Aula 67 Nº 10

aul a 67

información universitaria primer semestre 2021 - N*10

dossier La mecánica del centro de diagnóstico, por dentro Los aportes de la UNQ en prevención, diagnóstico y recuperación de COVID-19 Pág. 32

representación estudiantil Inscripciones Primer cuatrimestre Frente al límite de materias: respuesta y solución Pág. 38

extensión Educar desde la libertad como usuarios Los aportes del software libre para la libertad informática y educación Pág. 22

servicios y beneficios Becas Trans-formación La UNQ es pionera en otorgar becas para la población trans/ travesti. Pág. 64

sumario política institucional UNQRadio convoca a formar parte de su programación................. Primera universidad en implementar becas inclusivas................... La UNQ acompaña la virtualidad.....................................................

política académica Estudiar, egresar, ¿trabajar? ¿de qué?..................................................... Becas de grado y posgrado, una ayuda para los estudiantes.................. El presente virtual de la Universidad........................................................ CONECTIVIDAD (POSTAL)...................................................

investigación Todo está cargado en la memoria. Y ahora también en la web............. Eduardo Gosende: “Lo ideal sería que hagamos más hincapié en la formación en ESI de les estudiantes”.......................................... Yamila Santillán: “Las enzimas son una especie de máquina”......... De lo acústico a lo electrónico.........................................................

extendiendo a la universidad La División Salud y Discapacidad sigue en acción............................ Educar desde la libertad como usuarios.......................................... Pasión por la cerveza al alcance de todos y todas........................... MANOS CÓMPLICES (POSTAL).........................................

UNQachito de qultura “Esto afectó toda nuestra dinámica diaria”..................................... “Esta nueva forma de vincularse trae algunos beneficios”.............. El coro de la UNQ ensaya de forma virtual por la pandemia............... Ságora, el software que surgió como necesidad..................................

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dossier La mecánica del centro de diagnóstico, por dentro.......................... El primer centro de aislamiento, el segundo y el centro de vacunación.. El funcionar del Centro de Telemedicina COVID................................ ESCUELA (POSTAL).................................................................

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representación estudiantil Maximiliano Ríos: “Entre el 98% y 99% de los reclamos que se presentaron, tuvieron una respuesta y se solucionaron”.................. Julián Arbios: «Las elecciones presenciales son la única democracia real que tenemos»....................................................................................... Camila Sanabria: “La universidad actuó efectivamente ante esta necesidad”........... Henry Chiroque Solano: “Uno de los problemas que tenemos desde la universidad es ver la brecha digital”.................................... Milagros Lamboglia: “La virtualidad le permitió a les estudiantes estar en contacto con nosotres en todo momento”..........................

deportes unq “A pesar de la adversidad, la experiencia fue generalmente positiva”..... Todo lo que tenés que saber sobre los Bonaerenses 2021....................... Laura Carbajal y el fútbol: “Que se empoderen y lo disfruten”................. “Desde nuestro lado, siempre tratamos de transmitir el valor y respeto hacia el otro”.............................................................................. TE PUSISTE LA 10 (POSTAL)...............................................

relación con la comunidad La UNQ como centro vacunatorio...............................................................

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editorial La pandemia puso en jaque el tiempo y el espacio. El desconcierto, el dolor, el distanciamiento físico, la virtualidad, el barbijo, el 70/30, y el alcohol en gel irrumpieron en nuestras vidas. Cuando el contexto nos hablaba de incertidumbre, decidimos generar una certeza: el encuentro con lxs pibxs del Club de Periodistas de la ESET para abrazar un proyecto colectivo. No se sale del hambre con un plato de comida, se sale del hambre con trabajo”.................................... Por una Universidad Ecológica.................................. María Cristina Chardón: “Es un espacio de contención y socialización”............................................

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servicios y beneficios UNQradio te busca: Convocatoria abierta a nuevas ideas y proyectos............................................................... Zoomándose al campus.................................................... La biblioteca Laura Manzo frente a la virtualidad........... Pioneros en TRANSformación.......................................... PERSPECTIVAS (POSTAL)............................ POSTALES DE PANDEMIA DESDE ACÁ..............................

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Mientras transitábamos el aislamiento en fase 1, fuimos tejiendo un nuevo modo de vincularnos. Nos propusimos poner en juego la palabra, dar lugar a sus sensaciones, a sus miradas, sus pensamientos. El miedo a lo desconocido no logró paralizarnos. Era indudable que había que favorecer la participación y dar lugar a su protagonismo. Cinco postales, cinco años de “Aula 67” y el espacio que nos encuentra y nos reúne, aún en pandemia: nuestra querida “unqui”. En este quinto aniversario de la revista, nos tomamos un respiro y festejamos la posibilidad de construir un puente más entre la escuela y la universidad, entre la universidad y el barrio. “Desde Acá” gestamos cinco dibujos grabados sobre la pandemia: desde un lugar de escucha, desde las miradas de lxs pibxs, desde la potencia del encuentro pedagógico; desde “la escuela de la universidad” (como la llaman en el barrio). Sobre estas postales también está impresa la huella de Juan Bértola que recogió las voces de lxs pibxs y con cada trazo de tinta estampó la impronta de lo compartido. Delante de las postales hay mensajes, movimientos, producción de conocimiento, un auténtico acto de comunicación. “Perspectivas”, “Conectividad”, “Escuela”, “Manos Cómplices”, “Te pusiste la diez” son los títulos de las imágenes que hablan de un camino de encuentros, reflexiones conjuntas, historias, vivencias y deseos de quienes formamos parte del Club de Periodistas. Un proyecto construido paso a paso, sentir a sentir. No hay dudas, la salida es colectiva y el camino también.

Tatiana Zlatar Docente, coordinadora del Club de Periodistas y del Bachillerato en Comunicación Escuela Secundaria de Educación Técnica (ESET-UNQ). Directora del Proyecto de Extensión Universitaria “Desde Acá” (ESET-UNQ)

política institucional

UNQradio convoca a formar parte de su programación UNQradio surge para sumar voces a los medios de Quilmes y para que la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) cuente con un espacio para comunicar lo que hace. :: Por Julián Caricatto y Ángeles Sánchez El proyecto de la UNQradio nace con la sanción de la Ley 26522, de Servicios de Comunicación Audiovisual en 2009. La ley otorgó a cada universidad pública una frecuencia de radio y la UNQ fue una de las que trabajó para tenerla. “No fue fácil porque no había suficientes, pero gracias a que el Obispado de la Diócesis, que tenía varias, nos cedió una, lo logramos”, contó el rector Alejandro Villar.

Tras la concreción del primer paso, surgieron obstáculos para la concreción del proyecto. “Con la administración macrista nos bajaron la altura de la torre, aduciendo que era peligrosa para la bajada de aviones -cuando a seis cuadras hay una en la Biblioteca Mariano Moreno-. Y nos acotaron la potencia del transmisor con la justificación de que íbamos a invadir a otras emisoras”, explicó el rector. Luego de múltiples idas y vueltas, se instaló la antena en el tanque de agua que se encuentra detrás del edificio Espora. En noviembre de 2019 arribó el container que, reciclado, se convirtió en el estudio y por último, tras una etapa de pruebas, se inauguró la Radio. Tanto Villar como Martín Iglesias, director de la UNQradio, tienen como horizonte ampliar las voces en los medios, tener una programación diversa y también difundir las actividades de la Universidad en la comunidad. “Se espera ir convirtiéndonos en una referencia de nuevas miradas para la comunidad quilmeña aportando diversidad y pluralismo al espacio radiofónico”, comentó Villar. Iglesias recalca que la convocatoria abierta de contenidos es la primera interpelación directa de la emisora hacia la comunidad porque releva expectativas y necesidades. “Nos sorprendió positivamente. Llegaron tanto propuestas de personas interesadas que forman parte del área de Comunicación, como de muchas áreas y departamentos, equipos de investigación y estudiantes que demostraron y explicitan su intención de participar”, enunció el director de la UNQradio. Las propuestas que llegaron por parte de los estudiantes fueron de lo más variadas no solo en contenido sino también en formatos: estilo podcast o tradicionales. “Fue parte de la iniciativa de la convocatoria interpelar en

Instalación de la antena en el tanque de agua de la UNQ. Foto: Daniel González

política institucional La información se organiza en función de seis tópicos: lo internacional, nacional, regional (Provincia de Buenos Aires y la Ciudad autónoma), territorial (Quilmes, Berazategui, Florencio Varela y Avellaneda), el mundo universitario (centrado en la UNQ) y los deportes. El mismo Restucci también señala que trabajar en una radio comunitaria es una experiencia diferente porque” obliga a tomar todos los roles y a aprender a producir, conducir, operar, gestionar contenidos y organizar grillas”.

Instalación del estudio en el espacio de la UNQ . Foto: Archivo de la UNQradio

ese sentido. Nos parece que una pieza corta aplaca esas barreras que a veces están puestas en la envergadura que llevaría producir un programa de radio”, explicó Iglesias. La radio pública y comunitaria tiene otros objetivos que las emisoras que persiguen el lucro. Martín Iglesias lo plantea como la constitución de la radio desde “garantizar el derecho humano a la comunicación, que da otra perspectiva”. En tal sentido, el tratamiento de las noticias aporta una visión distinta. “También buscamos fomentar el pensamiento crítico al escaparnos un poco de lo que circula en los medios hegemónicos de comunicación. Así, creo, logramos una agenda propia y con tono propio”, indica Diego Restucci, locutor de la emisora.

Durante las mañanas, la programación es puramente informativa: hay tres boletines de producción propia que suenan a las 8, 10 y 11. Se suman dos emisiones del Foro Argentino de Radios Comunitarias (FARCO) y una de la agencia Nodal, que abarca la coyuntura latinoamericana. Por la tarde, hay noticias en formato de flash, cada quince minutos, sumando un total de doce horas de noticias. Para acomodarse a las nuevas tecnologías, usan la red social Instagram e incorporan una noticia por tópico en formato “timeline”. El material es de producción propia y se publica entre las 13.30 y las 18.30, de lunes a viernes.

¿Se pueden seguir enviando proyectos para la programación? La convocatoria esta abierta y no tiene fecha de cierre. Para enviar tu propuesta manda un mail a: radio@unq.edu.ar

política institucional

Primera universidad en implementar becas inclusivas La Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) lanzó un programa de becas dirigido a la comunidad trans. :: Por Iris Armoa y Lucas Chaparro En el inicio del 2021, la UNQ creó un programa de becas para acompañar el desarrollo de las personas integrantes del colectivo trans y facilitar su acceso a la educación. Según una investigación realizada por la Fundación Huésped en 2013, que contó con el testimonio de 498 personas, sólo el 13,8 por ciento de mujeres trans cursa sus estudios a nivel secundario o terciario, mientras que el 40,7 por ciento de hombres trans abandonaron sus estudios y/o capacitaciones. El Programa presenta tres modalidades (apoyo económico, beca completa o beca parcial para cursos y diplomas virtuales arancelados) que buscan disminuir el contexto de exclusión y marginación a la hora de encarar sus estudios. “No basta con la creación de la beca para garantizar la permanencia y continuidad de la comunidad trans en el recorrido de sus estudios.”, afirmó Soledad González, miembro del Programa de Asuntos Estudiantiles

Según Fundación Huésped hay un 86% de deserción del estudio de educación superior. Foto: Fundación Huésped.

(PAE) y de la Cátedra Abierta de Género y Sexualidades de la UNQ. También aseguró que su creación incentiva y promueve la igualdad de oportunidades para que las personas integrantes del colectivo puedan desarrollarse dentro de la Institución. Gianluca Godoy, uno de los inscriptos al programa señaló que “la UNQ es la única Universidad que tiene una beca específica para personas trans y eso expresa un apoyo real para la comunidad con políticas institucionales”. Si bien es el primer año de la iniciativa, para González, hubo una buena convocatoria aún sin contar con el número exacto de miembros de la comunidad estudiantil que formen parte del colectivo. Se espera realizar un balance preciso, en conjunto con la comunidad trans, una vez finalizado el ciclo lectivo 2021. “Así obtendremos un análisis de factibilidad del programa, para poder ajustar, reforzar y rever aquellas cosas que consideramos importantes para futuras convocatorias”, señaló.

Foto: web UNQ

política institucional

La UNQ acompaña la virtualidad La Universidad Nacional de Quilmes busca a través del subsidio tecnológico brindar un paliativo para enfrentar el cambio de modalidad de estudio frente a la pandemia.

Desde el comienzo de la pandemia, el programa de Asuntos Estudiantiles de la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) otorga un Subsidio Tecnológico que consiste en brindar, una tarjeta SIM con 5 GB para acceder a Internet y así garantizar continuidad en las cursadas. En principio, fueron los tres centros de estudiantes -CECSEA,CECYT y CEEA- quienes realizaron el pedido ante las autoridades de la Universidad para respaldar la problemática. “Esto lo detectamos en diferentes encuestas que realizamos y en los mensajes que nos llegaban a las redes sociales de los centros”, señaló Milagros Lamboglia, presidenta de CECSEA.

Diseño de Tomas Siciliano

:: Por Micaela Alvarez y Tomás Siciliano

El subsidio tecnológico es aplicado durante todo el año si el estudiante sostiene sus cursadas. La Universidad se encarga de monitorear la continuidad pedagógica de los beneficiarios por medio de la plataforma SIU Guaraní, de lo contrario se dará de baja el beneficio. Este año la institución registró una cantidad de 600 inscriptos al plan que refleja un incremento de la demanda del 80 por ciento en relación al año anterior. Sin embargo, por cuestiones presupuestarias, hay un límite de 200 cupos disponibles, debido a que el beneficio se solventa con el presupuesto y recursos propios de Asuntos Estudiantiles y Becas.

“Luego de la inscripción obtuve los resultados rápido y me convocaron a retirar la tarjeta SIM por la Universidad. Mi experiencia fue genial. Gonzalo Amador, coordinador de Asuntos Todos los veintiocho de cada mes me acreditaban Chip entregado por la UNQ en el marco del Subsidio Tecnológico Estudiantiles dijo “cuando se desató la la carga y el beneficio me fue aplicado a lo largo pandemia, y con ella las restricciones a la del año pero en diciembre. Al finalizar la cursada, fue dado de baja”, señaló Pilar Marquez, estudiante de Enfermería. movilidad y a la presencialidad, nos vimos obligados -junto a nuestro equipo de trabajo, el secretario de extensión y el rector- a tomar Marquez mencionó que “hubiera preferido no cambiar el chip”, porque distintas medidas por aquellos estudiantes que quedaban marginados se vio obligada a renovar el número de su línea, pero aclaró que pudo por no tener herramientas para afrontar las nuevas formas de estudio”. continuar con su Carrera gracias al subsidio.

política académica

Estudiar, egresar, ¿trabajar? ¿de qué? La carrera que elegiste se dicta en la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ), cerca de tu domicilio. Hay vacantes y te anotás sin requisitos imposibles. No tenés dificultades con el transporte público. Los docentes acompañan. Te recibís. Y el siguiente paso: el empleo ¿Es muy difícil acceder a uno? :: Por Guillermo Caceres Barabaz y Santiago Ortiz En Argentina, tenés la posibilidad de estudiar en la universidad pública y gratis. Durante los últimos años de la secundaria, lxs estudiantes enfrentan la decisión más importante de sus vidas, y por lo tanto así de “definitiva”: ¿vas a buscar una carrera con mayor salida laboral? ¿Seguís lo que parece ser tu vocación? Hobby rentado, ¿se puede hacer eso? ¿Se necesita un título universitario para ejercer de lo que querés? Lo cierto es que el título ayuda a tener empleo, pero no lo asegura. Entonces, un sentimiento de frustración sobrevuela, después de pasar unos años para terminar la carrera, y luego, la oportunidad para trabajar de lo que te formaste, no llega. ¿Te formaste bien? En el conurbano bonaerense reside un tercio de la población total del país. Y desde hace unos 20 años, cuenta con edificios universitarios a no más de 15 kilómetros de cualquier hogar, lo que permitió que el número de inscriptos a instituciones de altos estudios, subiera radicalmente. En la UNQ podés anotarte en la carrera que más te gusta, y según la resolución número 444/17, en el marco de la Ley de Educación Superior, entrás a cursar sin mucho trámite burocrático. Sólo es mandatorio cursar el Taller de Vida Universitaria. Desde 1999, el número de ingresantes a la UNQ sólo se incrementa. Los egresos, por otro lado, también van en subida [Imagen 1]. En una encuesta realizada entre graduados de los últimos 15 a 20 años de la UNQ, la mitad de ellos afirma que el primer empleo que tuvieron al salir de la institución no estaba relacionado con su profesión. Además,

el 60 por ciento afirma que no encontró lo que esperaba al egresar, y agregan que les hubiera gustado recibir algún tipo de formación vinculada al mercado laboral: nuevas tecnologías, prácticas profesionales y pasantías. El 43 por ciento aseguró pagar por educación en otras instituciones privadas, universitarias y no universitarias.

política académica El Programa de Graduados es un espacio que “ofrece cursos de perfeccionamiento y actualización en áreas que exceden a las carreras, como una forma de completar la formación integral de nuestrxs profesionales”, indicó Vanesa Vargas, su coordinadora. Además, publican en sus redes ofertas laborales que llegan desde empresas e instituciones. Además, explicó que están “prontos a lanzar un convenio con el grupo Santander, para trabajar sobre su plataforma de búsqueda laboral Universia Jobs” donde los graduadxs e instituciones contarán con otra opción para acceder a puestos laborales y facilitar la inserción. Es importante saber cómo se presenta el mercado laboral para los futuros egresadxs. Un relevamiento de la agencia de empleos Adecco, destacó las principales carreras y profesiones más solicitadas durante el 2020, en plena pandemia. La agencia divide los resultados en tres, según su grado de empleabilidad. Los de empleabilidad baja -mayor cantidad de graduados y poca demanda-, Artes y Humanidades, Arquitectura, Docencia, Geografía e Historia, Ciencias Políticas y Periodismo. Los de media, como Medicina o Farmacia y algunas ingenierías, como Química, Naval y Oceánica o Civil. Excepcionalmente, Medicina y Enfermería son las que más crecieron durante el último año y medio. Y las alta empleabilidad, donde la demanda es más fuerte: Ingenierías generalistas, en Informática y en Telecomunicaciones, desarrollo de apps, de videojuegos, tiendas y plataformas de e-commerce. En la UNQ, los estudiantes se dividen en departamentos. En la imagen 2, observamos cuáles son las carreras más pobladas. El uso acelerado de herramientas online o de digitalización, más el avance de los social media, data science, business intelligence, inteligencia artificial y marketing digital, necesita de profesionales de las carreras de Tecnologías de la Información y la Comunicación. Pablo E. “Fidel” Martínez López, docente investigador de las carreras de Programación e Informática de la Universidad, señaló al portal

Argentina Investiga acerca de la importancia de incluir las ciencias de la computación como materia en primarias y secundarias, y de tener docentes capacitados. “Nuestro fin último es que la gente sepa cómo se organiza la sociedad a través de la tecnología y cómo la ciencia de la computación impacta en esto, en nosotros. Sin esto no podemos entender el mundo que nos rodea no podemos defendernos ni posicionarnos en un lugar interesante en la competencia mundial por el conocimiento. Seremos esclavos de las compañías multinacionales, que ya tienen el dominio de nuestros datos”, completó “Fidel”. Marcelo Rubini, ex estudiante de la UNQ, continuó su formación mientras trabaja programando en una cooperativa, y comparte: “tenemos clientes locales y extranjeros, 60 por ciento afuera y 40 por ciento acá. Buscamos laburar más para los de acá, que para los de afuera, por el compromiso con la economía social que asumimos. Pero en términos económicos nos sirven más los extranjeros”.

política académica Si te detenés a pensar en el esfuerzo que te llevó egresar, es una meta medianamente fácil de alcanzar, pero, dependiendo de la carrera, se pone cuesta arriba ser un favorito para acceder a un empleo. Por tu formación académica insuficiente o poca experiencia, los lxs egresadxs no están donde quisieran estar. “Sería bueno que haya algún tipo de pasantía en los últimos años para ir adquiriendo experiencia y cuando terminamos no sea tan brusco el choque con la demanda del mercado. Me sentí muy desprotegida”, expresó Agostina Valente, Licenciada en Comunicación Social (2009). Y también recalca que encontró empleo en su profesión gracias a una amiga, “no fue merito 100 por ciento mío y sólo duró un año”. En Argentina no sobran los recursos. Por lo tanto, si la asignación de recursos para educación es inteligente, no deberían sobrar graduadas, graduados, graduades, graduadxs, profesionales. Entonces… ¿cuáles son las políticas públicas que tienen como objetivo generar graduados con inserción laboral?

