fútil al encuentro
de apetencias
descifradas desde la ambivalencia de anunciada inmolación. Sustitución de canto ríspido por soledad tendida. Segmentado texto
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abatimientos.
dispone Modula descompuesta ruina.
frizia guerrero
Limítrofe verbo
soledad tendida
Omisión reside en la paráfrasis del ser.
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Cíclico vuelo retocado con fotogramas suicidas: Prisma calcinado con el cual dibujar el perímetro de negruzcas plumas. Imposición húmeda a aceitosas y plisadas manos. Virado aliento pinchos electrificados
propaga que abren
sabor intenso de opresión brumosa. Charca destilada ampara sustos refinados, trasciende proliferación criminal de parábolas. Aceptación negada a categoría suspensa.
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