(formación)
María Cano
(LA nueva generaciÓn)
Macho joven de Cabra montés (Capra pyrenaica). Foto ganadora del BBC Young Wildlife Photographer of the Year 1998 - categoría de menores de 10 años.
M
uchas veces el fotógrafo de naturaleza se ve en la tesitura de tener que escoger entre dedicar su tiempo libre a la familia o a practicar su afición favorita, lo que muchas veces ocasiona tensiones familiares, problema que se acrecienta cuando hay niños de por medio. Lo ideal sería poder hacer las dos cosas a la vez, compartiendo aficiones entre toda la familia. Para ello conviene que, desde la más tierna infancia, acostumbremos a los niños a venirse con nosotros al campo, con frecuentes excursiones adaptadas a su edad. En ellas, poco a poco les iremos explicando nociones básicas sobre los animales que veamos y su comportamiento, demostrando respeto hacia ellos. Los niños, sobre todo si son pequeños, hacen lo que ven, y si 88
están acostumbrados a ver a sus progenitores respetar y amar la naturaleza, ellos harán lo mismo. El equipo fotográfico inicial estará en relación con la edad de los niños pero deberá ser lo más sencillo y liviano posible. Para empezar es suficiente una pequeña cámara compacta con un zoom mediano, preferiblemente digital, ya que los niños fotografían todo, lo que se mueve y lo que no, evitando así costes de carretes y revelados. Deberán comenzar haciendo fotos en automático, pues no es conveniente intentar empezar dándoles conocimientos de técnica fotográfica que no van a ser capaces ni de entender ni de asimilar. Más adelante, si continúan con la afición, ya tendrán tiempo de ir aprendiendo técnica con un equipo más sofisticado y de hacer fotos en
manual. Incluso ocasionalmente, cuando tengan la soltura y fuerza necesarias, les podremos ir dejando nuestro equipo. Obviamente, los animales a fotografiar serán acordes con el equipo fotográfico utilizado y la edad de los niños, por lo que es recomendable comenzar con animales de un cierto tamaño, preferiblemente mamíferos. Lo ideal es que, antes de comenzar con fauna en estado salvaje, se vayan fogueando con animales en condiciones controladas, en cualquiera de los numerosos centros de fauna existentes. Así se van acostumbrando a fotografiar sujetos que se mueven y que no huyen al aproximarnos. Otra opción interesante para adiestrarse son los rallyes fotográficos, que si bien no son específicos de