Becas de grado y posgrado, una ayuda para los estudiantes En marzo de este año se abrió una nueva convocatoria de becas para los estudiantes de grado y posgrado. :: Por Amílcar Coronel y Agostina Valente Luego de un 2020 marcado por la pandemia, la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) lanzó nuevas becas para acompañar a los estudiantes en su formación. A las ya conocidas becas destinadas al apoyo económico, guardería y/o residencia, se agregan las becas Trans-formación, Manuel Belgrano, Progresar 2021 y Fundación Botín. Las últimas estadísticas del Programa de Gestión de la Información Institucional de la UNQ son del 2018 muestran un total de 2893 becas otorgadas. Gonzalo Amador, coordinador de Asuntos Estudiantiles de la Secretaría de Extensión Universitaria, informó que “año a año creció la cantidad de becarios; ya tenemos 5 mil. No es algo positivo porque entendemos que la situación económica no es buena, pero podemos ayudarlos”. Ésta política académica se afianza con la propuesta de la UNQ sobre el programa destinado a garantizar el acceso y la continuidad de los estudios del colectivo trans. “Logramos tener 6 becarios/as de la Beca Trans-formación. Fue un año distinto así que esperamos que el año que viene puedan anotarse más personas”, señaló Amador. A su vez, las Becas Manuel Belgrano son específicas para carreras científicas y técnicas, las otorga la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU) del Ministerio de Educación. Y las Becas de la Fundación Botín, buscan que los\las estudiantes puedan fortalecer la unión entre las instituciones y el desarrollo social, económico y cultural.

Graduado mira su sombra

política académica En esta oportunidad, debido a la emergencia sanitaria, las Becas Progresar, no van a solicitar el requisito de aprobación del 50 por ciento de las materias. Solo debe acreditarse la condición de alumno/a regular. Para Daniela Ariadna Musumeci, estudiante del Profesorado en Comunicación Social y beneficiaria 2020 de la Beca Progresar, “los montos son bajos pero ayudan un montón y además uno accede a la tarifa social en la SUBE. Es una doble ayuda”. Desde la Secretaría de Posgrado, su Director de Asuntos Académicos, Hernán González explicó que “la UNQ otorga anualmente becas de arancel y de estipendio destinadas a los alumnos de carreras y diplomas de Posgrado“. Además, cuentan con becas destinadas para la comunidad UNQ y becas para externos. Debido a la situación epidemiológica muchos estudiantes se volcaron a la educación pública porque los aranceles son más accesibles. “Esta pandemia no apagó la calidad de la enseñanza que brinda la Universidad”, señaló González La política académica de la UNQ, busca reforzar y acompañar con becas las dificultades económicas que transitan los\las estudiantes. Gonzalo Amador recalcó que “el sueño que tenemos es que nadie nos pida una beca. Significaría que están todos bien, pero es algo utópico. El fin está puesto en trabajar por y para los y las estudiantes, ayudando a cumplir sus derechos”.

Cantidad de becas otorgadas en 2018 Fuente: Programa de Gestión de la Información Institucional

Datos de contacto Secretaría de Extensión Universitaria Mail: secretaria_extension@unq.edu.ar Secretaría de Posgrado Mail: informes_posgrado@unq.edu.ar

política política académica académica

El presente virtual de la Universidad Desde inicios del año pasado, a raíz de la pandemia del Covid-19, las universidades traspasaron su estructura presencial a una modalidad virtual, a distancia, para garantizar la continuidad pedagógica. :: Por Maximiliano Espósito y Selene Paredes Desde marzo del 2020, la estructura presencial de las universidades se modificó frente al Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio. La implementación de la modalidad virtual se inició en abril del mismo año e implicó la migración de más de mil cuatrocientas aulas. El traspaso afectó al alumnado de la UNQ, Algunas de las cuestiones que conciernen a todas las carreras es la falta de cupos en las inscripciones, la restricción en la cantidad de materias por alumno y la falta de acceso. Las prácticas de Enfermería y Terapia Ocupacional fueron suspendidas durante el 2020, perjudicando a más de 300 alumnos cuya situación aún no fue resuelta. Laura Finauri, Directora de Terapia Ocupacional, comentó que “eran 360 estudiantes, aproximadamente, en prácticas. Se hizo como un embudo del que estamos, hasta ahora, tratando de salir”. Por ese motivo, se resolvió realizarlas en el espacio del Servicio de Teleasistencia, en el seguimiento de contactos estrechos de Covid. Una instancia que funciona en espacio físico delimitado para esos estudiantes. En el segundo cuatrimestre se desarrollaron las actividades gracias a organizaciones sociales que permitieron el ingreso de los estudiantes. Por otro lado, comenta la directora que “hubo materias en las que hasta sobran cupos y tuve que cerrar un curso por falta de alumnos” Mayra Luciana Villazanti, estudiante de la Licenciatura en Administración Hotelera dijo: “pude hacer materias en horarios diferentes sin tener

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Conectividad 2.0. Foto: Whalecom

que trasladarme de mi casa tantas veces. Es mucho más simple cursar virtualmente para mí”. Sin embargo, la falta de elementos tecnológicos perjudica a varios estudiantes. Victoria Aranda, estudiante de Licenciatura en Ciencias Sociales explicó que el cambio “me afectó porque solo tengo celular para realizar todas las tareas”. La Universidad implementó un subsidio para aquellos estudiantes que con dificultades para conectarse. Se otorgaron chips, con gigas disponibles para garantizar su conectividad. Por otra parte, se diseñó un protocolo para la vuelta a clases de forma escalonada aunque aún no hay fecha acordada para implementarlo.

CONECTIVIDAD “Encuentros online, encontrarme con mis amigxs a través de la pantalla, mirar el celu hasta aburrirme. Ya no compartimos mates, compartimos memes.” Esta imagen fue creada por lxs jóvenes y docentes del Club de Periodistas de la ESET-UNQ y elaborada por Juan Bértola en el marco del PEU “desde acá”. Ezpeleta, octubre 2020.

investigación

Todo está cargado en la memoria. Y ahora también en la web Documental interactivo que nos lleva a recorrer a partir de testimonios y documentación el centro clandestino de detención La Cacha. :: Por Ania Bilbao Capparelli y Federico Burballa La UNQ, en un trabajo en conjunto con Huella Digital, realizaron la creación de un documental interactivo sobre La Cacha, uno de los centros clandestinos que funcionaron durante la última dictadura cívico-militar. El inicio para la reconstrucción fue el proyecto de extensión “Universidad, memoria y ciudadanía”, dirigido por Luciano Grassi, que recopiló el registro audiovisual del juicio que sucedió en 2014 por los crímenes de lesa humanidad en La Cacha. Luego de sistematizar y organizar toda la información, registraron los testimonios de 8 víctimas del centro clandestino. Diego Cagide, diseñador audiovisual, comunicador y docente de la universidad, además de Codirector de Huella Digital, nos cuenta sobre la construcción del documental, y la importancia de la memoria en la sociedad.

¿Qué es Huella Digital? Huella Digital es un equipo de producción y realización de documentales interactivos que trabaja con temas relacionados a nuestra historia reciente, en el terreno de la memoria y los derechos humanos. Nuestro proyecto central se llama “centros clandestinos”, y consiste en las reconstrucciones virtuales de algunos centros de detención que funcionaron en la última dictadura cívico militar. Son recorridos que cualquier persona puede hacer desde su casa de manera online acompañados de testimonios de sobrevivientes que relatan el recorrido y que fueron utilizados para realizar la reconstrucción. ¿Cuándo nace y a partir de qué proyecto? Huella nace en 2008, a partir de un proyecto de investigación de la UBA, en el que se realizó la reconstrucción virtual del centro clandestino “Casino de oficiales” de la ESMA. Fue pensado para ser usado como material de documentación, y para que sirviera en instancias jurídicas. Que de hecho fue así, ya que se usó como soporte audiovisual del testimonio de Ana María Careaga en la mega causa ESMA II y en el alegato realizado por Luis Zamora, en 2011. ¿Cuántas personas trabajaron en la reconstrucción y animación del centro clandestino La Cacha dentro de Huella Digital? ¿Qué diferencias encontraron con respecto a otros documentales realizados? En la reconstrucción de La Cacha participó un equipo reducido dentro de Huella Digital: Natalia Valle en la parte de preproducción, investigación y desglose de entrevistas; Martin Malamud en diseño de proyecto, de-

Documental Interactivo Centro Clandestino La Cacha. Foto: Diego Cagide.

investigación un diseño de interfaz que sea intuitivo para generaciones más grandes. También buscamos que los documentales sirvan como material educativo en escuelas, museos, aunque por el momento no se está aplicando. ¿Fue laborioso articular las Ciencias Sociales, las artes y la tecnología en un mismo proyecto? Fue laborioso en cuestión de la magnitud del proyecto, por sus singularidades y dificultades. No obstante, esa articulación no fue complicada, de hecho, fue muy grata, ya que el trabajo con María Valdez y Luciano Grassi fue una experiencia muy operativa. Las víctimas que dieron sus testimonios, si bien tenían las imágenes en su cabeza de cómo era el lugar, ¿qué reacción tuvieron al ver el mapa en 3D? Documental Interactivo Centro Clandestino La Cacha. Foto: Diego Cagide.

sarrollo, diseño de interfaz, programación y realización de entrevistas, y yo, que me encargué de la realización 3D, investigación, realización de entrevistas y diseño web. La diferencia está en que hay centros cuyo edificio aún existe, y otros en los que el edificio fue demolido, como es el caso de La Cacha, lo que dificultó la reconstrucción, e implicó mucho trabajo para un equipo tan reducido. ¿Por qué se decide crear el documental como si fuera un videojuego? ¿Qué impacto se busca? En realidad, no es el objetivo realizar el documental como un videojuego. Se utiliza tecnología que inicialmente está arraigada con estos, como el recorrido en primera persona, la experiencia de ir atravesando distintos espacios, la cuestión multidireccional de la narración, pero que hoy en día se utilizan en el área de desarrolladores de software para fines que no quedan sólo en la realización de videojuegos. En este caso, se utilizaron para un proyecto multimedial relacionado con lo histórico, la reconstrucción virtual, y la formación de un documental interactivo. Este tipo de proyecto busca la llegada a generaciones más jóvenes, ya que el formato es algo muy familiar para ellos, aunque también realizamos

Es imposible ponerse en el lugar de sobrevivientes que vuelven a ver el centro de detención en el que estuvieron secuestrados y secuestradas 45 años atrás, en condiciones infrahumanas, sin posibilidades de ver, viviendo las peores de las aberraciones, por eso la reacción fue de mucho impacto y mucha gratitud. Y la verdad es que somos nosotros quienes sentimos una inmensa gratitud hacia ellas y hacia ellos por el testimonio que nos brindaron, ya que sin ese valioso testimonio este proyecto no hubiera sido posible. ¿Un mensaje que quieras dejar sobre la memoria y justicia? Gracias a los organismos de derechos humanos, a la lucha de Abuelas y Madres de Plaza de Mayo que podemos hablar de Memoria, Verdad y Justicia como las tres banderas esenciales con las que nos identificamos, y como los tres pilares que edificamos los documentales interactivos. Queremos que sean utilizados como material educativo, con fines judiciales, y destacar su aporte a la sociedad, no sólo al resguardo y transmisión, sino que también sea un aporte a la construcción de la memoria.

Visitá el documental: http://centrosclandestinos.com.ar/cacha/

investigación

Eduardo Gosende: “Lo ideal sería que hagamos más hincapié en la formación en ESI de les estudiantes” Desde el 2010, en la Universidad Nacional de Quilmes se desarrollan diversos proyectos y talleres de investigación y capacitación en ESI para estudiantes y docentes. :: Por Bianca Benedetti y Luciana Casco Dialogamos con Eduardo Gosende, director del proyecto “Discursos, prácticas y representaciones en educación sexual integral”, quien junto con Marcela Ferreyra, Gustavo Feijóo, Maria Graciela Scarimbolo y Fernando Sánchez, se encargan de analizar los diversos criterios que atraviesan a la Educación Sexual Integral (ESI). El propósito es aportar nuevos conocimientos que contribuyan en el adecuado abordaje y vinculación de la temática en las aulas. ¿De qué trata el proyecto “Discursos, prácticas y representaciones en educación sexual integral”? En realidad, en paralelo yo dirijo un proyecto de Extensión llamado “De sexo si se habla”, que forma parte de la Secretaria de Extensión de la Universidad. A partir del mismo, hacemos talleres con alumnos de escuelas secundarias de Berazategui, Quilmes y Florencio Varela, y trabajamos los distintos temas que aborda la ESI de la forma más completa posible. Entonces, lo que hacemos en el proyecto de investigación es tomar toda la información que provee ese otro proyecto: las respuestas que nos dan les chiques, las producciones, videos, afiches, canciones, los analizamos y los vamos investigando, sobre todo, el impacto que va teniendo el desarrollo de la ESI a lo largo de los años. Hoy por hoy, estamos en una realidad completamente distinta en relación a la ESI, porque les estudiantes están demandando la formación urgente en esta cuestión.

Vimos que integran conceptos como el psicoanálisis y el feminismo que parecen ser campos bastante diferentes, y a su vez, necesarios para informar a la gente sobre la Educación Sexual Integral, ¿Cómo se combinan y articulan estos conceptos? Justamente, es un área conflictiva. Hay muchas ideas del psicoanálisis, por ejemplo, las que propuso Freud y las que propusieron sus seguidores, que son fuertemente machistas, patriarcales, sexistas y que no se condicen con el abordaje que se propone desde el campo del feminismo y, mucho menos, en el que se propone en las sexualidades/identidades trans. En el campo de género hay muchas discusiones y debates debido a que se van reformulando a medida que se van produciendo nuevas realidades de género, nuevas formas de subjetividad y nuevos géneros. Es por eso que cuando uno trabaja con una de ellas, hay que hacer todo con más cuidado. En nuestros trabajos, por una parte, señalamos lo que vemos desde el lado del género y, por otra, lo que vemos desde el psicoanálisis y de ahí sacamos una conclusión, interactuando entre las dos miradas. Pero no se armó todavía un marco transdisciplinario que combine el psicoanálisis con el género. ¿Qué estrategias de capacitación piensan realizar para los docentes y estudiantes? ¿Se implementarán en toda la comunidad educativa o en un área en especial? Lo ideal sería que hagamos más hincapié en la formación en ESI de les estudiantes. En el taller de vida universitaria queríamos introducir charlas

investigación relacionadas con la ESI, empezando con algún Departamento como el de Sociales, y después para todos; u ofrecer talleres desde algún sector de la universidad. Lo que pasa, es que no es sencillo transmitir la ESI porque hace falta que las personas que la transmitan tengan una buena formación y preparación para poder manejar todas las cuestiones que involucra, y no todos los profesionales estamos preparados para abordarlas al mismo tiempo. Se trata de un saber muy transversal que está pensado a partir de cinco ejes fundamentales que son: la perspectiva de género, el respeto de la diversidad, la valorización y el respeto de los derechos, el cuidado del cuerpo y la salud, y la valorización de la emocionalidad. La capacitación en ESI es algo que la misma Ley 26.150 establece como obligatorio para el nivel universitario, la deberíamos tener todos, pero la verdad es que forma parte de una sola formación que son los profesorados de Ciencias Sociales y la carrera de Educación.

¿Qué contribuciones se esperan realizar a la universidad con los conocimientos provistos por este proyecto? Vamos a sacar un libro, por ejemplo, que ya está hecho -solo falta prepararlo para su impresión- y que recopila todo el recorrido que hicimos desde 2010 hasta ahora, y toda la producción de artículos, reportajes y distintas formas de divulgación de los resultados de este proyecto. Entonces, en ese sentido contribuye a la universidad porque es una publicación de producción de conocimiento realizada desde ella. También, transmitimos los conocimientos y las experiencias que tenemos en el proyecto de extensión a los cursos que estamos dictando, y eso va directamente a la formación de los futuros profesionales de los profesorados de Ciencias de la Educación. Además, hemos hecho algunos talleres con estudiantes del área de discapacidad y de la carrera de Terapia Ocupacional.

Yamila Santillán: “Las enzimas son una especie de máquina” Se trata de un proyecto de investigación de la UNQ que tiene por objetivo reducir la contaminación ambiental producida por los desechos agroindustriales y mejorar procesos productivos industriales. La clave es la producción y utilización de enzimas. :: Por Marina Cervin y Gonzalo Cintioli En diálogo con Aula 67, Lorena Rojas, docente de la UNQ, investigadora del Conicet y directora de “Enzimas microbianas para la revalorización y/o remediación de residuos agroindustriales”; y Yamila Santillán, también docente de la UNQ e integrante del proyecto, nos cuentan en detalle sobre sus investigaciones radicadas en el Departamento de Ciencia y Tecnología.

de bioplásticos y bioenergía, y/o el tratamiento de ambientes contaminados con pesticidas. Tanto Rojas como Santillán trabajan en el área de bioprocesos donde investigan para generar bioinsumos (productos con valor agregado, empleando sistemas biológicos o partes de ellos) que sirven, por ejemplo, para descontaminar distintos ambientes.

El proyecto, iniciado en el 2019 y que se estima finalice en el año 2022, propone combinar distintas áreas de CyT, como bioprocesos, ingeniería genética e ingeniería en automatización y control, para la generación de enzimas con distintas aplicaciones. Algunas de ellas son la producción

¿Qué son las enzimas y cuál es su importancia? Lorena Rojas (LR): Las enzimas son proteínas que aceleran la velocidad de una reacción química específica en la célula. Todos los seres biológicos las necesitamos para cualquier actividad biológica. En la industria,

investigación

muchas reacciones se catalizan con solventes o ácidos, mientras que la utilización de enzimas -que provienen de material biológico-, permite desarrollarlos en forma amigable con el ambiente. ¿Podrías explicarlo con un ejemplo sencillo? Yamila Santillán (YS): Las enzimas son una especie de “máquina” que puede tener distintas funciones: transforma, rompe, une, modifica alguna sustancia y produce una nueva. Algunos ejemplos serían las enzimas digestivas, o las enzimas que forman parte de los kits de PCR utilizados en las pruebas de detección de COVID-19. ¿Cómo es el proceso de producción de enzimas? YS: Generalmente las enzimas son seleccionadas de la naturaleza, las tomamos y las producimos en otro sistema biológico. Por ejemplo: tomamos la enzima producida por un hongo, y la producimos en una bacteria. ¿Para qué se utilizan? LR: Para muchas industrias como detergentes, alimentos, ropa, fármacos, energía. Estas enzimas en particular están, o modificadas o seleccionadas para que se apliquen a la actividad específica requerida. ¿Qué es un residuo agroindustrial y cuál es su relación con las enzimas y el proyecto? LR: Son residuos provenientes de alguna industria relacionada con el agro, como los residuos lignocelulósicos (que serían residuos vegetales). La idea es utilizar estos residuos generados por la industria local (como la papelera o cervecera), y modificarlos para aprovecharlos en otro proceso productivo. Un ejemplo sería el bioetanol de “segunda generación”, el cual es producido a partir de residuos en lugar de alimentos, como es generalmente.

