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1. Sobre la migración infantil, por Mtra. Laura Andrade Quintero y Mtro. Cesare Gaffurri

Sobre la migración infantil

On child migration

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Laura Andrade Quintero

Universidad Iberoamericana Ciudad de México Correo electrónico: lauracatalinaandrade@gmail.com ORCID: 0000-0002-0834-0435

Cesare Gaffurri Oldano

Universidad Iberoamericana Ciudad de México Correo electrónico: gaffurri.cesare@gmail.com ORCID: 0000-0002-3309-4459

Fecha de recepción: 30 de mayo de 2022 Fecha de aceptación: 17 de junio de 2022

Papá está en la Atlántida es un texto dramático escrito por el

autor mexicano Javier Malpica. Los protagonistas son dos hermanos, un niño de ocho y otro de once años que, tras haber quedado huérfanos de madre, su padre los envía unos días donde la abuela para que los cuide. En su estadía con la abuela descubren que su padre ha cruzado la frontera para ir a encontrar mejores oportunidades de trabajo en los Estados Unidos. Desde ese momento los hermanos fantasean con la posibilidad de volver con su padre y de estar de nuevo juntos como familia, sin embargo, pronto tendrán que dejar la casa de su abuela para instalarse en casa de su tío, lugar en el que no estarán del todo cómodos por las diferencias con su tío y su primo. Cansados de ese ir y venir, y de no encontrar un hogar, deciden emprender el viaje para reencontrarse con su padre.

Esta obra toca uno de los nodos más complejos de la migración que se da actualmente de Centro América a los Estados Unidos, y ésta tiene que ver con el

paso de miles de niños que cruzan por su cuenta la frontera. Malpica deja ver las posibles causas de estos desplazamientos desde la mirada de dos niños anónimos, y esto es relevante porque alude a que esos dos niños podrían ser cualquier otro niño que está en una situación similar, en condiciones de orfandad, o bien que se enfrenta a cuestiones de abuso o maltrato y eso lo lleva a considerar la posibilidad de cambiar de vida cruzando la frontera.

Ahora bien, en este escenario, que, resulta crudo y doloroso, es sustancial la ironía con la que el autor plantea ese otro lugar, del otro lado, como la Atlántida:

<: Mi papá está en la Atlántida. >: ¿Dónde dices? <: En la Atlántida. Y estoy seguro que no sabes qué es eso. Le pregunté a mi profesora y me dijo que era un lugar maravilloso donde la gente era feliz. >: La Atlántida es un lugar que nunca existió. Eso todos lo saben. <: Claro que existe. Inventaron que se había hundido para que no se llenara de gente. >: La Atlántida es como Nunca Jamás. Es un lugar de fantasía… (Malpica 22/23).

Si bien se ve la inocencia con la que el hermano menor descubre el paradero de su padre y confunde la ciudad de Atlanta, en Estados Unidos, con la Atlántida, de igual modo, más que una ironía también es una construcción en la que se ve ese otro lugar. Ese sueño americano suele estar acompañado de muchas ilusiones, de fantasías que se ven interrumpidas por las políticas migratorias del vecino país, o las dificultades climáticas que exige el paso ilegal de México a los Estados Unidos, o hasta la falta de dinero.

Papá está en la Atlántida es una obra necesaria para leer con lxs niñxs y adolescentes no sólo para tratar el factor migrante dentro de las sociedades latinoamericanas, principalmente, sino también para dar énfasis a las condiciones que hay en países como México y las pocas oportunidades que hacen que personas como el padre de los dos protagonistas haya dejado de ser maestro para ir a los Estados Unidos, posiblemente, a lavar baños. Además, es muy importante insistir en cómo el desarraigo termina siendo un tema trascendental para comprender la razón por la cual estos niños, al no encontrar un hogar estable, huyen a los Estados Unidos a buscar a su papá sin ni siquiera saber dónde está o cómo poder encontrarlo. Hay una unidad que ellos quieren mantener a toda costa.

También, por la forma en la que está construido el texto dramático, Papá está en la Atlántida termina siendo una obra muy sugestiva. Los títulos de cada esce-

na son muy provocativos, y nos van llevando a reflexiones profundas sobre el bullying, los sueños acerca del futuro (los niños siempre se preguntan qué van a querer ser de grandes), la pérdida (primero la muerte de la madre, luego la de la abuela y el duelo también por la lejanía del padre), y las tradiciones mexicanas y norteamericanas que parecen ser muy parecidas pero que tienen muchas diferencias. Y no sólo se hace referencia a estas reflexiones que, entre su inocencia y rebeldía, van teniendo los niños, sino que también van cambiando de lugares geográficos. Por la conversación previa se sabe que venían de la ciudad y llegaron al campo donde el hermano menor está feliz por los animales y el mayor no por el calor que hace. Al final, la historia concluye en el desierto, en medio de la noche, en la soledad de los dos niños. Así, la forma es trascendental para comprender la estructura de la obra, puesto que al final se concentran los diálogos en múltiples silencios, quién sabe si sea por el frío de la noche, por el silencio del sueño, o por la muerte que se ha llevado a estos dos niños inofensivos y solitarios. Al final está en cada lectura, en cada puesta en escena la manera cómo podamos interpretar o leer esos puntos suspensivos, esos silencios que devienen muerte o son sólo interrupciones de que habrá otro día en el que ellos puedan luchar para llegar a la Atlántida.

Obra citada

Malpica, Javier. Papá está en la Atlántida. Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León, 2006.

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