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Noticias de Israel
El último judío de Afganistán: una triste historia
Zabulon Zimantov es el único judío en Afganistán. Tiene actualmente 62 años. El mundo supo de él tras los sucesos en este país. Los historiadores creen que los judíos comenzaron a establecerse en esa región en la época del exilio babilónico. Las primeras menciones de judíos en la zona de la actual Afganistán se remontan a la conquista árabe, en el siglo VII d. C.. A principios de la Edad Media, viajeros judíos informaron que vivían allí unos 80,000 hebreos; una comunidad que fue disminuyendo en el transcurso de los siglos XVIII y XIX. Durante y después de la fundación del Estado de Israel, hubo oleadas migratorias hacia la nación judía, como en el resto de los países árabes. Luego, cuando la Unión Soviética invadió el país en 1979, hubo otra ola migratoria de judíos. En 1996, la prensa informó que tan solo quedaban diez judíos, todos ellos viviendo en Kabul. Durante el primer periodo del gobierno talibán, dos hombres judíos llamaron la atención a los medios de comunicación. Debido a la muerte de Isaac Levy, quedó tan solo Zimantov, quien declaró en entrevistas no dirigirse la palabra con Levy. En los reportajes se evidenciaba que Zimantov enar-
bolaba su bandera según soplaba el viento, siendo una persona cuestionable. Su mujer y sus hijos
emigraron a Israel hace años. A pesar de ello, se ha negado a dar el divorcio a su mujer. Varios rabinos han tratado de persuadirle para que dé su consentimiento, el cual ha prometido ocasionalmente, aunque luego se retractó. Expresó en repetidas ocasiones su voluntad de emigrar, para luego decidir que-
darse en Kabul: “…porque amo mi sinagoga y quiero honrarla y preservarla”. Con el ascenso de los talibanes, filántropos judíos, así como la alianza de rabinos de países islámicos, intentaron sacarlo del territorio afgano, pero este hombre aceptaba tan solo si se le daba una “donación” previa. El excomerciante de alfombras alegó que quería el dinero para pagar deudas; esto fue rechazado rotundamente: se trataba de rescatar a judíos en apuros, no de pagar sus deudas, decían los responsables del rescate. En este contexto, el Times of Israel descubrió que Zimantov hacía desfilar repetidamente a los periodistas. Al principio exigía doscientos dólares por entrevista, elevando a último momento su precio a 500 dólares. Aunque Zimantov sea una persona bastante cuestionable, con algunos problemas psicológicos, muchos se preocupan por el destino de este hombre, dado la toma de poder por los talibanes. En el mes de agosto se perdió su rastro, aunque suponemos que estos no serán los últimos titulares que ofrecerá el último judío en Afganistán. AN