¿Cuál es el impacto negativo que generan estos desechos? LR: Las empresas que generan estos desechos tienen que asumir costos para poder deshacerse de estos residuos, por eso es bueno invertir en una estrategia para aprovecharlos, lo que contribuye desde el punto de vista ambiental y económico. ¿Cómo se podrían aplicar los resultados de este proyecto en el futuro y cómo podría ayudar al desarrollo productivo del país? LR: Con la utilización de estas enzimas para desarrollar procesos en los que se utilicen residuos para la generación de las enzimas, que a su vez, se utilicen estas enzimas para obtener nuevos productos o remediar ambientes contaminados; contribuye a reducir los costos del sector productivo, y el impacto ambiental de los residuos que estos generan, lo que beneficia al sector. ¿Cómo afectó el contexto actual de la pandemia de COVID-19 a la investigación? LR: El proyecto tiene una gran parte experimental que es fundamental para su desarrollo. Buena parte del año 2020 no pudimos acceder a las instalaciones de laboratorios de la UNQ, lo que demoró la obtención de nuevos resultados de nuestro trabajo. Si bien este año pudimos retomar algunos experimentos, la situación compleja continúa y es fundamental cuidar la salud de todos, por lo que aún sufrimos demoras. ¿De dónde proviene la financiación para las investigaciones? LR: Este proyecto en particular está financiado por la Universidad-SPU, aunque existen otras fuentes, la mayoría gubernamentales, y hay casos de convenios con terceros del sector privado. El financiamiento local para el desarrollo de trabajo científico resulta algo escaso, en especial, por los gastos que implica la investigación (como el uso de insumos importados). Esto implica mucho tiempo y esfuerzo en buscar subsidios y fuentes de financiamiento nacionales o extranjeras.

investigación

De lo acústico a lo electrónico La Lutheria Electrónica es considerada como una de las mayores novedades del Siglo XX dado que convierte los instrumentos tradicionales en electrónicos. :: Por Agustin Botta La Lutheria Electrónica es una innovación del Siglo XX ya que se encuentra ligada al avance de la tecnología aplicada al mundo de la música. El objetivo de los luthiers electrónicos es la incrementación de los circuitos eléctricos a instrumentos musicales que poseen utilización mecánica o vibratoria, integrando varias disciplinas (la fisiología y la psicología, entre otras) en torno a la aplicación y adaptación humana para crear estos nuevos instrumentos. En cuanto a su desarrollo, permite a los instrumentistas e integrantes del género musical métodos más efectivos en relación a la reproducción de audio y sonido como así también a su almacenamiento, funciones que ahora son posibles gracias a los microprocesadores implementados. En la Universidad, la puesta en práctica de la lutheria electrónica se ve reflejada a través del proyecto “Bandoneón 2.0” dirigido por Juan Ramos, docente e investigador de la UNQ. En 2018, se realizó en la UNQ, la II Edición del Premio a la Innovación en Artes y Tecnologías, donde Juan Ramos y Joaquín Rizza presentaron el primer prototipo del bandoneón electrónico. Allí, el proyecto obtuvo el primer premio junto con un apoyo económico para su continuación. La diferencia del bandoneón electrónico respecto del tradicional, es que permite tener un mejor dominio de sonido por sus sintetizadores, y es capaz de emular sonidos de bandoneones históricos. Además, se caracteriza por ser personalizable según los intereses de quien lo utilice, ya que puede ser fabricado para un fin determinado y para una persona en especial.

Juan Ramos y Joaquín Rizza en la II Edición Premio a la Innovación en Artes y Tecnologías en la UNQ. Foto: Lic. Carlos Cattaneo

Por otro lado, esta nueva modalidad musical, también cumple una función social de democratización e inclusión social, ya que como bien afirma Juan: “la lutheria electrónica brinda la posibilidad de, con muy poca plata, crear un instrumento e iniciarte y/o desarrollarte en el mundo de la música”. Además, según explica el investigador, esta innovación facilita y acorta las distancias ya que su utilización no requiere compartir un espacio físico, sino que se puede ejecutar a través de plataformas virtuales. Esta posibilidad resultó muy beneficiosa actualmente, teniendo en cuenta el contexto de pandemia por el que nos vemos atravesados. Como claro ejemplo de esto último, la implementación de la Lutheria permitió a ElectropUNQ, grupo musical de la UNQ, tocar con integrantes de la Universidad de Nueva York mediante la virtualidad, algo que en otra época no hubiera sido posible.

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La División Salud y Discapacidad sigue en acción La División de Salud y Discapacidad continuó con sus actividades y profundizó su labor en el área de salud mental durante el contexto de pandemia. :: Por Carina Fernández y Mariano Olivetti Desde la División de Salud y Discapacidad, que pertenece a la secretaría de Extensión Universitaria de la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) se brinda ayuda a les estudiantes para acceder a políticas de salud y discapacidad con el objeto de lograr su integración durante el proceso académico. El Área trabaja desde el 2008 y está institucionalizada como División de Salud y Discapacidad desde el 2010. Orienta, apoya y promueve la inclusión, elabora instrumentos normativos, en particular directrices para fortalecer la asistencia a programas de salud. La irrupción del Covid-19 modificó la manera en que la Universidad se relaciona con les estudiantes, Gabriela Capel, jefa de la división de Salud y Discapacidad y Yanina Arias, trabajadora del área comentan sobre el funcionamiento de esta en el contexto de pandemia. Capel, resalta que no dejaron de acompañar a les estudiantes con discapacidad o problemáticas de salud y siguen con asesorías a les docentes, dando sugerencias de adecuaciones pertinentes según las necesidades de sus alumnes.

Además, ofrece información sobre otras instituciones públicas como Centros Integrales Comunitarios (CIC), centros municipales que brindan el servicio de salud mental. Sumados a campañas de prevención y promoción de la salud, junto a la carrera de Terapia Ocupacional y Enfermería y el Seguro Público de Salud (SPS). Durante el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) se acentuaron los ataques de ansiedad, pánico y depresión. La División de salud y discapacidad confirmó que hubo un incremento de las consultas en el área de salud mental, y que no tiene un cupo determinado, sino que están destinadas a toda la comunidad Universitaria. Capel, destaca que hay 260 estudiantes con problemas de salud y discapacidad y que, durante la pandemia, más de 80 solicitaron ayuda y acompañamiento. Así como también lo hizo personal administrativo y docentes. Mariano Olivetti, estudiante de la Licenciatura en Comunicación Social contó que la división lo ayudó cuando sufrió ataques de ansiedad, momen-

Comenta que “utilizan todos los medios de comunicación disponibles: mail, Facebook, WhatsApp, tel, etc.” La Universidad, a su vez, proporcionó las herramientas necesarias para cumplir con los acompañamientos y/o asesoramientos previstos en el actual contexto epidemiológico. Por otra parte, a través de un convenio con el Colegio de Psicólogos de Quilmes, el Programa de Asistencia Universitaria (PAU) provee atención accesible y permanente. Esto se suma al trabajo en redes que se realiza con áreas municipales y provinciales dedicadas a la problemática de salud mental.

Bienvenida a la División de salud y discapacidad. Foto: Web de UNQ

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Más de 350 estudiantes participaron de la 9na Semana de la Salud. Foto: Web de UNQ

to en que le brindaron el apoyo necesario para continuar con las materias. “Tuve un cuadro de estrés por situaciones de laburo de mi viejo y otras cosas que se fueron sumando. Ni siquiera sabía que podía tomarme licencia para no perder regularidad y las chicas me asesoraron con todo eso”, expresó Olivetti. A su vez, comenta que fue asistido en la reinserción a las clases, para brindarle las comodidades necesarias para su vuelta.

Semana de Salud

Los eventos que, en prepandemia, se realizaban de manera presencial, estuvieron presentes durante todo el año pasado y lo que va de este, de manera virtual. Así tuvo lugar la 9na Semana de Salud, durante la segunda mitad de mayo. Durante esta jornada, se trataron cuestiones como el RCP básico, charlas sobre alimentación saludable, el consumo problemático de sustancias, lactancia, estimulación cognitiva para adultos mayores, heridas y quemaduras, etc. Fue una semana con participación de licenciados en las diversas temáticas vistas. Otros de los tópicos fueron, Nuestro cuerpo y los nuevos hábitos en el contexto de la pandemia, Encuentro de Salud Sexual y (no) Salud Reproductiva: En tiempos de pandemia. Accesibilidad a métodos anticonceptivos, Presentación de la capacitación Consejería Sexual para 2021. Las charlas virtuales fueron dirigidas tanto a la comunidad Universitaria, como a todas las personas que desean cuidar de sí mismas, y a los suyos, además de informarse y conocer sobre los temas tratados.

La Lic. Maricel Bertoloto, kinesióloga y docente de la UNQ de la Carrera de Terapia Ocupacional, tuvo a su cargo la charla virtual Nuestro cuerpo y los nuevos hábitos en el contexto de la pandemia; detalla que “muchas veces no tomamos en cuenta la cantidad de horas que pasamos sentados frente a una computadora o celular, en momentos donde realizamos nuestra tarea o trabajo”. Una encuesta realizada por Bertoloto arroja que, como resultado de la pandemia, la mayoría de las personas pasan un mínimo de ocho horas sentadas y ocho durmiendo, dando un total de dieciséis horas de inactividad. El sedentarismo perjudica el funcionamiento del cuerpo que está preparado para el movimiento. Bertoloto afirma que además de mala postura corporal, “esta demanda de la virtualidad trae consigo cansancio y una saturación mental mayor, ya sea por la exposición a las pantallas, como por el estrés de enfrentarse a una situación nueva para muchos”.

DIVISIÓN DE SALUD Y DISCAPACIDAD Box 13 - Ágora Tel.: 4365-7100 Int. 5323. Correo: saludydiscapacidad@unq.edu.ar Lunes a viernes de 9 a 18 Facebook: Salud y Discapacidad o División de Salud y Discapacidad Se realizó la 9na Semana de la Salud de manera virtual. Foto: Web de UNQ

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Educar desde la libertad como usuarios Mara Dalponte repasa su proyecto de extensión de la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) sobre tecnologías libres aplicadas a la educación. :: Por Valentina Olivares y Micaela Ortega En una encuesta realizada en mayo, a más de 100 estudiantes, el 39 por ciento indicó que no utiliza herramientas de software libre. Más de la mitad de los usuarios que sí lo utilizan, no conocen sus características. En este contexto, se inserta el proyecto Escuela Libre: Tecnologías Abiertas y Libres, dirigido por Mara Dalponte en el marco de Programas y Proyectos de Extensión y Voluntariado que propone la UNQ. Con el objetivo de acercar el Software Libre a la comunidad, difundiendo sus ventajas políticas, económicas y sociales. El Software Libre es un programa informático que el propietario puede copiar, modificar y distribuir en beneficio de la comunidad. Su definición se asocia con la libertad de expresión, muchas veces es gratuito o se mantiene con donaciones de usuarios. Este tipo de Software se basa en la libertad de ejecutar el programa, libertad de acceso al código fuente, libertad de redistribuir el programa y libertad de distribuir copias de versiones modificadas. Con fundamento en la definición de Software Libre, Dalponte -docente del departamento de Ciencia y Tecnología de la UNQ- inició el programa en el 2011 a través de la articulación de distintas áreas de la Universidad, con el fin de promover la democratización con el uso de las Nuevas Tecnologías de Información y Comunicación a partir del entendimiento crítico de los usuarios. En un principio el trabajo se enfocó en las escuelas técnicas de la zona, a partir de la instalación de Software Libre y dando a conocer las alternativas libres a las herramientas que les estudiantes utilizaban.

Mas del 50% de les encuestados desconocen lo que es el Software Libre. Foto: Valentina Olivares, Micaela Ortega

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Luego se reforzó el sector cooperativo del proyecto, que posibilitó el desarrollo de la plataforma Chasqui, dedicada a la comercialización de productos de la economía social, y el espacio de hacklab cooperativo, propuesto para la exploración de consignas de hardware libre y abierto. Marzo del 2020. El decreto de aislamiento preventivo por el Covid-19 fue un momento bisagra en la interacción entre las telecomunicaciones y la vida cotidiana de la sociedad, donde las actividades tuvieron que trasladarse a formatos virtuales.

Los proyectos de Extensión son un conjunto de prácticas de intervención en territorio sobre una determinada necesidad o problemática de la sociedad. Los participantes deben planificar junto a las comunidades acciones transformadoras de la realidad social, económica y productiva que mejore la calidad de vida de la población.

Con la repentina incorporación de la educación virtual, les docentes buscaron herramientas eficaces y sin costos extras para elles y les estudiantes, por lo que los sistemas con mayor prensa como Zoom ganaron terreno. Dalponte, resalta la responsabilidad del usuario al interactuar con este tipo de plataformas que requieren vinculación con redes sociales. Ya que, al ser un Software vendido desde la comodidad de uso, utilizan la información de los clientes para proveer experiencias personalizadas. Además, advierte que sólo enseñar desde herramientas privativas, a través de licencias gratuitas en el marco de convenios con la Universidad, genera profesionales “cautivos” de dichos instrumentos. “Una vez finalizados los estudios las personas deben costearse las licencias o someterse a los mismos acuerdos de servicio, exponiendo su información personal”, justificó. Dalponte cuenta que muches de sus colegas desconocen los términos de los servicios que utilizan para dar clases y pretende un cambio. “En una universidad pública, donde se tiene el compromiso de generar pensamiento crítico y conciencia social, la tecnología no debería considerarse por fuera de ese análisis”, señaló.

Chasqui, plataforma de comercialización de la Economía Popular. Foto: UNQtv

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Pasión por la cerveza al alcance de todos y todas Jorge Luis Nuñez y Anahí Cuellas, coordinadores del Diploma de Extensión en Elaboración de Cerveza Artesanal de la Universidad Nacional de Quilmes comentan la experiencia de la cursada en Pandemia. :: Por Diego Rey y Micaela Ortega El Diploma comprende 200 horas, que se dividen en 12 cursos que se estructuran en un núcleo básico, y otros que se centran en los procesos y la tecnología; también cuenta con materias optativas de acuerdo a la especialización que cada alumno o alumna pretenda seguir. Según sus coordinadores, el Covid-19 y sus consecuencias no afectaron el desarrollo de la actividad como sucedió con otras disciplinas, ya que desde un primer momento el diploma fue pensado para ser dictado de forma virtual. El curso cuenta con estudiantes de todo el país e incluye también alumnes en el extranjero, en particular en Ecuador y Colombia. La propuesta, desde el Diploma, es que, una vez superado el contexto de pandemia, las prácticas puedan ser optativas. “La UNQ cuenta con el apoyo de varios pequeños productores en toda la región, así que la ubicación del estudiante interesade en realizarlas no sería un inconveniente”, comentó Cuellas. El proyecto surgió por dos razones, explica la coordinadora, “en principio por el auge que tuvo la producción de cerveza artesanal en los últimos años”. Pero además, “el objetivo es poder brindarles un marco pedagógico y uniforme a los pequeños productores”, explicó Jorge Núñez. Otra de las razones fue la demanda de los propios estudiantes de la Universidad, en particular de los cursantes de la carrera de Ingeniería en Alimentos. El objetivo es conectar los conocimientos académicos con la experiencia de los productores. Es por eso por lo que la diplomatura cuenta con profesores que pertenecen a la universidad y con otros que ya forman parte de la industria.

La producción de cerveza artesanal e industrial contienen las mismas etapas, pero varían en un punto fundamental, el volumen. “Al tener que producir en gran escala, se llega al prodiploma se dicta de forma ducto final de forma auto- Elvirtual. Foto: IG @diplomacervezaartesanalunq matizada, sin poder darle un sabor único e innovador como sí puede hacerlo el artesano cervecero”, señaló el coordinador. La persona que se introduce en la elaboración propia debe ser exploradora e interesarse en buscar una mejora de los procesos. “Los profesores buscamos esa pasión por encontrar nuevos gustos en la cerveza”, dijeron los coordinadores. Con respecto a los costos, para Núñez, hay que tener en cuenta qué es caro para uno y qué es caro para otro. “Una persona con tener una olla grande en su casa, y algunos bidones de agua, ya puede comenzar. Dentro de esa escala, lógicamente, es necesario contar con elementos más adecuados para que el producto no salga contaminado, pero si uno tiene ganas de experimentar, lo puede hacer”, completó. La Universidad de Quilmes, ubicada en el corazón de una ciudad relacionada con la producción de cerveza, debía tener este tipo de experiencia. El Diploma tuvo su primera cohorte en agosto del 2020, va por su segundo ciclo y ya se piensa en un tercero. El sueño de les docentes y coordinadores es que, en un futuro no tan lejano, pueda plantearse el diploma a nivel de posgrado.

MANOS CÓMPLICES “Las manos llevan y traen muchas cosas, con esto no se jode. El cuidado está en nuestras manos.” Esta imagen fue creada por lxs jóvenes y docentes del Club de Periodistas de la ESET-UNQ y elaborada por Juan Bértola en el marco del PEU “desde acá”. Ezpeleta, octubre 2020.

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“Esto afectó toda nuestra dinámica diaria” Hablamos con Facundo Ibarra, integrante del Programa de Cultura de la UNQ, sobre la agenda 2021 y los efectos del coronavirus en las actividades. :: Por Stefanía Barone El 2020 fue un año de reinvención y aprendizaje en términos sociales, laborales y académicos, entre otros. Muchas de las cosas que estaban pactadas para llevarse a cabo a lo largo de este ciclo lectivo tuvieron que suspenderse por la pandemia. Los diferentes sectores de la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ), entre ellos el área de Cultura, no fueron la excepción. La modalidad virtual tomó real protagonismo.

Dada la situación sanitaria, ¿cómo se manejaron el año pasado? ¿Qué cosas hubo que suspender? Al igual que al resto del planeta, la pandemia nos tomó por sorpresa. Cuando se decretó el ASPO, en marzo de 2020, acabábamos de montar en la Sala Rosa de los Vientos Zhenji - Huella de la verdad, una instalación de Gabriela Alonso y Javier Del Olmo, en el marco de las actividades del mes de la memoria, a 44 años del último golpe cívico-militar en nuestro país. Pero apenas unos pocos pudieron verla y contemplarla. ¿Cómo se vieron afectadas las dinámicas en la Universidad? Afectó toda nuestra dinámica diaria. No obstante, seguimos con la planificación del calendario de actividades, en la espera al regreso de la presencialidad y tuvimos que suspender el 98 por ciento de las actividades programadas. Logramos llevar adelante solo la exposición fotográfica Sororidad de Nora Vázquez (previo al ASPO) y el IV Encuentro Coral UNQ, que laboratorio por medio, se convirtió en el 1º Encuentro Coral Virtual UNQ 2020. Ahí reunimos a 14 agrupaciones corales (con participación de México y Colombia incluida) y se transmitió por las redes de UNQtv. ¿Qué nos podés contar sobre la nueva web de Cultura? Comenzamos a planificar el lanzamiento de la web de Cultura, a la vez que confeccionábamos una grilla de ofertas culturales virtuales, gratuitas y aptas para todo público. También realizamos dos publicaciones en la Revista de Ciencias Sociales ‐ Segunda época ‐ Expresiones Artísticas, editada por nuestra Universidad, y participamos como oradores en el Conversatorio Virtual ‐ Encuentro de Divulgación de la Red de Museos

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Celebración de los 70 años del voto femenino en Argentina. Foto: Programa de Cultura

UNQachito de Qultura organizado por la Subsecretaría de Culturas de la Municipalidad de Quilmes y el Departamento de Extensión Cultural EMBA Carlos Morel. ¿Cómo se compone la nueva web de Cultura? ¿Cuál es la finalidad de la misma? La web es una herramienta de difusión que teníamos en mente hace rato para darnos a conocer, compartir nuestra agenda, convocatorias y algunas actividades pasadas. Es una herramienta necesaria y casi obligatoria en estos tiempos. ¿Cuál va a ser la temática para este año? Vamos a trabajar en torno al 70 aniversario del voto femenino en la Argentina y casi todas las actividades girarán en torno a esto. El hecho de pensar y desarrollar la programación artístico-cultural con un eje central

Foto: Programa de Cultura

definido a lo largo de todo el año nos resultó muy bien en ocasiones pasadas, tal como lo fue en 2017 con los 40 años de la desaparición de Rodolfo Walsh o el 30 aniversario de la UNQ en 2019, entre otras temáticas.

Programa de Cultura Secretaría de Extensión Universitaria Universidad Nacional de Quilmes Web: http://programadecultura.web.unq.edu.ar

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“Esta nueva forma de vincularse trae algunos beneficios” Manuel Eiras, profesor y coordinador de la lectura a Rosario Bléfari el 14 de mayo, comenta su participación en el club de lectura “A toda voz”. :: Por Rodrigo Gagliero Manuel Eiras es Licenciado en Comunicación Social por la Universidad Nacional de Quilmes. Docente e investigador de la Universidad, coordina distintos Cursos de Extensión sobre literatura latinoamericana contemporánea para adultos mayores. Además, es escritor y publicó “Las ganas de ir al baño” (novela, 2015) y “El rolinga del espacio final” (cuentos, 2016). ¿Cuál fue su interés por participar en el club de lectura “A toda voz”? Me parece un espacio fundamental dentro de la Universidad y que, por suerte, cada vez gana más terreno, más lectores. Cuando la lectura es compartida se juegan otras variables que no aparecen en la intimidad del lector. ¿Qué texto eligió para su lectura? Para el encuentro que coordiné propuse la lectura del cuento “Puerto deseado”, que Rosario Bléfari publicó en el libro “Las reuniones”, en el 2018. ¿Por qué decidió coordinar la lectura de ese cuento? Elegí ese cuento porque me parece que está muy bien trabajado. A medida que avanza la narración aparecen variables que incitan a seguir la lectura y al mismo tiempo obligan a volver a lo que se leyó desde una perspectiva distinta. La idea de devenir juega un papel importante en su literatura, como si la lectura fuera una pelota en una barranca. ¿Qué pudo encontrar en la lectura de ese cuento? Es un cuento que habla sobre la búsqueda de identidad desde un costado inesperado, novedoso. Se pregunta por la forma en la que conviven el placer y el deseo con ciertos tipos de obligaciones y normas más o menos establecidas. Tapa del libro “Las reuniones” de Rosario Bléfari

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UNQachito de Qultura ¿Qué piensa sobre la celebración del 70 aniversario del voto femenino en la Argentina? Creo que la posibilidad de celebrar el voto femenino fomenta un tipo de construcción de memoria colectiva que no podemos descuidar. Pero por otro lado habilita a nuevas discusiones y visibilidades. Quizás lo más importante de la celebración sea la celebración misma, no tanto el hecho histórico que se retoma como el presente en el que se conmemora. Debido a la pandemia y al contexto social en el que seguimos, ¿de qué forma modificó sus rutinas profesionales hacia la virtualidad? Creo que la pandemia, de diferentes maneras, nos perjudicó a todas las personas. También nos obligó a repensar nuestras prácticas cotidianas. En ese sentido, extraño las clases presenciales, pero entendí que esta nueva forma de vincularse trae algunos beneficios. Por ejemplo, muchos

asistentes al Club de Lectura dijeron que los años anteriores no pudieron participar porque no les coincidían los horarios o porque se hacía los días que no estaban en la Universidad. ¿Cuáles fueron sus principales influencias a la hora de decantarse por los géneros de la literatura en el ámbito personal y académico? Dentro de lo personal, todo lo que definió esa orientación tiene que ver con el placer por la lectura. Además me gusta escribir ficción, que es otra forma de leer, o mejor, otra herramienta de lectura. En términos académicos, me ayudaron mucho las becas que todavía ofrecen la Secretaría de Investigación y el Departamento de Ciencias Sociales. A partir de la obtención de un par de becas me introduje en el mundo de la docencia y la investigación sobre algunas cuestiones del ámbito literario.

El coro de la UNQ ensaya de forma virtual por la pandemia A partir del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO), el coro estable de la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) adaptó su trabajo a la virtualidad para ensayar y cantar. :: Por Daniela Navarro y Julián Berenguel La llegada del COVID-19 alteró nuestra vida cotidiana, desde las relaciones con nuestros afectos hasta nuestras actividades recreativas. El coro estable de la UNQ no fue ajeno a esto. Con el comienzo del aislamiento, quedaron suspendidos sus ensayos presenciales.

nuevo curso consiste en tres módulos de actividades para ejercitar las habilidades necesarias para cantar. Su director, Sergio Ganza, destacó que con el aislamiento pudo “generar ámbitos que antes el coro no tenía”.

Para continuar con su trabajo en pandemia, se ideó una nueva dinámica y se realizaron los ensayos de manera remota con frecuencia semanal. También se creó una página web (coro.web. unq.edu.ar) con un aula virtual para los ingresantes al coro. El

El coro se fundó en abril de 2001 a través de una propuesta de Ganza al Programa de Cultura de la UNQ. Desde entonces dieron conciertos, hicieron giras e incluso grabaron un disco para su décimo aniversario, que recibió un reconocimiento por parte de Cultura.

UNQachito de Qultura La nueva modalidad de trabajo reivindicó la tarea de acompañamiento a cada integrante y permitió mayor tiempo al entrenamiento vocal. Natacha Muñiz es preparadora vocal del coro desde marzo de 2017 y se dedica a hacer un trabajo técnico junto a los coreutas. Muñiz declaró que “hubo ensayos donde hicimos un trabajo de contención, porque hubo momentos de mucha angustia”. En el mismo sentido, manifestó que esta situación excepcional profundizó “el lazo con los y las coreutas”.

Colombia y de México. Para la inscripción, los interesados enviaron una obra interpretada en pandemia. “Encontramos una posibilidad que en lo presencial no hubiera pasado”, describió Ganza.

Para María Magallanes, integrante del coro desde 2015, el inicio de la virtualidad fue difícil “por la falta de encuentro colectivo”, pero con el paso del tiempo se adaptó. La coreuta expresó que su experiencia en el Primer Encuentro Virtual fue emocionante por la novedad de la virtualidad y por la curiosidad que le generaba escuchar las voces de los otros coros participantes.

Las obras que realizan están relacionadas con el contexto social y político. Un ejemplo es la reversión de la canción Bella ciao, a partir del reclamo contra el ajuste a la ciencia y la universidad pública en 2018. También Neoliberalismo, estrenada en 2019, durante un encuentro en la UNQ. El director afirma que el coro busca transformar la realidad y no sólo observarla.

En noviembre se realizó el Primer Encuentro Coral Virtual UNQ transmitido por UNQtv, donde participaron 14 coros, incluidas agrupaciones de

En este momento, el coro tiene 25 integrantes, 15 del elenco estable, que se encuentran en pleno ensayo virtual, y 10 que se encuentran en el curso de ingreso. Asimismo, está abierta la convocatoria para inscribirse a través de un mensaje al correo coro@unq.edu.ar.

Para septiembre se proyecta un segundo encuentro virtual y preparan Vidala para Güemes, en homenaje al Cuchi Leguizamón, y la canción Juana Azurduy, por la celebración de los setenta años del voto femenino.

El coro estable de la UNQ en el Primer Encuentro Coral Virtual. Foto: UNQtv

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Ságora, el software que surgió como necesidad Diego Surueta, integrante de Ságora, explica el surgimiento y el funcionamiento de la plataforma. :: Por Camila Miele y Lautaro Zuleta Ságora es un software gratuito que permite conectar múltiples usuarios en una sala virtual y transmitir audio en tiempo real. Se lanzó el 28 de mayo de 2020, en medio de la pandemia de COVID-19 y durante el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO), cuando las clases presenciales estaban suspendidas y continuaron de manera virtual. La plataforma fue desarrollada por Diego Romero Mascaró, Estaban Calcagno y Diego Surueta. ¿Cómo surge Ságora? -Surge por necesidad, por contexto. El objetivo fue resolver un problema pedagógico, un problema institucional. Está pensado no sólo para resolver el problema de un docente que se ve afectado, sino para resolver el problema de una comunidad. Surueta afirma que Ságora emergió por contexto y por necesidad, pero que “no nació de un repollo”. La plataforma fue desarrollada por miembros de la Escuela Universitaria de Artes de la Universidad Nacional de Quilmes. Explica que otras plataformas para realizar encuentros virtuales, como Zoom, presentaban problemas a la hora de ensayar, porque “están pensadas para realizar conferencias. No plantean un ida y vuelta ni comunicarse al unísono”, sostiene. El Software se pensó para resolver este inconveniente y otros más, como la latencia, es decir, el retardo que existe en el momento en que se emite la onda sonora. ¿Qué sucedió con el lanzamiento? Cuando “tiramos” el software a la cancha, el 28 de mayo de 2020, fue un tsunami. Se diseminó muy rápido y en menos de 24 horas hubo 8 mil

descargas. Algo demencial. No esperábamos demasiado, si bien hacía falta, no dijimos “esto va a ser una bomba que va a explotar de inmediato”. Y hoy tenemos casi 100 mil descargas en 84 países del mundo. ¿Cómo se sostiene el proyecto? Empezamos a buscar la forma de financiar el proyecto. Una de las aristas ante la ausencia de financiamiento fue pensar alternativas como donaciones. Además de las donaciones, Surueta menciona que en diciembre recibieron financiamiento por parte del Ministerio de Producción, y recalca la necesidad de invertir en Comunicación. Al comienzo eran tres personas las que encabezaban este plan y ahora se está sumando más gente al grupo. Alejandro Marcello, un profesor de guitarra perjudicado por la cuarentena, manifestó que la aplicación le facilitó tocar con sus alumnos sin ningún tipo de latencia ni compresión. Por otro lado, Andrés Blotta, un usuario recurrente, afirma que no consigue que algunos de sus compañeros músicos logren usarla por la dificultad para configurar la aplicación. También remarca que es necesario tener algunas nociones en relación a las configuraciones de audio. ¿Qué inconvenientes tienen los usuarios con la plataforma? Estamos preparando tutoriales para usuarios porque nos dimos cuenta de que hay un alto déficit de conocimiento tecnológico de la comunidad en general.

Podés descargar SAGORA desde: www.sagora.org Facebook: Ságora Software

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La mecánica del centro de diagnóstico, por dentro En convenio con el Ministerio de Salud de la Provincia y el Municipio de Quilmes, se constituyó un área de la Universidad como centro de diagnóstico de COVID-19. :: Por Micaela Mourelle, Ailén Zaracho y Santiago Bianchi A partir de abril del 2020, la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) se sumó a la red de laboratorios de diagnósticos de COVID-19 a través de un convenio con el Ministerio de Salud de la Provincia. Es un laboratorio especializado para el análisis de muestras a nivel local y regional.

dijo Rocío Comito, estudiante avanzada de Biotecnología que se ofreció como voluntaria de inmediato. Agrega que si bien recibe una beca -que se extiende a medida que se prolonga la pandemia- no deja de ser un trabajo voluntario.

Recibe muestras de Quilmes pero, al formar parte de la zona sanitaria sexta conformada por varios municipios, también puede recibirlas de Florencio Varela o Berazategui. “En particular, como es una zona sanitaria amplia, incluye muchos partidos del conurbano bonaerense de zona sur. Nosotros estamos abocados al distrito de Quilmes”, afirmó Georgina Cardama, Directora de la Plataforma de Servicios Biotecnológicos. El Ministerio de Ciencia y Tecnología brindó subsidios para la compra de nuevos equipos que permitieron fortalecer la infraestructura, facilitar y acelerar la tarea de diagnóstico. Desde el Ministerio de Salud de la Provincia se cubren la mayoría de los costos operativos e insumos correspondientes para el análisis de las muestras y una parte menor es abonada por el área de diagnóstico. Al momento de comenzar, el personal del laboratorio estaba compuesto por docentes investigadores de la UNQ pero, ante el incremento de muestras, se convocó estudiantes avanzados y de doctorado con conocimientos de la técnica molecular necesaria para el análisis de las muestras. “Cuando vi la noticia de que iban a abrir un centro de diagnóstico en la UNQ, sentí automáticamente la necesidad de estar ahí”,

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Dos voluntarias posan mientras trabajan en el centro. Foto: Agustín Ormazábal

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estamos trabajando juntos con un objetivo común y eso hace que se haga mucho más llevadera la tarea de estar trabajando en esta situación sanitaria bastante compleja a nivel país”. En sus comienzos, el objetivo de la Unidad COVID-19 era detectar el virus, con el análisis de cuarenta muestras diarias. En el pico de contagios, de agosto de 2020, llegaron a recibir 424 muestras. La cantidad diaria recibida varía dependiendo de cada centro de salud debido a que utilizan test rápidos para la detección en muestras de hisopados.

El grupo reunido en su último encuentro de 2020. Foto: Agustín Ormazábal

La experiencia del 2020 hizo que el personal del área de diagnóstico adquiera la destreza necesaria para afrontar la segunda ola de contagios de COVID-19. “Nos vimos muy preparados y preparadas para responder de la manera más efectiva y eficiente que requiere la circunstancia”, afirmó Sandra Goñi, directora del Laboratorio de Detección de SARS-COV-2. “Pertenecer al laboratorio de diagnóstico fue un desafío enorme y un sacrificio personal muy importante, pero llevado con mucha responsabilidad y mucho orgullo”, manifestó Goñi. Añade que hacerlo en la Universidad donde se formó es una gran satisfacción y una emoción inmensa. Mercedes Pastorini, docente de la UNQ y becaria doctoral del CONICET, afirmó que “somos todos de diferentes áreas de experticia, que

Frente a la segunda ola, el número ascendió y se llegaron a recibir 700 muestras por jornada. Sin embargo, el sistema no colapsó. La Unidad se compromete a enviar los resultados en no más de 48 horas aunque Santorini asegura que “en la actualidad se mantiene un ritmo de 24 horas o, incluso, algunas muestras se entregan el mismo día que llegan al laboratorio”. Hoy, el laboratorio se encuentra abocado a la detección del SARSCOV-2. No obstante, se proyecta una articulación con el Ministerio y los centros de salud locales para atender otras múltiples demandas. “Esta pandemia nos hace notar que hay que estar preparados para estas catástrofes”, sostiene Comito. Existe la posibilidad que la UNQ pueda sumar la unidad de diagnóstico al sistema de salud a largo plazo. “El laboratorio se consolidó para poder seguir en funcionamiento luego de que termine la pandemia. De hecho, se habló de la posibilidad de hacer detección de virus respiratorios y otro tipo de patologías, por ejemplo, de diagnóstico molecular”, declaró Pastorini.

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El primer centro de aislamiento, el segundo y el centro de vacunación La UNQ trabajó codo a codo con el municipio de Quilmes frente al estallido de la pandemia durante el 2020. :: Por Santiago Chanel, Ana Clara Silva y Santiago Bianchi El 22 de abril de 2020, ante la crisis epidemiológica a causa de la pandemia por Covid-19, el Municipio de Quilmes abrió el primer centro de aislamiento de la ciudad en la UNQ. Allí se alojaron 407 mujeres, 362 hombres y 185 niños y niñas contagiados. El subsecretario de Desarrollo Institucional y Bienestar Universitario de

la Universidad Nacional de Quilmes, Daniel Borro, dijo que “es importante para la Universidad colaborar en la lucha contra el coronavirus”. La Institución asistió al Municipio brindando sus instalaciones para fortalecer al sistema sanitario local ante el crecimiento drástico del número de casos. Alojó a pacientes asintomáticos o con leves síntomas de COVID-19 que no tenían la posibilidad de aislarse en sus domicilios. En conjunto participaron en distintas actividades académicas y de extensión, ofreciendo un espacio de contención y ayuda a la comunidad quilmeña. Por su parte, Los/as trabajadores de la Universidad coordinaron y asistieron a las necesidades del operativo municipal, mientras que la Intendencia proveyó de insumos, recursos humanos y operación logística. La pandemia no fue la excepción para que los organismos intervengan en favor de la comunidad. Los trabajadores/as municipales y universitarios cooperaron como voluntarios. “Tanto los funcionarios como los trabajadores nos pusimos a disposición de la intendenta para cooperar en los lugares que nos digan y nos sintiéramos cómodos”, indicó Ariel Domínguez, director de Economía Social de la municipalidad que, además, asistió en la de seguridad del centro. Realizó tareas de logística la entrada y salida de pacientes, inventario de sus pertenencias, control de medicamentos, entre otros datos. Al cierre de esta nota, el Polideportivo de la UNQ está preparándose como nuevo centro de aislamiento para pacientes con casos moderados de COVID-19. Contarán con oxígeno, equipo profesional y médico otorgado por el Municipio de Quilmes.

Un voluntario se desinfecta luego de salir de una sala de aislamiento. Foto: Carlos Brigo

dossier Por otra parte, la Universidad cedió sus instalaciones para montar un centro de vacunación sumándose a los otros 11 activos en el partido de Quilmes. El programa se impulsó a través de la campaña “Vacúnate” llevada adelante por el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires. El programa aplica las vacunas SINOPHARM, SPUTNIK V, COVISHIELD. “La Universidad estuvo a disposición de las necesidades que el Municipio tuvo frente a la pandemia. Esto marca la importancia de que la UNQ está al servicio del pueblo de Quilmes”, declaró Jonatan Konfino, Secretario de Salud del Municipio de Quilmes. Respetando los protocolos sanitarios, el gimnasio de la Universidad ofrece su infraestructura para vacunar a 300 personas por día en promedio. El equipo de trabajo está compuesto por más de 25 personas y abre sus puertas de lunes a viernes desde las 8 a 18. Hasta el momento, la mayoría de las personas inmunizadas son mayores de 60. Alicia Mattiello, (96), compartió su alegría al ser la primera en vacunarse en la UNQ: “me parece bien, lo tomé bien, sabía que me iban a llamar pero no sabía cuándo. Es una tranquilidad para los que nos rodean”. “Gracias a Dios no sentí nada, la experiencia fue buena”, expresó por su parte, Elva Cabrera, de 84 años. “Estoy muy contenta y agradecida; los chicos son muy amables y fui atendida perfectamente”.

amiento ores de acompañ realizando sus lab ios go tar Bri s lun rlo vo s Ca Do . Foto: vas de COVID-19 a personas positi

Por último, los gobiernos provincial y municipal invitan a las personas que aún no se inscribieron para recibir su turno de vacunación, lo hagan a través de la aplicación móvil VacunatePBA o desde el sitio oficial:

https://vacunatepba.gba.gob.ar/ 35

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El funcionar del Centro de Telemedicina COVID 48 estudiantes voluntarios brindan acompañamiento telefónico a pacientes con COVID-19. :: Por Santiago Bianchi y Victoria Iguerabide A partir de un plan lanzado por el Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, el Programa de Asuntos Estudiantiles de la Universidad Nacional de Quilmes puso en funcionamiento el 23 de julio de 2020, el Centro de Telemedicina COVID Universidad (CeTec-U). El objetivo principal es realizar el seguimiento telefónico de personas diagnosticadas con COVID-19 que cumplen el aislamiento en sus hogares. Además, el Centro brinda información sobre cuidados, sintomatología y efectúa el rastrillaje de contactos estrechos. Si bien la convocatoria a este voluntariado fue anunciada como tal, es decir, sin recibir una contraprestación en dinero, un convenio con el Ministerio de Salud posibilitó que los estudiantes reciban -en la actualidaduna beca. El ingreso tiene como fin cubrir gastos relacionados al estudio. A pesar de que la relación operador-paciente es una mera formalidad, “en los llamados se genera un ambiente de confianza donde se ven aspectos personales del paciente”, señaló, Jhonatan Luque voluntario del CeTec-U. Tanto Lucas Jáuregui, Inti Hilen Brun y Luque, miembros del equipo, concuerdan en que lo más gratificante de su tarea es el agradecimiento de las personas por la contención brindada. También señalan lo emo-

Lucas Jáuregui ejerciendo su labor diaria. Foto: Inti Hilen Brun

cionante de comunicar el alta médica y la posterior reacción del otro lado del teléfono. “La emoción crece el alta es de un adulto mayor, cuyo cuadro presentó complicaciones en el transcurso de la enfermedad”, dijo Brun. Según los datos del Los voluntarios se reúnen en el patio de la universidad al Ministerio de Salud finalizar la jornada. Foto: Mariela Rametta. de la Nación del 27 de abril, el 56,3 por ciento de los internados en Unidades de Terapia Intensiva de los hospitales es menor de 60 años. Sin embargo, Brun comentó: “no noto ninguna diferencia en el rango etario. Siempre los cuadros que más se agravan son los de las personas mayores de 40.” Jáuregui y Luque concuerdan con su compañera. Por último, existe un metanálisis publicado por investigadores en la revista científica Psychiatry Research que muestra un aumento en la prevalencia de depresión, ansiedad y trastorno por estrés durante la pandemia. “Hay mucha gente que durante el aislamiento sufre ataques de pánico o depresión”, asegura Brun y por eso se implementó al dispositivo de escucha y acompañamiento un grupo de profesionales del CeTec especializados en el área de Salud Mental.

ESCUELA “Ser cada vez más conscientes en todo, en que el cambio empieza a partir de lo que cada unx puede aportar, y en conjunto mucho más, porque todo es para todxs.” Esta imagen fue creada por lxs jóvenes y docentes del Club de Periodistas de la ESET-UNQ y elaborada por Juan Bértola en el marco del PEU “desde acá”. Ezpeleta, octubre 2020.

representación estudiantil

Maximiliano Ríos: “Entre el 98% y 99% de los reclamos que se presentaron, tuvieron una respuesta y se solucionaron” Los reclamos estudiantiles surgieron a partir del límite de 3 materias para las inscripciones del primer cuatrimestre del 2021. Maximiliano Ríos, presidente del CECyT, expresó su postura frente a los pedidos para cursar una cuarta materia. :: Por Antonella Arcuri, Aixa Avila Muños e Ignacio Aguirre El 25 de febrero se publicó, en la página oficial de la Universidad Nacional de Quilmes, un comunicado sobre la inscripción de materias correspondientes al primer cuatrimestre del 2021. Al entrar en detalle, además de las fechas de inscripción y los cupos disponibles según carrera o ciclo en el que se encontraba el y la estudiante, el mensaje resaltaba la siguiente frase: “Las/los estudiantes podrán inscribirse por sistema en tres materias.” Ciertamente, este aviso fue sorpresivo y, para muchos estudiantes, indignante. En el segundo cuatrimestre del 2020, la Universidad ya había presentado un límite de hasta cuatro materias por estudiante. Para el cuatrimestre actual, el límite estipulado era de tres. Hay que tener en cuenta que la diferencia de una materia, según el ritmo de cursada y etapa en la que se encuentre un o una estudiante, puede afectar significativamente el avance en la carrera. A partir de ese momento, comenzó una lluvia de reclamos por parte de los y las estudiantes, en todas las redes sociales de la Universidad, en los Centros de Estudiantes, en las agrupaciones que militan por y para los y las cursantes, y hacia las autoridades y profesores de cada Departamento que conforma la UNQ. Tampoco faltaron las teorías y rumores sobre el porqué de esta medida. Fueron semanas caóticas y estresantes no sólo para los y las estudiantes, sino también para los y las representantes de cada sector de la Universidad.

El comunicado de la inscripción, que llevaba consigo el sorpresivo mensaje del nuevo límite de materias, contenía también una excepción a esta nueva regla: “En caso que el/la estudiante esté finalizando su carrera y necesite inscribirse a una cuarta materia para completar los requisitos curriculares establecidos en el Plan de Estudios deberá contactar durante los días de inscripción web a su Director/a de Carrera.” Esto implicó un gran alivio para los y las estudiantes que se encontraban próximos a recibirse, pero por otro lado, los y las cursantes que no cumplían con este requisito continuaban indignados. La Universidad, una vez finalizada las inscripciones, comunicó que en el área de tutorías se atendió a un total de “1.729 alumnos, dentro de los cuales 336 estudiantes se encuentran inscriptos a la cuarta o quinta materia”. En el Consejo Superior del 31 de marzo, Alejandro Villar, rector de la Universidad, afirmó: “Tuvimos que realizar las inscripciones planificando un eventual regreso a las aulas, lo cual nos limitaba desde la infraestructura y en la cantidad de cursos a ofrecer. Se presentaron 4 tipos de cursos: presenciales, semipresenciales, virtuales sincrónicos y virtuales asincrónicos. La oferta cubrió las necesidades de los Departamentos. […] En el marco de la pandemia, la inscripción llegó a buen término.” Este mensaje, que tuvo por principal objetivo el informar a los y las estudiantes sobre el porqué de la medida, suavizó la situación pero la pandemia sigue siendo una realidad limitante, y la suba de casos obligó a tomar nuevamente la alternativa de cursada virtual.

representación estudiantil En la entrevista que realizamos a Maximiliano Ríos, Rocío Bogado y Milagros Lamboglia, representantes de los Centros de estudiantes de Ciencia y Tecnología (CECyT), Economía y Administración (CEEA), y Ciencias Sociales y Escuela de Artes (CECSEA) respectivamente, nos brindaron su opinión sobre este límite de materias. Al igual que el Rector, todos ellos afirmaron que esta medida fue tomada por una restricción física de las instalaciones de la Universidad que no permitiría cumplir el protocolo en las aulas. Sobre las medidas tomadas el año pasado referente al límite de materias, Milagros Lamboglia, presidenta del CECSEA, nos comentó que el tope de cuatro materias se dio por la falta de cupos en algunas asignaturas, sobre todo en materias de las Diplomaturas. Al preguntar sobre la posibilidad de ampliar el cupo de las comisiones aprovechando el entorno virtual, Rocío Bogado, presidenta del CEEA, expresó que varios profesores se encontraron con cursos de hasta setenta alumnos/as o más, “generando el doble de trabajo para el docente, que no solo tiene que evaluar a tantos alumnos/as en tiempo y forma, sino que también adaptar su materia a la virtualidad”. Retomando con el límite de materias para el primer cuatrimestre de 2021, Bogado afirmó que a la hora de hablar con las autoridades de la UNQ, la respuesta suele ser sobre el régimen de estudio preestablecido, que recomienda al alumno y alumna a cursar tres materias por cuatrimestre. Además, agregó que los Centros recibieron muchísimos

reclamos, los cuales se analizaron uno por uno para ayudar a los y las estudiantes que recurrían a ellos por el límite de materias o la falta de cupos –problema habitual tanto en la virtualidad como en la presencialidad-. Maximiliano Ríos, presidente del CECyT, destacó: “entre el 98% y 99% de los reclamos que se presentaron, tuvieron una respuesta y se solucionaron”. También expresó que desde el Centro que representa, hubo casos de alumnos y alumnas que llevaban un buen ritmo de cuatro materias por cuatrimestre e hicieron el reclamo pese a no estar cerca de recibirse. Estos casos fueron analizados por el representante del Departamento que tuvo en cuenta el desempeño del y la estudiante a la hora de evaluar excepciones. Además Ríos, agregó: “esto no solo funcionó así con el Departamento de Ciencia y Tecnología, sino que estas consideraciones fueron tomadas por los demás Departamentos.” Milagros Lamboglia, presidenta del CECSEA, manifestó que recibieron alrededor de cien reclamos, en los cuales la mayoría no cumplía con los requisitos establecidos por las autoridades para brindar la excepción. Por otra parte, la dirigente estudiantil comentó sobre la importancia de que los y las estudiantes se acerquen a los Centros con reclamos y consultas, afirmando que “si se presenta una problemática colectiva es mucho más fácil recurrir a las autoridades para buscar una solución”. Los tres representantes de los Centros entrevistados coinciden en que existe un buen diálogo con las autoridades de la Universidad y que suelen ser receptivos frente a nuevas propuestas que mejoren la experiencia educativa. Aún se desconoce si esta medida continuará vigente en el próximo cuatrimestre, ya que el panorama respecto a la pandemia es de cambios continuos afecta directamente la toma de decisiones para la Universidad. Lo que sí quedó en claro en esta entrevista es que frente a este escenario incierto, tanto el cuerpo administrativo de la UNQ como los y las representantes estudiantiles, están dispuestos a trabajar en acuerdos para lograr que los y las estudiantes y docentes tengan una vida académica lo más eficiente posible.

“Si se presenta una problemática colectiva es mucho más fácil recurrir a las autoridades para buscar una solución” – Milagros Lamboglia. Foto:: Flickr UNQ Oficial (Archivo).

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Julián Arbios: «Las elecciones presenciales son la única democracia real que tenemos» En entrevista con Julián Arbios, el Consejero Superior por el Claustro estudiantil y participante de la Secretaría de Conocimiento Crítico, dentro de la Comisión Directiva del CECSEA puntualizó sobre el estado de las elecciones de Claustros y de los Centros de Estudiantes. El representante estudiantil resaltó diversas complicaciones del contexto, incluso con la dirigencia universitaria, y señaló en qué influyó la pandemia para que se prorroguen los comicios. :: Por Valentina Allende y Quimey Acosta Para entender el presente, debemos remontarnos al pasado para indagar, informarnos y recordar acerca de cómo eran las elecciones antes de que un virus invadiera nuestra vida académica. La Universidad estaba atravesada por aulas repletas de estudiantes, múltiples pasos hacia múltiples direcciones, fotocopiadoras a toda marcha y una multitud de sujetos con ganas de aprender. Una vez al año, ocurría la revolución al cotidiano universitario: las elecciones de Claustro y de Centros de Estudiantes. Pero hoy, la realidad es que dentro de este marco de pandemia es imposible que ambas se realicen. Durante el 2020, no se desarrollaron comicios de ningún tipo. En simples palabras, podemos afirmar que la Universidad se encuentra con los mismos representantes desde el año 2018. Ante semejante panorama inesperado, el 12 de mayo del 2021 a las 17 horas, se convocó a sesión extraordinaria de Asamblea Universitaria, através de modalidad virtual, para deliberar sobre la segunda prórroga de los mandatos de las autoridades, ahora hasta el 21 de diciembre del 2021. Alejandro Villar, rector, manifestó en la Asamblea: “(...) Tenemos la firme decisión de convocar a elecciones en septiembre de 2021 para continuar el proceso electoral que comenzamos el año pasado y tuvimos que suspender en noviembre de 2020”. El proyecto de prórroga fue aprobado por 63 votos positivos, 2 negativos y 1 abstención.

Alejandro Villar en Asamblea Universitaria bajo modalidad virtual. Foto: Videoconferencias UNQ

Julián Arbios participa de la comisión directiva del CECSEA, es Consejero Superior por el Claustro Estudiantil, profesor en Ciencias Sociales (graduado de la UNQ) y militante en la agrupación “Hagamos lo Imposible”.

representación estudiantil En entrevista con Aula 67, Arbios explicó que: “Las elecciones de los Centros de Estudiantes son todos los años, mientras que, las elecciones de Claustro son cada dos y a diferencia de las anteriores, son obligatorias. Éstas últimas se conforman por cuatro frentes: personal administrativo, docentes, graduados y estudiantes”. La semana previa a la votación de los Centros de Estudiantes es conocida como “Semana previa de Campaña”. Agrupaciones empapelan las paredes y ventanas, se ven afiches con mensajes, se oyen promesas, convicciones y se reaprten volantes en cada esquina. Los integrantes de las agrupaciones se acercan aula por aula para darse a conocer y escuchar las voces, las palabras de los estudiantes y sus problemáticas. Los Centros buscan defender los derechos de los estudiantes y brindarles asesoramiento. La instancia de votación dura entre cuatro y cinco días. Durante la entrevista, Julián manifestó lo falible que son las propuestas de una elección virtual, y la complicación que esto conlleva, teniendo

en cuenta, el acceso del estudiantes al voto y a la campaña respectivamente. “Llevar a cabo una elección de cualquier tipo, de manera virtual lleva tiempo, dinero y una seguridad que aún no se posee en cuanto a la factibilidad de los votos”, afirmó. Hay que tener en cuenta que en la Universidad estudian alrededor de veinte mil estudiantes entre estudiantes virtuales y presenciales. “Hablamos de números muy altos y cada voto es importante porque cada estudiante cuenta y es digno de ser escuchado “, afirmó Julián, y aseguró que: “Las elecciones presenciales son la única democracia real que tenemos”. En conclusión, la prórroga de los mandatos remarca que existe un consenso entre todas las partes de la universidad que buscan el bien común de los estudiantes por fuera de sus diversas convicciones. En conjunto, la comunidad universitaria se encuentra a la espera de un pronto retorno a las aulas, a la vida cotidiana de la institución y con eso, a unas nuevas elecciones.

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Camila Sanabria: “La universidad actuó efectivamente ante esta necesidad” En el 2020 se logró la puesta en marcha de un subsidio tecnológico, una ayuda a los estudiantes que no contaban con ninguna posibilidad de conexión a internet. Este año se renovó la convocatoria. :: Por Juliana Baldoni y Sol Almeida El aislamiento preventivo social y obligatorio producido por la pandemia del Covid-19, llevó a las universidades de la Argentina a adaptarse a la modalidad de educación virtual y así, buscar mantener la continuidad pedagógica que se daba en las aulas presenciales. La virtualidad puso en jaque el conflicto que muchos de los estudiantes tienen: el acceso a la conectividad. Por tal motivo, la Universidad y los diversos Centros de Estudiantes (CECSEA, Alianza Universitaria, entre ellos) han puesto manos a la obra para brindar un subsidio tecnológico, y así poder cumplir con las necesidades de los estudiantes. Camila Sanabria, integrante del Centro de Estudiantes CECSEA y estudiante de la Lic. en Enfermería nos cuenta en que se basó el subsidio tecnológico, cómo se manejó el Centro en la actual situación de pandemia, y su opinión acerca de la actuación de la Universidad en este contexto.

¿Cómo crees que la universidad manejó la adaptación a la virtualidad? La universidad actuó efectivamente y rápidamente ante esta necesidad, se pudo convertir todas las aulas en aulas virtuales en el campus. Eso se hizo rapidísimo: en 2 semanas después que arrancaron las clases ya estaban las clases disponibles de manera virtual. Y estuvieron al tanto de esta problemática desde que arrancaron las clases y presentamos esta necesidad. El propósito de la UNQ es apoyar a los y las estudiantes que tienen dificultades para conectarse a internet y mantener sus cursos, garantizando así el derecho a la educación superior, gratuita y de calidad.

¿Qué beneficio otorga este subsidio? El Subsidio Tecnológico consiste en una tarjeta SIM de telefonía móvil con un plan de 5 Gigas de conectividad mensuales para estudiantes que no cuenten o que no tengan el acceso fácil a internet. Su creación fue gracias al trabajo en conjunto con distintas áreas institucionales de la universidad y representantes de los Centros de Estudiantes que luchan por la ampliación de derechos para su comunidad. ¿Cuántos fueron los beneficiarios de dicho subsidio? Hubo un total de 300 personas a las que se les entregó el subsidio.

Más de 300 almunxs pueden disponer de internet gracias al subsidio tecnológico entregado por la Universidad. Foto: Data Universitaria

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Henry Chiroque Solano: “Uno de los problemas que tenemos desde la universidad es ver la brecha digital” El docente y extensionista de la Universidad Nacional de Quilmes, Henry Chiroque Solano, nos contó acerca de su visión de la modalidad virtual y el subsidio tecnológico. :: Por Sol Almeida y Juliana Baldoni Henry Chiroque Solano es docente en grado de la Tecnicatura Universitaria en Economía Social y Solidaria; y en posgrado, de la Especialización en Economía Social y Solidaria. Además, participa en proyectos de investigación, extensión y transferencia. En diálogo con Henry Chiroque Solano, el docente nos comentó cómo la Universidad actuó para brindar un subsidio tecnológico, frente a la necesidad de conectividad de los estudiantes. Una de las preguntas iniciales fue si había tenido estudiantes beneficiarios del subsidio tecnológico, a lo que respondió: “En la carrera nuestra se hizo un relevamiento para ver cuantos tenían acceso, así que estuvimos muy atentos a eso. La Universidad se manejó rápida y eficazmente ante dicha necesidad”.

El docente y extensionista manifestó que en las materias que dicta, el modelo de educación virtual no le afecta tanto porque ya brindaba clases en esta modalidad desde el año 2013. Además, recordó que “la Universidad siempre ha brindado las distintas plataformas para una buena cursada, ya que desde el año 1999 cuenta educación a distancia”. Ante la pregunta sobre como la Universidad Nacional de Quilmes había tenido la iniciativa de promulgar este subsidio, su repuesta fue muy alentadora: “El tema de la virtualidad dentro de la Universidad fue siempre buscar de atender las necesidades de los estudiantes y garantizar que puedan tener acceso a las plataformas virtuales”, afirmo Henry. Y finalmente, el docente enfantizó: “Uno de los problemas que tenemos desde la Universidad es ver la recha digital”.

representación estudiantil

Milagros Lamboglia: “La virtualidad le permitió a les estudiantes estar en contacto con nosotres en todo momento” La presidenta del CECSEA nos cuenta cómo se maneja el Centro en pandemia y los nuevos desafíos que tienen por delante. :: Por Camila Basso Ya hace un año que la UNQ funciona de manera virtual, y el Centro de Estudiantes de Ciencias Sociales tuvo que atravesar varios cambios en sus tareas cotidianas y en su rol en la Universidad. “Fue un desafío enorme para nosotres poder adaptar las actividades que veníamos llevando a cabo”, explicó Milagros Lamboglia, dirigente del CECSEA desde 2019. “Antes de la pandemia, en el día a día estábamos en el Centro y llegaban estudiantes con todo tipo de dudas, desde donde estaba tal aula hasta trámites administrativos. Eso fue lo más difícil de adaptar”, recordó. Frente a la crisis sanitaria, no solo cambió la dinámica sino también las problemáticas que enfrentan hoy en día les estudiantes y el Centro. Lamboglia comentó: “Surgieron cosas nuevas, como las plataformas de cursada, donde al principio se complicó bastante. Y resaltó: “Entendi-

mos desde el primer momento que lo esencial era poder estar atentes a las necesidades que iban surgiendo.” “Para resolver problemáticas más específicas de las carreras fuimos reuniéndonos con les directores y llevándole las dudas que teníamos.” explicó la presidenta, remarcando que “Esto ayuda a dar información verdadera, lo más rápido posible y a evitar confusiones.” Para Lamboglia, la relación con les estudiantes cambió positivamente con la virtualidad: “Pensábamos que iba a ser mucho más difícil pero fluyó bien”, admitió. “La virtualidad le permitió a les estudiantes estar en contacto con nosotres en todo momento. En su momento fue un poco más complejo poder organizarnos para contestar todas las dudas que nos llegaban, porque eran mensajes las 24 horas los 7 días de la semana, pero logramos encontrarle el ritmo”, concluyó la dirigente estudiantil.

deportes UNQ

“A pesar de la adversidad, la experiencia fue generalmente positiva” Daniel Santobuono, Jefe de la División de Deportes, hace un balance sobre cómo el Programa de Integración Social y Desarrollo Deportivo de la UNQ sobrellevó el atípico 2020. :: Por Camila Vega, Fidel Serrano y Milagros González La pandemia del COVID-19 no dejó esfera alguna de la vida sin transformarse. Áreas como la educación y el deporte, donde el cara a cara es fundamental, fueron las que más complicaciones tuvieron en la transición a la virtualidad. Vinculada a las particularidades que esos dos ámbitos implican, se encuentra la tarea de Daniel Santobuono, Jefe de la División de Deportes de la UNQ desde hace 12 años. A partir de su llegada al Área las posibilidades del deporte en la Universidad no han hecho más que ampliarse. “Cuando asumimos la dirección junto con Nicolás Mellino (Director del Programa), la Universidad solo contaba con 3 disciplinas. Hoy hay más de 10 y en varias logramos un gran nivel competitivo” afirmó Daniel, quien reflexionó largo y tendido para Aula 67 sobre la situación del deporte universitario durante el 2020. Cuando se dispuso el ASPO en marzo de 2020 ¿Cuál fue la respuesta desde el Programa de Deportes? Al principio, como todos, nos vimos confundidos. Tras analizar un poco la situación entendimos cuál iba a ser nuestro rol y encaramos 2 objetivos principales: hacer un acompañamiento socioemocional de la comunidad universitaria y concientizar sobre la importancia, especialmente en ese contexto que surgía, de realizar actividad física. Para eso nuestra herramienta principal fue la virtualidad y las redes sociales. Lo primero fue publicar flyers de divulgación: propuestas de ejercitación semanal e información sobre los beneficios de hacer actividad física.

El campo de deportes UNQ en 2021, transformado en Centro de Atención Sanitaria. Foto: Milagros González.

¿Lanzaron otro tipo de contenidos vía redes para cumplir esos objetivos? Tiempo después llegó la idea de hacer un ciclo de entrevistas vía Instagram, un proyecto en articulación con el Programa de Producción Televisiva (UNQTV) donde se entrevistó a deportistas de alto nivel. Luego, también por el mismo medio, implementamos clases virtuales en vivo (de acceso público y gratuito) de preparación física y stretching.

deportes UNQ Con respecto al alumnado y a la implementación de la virtualidad ¿Hubo deserción? ¿Cómo reacomodaron las actividades de los equipos universitarios y de las actividades recreativas? Durante los primeros meses de la cuarentena estricta el nivel de asistencia se mantuvo, en gran parte gracias a que organizamos reuniones con los entrenadores de los equipos universitarios como de las actividades recreativas donde se plantearon distintas estrategias e ideas para igualar lineamientos a seguir en cada disciplina bajo la virtualidad. Así, cada grupo pudo continuar con la preparación físico-técnica junto a sus entrenadores. Desde la coordinación mantuvimos un constante acompañamiento. Hacia fin de año, cuando se habilitó la actividad física al aire libre, sentimos cierto golpe. Desde la virtualidad no podíamos competir con el cara a cara que, en lo deportivo, es fundamental. Sin embargo, no hubo un considerable nivel de deserción. Mencionas la flexibilización de las actividades al aire libre a raíz del DISPO a fines del 2020 ¿Se consideró en ese entonces la vuelta a la presencialidad? Nunca pudimos volver, aunque a nivel clubes e individualmente se habilitó la actividad. Nosotros, al ser deporte universitario, estamos a disposición de las ordenanzas institucionales y la UNQ siempre priorizó la salud: colaboró con el Municipio al disponer sus establecimientos deportivos para instalar un Centro de Aislamiento Sanitario. Y si bien en noviembre el Centro cerró por la baja de casos, una presunta vuelta a las actividades se planteaba recién para este 2021. Teniendo lo anterior en consideración, ¿Qué balance haces del 2020? A pesar de la adversidad consideramos que la experiencia fue generalmente positiva. Principalmente porque cumplimos el objetivo fundamental de mantener el vínculo con estudiantes/deportistas y la comunidad universitaria en general. También porque la Universidad se hizo más conocida a nivel deportivo. Antes no le dábamos tanta importancia a las redes, pero con la virtualidad tan intensiva a la que nos obligó la

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pandemia implementamos los nuevos contenidos que les conté, orientados a un acompañamiento cotidiano, y hubo gran respuesta: en nuestra cuenta de Instagram nos empezaron a seguir alrededor de 800 personas más. En cuanto a lo pedagógico, fue un desafío. La mayoría de los profes teníamos mucho trabajo de base, la experiencia con los chicos del día a día. Lo remoto era algo que realmente no manejábamos, imaginate que había profes que no sabían abrir un Zoom –entre risas–. La pandemia nos obligó a capacitarnos con estas nuevas herramientas y mejoramos un montón. ¿Algún aspecto negativo? Los hay. Aunque sumaremos muchos estudiantes deportistas en el futuro, mientras estemos paralizados perderemos tantos otros. Pero fundamentalmente, si me preguntas a mí, nosotros necesitaríamos tener presencialidad. No es lo mismo para el alumno deportista la clase virtual que le podemos brindar que la posibilidad de hacer ejercicio físico al aire libre. Contra eso ya no podemos competir, no tenemos recursos. No somos una carrera, no podemos complementar con teórico. Nuestra tarea, al ser un Programa de Extensión, es netamente práctica. Esa es la realidad que yo y muchos de mis compañeros encontramos. A pesar de eso la Universidad tiene un emblema, y nosotros, que comprendemos la excepcionalidad de la situación, lo compartimos: la salud está delante de todo lo demás. Antes mencionaste una presunta vuelta a la presencialidad para este 2021 ¿Aconteció? Teníamos los protocolos listos y el visto bueno de la Universidad para la vuelta. Lo habíamos planificado para abril pasado, pero lamentablemente el rebrote de COVID nos lo impidió y hoy ambos predios están otra vez al servicio de la salud. Comprendemos la situación y estamos esperando a que se estabilice. Nos falta la infraestructura, pero los protocolos, el capital humano y las ganas están. Entretanto tendremos que continuar con la virtualidad.

deportes UNQ ¿Qué tenían planeado? Lo principal era hacer un reacondicionamiento físico. Los deportistas estuvieron un año con poca o nula actividad, entonces la idea era una vuelta muy gradual para evitar lesiones. ¿Nada quedó en pie? Más que quedar algo en pie nació algo nuevo. Hace unas semanas la Municipalidad de Quilmes nos comunicó que se abre una categoría que

incluye a estudiantes universitarios en los Juegos Bonaerenses 2021, a realizarse después de septiembre. Si bien los chicos representarían al Municipio, es condición necesaria que sean estudiantes universitarios. Nosotros vamos a promocionarlos para que participen y sería un corolario perfecto poder reencontrarnos en la presencialidad para hacer el reacondicionamiento y que lleguen en óptimas condiciones.

Todo lo que tenés que saber sobre los Bonaerenses 2021 En su aniversario número 30, y a pesar de la pandemia, los Juegos Bonaerenses continúan con propuestas novedosas para sus participantes. :: Por Florencia Valicente Debido al contexto epidemiológico, en la última edición, los Juegos Bonaerenses tuvieron que reinventarse para continuar dando lugar al deporte en medio de condiciones complejas. Con una fuerte presencia de la virtualidad, lograron convocar a más de 20.000 participantes. Con la organización de la Subsecretaría de Deportes del Ministerio de Desarrollo de la Comunidad, se desarrollará a, partir mes de junio, la Etapa Municipal de la competencia de los Juegos Bonaerenses 2021. Esta edición contará con deportes presenciales y virtuales, actividades culturales, y deportes electrónicos como Clash Royale, League of Legends, y Fortnite, entre otros. Además de las disciplinas juveniles que abarcan un rango etario de 12 a 18 años, se sumaron tres nuevas categorías que buscan hacer de la competencia una experiencia mucho más inclusiva. Las mismas contemplan actividades para adultos mayores de 60 años, personas con discapacidad

mayores de 12 años, y estudiantes de nivel universitario y terciario de 18 a 59 años. Es necesario aclarar que aquellas personas con discapacidad que quieran participar pueden hacerlo también en disciplinas que no sean exclusivas, siempre y cuando se respete el rango etario estipulado en cada una de ellas. Si las circunstancias epidemiológicas lo permiten, se espera que la Final Provincial se realice de forma presencial en la ciudad de Mar del Plata, tal como ha ocurrido históricamente, entre los meses de octubre y diciembre. La inscripción a los Juegos Bonaerenses 2021 debe realizarse en la página oficial: https://juegos.gba.gob.ar/, a través del sistema PLENUS. Los estudiantes universitarios sólo deben presentar el certificado de alumno regular como requisito para inscribirse en la competencia.

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Laura Carbajal y el fútbol: “Que se empoderen y lo disfruten” Graduada y docente de la UNQ, miembro de la Comisión de Género y Deporte UNQ y pionera del fútbol femenino en nuestra universidad, Laura Carbajal, nos cuenta cómo fue la trayectoria de esta actividad en el campo de deportes de la UNQ, y cómo lo vive desde su experiencia personal. :: Por Miguelina Pujol, Malena Torres y Jonathan Romero Laura lleva el deporte en la sangre desde que tiene memoria y ha atravesado por los estigmas que conlleva ser mujer y amante de este deporte, el fútbol. En entrevista para Aula 67, Laura nos contó que realizó varias disciplinas y que ya a los seis años empezó la “escuelita” de tenis. A los ocho, ya estaba jugando hockey sobre césped, deporte que practicó como federada hasta los veinte años llegando a primera división de su club. Lamentablemente, tuvo que darse de baja en la actividad debido a complicaciones organizativas en relación a sus estudios y la demanda del viaje de ida y vuelta a la universidad. El fútbol siempre estuvo presente en su infancia, y recordó que lo jugaba desde siempre con sus primos y primas, con sus compañeras de primaria, y que ya para 7º grado habían armado un equipo femenino para jugar en las canchas del barrio. Su experiencia y cercanía con el fútbol desde pequeña indujeron a que los comentarios patriarcales y discriminatorios no le importasen. Por el contrario, éstos la hicieron juntar fuerzas para enfrentarse al estigma -originado por el patriarcado- que implica el ser mujer y jugar al fútbol. ¿Cómo surge el fútbol femenino en la UNQ? Al fútbol universitario en la UNQ lo fuimos creando a partir del 2012, entre un grupo de pibas que nos gustaba jugar; traíamos amigas de amigas. Luego, se oficializó la actividad logrando tener entrenador y competencias universitarias de Fútbol 7. La condición para jugar y/o participar de la actividad era tener alguna relación con la institución. Es decir, ser estudiante,

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graduada o PAS, o tener vínculos a través de extensión universitaria. En 2016, se transforma en Futsal y en 2019 se conforma el equipo de Fútbol 11 para competir en los juegos universitarios de ese año. La base de jugadoras es la misma aunque se fue diversificando y ampliando la cantidad de personas. ¿Qué te impulsó a jugar al fútbol en la UNQ? En el año 95 conocí el deporte universitario y participé en los juegos nacionales de Mar del Plata con el equipo de Atletismo de la Universidad. Mientras hacía la carrera de Biotecnología, jugaba picaditos de fútbol amistosos con mis compañeros de cursada cuando me invitaban a jugar. El deporte universitario es reflejo de ponerte la camiseta y representar a tu segunda casa en la disciplina que amás, que pueden ser varias. En mi caso es el Futsal y el Fútbol 11. El sentimiento es distinto a si jugás para un club. Las relaciones humanas que se establecen son diferentes ya que en general casi todas las personas están estudiando y hay un universo y problemáticas en común. Además, es una actividad no arancelada. También se incluye la participación de estudiantes de intercambio,lo cual favorece mucho la inclusión y socialización.En el equipo de fútbol femenino participaron chicas de México, Chile, España, Colombia que se encontraban de intercambio, y chicas que estaban estudiando carreras que provenían de Ecuador, Perú, Cuba o Alemania.

deportes UNQ ¿Cómo se vive desde tus experiencias el ser mujer y futbolista? ¿Sufriste algún tipo de estigma social dentro de la comunidad universitaria? En algunas etapas de mi vida, sobre todo en la niñez y adolescencia, viví comentarios discriminatorios y prejuicios respecto de estereotipos de género, como machona, marimacho, tortillera, o que las chicas no saben nada de fútbol, etc. Pero como a mí me gustaba jugar y no me importaban los comentarios, nunca abandoné el fútbol amateur. Lo jugué siempre en familia o con amistades, tanto con mujeres o con varones.

Equipo de fútbol femenino de la UNQ como subcampeonas de los JUR 2019. Foto: Facebook @futbolfemeninoUNQ

Por otro lado, Laura afirmó que el trayecto de agregar un equipo femenino de fútbol en la universidad fue sencillo y sin ningún tipo de traba ya que la Subsecretaría de Deportes de la UNQ impulsa políticas eficaces para concretar una disciplina para ambos géneros mientras haya demanda y presupuesto. Además, comentó que en el básquet y el fútbol primero se consolidó lo masculino y luego se conformó lo que hoy en dia es el equipo femenino. Sin embargo: “También puede pasar al revés, como sucede con el hockey sobre césped, dónde son pocos los varones que lo practican”, concluyó Laura. Como parte de la Comisión de Género y Deporte, ¿se impulsaron proyectos para la inclusión que fomenten la igualdad en esta área? Hoy día el primer proyecto que tenemos que impulsar es darle el marco institucional, por medio del Consejo Superior, de la creación de esta comisión de Deporte y Género de la UNQ. Por el momento, está conformada por personas voluntarias e interesadas en la temática, que son representantes de cada disciplina pero que tienen distintos roles dentro de la misma. Por ejemplo, hay quienes son estudiantes, personas graduadas, docentes y/o representantes de la gestión de deportes.

Dentro de la comunidad universitaria, personalmente, no viví nada explicito en relación a discriminación. En algunos casos admiraban mi espíritu deportivo. Lo que sí se percibe es que se siguen perpetuando y reproduciendo algunos micromachismos que operan en relación a la práctica del deporte en general. Esperamos que con la capacitación de la Ley Micaela se sensibilice al respecto. La Secretaría de Extensión tiene un proyecto de deporte inclusivo, que considera además las opciones entre deporte recreativo y competitivo. O sea, quienes quieran competir y representar a la universidad pueden hacerlo.Otras actividades o disciplinas son de base mixta, de hecho, la mayoría de las disciplinas entrenan en modo mixto. ¿Qué le dirías a todas las niñas y adolescentes que quieren empezar un deporte como el fútbol y no se animan por los estigmas? Que nunca dejen de luchar y apostar por sus sueños. Que no bajen los brazos cuando se trata de concretar el sueño de practicar el deporte que les guste, sea cual fuere, que se empoderen y lo disfruten.

María Laura Carbajal en los JUR 2017 luego de obtener medalla de oro junto con el equipo de fútsal femenino de la UNQ. Foto: Alejandra Falcone.

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“Desde nuestro lado, siempre tratamos de transmitir el valor y respeto hacia el otro” Leonardo Schafir, desde su lugar como profesor del equipo de rugby en la UNQ, nos cuenta sobre el deporte y sus valores dentro de la Universidad. :: Por Valentina Santamaría y Serena Pérez

respeto. El respeto que hay con el árbitro por ahí en el fútbol ni aparece.

Schafir discurre sobre la actual polémica que afirma cierta inclinación violenta por parte de los jugadores de esta disciplina deportiva. También, contamos con la participación de Diego Benitez, referente del equipo.

Un ejemplo de lo que hablamos es el caso de Fernando Baez. Los acusados jugaban al rugby, y a partir de eso se generaron estas opiniones sobre el deporte y sus jugadores. Incluso, se habló de cierta irresponsabilidad por parte de los entrenadores al no inculcarles cómo ser fuera y dentro de la cancha. ¿Sobre esto qué opinas?

Es imposible negar el hecho de que durante estos últimos años, dentro de redes sociales y otros medios de comunicación, el rugby llegó a convertirse en foco de fuertes críticas. En el país no dejó de circular el conocido caso de Fernando Baez, ocurrido en Villa Gesell durante el verano de 2020. El joven, de 18 años, fue asesinado a la salida del boliche por parte de un grupo de diez rugbiers. Este ataque que generó tanta indignación, también fue factor clave para que el estigma adjudicado al rugby aumentara. La extensión deportiva de la Universidad de Quilmes, proporciona fácil acceso a distintas actividades, y entre ellas, se encuentra rugby coordinado por Leonardo Schafir. ¿Qué opinas sobre lo dicho últimamente acerca del rugby como deporte “violento”? El rugby a mi entender no es un deporte violento para nada, lo que tiene es mucho contacto físico. Habría que ver qué es lo que se considera como “violento”, pero es un deporte de contacto. A partir de esto se necesita una preparación física muy importante para prevenir lesiones y no lastimarse. Es por eso, que los jugadores tienen una contextura física grande o fuerte, precisamente para poder contrarrestar este contacto que se genera dentro de los partidos. Lo que sí hay es un sentido de unión, compañerismo y

El rugby como cualquier otro deporte se maneja en grupos, pero la realidad es que desde lo que pasó con Fernando tratamos de bajar una línea, de no estar metidos en lío. Violencia hay en todos lados, se dan muchísimas peleas en la vida cotidiana que son de la misma manera, y capaz que son personas que juegan cualquier otro deporte. Pero como hay mucho foco en el rugby, tenemos que cuidarnos más que nunca. En muchos clubes hay entrenadores, ex jugadores, que no son profes de educación física, entonces al no tener esa pedagogía puede ser que falle. Desde nuestro lado, siempre tratamos de transmitir el valor y respeto hacia el otro. Donde tenemos edades más juveniles hacemos muchas charlas respecto al alcohol y las salidas, tratamos de acompañarlos desde ese lado. La sociedad cada vez está más difícil para todos, no hablo solo del deporte en sí. Hay que acompañarlos a través del aprendizaje. Estamos en un momento del deporte muy frágil y un mínimo error expone al club. Lo que pasó con Fernando fue una locura total, y a partir de esto estuvimos teniendo muchas charlas... Tenés razón, quien no conoce bien al deporte lo ve como violento, y mucho más después de estos últimos casos.

deportes UNQ Exactamente, los chicos eran violentos. El mayor problema está en que determinados clubes los manejan los entrenadores, los viejos entrenadores que fueron jugadores y por eso entrenan. No hay un docente a cargo que además de enseñar el deporte tenga la pedagogía necesaria. En la medida en que haya más docentes que sean profesores va a ser todo mucho más fácil. Es fundamental ser conscientes de que estamos bajo la mira, hay que estar atentos. Uno cuando se pone la remera de un club es representante tanto adentro como afuera de la institución. En diálogo con Diego Benitez, integrante del equipo de rugby de la UNQ, el deportista enfatizó en que las charlas justamente buscaron reafirmar ciertos valores entre los jugadores, como es la solidaridad, el compromiso y el respeto hacia al otro. Benitez también expresó su repudio hacia el crimen de Fernando, y explicó que más allá de cualquier charla dada, cada uno sabe cómo debe comportarse. Asimismo, destacó el hecho de que “quienes realizan tales actos son personas que toman sus propias decisiones, más allá del deporte que realicen”.

Equipo de rugby de la UNQ durante los Juegos Universitarios Regionales, 2019. Foto: IG @deportesunq

TE PUSISTE LA 10 “Es una imagen invertida, mientras la mayoría de los vecinos los ven mal, los pibes en plena pandemia están haciendo una olla solidaria para que la gente tenga un plato de comida que comer en su casa. Eso está re bueno.” Esta imagen fue creada por lxs jóvenes y docentes del Club de Periodistas de la ESET-UNQ y elaborada por Juan Bértola en el marco del PEU “desde acá”. Ezpeleta, octubre 2020.

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La UNQ como centro vacunatorio Ante la crisis sanitaria, en esta segunda ola de Covid, la UNQ abre sus puertas como centro de vacunación. :: Por Catalina Nardi y Carmen Figueras Ester Schiavo, docente titular del Departamento de Ciencias Sociales e investigadora en la Universidad Nacional de Quilmes, nos cuenta su experiencia de vacunación en la UNQ. ¿Cuál es su opinión acerca de la actual pandemia y las políticas sanitarias aplicadas a nivel provincial y nacional? Para mí, que no soy especialista en el ámbito de la salud, se me hace difícil opinar. Puedo decir que me encuentro asombrada, hemos conseguido tener la mayor cantidad de contagios, por día, en el mundo. No sé ¿por qué se disparó de tal manera? Entiendo que, un factor importante del aumento es la vuelta a clases. Particularmente, no a las escuelas, sino a las movilizaciones que ocurren como consecuencia de la apertura de ellas. En otros países lo último que se habilitó fueron las escuelas. Personalmente, me llama la atención que la sociedad, en general, no piense en el personal de salud. Ya que a este, se le puede notar realmente agotado. Hace más de un año que vienen trabajando. Ayer conversando con un médico de la Provincia de Córdoba, me aseguraba que no dan más. ¿Cómo tomó la decisión de vacunarse? Siempre estuve de acuerdo con vacunarme, creo que es una forma más de protegerse. Yo no me quiero enfermar. Nunca lo dudé. ¿Cómo se enteró que se estaba realizando un vacunatorio en la Universidad Nacional de Quilmes? Al principio, la decisión de vacunarme en la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ), se dio a raíz de una colaboración entre la Provincia de

Entrada de la Universidad Nacional de Quilmes. Foto: Carmen Figueras.

Buenos Aires y las Universidades del conurbano. El convenio dictaba que, las Universidades que se convirtieran en centros vacunatorios, podrían vacunar inmediatamente a todo su personal Universitario. Este arreglo se terminó poniendo en pausa. Entonces, para no perder tiempo, me anoté para vacunarme en la Localidad de Quilmes y el turno me salió en la UNQ. Por la Provincia, me enteré en qué lugar me tocaba aplicarme la dosis. Sin embargo, fue por colegas que me enteré que la UNQ se había convertido en centro vacunatorio. Al final el convenio se dio, por lo que me hubiera correspondido vacunarme allí por avenencia. ¿Qué procedimientos tuvo que seguir desde que llegó a la universidad hasta que se retiró? ¿Cuáles fueron las medidas tomadas de sanitización e infraestructura que tomó la Universidad? El día que fui, fue todo súper ordenado. Éramos pocas personas. Todos estábamos previamente citados con un horario específico. Apenas llegué me tomaron la temperatura. El vacunatorio se encontraba ubicado en el gimnasio, al lado del estacionamiento. Al ser un espacio tan grande y abierto, la ventilación era constante, por lo que, contaba con la circulación de aire adecuada. En todo momento se respetaban las distancias. Era un mundo de sillas espaciadas y una especie de carpita. Tuve que pasar por varios controles en donde te hacían varias preguntas: ¿Tuviste

relación con la comunidad algún síntoma? ¿Tuviste en contacto con algún paciente Covid? ¿Sufres alguna enfermedad? Preguntas acerca del Covid, cosas de salud. Luego, pasás al sector de vacunación y a continuación, al sector de espera. Allí debes quedarte unos 20 minutos. Si te sentís bien, puedes retirarte. Todo el proceso es bastante rápido. ¿Tuvo efectos secundarios después de recibir la vacuna? ¿Cuáles fueron las indicaciones o recomendación que tuvo que seguir post vacuna? Si, al otro día de vacunarme estaba muy cansada. Tenía mucho sueño, este agotamiento me duró dos días. Solo eso me dio. En el Centro me dijeron que si tenía algún síntoma como los que te mencioné, sueño y agotamiento, que no me preocupara, que el malestar pasaba. La única recomendación específica fue que si me daba fiebre de más de 37,5 grados, debía tomar Paracetamol. ¿Cómo fue su experiencia con los empleados? ¿Recomendaría este centro vacunatorio? Correctísima. Si, lo recomendaría, son todos muy atentos y amables. ¿De qué manera cree, que los estudiantes de la UNQ están involucrados con el proyecto? No sabría decirte, reconocí a algunos integrantes del personal de la UNQ, más que nada docentes, no estudiantes. Yo pensé que las enfermeras eran de la UNQ, ya que en la misma hay carrera de enfermería, pero no. Los enfermeros son de la Universidad de la Arturo Jauretche (UNAJ). ¿Cuál es tu opinión acerca de las acciones que está tomando la UNQ en la actual situación de pandemia? Durante la primera ola, la Universidad tuvo un rol muy activo, prestó un espacio de sus instalaciones, para que se alojaran personas infectadas que no necesitaban estar hospitalizadas, pero que tampoco tenían lugar en sus casas para estar aislados. También ofreció los laboratorios para procesar los testeos. Esta segunda ola, nos toma por sorpresa a todos, no sé como continuarán sus acciones pero desde el primer momento la actitud de la UNQ ante la pandemia fue ejemplar.

“No se sale del hambre con un plato de comida, se sale del hambre con trabajo” Raúl Di Tomaso, Secretario de Extensión Universitaria y coordinador de UNQ Produce y Alimenta, nos cuenta sobre los objetivos de dicho programa y cómo desde este espacio, dan batalla a la lucha contra el hambre. :: Por Daiana Antonella Galeano y Florencia Magali Molina La Universidad Nacional de Quilmes desarrolla UNQ Produce y Alimenta, un Programa alimentario y educativo con el cual se producen y distribuyen alimentos enlatados en base a donaciones, y que contribuye a apaciguar la alta tasa de pobreza y hambruna por la cual transita el país. El Programa está destinado a comedores, merenderos y a situaciones críticas. La producción se realiza en la Planta Procesadora de Alimentos de la UNQ con alumnos y alumnas de la carrera Ingeniería en Alimentos. A partir del Programa, también, los estudiantes son capacitados en tareas productivas relacionadas a su profesión futura. A pesar del contexto de pandemia mundial, la cual afectó profundamente al país y sobre todo a los sectores más vulnerables de la población destruyendo 2 millones de puestos de trabajo, la Planta sigue en funcionamiento. Al no requerir una excesiva mano de obra, la Planta no sólo tuvo una fácil adaptación a los protocolos, sino que también, se está invirtiendo en sus calderas para triplicar la cantidad de porciones mensuales. El proyecto UNQ Produce y Alimenta es un Programa Transversal en el que participan y se articulan las carreras de Ingeniería en Alimentos, el Departamento de Economía y Administración, y la Secretaría de Extensión. El Programa, surge como iniciativa del rectorado de la Universi-

relación con la comunidad todos productos de ideas de los alumnos que trabajan en dicha Planta. En palabras de Di Tomaso, “A pesar que la gente padece hambre, tienen derecho a saborear un plato rico”.

Foto: Web UNQ oficial

dad promediando el mandato del ex presidente Mauricio Macri, en un contexto de aumento de los niveles de pobreza e indigencia, y a fin de colaborar con la alarmante situación. En diálogo con nuestro medio, el secretario de Extensión Universitaria y coordinador del Programa, Raúl Di Tomaso expresó que “Los programas alimentarios de la UNQ lamentablemente son un reflejo de las crisis alimentarias y de las crisis de pobreza de nuestro país” Este programa se asienta sobre el Programa de Súper Sopa, creado en los años 2000/2001, momento en el cual se instaló la Planta Procesadora de Alimentos y se comenzó con la producción de alimentos sociales. La Súper Sopa se envasa en latas de 4 litros que tras un complejo proceso, conserva su calidad hasta por 2 años, y está compuesta básicamente por hortalizas varias, carne, arroz y arvejas en proporciones adecuadas. Con las innovaciones de las calderas se sumarán nuevos productos tales como locro, guiso de arroz, arroz con pollo, estofado y arroz con leche;

UNQ Produce y Alimenta funciona con donaciones de instituciones y particulares. Tiene una cuenta oficial supervisada por todos los organismos del gobierno de la Universidad donde poder donar y de allí, las autoridades se encargan de comprar las materias primas. A la vez, la Universidad brinda la instalación, la energía y los operarios. No obstante, Di Tomaso aclaró que es más efectiva la donación de dinero que una donación de materia prima, ya que no se puede garantizar la calidad y frescura de las verduras y carnes, a la vez que los alimentos no perecederos deben ser de la misma marca para que no hayan fallas en sus tiempos de cocción. La Universidad busca colaborar en la solución del problema del hambre. Frente a ello, Di Tomaso sostiene que “No se sale del hambre con un plato de comida, se sale del hambre con trabajo”. Es así como el Programa se vincula con toda una red de productores de la economía social que asumen el rol de proveedores de insumos: productores agroecológicos proveen verduras, frigoríficos recuperados por sus trabajadores proveen carne, un conjunto de cooperativas provee arroz. Lo que comenzó siendo un proyecto universitario se convirtió en un entramado productivo solidario “para dar de comer en la emergencia, pero al mismo tiempo crear trabajo” cuenta Di Tomaso. Actualmente, la UNQ a través de este proyecto, distribuye anualmente 600 toneladas de productos provenientes de cooperativas, empresas recuperadas y en algunas oportunidades, de empresas familiares. Además, el Programa brinda asesoramiento para la transferencia tecnológica y metodológica del modelo, la cual permite, con una muy baja inversión en equipos de producción, generar valor agregado a los alimentos y ocupar mano de obra. Como comentó Di Tomaso “no se busca generar cualquier trabajo precario, sino trabajo basado en una economía solidaria, no basado en la renta o ganancia”.

relación con la comunidad

Por una Universidad Ecológica Más reciclado, menos basura. :: Por Karina Stefania Garcia y Karen Melina Parodi La Psicóloga Social, Carla Romina Avila, es una de las responsables del Programa UNQ Sustentable. Su participación inicial en el proyecto se dirigió a unificar los distintos equipos, buscando transmitir de adentro hacia afuera ideas de sustentabilidad. El objetivo: generar espacios sustentables internamente para luego trasladarlos externamente. ¿Podrías comentar, brevemente, de qué se trata UNQ Sustentable? En el transcurso de 30 años, la Universidad Nacional de Quilmes se comprometió, enérgicamente a trabajar en proyectos internos de sustentabilidad. La Universidad misma, es un espacio construido en base a una idea ecológica. Su estructura y construcción, si se observa, es de espacios reciclados, espacios de vidrios. Desde los inicios se buscó trabajar con las distintas Áreas y Departamentos de la UNQ en paralelo con los estudiantes. Fue una de las metas principales. Sin embargo, dicha meta se potenció con la creciente demanda de concientización ambiental en el 2019, donde se enfatizó reconstruir y construir equipos de trabajo. Pese a que la Universidad ya lo trabajaba desde distintas áreas y estudiaba distintas formas de reciclaje y cuidados ambientales, nos unimos para potenciar el trabajo interno. ¿Por qué le interesó ser parte del proyecto UNQ Sustentable? Me pareció importante empezar a trabajar en el ambiente dentro de la universidad. Como psicóloga social venía trabajando unificando estos equipos, buscaba transmitir internamente lo importante que es generar espacios desde adentro para luego trabajar en el afuera. La idea surgió en el Rectorado de la Universidad, después, junto a mi jefe Daniel Borro le dimos forma para llevarla a la realidad. La Universidad tuvo confianza

Papeleras de reciclaje, edificio principal de la UNQ. Foto: IG: @unqsustentable.

en mí para empezar, ver que se podía hacer y cómo se podía trabajar. Para ese momento, el primer paso fue la creación de un equipo amplio. El segundo, la designia de responsables en las diferentes áreas. ¿Cree que las notas e información que publican son una ayuda para que la gente emplee mejor el cuidado del ambiente? ¿Lo ves reflejado de alguna manera? Forman parte de la educación y el aprendizaje que queremos generar. La mayoría de la información publicada en redes, páginas web, correos de información y redes sociales se usa como herramienta de difusión, una cosa va de la mano con la otra. Actualmente, en situación de pandemia, las redes son importantes para transmitir. Sin embargo, la acción es importante y al día de hoy se encuentra frenada. Nuestro punto focal es el accionar junto con educar.

relación con la comunidad ¿Qué te hace estar satisfecha con los progresos logrados hasta el momento? ¿Qué depara para el futuro? La verdad, estoy muy contenta. En un año logramos empezar a separar, en algunos espacios, los residuos de cartón y papel. También, varios Departamentos empezaron a separar los residuos orgánicos dentro del comedor de la UNQ, para la realización de compostaje. Solo en un año hicimos tanto que, se generó desde las distintas áreas, interés de aprender. La palabra ambiente o ecología son tan extensas que es imposible lograr en un año, dos o diez, todo lo que se tendría que hacer. Como digo, es un granito de arena. Debemos empezar a activar, aprender y ser parte del cambio. Tenemos que impulsar la educación y la cultura ambiental, es fundamental. En un año hemos logrado muchísimo. ¿Cómo notas que hay predisposición por parte de los estudiantes de la Universidad? La idea es que sea un proyecto de todos y de todas, por eso, se convocó a las diferentes áreas de la Universidad a participar en el voluntariado de nuestro proyecto. Creo que la predisposición fue increíble. Escuchar a los estudiantes proponer nuevos proyectos sobre ecología, siempre fue uno de nuestros principales objetivos. El estudiante tiene que ser la persona que nos ayude a organizarnos y armar el programa UNQ Sustentable. ¿Cómo funciona el programa teniendo en cuenta la situación de la pandemia actual? El foco de la Universidad, actualmente, es trabajar en pro a disminuir los impactos de la pandemia. En líneas generales, es parte de lo que se viene trabajando en el programa UNQ sustentable. Una pandemia pertenece también al área del ambiente, y en el mismo sentido de nuestro proyecto, tenemos que trabajar en la concientización y la educación. Hoy día como proyecto estamos parados. Estamos trabajando en algunas notas e investigaciones desde lo virtual y viendo cómo reorganizar el Programa dentro de la vuelta a la acción de la universidad.

Al comienzo de la cuarentena se comentaba que el aislamiento para contener el covid-19 estaba ayudando al ambiente ¿Qué opinión tienes acerca de esto? Sí, fue motivación, hubo un golpe de “moda” sobre el tema del ambiente, muchos empezaron a querer saber e investigar. Lo vi como algo que ayudó a contener e introducir al ser humano en nuevas experiencias: aprender hacer una huerta, un compostaje, algún producto con todo lo que es reciclable (papel, plástico, etc). ¡Sí! Ayudó al ambiente. ¿Hay algo que te gustaría recomendarle a alguien que recién ahora empieza a reciclar o a cuidar el ambiente? Me gustaría invitarlos uno por uno, a todas y todos, a empezar en sus casas o en lo cotidiano, ya mismo. Desde lo mínimo como no tirar el papelito en la calle. También, invitarlos a este Programa para poder lograr, entre todos y todas, una universidad más limpia, más sana, más educadora dentro de lo que es el ambiente. Esta época de pandemia nos está enseñando que algo está pasando, más allá de lo que cada uno cree que pudo haber pasado al sacar sus conclusiones. Creo que el cuidado del ambiente también está dentro de la pandemia. Queremos incitar a compartir ideas y proyectos que mejoren el medio ambiente. Nuestro objetivo es sumar, ver cómo entre todos y todas lograr exportar ese lindo espacio que tiene la universidad, a todas las casas. Cómo decir “en casa no tiro el papel en el piso, en la calle tampoco lo hago”. Y concluyó: “Les quiero agradecer por su interés, por querer saber de qué se trata la Universidad Sustentable. Recién estamos empezando, estábamos en el mejor momento para empezar a trabajar, pero sucedió lo de la pandemia y freno todo lo que íbamos a realizar. Gracias por estar”.

relación con la comunidad

María Cristina Chardón:“Es un espacio de contención y socialización” La creadora del Programa para Adultos Mayores (PUNQAM) en la Universidad Nacional de Quilmes, María Cristina Chardon, nos invita a conocer y promover entre nuestra familia y comunidad, una vejez activa. :: Por Agustín Fraccarolli y Micaela Maidana

Hace casi 20 años que se creó el Programa de Adultos Mayores de la mano de la Lic. María Cristina Chardon. Marí Cristina es Profesora Honoraria de la UNQ y dicta el curso “Cuerpos y salud mental”. En el año 2014, propuso la creación de un espacio que permitiese relacionar las distintas necesidades e intereses de los adultos mayores, con el ámbito universitario: “La ampliación de sus preguntas daban cuenta de cómo se iban adaptando a la cuestión de pensarse como sujetos activos”, explicó Chardon.

Actualmente, el Programa incorpora a todos los Departamentos de la Universidad. El objetivo fundamental es abarcar las distintas necesidades e intereses de los adultos mayores, a partir de diferentes temáticas (informática básica, taller de escritura, arte). Cristina sostiene que este espacio educativo, les otorga a los adultos mayores la posibilidad de descubrir aspectos que, por la edad u otro motivo, creían que ya no podían encontrar. “Un espacio por fuera de la familia que ofrece contención y socialización”, comentó la Directora del Programa.

Si bien en el año 1999 ya se venían dictando talleres para adultos mayores en la UNQ, fue en el año 2014 cuando la institución firmó un convenio con PAMI para institucionalizar el proyecto. En sus inicios, los cursos sólo estaban dirigidos por el Departamento de Ciencias Sociales, y a partir del convenio, se logró incrementar masivamente los talleres.

Los cursos más concurridos actualmente son los de índole tradicional, como computación y manejo de celulares. El curso busca la inserción en el mundo digital de los adultos mayores, a la vez que incentivar a adquirir conocimientos que facilitan la comunicación y la accesibilidad a la información. En contraparte a lo tradicional, también se pueden encon-

Alumnos extensionistas en la Universidad Nacional de Quilmes. Foto: María Cristina Chardon

relación con la comunidad trar nuevos cursos que profundizan temas que son socialmente caracterizados como tabúes, como ser “Sexualidad, erotismo y amor’’. Este en particular, con gran demanda, trata la sexualidad en la tercera edad, permitiéndoles a los participantes ponerse en contacto con sus deseos más íntimos. Otro como “Temporalidades y legados”, está diseñado para hablar de la muerte y su rol en la sociedad occidental a partir del psicoanálisis, la antropología y la literatura. Los adultos mayores o “alumnos extensionistas”, como los llama Cristina, tienen los mismos derechos que un alumno regular. En primer lugar, cuentan con la posibilidad de asistir a las diferentes charlas que se dan en la Universidad con un orador relevante. Por otra parte, pueden contar con seguro universitario y carnet estudiantil que les otorga un 20% de descuento en la cafetería, específicamente en el menú UNQ. Además, tienen acceso a un área de orientación psicológica, donde pueden conversar acerca de dudas e inquietudes. Las orientaciones constan de cinco

reuniones a cargo de un psicólogo con formación psicoanalítica. En el caso de necesitar terapia, podrán ser remitidos a sus correspondientes obras sociales o centro de salud más cercano. Al día de hoy, en situación de pandemia, la mayoría de las universidades del país cuentan con cursos para adultos, sin embargo, la UNQ ha logrado darle una identidad propia al proyecto, manteniendo una forma organizada y funcional de manera virtual. Si bien sigue siendo un reto para el Programa los recursos y el manejo de la tecnología, se sigue trabajando para mantener la regularidad de los talleres. Cristina compartió su sensación de satisfacción con el Programa más allá de las limitaciones, impedimentos y falta de recursos. Siendo ella jubilada de la UNQ, aun tiene la posibilidad de integrar todos sus conocimientos y experiencias en el servicio de políticas públicas como ser el Programa de Adultos Mayores. “Es la frutilla del postre” afirmó, refiriéndose a su carrera profesional.

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UNQradio te busca: Convocatoria abierta a nuevas ideas y proyectos La radio de la Universidad Nacional de Quilmes abrió una convocatoria para recibir propuestas de la comunidad universitaria y vos podés ser parte de ella. Seguí leyendo y enterate cómo. :: Por Claudia Medina y Priscila Cabrera Tras idas y venidas, la radio de la Universidad Nacional de Quilmes pudo concretar la autorización legal frente al Ente Regulador y de esta forma, la posterior instalación del sistema de transmisión FM. Debido a la pandemia de coronavirus, que impidió seguir trabajando en el estudio físico de la radio, la misma se vio obligada a adaptarse a los nuevos modos de transmisión a distancia y así, lograr mantener

en pie el proyecto y el contacto para los oyentes. En este contexto, desde UNQradio se ideó una convocatoria abierta a la comunidad universitaria para enviar contenidos y poder participar del espacio. Esta propuesta nace con el objetivo de sumar voces que aporten ideas nuevas y ser un vínculo con la universidad, al tiempo de ir acercándose al público en general.

servicios y beneficios En diálogo con Martín Iglesias, Director de UNQradio, expresó que: “La idea de la convocatoria abierta de UNQradio surge del mismo rectorado de la universidad como un modo de abrir la participación a quienes forman parte de ella y que se apropien del proyecto comunicacional de la emisora. Es intención de quienes llevamos adelante esta iniciativa poder dar respuesta a la demanda de esta comunidad en cuanto a sus necesidades de dar a conocer lo que se hace en la UNQ, en este caso, a través de la radio.” La convocatoria está abierta permanentemente y no existe una fecha límite para enviar proyectos. “Esta convocatoria de la Radio es interesante desde la perspectiva de la Comunicación pública de la emisora, ya que brinda difusión a las radios comunitarias y además está avalada por el reconocimiento legal”, enfatizó Martín durante la entrevista. Y amplió: “La convocatoria a la comunidad UNQ tiene como finalidad visibilizar las acciones que lleva adelante la universidad a través de la propuesta comunicacional de UNQradio, es decir, su grilla de programación para el año 2021. Allí pueden encontrarse tanto iniciativas docentes, de investigación y extensión universitaria, como de los y las estudiantes o trabajadores de administración y de servicios, entre otras. También, es importante difundir el rol que la misma universidad tiene en relación con la comunidad de referencia y el Estado, en épocas de pandemia por el COVID-19. El objetivo es que ese potencial que tiene la UNQ se vea «reflejado» en el «aire» de la radio.”

de programación, sino también que puedan circular en el ámbito digital como piezas de divulgación del trabajo cotidiano de la universidad”, afirmó su director. Finalmente, Iglesias manifestó que: “se pueden presentar diversos contenidos que estén directamente relacionados con la universidad. Se reciben propuestas que van desde lo periodístico a la divulgación científica, las cuales a futuro se transforman en piezas cortas, como lo son los “Podcast”, es decir, piezas de audios grabadas en formatos cortos y que pueden contener diversos temas”. Por otro lado, UNQradio juega un papel importante sumándose al proyecto “Seguimos educando”, es decir, la programación del Ministerio de Educación de la Nación que fue pensada para la continuidad educativa del Nivel Inicial, Primario y Secundario, como respuesta a las medidas preventiva ante la pandemia del coronavirus.

¿Querés ser parte? Para los interesados en aceptar este desafío y animarse a participar de UNQradio, pueden enviar sus contenidos y propuestas a: radio@unq.edu.ar ¿Querés escuchar la radio de la UNQ? Hacé click en: https://fm915.unq.edu.ar/

Iglesias explicó que en la convocatoria pueden participar todos los Departamentos, carreras, programas, de modo a integrar a docentes, estudiantes, extensionistas y demás miembros de la comunidad universitaria a sumar sus voces, y así fomentar la diversidad y el pluralismo dentro de este medio de comunicación pública, como lo es la radio de la UNQ. Se abre así, un abanico de posibles contenidos a incorporarse en breve a la emisora universitaria. ”Lo que hace UNQradio es facilitar el proceso de transformar ideas iniciales o proyectos comunicacionales en piezas radiofónicas que den respuesta a esa demanda. No sólo con la idea de que puedan transformarse en contenidos que formen parte de la grilla

Instalación de la antena de transmisión de la radio UNQ. Foto: Martín Iglesias

Zoomándose al campus La UNQ incorpora la configuración y acceso del Zoom dentro de la propia plataforma universitaria. :: Por Julián Escudero A causa de la pandemia que estamos confrontando en estos tiempos, la educación tuvo que buscar y adaptarse a los nuevos cambios. Frente a ello las videoconferencias se han transformado en un recurso habitual en el aula virtual. Este año, la Universidad Nacional de Quilmes sumó a la herramienta Zoom dentro del campus. Ramiro Blanco, Director del Programa Tecnologías de la Información para Entornos Virtuales de Aprendizaje de la UNQ, el experto nos cuenta acerca de cómo nació este proyecto “la escala de uso para las clases presenciales, podía dispararse a niveles que nosotros no podíamos manejar con la infraestructura que tenemos hoy”. Es por eso que, a finales de cuatrimestre, luego de casi un mes de trabajo de análisis para luego pasar al desarrollo, se decidió como alternativa a la aplicación externa conocida como Zoom. “La configuración se realiza desde el campus y al iniciar se abre la aplicación Zoom, los profesores disponen de una licencia general con la que pueden realizar una video llamada con una extensión de hasta 3hs continuas” relató Blanco, favoreciendo así, una clase sin cortes y una mayor seguridad al no compartir enlaces (una de las problemáticas del Zoombombing). Como desventaja nos cuenta el Director del PTIEVA “al no ser “. edu.ar” el dominio de Zoom, alguien que accede desde su celular le cobra datos”, por lo que se necesitaría acceso a Internet o Wi-Fi. Con el objetivo de avanzar y garantizar un mejor dictado de clases, como así también ayudar a cada estudiante en la cursada, es que la Universidad Nacional de Quilmes incorporó esta nueva aplicación.

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La biblioteca Laura Manzo frente a la virtualidad La continuidad no presencial de uno de los principales servicios de la Universidad Nacional de Quilmes. La biblioteca hace frente a la pandemia, ¿Cómo es la nueva “normalidad” de una biblioteca virtual? :: Por Candela Lezcano y Azul De Bernardis La Biblioteca Laura Manzo enfrenta la virtualidad manteniendo su apoyo a toda la comunidad universitaria en el proceso de enseñanza. En este periodo de pandemia, la Biblioteca tuvo que amoldarse a las nuevas tecnologías para poder seguir brindando su servicio. Brenda Just, jefa del Departamento de Servicios al Usuario de la Biblioteca Laura Manzo, nos cuenta la experiencia de la adaptación a la nueva situación no presencial. ¿Cómo fue la adaptación a una biblioteca virtual con la situación crítica de la pandemia? Principalmente, la adaptación que tuvimos que hacer fue a la modalidad de teletrabajo, porque en sí la biblioteca a un periodo anterior a la pandemia venía desarrollando algunos servicios que consideramos como de “biblioteca virtual”. Por ejemplo, uno es la solicitud de información a través de un formulario. Teníamos de alguna forma ya desarrollados algunos servicios con lo cual no fue tan difícil volcarnos al trabajo de modalidad virtual. Hubo que organizar el teletrabajo, la comunicación entre el equipo, el contacto y la organización. Otros servicios que nos llevó más tiempo adquirir fue una colección de libros digitales, eso tuvo algunas dificultades porque son costosos y requieren dinero. ¿Cómo crees que está afectando las nuevas tecnologías de información y comunicación al presente de las bibliotecas? Esto viene sucediendo hace mucho tiempo, creo que el desarrollo de las tecnologías es favorable para las bibliotecas. En cuanto a la actualización

de tecnologías lo que uno aprende a usar un año a los pocos años deja de estar vigente, con lo cual nos pone ese desafío de tener que estar actualizándonos permanentemente. Es muy amplia la cantidad de servicios que se pueden brindar que seguramente la comunidad no lo sabe, pero las tecnologías de la información son una gran oportunidad para las bibliotecas. ¿Disminuyó o creció el pedido de libros durante la modalidad virtual? La verdad es que disminuyó, entendemos que la mayoría de los docentes logró proveer a sus alumnos el material que necesitaban para las cátedras de forma digitalizada. Tenemos una comunidad de alumnos socios de la Biblioteca que tienen el hábito de usar el libro en formato papel y esto no estaba facilitado, entonces todas estas variables hicieron que el pedido disminuyera. ¿Qué tipo de material bibliográfico es el más buscado frente a esta situación? Nosotros no detectamos una variante en este aspecto, el tipo de material que nos solicitan siempre tiene que ver con respuesta a las carreras con bibliografía para las cátedras, principalmente de las carreras como Terapia Ocupacional o Enfermería. Después, hay otra comunidad que suele solicitar más asistencia en la búsqueda de información para trabajos de investigación, tesis o algún investigador que busca algún documento muy puntual. No se detectó una temática principal vinculada a la situación actual que se está viviendo.

servicios y beneficios ¿Cuáles son los pasos a seguir para pedir un libro mediante la página web? Lo que estamos utilizando son canales de contacto que son el mail institucional que es biblioteca@ unq.edu.ar, y también está el número de WhatsApp y el formulario de solicitud de información a través de los cuales se pide acceso a algún material o asistencia en la búsqueda de algún documento o el alta a la plataforma de libros digitales eLibro. ¿A qué acervo de la biblioteca se puede acceder de forma virtual? En este momento la universidad suscribió a la plataforma de libros digitales eLibro, y ahí tenemos una colección importante de libros digitales a la cual toda la comunidad de alumnos y docentes pueden acceder con una cuenta personal. Eso lo solicitan a través de los medios de contacto mencionados antes. Lo que hay que dejar en claro es que toda la colección en formato papel que tiene la biblioteca no está digitalizada y no podemos digitalizarla.

Cómo ingresar a la biblioteca virtual: Paso 1- Solicitar por mail (biblioteca@unq.edu.ar) un usuario. Paso 2- Con tu usuario y contraseña ingresar a eLibro (https://elibro.net/es/lc/campusunq). Paso 3- Disfruta de 152218 títulos disponibles. Cualquier duda comunícate por WhatsApp: +54 11 3581 1189. Biblioteca Laura Manzo. Foto: IG @biblioteca.unq (Archivo)

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Pioneros en TRANSformación Soledad González forma parte del Programa Institucional de Asuntos Estudiantiles (PAE), área que, en conjunto con la Cátedra Abierta de Género y Sexualidades, impulsó las becas “Trans-Formación”. Así, la UNQ se posicionó como la primera universidad en ofrecer un programa que garantice a la comunidad trans, el acceso a la educación. :: Por César López, Diego Mudano y Facundo Galván La sesión del Consejo Superior de noviembre de 2020 aprobó, mediante la Res. (CS) N° 292/20, el Reglamento de las BECAS TRANS-FORMACIÓN destinadas a la formación de pregrado, grado, posgrado y extensión para personas de la comunidad trans. En diálogo con Ma. Soledad González, integrante del PAE, aclaró que gracias a este programa de becas se podrá realizar un mejor acompañamiento al trayecto académico de la población trans en nuestra Universidad. ¿Cómo surgió el plan de las becas Trans-Formación? La creación de la beca surgió por las vicisitudes que atraviesa el colectivo trans: el acceso al trabajo, a la salud, a poder tener formación y un montón de otras cuestiones. Por un montón de circunstancias terminan siendo ignorades; los derechos están, pero les es muy complicado acceder, o en el momento que acceden sufren de una discriminación terrible por parte del lugar a dónde se acercan o de dónde quieren ser parte. La idea de las becas surgió de la Cátedra Abierta de Género y Sexualidades. El pensamiento de crear estas becas fue para poder reforzar el acompañamiento a la población trans de nuestra universidad y se presentó en conjunto con el Programa de Acción Institucional para la Prevención de Violencia de Género, programa que viene trabajando de forma articulada con la Cátedra de Género. La presentación en conjunto del Consejo Superior del año pasado, devino en la Res. 292, aprobada en noviembre, y de ahí, se empezó a trabajar.

¿Hay algún antecedente previo de este tipo de Beca en la Universidad? Hubo otras iniciativas que permitieron garantizar derechos a la población. En tanto la Ley de Identidad de Género, la Universidad hace bastante ya presentó un proyecto, también de la mano de la Cátedra de Género, para que las personas no binaries puedan tener dentro de los listados de la universidad (mediante la presentación de una solicitud), cómo consideran ellos que deben ser nombrados, cómo se auto perciben (tengan hecho el cambio de nombre o no en el DNI). ¿Cómo fue el proceso de aprobación de las becas? La aceptación fue inmediata. Hubo una total aceptación por parte del Consejo Superior que está integrado por no docentes, docentes de la casa, el claustro de graduados, y el claustro estudiantil. Más allá del reconocimiento identitario ¿Sabes si existió algún requerimiento excepcional de alguna persona de esta comunidad, de acompañamiento económico por parte de la Universidad? Sí, existe. Hay personas que ya tenían un beneficio de la Universidad sin que sea esta beca específica. Tenemos registrado a personas no binarias que ya tenían becas de apoyo económico, previo a las Becas Transformación, y le hacíamos el acompañamiento. ¿Existe algún tipo de censo de la población trans y no binarie dentro de la Universidad? ¿El proyecto de las Becas surge en base a la cantidad de personas de esta comunidad?

servicios y beneficios No. Surgen con la intención de garantizar derechos y acompañar a la población en el trayecto académico y que continúen sus estudios. No hubo un censo, sino que con la primera convocatoria de este año y a partir de ahí, vamos a tener un seguimiento. Y obviamente, lo que estimamos es que la beca se empiece a conocer más, que se den un montón de situaciones de difusión: ustedes que están laburando y nosotros que venimos laburando. La beca se va a dar a conocer y el año próximo, seguramente, va a haber más cantidad de personas que las que se presentaron este año. La implementación de una beca tan grande como esta implica que las y los estudiantes travestis y trans que ya formen parte de la comunidad UNQ y quienes quieran ser parte, tengan incentivos para continuar con sus carreras ¿Se anotarán a partir del año que viene o a partir de ahora? La beca es anual. Las becas de la universidad se abren de diciembre a marzo para que les estudiantes tengan bastante tiempo de inscripción: tienen todo el verano para poder inscribirse y consultar. Este año fue rápido, arrancamos a laburar en febrero, empezamos con todo el tramiterío. Entonces, los tiempos fueron cortos, no hubo una convocatoria tan larga como las otras becas, pero la idea es que la convocatoria 2022, sea de diciembre a marzo. En términos de difusión ¿Hubo algún tipo de estrategia para difundir las becas en el mes de febrero? ¿Hubo algún actor externo a la universidad que acompañó su difusión? Sí, el Municipio de Quilmes acompañó la difusión de las becas. Patricia Sepúlveda (co-directora de la Cátedra de Género y Sexualidades) realizó una nota a la intendenta Mayra Mendoza y ahí presentó las becas. Ellos fueron actores externos. Y toda la difusión que pudimos darle a través de las redes sociales institucionales, y con el apoyo también de UNQ TV. Los plazos fueron súper cortos - como ya les venía contando- porque arrancamos en febrero, pero calculamos que el próximo proceso va a ser igual al proceso del resto de las becas de la universidad, entonces va a tener un poco más de llegada a las personas.

¿Y tenés algún número aproximado de cuántas personas se anotaron para recibir el beneficio? En realidad, se anotaron cerca de 400 personas, pero a veces pasa que les estudiantes no leen. Nosotros tenemos un proceso que cuando termina la convocatoria una semana anterior al cierre por sistema (que es lo primero que el estudiante tiene que hacer), les enviamos un mail recordándoles que tal fecha se cierra el sistema; si el sistema se cierra y no se inscribieron, no pueden continuar con el proceso. Cuando llega el momento de cierre nos informan de sistemas quiénes son las personas que se inscribieron, nosotros nos volvemos a contactar y ahí les volvemos a solicitar e informarles cuál es la documentación respaldatoria que tienen que entregar para continuar con la solicitud de beca. Y en ese momento muchas personas se dan cuenta que no era la beca a la que querían acceder, porque no eran la población adecuada. Pero bueno, al día de hoy quedaron 6 personas que ya están en proceso de cobrar la beca. Son personas con las que tuve contacto, con las que fui hablando para que terminen de presentar toda la documentación respaldatoria que se necesita. ¿Y cuáles son los alcances de la beca? No sólo es para las carreras de grado, también para las de posgrado, y está abierta también para los cursos de Extensión. O sea que aquella persona de la comunidad trans que se quiere acercar a la Universidad y quiere hacer un curso de formación, que está buenísimo, y que a veces no quiere encarar una carrera universitaria porque le resulta muy pesada, porque no tiene ganas, por X motivo, también está la beca de formación de cursos de extensión, y está abierta a la comunidad. La UNQ es precursora, entre las universidades del conurbano, con una beca como esta. Sí, es la primera en lanzar una beca TRANS-Formación.

PERSPECTIVAS “Tener más tiempo con nosotrxs mismxs yambién nos lleva a pensar y reflexionar sobre otras cosas: ¿Qué cosas cambiarán después de todo esto? ¿Qué es lo que consumimos? ¿Podremos cambiar eso? ¿Es realmente bueno para nosotrxs y nuestro planeta? ¿Ya estamos dentro de lo que queremos ser parte?” Esta imagen fue creada por lxs jóvenes y docentes del Club de Periodistas de la ESET-UNQ y elaborada por Juan Bértola en el marco del PEU “desde acá”. Ezpeleta, octubre 2020.

POSTALES DE PANDEMIA DESDE ACÁ Nos encontramos en esta nueva edición de Aula 67 para convidar estas cinco imágenes fruto del trabajo colectivo entre el Club de Periodistas de la ESET-UNQ y el artista Juan Bértola. En estas postales plasmamos las miradas y los sentires de lxs jóvenes atravesando la pandemia. :: Por Integrantes del Club de Periodistas y del Proyecto de Extensión “Desde Acá” ESET-UNQ En el aislamiento más estricto, nos encontramos con otrxs en un colectivo que los viernes a las 18hs pasaba a rescatarnos. El Club de Periodistas se subía a intercambiar miedos, deseos, sensaciones y miradas sobre el virus que nos cambiaba la vida. Sin saberlo, esa pantalla repartida fue un ancla necesaria entre tanta incertidumbre. La desigualdad de conexión, de dispositivos, de organización de cada casa ponía sobre la mesa la necesidad de concretar una equidad para generar mejores condiciones. “Profe, apago la cámara porque sino escucho entrecortado”, “Hablo por el chat porque en mi casa hay mucho ruido”, “Dice Martín que hoy no tiene conexión”, “Profe, mi abuela dio positivo”. En el tercer encuentro se sube el artista platense Juan Bértola que escucha los relatos del barrio, que iban desde la necesidad de verse con lxs amigxs hasta la olla popular organizada por los pibes que eran juzgados por sus vecinxs. A pesar de lo áspero, de la angustia y el miedo viajamos construyendo escenarios de participación y sueños compartidos. Le dimos lugar a la chispa creativa que fuimos oxigenando con cada experiencia, cada idea, cada relato, cada encuentro, cada producción. En cada postal se imprime una historia y, al mismo tiempo, se generan nuevos viajes, nuevos destinos.

“Estamos muy agobiados de estar en un sólo lugar, de estar encerrados. Y un pájaro que cruza por la luna es señal de libertad”. Estas frases, respiro de los viernes, esperanza para nuestros cuerpos, nos volvían a recordar el destino. Lxs jóvenes nos enseñaban, una vez más, el valor de la vida. Son nuestra brújula cuando transitamos el camino. Desde la comunicación y el arte llegamos a crear estas cinco imágenes: nuestras postales de pandemia. “Desde acá” compartimos este acto transformador y liberador. Lxs invitamos a subirse a este bondi para interpretar y dar otros sentidos.

Somos lo que hacemos Somos docentes, estudiantes y graduadxs de la Escuela Secundaria Técnica de la Universidad Nacional de Quilmes. En el año 2017 creamos el Club de Periodistas y en el 2020 comenzamos con el Proyecto de Extensión “Desde Acá. Producciones y prácticas colectivas comunicacionales para fortalecer la identidad escolar y territorial”. Porque estamos convencidxs de alzar nuestras voces, compartir nuestras reflexiones y nuestras formas de ver, nos embarcamos en la producción de piezas comunicacionales para describir y transformar la realidad.

STAFF

Jefa de Redacción: Azul De Bernardis Asistente: Juliana Baldoni política institucional Jefa de sección: Ángeles Sánchez Redactores: Belén Álvarez, Julián Caricatto, Tomás Siciliano, Lucas Chaparro, Iris Armoa. política académica Jefa de Sección: Agostina Valente Redactores: Guillermo Caceres Barabaz, Selene Paredes, Maximiliano Espósito, Roberto Coronel, Santiago Ortiz. investigación Jefa de sección: Luciana Casco Redactores: Bianca Benedetti, Ania Bilbao Capparelli, Federico Burballa, Agustín Botta, Marina Cervin, Gonzalo Cintioli, Luciana Casco. extendiendo la UNQ Jefa de Sección: Micaela Ortega Redactores: Valentina Olivares, Mariano Olivetti, Diego Rey, Carina Fernández. UNQcachito de qultura Jefe de Sección: Julián Berenguel Redactores: Lautaro Zuleta, Stefanía Barone, Camila Miele, Daniela Navarro, Rodrigo Gagliero. dossier Jefe de Sección: Santiago Bianchi Redactores: Santiago Chanel, María Victoria Iguerabide, Micaela Mourelle, Ana Clara Silva, Ailén Zaracho.

Coordinación Pedagógica: Alejandra Pía Nicolosi y Leonardo Mora Doldán Club de Periodistas – ESET. Docente: Tatiana Zlatar

representación estudiantil Jefa de Sección: Camila Basso Redactoras: Antonella Arcuri, Aixa Avila Muños, Ignacio Aguirre, Valentina Allende, Quimey Acosta, Juliana Baldoni, Sol Almeida, Camila Basso. deportes Jefa de Sección: Malena Torres Redactor: Camila Vega, Fidel Serrano, Milagros González, Florencia Valicente, Miguelina Pujol, Jonathan Romero, Valentina Santamaría, Serena Pérez, Malena Torres. relación con la comunidad Jefa de sección: Carmen Figueras Redactores: Catalina Nardi, Daiana Antonella Galeano, Florencia Magali Molina, Karina Stefania Garcia, Karen Melina Parodi, Agustín Fraccarolli, Micaela Maidana, Carmen Figueras. servicios y beneficios Jefa de Sección: Cabrera Priscila Redactoras: Medina Claudia, Candela Lezcano, Azul De Bernardis, César López, Diego Mudano, Facundo Galván, Escudero Julián, Cabrera Priscila. Club de periodistas – Postales: Integrantes del Club de Periodistas y el Proyecto de Extensión “Desde Acá”: Docentes: Tatiana Zlatar, Ayelén Sardú, Analía Bernardes, y Micaela Ryan. Redactores: Yenny Rivadineira Limachi, Juana Olivera Mamani, Abril Mendieta, Kevin Martínez, Wendý Bobadilla, Giuliana Arriola, Martín Sanchez, Antonella Romero, Noelia, Quispe Vela, Thiago Rivero, Casandra Romero y Aylen Alipaz Velasquez. Artista invitado: Juan Bértola

contacto: diplomacs@unq.edu.ar